Isshin ablanda su corazón con respecto a ichigo. El decide contarle la verdad antes da la invasión Quincy. Un padre siempre busca lo mejor para su hijo, pero ¿el hizo lo correcto?

Prólogo

Ciudad de karakura

En una tarde mientras estaba en su cuarto, las ventanas mostraban como el cielo se oscurecía incluso antes de que se ocultara el sol. Ichigo pensó que era un clima deprimente, recordando por qué no le gusta la lluvia.

Luego de recuperar sus poderes, ichigo fue a la sociedad de almas y fortaleció sus vínculos con sus compañeros shinigamis. El regresó a la escuela y fue capaz de mirar a sus amigos luchando con hollow sin sentir opresión en su alma. Como antes, podría acompañarlos y a la vez protegerlos; nunca más volvería a sentirse débil. Nadie moriría mientras el este para evitarlo, después de todo su nombre significa "el que protege" y viviría protegiendo a los débiles, lo haría por su madre, que en varias ocasiones le comentó que por ese signifcado su nombre es el más hermoso. Esta vez, no fallaría.

Ichigo bajó las escaleras de su casa. Las luces no estaban encendidas, pero estaba oscuro como si fuera de noche. La sala de estar vacía y la cocina apagada. Recordó que sus hermanas se encontraban haciendo mandados en el supermercado y se preguntó si ¿se habrían quedado refugiadas por la lluvia?

Estaba sombrío y frio el ambiente. Camino por la casa y justo cuando miraba el lugar donde se encontraba un espejo, alumbro un rayo permitiéndole ver su rostro, el cual reflejaba su desánimo, pese a tener pensamientos de seguir adelante. Él le echo la culpa a la lluvia. Decidiéndose a encender las luces, ichigo camino al interruptor cerca de la entrada a la clínica, pero antes de hacerlo escucho a su padre y otra voz del consultorio. Por algún motivo, el sintió que era sospechoso ya que la clínica estaba igual de oscura. Esas voces solo eran murmullos pero a medida que él se acercaba, pasaron a ser palabras claras.

-Está cerca –comento una voz calmada- Aquel que le arrebato la vida a tu esposa. Prepararé a Uryu. No interferiré con las decisiones de tus hijos. Yo mismo soy un padre y te entiendo. Solo recuerda a masaki y el destino indigno que tenemos los Quincy.

-Lo sé – ichigo escuchó decir a su padre, él se sentía melancólico- y gracias Ryuken, por avisarme.

-Este también es mi deber –respondio Ryuquen mientras se dirigía a la puerta- ya terminé mis asuntos aquí. Me retiro.

Al momento de que Ryuken abria la puerta, ichigo se encontraba detrás. Él se detuvo por un momento analizándolo para luego ajustarse las gafas.

-Saludos ichigo –Mientras salía de la casa se despidió el padre de uryu- Con permiso.

Las miradas de ichigo y su padre se encontrarían, pero solo había sombras y un silencio que parecía eterno. Isshin no sabía si eran instintos de padre pero el sintió el ánimo de su hijo lo que le provoco un dolor en su pecho.

-Todo en este día me recuerda a mi madre. Quiero acordarme de ella y solo sentir alegría por los momentos que pase a su lado. Sin embargo hoy no pude hacerlo, ni tampoco los otros días de lluvia. Sé que te dije "dime todo cuando te sientas preparado" pero padre, yo quiero saberlo, si me estas ocultando algo importante quiero enterarme. Porque no lo entiendo ¿Qué hacía acá el padre de ishida, porque dijo esas cosas? ¡De mi madre! –ichigo ya muy alterado comenzó a gritar- ¿Qué quiso decir con aquel que la arrebato la vida a tu esposa?.

Mientras que se detenía para tomar un poco de aire, ichigo se acercó a su padre sujetándolo por la camisa que se encontraba debajo de su bata de médico.

-¿Acaso no fue el Grand Fisher que la asesino? ¡Se supone que está muerto, y con su muerte mama fue vengada!

Isshin al presenciar el arrebato de su hijo, comprendió su indignación, pero el decidió que ya era suficiente. Agarro el antebrazo de su hijo liberándolo de su agarre.

-Fue Grand Fisher –isshin de forma seria dijo- pero él no fue el único culpable. Tu madre masaki fue una mujer muy fuerte. No tenía sentido que perdiera ante un hollow de tan bajo nivel.

Con toda la atención ahora en isshin, ichigo sintió como sus emociones fueron remplazadas por sorpresa y confusión. -"Mi madre era fuerte"- el repitió en voz baja, él lo había escuchado claramente de parte de su padre, lo que le daba a entender que ella sabía pelear, y si lo hacía podía ver espíritus y usar energía espiritual.

-Escucha con atención -isshin suponiendo qué podría estar pasando por la mente de su hijo, el decidió contarle toda la verdad- No eres segador de almas, pero tampoco un humano ordinario. ichigo… Tu madre era… una Quincy.

Capítulo 1

La lluvia se había detenido, pero no antes de que el fuera a buscar a yuzu y Karin. En estos momento ichigo recién salido de la ducha estaba sentado en su cama, pensando en todo lo que le conto su padre. En Yhwach y en lo que significaba su regreso. En dónde podría estar oculto y si esa técnica Auswahlen podría afectar a sus hermanas. En que él lo buscaría y le exigiría que le explicara por qué le hizo eso a su madre. A él no le importará que fuera una especie de dios para los Quincy al momento que lo confronte.

Cuando ganju le robo sus poderes, el sentimiento que obtuvo vino en forma de un pinchazo agudo a su realidad; que la rompió completamente. El solo confiaba en la poca fuerza que le quedaba "su fullbringer" para salvar a sus seres queridos. Es lo único que tenía porque ellos fueron engaños por tsukishima dejándolos en su contra.

Solo pensar en que algo parecido le pasó a mi madre, me daría pesadillas. ¿Cuánto miedo ella debió sentir? al ver que su hijo podría ser devorado por un hollow mientras ella no podía hacer nada más que usar su cuerpo como escudo. ¿Cuánta angustia debió sentir? mientras deseaba desesperadamente que su alma satisfará a ese monstruo. Me pareció verlo. Lo recuerdo vagamente, ella sonreía mientras se desangraba solo porque yo estaba ileso. Eso creía, pero eso no es posible; no cuando yo veía a esa cosa horrenda detrás de nosotros. Ahora lo recuerdo claramente, el momento que miré a mi madre para preguntarle qué era eso horrible que se acercaba lentamente a nosotros. Sus ojos, las hermosas pupilas de mi madre se veían diferente, Nunca comprendí que significaba esa forma y eso color junto con mi distorsionado reflejo. Incluso si robaron mis poderes, todos mis amigos y mi familia estaban con vida. Eran autosuficientes y confiaba en sus capacidades de combate alguna forma. Con mamá fue diferente. Yo solo era un niño indefenso que dependía totalmente de su cuidado y entonces ella falleció sin saber que me pasaría, debió ser mucho peor para ella. En su rostro había unos ojos llenos de miedo y angustia. Mi querida madre tuvo una muerte horrible.

Me da ira ¿Por qué me ocultaron la verdad sobre la insignia de shinigami sustituto? ¿Por qué mi padre me oculto esto ahora? Sé que es por mi bien, que quieren protegerme. Pero yo no quiero eso, no quiero que me protejan. Con mamá ya fue suficiente. Nadie más debe sacrificarse por mí. Esa es mi razón de existencia. Yo soy el que protegerá a todos.

Mientras que ichigo estaba en su habitación, el resto de la familia kurosaki se encontraba en el comedor, terminando ya la cena que yuzu había preparado.

-Oye viejo – mientras masticaba de forma áspera un pedazo de carne, karin sin ninguna pisca de respeto le hablaba a su padre – ¿qué le hiciste a mi hermano? cuando nos acompañó devuelta a la casa, apenas dijo unas cuantas palabras.

-Entonces fue culpa de papá – al contrario de su hermana gemela, yuzo se tomó unos cuantos segundos para terminar de masticar delicadamente, antes de opinar sobre lo que dijo su hermana – papá es un tonto ¿cómo pudo hacerle eso a mi hermano mayor? deberías ir a buscarlo. El ni siquiera ha bajado a cenar.

Isshin escuchaba lo que le decían sus hijas y en parte les dio la razón. El esperó el momento en que pensó que su hijo estaba preparado. El atribuyó ese momento ahora, ya que ichigo era muy fuerte, pero se equivocó al igualar su fortaleza física y espiritual con su fuerza mental y emocional.

El recibió las gracias de su hijo, cuando le contó la verdad sobre su vida y la de masaki. Pero su reacción no fue la que esperaba. El esperaba que la determinación de su hijo aumentara, pero demostró algo diferente y no le gustó porqué cual sea la reacción que provoco en ichigo, fue sin ninguna duda negativa.

El solo terminó la conversación entre ellos diciendo "yuzu y karin están tardando, iré por ellas" pero en su expresión parecía verse como la de alguien que se enteró que algo iba a atacarlas y que fuera lo más rápido posible para evitar que eso pasara.

-¡Masaki! –Levantándose rápidamente de la mesa mientras corría hacia el cuadro de su esposa en la pared y se arrodillaba, isshin gritaba- ¡perdóname!

- No es para tanto viejo – karin dio un suspiro e intento consolar a su padre- mi hermano es fuerte. Tus payasadas no lo van a derribar.

- Ya, ya. – yuzo fue detrás de su papá para sobarle la cabeza- mamá seguro está feliz por todo lo que has hecho por nosotros. Ya verás que mi hermano no está enojado contigo.

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Mientras tanto dentro del mundo interior de ichigo, el ambiente se observa diferente. Los edificios estaban altos y no llovía, pero el cielo estaba repleto de nubes oscuras y rojizas; además se escuchaban terribles estallidos en ellas como si de truenos se tratasen.

-mierda- el hollow interior de ichigo o el "blanco" por cómo era conocido, miraba todo a su alrededor mientras le reclamaba a zangetsu- viejo de mierda que vas a hacer ahora. Ese estúpido rey se está tomando las cosas no de la mejor forma posible. Si le cuentas la verdad ahora se formará una mierda más grande.

-lo sé- zangetsu quien rara vez se podía apreciar con expresiones alteradas, se veía muy preocupado- pero es mi deber. Ichigo ya no quiere ser protegido, le está doliendo que lo hagan. No me perdonaría a mí mismo si oculto su poder mientras tanto lo desea. Por consiguiente es hora, incluso si tengo que despedirme. Le dejaré todas mis habilidades a ichigo. Y desbloquearé su verdadero potencial.

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-Hola Zangetsu –ichigo decidió entrar en su mundo interior y saludó a quien creía que era su zampakuto- ha pasado un tiempo. Parece que el ambiente esta diferente por acá.

-Así es, para este punto no creo que tenga que recordártelo. Este mundo es el reflejo de tu alma –El espirito de ichigo señalaba el mundo interior, confirmando con su mirada lo que estaba diciendo- cualquiera diferencia, es solo una respuesta a un cambio dentro de tu corazón. Así que ichigo, no te confundas, eso solo te llevará a la debilidad.

-lo sé viejo, ya comprendo todo –ichigo fruncía el ceño, un poco molesto por que su espíritu zampakuto retomaba estas viejas enseñanzas- por eso vine a que me ayudaras a entrenar.

-No lo decía por lo que ya conoces –tomando una pausa, el espíritu observó la mirada determinada en quien el consideraba su ser más querido. Confirmándose que tenía que hacer esto. Así que elevando su voz él dijo- ¡lo decía por lo que no conoces! Has aprendido la verdad fuera de este mundo. Pero ahora ichigo es hora de que sepas la verdadera naturaleza de tu alma, ¡mi verdad!

- ¿Qué quieres decir zangetsu? – Ichigo por instinto preguntó, antes de siquiera intentar comprender lo que le decía su espíritu zampakuto. Para él, pronunciar ese nombre era más que una simple palabra. Sentía poder, orgullo. Experimentaba fortaleza y satisfacción porque significaba la relación de confianza que él creía tener con su espíritu- ¿tu verdad? ¿Tú también me has estado ocultando algo?

¡Así es! – El espíritu solo podía observar a ichigo y sentir pena. Al parecer ichigo desarrolló sentimientos traumáticos, pensó el espíritu. Este cielo en su mayor parte significaba ira, pero detrás de toda esa frustración; había traición, decepción y un dolor emocional de desconfianza que le llevo a creer a ichigo que ya le estaba diciendo mentiras, incluso antes de que él le confirmara que lo hizo- Yo no soy Zangetsu.

Un aumento repentino del nivel del agua. Daños estructurales, colapsos e inundación que arrastraba todo a su paso. Destrucción generalizada describía en estos momentos el mundo interior de ichigo. Ninguno de los dos presentes estaba apoyado en alguna superficie, ambos completamente rodeados por el líquido.

Soy la fuente del poder Quincy que llevas dentro – Mientras una luz tenue que provenía al parecer de la superficie de este mundo rodeaba al espíritu, él decía- Soy aquel que tiene el nombre de Yhwach, y al mismo tiempo, no lo soy.

¡No lo entiendo! –Ichigo desesperado porque nunca entendía rápido sus palabras, gritaba- Yhwach es el nombre de quien le quito los poderes a mi madre. Si no eres mi zampakuto ¿todo lo que me dijiste fue una mentira? ¡Respóndeme!

No hubo mentiras en lo que te dije –El espíritu se esperaba el arrebato de ichigo, por lo que mantuvo un gesto inexpresivo mientras decía- Excepto en cómo te dije que me llamaba. Ichigo, sé que ya lo has visto. Cuando te enseñaba a usar tu Zampaktó, ese Hueco siempre me ayudaba. Cuando no podías manejar el poder de tu zampaktó. Cuando corrías verdadero peligro de morir. Quien te salvaba la vida no era yo, si no el hueco.

Yo no quería –Para sorpresa de ichigo, la voz del viejo que siempre escuchaba tranquila, Tenía un aire de fragilidad pero con tonos altos y claros, como una mezcla de orgullo y tristeza- Yo no quería que te convirtieras en un Segador de Almas. Por eso reprimía tu verdadero poder, el cual no había madura por completo, y yo me convertía en el centro de tu poder.

-¿Por qué?- ichigo preguntó y se calló al escuchar al espíritu responderle inmediatamente, como si ya esperara que el preguntara-

- Porque no quería que corrieras peligro -respondió el viejo- ni que te vieras en algún conflicto. Si te convertías en Segador de almas, ibas a ser arrastrado a la batalla incluso en contra de tu voluntad. Ibas a ser lastimado. Ibas a sufrir. Con el tiempo, iba a tener que matarte con mis propias manos.

El espíritu o "Zangetsu, como ichigo lo conocía" le explicaba lo anterior, mientras usaba su mano derecha para crear una especie de espada de Reishi, recordándole a isshida. El no pudo evitar darse cuenta que se acercaba. Esa sensación de profunda decepción y dolor que surgía cuando alguien en quien confiaba parecía traicionarlo otra vez.

"No podía permitir que te convirtieras en segador de Almas" Esas palabras las decía ese espíritu Quincy, mientras el joven apretaba sus propias manos hasta el punto de que sus dedos lastimaran sus palmas, a su vez, su instinto le decía que lo estaban atacando, y que se defendiera.

"Si lo hacías, hubiera tenido que matarte" El sentimiento de impotencia y malestar solo crecía. Su instinto seguía sonando como si fuera una alarma que le decía "ponte en guardia", y justo en ese momento él se despertó.

Ichigo sintió un peso en sus brazos, que por lo que veía, pertenecía a una pierna. Que intentaba pisarlo justo en su cara.

-Siempre alerta como un hollow, que nunca duerme y siempre es consciente de la matanza que rodea su existencia -comentaba un sujeto de apariencia arrancar, mientras retiraba su pierna y se paraba en la cama- esa es la vida trágica de seres inferiores.

-Me llamo Asguiaro Ebern –se introdujo a sí mismo el hombre mientras presumía con una sonrisa. Su ojo izquierdo cubierto por una fracción de mascara arrancar y su cuerpo cubierto por una especie de gabardina blanca de estilo militar- Un placer conocerte ichigo kurosaki.

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En otro lugar, en la tienda de Urahara. Se encontraba este y yoruichi acompañados de los amigos de ichigo. Estaban sentados en el piso, en forma de mesa redonda, al lado de ellos en una cama estaba acostado un joven llamado Ryunosuke acompañado de su compañera shinigami de nombre shino. Ella estaba esperando que él se despertara.

-¿Qué pasa joven Sado? –Urahara decía, mientras jugaba con su sombrero- igual ustedes, Orihime e ishida, no parecen de buen humor ¿Acaso están preocupados por ichigo? Eso sería muy extraño.

- No es así –Repuso Sado con una voz tranquila - Confiamos en ichigo.

- Si, es verdad –respondía Orihime haciendo pucheros, mientras se comía un helado cubierto de salsa tomate- Kurosaki kun. Él nos contaría si algo malo le pasara.

- Sin embargo algo le está ocurriendo –cruzado de brazos reflexionó ishida- han pasado tres días desde que lo vemos, y sumándole a eso; él no se presentó cuando un número grande de hollow apareció.

- Seguro que no es nada –Pareciendo querer trasmitir su despreocupación urahara expresaba- Si tanto les preocupa por qué no lo visitan.

"No sale de la casa" "no quiere pan" "su padre dice que solo necesita un tiempo a solas"- Respondieron Sado, Orihime e ishida respectivamente-.

-Yo iré allá –levantándose exclamo yoruichi- Con este ambiente ya no se puede dormir en esta casa. Ya yo sé que tiene.

Expectantes a lo que se refería yoruichi, todos fijaron su atención en ella.

¿Qué pasa? –ella recogía una bolsa mientras se dirigía a la salida- Apuesto que se dio cuenta que no siempre se va a comportar como una fresita, y solo la quiere poner. Ayer lisa me regalo este conjunto de lencería. Tengo que probármela y como maestra de ichigo es mi deber enseñarle. Chaos, nos vemos.

-¡Espera! Yoruichi san –Restringiendo la salida con su cuerpo. Orihime a una velocidad sorprendente evito que la Diosa del flash se escapara- ¿qué quiere decir con eso? Eso no está bien, eso es malo.

- No te preocupes Inoue –Mientras se quitaba el helado que ahora está en su cabeza, sado intentaba calmarla- él no es ese tipo de hombre.

- ¡No estoy preocupada! –Empezando a sentirse nerviosa. Negaba pero sin poder defenderse muy bien con palabras- Es… solo… que… a mí.

- Comprendo, inoue chan – como si fuera descifrado un gran enigma, yoruichi hablaba mientras le ofrecía la bolsa a orihime- tómalo. Te lo encargo. Diviértanse ustedes los niños.

Orihime quien ahora tenía la bolsa con lencería en sus manos, quedo sin palabras mientras que ansiosa, su rostro se enrojecía.

- Que vulgar- Ajustándose las gafas para ocultar con su mano un pequeño rubor en sus mejillas, uryu agregaba a la conversación- no deberían…

"¡Buuum!" antes de que uryu terminara de hablar fue interrumpido por una fuerte explosión de reishi. Que provenía de la ciudad. Justo en la dirección de la casa de la persona que era el tema principal de esta conversación.

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-¿Qué pasa kurosaki? –Con decepción, un poco de ira y de manera provocativa Elbern decía. Mientras le disparaba a ichigo esferas azules de reishi, que detonaban al entrar en contacto con cualquier superficie- ¡Saca tu espada! Lo entendería si no atacares al principio con tu bankai, pero ni siquiera has sacado tu espada maldito shinigami. Siento que me estas menospreciando.

Mientras que ichigo volaba y esquivaba el asedio, tenía el ceño fruncido. Su expresión facial era de disgusto, confusión y descontento. Se encontraba en su forma shinigami, la nueva apariencia de su shikai combinado con sus poderes fullbringer, pero su zampaktó no apareció. Zangetsu no estaba. No, sus poderes no se llamaban zangetsu. Por culpa de este tipo, no termine de escuchar lo que me decía ese viejo.

-¡así es! –deteniéndose y enfrentado a Elbern, Ichigo grito fuertemente; mientras su voz se encontraba distorsionada y la esclerótica de sus ojos adquirían rápidamente un color negro- ¡Te voy a dar una paliza solo con mis brazos y piernas!