Los personajes de Inuyasha no me pertenecen, le pertenecen a mamá Rumiko
Besos de Pocky y algo mas
Capitulo 1
- Al fin terminé con mi tarea de matemáticas, ahora podré descansar un poco - suspiró la colegiala, mientras recordaba la conversación que había mantenido con su amiga, Yuka, en el colegio
Flashback
- Oye Kagome, ¿Tú ya diste tu primer beso con el chico rebelde de tu novio? - preguntó la chica
- ¿Qué yo que?
- Ay Kagome, no me digas que tú y él no se han besado aún
- Pues... yo... yo - no sabía que responder, después de todo, su amado hanyo aún no daba ese paso y ella no quería parecer una acosadora o algo parecido
- Kag, te estoy hablando... - Yuka movió sus manos frente a la cara de cara de su amiga
- Pues... veras, Yuka - recordó que ella estaba ahí - Yo... él... - balbuceaba
- No se han besado, ¿verdad?
- Mmmm, no... - soltó con un suspiro
- No te preocupes amiga, yo tengo la solución para tu problema - respondió, con una sonrisa
¿Viagra? ¡No! ¡¿Qué demonios estoy pensando?!
Se reprimió mentalmente
- Ten - le extendió una cajita de dulces Pocky
- ¿Y esto para que me va a ayudar? - preguntó, sonriendo, aliviada al ver que no era lo que se estaba imaginando
- Mira Kag, yo reté a un amigo a jugar con Pocky, él no quería, entonces yo le dije "Ay Senki, no quieres porque tienes miedo, ¿verdad?" y el muy tonto acepto por puro orgullo - rio - Y así obtuve un beso con el chico que me gusta - terminó el relato, con sus mejillas sonrojadas
- Y, ¿tú crees que ésto servirá? - preguntó, no muy convencida
- Claro que si, Kag, sólo juega un poco con su orgullo y listo - soltó con una sonrisa
- Si, pero... - no logró terminar la frase debido a que el timbre, dio por terminado el recreo
- Hay que volver a clases, quédate con esa caja
Regresaron al salón y Kagome la guardo en su mochila
Fin del flashback
¿Seré capaz de hacerlo sólo por un beso?
Pensó
- ¡No! - tiró la cajita a la cama, mientras tomaba un libro de novela rosa y comenzaba a leer - Ay... es tan bello el amor - pronunció, suspirando
- ¿De que hablas Kagome?
La miko volteó, encontrándose con el hanyo, quien estaba en la ventana
- Inuyasha, ¿Qué haces aquí a estas horas de la noche? - miró su reloj, corroborando que eran las 11:30 - ¿Pasó algo? - preguntó, preocupada
- No, no pasó nada, todo está bien
- Entonces, ¿Qué haces aquí? - volvió a preguntar
- Pues... no tenía sueño y pensé que podrías estar despierta culpa de esos demonios llamados exámenes, ¿te molesta que este aquí? - preguntó, un poco apenado
- Claro que no, Inuyasha, estoy feliz de que estés aquí - respondió, haciendo sonrojar al hanyo y a ella misma, debido a su sinceridad
- Ti... tienes que comer algo - fue lo primero que vino a la mente del peliplata, para borrar el rubor de sus mejillas
- Eee... ya es muy tarde para comer Ramen, pero... ten - sacó de su mochila unas galletas - Estas no te harán daño por la hora
- Oye Kagome, no soy un débil humano como para que me haga daño la comida - reprochó
- Ya lo se, sólo trato de cuidar un poco de ti, como tú lo haces conmigo - respondió con una sonrisa, regresando su mirada a su escritorio, para continuar con su lectura
Inuyasha se quedó mirándola unos segundos, para luego redirigir sus ojos a las galletas, tomándolas y comenzando a comerlas, gustoso de que haya sido su Kagome, quién se las haya dado
Unos minutos después
- Kagome, ¿ya no te quedan de esas galletas que me diste?
- No, lo siento Inuyasha, eran las únicas
- Keh... como sea, ¿mm? ¿Y esto? - preguntó, sosteniendo la caja entre sus manos
- ¿Qué cosa? - volteó
- Esto, estaba en tu cama, huelen a... mmm... fresas, ¿son dulces o algo así?
- Eee... si, son dulces
- Y se pueden comer, ¿verdad?
- Si, se pueden comer, su nombre es Pocky y... bueno, se usan para jugar
- ¿Para jugar? Yo sólo veo unos simples dulces
Kagome se batallaba internamente
- No lo hagas, eres una niña buena - decía su ángel
- Vamos tonta, ésta es la única oportunidad para poder besar al sexy y guapo hanyo - respondió su demonio
- Eso no está bien - insistía el ángel - Kagome es una niñ... - no logró terminar la frase, debido a que el demonio le dió una patada en el culo, borrándolo del mapa
- Listo linda, tú haz lo tuyo - el demonio guiñó su ojo, desapareciendo
La miko sonrió internamente, ya que había tomado su decisión
- Oye Kagome, ¿me estás escuchando?
- ¿Ah? Ah, si, si, te escucho
- Entonces respóndeme, ¿A qué juegan con ellos?
- No importa, Inuyasha, es un juego sólo para valientes
- ¿Me estas llamando cobarde?
- No, claro que no, tú eres muy fuerte, pero hay cosas que ni tú te atreverías a hacer, por ejemplo, jugar con Pocky... no es por oféndete, pero éste juego, requiere mucha valentía y tu no podrías...
- ¿Y tú si? - preguntó
- Claro que si - sonrió - Por supuesto que me atrevo
- Bien, entonces, jugaremos los dos - sentenció el hanyo
¡Bien!
Sonrió internamente
- Inu... yo si me atrevo a jugar, pero, ¿Tú podrás llegar hasta el final?
- Claro que si
- Bien - la chica se levantó de su silla, sentándose en el piso, frente a Inuyasha, tomó la caja de dulces y, con una sonrisa, comenzó a explicar las reglas del juego
Ésto va a ser muy interesante
Pensó
Continuara (Advertencia, el próximo capítulo contiene lemon
Si llegaron hasta aquí, gracias ;)
¡Hola mis amores! este two-shot participa en la dinámica de noviembre "Besitos con sabor a Pocky" de la página de Mundo Fanfics Inuyasha y Ranma
Créditos de la ortografía a mi querida amiga, Cbt1991, arigato linda :)
¡Nos vemos en el próximo! Besitos :)
