Disclaimer: los personajes de Twilight son propiedad de Stephenie Meyer. La autora de esta historia es RMacaroni, yo solo traduzco con su permiso.
Disclaimer: The following story is not mine, it belongs to RMacaroni. I'm only translating with her permission. ¡Ronnie, te adoro!
Capítulo 7
Bella escoge un lugar cerca del cobertizo, como pensé, para nuestra sesión de fotos improvisada para su línea de ropa. Ella ubica la cámara sobre un pequeño trípode que tenía en su mochila y me dice que este tomará las fotos, así que simplemente deberíamos divertirnos.
La diversión está fuera de discusión para mí, especialmente cuando ella se quita los shorts.
Mentalmente, me disocio. Esa ya no es Bella. Es mi compañera de elevaciones. Mi compañera de equipo. Mi concentración se fija en lograr los movimientos, en mantenerla segura, y lo que es más importante, en no dejarla caer.
Ella podría tener puesta una bolsa de papas o nada en absoluto y no haría la diferencia. O eso me sigo diciendo.
Hemos estado aquí por al menos media hora cuando el sol comienza a ponerse y ella dice que quiere intentarlo con la luz de fondo, así que cambiamos de lugar. Estoy sudando toda la camiseta pero a ella no parece importarle, o si lo hace, no dice nada.
La tengo en mi mano derecha, en un Cupie, cuando veo a la entrenadora acercarse por el rabillo de mi ojo.
—¡Sostenlo! —dice la entrenadora, cuando estaba a punto de bajar a Bella—. ¡Oh, es hermoso, Bella!
Resoplo mientras ella camina a nuestro alrededor, inspeccionando la elevación.
—Buena forma. Agarre increíble —me dice mientras ella acomoda mi brazo libre y cierra mi mano en un puño. Es una corrección que ella me ha dado antes, ya que nunca sé qué hacer con mi brazo libre y siempre termina luciendo raro. Entonces, ella hace presión en la mitad de mi espalda, enderezándome mientras intento contener mi siseo—. De acuerdo, mejor. —Vuelve a dar una vuelta hasta que se encuentra frente a mí, mientras yo intento evitar que mi brazo tiemble—. Necesitamos hacer algo con tu rostro.
Varias personas se han subido a la colina con la entrenadora para vernos. Diviso a Emmett, quien se ríe detrás de ella. Si esto es por mis cejas, me volveré loco. He rechazado todas sus ideas para embellecerlas. Estoy sosteniendo a una persona por encima de mi cabeza. ¿A quién mierda le importa lo pobladas que son mis cejas?
—No digo que tengas que sonreír —explica la entrenadora—. Pero debes borrar la mueca de dolor.
Oh.
—¿Dónde duele? —pregunta suavemente, mientras que siento a Bella tensar su postura y reacomodar su peso, como si intentara hacérmelo más fácil.
—Estoy bien, solo un poco adolorido por el entrenamiento —digo entre dientes, respirando para tratar de relajar mi rostro.
—Mejor —dice la entrenadora, dándose la vuelta—. Necesita lucir cómodo —dice un poco más alto, como si estuviera dando una lección—. Como si ella pesara como una pluma. Ligera. Como si flotara sobre tu mano.
Estoy temblando por todas partes cuando la entrenadora voltea hacia mí.
—Puedes bajarla ahora.
—Baja —le digo rápidamente a Bella y la bajo mientras que la entrenadora continúa con el discurso de "Rostro de Animador" con los demás, alejándose de nosotros.
—Santo cielo... —Giro mi hombro con un suspiro profundo, haciendo presión con mis dedos—. No pensé que las bases tuvieran que sonreír aunque duela como tú —bromeo, riendo suavemente mientras me frotaba el hombro. Las chicas del equipo constantemente se les decía que sonrían, sin importar qué, qué actúen.
Cuando Bella se da la vuelta, no tiene una sonrisa para mí o mi chiste; sino que está frunciendo el ceño.
—Lo siento —dice, desconcertándome—. Creo que he aumentado un poco de peso desde que llegué aquí. —Baja la mirada con un suspiro, en la actitud menos propia de Bella. Entonces, gira y se aleja de mí.
—Espera, ¿qué? —Me apresuro detrás de ella, alcanzándola rápidamente y deteniéndome frente a ella—. No es eso.
Ella intenta sonreír pero sigue siendo un poco triste, sus ojos están apagados, la luz usual en ellos está ausente.
—Swan, eres la chica más pequeña de aquí. No eres pesada... en absoluto.
—Todos suben de peso en la universidad —dice, bajando la cabeza—. ¿Sabes, los 6 de Primer Año*?
—Estoy muy seguro de que eso es un mito.
—No, de acuerdo con mi mamá... —Suspira, mirándome, sus manos en sus caderas.
—Realmente no creo que tú necesites preocuparte por eso. —La miro con incredulidad. Ella probablemente sea la persona más en forma que conozco. Ella es delgada y está tonificada. Es fuerte. Poderosa. Hermosa.
Ella se encoge de hombros, aún pareciendo escéptica.
—Escucha, tuve entrenamiento de pesas con Jasper hoy, y él hizo que me esfuerce... mucho. Así que, sí, me duele todo. —Mis dedos con atrevimiento buscan su rostro, levantando su barbilla, haciendo que me mire—. No podría levantar ni un grano de arroz cómodamente.
Su rostro brilla un poco mientras se ríe suavemente.
—¿Por qué no me dijiste que estabas adolorido? —Su mirada baja a mi hombro, a mis dedos aún presionando allí.
—No es tan malo. Quería ayudarte a tomar las fotos. —Bajo mi mano con un suspiro, esperando que mis siguientes palabras la distraigan—. Honestamente, quería estar en tus fotos. Quizás incluso pedirte que me etiquetes en una. —Medio sonrío cuando su boca se abre—. Ya sabes, para mi nueva cuenta de Instagram.
—¡Lo sabía! —Golpea mi brazo con su puño y una risita. Mi corazón se acelera. La Bella que conozco está de vuelta.
Froto el lugar donde me golpeó mientras ella recoge sus cosas, y entonces comenzamos a caminar de vuelta hacia la piscina. Intento descifrar qué le pasa a mi pecho, por qué la agitación no se detiene, por qué a pesar de que estoy exhausto todo lo que quiero hacer es pasar más tiempo con ella, hacerle reír de nuevo.
—Entonces, ¿sacamos algunas buenas?
~F~
Bella toma una manta que la entrenadora nos ofrece para sentarnos y mirar los fuegos artificiales mientras yo tomo unas botellas de agua. Estoy bebiendo de la mía de regreso cuando Jasper me detiene.
—Edward, ¿cómo te sientes? —Él está apartado de todos, como si estuviera esperándome. De inmediato tengo un mal presentimiento al respecto.
—Estoy bien —digo, tratando de que los nervios no se asomen.
—¿Te pusiste hielo hoy como te pedí que lo hicieras?
—Así es —digo un poco a la defensiva, poco seguro de adónde iba esto.
—Mmm... —Su mirada se mueve por detrás de mí—. La entrenadora parece pensar que nos excedimos. ¿Te obligué a hacer mucho hoy?
—No lo creo —contesto honestamente—. Quiero decir, fue más de lo que nunca antes había hecho, pero así también lo ha sido todo lo que he hecho en estas dos semanas. —Me río, rascándome el cuello—. Incluyendo todos los entrenamientos de ella.
—Eso es lo que creí. —Sonríe, satisfecho, pero de alguna manera se siente que no es todo lo que él quería decir.
Asiento y comienzo a dar un paso adelante pero él me toma del brazo, acercándome a él.
—¿Sabes que Bella es el tesoro de la entrenadora Hale, cierto? —Sus ojos están fijos en los míos. Su tono serio me aterra.
Asiento de nuevo. Bella. De eso se trata esto.
—Hemos estado esperando un largo tiempo para que ella se una al equipo —explica—. Se necesitó de mucha persuasión para que sus padres le permitieran venir aquí.
—De acuerdo. —No es mi intención sonar tan a la defensiva, pero no sé qué es lo que está insinuando y hay algo de Bella que enciende mi lado protector.
—Ella es joven, Edward, y tiene demasiado en sus manos. —Su tono se suaviza, y también lo hace el agarre en mi brazo. También me relajo.
Respiro profundo, echándole un vistazo a Bella, cuya mirada está en nosotros.
—Puedo ver que los dos se han familiarizado con el otro. —Jasper voltea en dirección a Bella, y ella de repente finge estar muy interesada en sus uñas.
—Entrenamos mucho juntos. —Me encojo de hombros; le resto importancia—. Eso es todo.
—¿Eso es todo? —Me arquea una ceja, inquiriendo.
—Somos amigos.
—De acuerdo, bien. —No parece convencido en absoluto—. Recuerdas lo que dije después del primer entrenamiento, ¿cierto?
—Cierto. —Recuerdo—. El equipo es familia. Los compañeros de equipo están prohibidos.
—De acuerdo. —Lleva una mano sobre mi hombro, el agarre de sus dedos reforzando su mensaje—. Mientras lo tengamos claro.
—Por supuesto.
—No queremos ninguna preocupación. —Jasper suelta mi brazo, dándome unas palmadas en la espalda antes de dar un paso atrás.
—No habrá ninguna. —Miro a Bella de nuevo, y a Jacob, quien ahora se le ha acercado. Creo que no debo ser tan sutil como fue mi intención porque Jasper se ríe a mi lado.
—No te preocupes, él también ha recibido la advertencia... así como todos los otros chicos que se le han insinuado. Y ella los ha rechazado a todos. Varias veces, de hecho.
—Genial. —Me enfurezco, apartándome de Jasper. Quiero saber quiénes son estos otros tipos. Mis ojos analizan la multitud de personas, de compañeros de equipo, mientras regreso a Bella. Está el maldito de Mike Newton, saltando a la piscina, pidiéndole que lo mire hacer una voltereta. También está James, parado de manos al borde de la piscina, alardeando para ella.
Y entonces, por supuesto, está Jacob, sentado junto a ella, pero se pone de pie rápidamente ante lo que sea que ella le dice.
Sabiendo que Bella está prohibida para Jacob, y cada otro idiota aquí, debería hacerme sentir mejor. No seré yo. No serán ellos. Pero puede que algún día sea alguien más. Alguien que no esté en nuestro equipo.
La idea arde en mi pecho mientras camino hacia ella.
—Gracias —dice Bella mientras le tiendo una botella de agua, sentándome a su lado—. Creo que encontré la indicada. —Navega por su teléfono, mostrándome la pantalla.
En la foto, su pierna izquierda está estirada, por completo, así su pie está por encima de su cabeza, y sus piernas forman una línea vertical. Su cuerpo está derecho, su mano derecha sosteniendo su tobillo izquierdo, mientras que el brazo izquierdo se cruza perpendicularmente como la "flecha" en la demente postura de "Arco y Flecha".
—Cielos, ¿cómo te doblas así? —digo, y ella se ríe.
Miro de nuevo la imagen para finalmente verme. La tengo levantada con ambos brazos, mis manos aferrando su pie derecho. Afortunadamente, la estoy mirando a ella, así que no puedes ver mi rostro demasiado tenso como para ser atractivo.
—Luce bien, ¿o no? —pregunta, sonriendo.
—Luce increíble. —Es todo ella. Ella es increíble.
Ella sonríe, llevando el teléfono hacia ella, y comienza a jugar con la iluminación y los filtros. Escribe algo, y entonces voltea a verme.
—¿Realmente quieres que te etiquete?
—Estaba bromeando sobre eso. —Bajo la mirada vergonzosamente. No debería haber mencionado mi último intento en las redes sociales. Ahora voy a tener que confesar.
—No hay un Edward Cullen. —Frunce el ceño, mirando al teléfono—. ¿Cuál es tu usuario?
—Acabo de crearlo anoche —digo rápidamente—. No tengo nada. Ni siquiera una foto.
—¿Cuál es tu usuario? —pregunta de nuevo, girando la cabeza en mi dirección y sonriéndome de oreja a oreja.
—No quiero decirlo. —Fracaso en contener una risita.
—¡Dime!
—Es estúpido.
—¿Por favor? —Me mira con ojos de perro mojado y sus labios haciendo un puchero, los que traen de vuelta esa agitación en mi pecho. Gruño y saco mi teléfono de mi bolsillo, abriendo la aplicación, y mostrándole mi perfil vacío.
—¿ChicodeColorado001? —Logra tener una cara seria mientras yo hago una mueca.
—Uno y CeroUno ya estaban en uso —digo, estallando, incapaz de contener mi risa.
—Nombre, ¿Bob Vance? —Comienza a reír también, así que le quito mi teléfono—. ¿De Vance Refrigeración?
Estoy sorprendido de que ella conozca la referencia a La Oficina —es viejo, incluso para mí— pero es lo que Emmett estaba mirando anoche y lo primero en lo que pensé cuando intentaba pensar en un nombre falso. Honestamente, la única razón por la que abrí una cuenta de Instagram fue para mirar sus publicaciones de manera anónima.
—Oh, Cullen... eres tan ñoño. —Sacude la cabeza, aún riendo.
Mi nombre sale de sus labios de la manera más natural. Me hace sentir bien.
—Te dije que era estúpido. —Suspiro y bebo mi agua.
—Te ayudo. Dame eso. —Mueve sus dedos en mi dirección hasta que le tiendo mi teléfono.
Con ambos teléfonos en sus manos, envía fotos al mío, y en los próximos minutos, justo antes que los fuegos artificiales comiencen, tengo un perfil de Instagram renovado con una de las fotos que tomamos antes.
Es una frente a la puerta de sol, donde solo puedes ver nuestras siluetas. Ella boca abajo en mis manos, sus piernas separadas casi en una forma de ola, su cabello cayendo, flotando en el viento, justo sobre mi rostro. Casi puedo olerlo.
Incluso mi postura luce bien. Fuerte. Creo que es mi foto favorita.
Ella deja el usuario como ChicodeColorado001, diciendo que nosotros siempre podíamos cambiarlo luego—nosotros.
Nos acostamos sobre la manta y observamos los fuegos artificiales. A veces, observo cómo su rostro se ilumina con el cielo, ansiando el resto del verano. Ansiando conocerla mejor. Aprender más y más de ella, sobre ella.
Regla de equipo o no. No quiero alejarme de ella. No quiero apartarla. No lo haré.
Sé que puedo controlarme. Puedo estar allí para ella cuando me necesite, como su amigo, como su compañero de equipo, pero como nada más. Es para lo que me he estado esforzando desde el comienzo del verano.
Ella tiene objetivos. Ellos tienen planes para ella. No me interpondré en su camino. No seré una distracción. No complicaré las cosas para ella.
*6 de Primer Año. El término en inglés es "Freshman 15", un término usado en Estados Unidos y Canadá para referirse a las libras que un estudiante aumenta durante su primer año. Yo solo opté por pasarlo a kilogramos.
Una foto parecida a la que Edward subió en su perfil la pueden encontrar en el grupo, se subió hace unos días y la reconocerán por el atardecer. La que subió Bella (justamente hice esa manip para la portada y al final no usé jajaja), se subirá junto a la publicación de la actualización :)
¡Feliz comienzo de semana! 😊
