He empezado a considerar la posibilidad de crear seriamente la página de Facebook. Aunque siento que quizás lo mejor sea por el momento recibir mensajería privada con los comentarios que tengan sobre los capítulos. Al menos mientras preparo todo. En fin, eso lo iré viendo en lo que acaba la semana.
Hasta entonces, LET'S READ
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
Capítulo 49: Comandante
La Princesa Celestia nos dio el resto del día a mí a los otros Pegasos que tuvimos que volar hasta el Reino Cambiante esta mañana. No puedo decir que no esperaba verla enojada. Pero creo que simplemente aún no dimensiono todo el rompecabezas en el que ella y su hermana están metidas.
Flash - Ugh... Necesito un trago.
A medida que avanzo por las diferentes alas del castillo noto mis alas agotadas comenzar a quejarse tras el efecto de la adrenalina de estar volando a alta velocidad por más de diez minutos.
Aunque el castillo está funcionando sin muchos problemas por ahora, puedo aún notar al personal de la limpieza mostrándose paranoico por la supuesta petición de la Princesa Luna de comenzar a despedir masivamente al personal.
Algunos se encuentran limpiando con cautela, mirando a todos lados como si hubieran robado algo. Mientras tanto, otros más solo se dedican a aprovechar sus breves descansos para comenzar a rellenar formularios de hojas de vida, aparentemente preparándose para lo peor.
Flash - La Princesa Luna estaba organizando un asunto con el Reino Cambiante. Por favor, si van a actuar como locos al menos asegúrense de no parecer criminales o tendré que interrogarlos.
Digo desde el final del pasillo mirando a los sirvientes que se muestran bastante más aliviados, un par incluso cae al suelo cuando toda la tensión en su cuerpo desaparece por mis palabras.
Sé que no tardarán mucho en comenzar a esparcir mis palabras entre los miembros del personal que no estaban presentes. Yo por mi parte me dirijo a los vestidores, el día ha sido lo suficientemente largo como para que no me importe realmente el pulir mi armadura o peinar mi melena después de quitarme el casco.
Para cuando termino con eso y estoy preparando mis alforjas para regresar a casa escucho la voz de uno de los guardias.
Moonstone - Ah, Comandante Sentry. Yo y los muchachos iremos al Nimbus, ¿Nos acompaña?
Buster - Oye, sabes que el Comandante no es un alcohólico idiota como tú.
Dicen mientras comienzan a molestarse el uno al otro, haciendo que sonría un poco.
Flash - No se preocupen, justamente tenía ganas de beber algo y oír al viejo hablar de como en sus "días de gloria" todo era mejor que hoy. Los acompaño.
Digo para sorpresa de ambos, que rápidamente sonríen al verme dispuesto a acompañarlos.
Flash - Pero no esperen que les dé nada, iré por un trago, no a emborracharme.
Añado como pequeña broma mientras los otros guardias solo pasan el resto del camino haciéndose bromas, mirando a algunas yeguas a las que futilmente intentan invitar a beber con ellos y haciendo bromas que harían parecer a los potros jóvenes auténticos maestros de la comedia.
Buster - ¡Oye, Linda! Mi amigo dice que le gustas.
Moonstone - ¡Cállate, tonto, tu madre se pondrá celosa si se entera!
Niego con la cabeza a la par que sonrío, caminando por las calles de Canterlot mientras lentamente nos acercamos a nuestro destino.
Los aromas penetrantes de los perfumes rebajados con agua y la comida insípida inundan mi nariz cuando pasamos cerca de una de las áreas concurridas, lentamente convirtiéndose en un amasijo de aromas picantes y grasosos que me avisan que hemos llegado.
En el interior puedo ver a varios cadetes de la guardia, así como otros oficiales que están pasando un buen rato acompañados de algunos amigos activos o retirados.
Moonstone - Nimbus, Vejestorio acabado, Una ronda de sidras para mí y mis amigos.
Dice mientras llegamos a la barra, a la par que el mencionado pony anciano solo se muestra molesto por la presencia de los guardias que me acompañan.
Un ojo verde agua hace par con uno totalmente blanco a causa de una profunda herida, su melena grisácea solo resalta las arrugas de su cuero purpura oscuro, junto a la falta de algunos dientes. Aunque ahora viejo, puedo ver sus casi cuarenta años de trayectoria en la guardia cuando consigue arrojar una nuez justo a la garganta de Moonstone cuando estaba listo para volver a hablar, apenas usando las plumas de una de sus alas
Nimbus - Moonstone, te faltan veinte años y dos patas rotas para poder hablarme así.
Buster - ¡Oye no lo mates! El idiota me debe cuarenta bits por cubrirlo ayer.
Su grave voz me recuerda mucho a la de mi abuelo antes de fallecer, por lo que solo sonrío con nostalgia al ver como maltrata a mis acompañantes.
Nimbus - Y en cuanto a usted, señor Comandante. ¿Qué lo motivó a hacer más prestigiosa mi taberna con su presencia?
Aunque es obvio que trata de seguir el hilo de comportarse como un viejo cascarrabias puedo ver que logra verme con cierto respeto.
Flash - Un día largo, y ganas de ver a un viejo amigo de la familia, Nimbus.
El pegaso anciano me mira con su único ojo antes de servirnos las bebidas con un poco de mejor humor mientras Moonstone es ayudado por Buster para que no tenga efectos secundarios por tragarse una nuez sin masticar.
Nimbus - Oí que algunos sirvientes se volvieron locos, empezaron a decir que los iban a despedir a todos.
Rio ampliamente mientras miro mi jarra con sidra.
Flash - Ya sabe como son los sirvientes. Les dices hámster y ellos gritan oso.
Ambos nos reímos por la pequeña broma antes de que deba bajar un poco mi cabeza por un pequeño pensamiento que nubla mi mente.
Nimbus - anda, si te emborrachas siendo jefe te sacarán de la línea. Escupe lo que te preocupa ahora que estás sobrio.
Menciona algo preocupado, haciendo que piense un poco en si comentarle o no lo que aqueja mi mente. Finalmente, tras un minuto, le doy un trago a mi bebida antes de suspirar pesadamente.
Flash - Bueno, me preocupan las Princesas. Ambas han estado actuando muy distantes, como si estuvieran peleadas.
Nimbus - Bueno, eso es algo que ha pasado desde mis días mozos, muchacho.
Flash - Sí, pero ahora es diferente, la Princesa Luna está muy molesta, casi sentía que me cortaba la cabeza esta mañana. Y bueno, la Princesa Celestia lleva meses que parece muy estresada por todo, casi todo el día está meditando o durmiendo.
Digo mientras mis palabras se empiezan a escuchar ligeramente más pesadas que de costumbre. Es normal que en este sitio los guardias hablen de lo que les preocupa, pero supongo que hablar tan abiertamente de las princesas si no está mal visto, por lo menos es un tabú. Por esa razón los muchachos en la barra se excusan un poco para irse a sentar a otras mesas, dejando la barra casi sola para mí y el viejo, que solo sonríe como si supiera cómo arreglar mis preocupaciones.
Nimbus - Supongo que tengo algo de tiempo ahora. Así que dime, ¿Qué te cuento?
Pregunta haciendo que mi mente se llene de recuerdos de cuando era un potro, viéndolo a él y a mi abuelo charlando en el patio antes de que yo llegara a hacer una única petición.
Flash - Cuéntame una historia. Una de ti y mi abuelo.
