Disclaimer: los personajes de Twilight son propiedad de Stephenie Meyer. La autora de esta historia es RMacaroni, yo solo traduzco con su permiso.


Disclaimer: The following story is not mine, it belongs to RMacaroni. I'm only translating with her permission. ¡Ronnie, te adoro!


Capítulo 37

Apenas habiendo dormido, y demasiado temprano en la mañana, Bella y yo ya estamos bajando a la playa. Estamos sofocándonos bajo el sol, en nuestros uniformes y con Emmett siguiéndonos, probablemente aún medio dormido, mientras tratamos de encontrar dónde necesitamos ir.

El Campeonato Nacional de Animación y todas sus complicadas divisiones están organizadas por la Asociación Nacional de Animadores. La Universidad del Estado de Summit compite en División I, CoEd Grande, pero también está el CoEd Pequeño, y divisiones para equipos femeninos, todos compitiendo al mismo tiempo.

Todos los equipos se presentan el sábado, el día 1, y luego basado en puntaje, los mejores equipos de cada división compiten el domingo, el día 2, o las finales, por el campeonato. Eres un Campeón Nacional si ganas en tu división, y Campeón Nacional Grand si obtienes el mayor puntaje entre todas las divisiones. Nuestras posibilidades para ambos títulos son decentes ya que la rutina de la entrenadora Hale tiene suficientes puntos para alcanzarlos, pero aún tenemos que lograr ejecutar todo sin deducciones para lograr un buen puesto.

Por supuesto, Bella y yo también vamos a competir en el evento de elevaciones en pareja, el cual transcurre en simultáneo, con un formato de Día 1 y Día 2 de Finales. Así que, por el Día 1, debemos presentarnos en la mañana, solo Bella y yo, y luego en la tarde con todo nuestro equipo.

—Base, voladora, y segunda base. —La señora revisa nuestras identificaciones y nos permite pasar al detrás del escenario, donde esperaremos hasta que sea nuestro turno. Decidimos esperar aquí en vez de al frente porque preferiría no ver las otras presentaciones antes de nosotros, temiendo que afectara mi mente.

Mi cabeza aún así es un desastre mientras esperamos y esperamos. Mi estómago también.

Siento que voy a vomitar.

Jamás he estado tan nervioso en mi vida.

Permanezco detrás de Bella, su mano en la mía, tratando de esconder mis nervios de ella, así no la pongo ansiosa también.

Ella ha estado callada. Concentrada. Su atención se encuentra en el escenario mientras la siguiente pareja entra.

Lo que quiere decir que nosotros somos los siguientes.

Mierda, hace calor.

Siento mi cuero cabelludo arder, irradiando hacia mi cuello. Seco mi frente con la toalla que Bella me regaló antes de lanzarla sobre su bolso. Nuestras identificaciones, teléfonos, y botellas de agua están allí, apilados junto a los otros cerca del escenario.

Miro al ventilador del techo, rogando que gire más fuerte o más frío o sople un poco de aire en mi dirección.

—Puedes con esto, bebé. —Emmett lleva sus manos a mis hombros antes de voltear a mirarme—. ¿Estás bien? —Luce preocupado mientras sus ojos estudian mi rostro.

Respiro profundamente con mejillas infladas mientras Bella voltea a mirarme.

—¿Por qué hace tanto calor? —Le sonrío temblorosamente a Bella, quien le da un apretón a mi mano en aliento. Trago la bilis en mi garganta.

Mierda, siento que voy a vomitar.

—No te atrevas —dice Emmett, sus dedos presionando mi pecho como si lo supiera—. Son solo nervios.

Suelto la mano de Bella y doy un paso atrás, mis ojos escaneando el cuarto en busca de un cesto o algo. Trago de nuevo.

—Vamos, amigo, respira —dice, palmeando mi pecho—. Las palmas sudan. El espagueti de mamá*. Sabes como va. Solo respira.

Sus padres están allí afuera. Sammy también. Además de varios niños con los que he trabajado y que me admiran. Este es el evento más grande en la animación. Mierda, incluso mi mamá está mirando en el canal de Varsity.

En una competencia de elevaciones en pareja, no te puedes esconder detrás de nadie allí afuera —no hay compañeros— solo Bella y yo en ese escenario, Emmett junto a nosotros en caso que la deje caer.

Mierda, ¿y si la dejo caer?

El peso de decepcionar a todos pesan sobre mis hombros.

—Cullen… —Bella se para frente a mí, pero no me atrevo a bajar la mirada—. ¡Oye! —dice más alto, tomando mis manos—. Cierra los ojos —instruye mientras la miro.

—Swan…

—Ciérralos. —Envuelve mis dedos firmemente, llevando nuestras manos entre nosotros mientras sigo sus instrucciones—. No pienses. Solo siente.

Los últimos meses pasan frente a mis ojos. Desde el final del verano pasado cuando inútilmente luché para mantenerme lejos de ella. Qué idiota fui por luchar en contra de eso. Cómo ella sostuvo mis dedos entonces, justo como ahora mismo.

Respiro bruscamente y me concentro en ella, en su toque, en sus palabras. E intento solo sentir. Sentirla.

Funciona un poco. Comienzo a respirar ligeramente mejor.

Inhalo varias veces más antes de abrir los ojos, y todo lo que veo es ella. Sus ojos grandes y llenos de esperanza. Su seguridad en mí. Su confianza. Su amor.

No sé qué pasará allí afuera, pero no la dejaré caer.

—¿Estás listo? —pregunta apresuradamente; ya nos están llamando.

—Sí. —Asiento, soltando una de sus manos, manteniendo la otra en mi agarre.

—Vamoooos. —Emmett nos empuja hacia adelante, hacia los cinco escalones que nos lleva al escenario mientras anuncian nuestros nombres.

Salimos mientras los vítores estallan, y agitamos nuestras manos en saludo como es costumbre, a la multitud y los jueces. Con sus brazos sobre su cabeza y sus dedos en forma de una W, por los gatos salvajes* de Summit. Bella se ubica frente a mí.

Ni bien comienza la música, me agacho detrás de ella, mis manos en sus caderas, y la lanzo hacia un giro doble directo a Cupie.

Es complicado. No sé si es el sol, directo en mis ojos, o mis nervios, o qué, pero ella aterriza en mi pecho, en vez de un Cupie. Tengo que usar ambas manos para levantarla. Doy varios pasos para encontrar el equilibrio también.

Muchas deducciones.

La bajo, y ella se prepara frente a mí, golpeteando sus dedos en mis muñecas, mis manos en sus caderas, antes de dejar una en su espalda para la mortal libre atrás con un brazo. Cupie a la izquierda, la cual consigo ejecutar, jodidamente tembloroso, pero lo hago.

Hay un doble que arruino luego. Ella aterriza de nuevo al nivel de mi pecho, y tengo que levantarla, lo cual es mucho más difícil que cuando aterriza sobre mi cabeza desde el primer momento.

En la transición al spagat, ella me mira. «Está bien», articula antes de voltear con una sonrisa para saludar y mirar a los jueces.

Entonces, gira hacia mí y se prepara para la mortal hacia adelante con giro. Incluso el de los Heelys fue mejor que este.

Estoy jodidamente molesto conmigo mismo mientras mis brazos tiemblan e intento levantarla. Entonces, el Lib completo aterriza en mi pecho… de nuevo. Mis brazos están muertos, y apenas logro levantarla antes de que ella se baje para el final de nuestra rutina.

—Mierda. —Exhalo mientras ella saluda y vitorea frente a mí. Entonces voltea hacia mí, sus brazos alrededor de mi cuello, abrazándome. La abrazo con todo lo que tengo—. Lo siento —le susurro al oído.

—Está bien —dice, sosteniendo mi mano mientras bajamos del escenario. Emmett me da unas palmadas en el hombro mientras bajamos los escalones.

Suelto un gruñido cuando estamos fuera de la vista. Alguien me tiende una botella de agua, la cual lanzo al suelo. Giro hacia Bella, quien está mirando al suelo, sus manos en sus caderas, su respiración acelerada, probablemente decepcionada de mí también.

—¡Oye, esa fue una buena batalla! —dice Emmett entre nosotros, tratando de animarme—. Es mucho más difícil salvar una elevación imperfecta que lograr una perfecta.

—Fallé.

—Eso está bien —insiste—. Te lo sacaste de adentro. Y aún así, no dejaste caer tus elevaciones. Calificarán para las finales, y les mostrarán quién manda mañana. ¿De acuerdo?

Exhalo bruscamente e intento contener la furia que me consume.

—Swan, ¿estás bien? —pregunta Emmett, y entonces la miro de nuevo. Ella está mirando al suelo aún, pero tiene una mano apoyada en la pared. De repente, todas mis preocupaciones sobre mi presentación desaparecen.

Bella no está bien.

—Oye… —Me acerco a ella.

—Solo me siento un poco mareada —dice suavemente mientras me agacho frente a ella. Sus ojos están cerrados, y usa una mano para tratar de arreglar los mechones de cabello que se han escapado de su coleta.

—De acuerdo, ven aquí. —Envuelvo un brazo a su alrededor mientras Emmett y yo la guíamos lejos del bullicioso detrás del escenario hasta que encontramos un banco en la sombra donde ella puede sentarse.

Está abanicándose el rostro con una mano, sus ojos aún cerrados. Emmett se acerca con una botella de Gatorade y se la tiende a Bella. Bella solo prueba un sorbo antes de devolverla.

—Vamos, bebe un poco más —insisto, acercándole la botella, pero ella levanta una mano.

—Estoy bien.

—Swan…

—Cullen… —Abre los ojos con una sonrisa, sus mejillas recuperando el color—. Me estoy sintiendo mejor, lo prometo. Creo que tienes razón. Es el calor.

¿El calor? Ella ni siquiera está sudando.

—No te preocupes por ello, por favor. —Su tono es tranquilo y sereno, lo opuesto a cómo yo me siento.

Resoplo y me siento a su lado, mis codos sobre mis rodillas.

—Gracias, Oso —le dice a Emmett.

—Ustedes, niños, me darán un ataque al corazón —dice Emmett, bebiendo el Gatorade—. ¿Están bien?

Bella se ríe a mi lado mientras junto mis manos entre mis piernas, observando mis puños.

—Lo estamos. —Bella es la que contesta, dándome un codazo suavemente—. Lo hicimos bien.

—Me perdí en mi cabeza. Lo siento. —Volteo hacia ella y veo la sonrisa genuina en su rostro.

—Está bien… —Desliza una mano por mi brazo—. No dejamos caer ninguna elevación. Vamos a calificar para mañana.

—Fallé el primer Cupie.

—No pasa nada —dice con una risita, enlazando sus dedos con los míos.

—¿Estás segura que estás bien? —Mi corazón late más rápido dentro de mi pecho, y mi cabeza retumba mientras intento suprimir los pensamientos oscuros que amenazan con entrar en mi mente. Si algo le hubiera pasado, jamás me lo hubiera perdonado.

—Estoy bien. —Presiona sus labios rápidamente contra los míos mientras Emmett se queja.

—¿Podemos regresar a una sala con aire acondicionado?

—Ella asiente suavemente, intensificando el agarre de sus dedos alrededor de los míos mientras se pone de pie.

—La entrenadora probablemente nos esté esperando.

Regresamos al detrás del escenario y encontramos a Phil detrás de las barreras de seguridad, esperándonos.

—79.61111 —es lo que dice mientras caminamos hacia él, Renée detrás de él, alentando y agitando una bandera de Summit en nuestra dirección. Supongo que no nos fue tan mal como creí. Estaba seguro que nuestra calificación bajaría a los cincuenta—. Apenas en los primeros diez. —Phil me mira, claramente decepcionado, pero lo dejo pasar.

Honestamente, no me importa lo que piense. Mi único propósito ahora mismo es llevar a Bella adentro donde pueda comer algo, asegurarme que se sienta bien, y entonces prepararnos para la presentación de nuestro equipo.

—Suficiente para calificar para las finales —dice Bella. No es una pregunta.

—Probablemente. —Phil se encoge de hombros.

Estoy molesto, por supuesto, y decepcionado de mí mismo también. Hemos ejecutado esa rutina, considerablemente mejor que hoy, al menos las últimas cincuenta veces que la hemos practicado. Apesta que haya salido mal el día que importaba. Pero tendremos una segunda oportunidad mañana. Y no dejaré que nada me lo impida.

~F~

Comemos y nos relajamos en el hotel, descansamos por un par de horas, antes de tener que prepararnos para irnos con nuestro equipo de nuevo.

Bella parece estar bien. Está callada, concentrada, y permanece a mi lado.

No siento los nervios impactarme tan fuerte esta vez cuando nos preparamos detrás del escenario y nos reunimos con nuestro equipo. Quizás sea porque mis compañeros están conmigo, y entonces no será tan evidente si la cago. Quizás sea porque ya he estado en el escenario y ya sé cómo se siente, así que puedo dejar atrás mis miedos. O quizás mi mente está demasiado preocupada con Bella, quien no luce realmente al cien por ciento.

Ella dice que está bien cada vez que le pregunto, pero me preocupo al mismo tiempo que la entrenadora Hale nos llena de entusiasmo y emoción, y nos envía al escenario.

La multitud grita por nosotros mientras entramos, nuestro Equipo B, justo al frente, nos alienta más fuerte que todos.

No miro a nadie en particular. Estoy concentrado en ejecutar mi rutina, mi atención en Bella mientras se mueve por el escenario.

Las cosas transcurren rápidamente cuando comienza la música.

Los pases gimnásticos van bien, así como nuestras primeras elevaciones, subidas con giro doble perfectamente sincronizados por las cinco parejas de elevaciones.

La pirámide es impecable, también. Todos son perfectos.

Nuestras canastas hacen que la multitud enloquezca y después del resto de las pasadas gimnásticas y coreografía, las mortales libres atrás a un brazo le da un perfecto final.

Entonces, terminamos.

Estoy muy seguro que obtuvimos el cero. Cero deducciones. Y todos enloquecen cuando terminamos. Estoy sin aliento mientras abrazo a Bella, pero tan, tan feliz y aliviado.

Definitivamente calificamos para las finales, y es una gran dosis de seguridad haberlo hecho tan perfectamente.

Todos están gritando mientras bajamos del escenario, siguiendo los pasos del otro, pero Bella le da un apretón a mi mano, jalándome hacia atrás antes de alcanzar los escalones.

—No me siento bien —susurra, apoyándose contra mí mientras permitimos pasar a nuestros otros compañeros a nuestro costado.

Envuelvo un brazo a su alrededor, ayudándola a bajar los escalones, antes de que colapse en mis brazos, atenas dándome una oportunidad de atraparla.

—¿Bella? —La cargo y bajo los escalones, el humor del equipo cambiando por completo mientras se dan cuenta de lo que ha pasado. Se juntan a nuestro alrededor, mientras la entrenadora y Jasper caminan hacia nosotros.

—¿Qué pasó? —me pregunta la entrenadora mientras Jasper ya está alertando a los paramédicos que se encuentran cerca.

—No lo sé —digo frenéticamente mientras ellos me instruyen que la ubique en el suelo—. Simplemente colapsó. —Bajo su cuerpo flácido con cuidado, sosteniendo su cabeza y arrodillándose en el suelo.

En los siguientes segundos, los paramédicos en el lugar revisan su pulso, la conectan a una máscara de oxígeno, y la colocan en una camilla. Ella está respirando, creo. Y escuché a uno de ellos decir que tiene pulso. Pero ella no despierta.

No mientras estoy allí, con mi mirada en ella y mi corazón en mi garganta.

Mientras se la llevan, me impactan como un tren de carga. Todos esos pensamientos que he estado tratando de suprimir. Todo es un borrón entonces. La entrenadora está hablando por teléfono con Phil mientras simultáneamente le da instrucciones a Jasper para que lleve al equipo de vuelta al hotel.

Permanezco al lado de la entrenadora. Ni siquiera tengo que decir algo. Ella sabe que no regresaré al hotel. Iré con ella. Al hospital. A Bella.


*Frases de la canción Lose Yourself de Eminem. Palms are sweaty. Mom's spaghetti.

*W de Wildcats, gatos salvajes en español.


Si quieren ver como es una presentación de elevaciones en pareja en la competencia, díganme y lo comparto en el grupo :)

¡Gracias por leer!