Capitulo 12
La nieve cubría gran parte de las avenidas, los autos se dejaban ver con capas de blanco sobre sus techos, el frió endemoniado se sentía como nunca, los mediados de diciembre se vivían. Una rubia caminaba por los pasillos de la universidad, ahí dentro la nieve era removida, para evitar accidentes. Miro hacia enfrente, una mueca de preocupación apareció en su rostro.
-¡Dios! ¿Estas bien? - Acercándose a su chica pelimorada.
-Si, solo es otro suéter más que echan a perder- En tono molesto.
Nozomi tenía una horrible mancha en su pecho y parte de su cabello se veía pegajoso.
-Pero… - Tomando su rostro en desesperación -Ah… en serio, ya no se que mas hacer- Miro a la pelimorada -Como fue que…
-Desde el piso de arriba, ni siquiera pude ver quien era, pero no importa
-No digas eso- Colocando sus manos en sus hombros -Solo están celosas, deja que se harten, después nos dejaran en paz
-Si, como a ti solo te acosan para seducirte- Cruzándose de brazos y mirando hacia otro lado.
-Oye… sabes que no importa- Viendo a sus ojos -A mí solo me preocupas tu, me interesas tu y… te amo- Dándole una tierna sonrisa.
-Lo sé… pero- sacudió su cabeza -Ya no sé ni que pensar, siento que no podré resistir todas estas ofensas- La rubia la abrazo -Verbales, físicas… no quiero que siempre aparezcas para defenderme, quiero hacerlo yo por mi cuenta…
-¡Y lo harás! Estoy segura… - Beso ambas mejillas -Vamos, ¿quieres que te lleve a tu casa para cambiarte?
-No, debo entrar a clases
-No te preocupes, no pasara nada si faltas dos horas, eres la más inteligente- Acaricio su rostro con el dorso de su mano -Además, puedes contraer un resfriado
-Hum- No muy segura -Esta bien
La rubia sonrió, tomo a la pelimorada y caminaron hacia el estacionamiento. Nozomi pensaba en los acontecimientos vividos los últimos días, no la habían molestado tanto desde la vez que gano el concurso nacional de química. Cuando el resto de la universidad se entero que ella, Toujo Nozomi, había conseguido volverse novia de Ayase Eli, muchas y muchos la odiaron. Recibía comentarios ofensivos por parte de las admiradoras de la rubia, inclusive algunos de sus compañeros le hicieron bromas pesadas para mostrarle su disgusto, hasta hubo una que otra maestra haciendo muecas de inconformidad a su persona. Y esos comentarios que se volvían rutinarios para sus oídos: "¿Toujo? Es poca cosa, no sé que le vio" "Ha de haber perdido una apuesta" "De seguro sintió lastima por ella". Etcétera, etcétera.
-Pero… no me digas que… - Viendo directo a los azules de Ayase -¿Lo cambiaste?
-Si… sé que no te gusta viajar en el, así que lo intercambie con Demian
-¿Lo hiciste por mi? - La rubia asintió -Elicchi… lo siento yo…
-¡No! No sientas pena, lo hice por ambas… ¿no te gusta?
-Claro, es bonito- Apreciando el automóvil
-Vamos, sube- Abriendo la puerta, Nozomi entro -Esta más espacioso- Cerrando y dando vuelta para entrar por el lado del conductor.
- Elicchi … - Suspiro, su novia ya estaba dentro -Gracias- Le dio un beso en su mejilla -Se que el otro te gustaba mucho
-Naa, no tenia sentido si nunca te querías subir en el, aparte es automático, mas fácil
-Pero no te gusta manejar automático
-Ehh… pues… ahora me gusta- Sonriendo nerviosa
-Ay Eli, por eso te quiero- Riendo por la ocurrencia de su novia.
Etcétera… pues las ofensas valían la pena.
Al llegar a casa de Nozomi notaron que su madre había salido.
-Ha de ver ido de compras- Dijo Nozomi subiendo las escaleras -En un momento bajo
-Adelante- Sentándose en el sillón
-No me tardo- Dijo por ultimo la pelimorada antes de entrar a su cuarto. Desde la cocina se escucharon unos pequeños pasos, Eli adivino que seria…
-¡Nat! Hola cachorrito- Tratando de acariciarlo, pero este solo le gruño -Vamos, cuando me vas a perdonar, solo fue un golpecito- Recordando como lo dejo chocar con la puerta del auto accidentalmente -Ya… supéralo- Nat dejo salir unos ladridos, como si su respuesta fuera no -Bien… como quieras- Cruzándose de brazos. Miro como el perrito le dio la espalda y camino hasta las escaleras, se dirigía a la habitación de Nozomi. -Hum… ¿a donde vas? - Se levanto del sillón y siguió al cachorro, quien ya se encontraba en el segundo piso.
La rubia vio como el animalito fue hasta el cuarto de Toujo y rasgo la puerta con sus uñas. Desde dentro se escucho la voz de Nozomi
-¡Ya te diste cuenta que estoy en casa! - Y la puerta se abrió.
-Eh… Le… - Pero no termino su frase, una pelimorada sin blusa fue lo que observo.
-¡Ah! ¡Eli! - Grito Toujo, azotando la puerta para cerrarla lo mas rápidamente, sin siquiera darle la oportunidad al cachorro de ingresar en ella, Nat molesto empezó a ladrar.
-¡Lo siento! - Se disculpo la rubia, bastante apenada pero no arrepentida -Yo… -dejando salir unas risitas -De verdad lo siento
-¿Por que te ríes? ¿Que no se supone que estabas abajo?
-Si pero… - Nat seguía ladrando -¡Guarda silencio! - El cachorro gruño.
-¿Me estas callando?
-¡No! A ti no, al animal que no me deja escuchar- Dio unos pasos -No fue mi intención- En tono suave -Se lo mucho que te importa que nadie te vea en paños menores, por así decirlo… y pareciera que lo hago a propósito… pero no es así- El cachorro empezó a ladrar. La puerta de la habitación se abrió, miro a una pelimorada que le creía.
-Esta bien… ya, olvidemos esto- Le sonrió -Ya Nat… ve abajo- Y el cachorro obediente callo y bajo las escaleras moviendo su cola de un lado a otro.
-¿Como… como le haces? - Sorprendida
-Fácil… nunca le di un golpe con la puerta del carro
-Oue… me escuchaste…
-Si… ahora comprendo por que no le agradas- Empezando a reír.
-Ah Nozomi… - Se acerco a ella y la hizo retroceder -Sabes, me gusta este suéter- Entrando a su cuarto y cerrando la puerta -Eres tan bonita… - Atrapándola al poner sus manos en su cintura.
-Eli, sabes que no… - Callándola con un beso, guiándola hasta sentarse ambas en la cama.
Ayase la respetaba, hacia lo posible por no propasarse con ella, aunque hubo una que otra vez que deseo colar sus manos dentro de sus ropas.
-No pasara nada que tu no quieras- Dejando de besarla -Solo déjame tenerte así, para abrazarte y besarte- La vio acercarse, Toujo cerro los ojos para después volver a sentir los labios de Eli sobre los de ella, sintió también sus manos en su cintura, a veces subían un poco pero después volvían a ese lugar seguro. De pronto escucharon la puerta de abajo, Homura había regresado.
-¡Por dios! - Se asusto Nozomi -Vamos, ay que bajar ya- Levantándose y tomando la mano de Eli.
-Espera- La jalo -Tranquilízate… si te pones nerviosa te delataras
-Si, si… tienes razón- Moviendo la cabeza afirmativamente -Tranquila, tranquila- Respiro hondo -Vamos ya
Eli abrió la puerta, le dio un beso antes de salir y le transmitió un poco de seguridad. Bajaban las escaleras tomadas de la mano.
-Al menos es tu mamá y no tu…
-Papa… - Dijo Nozomi al ver a su padre en la sala
-Nozomi… Eli- Frunció el ceño -¿Que hacen aquí?
-Eh yo… yo…
-Hubo un pequeño accidente y Nozomi vino a cambiarse de ropa
-Hum ya veo- Observando a Eli duramente
-Bueno… ya nos vamos- Nerviosa la pelimorada.
-Claro… cuídense- Sin quitar esa mirada en Ayase.
Al salir de su casa ambas respiraron aliviadas.
-Crees que piense que nosotras…
-¡No! De ser así no me habría dejado salir viva de ahí…
-Cierto… - Sonrieron nerviosas
Honoka y Rin miraban a todas direcciones, esa área de la facultad no estaba tan concurrida.
-No me gusta la idea de la fiesta- Hablo de pronto Rin
-¿De que hablas? - Lo miro sorprendido Honoka.
-Maki… ahí algo que no nos dice, es tonto pero… creo que esta interesado en la idiota de Toujo
Honoka rio a carcajadas.
-Estas alucinando, el jamás se interesaría en ella- Sin dejar de reír. Rin frunció el ceño.
-Eli lo hizo- Este comentario callo a los dos chicos al instante.
-Claro que no, ella… ella esta un poco desorientada, eso es todo- Respondió Honoka un poco irritado.
-Además con la fiesta lograremos el primer paso
-No creo que vayan… esa reprimida no querrá ir
-Ira, ya veras… - Respondió Honoka con su vista al otro lado del campus, los otros lo imitaron. Vieron como Eli y Nozomi caminaban tomadas de la mano, riendo y sonriéndose una a la otra.
La rubia se acercaba a la pelimorada para susurrarle cosas en el oído, haciendo reír más a Toujo.
-Par de tórtolas… - Dijo en tono molesto Honoka.
Les siguieron con la mirada hasta que se perdieron fuera de su alcance.
Sus amigos la vieron acercarse de la mano de Ayase, ambas se veían felices.
-Hola- Dijo Nozomi al aproximarse con Nico, la rubia estaba junto a su novia sin soltarle su mano.
-Hola- Miro que se había cambiado de ropa -¿Como te sientes? - Ella había presenciado esa escena, de cómo unos idiotas dejaron caer jugo sobre Nozomi desde el segundo piso.
-Ya mejor, gracias por preguntar- Nico bajo su vista a hasta las manos unidas de Ayase y Toujo, los dedos de ambas se acariciaban.
-¿Hicieron algo importante en la clase?
-No, se la paso hablando las dos horas, ni siquiera paso lista
-Vez, valió la pena irnos- Menciono Eli dando una sonrisa. Hanayo y Tomoki se miraron, la rubia continuaba sin agradarles, pero su amiga se veía tan feliz, que por ella harían un esfuerzo.
-Si creo que si… - Respondió la pelimorada viendo de frente a Ayase, esta la tomo desprevenida y le robo un beso en los labios, sus amigos voltearon la cara mientras Toujo se sonrojaba.
-Lo siento, no pude evitarlo- Susurro en su oído -Sabes que te amo
-Amm…
De pronto alguien llamo a Eli, todos giraron su cabeza.
-¡Ayase! - Grito de nuevo Maki
-¡Ya voy! - Respondió, se volvió hacia su novia -Ahora vuelvo
-No, ya es tarde, ya te hice perder dos clases, mejor nos vemos a la siguiente hora
-¿Mmm segura? - Haciendo una mueca, sabia que Nozomi le decía eso por Maki
-Si, no hay problema
De nuevo el pelirrojo grito:
-¡Eli! -
Nozomi lo miro, regreso su vista a esos azules que le encantaban.
-Ve, nos vemos al rato
-Esta bien, te quiero- Dándose un beso de piquito -Nos vemos- Dijo para los amigos de Nozomi.
Estos se despidieron sin muchos ánimos. La pelimorada dejo salir un suspiro, desde su lugar veía como su Eli y el odioso de Maki conversaban y caminaban con dirección a la facultad de negocios
-Escuchen esto- Dijo Hanayo con un libro en su mano -"¿Que es algo y a la vez nada?"-
Tomoki y Nico pusieron un gesto pensante, Nozomi estaba en las nubes.
-¿Mmm el aire?
-No
-¿El cosmos?
-Nooo
-Mmm me doy- Dijo Nico
-El pescado, es "algo" ya la vez "nada"
-Ahh, que mal chiste- Se quejo Hanayo
-Pescado es cuando lo atrapan- Dijo Nico, provocando la risa de los otros.
-Eso si
Para Nozomi las risas eran lejanas, ella se encontraba pensando, no en nubes, pensaba en su Eli. Desde hace meses ya era lo único que habitaba en su mente, parecía que lo demás pasaba desapercibido. Como cuando vas en auto por la carretera y el paisaje pasa a gran velocidad y de pronto solo un punto en específico llama tu atención haciendo que ignores todo el recorrido. Ayase era como ese punto en el paisaje.
-¡Nozomi! ¡Despierta! - Le dijo su amiga pasando una mano frente a su rostro La pelimorada pestaño varias veces, para regresar de esos pensamientos.
-Disculpa- Con una sonrisa -¿Que decían?
Sus compañeros intercambiaron miradas, ¿de verdad no notaba lo que sucedía? Entonces escucho barullo a lo lejos, giro su vista para encontrar el origen de dicho escándalo y noto una pequeña (que se hacia grande) multitud.
-¿Que sucede allá? - Pregunto la pelimorada curiosa
-¿No lo sabes?
-Hum- Un poco apenada -No…
-Se nota que haz estado ocupada estos días
En realidad no es que estuviera ocupada, solo que la mayor parte de su tiempo trataba de no encontrarse con todos "ellos", así que técnicamente se había autoexiliado por su bien.
-Es la fiesta que ofrecerá Maki por fin de cursos y aprovechando también tocara el tema de navidad
-Oh ya veo… - Observando que la multitud incrementaba -¿Y que hacen allá? –
Señalando
-Dan las invitaciones…
-Vaya- Dijo Toujo asintiendo -Se ve que desean ir- Al ver como una chica lloraba por no recibir ese "pase" a la fiesta
-Escuche que contrato un dj muy famoso
-Si, entre Tiesto y Deep Dish
-¿Deep Dish? - Se emociono Tomoki -Diablos, quisiera ir- Con una mueca.
Sus compañeros callaron, después posaron todas sus miradas sobre Nozomi.
Esta se incomodo un poco.
-Que… pasa
-No olvídalo- Dijo Hanayo negando con su cabeza sin la esperanza que estaba en sus ojos segundos antes.
-Ni aunque viniera un DJ famoso me sometería a convivir con esos salvajes- Dijo Tomoki haciendo esa mueca de nuevo.
-Vamos animo- Intento alentarlos Nico -Debemos concentrarnos para el examen
-¡Cierto! Nosotros seremos los que obtengamos mayores puntos
-Oh si… - Menciono la pelimorada, se había olvidado por completo de ese "Examen". Era una prueba que consistía de 500 preguntas, se realizaba en equipo y eran créditos extras. No era obligatorio hacerlo pero la mayoría lo realizaba para subir su calificación final.
-¿No me digas que te habías olvidado de eso, Nozomi? - Cuestiono su amiga
-No, por supuesto que no- Evitando la verdad con una sonrisa fingida
-Am… bien, por que comenzaremos a estudiar para la próxima semana
-Claro, claro
Tomoki y Hanayo volvieron su mirada a esa multitud, ahora se veía más gente.
Ambos soltaron un suspiro, que ganas de ir, pero solo los populares y ricos asistirían.
En aquel lugar de la universidad parecía que había una manifestación, pero solo era el grupo de amigos de Maki entregando invitaciones.
-Lo siento, pero tu papá se encuentra en la cárcel y eso no es anti popular- Dijo con tono fresoso Momo mientras retiraba de la cara del chico la invitación -¡Siguiente! - Grito sonriendo, sin importarle los sentimientos del muchacho. Observabas como unos se sentían poderosos por tener en sus manos lo que los convertía en personas "importantes", mientras otros sentían un vació por no poder asistir a esa fiesta.
-¿Por que no me lo habías dicho antes? - Se quejaba Eli en otra parte de la universidad, ignorando lo que sucedía al otro lado del campus.
-Por que haz estado un poco ocupada, mejor dicho, preocupada con lo de tu padre y otras cosas (sin mencionar a Nozomi)- Dijo Maki
-Si pero… ¡somos amigos! Algo como eso suele decirse con tiempo
-Esta bien, admito que tuve un poco de culpa, pero no insinúas que te negaras ¿o si?
-Claro que si
-¡Bien! No lo hagas… pero iras, ¿cierto?
Eli bajo la intensidad de su enojo, miro al rubio a los ojos.
-No lo se… no expondría a Nozomi… además… ellos siguen en un plan bastante inmaduro- Frunciendo el ceño
-Oh no, no. Pero me han dicho que piensan disculparse, en serio. No van a permitir que una simple chica arruine nuestra amistad, vamos Eli, somos amigos desde hace mucho.
-Lo se pero…
-¿No me dirás que no piensas volver a hablarles?
-No es eso…
-Además, llevar a Nozomi a la fiesta es una forma de demostrarles a todos que lo
de ella y tu va en serio. Así te quitas a muchas y muchos de encima, ¿no crees?
-Bueno si, solo que…
-Aparte, durante mucho tiempo te haz sometido al ambiente de la pelimorada, ¿no es
hora de que ella entre un poco a tu mundo?
-Si, tienes razón- Un poco confundida, Maki había hablado demasiado rápido -Iremos…
-Excelente- Con una sonrisa.
La hora de salida había llegado por fin, Toujo esperaba a su novia cerca de la cafetería, para esa hora estaba un poco aislado, sin disturbios ni ofensas de nadie.
-Hola- Escucho la voz de Ayase tras ella, se giro.
-Hola Elicchi- La miro a los ojos, supo que tenia algo importante que decirle -¿Que sucede?
-Eh… ¿por que lo dices? - Un poco nerviosa
-Por que siempre que quieres decir algo y no te atreves te rascas la cabeza como ahora
La rubia se sorprendió con sus dedos entre su cabello, se puso un poco roja y bajo su mano lentamente.
-Bueno si… veras, sucedieron varias cosas durante la mañana
-¿Que tipo de cosas?
-Ven- La tomo de la mano-vamos a sentarnos en aquella banca
Toujo la siguió, era extraño pero el solo hecho de tomar su mano era una forma de transmitirle lo que próximo que diría, así que ya se hacia la idea.
-Dime que pasa- Mordiendo su labio inferior y tratando de no lucir un poco desesperada. Ayase la miraba a los ojos, estiro su mano para tomar un pequeño rizo y colocarlo tras su oreja.
-Me encanta cuando sujetas tu cabello en esa forma- Sonriendo y acariciando su mejilla.
-No venimos hablar sobre como me peino ¿o si?
-No… - Desviando su mirada -Recuerdas cuando Maki fue a buscarme
-Claro
-Pues… me dijo que haría una fiesta y el tema es la navidad, así que me pidió de favor que si le decía a un amigo de mi padre, quien es diseñador, que si podía mostrar su pasarela de invierno
-¿Un desfile de modas?
-Aja… algo así, pero, bueno, no me aviso con tiempo así que le dije que no podía lograr algo como eso
-Ya veo… - Miro a su novia, Nozomi sabia que no era todo lo que deseaba contarle.
-Y…
-¿Y?
-Mis amigos me pidieron disculpas, se que no aceptan que tu seas mi novia, pero yo los aprecio y algún día aprenderán o mejor dicho se harán a la idea de que te amo
-Elicchi… - Toujo mordió sus labios, quería decirle a Eli que sus amigos jamás cambiarían, que la odiarían siempre, pero no podía. Sabía lo importante que ellos eran para su rubia -Es grandioso- Fingiendo una sonrisa
-¡Lo se! - Emocionándose, Nozomi lo aprobaba -Y lo mejor será que iremos a la fiesta de Maki, así le demostraremos a todos que nos amamos- La pelimorada se confundió, asimilaba las ultimas palabras de Eli que no se dio cuenta cuando le había dado un beso mientras seguida hablando con una sonrisa en su rostro.
-Espera, espera… - La rubia borro su felicidad -¿Iremos? ¿Ambas?
-Cla… claro… ¿no deseas acompañarme?
-No, si… yo… te acompaño a donde sea pero…
-¿Pero? - "Pero es como entregarme sin luchar a la manada de lobos.", pensó Nozomi.
-Olvídalo- Sacudió su cabeza -Claro que voy contigo- Sonriendo de esa forma un poco fingida
-¡Gracias! - Besando su mano -¡Ya veras! - Besando su mejilla -Todo saldrá bien- Dándole un beso en los labios.
La pelimorada cerró los ojos, saboreando solo ese momento, correspondiendo de igual forma a su novia. Ese beso que la debilitaba y le negaba el decir lo que deseaba decir. Si lo que se vendría era malo, lo enfrentaría, si lo que venía era bueno, lo afrontaría. Pero jamás, se alejaría de esa rubia que se había llevado todo su ser.
La noche era fría, la mayoría de los personas se encontraban resguardados en sus cómodas y calidas casas, pero para aquellas dos chicas parecía no importar. El auto gris se encontraba estacionado en la acera de aquel parque solo, en el asiento trasero no se encontraba nadie, pues, los besos provenían de enfrente.
-Eli… es… espera- Se quejo una pelimorada al sentir la falta de aire.
-Um Nozomi…
A veces le era inevitable seguir sus principios, ella era una chica correcta, no dejaba que su novia la "manoseara" en público (por así decirlo), ni algún propaso parecido, pero cuando ambas se encontraban solas, las cosas cambiaban por entero. Lo correcto siempre pasaba a segundo plano, pero no tan a la orilla, aun no dejaba que aquellas manos recorrieran su cuerpo, pero unas semanas mas y eso tal vez llegue ya.
-¡Nozomi! - Se sorprendió la rubia al sentir la mano pecosa en su seno derecho
-¡Yo! - Completamente roja, no sabia como había llegado ahí -Discúlpame- Cubriendo su rostro
Para Eli ese incidente le era gracioso, pensó que seria ella la que llegara a segunda base, pero su novia pelimorada se le había adelantado.
-Me… mejor vámonos-
Comenzando a ponerse nerviosa, Ayase borro esa sonrisa, no servia de nada quedarse, Nozomi no la dejaría volver a esos agasajos. Y para platicar un lugar mas iluminado seria lo mejor.
-Esta bien… - Encendiendo el coche.
-¿Estas molesta?
-No… claro que no- Con una mueca sonrisa. Toujo se cruzo de brazos mirando directo al tablero, quería dejarse llevar, ¿pero no se había dejado llevar bastante ya? Ella tenía una larga lista de principios y dentro de ella estaba llegar virgen al matrimonio. Aunque no deseaba decírselo a Eli, temía que por algo así la dejara.
-… - Soltó un largo suspiro, amaba a Eli, su relación funcionaba mejor de lo que muchos especulaban, pero siempre existía un largo y preocupante "pero". Y ese era su desconfianza, su rubia era hermosa, era inteligente y era lo que muchos desean. ¿Y si algún día abría los ojos y se daba cuenta que se había enamorado de una fea pelimorada? No soportaría perderla después, y mas ahora que las chicas se le abalanzaban. ¿Por que será que alguien con pareja resulta más sexy?
Prohibido, claro, mientras no se pueda tener es más tentador. Y ahora que Eli no volteaba a ver a otras, para las demás resultaba un enorme reto.
-¿Quieres llegar por algo para cenar?
-No, no tengo hambre
Eli se preocupo, por lo general Nozomi decía "si" a la mayoría de sus peticiones (que no salieran fuera de lo correcto), pues si Ayase lo proponía primero era por que ella deseaba hacerlo, así que Eli en realidad era la que tenia hambre.
-Bien…
Nozomi poso sus ojos en el perfil de Eli, sobrepuso su mano en la de ella y acaricio con la yema de sus dedos.
-Pero si tienes hambre podemos llegar a algún lugar, ya se… algún lugar de comida rápida
La rubia sonrió, parecía que la molestia de Nozomi se desvanecía
-Mmm no quiero cenar algo pesado… un poco de pan dulce haría feliz a mi estomago
-Si, me gusta esa idea del pan- Sonriendo, haciendo sonreír a Eli.
Era extraño, una sonrisa de su parte le alegraba por completo, la hacia olvidar todas esas preocupaciones familiares y por rareza también le hacia pensar en el futuro. Amaba esa cara pecosa, esos ojos verdes escondidos tras esos lentes cristalinos, esa voz enigmática tan dulce, esos labios carmesí tentadores, esas piernas que había tenido oportunidad de ver "clandestinamente", aquellas manías que observaba de su parte, amaba el echo de que Nozomi fuera lo que nunca imagino encontrar en una mujer. Era su complemento, era el otro lado de la balanza, era… su todo.
-¡No! ¡Aun tienes azúcar ay! - Dijo risueña limpiando la comisura del labio de Eli
-¿Ya? - Sonriendo abiertamente mientras su pelimorada retiraba con suavidad los rastros del pan
-Si dejas de reírte lo harías mas fácil- Con tono dulce -Pareces una niña
-Es que tu me pones feliz, me haces olvidar quien soy… me conviertes en una niña traviesa
-¿Traviesa? - Arqueando la ceja
-Si… sabes que el azúcar me pone hiperactiva- Colocando ambas manos en su cintura
-Elicchi… - Un poco nerviosa, mira a ambos lados, el lugar estaba algo vació para esa hora -Si quieres ser traviesa, se lo en otra parte- Dando un golpecito a su frente
-Hum… bien- Tomo su mano -Vamos a otro lado
-Eh… - Nozomi analizo sus palabras "si quieres ser traviesa, selo en otra parte" pero que… ¿le había seguido el juego? Inconscientemente, su cabeza le había dicho que detuviera cuanto antes los planes de Eli, pero su corazón se interpuso. A donde la llevaría… -¿A donde me llevas? Digo, ¿a donde iremos?
-A un lugar donde pueda gastar toda esta energía adquirida por las donas
La pelimorada no estaba segura, sentía miedo, nunca lo había hecho, pero Eli le juraba y perjuraba que no le pasaría nada malo, solo era cuestión del movimiento del cuerpo. Después de la primera vez, la segunda y la tercera y todas las que se vinieran serian más fáciles, le había dicho su rubia.
-No te preocupes, será divertido
-Claro…
Nozomi apretó el mango del bat entre sus manos, nunca había jugado béisbol, veía a Eli alentándola tras la reja de protección, no era un juego, simplemente estaba esa maquina lanza pelotas y ella.
-Descarga toda tu ira, suelo venir aquí cuando me siento frustrada, pero claro que desde que te conocí no he vuelto
Toujo esbozo una sonrisa, giro su rostro a la rubia
-¿Por que piensas que cargo ira?
Eli iba a responderle cuando un gesto de alerta apareció en su rostro
-¡Cuidado! - Grito
Una pelota salio disparada sin avisarle, la maldita maquina se había adelantado
-¡Uy! - Dijo agachándose, la pelota choco en el cerco, a unos 5cm de donde estaba Ayase -¡Esta cosa, ya vera! - Frunciendo el ceño y concentrando su vista al aparato, apretaba el bat con mas fuerza.
Pasaron cinco segundos cuando una pelota verde salio disparada, Nozomi trato de pegarle pero fallo.
-Al menos ya le perdiste el miedo
-¡Si! - Dijo algo engranada en el juego, tomando una pose como esos jugadores de la televisión, su padre veía béisbol. Solo era cuestión de recordar los movimientos.
Una segunda pelota salio disparada, y como la anterior, también fue a dar al cerco.
-Nozomi, no intentes pegarle antes que llegue a ti, por eso fallas
-Bien… - Frunciendo de nuevo el ceño. Tal vez Eli tenia razón, esto se trata de descargar la ira. Así que Toujo se concentro en su enojo, recordando todas aquellas veces que la habían molestado, recordando la cara de cada uno de ellos que hicieron su vida imposible.
Una tercera pelota voló directo a Nozomi, pero esta vez, logro pegarle, y que golpe. Había mandado la bola lejos del campo
-Wow… eso si que fue un hit
-¡Le pegue! ¡Le pegue! - Decía realizada Nozomi saltando, a fin de cuentas, no era tan mala en deportes
-¡Nozomi, cuidado!
-Que… - PUCK…una pelota había dado justo en su cabeza, haciendo que cayera al suelo
Eli entro al campo, sin importarle que la maquina siguiera lanzando bolas.
-¿Estas bien? - Tomando a la pelimorada en sus brazos
-Ouch… si… - Se quito el casco -Lo bueno que lo traía puesto- Sonriendo
Ayase respiro aliviada, la ayudo a levantarse y a salir rápido de ahí.
-Creo que ya fue mucha adrenalina para esta noche
-¿Lograste gastar tus energías? - Pregunto un poco juguetona
-Si… pero ahora estoy cansada
-¿Quieres que maneje? - Pasando una mano por sus cabellos
-No, seria bueno que no te esfuerces, acabas de recibir un pelotazo- Tocando su mejilla
-Naa, no me duele, el casco hizo bien su trabajo
-Esta bien- Sonriendo -Gracias- Mientras le daba un pequeño beso y las llaves.
En realidad Nozomi era grandiosa, parecía que leía la mente, que con el solo echo de verle los ojos supiera todo lo que pensaba, a veces se sorprendía de la intuición de la pelimorada, de cómo hasta adivinaba sus movimientos. Estaba fascinada, Nozomi era más abierta y dulce, estaba cediendo a esos sentimientos, unos días mas y seguro le tendría apodos cariñosos, mas mimos, y sobre todo mas besos y abrazos. Estaba teniendo una relación al fin, y una muy buena.
"Elicchi que tanto piensas, estas muy callada…" Dijo Nozomi al no escuchar a su novia, quito su vista del camino para ver de reojo como su rubia dormía en el asiento, le pareció tierna y sonrió "Te ves tan linda cuando duermes…" Sintió pena, ya había llegado a casa y no deseaba despertarla. Bueno, que importaba.
Tomo esa frazada que Eli siempre lleva en el auto, se acomodo en el asiento y llevo la cabeza de su rubia a su pecho, para que pudiera estar mas cómoda, después tapo a Eli y a si misma con la frazada. Sintiendo un poco más de calor, abrazo a su rubia de la cintura. Si su padre salía de la casa y las veía así seguro se molestaría, pero Nozomi estaba tan feliz que correría el riesgo.
-Hum Nozomi… que… hora… - Dijo somnolienta la rubia, sintiendo el cuerpo de su pelimorada abrazándola.
-Shhh duerme, cuando sea el momento te despierto- Besando su rubio cabello.
Eli no dijo mas, no se levantaría por nada del mundo de los brazos de su amada.
-¿En serio aun no lo habías pensando?
-Bueno… no… en realidad no
-No te creo… tu… ¿en verdad? Creí que a eso era a lo que deseabas llegar- La chica se molesto
-Pues no… te equivocas, las cosas son muy diferentes esta vez
-Si, pero hace cuanto que no tienes… - Eli lo interrumpió
-¡Maki! ¡Por favor!
-¿Que? ¿Ahora te incomoda hablar de sexo? Antes hablábamos de nuestras citas clandestinas y hasta con detalles…
-Si… antes, por que no entienden eso, yo he cambiado
-Nos damos cuenta… pero ay algunas personas que creen que sigues siendo la misma
Eli puso un gesto de interrogación, ¿que quería decir con eso? De pronto unas chicas pasaron frente a ellos, una rubia le sonrió coquetamente a Ayase. Esta solo negó con la cabeza y Maki rió risueño.
-Ya entendí a que te refieres- Dijo la rubia con el ceño fruncido
-¿Por que te molesta? Si yo fuera tu, estaría encantado con esta situación… he escuchado por ahí que te has vuelto aun mas irresistible, hasta eh pensado salir con alguna fea para que las chicas lindas caigan ante mi-la rubia lo miro molesta.
-Nozomi no es fea
-Mmm… tal vez no, dime, ¿que le viste? Seguro tiene algo que nadie ha notado… será… ¡No! Tiene unos pechos enormes, ¿cierto? ¡Por eso usa ropa holgada! Ha de tener un buen cuerpo- Maki lo dijo en forma sarcástica, pero Eli solo miro al piso un poco enrojecida -¿Que? No, ¿en serio? - Dijo el rubio algo atónito, ya imaginaba que Nozomi tenia lo suyo, pero el silencio de Ayase lo confirmaba
-¿Como… como sabes? Ya la viste desn…
-¡NO! ¡Calla! - Volteando a los lados -No digas nada de eso, Nozomi y yo jamás, lo mío va en serio
-Hum… vaya, no lo hubiera pensando- Dejándose llevar por sus pensamientos.
-Y no imagines nada- Frunciendo de nuevo el ceño -Yo amo a Nozomi… no juego con ella
-Claro, claro, entiendo eso, pero hasta el mas enamorado tiende a ver a otras, ¿tu no? No me dirás que aquella chica- Señalando a una chica que se encontraba cerca -¿No es bonita?
Eli la observo, pues no, no estaba mal.
-Si, es bonita, pero y que
-¿Como que, como que, que? ¡Vamos! ¡Te he perdido! - Tomando a Eli de los hombros y sacudiéndola -Nozomi te hizo algo definitivamente… además, ¿que harás cuando te pida que le presentes a tus padres?
-Eh… yo…
-Pensara que no la quieres, ¿le darás tantas excusas como sea posible?
-No, no lo se…
-Sabes que tus padres se morirían si… - Maki callo, el señor Ayase seguía enfermo -Lo siento, no quería referirme a…
-Lo se, pero tienes razón, ellos jamás aceptarían lo mío con Nozomi… menos papá
Aunque el rubio tratara de reprimir esa sonrisa, los obstáculos para Eli y Nozomi, lo hacían feliz.
Ella no era esa clase de personas que escucha conversaciones ajenas, pero esta vez le fue inevitable, se excuso a si misma que aquello era importante y afectaba su vida y la de su amiga.
Nico no se arrepentía de haber estado ahí, de hecho, se sentía bien de poder saber lo que ocurría. Aunque no pudo escuchar con claridad, por desgracia, la chica mal interpreto todo.
-No puedo creer que juegue con ella, ni siquiera la presentara a sus padres
-¿Estas segura que dijo eso? - Pregunto intrigado Hanayo
-¿La estas defendiendo?
-No, pues no…
-¡Ven! Yo sabía que Ayase sigue siendo la misma ojo alegre de siempre, no le importa los sentimientos, lo único que desea es llevarse a Nozomi a la cama
-Hum… Nozomi es linda, pero vamos, Ayase puede tener a cualquiera, ¿por que se habrá interesado en ella? - Comento consternado Honoka
-Ustedes los chicos son muy despistados, seguro Ayase logro ver debajo de esas ropas, si ya decía yo
-¿A que te refieres? - Dijeron al mismo tiempo Hanayo y Tomoki
-¿Que? Oh vamos, no me dirán que nunca han visto bien a Nozomi- Los dos intercambiaron miradas -Pues, verán, podría decirse que nuestra amiga es una chica dotada privilegiadamente, y no me refiero a su inteligencia
-Me estas diciendo que… - Hanayo abrió los ojos en grande -¿En verdad? Jamás lo hubiera adivinado…
-¿Que, que cosa? - Sin entender Tomoki -¿De que hablan, que es lo que tiene Nozomi? - Hanayo y Nico negaron con la cabeza, su amigo se acerco para decirle la noticia en su oído, al terminar, Tomoki tenia la cara sorprendida -¡Que tiene unos grandes que!
-¡Sh! - Lo callo Nico
-¡Con razón! Hasta yo haría lo mismo que Eli…
-¡Oye! - Le reprendió su amiga
-Era una broma, no va en serio
-Hum… entonces, ¿me creen que Ayase solo desea burlarse de ella?
-Pues… según como lo contaste tal vez
-¿Según como lo conté? - Dolida -¡Pero si es verdad! Lo escuche de ella y ese imbécil de Maki
-Bien, bien… pero no te exaltes…
-Además, Nozomi me contó que asistirá a la fiesta
-¿No? ¡Ella ira y nosotros no! - Con gesto triste
-¡Que no entienden! ¡Es un plan! Los chicos hacen fiestas como un motivo estúpido, solo desean emborrachar a las chicas y acostarse con ellas
-Nozomi no toma- Dijo Honoka, su amigo asintió con la cabeza.
-Si, ¿pero conocen algo llamado "droga"? Hoy en día es la forma mas rápida… - Ambos chicos entendieron el punto -No se, tengo mal espina…estoy segura que le jugaran una broma…
-¿A quien le jugaran una broma? - Dijo la pelimorada tras ellos.
-¡Oh Nozomi! ¡Hola! - Sorprendida por la repentina aparición -Que tal, que tal
-Hola… - Un poco confundida por la actitud, se sentó junto a Nico -¿Y… a quien le jugaran una broma?
-Eh… ah Hanayo, sus hermanos le jugaron una broma… - Riendo nerviosa
-¿Ah sí? ¿Que te hicieron? - La pelimorada poso sus ojos en Hanayo, pero el veía otra
cosa -¿Que sucede? - Mirando hacia abajo -¿Tengo algo en el suéter?
-Hum… no, no… pero… lindo dibujo- Dijo Hanayo, dándole un codazo a Honoka para que dejara de ver al pecho de Nozomi.
-¡Ouch! - Se quejo, sobando su costado.
Los tres intercambiaron miradas, la pelimorada lo noto.
-¿Que les pasa?
Nada, nada
Hanayo y Tomoki miraron al cielo un poco enrojecidos, Nozomi seguía sin comprender la actitud de sus amigos.
En la mansión de los Ayase los hermanos de Eli hablaban acerca de su nueva actitud.
-¿Será? Eso si que no lo imaginaba
-Si te digo, esta enamorada, siempre habla con una tal Melanie o Selene, no lo recuerdo, el caso es que también Lilith y mamá lo han notado
-Hum… seria bueno saber quien es esa chica- Dijo Leandro pensativo.
-¿Estas buscando el lado provechoso de esto?
-Claro hermanito, si uno no saca ventaja de lo que tiene, no llegara a nada
-No se, esto me parece mal, Eli se esta ganando los puntos suficientes para quedarse con la herencia
-No exageres, esta bien que su conducta mejora, pero papá esta demasiado ocupado para notarlo
-Eso espero… - Demian callo unos segundos.
-¿Aun piensas en eso?
-¿De que hablas?
-De lo que nos dijo papá hace años
-Pues si… Oleg con tal de darnos una lección es capaz de todo…
-No te preocupes, si por eso volvimos, ay que ser precavidos, si lo que nos dijo va en serio, ya tenemos el plan para solucionarlo
-Si, pero Eli parece que lo estropeara
-Hum… puede que sí, pero no ay qué preocuparnos en eso ahora, mejor investiga
Quien es esa chica por la que suspira
-¿Y por qué no lo haces tú? - Frunció el ceño
-Vamos Demian, no está en tu papel dar órdenes, porque si no fuera por mi ya estarías muerto…
-¡Si no me han encontrado es porque me dieron más tiempo! - Se molesto el rubio cenizo
-¿Y crees que te dieron más tiempo porque si?
-Mmm…
-¿Diste el auto, cierto?
-Valía más de lo que creía…
-No puedo creer que Eli haya decidido intercambiar su auto por tu chatarra
-Cualquiera que haya sido su razón, no me importa
-Lo sé hermanito, nadie es importante para ti más que tú mismo- Leandro camino hacia la salida -Para la próxima que pregunte, quiero saber el nombre de la chica que sale con Eli.
Demian se quedo solo en el cuarto, pensando en lo imposible para quedarse con
toda la herencia Ayase.
Eli giro su cabeza hacia la izquierda, ahí estaba, esa pelimorada que la ponía feliz inconscientemente.
-Hola- Dejando mostrar su sonrisa. Nozomi le respondió inmediatamente, levantándose de la banca para estar cerca.
-Hola- Dijo a centímetros de su boca, con sus ojos viendo directo a los azules de Eli, entrelazando sus dedos para sentir el mínimo roce de su piel. Cualquiera que las viera, diría que parecían retrasadas mentales, bueno, cualquiera que no supiera lo que es amor.
-Tienes la nariz muy roja- Dijo Eli tomando su punta con dos dedos.
-Tu también- Respondió Nozomi dando un beso de esquimal, ambas dejaron salir unas risitas.
Los amigos de Nozomi veían la escena atentos, solo que Nico las veía disgustada y los otros dos dejaban volar su imaginación. Eli puso su mano en la cintura de la pelimorada, así evitaba que se alejara de ella, beso su mejilla y le dio otra de sus hermosas sonrisas.
-Oye Nozomi, recuerda que mañana empezaremos a estudiar para el examen- Dijo Nico
-Si, claro- Respondió automáticamente sin dejar de ver a su rubia, la tomo de la mano como señal de que empezaran a caminar -Disculpen chicos, nos vemos- Dejándose guiar por Ayase, ni siquiera puso atención al despido de sus compañeros.
La pelimorada se sentía como en un cuento de hadas, lo que le parecía tonto, ella jamás creyó en esas cosas, pues, para una persona así, que se consideraba fea, ese tipo de historias eran inalcanzables. Pero ella, precisamente ella, era la prueba de que los cuentos de hadas existen.
-Hum y yo que quería salir contigo hoy- Dijo Eli poniendo un puchero en su rostro
-No hagas esa carita que me haces sentir culpable- Pellizco su mejilla -No tengo opción
-Entonces iré a hablar con tu jefe
-Pobre Kyle, ya lo tienes bastante amenazado, y se cobra todas con Svent, no es justo
-Mmm lo que no es justo es el hecho que no salgamos hoy- Su rostro de pronto obtuvo un gesto de cuando alguien se le ocurre una idea -¡Ya se! ¡Pediré empleo ahí! ¡Así trabajaremos juntas!
La pelimorada soltó una carcajada, es solo hecho de imaginar a Eli de mesera le parecía divertido.
-No lo se
-Parece que no te agrada la idea…
-No es eso, pero habrá días en que podamos vernos y otros no, aparte… si estás ahí no podré concentrarme en el trabajo…
-¿Ah no? - Un poco picara, acercándose a su rostro, Toujo se puso un poco roja
-No… - Soltando una risa por la cara de la rubia
-Bien, bien… entonces tal vez como a eso de las nueve se me antoje un café y pase por ahí, quien sabe
La rubia beso su mejilla, acaricio los dedos de la pelimorada con los suyos mientras seguían caminando.
-Correcto, esperare ansiosa a que llegue esa hora
-¿Ansiosa? Hum… hablando de ansias… no sabes las ganas que tengo de besarte
-Elicchi… no quiero ser un espectáculo, ya de por si nos miran con el solo hecho de tomarnos las manos
-¿Y qué culpa tengo yo de eso? - Nozomi la miro seria -Bien, tal vez un poco… si quieres vamos a uno de los edificios de administración, siempre están solos
Nozomi se dio cuenta que no era necesario ir a ese edificio, pues ya estaban enfrente.
-¿Fue plan con maña, cierto? - Mirando a su novia con la ceja arqueada
-Hum- Alzando sus hombros -No sé de que hablas
Al entrar, las palabras de Eli eran afirmadas, ni un alma se encontraba por los pasillos, la rubia la dirigió a un salón. La pelimorada se recargo en un mesa banco, para que Eli se pusiera frente a ella con sus manos en su cintura, pego su frente para ver más de cerca esas pupilas azuladas, pero los anteojos eran un estorbo, alzo sus manos y retiro ese obstáculo.
-Amo tus ojos, mas aun cuando los míos se reflejan, parece que se fusionan- Dijo Eli
-Tú y yo hacemos sincronía
-¿Lo crees así? - Sonriendo emocionada, Nozomi seguía respondiendo a sus sentimientos.
-Si… y no porque seamos polos opuestos… - La pelimorada miro a otro lado, Eli noto la tristeza en su voz, levanto su mirada tomando su barbilla -Jamás imagine que algún día me pasaría algo maravilloso como tu- Sus ojos se cristalizaron, Eli se conmovió que solo atino a abrazarla.
Aquellas palabras provenientes de Nozomi le estaban moviendo por dentro, si antes la amaba, lo que sentía en ese momento no tenia nombre.
-No sabes lo feliz que me haces al decir eso, el saber que las dos creemos lo mismo… tu también eres lo más maravilloso que me ha sucedido… y no me cansare de decirte que te amo Nozomi
Toujo solo sintió los labios de Eli, para la rubia era el beso más húmedo que había tenido, pues, las lágrimas de Nozomi se revolvían con las suyas, así era, ella también lloraba, ambas, pero no de tristeza, sino de felicidad, y de la buena.
-¡Por favor! ¡Por lo que más quieras! - Decía el chico en tono suplicante -¡Dame un pase! ¡Tengo que ir a esa fiesta! - Hincándose
Sumika y Momo lo vieron sin tenerle compasión, La hermana mayor (por un minuto y medio) hizo un gesto de desaprobación.
-Mira cosita, si fuera una causa noble, te invitaría, pero no es una fiesta para recaudar fondos y ayudar a los perdedores como tu- Señalando con su dedo índice.
-Además- Hablo la hermana menor (la que nació un minuto y medio después) –
¿No sabías que las camisetas con frases ya pasaron de moda hace tiempo? ¿Quien te crees? ¿Corbin Bleu?
-¿Quien? - El chico hizo un gesto interrogatorio -¿Corbin Bluee?
-¡Ash! ¡Lo ves! Ni siquiera estas actualizado, alguien como tú no vale la pena, ya déjanos en paz.- Ambas hermanas siguieron su camino, pero el chico aun seguía tras ellas. Al frente, Nozomi y Eli venían caminando, se sonreían y estaban en su feliz mundo que no se percataron de la escena hasta estar a casi un metro.
-¡Nozomi! - Grito el chico, al ver una esperanza frente a sus ojos -¿Tú iras, cierto?
Las mellizas vieron a Ayase y a Toujo, posaron sus ojos en sus manos unidas. Luego notaron esas sonrisas bobas en sus rostros.
-¿De qué hablas? - Al salir de ese lugar en donde estaba y enfrentar la realidad
-¡De la fiesta de Maki! ¡Tengo que ir! ¡Debo ir!
-Yo… si- Intercambio miradas con Eli -Tal vez…
-¡Por favor! ¡Diles que me den un pase!
Eli miro a Momo y Sumika, luego observo al desesperado chico.
-Pero no es mi fiesta
-¡Por favor! - Hincándose de nuevo
-¡Esta bien! Pero ponte de pie- El chico obedeció
-Ni lo intentes, no eres nadie para pedirnos eso- Le advirtió Momo
-¿Ella no es nadie? - Le reprocho Eli -Es mi novia, y es la chica más inteligente de la universidad
-¿Ash y eso qué? - Haciendo una mueca Sumika
-Y si el no va, yo tampoco- Dijo segura Nozomi
-¿Qué? - Dijeron al mismo tiempo Eli, Momo y Sumika. La rubia miro con reproche a sus dos amigas, su sorpresa era entendible, ¿pero la de ellas?
-Am… digo… pues allá tú, que importa que no vayas- Tratando de guardar las
apariencias, la hermana mayor le dio un leve codazo a la menor.
-En… lo que mi "sis" quiere decir es… que nos da lo mismo
-Nozomi… ¿es en serio? - Dijo Eli algo preocupada, ella deseaba llegar con su novia.
-Eh yo… - Miro a su amigo, el tenia los ojos de esperanza –Claro
-¡Momo! - Dijo molesta Eli -Dale una invitación…
-Pase- Le corrigió
-Pase a el
-Pero…
-¡Que se lo des!
Las mellizas dieron un saltito del susto, Ayase gritaba, hace tiempo que no lo hacía.
-¡Esta bien! - Sacándolo de su bolsa-aquí tienes-entregándoselo al chico, pero haciéndolo a una distancia alejada, como si fuera una persona contagiosa.
-¡Wow! ¡Muchas gracias! ¡Muchas gracias Nozomi! - El chico hizo el movimiento de abrazar a la pelimorada, pero Eli se interpuso, así que solo se inclino para atrás y fingió no haber intentado abrazarla -¡Eh bueno! Me voy- Asustado de que cambiaran de opinión.
Lo vieron alejarse, las mellizas miraron a Eli.
-Uy… creí que la persona gritona se había esfumado con la pócima que Toujo te dio- Dijo Momo
-¿Cual pócima? - Frunció el ceño Ayase.
-Ni una… - Sumika miro a Nozomi -No vayas a pensar, que por ser novia de Eli tienes privilegios ante nosotras, ¿captas?
-Claro- Asintió.
-Nos vemos Elicchi- Dijeron ambas yéndose.
La rubia dejo salir una risa, que se convirtió en carcajada, cosa que también contagio a Nozomi.
-¿Por qué reímos?
-Pues… - Parando de reír -¿No lo ves?
-¿Que cosa?
-Las has intimidado- Continuando su risa
La pelimorada dejo de reír, ¿en serio lo había logrado?
-Yo…
-Vaya, esto es increíble, nunca había visto que se intimidaran, eres maravillosa- Besando su mejilla.
Toujo se sonrojo, hasta ahora no se había percatado de sus cambios, y uno de ellos era una seguridad adquirida gracias a Ayase.
-Me alegra ser tu novia
-¿Irás?
-Si… ¿como es que todo mundo sabe de esa fiesta? - Pregunto algo perpleja
-Bueno… se sabe que la crema y nata de Uminari ira, aparte que Maki es un personaje algo polémico, es favorito de los medios
-¿En verdad?
-¿No lees las revistas? ¿No ves los programas amarillistas de la televisión? - Pregunto incrédulo
-Ya, no exageres- Respondió Svent empujándolo con el codo -Bueno Nozomi… que suerte tienes- Ignorando a Kyle, quien se quejaba del golpe -Desde hace meses que te ves muy feliz, esa Ayase es afortunada-este comentario la hizo sonrojar, por lo general ella era la afortunada por estar con Eli.
-Gracias…
-Oye Nozomi… y no crees que… em… que tu podrías… ¿…ayudarnos a entrar?
-¿A la fiesta?
-¡Si!
-Pues… - Miro a Kyle… -No lo se
-¡Oh vamos! Si supe que hiciste que le dieran un pase a un chico de tu facultad… cual es su nombre… - Pensando -¡Hank! Si, ayudaste a ese tal Hank, ¿por que no ayudar a tu lindo jefe? - Poniendo cara de cachorrito
-Eh… pues… - Si ese rumor había corrido, era posible que varios la buscaran para conseguir un pase -No lo sé, ya lo veré
-¡Uh genial! ¡Gracias!
-Pero no te prometo nada
-Claro- Kyle se emociono, Svent solo negó con la cabeza
-Eh bueno, iré atender la mesa de allá- Alejándose de ahí.
Miro el reloj que colgada en el mostrador, tal vez a Eli no se le antojo un café a fin de cuentas, pues ya pasaban 30 minutos de las 9 pm. Dejo salir un suspiro, necesitaba ver a su rubia a todas horas, ya ni siquiera sabía la fórmula para poder sobrevivir sin ella. La pelimorada pensaba que Eli y ella habían hecho una reacción química (pensamiento que considero cursi) pues ambas al mezclarse cambiaron su naturaleza.
-Discúlpeme por sacarla de esos pensamientos- Dijo la voz de una joven -Pero me fue inevitable no hablarle, ¿le han dicho que tiene usted los ojos más hermosos del mundo? - Nozomi se sonrojo
-Si, mi adorable novia suele decirme eso todo el tiempo
-Ah entonces su novia debe ser una persona muy inteligente
-Lo es…
Ambas se sonrieron, la rubia le dio un beso en la mejilla.
-Siento llegar un poco tarde- Dijo colocando una mano en la cintura de la pelimorada
-¿Sucedió algo malo? - Al notar el tono de voz de Eli.
-Si, pero no te preocupes
-¿Segura?
-Ya sabes, lo de siempre
-Tus hermanos
Eli miro hacia el suelo, Nozomi la conocía tan bien que era muy difícil ocultarle algo.
-Si… pero luego hablamos de eso
-Está bien- La pelimorada rodeo sus brazos en el cuello de Ayase, era la primera vez que lo hacía con gente alrededor, así que tomo a Eli por sorpresa, Nozomi sonrió, el efecto que esperaba era que Eli olvidara el mal momento -¿Te parece que te traiga un frapuchino?
-Claro…
-Correcto- Le dio un beso de piquito -Ahora vuelvo
Pero la rubia no la dejo ir, la tomo de la cintura y le dio un beso más largo. Las mejillas de Nozomi se pusieron rojas, pero no se separo hasta que fue necesario.
-Te amo… - Dijo Eli al alejar su boca y mirar la cara enrojecida de su novia.
-Yo también- Respondió esta.
El corazón de Ayase latió a más de mil, la sonrisa de felicidad fue inevitable y el intercambio de miradas románticas se hizo notar. Nozomi camino hacia el mostrador, tenía la mano de Eli sujetada la cual no la soltó hasta que estuvo a una distancia bastante alejada, le dio una mirada tierna antes de voltearse. Nozomi estaba detrás del mostrador preparando el café de Eli, cuando Svent llega algo malhumorado.
-Por que habrá gente tan prepotente- Decía mientras tiraba su cuadernillo de pedidos.
-¿Paso algo malo?
Svent la miro algo incrédulo.
-¿No me digas que no escuchaste? ¡Pero si estabas a un lado!
-¿A un lado de que?
-Del sujeto ese
-¿De que hablas? - Frunciendo el ceño.
-Ah claro, estabas con Eli, seguro el mundo desaparece cuando estas con ella- De forma sarcástica, pero Nozomi no respondió. -Lo siento, aun sigo molesto
-Está bien, ¿ahora puedes decirme que paso?
-Pues nada, que entra un sujeto muy bien vestido y pensé "este dejara buena propina" así que fui a atenderle, tal vez no lo viste por que en ese momento estabas con Eli, en fin, que me acerco de buena manera y este solo se comporta como si fuera la reina de Inglaterra, que sujeto tan mas pendejo
-Ya me imagino
-Por cierto- Arqueo las cejas -No dejaba de verte a ti y a Eli
-¿Como? - Frunciendo el ceño
-Si, estaba atento a lo que decían, parecía que las espiaba, luego de que te alejaras de Eli, se levanto de la mesa y se fue
-¿En serio? ¿Y como era? - Por un momento pensó que era Maki, pero de haber sido así Svent ya lo habría reconocido.
-Pues se notaba que tenía dinero, yo digo que tiene como unos 25 años
Nozomi se quedo pensativa, no conocía a alguien con esas características.
-No pues, no tengo idea
-No te preocupes, seguro era algún periodista
-¿Que?
-Si, Kyle me dijo que también Eli sale en revistas, aunque hace meses que dejo de salir… supongo que encontró algo mejor que hacer- Guiñando un ojo.
Nozomi se puso un poco roja, termino el frapuchino y fue con Eli. La rubia la esperaba en la mesa 4, parecía ser su favorita.
-Hola, siento la tardanza- Dejando la bebida
-No importa, pude contemplarte a lo lejos- Sonriendo -Pero siéntate, que Kyle no te dirá nada
-¿Por que lo dices?
-Pues… digamos que hicimos un trato
-¿De que hablas Ayase? - Algo risueña, tomando asiento frente a ella
-Le di un pase para la fiesta de Maki y el prometió que me dejaría visitarte cuando quisiera a la hora que quisiera y que podría hacer contigo lo que quisiera… claro, mientras trabajes
-¿Hiciste eso? - Riendo por la ocurrencia de su novia
-Aja… y no me arrepiento- Se movió junto con la silla hasta pegarse a un lado de Nozomi -Así que eres mía por los próximos- Viendo su reloj -20 minutos.
-Pues… aprovecharlos, ¿no? - Arqueando su ceja
La rubia sonrió de forma coqueta mientras daba un sorbo por el popote a su frapuchino.
-Que buena estas- Mirando a Nozomi
-¿Como? - Algo alarmada, Eli nunca le había hablado así
-Que buena esta- Sacudiendo el vaso de café -Preparas los mejores… ¿que pensaste que dije?
-Nada, nada…
Nozomi miro a Eli, no había duda, ambas eran dos sustancias que al mezclarse produjeron una reacción química. Ahora ya no eran las mismas y las dos lo sabían.
Durante todo el día Eli estuvo demasiado pensativa, no sabía por que no podía sacar de sus pensamientos aquellas charlas. Escuchaba las palabras de sus hermanos una y otra vez en su cabeza. Desde su llegada hace meses. "¡Maldita sea" Dijo molesta pateando la llanta del auto, se recargo en el cofre, se tomo la cabeza y volvió a revivir ese momento. ¿Hace cuanto de eso? ¿Meses? Ellos vinieron a buscarla, solo para recordarle el convenio de hace años. "¿Solo fingirás?" "Papa lo dijo en serio, si ninguno llenaba sus expectativas, ninguno de nosotros seremos acreedores a la herencia Ayase, ¿estas dispuesta a perder lo que te pertenece por nacimiento?" "¿Que te molesta, si tu siempre fuiste la favorita del abuelo, crees que es justo que te quedes con todo?"
Eli cerró los ojos, ¿como pudo haber aceptado eso? Claro, cuando hicieron ese convenio ella era una joven de 16 años, irresponsable que solo derrochaba el dinero a diestra y siniestra, por supuesto que le preocupaba perder la herencia. Que mas podía pasarle, el trato era sencillo, si ninguno era apto para Oleg, lo mejor era unirse y así repartirse todo entre los tres. Pero Leandro y Demian no contaban con que Eli al crecer, mejoraría su conducta.
-¿Eli? - Dijo esa voz, aquella que era la responsable de su cambio positivo.
-Nozomi, que bueno que llegas…
-¿Que fue lo que paso? - Algo preocupada
-Este auto es una basura- Molesta -Demian me las pagara, sabía que ya no funcionaba y aun así no me lo dijo, y yo que le di mi coche- Pateo la defensa -Ah… lo siento- Calmándose al ver a Nozomi -Gracias por venir
-De nada… ¿llamaste a la grúa?
-No, para que, esta cosa no tiene remedio, que se lo roben yo que sé, no me importa
-¿Lo dejaras ahí entonces?
-Si, que tiene, está a nombre de mi hermano, a él lo llamaran
-Bueno, te ayudo a sacar tus cosas al menos
-Si, eso si
Sacaron las pertenencias y las metieron al carro de Nozomi. La pelimorada no hablaba, su novia seguía molesta y parecía que quería seguir así.
-¿Listo, nos vamos?
-Claro
Ya dentro del coche, Eli solo miraba por la ventana, Toujo sentía que el espacio de en medio era enorme, solo trataba de comprenderla. La rubia se volvió para mirar el perfil de su novia, sintió angustia, se recorrió cruzando ese espacio para acercarse hasta Nozomi.
-Perdón, no quería desquitar mi enojo contigo así que preferí no hablar, pero solo me vi mas indiferente- Dicho esto recargo su cabeza en el hombro de la pelimorada -Ni siquiera te salude- Le dio un beso en la mejilla, luego otro en los labios, Nozomi trato de no distraer su vista del camino- Eres tan linda, gracias
-No hay por que- Sonriendo -Ahora me puedes decir… ¿cual de todas es tu casa?
Eli comenzó a reír, tan enojaba estaba que ni siquiera le dio la dirección.
-Lo siento, es… aquella
La pelimorada abrió grande sus ojos, esa casa… esa casa le resultaba familiar.
¡Claro! Fue aquella vez.
-Pero… dijiste que vivías en…
-Si, lo sé… pero te habías mofado que era una enorme mansión que… me dio pena-
Miro a su novia, ¿que no los pobres se avergüenzan de ser pobres? Pues esta vez, era lo contrario.
-Es linda- Viendo por fuera.
-Algo…
Después de unos minutos, se encontraban en las puertas de la casa. Jamás imagino que esa noche conocería el hogar de su rubia. Eli tomo su mano, le sonrió y Nozomi se sintió feliz.
-¿Me llevaras a tu alcoba?
-¿Quieres ir? - Arqueando una ceja.
-Hum… no lo sé- Con tono travieso.
En eso, una anciana salió de lo que parecía la cocina.
-¡Niña Eli! - Un poco emotiva -Que bueno que… - Miro a Nozomi -¡Pero que sorpresa! Eres la jovencita que me ayudo en el mercado
-¿Se conocen? - Dijo la rubia sorprendida
-Si… un gusto volver a verla
Cuando Nozomi vio la casa supuso que aquella anciana se encontraba aquí.
-El gusto es mío
-Eh… pues… nana, te presento a Nozomi, mi novia
-¡Nozomi! ¡Al fin! Hasta que te conozco- Dándole un abrazo -Bienvenida a la familia
-Yo… - Nozomi se enrojeció.
-Vamos, vengan a la cocina, que tienen que platicarme todo- Dijo entusiasmada Lilith -Aun quedan de las galletas que hizo, niña
-Em… nana
-¿Haces galletas? - Dijo sorprendida la pelimorada
-¡Uy si! Las más ricas, ¿no sabía que Elicchi hace unos postres deliciosos?
-¿En serio? - Algo risueña
-Si… aprendí de la mejor- Dijo Eli un poco apenada
-Y me supero- Sonriendo Lilith
-Pues me encantaría probar de tus galletas, Elicchi
-Ya lo imagino
Nozomi se adelanto un poco, Lilith tomo a Eli del brazo y le susurro.
-Es una buena chica, tienes mi aprobación
La rubia sonrió, ojala todos en su familia lo aprobaran.
-¿Dime nana, a que horas dijeron mis padres que regresaban?
-No dijeron, pero por lo que creo muy tarde
-¿Y mis hermanos?
-Salieron, como siempre
-Bien…
La rubia se adelanto, alcanzo a Nozomi.
-No quisiera que te perdieras… a menos que fuera conmigo- Beso su mejilla.
-Tu casa es muy linda
-Gracias… mi nana piensa que eres adorable
-Tu nana es una gran mujer, te educo muy bien
-Si, solo que me deseduque al paso de los años
-Me doy cuenta- Ambas sonrieron
La anciana ya estaba tras ellas, se sentía orgullosa de que su niña por fin allá encontrado a la persona correcta.
-Bueno, díganme, ¿como se conocieron?
Las dos intercambiaron miradas, después una sonrisa.
-Es una larga historia nana, y sé que estas emocionada… pero… si no te molesta tomaremos las galletas e iremos a comer a mi habitación
-Oh- Algo decepcionada -Claro… ya habrá más tiempo de conocernos
-Con permiso- Dijo Nozomi
-Pasa, pasa, esta es tu casa- Dijo Lilith.
Eli tomo la bandeja junto con una jarra de leche y dos vasos. Salieron de la cocina y subieron escaleras. Varias escaleras, hasta que la rubia se dirigió a una puerta, la que era su habitación.
-Abre por favor- Indico. La pelimorada tomo la perilla y abrió.
-Wow, es enorme- Entrando y asombrándose.
-Si… - Dejo las cosas en una mesa -Es cómoda- Se acerco a Nozomi y la abrazo por detrás.
-Elicchi… gracias
-¿Por que? - Asombrada
-Por dejarme entrar en tu mundo
Eli sonrió, giro a Nozomi para tenerla de frente y mirar sus ojos.
-Te amo- Dándole un beso, uno duradero.
-También yo- Dijo Nozomi en una oportunidad. Volvieron a besarse.
La pelimorada sentía que el mundo de Eli la recibía mejor de lo que esperaba, y pronto vendría otro obstáculo por superar: La dichosa fiesta.
[The palest green I've ever seen the colour of your eyes]
Prácticamente sentía que aquello que conocía había dado un giro completo, era como si de repente hubiera tenido sentido todo, aunque si al principio ese todo se mezclo, ahora empezaba a tener orden. Siempre trato de no despegar sus pies de la tierra, y era una especialista en no dejarse llevar por sueños y fantasías bobas de princesas rosas. Y sin embargo, se dejo conquistar por todo aquello que alguna vez detesto, ahora debía adentrarse a ese loco mundo del cual quiso estar alejada, pero por amor, ingresaría. No podría decir que aquello le alegraba completamente, no había necesidad de ocultar su desgano, tampoco intentaría huir. La cuestión era, ¿que usar?
-Hey… hey Nozomi, ¿me escuchas?
-Si, disculpa- Pasando el lápiz entre sus dedos-me he trabado con este ejercicio
-Desde hace rato que no te concentras, si quieres puedes ir a distraerte- Dijo Nico
-No, estoy bien, en verdad esta complicado
-A ver… - Dijo Tomoki observando el problema -Ah es por que omitiste los electrones
-¿En serio? - Mirando su cuaderno confusa.
-Creí que la etapa de distracción había terminado- Dijo riendo Hanayo
-Si, pero es un ciclo, cuando parece que termina vuelve a iniciar- Le siguió Nico
-Tenemos que tener cuidado… pequeñeces así nos pueden arruinar durante el examen- Le advirtió Tomoki
-Lo siento, estaré más concentrada- Se disculpo la pelimorada
-Bien, aunque creo que es suficiente estudio por el momento, yo opino que vayamos a descansar- Nico miro su reloj -¿Nos vemos aquí en una hora y media? - Sus amigos asintieron. –Bien
-Si, a parte a mí ya me dio hambre- Se quejo Hanayo sobando su estomago.
-Bueno, me retiro- Dijo Toujo al ponerse de pie -Nos vemos luego- Recogiendo sus cosas
-¿A dónde vas con urgencia?
-Voy con Eli, quedamos de vernos en la cafetería en… - Tomo la muñeca de su amiga para ver su reloj -…30 minutos
-Pero aun falta tiempo- Se desconcertó Nico
-Lo sé, pero para que esperar si la puedo ver ya- Sonriendo -Además, estoy segura que la encontrare en el camino
-Bien… si tú lo dices, hasta luego
-Hasta luego- Despidiéndose
Le dolía la cabeza, ya llevaban estudiando varias horas, estaban seguros que esos puntos extras serian de ellos, no era cuestión de fe, si no de seguridad. La pelimorada caminaba por la universidad, se quito los lentes para limpiarlos, llevaba tantas cosas cargando que no soporto el peso y dieron al suelo.
-¡Diantres! - Se quejo para después hincarse a levantar sus pertenencias, un chico se acerco a ayudarle. La pelimorada recogió sus cosas rápido.
-Aquí tienes- Entregando varias hojas cuando ya estaban de pie
-Gracias- Nozomi hizo una mueca, el cristal de su lente izquierdo se había raspado.
-Tu eres la novia de Eli, ¿cierto? - Dijo el chico sacándola de su pensamiento
-Si- Respondió secamente, seguía molesta por lo sucedido.
-Entonces… ¿es verdad que puedes conseguir pases para la fiesta?
-No… ¿quien dice eso? - La pelimorada miro al chico, pero este frunció el ceño
-¿Puedes o no? - Algo insistente
-¡No! Déjame en paz- Este se molesto pues no había obtenido lo que esperaba.
-Nos vemos- yéndose de ahí, al alejarse choco a propósito su hombro con el de Nozomi e hizo que las cosas dieran nuevamente al suelo.
-¡Cuidado torpe! - Le grito Nozomi agachándose de nuevo, tomo todo del suelo -Oh no- Al ver como sus lentes se dañaron mas –Diantres
Eli tallaba sus ojos frenéticamente, estaba aburrida, y su clase de francés parecía eterna. Si no fuera por que es obligatorio saber al menos 3 idiomas mas para terminar su carrera, el ruso seria su única lengua. Lo bueno de todo ese martirio "franco" era su Nozomi, en cuanto se acabara la vería.
-¿Profesora Delphine? - Dijo Maki con la mano levantada
-¿Si?
-¿No tenía un compromiso hoy?
-¡Claro! Gracias por recordarme- La maestra se levanto de su lugar y guardo sus cosas -Siento irme más temprano pero por favor estudien la lección de hoy, nos vemos-saliendo del salón inclusive antes que los alumnos.
Ayase no había escuchado nada, hacia 2 minutos que se había quedado dormida sobre su mano.
-Hey Eli- Dijo Umi en su oído –Eli… - Casi susurrando
-¿Hum? - Respondió sin conciencia
-Ya podemos salir- Estas palabras la despertaron.
-¡Genial! - Con los ojos abiertos, no tenía ni un rastro de pereza, tomo sus cosas y salió corriendo del aula.
-Vaya su prisa… - La chica solo frunció el ceño -Vamos Umi, no me digas que tienes ilusiones con Eli
-Maki… pinta un bosque y piérdete- Colocando su mano frente a la cara del chico, el rubio sonrió y observo como se alejo molesta.
Ayase caminaba por instinto, sabía que aun faltaba para ver a su pelimorada, pero una corazonada le decía lo contrario. Después de unos cuantos pasos y varias búsquedas entre la gente, esa intuición fue afirmada. La encontró cerca de una mesa, la pelimorada se encontraba de espaldas. Eli sonrió, se acerco despacio para darle una sorpresa. Nozomi estaba acomodando sus cosas, se encontraba parada después de haber recogido su calculadora por segunda vez del suelo, ya no quería más accidentes, mientras acomodaba sus ejercicios en el fólder sintió como alguien la abrazaba por detrás para así después darle un beso en el cuello.
Una corriente paso por su cuerpo, su piel se puso chinita, la rubia había encontrado el primero de sus puntos débiles.
-Eli… - Dijo aun con esa sensación
-Lo siento, ¿te asuste? - Viendo a la cara de su novia, pero esta regreso su vista a sus cosas.
-No, solo me sorprendiste- Haciendo una mueca sonrisa, Ayase noto el tono de su voz. Se soltó del abrazo para poder verla de frente.
-Mi maestra de francés tenía algo que hacer, por eso salí temprano- Le dijo mientras ayudaba a su novia a acomodar sus cosas.
-Gracias- Respondió cuando Eli le pasó unas hojas -Que bien, así podremos comer juntas
-Si… ¿por que esa carita? - Acercándose y tomando su mentón
-Mis lentes- Haciendo un puchero y soltando su fólder en la mesa
-¿Que paso?
-Se rasparon- La rubia la tomo de la cintura.
-¿Y que hago para que te sientas mejor?
-No se… ¿un abrazo? - Su cara hizo un puchero que Eli no pudo resistir
-Lo que pidas- Respondió la rubia para después rodear sus brazos en la espalda de Nozomi, está cerro el abrazo al cruzar sus manos en la cintura de Eli. Como le gustaba estar así, la pelimorada había encontrado el lugar perfecto, respiro hondo, el aroma de su rubia la embriagaba, siempre la dejaba en las nubes. -Vamos cariño, iremos a repararlos
-¿Mis lentes? Pero si no tienen arreglo- Un poco decepcionada, se alejo un poco de los brazos de su novia para verla a los ojos.
-¿No? Entonces es tiempo de otros
-Pero…
-Aunque… sin ellos te ves más linda- Acariciando su mejilla
-No empieces- Riendo -Los necesito para leer, los necesito para estudiar
-Cierto… entonces haremos esto- Tomando sus manos -Primero iremos a comer, porque mi estomago ya lo pide- Nozomi sonrió -Después vamos con el oftalmólogo, ¿si?
-Bien… - Asintiendo. Eli dejo salir una sonrisa, si su pelimorada era feliz, ella también lo era. Se cercioro que no hubiera espectadores, segundos después le robo un dulce beso a esa pelimorada que amaba. -¡Elicchi! - Nozomi estaba sonrojada
-Lo siento hermosa, pero me es irresistible estar tan cerca de tus labios y no probarlos
-Puedes probarlos pero no aquí- Su ruborizada cara regresaba a ese tono blanco.
-Ya lo sé, pero que haré con esas ganas inmensas que tengo de besarte, ¿eh? -
Escucho las risas de su novia, entendía a la perfección el pensamiento de Nozomi, una chica decente no se besa en público ni hace espectáculos, Nozomi era de esa clase de chicas, y siendo así conquisto su corazón.
-¿Piensas que yo no tengo unas ganas inmensas de besarte? - Eli afirmo -¡Claro que deseo besarte!
-¿Ah si?
-¡Si! - Y dicho esto se acerco a Eli dando un apasionado beso, tomando las mejillas de la rubia para manejar la situación. Para Ayase fue maravilloso, a lo lejos pudo escuchar unas campanas de felicidad. Sintió como los labios de su Nozomi besaban los suyos de forma lenta y segura, "ojala esto durara eternamente", pensó la rubia -¿Y…? - Dijo una agitada pelimorada que se relamía sus labios después de tan apasionado beso
-Wow… - Abriendo y cerrando los ojos, aun no sabía si soñaba o estaba en la realidad
Nozomi se sonrojo por completo, ahora comprendía mejor la situación, no podía creer que había reaccionado así, ella no era así, sin embargo Eli la hacía ser así, y no era un problema.
-Ya… ya vámonos- Un poco nerviosa. Ayase solo asintió tomando la mitad de las pertenencias de Nozomi. Después de ese beso había pasado a ser su fiel servidora.
-Oh espera, no vayas tan aprisa- Tropezando al intentar alcanzar a su pelimorada, quien se había adelantado.
Toujo seguía un poco sonrojada, si sus padres la vieran dando semejante espectáculo por la calle seguro le reprenderían, besar en público era algo prohibido por ellos, de niña siempre escuchaba a su madre hablar mal de las parejas que se besaban de esa forma por lo que al crecer se quedo en su mente como algo mal visto. Eli trataba de entenderla en ese aspecto pero a veces le era difícil.
-Disculpa… - Tomando una carpeta blanca que estaba a punto de caerse de las manos de Ayase -No quise adelantarme- Sonriendo.
-Oh está bien, solo que… por un momento pensé que volvíamos al inicio… cuando solo deseabas estar lejos de mi y… - Nozomi la callo al poner su dedo índice en sus labios.
-Shh… volver al inicio es lo que menos quiero… - Negó con la cabeza -Ya no deseo estar lejos de ti, eso jamás- Mirándola y sonriendo.
No hubo necesidad de responderle con palabras, una simple sonrisa y esos ojos llenos de brillo fue la respuesta de Eli.
-¿Y a donde fue? - Pregunto con el ceño fruncido Umi
-No tengo idea, ¿acaso soy su nana? - Respondió irritado Honoka
-Pues con esas canas… - Dijo indiferente
-¿Que? ¡Cuales canas! - Buscando su reflejo en las gafas de Sumika, quien se quejo por el arrebato
-¡Cuidado Honoka! - Le reprendió la melliza, este reviso su perfil derecho e izquierdo -Eres un vanidoso
-No tengo ni un mechón blanco- Menciono aliviado, devolviendo los lentes para sol a su dueña
-Además que tonta pregunta la tuya, seguro se fue con la asquerosa de Toujo algún lado- Respondió con una mueca Momo
-Esto me cansa, ya ni siquiera nos habla, ¿pareciera que ahora todo es respecto a ella, y en que lugar quedamos nosotros? ¡Somos sus mejores amigos! - Dijo Umi, disfrazando sus celos con la excusa de amistad.
-Ya verá, esa pelimorada nos la va a pagar- Riendo con malicia Rin
-Mmm… bueno, yo la verdad, pensándolo bien, creo que… ahora que es novia de Eli, deberíamos dejarla en paz… eh bueno ósea… - Poniéndose nervioso al recibir las miradas de sus amigos -No es que me agrade pero eh…
-¡Pero que cosas dices Honoka! Seguro te hizo algo, ¿te pondrás de su lado? - Le miro furioso Honoka
-No. Olvídenlo- Decepcionado
-Vaya hasta que llegas- Dijo Umi al mirar como Maki se aproximaba, los otros levantaron su cabeza
-Les dije que no me esperaran… gracias- Con una sonrisa
-¿Y? ¿Lo conseguiste?
-Por supuesto, ¿quien me crees? Es lógico que lo obtuviera
Su respuesta provoco la sonrisa de sus amigos.
-¡Genial! Esa idiota sabrá con quien se metió
-Calma, Umi, aun no te exaltes, lo arruinaras. Ya veras, esa Toujo deseara no haber nacido- Y esa sonrisa, la maliciosa, apareció de nuevo.
-¡Les dije! ¡Les dije que tramaban algo! ¡Yo lo sabia! ¡Esos hijos de papi le harán algo terrible! - Exclamaba Nico con los ojos abiertos de par en par
-No puedo creerlo, como pueden existir seres humanos así, mira que lastimar a nuestra amiga, ¿con que sentido?
-No tiene sentido, ellos solo buscan la forma de divertirse, simplemente Nozomi llego en el momento equivocado y en el lugar erróneo
-¿Lo crees así?
-Por supuesto, recuerda que lleve psicología en cuarto
-Oh…
-¡Olviden eso! El problema aquí es como, y que haremos para evitarlo
-¡Seguro será en la fiesta! Tenemos que evitar que Nozomi asista
-Es imposible, Ayase la obligara
-¿Sigues pensando que Eli forma parte de esto?
-¡Por supuesto! Ella solo fue el señuelo… se que está detrás de todo
-Pero escuchaste lo dijo ese tonto de Tomoki
-¡Claro que lo escuche! Pero… pero de haber algo, se que ella es la que inicio todo
Tomoki y Hanayo intercambiaron miradas, ¿por que Nico odiaba tanto a Eli?
-Bien, cuenta conmigo…no quiero que esos estúpidos lastimen a Nozomi
-Si… saben, esto parece una película americana
-¿Eh? ¿A que te refieres?
-Bueno, esta Nozomi que es la nerd, y esta Eli quien es la popular, y se enamora de Nozomi, y sus amigos tratan de impedir esto, y nosotros también y…
-¿De cual te fumaste?
-¡De nada! Pero… ah olvídenlo… cuenten conmigo…
Nico asintió, ahora… ¿que hacer?
-En serio, te ves hermosa- Tomando su mano sobre la mesa
-Gracias- Viendo hacia abajo un poco sonrojada -Aun no me acostumbro, estos son más pequeños- Tomando el armazón de los lentes
-De verdad, hacen que tus ojos se vean más hermosos-
Dijo la rubia bastante cerca, Nozomi sintió el aliento de su novia en el cuello, cerró los ojos, esa proximidad al hacia desfallecer, y ahí venia esa sensación de nuevo, esa corriente que pasaba por su cuerpo, y su piel chinita al instante. ¿Acaso estaba enferma? No, por que se sentía bien, algo inusual, pero bien.
-Ah… claro… - Nerviosa, la rubia lo noto, pero quiso ignorarlo
-Y… ¿ya sabes que usaras para la fiesta? - Alejándose un poco, Nozomi giro su cabeza para verla.
-No… aun no, le pediré a Nico que me ayude
-Mmm bien… sabes… no, no tienes que ir arreglada, digo, arreglarte claro, a tu gusto, pero me refiero a que no tienes que ir con un cambio radical… como aquel día de la cita… - Cerro sus ojos e hizo ese gesto que hacen las personas que sueñan despiertas -Esa pelimorada de vestido azul… uff… nunca la olvidare- Abrió sus parpados y miro a Nozomi -Temo que se den cuenta de lo hermosa que eres… y decidas dejarme- En tono de broma, Toujo rió -En serio Nozomi, no tienes que demostrarle a nadie nada, yo me enamore de ti, así, con esos enormes lentes que ahora pasaron a la historia, y de tus suéteres, y tus calcetas largas, y esos zapatos de abuelita- Riendo.
-¿Mis zapatos son de abuelita? - Alarmada
-¡No! - Riendo aun mas -No pecosa, solo bromeo… te amo tal cual eres… y no te cambiaria- Pegando su frente.
-¿En serio? ¿Entonces no me pongo ese vestido azul nunca más?
-¿Que? Eh no, si, Si… si puedes usarlo más veces, mira que por mi encantada- Con esa risa boba
-Entiendo… y ya no me asusta entenderte… eres un amor Eli Ayase- Este último comentario hizo feliz a la rubia, tanto, que no pudo resistir abrazar a su novia y plantarle un beso sin importar que estaban en medio del centro comercial.
-¡Ya deja de reírte! - Le grito Dante a su hermano mayor
-¡Lo siento! ¡Es inevitable, veo esa mejilla amoratada y a mi mente viene la causa!
- Con esas carcajadas burlescas -¡Mira que, esas clases que tomo nuestra hermanita funcionaron, eso fue un gran derechazo! - Con el puño cerrado y lanzándolo al aire.
-¡Esa tonta! Me las va a pagar… ahora que se su secretito
-Espera… espera Dante, no hagas ninguna estupidez, aun no es tiempo de chantajearla. Deja que pasen las cosas
-¡Pero no tengo tiempo! ¡No entiendes eso!
-Si… te estoy ayudando, no me pidas milagros… suficiente tienes con que Eli este molesta, ¿por que le diste ese carro? Sabias que no funcionaba, hubieras usado otra cosa
-¡Que importa! ¡Eso es lo que menos me preocupa en este momento!
-Ya, ya… no te exaltes, uno habla bien contigo y lo pones de malas
-Necesito dinero…
-Igual yo… así que… no lo arruines- Dijo Leandro serio -Nos estamos ganando a papá… veras… poco a poco le sacaremos el dinero a ese viejo… pero esa Eli… ¡Diablos! Por que tenía que cambiar…
-Yo no sé Leandro, pero no creo que cumpla su trato…
-Lo hará… tiene que- Dijo el mayor de los Ayase.
Eli y Nozomi se adentraban a los edificios de la facultad de Ingeniera, sus manos unidas ya no era un movimiento extraño a los ojos de los demás, aunque a muchas no les pareciera que Toujo se convirtiera en la novia oficial, parecía que ya no había remedio. Claro, la pregunta de los 1800 yenes era: ¿Qué demonios vio en la pelimorada?
Fácil Ayase respondería, pero no tenia por que dar explicaciones a media escuela.
-¿Segura no quieres que te espere? - Pregunto Eli con un gesto de suplica
-No, en serio, aun nos falta estudiar varias cosas, no seré libre hasta dentro de 2 horas
-Hum… genial, tendré que irme en autobús
-¿Sabes andar en autobús? - Pregunto la pelimorada con la ceja levantada, Ayase rió por ese gesto, seguro su novia pensaba que era una inútil
ricachona. -Eh… no quise decir que…
-No, es normal que pienses eso, supongo… y si… mi nana Lilith me enseño como llegar a casa, por si algún día me perdía…
-¿Y te perdiste?
-Infinidad de veces… hasta que me dieron auto y aprendí a manejar… Mmm espero que la ruta no haya cambiado
-¿Lo dices en serio? ¿Tomaras el bus?
-¡Si! - Riendo -Es más, vamos a la parada, para que veas como me subo a uno
-¿Y por que no le dices a uno de tus amigos que te lleve?
-Hum… seguro ya se fueron… oye… ¿y tu estas segura que tus amigos siguen aquí?
-Eh… bueno… si… aunque nos tardamos más tiempo…
Se miraron a los ojos, se sonrieron, y volvieron a verse directo a sus pupilas. Después empezaron a reír, que era la gracia? Ni idea, supongo que uno cuando está enamorado ríe sin sentido. A unos metros, Nico, Hanayo y Tomoki se aproximaban.
-¿Donde estabas? - Dijo la chica, los tres tenían un gesto de molestia -Te estuvimos esperando, al menos hubieras tenido la decencia de avisar- Las risas de ambas se apagaron al instante, la sonrisa que adornaba el rostro de Toujo desapareció.
-Yo… discúlpenme
-¿Lentes nuevos? - Dijo su amigo -¿Fuiste por unos nuevos? Sabes, pienso que no tomas esto del examen tan enserio
-¿Que quieres decir?
-Que ahora le das más importancia a otras cosas- Mirando a Eli de reojo
-¡Claro que no! ¡Esto es tan importante para mí como para ustedes! Somos un equipo
-Un equipo se conforma por varias personas, apenas hoy logramos juntarnos, nos cancelaste 4 veces en 3 días, entendimos que tenias que trabajar y… - Mirando de reojo a la rubia Otras cosas que hacer
-Discúlpenme… - Nozomi bajo la mirada -No volverá a pasar
-Entonces nos reuniremos este sábado, para recuperar las horas que perdimos hoy
-¿Que? Este sábado no, es la fiesta de Maki- Dijo Eli alarmada, buscando la mirada de su novia
-Yo… yo ya le había prometido que asistiría- Dijo viendo a sus amigos -¿Podemos juntarnos el domingo? Cambio mi día de descanso, así que tendremos tiempo
-Mmm pues claro, yo puedo el domingo- Dijo Hanayo asintiendo, sus dos amigos lo miraron con reproche.
-No lo sé, ya veremos- Dijo Nico -Por lo pronto si te urge irte, adelante
-¿No vamos a estudiar?
-Ya es tarde, debo irme- Dijo Tomoki.
Nozomi se sintió mal, sus amigos se habían molestado, Eli no soportaba verla así, tan culpable.
-Ya vámonos- Dijo seria, mirando a los tres chicos con recelo. La pelimorada solo asintió, mientras era tomada de la mano de su novia para alejarse de ahí. Sus amigos vieron como caminaban hacia el estacionamiento.
-¿No crees que fuimos muy duros? - Pregunto Hanayo en tono preocupado
-Claro que no, teníamos que actuar molestos… - Dijo Nico sin quitar su vista del par a lo lejos
-Si… pero aun así nuestra presión no funciono… ira a la estúpida fiesta
-Bien, bien… lo intentamos, es lo que cuenta… ahora ya no habrá más remedio que interferir- Dijo la chica cruzándose de brazos, ya no visualizaba a su amiga, y a la novia de su amiga.
Ayase había manejado el auto de su novia, su pelimorada continuaba afligida, hace más de 10 minutos que habían llegado a la casa Toujo. Y Nozomi llevaba 5 minutos en su habitación.
-Nunca se había molestado con ellos- Dijo Homura-san procesando la información que le había dado Eli para que entendiera el comportamiento de su hija.
-Yo tengo la culpa… siempre le pido que salgamos… - Respondió la rubia, la señora Toujo sonrió, entendía perfectamente a esas dos enamoradas, esa etapa de no querer alejarse ni un segundo también la vivió en su juventud.
-No, claro que no… Nozomi es feliz cuando están juntas, no debes culparte por eso
-Gracias- Dijo un poco aliviada Ayase.
Nat bajo las escaleras, su cola no se movía, podía sentir que su dueña pelimorada no estaba de buen humor. La rubia al ver al perrito se paro del sillón, si Nat bajaba, Nozomi también.
-Hum… creo que ya se hizo tarde… iré a hablarle- Error, el cachorro llego solo.
-No… la seguiré esperando… - Sentándose de nuevo -¡Ya se! ¡Ay que ponerla feliz! Haré brownies
-¿Como? - Dijo la señora Toujo confundida, el entusiasmo de Eli provoco que Nat le ladrara.
Nozomi se secaba las lágrimas antes de bajar, esos 5 minutos que le dijo a su novia que esperara se convirtieron en 30. ¿Como odiarla? Como reclamarle por alterar su mundo y convertirlo en un lugar mejor. Nunca sintió un vació, así era feliz, sin amor. Pero por alguna razón, se sentía tan llena. Pero no lloraba por esa discusión con sus amigos, lloraba por haber dudado de si. Eran tantas cosas, tantos cambios, quería asimilarlo todo, digerirlo, pero era como meterse a la boca toda una rebanada de pastel sin saborearlo. Y luego, esa sensación que viene cuando Eli se aproxima tanto. Jamás lo había sentido, le asustaba, pero le gustaba.
-¿Que esta pasando aquí? - Dijo al ver el movimiento de la cocina. Su madre, su novia y su cachorro se quedaron quietos al verla en el marco de la puerta.
-Eh… era una sorpresa… pero… ya nos descubriste- Alzando sus hombros y sonriendo, Nat ladro, y sacudió la harina que se posaba en la punta de su cola.
-A Eli se le ocurrió la idea… te mirabas tan afligida que… solo quisimos verte feliz, como siempre
-Yo… - Bajando su mirada -Discúlpenme… de alguna forma siento que la pague con ustedes, mas contigo- Viendo a su novia, después una sonrisa se apodero de su rostro, Eli tenía una mancha de chocolate en su mejilla izquierda -Te ves muy linda con ese delantal
-Si- Viéndose a si misma -Tu mamá me lo dio, ¿no luzco bella?
-Tu siempre- Sonriendo. Ver esas perlas blancas la hicieron respirar.
-Bueno… - Dijo Homura alargando la "u" para llamar la atención de esas tórtolas -Yo me retiro, empezó mi novela de la tarde, vamos Nat- Llamando al cachorro -Que se que a ti también te gusta verla- Se dirigió hacia Eli -La otra vez lo pille escondido debajo de la cama, no quitaba su vista de la tele- La rubia rió. El cachorro ya no la agredía tanto, pero tampoco le daba confianza aun para acariciar su oreja.
-Hasta luego- Menciono Ayase al ver salir de la cocina a su suegra y a Nat.
La pelimorada tomo un delantal y se acerco a Eli.
-Ah no señorita, yo tuve la idea de los brownies, yo los hago
-¿Segura? ¿No necesitas ayuda?
-Mmm no… bueno… tal vez un poco, pero solo un poquito- Sonriendo traviesa. Nozomi no pudo resistir y quito la mancha de chocolate de su mejilla, Eli pasó su mano quitando el resto.
-¡Ay que pena! Tu mamá no me dijo nada… con razón se estaba riendo… - Con gesto pensativo, esto provoco una carcajada en Nozomi.
-Eres… - Sin saber que decir -¡Te quiero mucho! Gracias por estar conmigo
-Si… - Rascando su nuca algo nerviosa, ¿por que siempre lograba ponerla así? A penarla, pero pena de la buena. Si es que la hay.
-¿Y? Espera- Con gesto dudoso -¿Sabes cocinar?
Eli empezó a reír.
-¡Claro! Mi nana, usaba la cocina como una terapia, así no hacia tantos desastres por la casa, aunque mi fuerte son los postres, ya lo veras- Sonriendo orgullosa
-Uh… claro que quiero verlo
Ambas se miraron a los ojos, entonces Eli sonrió, Nozomi conocía bien esa sonrisa. ¿Acaso pensaba?
-¡Toma! ¡Me la debías! - Embarrando chocolate en la mejilla de su novia
-¡Eli Ayase! ¡Mis lentes nuevos! - Se quejo la pecosa, pero no pudo evitar reír. Como olvidar esa vez cuando la rubia intento besarla en el café y la pelimorada le embarro un pastelito por toda la cara.
-¡Queee! ¡Se limpian! ¿Te dije que te ves hermosa con ellos? Hasta a tu mamá le parecieron lindos
-Mmm- Nozomi no hablaba, se quitaba el chocolate del rostro.
-Ah ya… déjame ayudarte- Dijo Ayase, tomando un trapo y levantando los anteojos de su novia, para limpiar bien, tomo un poco con su dedo y lo probo. –
¡Esta delicioso! - La pelimorada asintió, el chocolate que se encontraba cerca de sus labios trato de limpiarlo con su lengua.
Eli dejo el trapo, el chocolate se había secado y solo seria removido con agua.
-¡Vaya! ¡Si que tienes el toque! - Saboreando aun.
-Si… - Nozomi se quedo seria, no había notado esa proximidad hasta ahora, Ayase estaba a la altura de sus labios, su estomago se contrajo, ¿por que sentía eso? La boca de Eli estaba tan cerca, fue un beso inevitable, un beso largo, dulce, y con chocolate extra.
Eli tenía una sensación extraña, un mal presentimiento. Pero no sabía a que atribuirlo. Mañana seria la fiesta, mañana les demostraría a todos que amaba a Nozomi más que nada en el mundo. Estaba segura que nada saldría mal, pero entonces, ¿por que esa sensación?
-Papá… - Dijo esperando que este supiera inmediatamente la respuesta, aun sin hacer la pregunta. Quien más que su padre para pedirle un consejo, ahora todas esas lecciones que le dijo de niña comenzaban a tener sentido.
-¿Que sucede? - Respondió este al quitar la vista de su computador.
-Bueno… veras… en la universidad… esta la chica que me gusta
-Ah… ¿Nozomi? Ese es su nombre
-Eh… - Esta se puso roja -Si… pero… mis amigos piensan que… no debo fijarme en ella, lo cual ha provocado varios conflictos entre Maki y yo
-Ya veo… ¿y por que tus amigos piensan que ella no es buena para ti… deben tener referencias para confirmar sus ideas… o acaso esa chica está casada u comprometida? Sabes que en una relación formada no debes intervenir Eli- Su padre la miro serio
-¡No! ¡No! ¡Nada eso!
-¿Entonces?
-Pues… en realidad no lo sé… ella es excepcional, papá. Es perfecta, es inteligente, es hermosa, es dulce…es -…"pobre"… -Es… es que… no sé, nunca me había puesto así
-¡Ya veo! - Dijo su padre sonriendo -¡De verdad que estas enamorada! - Soltando una carcajada -¡Que bien hija! Piensas que no me doy cuenta, pero estoy al pendiente de todo, he notado tus cambios- Sonriendo -Estoy orgulloso… y… solo te puedo decir una cosa respecto a esto- Acercando su rostro -Haz lo que te dicte el corazón, olvídate de la razón, eso no te deja actuar al natural- Puso una mano en el hombro de su hija -Si yo no hubiera seguido mi corazón, no me hubiera casado con tu madre, y hubiera sido infeliz el resto de mi vida
-Correcto, gracias papá- Levantándose
-De nada hija- Eli salió del despacho con una sonrisa. Oleg se puso serio, una mano se poso en su pecho. El tiempo se le acababa.
Nozomi reía a carcajadas, aquella tarde de brownies fue interrumpida por la visita de su abuela paterna. Recordaba como amenazo a su Eli, la culpo de la ruptura de sus lentes, ella se los había obsequiado cuando cumplió 19. Pero su rubia, esta vez, resistió hasta el final, con todo y bastonazos.
-¿Entonces, estas decidida a ir? - Dijo Nico, ya habían arreglado sus diferencias.
-¡Si! - Su amiga hizo una mueca, Nozomi cambio de conversación -Ufff en serio, gracias por ayudarme a escoger la ropa, era un gran peso de encima
-Claro- Sonriendo -Para eso están las amigas
-Lo sé… lo que no se es por que su insistencia de que no vaya a la fiesta
-¿Por que lo dices? - Nerviosa
-Bueno… - Callo -Olvídalo, son alucinaciones mías
Nozomi fijo su vista hacia delante, no vería a Eli hasta la salida, la llevaría a su casa. Sonrió, Ayase no compra carro por que no quiere, ella lo sabe, así pasan más tiempo juntas. Sintió su estomago revuelto, por que tenía esa sensación, algo no andaba bien. Y sabía que se debía a la fiesta.
SABADO
-Adelante señorita- Dijo Ayase haciendo una reverencia. A la pelimorada le resulto gracioso, dejando escapar una risa. Su novia podía ser una payasa a veces, cosa que nunca imagino.
-Gracias- Entrando por segunda vez a la enorme habitación de Eli Ayase.
La rubia dejo sobre su cama las bolsas que contenían su atuendo de esta noche. No había querido preguntar a la pelimorada que usaría, no debía incomodarla. Giro su rostro para sonreírle, a veces parecía que leía sus pensamientos, Nozomi se dirigió a un mueble de la habitación, sobre este había varias fotos de Eli, miro un álbum blanco y lo tomo.
-¿Puedo? - Pregunto antes de echarle un vistazo.
-¿Que es? - Interrogo Ayase acercándose -Ah ya, seguro mi madre lo ha de ver visto, está empeñada en recordar mi niñez
-Eres su única hija mujer, es comprensible
-Tal vez, pero su favorito es Demian- Con una mueca, Nozomi solo negó con la cabeza y abrió el álbum en la primera pagina. Ahí estaba su novia con un vestido blanco, adivino que era en su bautizo.
-Eras muy linda de niña
-¿Era? - Se dolió la rubia -Admito que de niña no me veía tan mal- Echándose porras a si misma
-No tontita- Sonriendo -Me refiero a cuando eras bebe
-Claro, claro, entendí eso- Nozomi le dio un beso en la mejilla para después ir a sentarse a la orilla de la cama, mientras Eli sin reprochar mas, fue en busca de los zapatos que combinarían con su atuendo en el armario, era para perderse de lo grande que estaba.
La pelimorada no quitaba esa sonrisa de su rostro, cada vuelta de página que daba abría más la boca. Eli era natural en sus poses, era una niña hermosa, con esos enormes ojos, parecía que ese álbum le contaba la historia de su novia, pues podía verla a través de los años. Entonces llego a una foto que le llamo bastante la atención, en ella se veía como un niño rubio de lentes y frenillos abrazaba a una molesta Ayase de unos 8 años. Traían uniforme escolar, supuso que era algún compañero de clase.
-¿Elicchi? - Dijo mientras se ponía de pie observando la foto -¿Quien es este niño? - Caminando hacia el armario.
Eli que escucho el llamado de su novia pero no iba a acudir hasta que sacara la caja que buscaba desde el tope del estante, trato de apresurarse y sacudió el mueble, ocasionando que varias cajas cayeran al suelo. Cubrió su cabeza y dio un brinco hacia atrás
-Genial- Frunciendo el ceño al ver el desastre que había ocasionado
-¿Estas bien? - Se acerco Nozomi al ver un montón de cajas esparcidas por el
suelo
-Si, nada que no se pueda limpiar, dime, ¿que sucede? - Recordando que le hablaba minutos antes
-Oh si, ¿quien es él? - Mostrando la foto del álbum
Eli abrió grande sus ojos, trato de ahogar una risa pero fue imposible.
-En serio quieres saberlo- Sin dejar de reír, tomo su estomago con sus manos
-Si… no me digas que… es…
-¡Maki! Era un completo pelele en la primaria- Paso un dedo por debajo del ojo, de tanto reír una lagrima se le escapo -Ay mi panza… disculpa… - Nozomi no caía de su asombro, el chico más codiciado de la universidad, ¿era un completo… pelele?
-¿Como así, no entiendo?
-Veras mi Nozomi- Rodeando un brazo por el cuello blanquecino de su novia -Este niño que ves aquí en la foto, es ni más ni menos que mi buen amigo Maki- Nozomi hizo una mueca, si Eli supiera que su "buen" amigo la acosa, seguro quitaría ese adjetivo -En su peor época: La primaria
-Ya veo- Observando de nuevo la foto -Se ve que no se llevaban bien- Insinuando el gesto de Eli
-Pues… si… de hecho- Soltando a Nozomi -Sucede que siempre lo molestaban, por usar lentes- La pelimorada frunció el ceño -Eh… bueno, el caso es que un día me harte que esos bravucones siempre estuvieran demostrando ser fuertes y les di su merecido, los bañe con la manguera del conserje, a proporción a chorro. Ya ni los bomberos- Recordando esa imagen de 4 niños siendo empujados por agua y rodando por el piso mientras pedían que se detuviera -Y desde esa vez Maki me vio como su salvadora, no se despegaba de mi ni en los recesos
-¿Le gustabas?
-¿Gustarle yo? - Eli rió -No, claro que no… bueno, eso me dijo un día, pero éramos muy niños, no podía verlo como otra cosa
-Bien… ¿entonces desde esa vez se volvieron amigos?
-Mmm no, en realidad no, no fue hasta la secundaria, cuando dejo atrás los frenillos y los lentes. Y dejo de ser aquel niño débil en busca de protección
-Vaya quien lo hubiera dicho… ahora entiendo su complejo
-¿A que te refieres?
-Pues si, el era molestado de pequeño, creció y molesto a los demás
-Bue… ahora que lo dices- Bajando la mirada.
-No tiene importancia, creo que ya no me cae tan mal
-¿En serio?
-Bueno, poquitito así- Señalando la cantidad con su dedo índice y pulgar
-Algo es algo- Sonrió Eli, esperanzada de que su mejor amigo y su novia se
llevaran bien.
Se acerco a la pelimorada para darle un beso pero no contó con una caja entrometida que la hizo tropezarse.
-¡Alou! ¡Mi pie! - Quejándose.
-¡Elicchi! - Sonando preocupada -Que boba eres- Riendo al darse cuenta que no paso a mayores
-Uhm… - Con una mueca
Toujo se aproximo a ella para a papácharla, miro mas fotos esparcidas por el suelo. Eli pensó que se acercaba para abrazarla, así que abrió sus manos para recibirla pero Nozomi se fue de paso, dejándola consternada.
-¿Y esta de cuando es? - Tomando una foto del suelo.
-De la preparatoria… - Aun esperando su abrazo, ya ni el dolor del pie recordaba.
-Oh… - Viendo al ejercito de Ayase en ella. Observo el escudo de la escuela, lo había visto en otro lado, pero no recordaba en donde.
-Ven, salgamos de aquí, luego me dará armariofobia
-¡Tontita eso no existe! - Riendo -¿O si?
-No lo sé- Alzando los hombros en señal de ignorancia. La verdad era que no quería que Nozomi encontrara otras cosas más privadas de Ayase. Mañana le daría una limpia, lanzaría a la basura lo que le recordara a la antigua Eli.
-Sabes, ya es un poco tarde, y debo ir con Nico, debemos discutir unas cosas sobre el examen
-Ah… bueno- Agachando la cabeza.
-¿Por que te pones triste? Nos veremos en la noche
-Lo sé, pero…
-Por cierto, vendré a recogerte o…
-¡No! Eh… no… - Se altero un poco, a esa hora su familia está en la mansión -Mejor yo voy a tu casa y de ahí nos vamos en tu auto, ¿te parece?
-¿Estas segura? Mi auto no se verá muy bien que digamos entre tantos carros de último modelo- Moviendo la cabeza negativamente
-Mi Nozomi, mi Nozomi… ¿que no te he demostrado algo a caso? Eso que no nos importe, tú y yo somos novias, y el auto es lo de menos- Sonriendo
-Si claro… - No muy convencida -Entonces así quedamos
-Aja- Asintiendo
-Bien, entonces me voy
-Espera… - La tomo de los brazos y la beso en los labios, las piernas de Nozomi flaquearon un poco, Eli metió pasión de mas en ese fogoso beso. -Te amo- A escasos centímetros de su boca-…estoy segura que esta noche te veras preciosa con lo que sea que tengas puesto-sonriendo. La pelimorada se dejo contagiar y sonrió también.
-Espero- Algo intimidada
-Te acompaño- Abriendo la puerta, entrelazo su mano con los dedos de Nozomi. -Ojala que mi nana se encuentre en la cocina, o te detendrá para bombardearte con preguntas
-Tu nana me cae bien, no le veo lo malo en querer saber quien sale con su niña
-Si… ni yo, no veo lo malo- Volteando hacia los lados, esperando que su familia aun estuviera fuera de casa.
¿Que de malo tiene amarla? Nada, seguro que nada. Nada que el amor no pueda comprar.
En la casa Kracov se veía un gran movimiento: hombres uniformados acomodando sillas y mesas, hombres acomodando el sonido, hombres con otro uniforme adentrando cajas y cajas de diferentes licores. En fin, se veía que la fiesta estaría bastante buena.
-¡Ah! ¡Ah! - Gemía la chica del servicio, con la falda levantada mientras recibía las embestidas de Maki por detrás.
-¡Shh! ¡No grites, sabes que no me gusta! - Decía mientras tomaba con más fuerza la cadera de la chica. Acelerando un poco más su movimiento.
-¡Ah! ¡Ah! Ah… - El rubio le tapo la boca, mientras daba la última sacudida antes de alejarse. Alcanzo lo que buscaba, se retiro de la chica y camino hasta su baño.
Tiro a la basura el condón, escucho como la puerta de su habitación se cerraba, seguro la chica se había ido caminando con dificultad, admitió que esta vez fue más brusco. Sonrió, como si le importara. Entro a la ducha, aun con esa sonrisa, esta noche, era su noche.
-Ya lo veras Nozomi, ya lo veras
Se repitió, mientras en su mente recreaba el momento de hace rato, pero en vez de la chica del servicio, imagino que era otra pelimorada.
-Claro mamá, no te preocupes- Decía Toujo desde el teléfono de Nico -Pues ya voy para la casa- Viendo el reloj de su muñeca… -Seguro, nos vemos- Sonriendo. Colgó y devolvió el teléfono en su lugar.
-Me encanta la relación que tienes con tus padres, Nozomi, se llevan muy bien
-Si, estoy muy agradecida, son una bendición
-Serian la familia perfecta si no fuera por… - Callo ante la cara seria de Toujo
-Lo siento
-No ahí por que, es algo que dejo de molestarme desde hace mucho, el esta bien y es lo que importa
-Eh… mi madre me trajo esto desde Paris- Para cambiar la conversación -La moda de ahí esta genial, todo un "fashion victim"- Pronunciándolo con acento francés, saco un chaleco de color morado del armario -¿Que te parece?
-Está lindo, ¿lo usaras para alguna ocasión especial?
-Si, tal vez hoy- Mordió sus labios, estaba por delatarse
-¿Saldrás con los chicos algún lado? - Con aspecto interrogativo
-Eh no, con mis padres a cenar, tu sabes, noche de familia, una vez al mes no hace daño- Riendo nerviosa
-Oh claro- Nozomi esbozo una sonrisa, Nico era de familia adinerada, aunque casi no se le notase, era algo que le gustaba a Toujo, era una chica que no presumía. Aunque a veces hacia sus berrinches.
-Bueno, será mejor que vayas a tu casa o no estarás lista a tiempo para la fiesta
-¡Cierto! - Se emociono -Gracias por los consejos, nos vemos
-Si, y por favor, no olvides memorizar tu parte para el examen
-No, claro que no- Demostrando su seguridad con una sonrisa, al girarse choco con la mesita de la lámpara de Nico -¡Oh disculpa! - Apenada, tirando algunas cosas, ella y su amiga se hincaron para juntarlas. Toujo tomo una foto, en ella se veía a Nico con amigos de su antigua preparatoria. -¡Por supuesto! - Exclamo la pelimorada
-¿Que? - Confusa
-¡El escudo! Lo había visto antes, en esta foto
-¿Si… y?
-Que hoy Eli… - Callo, la rubia le pidió que no contara el pasado de Maki -¿Ustedes iban en la misma preparatoria, cierto? Todo el ejército de Ayase
-Eh… si… ¿que con eso? - La pelimorada noto el nerviosismo de su amiga, como si hubiera descubierto algo malo.
-¿Sucede algo?
-No nada… sabes, recordé que debo hacer unas cosas- Arrebatando la foto de las manos de Nozomi y colocándola en el mueble algo molesta
-Oh… claro, ya me iba… - Caminando hacia la puerta
-Suerte esta noche- Dijo Nico sin siquiera despedirla y caminando hacia el cuarto de baño
La pelimorada salia de la habitación de su amiga bastante confundida. ¿Habría dicho algo muy malo?
-¿Y? No me dirás
-Señora yo… - Lilith bajo la mirada, Precia la interrogaba, si su boca se hubiera mantenido cerrada por más tiempo.
-Vamos, no entiendo el empeño de Eli de ocultarla… acaso… ¿es alguien mayor que ella? - Alarmada de que su hija saliera con alguien cerca de su edad
-¡No! No… es joven
-Ya veo… ¿es bonita?
-Eh si, en su forma
-¿Forma? Explícate- Con gesto interrogativo
-Señora… disculpe, pero es algo que no me incumbe, usted debería esperar a que la niña Eli decida presentarla a la familia, tal vez no sea la indicada y aun dude- Mintiendo, estaba segura que Nozomi era la indicada.
-Uhm… entiendo tu punto Lilith, pero entiende el mío. Es Eli, es capaz de venir un día y decir que se ha casado sin siquiera invitarnos a la boda
-Tiene razón… pero aun así, lo siento, no puedo decirle más, ahora si me disculpa, debo ir a la cocina
-¡Lilith! - Se quejo la señora Precia, pero la anciana salió del cuarto con la cabeza agachada. Parecía que le tenía más lealtad a su hija que a ella misma. -Entonces tendré que averiguarlo por mi cuenta- Con una mueca.
En la mansión, Eli terminaba de arreglarse en su cuarto, tenía un completo desastre, nunca tardaba tanto en cambiarse, pero ahora las cosas no eran así.
-¡Ah ya! Así, no me importa- Viéndose en el espejo -Bueno tal vez con estos zapatos mejor- Quitándose los que tenia y colocándose los nuevos -Si, mejor- Sonriendo al ver el resultado.
El sonido de la puerta y siendo tocada por alguien la distrajo
-Niña Eli, soy yo- Dijo la anciana
-Adelante- Al girar su rostro y ver como ingresaba su nana a la habitación
-¡Oh! - Dijo Lilith tapando su boca del asombro -¡Se ve usted preciosa!
-Gracias
-Saldrá con… - Susurro -…Nozomi
-Si… por que susurras- Bajando la voz también
-Por que las paredes oyen
-¿Como?
-¡Su madre! Esta obstinada en saber sobre… - Susurro -…Nozomi
-¿Que? Pero… - Su nana coloco un dedo en su boca para que bajara la voz -Pero no sabe que ella es… ¿mi novia ya? ¿O si? - Susurrando de nuevo
-No, no… no lo sé- Viendo hacia el techo
-¡Nana! ¿No le habrás dicho nada? - Ambas hablaban en voz baja
-No, claro que no… pero tenga cuidado, si no quiere que se enteren antes…
-Bien… gracias por avisarme
-Descuide… con permiso- Saliendo de la habitación de puntitas.
Esa reacción, su padre, su madre, ¿como lo tomarían?
Homura y Hiro estaban bastante entretenidos viendo la novela.
-¡No! ¡La va a cachar! - Emocionada por que la protagonista se escondía de su ex esposo quien pensaba que estaba muerta
-¡Ah! De todos modos se tienen que ver, luego sabrá que el niño también es su hijo
-¡Shh! ¡Calla Hiro! No me dejas oír
Nat estaba acostado en el piso sin despegar sus ojos azules de la pantalla.
-Pero es que… - Reprocho Hiro, un ladrido del cachorro lo hizo callar -Ya pues, ya me callo- Cruzando los brazos.
-Bien hecho Nat- Le festejo Homura. Cuando parecía que los protagonistas se iban a encontrar ahora si, escucharon como alguien tocada el timbre -Ah no, ve tu Hiro
-¿Que? No, ve tú
-Nat, ve tú- El perro ladro y no se movió -¡Bien! - Molesta se levanto la señora Toujo.
Al abrir la puerta encontró a una Ayase muy guapa.
-Hola… ¿está Nozomi?
-Pero que bien te ves Elicchi- La rubia asintió agradecida por el cumplido -Pasa, pasa, no tarda en bajar
-Gracias- Adentrándose a la casa Toujo. Sostenía un arreglo de Lirios.
-Aun tengo la duda de donde los consigues
-Es un secreto… - Sonriendo.
Homura camino hasta la sala, tomando el lugar que ocupaba. Y no, en la novela aun la protagonista seguía sin ser vista por su ex esposo.
-Te dije que se iba a zafar- Le dijo Hiro sin despegar sus ojos de la televisión.
-Mmm
Ayase se acerco a la sala, sentándose en el sillón, fijo su vista a la pantalla.
-Oh mi nana también mira esa novela, no se la pierde, aunque le he perdido el hilo a la historia, en que se… - Nat ladro para que Eli guardara silencio -Bueno luego me cuentan- El cachorro volvió a ladrar -Mmm…
Vinieron los comerciales para que todos salieran de su trance hipnotizado
-Iré a avisarle a Nozomi que estas aquí- Dijo la señora Toujo levantándose.
-¿Apenas? - Le reprocho el señor Toujo.
-¡Ay es que veía la novela! Elicchi entiende, ¿no es así?
-Claro
Mientras Homura subía al cuarto de la pelimorada, en la sala el señor Hiro ponía al corriente a la rubia en la trama de la historia. Nat ladraba cada que contaba algo mal, era como una forma de corregirlo.
-Ah… entonces los niños son medios hermanos
-Así es
Eli observo como Homura bajaba, se levanto y camino hasta las escaleras para poder ver cuando Nozomi saliera de su habitación.
-Ya viene- Le dijo a Ayase, esta solo asintió, sin despegar su vista de lo que parecía ser la puerta de la pelimorada. Entonces esta se abrió y salió su novia esbozando una sonrisa.
-Que hermosa te ves- Dijo Eli esperando que pisara el último escalón para tenerla en sus brazos.
-Gracias- Dijo una sonrojada Nozomi, que sentía como sus mejillas le quemaban. En realidad no era la Nozomi nerd de siempre ni tampoco aquella sexy pelimorada de vestido azul. Era algo como en medio, ni mucho ni poco. Se veía bien, claro, no daría el gran cambiazo, ese que a muchos desconcertaría. -Tú te ves preciosa también
Al llegar a su lado Eli el beso en la mejilla, entregando los lirios, Nozomi agradeció el gesto besando rápidamente sus labios.
-¡Se ven lindas! Dejen voy por la cámara para tomar una foto
-Mama… - Se apeno Nozomi.
-No se muevan, no se muevan- Se apresuro Homura yendo hacia un mueble, abrió un cajón y saco una cámara de rollo. -Listo… - Enfoco la cámara -Sonrían- Y dio el flash.
-Creo que salí con los ojos cerrados- Menciono Eli mientras seguía viendo estrellitas por el flash.
-Igual yo- Rió Nozomi por el gesto de su novia.
Hiro se acerco a ellas, miro a Eli con advertencia.
-Se cuidan mucho y no acepten bebidas de extraños
-Claro papá… ¿nos vamos ya? - Viendo a Ayase.
-Si- Asintiendo
Nozomi pasó sus flores a su madre para que esta las pusiera en agua. Salieron de la casa Toujo bastante silenciosas. En cuanto entraron al auto Eli hablo.
-Creo que ya no le agrado tanto a tu papá- Algo pensativa
-No, no es eso… solo que… tal vez no le agrada la idea de que ya estoy haciendo mi vida, es muy celoso, soy su única hija mujer
-Si… - Eli frunció el ceño. A que se refería, pero no pudo analizar las palabras de la pelimorada, pues esta se acerco para darle un beso. Después se separo y dijo:
-¿Manejas tu o yo?
-Eh… yo… - Algo confundida
-Bien- Nozomi se cambio de lugar colocándose en las piernas de Eli -¿Que esperas?
-¿Eh? - Eli se sonrojo un poco y se movió de lugar, dejando a Nozomi en el lado del copiloto -Disculpa… me distraje
-Eres muy boba- Riendo.
Ayase encendió el auto de Toujo, para ir hacia la fiesta.
En la mansión Kracov los universitarios empezaban con la diversión, la gente importante estaba llegando, a fuera, varios reporteros tomaban nota de los personajes que se daban lujo por haber sido invitados. Había seguridad, no cualquiera entraría.
-¿No ha llegado Eli? - Pregunto Umi
-No aun no… sabes que le gusta hacerse la importante- La chica hizo una mueca
-Yo solo quiero que lleguen los dj
-No tardan, Maki… ¡Maki! - Grito Honoka -¿A que hora se supone que llegue el grupo?
-En una hora más
Había contratado a Deep Dish, un dueto de música electrónica. Mientras fuera de la mansión, tres chicos hacían lo posible por entrar. Ya tenían el plan elaborado, estaban disfrazados de repartidores de pizza
-¿Creen que funcione? - Pregunto Hanayo
-Tiene que… no pensamos en otra cosa- Respondió Honoka
Observaban atentos como los verdaderos repartidores entraban
-Ahora, es hora, es hora- Dijo Nico corriendo y tomando una caja de pizza de la camioneta, sus amigos la imitaron.
Pasaron agachando la cabeza, el guardia de seguridad detuvo a Hanayo
-¿Pasa algo?
-¿De que es la caja?
-Mmm… - El chico miro la etiqueta -Es de cartón
-No te hagas el gracioso- Reprocho el guardia quien tenía cara de mono
-De… de… pepperoni- El guardia arrebato la caja y empujo a Hanayo para que fuera por otra, así que con miedo regreso a la camioneta, tomo otra caja y entro apresurado a la mansión, justo por la parte de la cocina.
-¿Por que tardaste? - Dijo Nico
-El cara de chango hambriento- Respondió molesto.
Los tres guardaron silencio y se escabulleron por una puerta, daba al ala izquierda de la casa, la fiesta estaba situada en la parte derecha.
-Si subimos por las escaleras llegaremos al cuarto principal
-¿Como sabes? ¿Has estado aquí antes? - Intrigado Honoka, la chica se puso seria
-No, pero estas casas se parecen, y seguro así será, ya verán- Caminando hacia esa dirección, sus amigos se miraron entre si y alzaron los hombros ignorantes, para después seguir a Nico.
El ambiente de la fiesta se podía oír en el otro extremo de la casa, Nozomi entraba junto a Eli, ambas tenían las manos sujetas, la pelimorada se sentía extraña, no era su mundo. Habían entrando por la parte trasera, la rubia evito a la prensa, no podía darse el lujo de ser fotografiada junto a Toujo.
-¡Hola Eli! Hace mucho que no te veía! -saludo una chica rubia, Nozomi la reconoció: las anoréxicas caras de modelo con las que SU novia solía salir.
-Hola- Saludo la rubia tratando de alejarse pues la joven restregaba sus pechos al momento del abrazo.-…mira, te presento a Nozomi, mi novia-la expresión de la chica cambio, observo a Nozomi como un enemigo y estrecho su mano hipócritamente
-Hola Lorna
-Es Nozomi- Le corrigió la pelimorada
-Oh si, como sea- Giro su rostro a Eli -No puedo creer que hallas formalizado- Miro a Nozomi de reojo -Vaya con quien fuiste a dar, habiendo mejores
-Disculpa… - Defendió Ayase -Ella es lo mejor que me ha pasado
-¿Ah si? ¿Y las noches de pasión? Recuerdas el trío que hicimos con aquella trigueña, ¡Ufff! ¡Que noches! Como las extraño- La rubia se sonrojo, observo la cara molesta de su pelimorada
-Eh nos vemos- Tomando a Nozomi de la cintura para caminar. Ya un poco alejadas de la rubia, Nozomi dijo:
-¿Trió? Vaya, sabía que tu pasado era así…
-Dijiste bien, mi "pasado"… de… el pasado, obvio… y tu eres mi presente y mi futuro, que te quede claro- Besando sus labios.
-Espero- En voz baja.
Varios de los presentes miraban ese par (in par) que se besaba, ¿como era posible que Ayase haya traído a esa cuatro ojos de Toujo a semejante fiesta? Seguro estaba loca.
-¡Que hay! - Saludo Kyle, bastante feliz
-Wow que gusto verte
-Lo mismo digo- Una chica paso -Hola- Le saludo Kyle pero esta lo ignoro, había sido así desde que llego, la mayoría lo ignoraba -¿Llevan mucho aquí?
-No, acabamos de llegar
-Ah ya veo, se ve que estará genial, tú crees, Deep Dish, "say hello"
-Hello… - Repitió Nozomi, Eli rió.
-Eh no, no, es una canción… - Le corrigió Kyle
-Ah… disculpa- Apenada. A unos metros un chico apareció tras Nozomi, rodeando su brazo por el cuello. -Pero que… - Asustada.
-¡Hola Nozomi! - Le saludo un chico que se veía ebrio
-Hank, hola- Un poco incomoda, Eli frunció el ceño y retiro la mano del chico.
-Lo siento pero, no me gusta que abracen a mi chica- Le reto Ayase tomando
a Toujo por la cintura.
-Uy, uy, uy- Dijo Hank levantando sus manos -Mi mal- El chico giro su mirada hacia unas jóvenes que bailaban provocativamente. -Eso es sexy- Caminando en dirección a las jóvenes.
-Creo que iré a evitar catástrofes- Le siguió Kyle tomando a Hank de los hombros y guiándolo a otra dirección.
-Hice mal en darle el pase- Viendo a Hank a lo lejos.
-No, claro que no, no eres responsable de sus actos- Abrazando a la pelimorada por
Detrás, colocando su mentón en el hombro derecho de Nozomi.
-Si verdad… - Dedicándose a sentir la mejilla de Eli sobre la suya.
A unos metros, una joven morena observaba todo, así que los rumores que había escuchado eran ciertos, Ayase salía con una chica rara. Que gustos…
-¡Vinieron! - Dijo a su espalda Maki.
-Claro, no me perdería esto
-Ten- Entregando un vaso a Eli
-Gracias- Bebiendo mientras se ponía a un lado de Nozomi
La misma chica morena se aproximo. Eli al verla, de la impresión se atraganto con el ponche.
-¿Te sientes bien? - Pregunto la pelimorada dudosa
-Hola corazoncito… - Dijo una voz suave, Nozomi giro su rostro, una joven bastante guapa le sonreía a Eli pero saludaba a Maki.
-Hey Abigail, no sabía que vendrías- Dijo el pelirrojo con una sonrisa. Mientras Eli veía hacia otro lado, Nozomi noto el comportamiento de Ayase.
-¿Pasa algo? - Le dijo en el oído.
-No, claro que no- Negando.
-¿La conoces?
-Eh…
Una chica interrumpió
-¿Que hace ella aquí? - Dijo molesta Kotoril viendo a su amiga. Umi e Honoka estaban tras ella.
-Hola cabecita de cacahuate- Le respondió la morena.
La rubia tomo a Nozomi para alejarse de la situación.
-¡Eres una cualquiera! - Kotoril trato de abalanzarse pero Umi la detuvo.
-¡Detente, no te rebajes! - Le reclamo.
Nozomi no entendía la situación. Miro a Eli pidiendo explicaciones.
-A veces el pasado, sigue muy presente- Sonriendo nerviosa.
-¡Toujo! - Grito Kotoril -Ten cuidado de esta, es una zorra, cuando menos te lo esperes te quitara a Eli
-Oye a mí nadie me llama zorra- Se molesto Abigail.
La rubia tomo a Nozomi y la alejo del alborto. Subieron al segundo piso, la pelimorada estaba bastante molesta. Quería explicaciones.
-Estoy confundida… ¿quien es ella?
-Una chica…
-Me doy cuenta…
-Mira que importa quien sea, no la tomes en cuenta ¿si? - Juntando su frente con la pelimorada.
-Bien… - No podía molestarse con ella. Eli sonrió, tomo a Nozomi de la mano y entraron a un cuarto.
-Mucha emoción para tan poco rato- Se sentaron en un sillón, Ayase se aproximo para besarla, Nozomi simplemente se dejo llevar.
Parecía una droga, de la cual ya era adicta, quería más y más. No podía dejar los labios de Eli y las manos de la rubia ya no se conformaban con estar en un lugar. Las sintió pasar de sus caderas a sus muslos, un choque le recorrió el cuerpo, le dio una mordida a Ayase. Esta la hizo emocionarse, subió las manos hasta llegar a su abdomen, subió un poco y toco los pechos de Nozomi.
-¡Eli! - Se alarmo, separándose.
-Lo siento, Nozomi. Pero no tenemos 15 años, somos mayores, y esto es muy necesario
-Pero aun no me siento preparada como… como para que me toques de esa forma
-Eres toda una mujer… no veo lo malo, eres mi novia
-Sabias a lo que te atenías conmigo, yo te lo dije…
-Discúlpame- Acercándose -Discúlpame, me controlare, te amo- Besando sus manos y después sus labios.
-Mejor bajemos… no quiero estar aquí
-Correcto, espero que las cosas se hallan calmado
Y si, las cosas se habían calmado, Ayase no veía a sus amigos cerca, así que se dedico a divertirse junto a Nozomi.
-Vamos a bailar
-Pero no se…
-Anda di que si… - Arrastrándola a la pista. Nozomi no se pudo negar ante tal puchero de su novia, accedió y se situó junto a Eli en lo que parecía ser el centro de baile. Varios jóvenes se movían al ritmo de la música. Toujo se la estaba pasando bien, el mundo de Ayase no parecía ser tan malo.
-¿Disculpa, puedo? - Dijo Abigail empujando a Toujo y acercándose a Eli.
-Ah… claro- Nozomi se sintió mal y camino hacia otra dirección.
-¡Nozomi! ¡Espera! - Ayase iba a seguirla pero una mano de la morena la detuvo.
-Deja que se vaya… aun tenemos cosas pendientes- Sonriendo y pasando un dedo por el pecho de la rubia.
-¿De que hablas?
-¿Que ya se te olvido? Mientras te hacías la "novia" de esa tonta de Kotoril, yo hacía de segunda mesa
-Es algo que paso hace tiempo, y no volverá a repetirse
-¿Y quien le dijo a Kotoril lo de nosotras?
-No lo sé, pero ya no me importa… linda pelea que han tenido… ahora si me disculpas, iré a buscar a mi novia
-¿Tan rápido? Por que mejor no vamos arriba, nadie se daría cuenta
-¿Estas loca? - La tomo de los hombros -Aléjate de mi
Y camino en busca de Nozomi, se sentía bien consigo misma, había rechazado lo que pudo haber sido el mejor sexo hasta ahora. Abigail era fuego, un fuego que su pelimorada había apagado. A unos metros Umi observo todo, este era la señal, y la estúpida de Toujo había caído, ahora estaba desprotegida. La encontró en una esquina bebiendo soda.
-¿Y Eli? - Con tono amigable
-No se- Respondió esta con una mueca.
-Es una tonta, siempre lastima a las personas sin darse cuenta
-Si…
-¿Sabes? Que te parece si por una noche olvidamos nuestras diferencias
-¿En verdad?
-No, seguiré siendo la misma desgraciada contigo- Sonriendo
Nozomi no sabía si tomarlo a broma o como advertencia, pero la risa de Umi la distrajo.
-Ven, te presentare a unos amigos
-Mejor iré a buscar a Eli
-No, vamos- Tomando su muñeca con fuerza, Nozomi se dejo arrastrar.
Caminaron un poco hasta que las mellizas aparecieron.
-¿A donde vas con la cabeza de zanahoria?
-¿Es lo mejor que te pudiste arreglar? - Se mofo Momo -Pobre Eli, que vergüenza ha de estar pasando
-Chicas, chicas… cálmense
-¿Que? ¿Ahora eres su amiga?
-No, pero pobre Nozomi, que pensara de nosotras
-Lo que le dé la gana- Dijo Sumika
-Yo… mejor me voy- Dándose vuelta.
-Espera…
Momo se interpuso, chocando con Toujo, haciendo que su vaso de vodka cayera sobre la falda de Nozomi.
-Oh lo siento- Fingiendo culpa
-¡Diantres! - Se quejo Nozomi, alejándose de ahí.
Las tres chicas se miraron, Umi sonrió.
-Eres una perra
-Gracias- Le respondió Momo a modo de cumplido.
Eli buscaba a Nozomi algo desesperada, una sensación la invadió, como si algo estuviera pasando, algo muy malo. Se encontró con Kyle
-¿Oye has visto a Nozomi?
-Mmm no, ¿no la encuentras?
-No, hace rato que no la veo
-Te ayudo a buscarla
-Bien
Ambos se dividieron y siguieron buscando. Pero Nozomi no se encontraba en la planta baja, había subido para buscar algún baño y tratar de lavar el desastre que la tonta de Momo había ocasionado. Entro en un cuarto, no diviso a alguien, y se dirigió al baño. Después de algunos minutos y llegar a la conclusión que el vodka quedaría adherido a su falda decidió salir en busca de su novia.
-Vaya… pero que sorpresa Toujo- Dijo Maki frente a ella.
-Yo… - Nozomi no dijo nada y corrió en dirección a la puerta, pero el pelirrojo se apresuro y cerro con seguro, la pelimorada retrocedió.
-¿Cual es el apuro? Sabes, deberíamos conocernos mejor… por Eli
-Déjame salir
-Cálmate… no haré nada que no te guste- Maki se acerco a una mesa y preparo 2 bebidas -Toma, relájate, te ves muy pálida
-No
-¡Bebe esto! - Grito ocasionando que Nozomi se asustara, tomo el vaso de Maki -¡Bébelo! - La pelimorada dudo, y bebió un poco, el pelirrojo sonrió.
-Quiero irme ya
-En un momento, por lo pronto toma asiento, y no seas grosera- Nozomi se sintió un poco mareada, tomo su cabeza, el pelirrojo la tomo de los hombros y la guió hasta la cama. -Eres muy bonita… ahora entiendo lo que vio en ti Eli- Acariciando su mejilla.
-Quiero irme- Dijo Nozomi, sentía su cabeza dar vueltas.
-Y eso que no bebiste todo el vaso… al principio te sientes así, pero después
Sentirás otra cosa- Sonriendo con malicia.
Nozomi empujo a Maki y camino con dirección a la puerta, el pelirrojo la observo, pero no contó con que Toujo gritaría.
-¡Ayuda! ¡Ábranme!
-¡Shh! ¿Que haces? - Molesto se paro. Entonces una voz se escucho del otro lado.
-¿Nozomi estas ahí?
Maki sintiéndose atrapado camino hacia una puerta y salió de la habitación. Mientras la pelimorada golpeaba la puerta, hasta que la abrieron.
-¡Nico! - Dijo lanzándose hacia su amiga, sentía miedo. Ni siquiera pregunto que hacía aquí.
-¿Que paso? ¿Te encerraron? - Dijo molesta.
-Si… - Con la cabeza agachada, Hanayo y Tomoki se acercaban.
-¿Que le paso a tu falda? - Viendo la mancha de vodka.
-Un accidente…
-¿Donde está Eli?
-Abajo- Nozomi se separo de Nico -Tengo que ir a buscarla
-Dime… ¿fueron ellos, cierto? - Pregunto Tomoki, la pelimorada solo asintió.
-¡Esos tontos! Deberían de madurar… ¿y Eli? ¿Tuvo algo que ver?
-¡No! ¡Claro que no!
Los 3 chicos intercambiaron miradas, el dolor de cabeza estaba pasando. Bajaron las escaleras en busca de la rubia. Nozomi no le contaría a Eli, no aun. Esta podía no creerle, y no quería eso. Sintió una extraña fuerza, como si tuviera energías de mas, seguro Maki le avía dado alguna droga.
-¡Nozomi! - Se alegro Ayase al verla a salvo -¿Estaba preocupada? ¿Donde
estabas? - Besando sus mejillas.
-¡Arriba! Me encontré con los chicos- Sonriendo.
-Ya veo… ¿estás tomada?
-¿Yo? ¡No! Que va- Empezó a reír -Ven, vamos a bailar
-Pero… - No hizo más preguntas, Nozomi la arrastro a la pista y empezó a bailar muy pegado.
Nico y los chicos veían el estado de la pelimorada, minutos antes estaba asustada y ahora se besaba felizmente con Eli. Adivinaron que su comportamiento no era producto del alcohol, tenía que ser…
-¿Drogada? ¿Lo crees así?
-¡Si! Seguro Eli le dio algo, Nozomi no haría algo así en su sano juicio- En la pista la pelimorada besaba fogosamente a Ayase, tomando sus manos y llevándolas a su pecho
-Wow… nunca creí ver a Nozomi así
La pelimorada trataba de quitarse su blusa, pero Eli no lo permitió.
-¿Pero que estas haciendo?
-¡Me dio calor! - Molesta -Sabes que, no quiero bailar, mejor… vamos arriba
-¿Que? ¿Esta segura? - Nozomi asintió y tomo a Eli de la mano mientras
caminaban con dirección a las escaleras.
Maki Kravo observaba todo desde el otro extremo de la sala, no había logrado su cometido, ¡había dejado pasar una gran oportunidad! Estaba completamente molesto, ¿pero que le había visto Eli a Nozomi? Era una tonta, ni siquiera era hermosa, Eli era demasiado para ella, el seria mejor partido que Toujo… el… El pelirrojo se sorprendió, no podía negarlo más, odiaba a Nozomi y quería hacerle daño, por que ella tenía a Eli. "¿Será?" Se pregunto, su propia obsesión por acostarse con Toujo solo tenía que ver en que era el deseo de Eli, y Eli era su deseo.
Ayase estaba bastante excitada, Nozomi la besaba con tanta vehemencia que no podía imaginar que en verdad estuviera pasando, hasta le permitía tocarla, pasaba sus manos por los pechos de Toujo sin ser detenida. La pelimorada acariciaba el abdomen de la rubia mientras no dejaba de besarla. Podía sentir la lengua de Nozomi, simplemente parecía otra.
-Nozomi… Nozomi espera- La detuvo Eli, necesitaba respirar.
-Que… su…cede- Algo entrecortada.
-Estas segura que…
Nozomi sonrió y se recostó en la cama. Era como una señal, para decirle a Eli que ahí estaba y que la hiciera suya. La rubia agradeció el gesto, se coloco sobre la pelimorada y empezó a besarle el cuello, bajo hasta su abdomen y levanto la blusa para besarle el área del ombligo, cuando subió al rostro de Nozomi esta parecía estar dormida.
-¿Amor? Amor… estas…
Si, Toujo se había quedado dormida. Eli comenzó a reír, parecía que no tenia de otra más que esperar. Se acostó a su lado y abrazo a Nozomi por la cintura.
-¡Estuvo genial! ¡Ha sido una de las mejores noches de mi vida! - Se emociono Tomoki, hace una media hora que la presentación del grupo Deep Dish había acabado.
-¡Creo que amo a Maki por haberlos traído! - Dijo Hanayo
-Wow tampoco, tampoco- Lo calmo su amigo, miro a Nico quien estaba bastante seria.
-¿Sigues preocupada por Nozomi?
-No, ahora mismo está con Eli
-¿Y eso no es lo que te preocupa?
-Es sarcasmo- Le miro con reproche.
-Oh, oh… - Dijo Hanayo al ver al guardia de seguridad -Nos han cachado, será mejor que salgamos de aquí
Los tres chicos se escabulleron entre la gente que quedaba, era casi la mitad de los invitados. En el otro lado de la mansión los amigos de Eli estaban molestos, no habían podido vengarse de Nozomi.
-¿Y ahora que haremos? - Pregunto Tomoki.
-Esperar… ya buscaremos una forma de deshacernos de Toujo- Respondió Umi.
En la habitación donde estaban Eli y Nozomi, la pelimorada despertaba. Miro a su novia quien la observaba tiernamente, por un momento se asusto, pero luego de ver que ambas se encontraban vestidas dejo de alarmarse.
-Ya es algo tarde, pronto amanecerá
-¿Que?
-Es broma, dormiste como por media hora, vamos- Levantándose de la cama y tomando la mano de Nozomi.
-¿Que horas son?
-Casi las 3:00am… tus padres deben estar preocupados
-Lo sé- Nozomi se tomo la cabeza, no recordaba muy bien lo que había pasado, y le daba mucha pena preguntarle a Eli.
-Te amo- Le respondió la rubia al verla a los ojos.
-Yo igual…
Dándose un beso, sintiendo en el cómo su relación se hacía más fuerte. Nada ni nadie las separaría.
Ese domingo por la mañana, en la mansión de Eli.
-¿De que estas hablando? - Consternado el señor Ayase, se encontraba con su segundo hijo.
-Sobre la inversión, Leandro dijo que debemos exportar las telas a Italia, ya había hablado contigo de eso
-No recuerdo… - Quedo serio, cada vez estaba empeorando, ¿ya estaba perdiendo la memoria acaso?
-Vamos, firma esto, es la orden para empezar a exportar
-¿Donde están mis lentes?
-¿No confías en mi?
El señor Oleg hizo una mueca, era su hijo, su sangre, era la misma imagen de Precia. Le daría una oportunidad, tomo la pluma y firmo las hojas, en el rostro de Demian se asomo una sonrisa de victoria.
-Toma… - Miro su rostro, el de su hijo, ese gesto de traición, que no supo ocultar.
El pelirrojo cenizo se retiro del despacho de su padre, mientras el salía un hombre de traje entraba.
-Señor Ayase
-Trajiste lo que te pedí
-Así es- Entregando un fólder
-Puedes marcharte- El hombre de traje se fue, Oleg pensó muchas cosas antes de tomar aquel fólder. Respiro hondo y leyó las hojas que se guardaban en el. Su rostro cambio drásticamente, aquello era mucho para lo que su corazón podía soportar, pero en que estaba metido Demian. Tomo su pecho, empezó a dolerle, como si se contrajera -¡Precia! - Grito antes de caer al suelo desmayado.
El segundo de los Ayase estaba cerca, escucho como su padre grito el nombre de su madre. Dudo un poco, entro al despacho y vio a su padre tirado, miro las hojas que estaban sobre el escritorio, las tomo.
-¡Maldita sea Oleg! ¡Por una vez podrías mantenerte alejado de mi vida! - Molesto tomo toda aquella información y las coloco de nuevo en el fólder -Ojala te mueras-
Saliendo del despacho.
Nozomi estaba sobre su cama, no podía seguir durmiendo, desde hace rato que sentía algo en el pecho, como si se sintiera mal. Pero no sabía por que.
-¿Hija estas despierta? Es Eli, esta al teléfono
-Ya voy- Poniéndose de pie para abrirle a su madre -Gracias- Frunció el ceño, su madre tenía un gesto preocupado -¿Elicchi? Hola, como estás cariño
-Mal, Nozomi, mi padre está en el hospital- La voz se oía a punto de quebrarse
-¿Como? Pero…
-Tuvo un infarto, no saben si esta vez lo lograra… que voy a hacer
-¿Quieres que vaya contigo?
-No, no… hoy vas a juntarte con Nico y los chicos para estudiar, no quiero interferir en tus planes
-Pero… quiero estar contigo, no podré estar en paz
-Lo siento, tal vez no fue buena idea llamarte
-¡No digas eso! Soy tu novia, y querías que lo supiera…
-Entonces mejor ve con tus amigos, yo estaré con mi madre, me necesita
-¿Y tu a quien necesitas?
-A ti…
-Bien, te llamare para estar al tanto, ¿correcto?
-Si, gracias… te amo
-Yo también- Sonriendo.
Nozomi colgó, estaba tan metida en la conversación que no noto a su madre en la puerta. Esta la miro preocupada.
-Se oía muy mal
-Lo está- Dijo Nozomi, observando hacia el piso.
El doctor camino directo hacia ellos.
-Les tengo una buena noticia
-¿Esta fuera de peligro? - Dijo Precia esperanzada
-No, hemos encontrado un donante
-¿En serio? - Sonrió Eli
-Así es, es de aquí, de Uminari, es compatible con tu padre
Eli se sintió mal, significa que alguien había muerto, pero salvaría a Oleg.
-Necesitamos que el señor Ayase se encuentre mejor, para poder realizar la operación, cuesta de mucho trabaja y fuerza
-Claro, en cuanto pueda hacerse tiene nuestra autorización- Respondió la rubia. El doctor asintió, el celular de Eli empezó a sonar -Disculpen- No reconoció el numero. -¿Bueno?
-¿Elicchi? Soy yo, Nozomi, ¿como sigue tu padre?
-Igual, pero han encontrado un donante- Emocionándose
-¡De veras! Que alegría… pero… te tengo una mala noticia
-¿Que sucede?
-Es Hank, está muerto…
-¿Como?
-Si… parece que se ahogo en su propio vomito…
-Dios… cuanto lo siento
-Lo sé… yo… yo… me siento culpable… si no… si yo no… - Escucho como empezó a llorar por el teléfono
-No, Nozomi, no te sientas culpable… ¿donde estas?
-En… en casa… de… Nico
-¿Podrías darme la dirección? Iré por ti
-Claro… - Tratando de calmarse.
Eli observo la casa, ya había estado ahí antes. Pero no le dio importancia.
Después de varios minutos la pelimorada salió. Ayase se aproximo a su encuentro, ambas se abrazaron.
-Está bien, estará bien…
-Pero…
-No sientas culpa, no la tienes…
Tomo su rostro, colocando unos rizos tras ambas orejas y besando su nariz, después su frente y al último sus labios.
-Ay Elicchi- Soltando un suspiro, la rubia la abrazo más fuerte aun. Había investigado, que el donante de su padre, era el mismo Hank.
Continuara...
Lectores anonimos: Muchas gracias
Pd: Tengo pagina de facebook por si quieren leer doujin traducidos de love live, symphogear, Mai hime, los espero con ansias, me pueden encontrar como: Mapache Curioso, espero su visita ansiosamente.
Pd: Si quieren otra historia adaptada o traducida no duden en pedirla.
