Corrieron un largo trayecto, esquivando proyectiles de las criaturas voladoras que los acechaban, a lo lejos, el erizo vio lo que parecía ser el cementerio.

-Por allá-grito Miles -Ve al cementerio-dijo mientras descendía con Kitsunami

El erizo corrió con toda su velocidad, dejando maravillados a ambos Kitsune. El cementerio al parecer había recibido ese nombre por contener armaduras, huesos y armas regados por todo el terreno. Sonic busco rápidamente una espada que estuviese en buen estado.

-Ahí vienen -dijo Miles mientras apuntaba a los demonios voladores que se dirigían hacia ellos.

Sonic corrió a gran velocidad con la espada robada y corto la cabeza de uno de los demonios. Esto hizo que los otros dos se digieran hacía él, en vez de a los zorros. Rápidamente corrió hacia una gran pared de piedra para poder alcanzar más altura. Al tener la altura buscada, con sus piernas se impulsó dando un gran salto, eliminando a las otras 2 criaturas. Rápidamente se dirigió a los Kitsunes.

-¿Están Bien?-dijo el erizo azul mientras se acercaba corriendo. Vio como Kitsunami se colocó frente a Miles, lanzándolo hacia atrás y dejando salir 5 colas largas.

-No te acerques…-dijo Kitsunami

-¿Qué?-

-Mira Kit…-menciono Miles emocionado

Kitsunami y Sonic dirigieron su vista al cementerio. Los muertos prácticamente regresaban a la vida.

-Ese fue un ejército real que fue consumido acá en el inframundo, robaste su espada…te metiste con ellos- Kit anunció con molestia -Acaso nunca has escuchado que los muertos no deben de ser perturbados-

-Un minuto, ustedes me dijeron…-

-Ups…-dijo Miles -Supongo que se me olvido ese pequeño y minúsculo detallito-

El ejército se abalanzo sobre el erizo azul, quien se disponía a herirlos y partirlos, para ver que estos rápidamente se recuperaban. El erizo continuaba defendiéndose y atacándose.

-¿Cómo rayos me deshago de ellos?- grito molesto

Vio como uno de los soldados se dirigía hacia los Zorros. Kitsunami lo tomo con 2 de sus colas, partiéndolo por la mitad y manteniendo ambas mitades separadas.

-No puedes…van a continuar hasta matarte-Tails

-A menos que tengas algo sagrado-dijo el Zorro Azulado mientras seguía destruyendo soldados con sus colas.

Sonic corrió hacia una roca alta y examino la funda de espada que le otorgaron antes de ser exiliado. Fue entonces cuando inspeccionó la cinta roja que envolvía la funda negra, no era una decoración, al parecer era una cinta amarrada a la funda ¿Pero por qué?

-Oye Idiota, detrás de ti-le grito Kitsunami

El erizo se volteo y vio como casi era cortado por un hacha. Esquivo y con un salto llegó a un punto alejado de donde se encontraba el ejército, lanzando la espada que había robado.

-¿Oye? ¿Acabas de ayudarlo? -dijo Miles viéndolo con una sonrisa

Kitsunami se sonrojo y lanzo a lo lejos a todos los soldados. -Cierra la boca Miles…-

Lentamente desenvaino la espada nuevamente pero no tenía ninguna hoja metálica. Volvió a enfundar.

¿En serio la familia real lo había dejado a su suerte sin un arma? Claro, no estaba en posición de exigir, pero necesitaba pensar en cómo deshacerse del ejército.

Ante él llegaba con gran velocidad un cadáver con una lanza, lanza la cual el movió con una patada, rápidamente con sus manos giro de manera que pudiese dar otra patada al cadáver y mandarlo a volar.

-Espera Kit mira…-dijo el Zorro amarillo apuntando a uno de los soldados

Un soldado, cuya armadura revelaba que era un capitán de alto rango, llevaba algo amarrado a su cintura.

-Es hilo de seda real, es lo que necesito para el brazalete de la verdad-menciono Miles

Sonic escucho y vio al capitán, rodeado de varios de sus soldados. Tomo la lanza y empezó a correr hacia el capitán. Con la punta de la lanza estocaba y lanzaba a quien se le opusiese, continúo limpiando el camino hasta llegar al cadáver del capitán que tenía un mandoble. Sonic rápidamente esquivó el ataque y estocó el cadáver, pero al parecer era más pesado que los soldados. Otros soldados se acercaban rápidamente con espadas y mazos. Sonic halo la lanza, para volver a lanzar lejos a los soldados, mientras esquivaba los ataques que él capitán trataba de asestar con un mandoble. Sonic empalaba a los soldados y los lanzaba a los lejos, para limpiar el campo de batalla y así enfrentarse al Capitán sin ninguna distracción. Al repetir sus acciones de estocar y lanzar, la lanza estaba cediendo, por lo que con una rápida barrida en el suelo, hizo que el capitán perdiera el equilibrio haciéndolo caer. Con la lanza, lo atravesó, clavando la lanza en el suelo, atrapando al Capitán en el suelo.

Tomo la funda, la cual tenía la cinta rojiza envolviéndola y atravesó con esta el cráneo del capitán. Poco a poco el ejercito fue cayendo al piso, formando nuevamente el cementerio de restos.

-Fue muy listo…-dijo Miles

Kitsunami frunció el ceño.

-Muy bien, creo que ya podemos…-Sonic sintió un dolor terrible en su cuerpo, lo hizo caer de rodillas. Sintió como sus garras y colmillos se alargaban. Sintió como si sus púas fuesen haladas con gran fuerza. Poco a poco el dolor disminuía. Los kitsunes se acercaron a él.

-No estuvo tan mal- dijo Miles observándolo

Sonic lentamente se levantó y observo sus nuevas garras y sintió unos colmillos molestos.

-¿Qué rayos me paso?- dijo el erizo

-Estas en el inframundo sin una máscara, te estas transformando en un Akuma, era tarde o temprano que tendrías estos síntomas- dijo Kitsunami

-Lo bueno es que conseguimos lo que buscamos-dijo Tails mostrando el hilo -Kit, ¿Puedes llevarnos hacia las cuevas de cristal de sangre, necesito una gota-

Kit suspiro y rodo los ojos -Siganme-

Amy pidió información a sus sirvientas para encontrar a su padre, pero al parecer este se encontraba ocupado. Una de sus sirvientas le indicó que él la visitaría a la brevedad en su recibidor. Amy se quedó esperando de manera ansiosa, la llegada de su padre.

La puerta se abrió y mostro a su padre, quien pidió que los dejaran a solas. Este portaba en su mano derecha una funda de espada con adornos de Sakura.

-Amatsu, ¿puedo saber que necesitabas, que necesitabas mi presencia de manera urgente?-

Amy se retiró la máscara.

-Quiero saber sobre Sonic… ¿que fue de él?-

Observo el rostro de su hija. Sus ojos mostraban determinación y cierto enojo.

-El condenado sufrió el castigo que su alteza real dictó-

-Tu…no lo heriste… ¿cierto?-dijo ella algo desafiante

Akihiro no contesto. -Aunque mi deseo por haber ejecutado un castigo más adecuado fuese muy grande…la condena de su majestad es absoluta…así que simplemente lo expulse-

Amy sintió como si sus pulmones nuevamente emprendieran la respiración. Aún así, no se sentía del todo aliviada, pues el erizo aún se encontraba atrapado en el inframundo.

Continuaban su camino en el inframundo. La distancia a los cristales de sangre no estaba muy lejos, y de momento el camino se miraba despejado. Kit caminaba delante, mientras el zorro amarillo mantenía su paso con el erizo azul, observando su espada.

-¿En serio no puedes usar esa espada?-pregunto Miles

Sonic le observo. Tenia una mirada curiosa sobre él. – No-

-Una espada así te beneficiaria mucho acá – dijo el zorro amarillo alegre

-Miles…-dijo Kit haciendo que su amigo desistiese con las preguntas.

-¿A que te refieres?- dijo el erizo azul

-Bueno, esa espada parece forjada por un artesano especial- dijo Miles con cierta confianza

-En fin…- dijo el erizo llamando su atención -He venido hasta acá con un obsequio por tu bienvenida Amatsu- dijo mientras extendía la Katana hacia la eriza. Amy extendió sus brazos para recibir la Espada.

-Pedí que forjaran esta Katana en conmemoración por tu regreso. Fue forjada por un artesano celestial que sirve al palacio del sol, por lo que es un arma superior a cualquiera existente en el mundo espiritual-

Amy examinaba la funda, la cual se miraba muy hermosa para tratarse de una espada. Al colocar su mano en el mango, con intención de desenfundar escucho como su padre continuo.

-¿Sabes como hacerla funcionar?- pregunto Sonic

Tails mostro una sonrisa traviesa. Kitsunami se detuvo y lo volteo a ver.

-Antes que procedas a ver la hoja…debo de realizar una advertencia-continuo el príncipe -Este tipo de espadas van más allá que un simple metal forjado, su filo y resistencia es muy superior. Para revelar el filo de la espada, esta leerá tu cuerpo, tu alma y tu corazón.

-¿A qué te refieres?-

-Esa espada solo puede mostrar su filo si la dejas conocerte a fondo-dijo Miles desinteresado

-Miles, ¿Estas demente? - dijo Kitsunami molesto -¿Por qué rayos le respondes?-

Miles rio y rasco su cabeza con su mano derecha -Lo siento Kit-

-Escuchen bien, ambos no van a intercambiar ninguna palabra hasta que lleguemos a conseguir el cristal de sangre-dijo Kitsunami amenazando a sus compañeros.

-Entonces, ¿Es así como funciona? - preguntó la eriza rosa después de la explicación de su padre

Akihiro asintió -Si no te importa, me gustaría quedarme y ver la espada una vez la desenvaines. Es importante admirar como será la hoja que portará-

Amy observo la espada. Por una parte, ella también sintió curiosidad. Sin embargo, luego de la explicación de su padre, estaba segura de algo.

-Me temo que aun no puedo hacerlo-dijo ella con semblante triste. La fina espada que se encontraba en sus manos probablemente sería una de las armas más admirables que existían en ese mundo, pero su corazón no se encontraba en condiciones para que esta funcionase.

Akihiro se puso de pie lentamente.

-Eventualmente podrás hacerlo- dijo Akihiro dirigiéndose a la puerta -Cuando lo hagas, tendrás en tus manos tal vez una de las armas más poderosas y eficaces de todas- dijo mientras salía de la habitación.

-Llegamos-dijo Kitsunami -Muy bien Miles, haz lo tuyo-

-Entendido-dijo el zorro dirigiéndose al jardín de cristales

Sonic aun no lograba entender como 2 zorros con actitudes diferentes eran compañeros. Luego dirigió otra vez la vista a la funda de la espada que le fue entregada. Movió su dedo gordo, justo bajo el guarda de la espada. Realizo un movimiento que pudiese apenas desenvainar la espada, pero ninguna hoja se mostraba. Aún no entendía lo que el zorro amarillo había mencionado.

-Listo- dijo Miles dirigiéndose hacia ellos

Sonic rápidamente enfundo la espada.

Miles mostró un brazalete, el cual se entrelazaba con el hilo rojo y otros hilos dorados. Portaba varios cristales rojizos pequeños, probablemente parte de los cristales de sangre.

-Muy bien-dijo Kitsunami tomándolo y tomando con brusquedad la muñeca del erizo azul, el cual le dio una mirada con cierta ira -¿Qué? Es para colocarte el brazalete. Nuestras preguntas van primero-

Sonic suspiro. Sintió cierto dolor en su muñeca, como si se clavara un brazalete de agujas. Una vez Kitsunami coloco el brazalete, se separó de él -Bien, el amuleto funciona de la siguiente manera, nosotros haremos las 10 preguntas, debes de responder con sinceridad o si no…-

-El brazalete te va a matar-dijo Tails tan alegre y tranquilo, interrumpiendo a Kistunami

-¿Qué?-dijo Sonic sorprendido

-Solo te matara si no contestas las preguntas con sinceridad o te niegas a contestar- dijo Kitsunami desinteresado

-Y luego ustedes lo usaran ¿No? – pregunto el erizo

Kitsunami lo observo. -Vas a tener que elegir a uno de nosotros para que responda tu pregunta, no podemos ser ambos. Bien Miles-dijo Kitsunami-Tu primero-

Tails sonrió. -Muy bien- dijo acercándose al erizo –Dinos porque fuiste expulsado del castillo de Amaterasu-

-Ella…me dio una misión, debo de encontrar un objeto que al parecer se encuentra acá en el inframundo y solo 3 días para lograrlo-

-¿Solo 3?-dijo Kitsunami

Tails rió -Bueno al menos estás a punto de lograr sobrevivir un día acá y eso es mucho-

-Bien sigo yo-dijo Kitsunami en tono serio mientras veía al erizo – ¿Cuál fue la razón de tu condena? -

Sonic tomo aire y suspiro algo derrotado -Violé un decreto real-

-¿Qué decreto?-dijo Tails emocionado por saber más. Kistunami lo observó regañándolo silenciosamente por haber gastado la tercera pregunta

-Debía de dirigir a la nieta de Amaterasu al palacio real y no lo hice-

Ambos zorros intercambiaron miradas

-¿Cómo fue que tu conociste a la nieta de Amaterasu?-preguntó Kit

-Yo la salvé y la lleve al mundo espiritual… cuando era mortal…-dijo algo desconfiado por la pregunta

-Osea que la guardia real te siguió ¿A cuántos soldados mataste? -dijo Tails emocionado

-Creo que, a ninguno, solo…trataba de herirlos para que no fuesen capaces de seguirnos- dijo Sonic tratando de recordar bien sus batallas contra los guardias reales

Tails agacho las orejas, algo decepcionado por la respuesta, mientras cruzaba los brazos.

Kit se miraba también molesto.

-No lo entiendo…violar un decreto real es imperdonable, ¿Por qué rayos…?-Kit se detuvo abriendo los ojos. Tails rápidamente lo observo, entendiendo lo que Kit estaba infiriendo.

-¿Qué relación tenías tu con la nieta de Amaterasu?- dijo Kit de Manera seria la sexta pregunta

Sonic los observó. Esa pregunta era un tanto personal. Tomó un par de minutos para pensar bien que respuesta dar.

-Solo fui su escolta-

Sintió como mil agujas se empezaban a incrustar en su muñeca. El dolor lo hizo caer de rodillas.

-Mientes-afirmaron ambos zorros molestos

-No estoy…mintiendo-dijo el erizo mientras instintivamente llevaba su mano libre hacia el brazalete

-Más vale que contestes bien o esa cosa te matará- dijo Kitsunami molestó

¿Qué rayos debía de responder? Tenía que dar una respuesta pues el dolor aumentaba y poco a poco se expandía por el brazo.

-Ella me pidió…escoltarla por el mundo espiritual…y no regresar el palacio- El dolor rápidamente evolucionó volviéndose peor. Sonic apretaba sus nuevos colmillos mientras se retorcía de dolor

Tails estaba con una sonrisa -Oh vaya, aún no he perdido el toque ¿Ves que funciona muy bien? -

Kit observo con desinterés a Miles y luego al erizo.

-Tal parece que prefiere morir…-dijo Kitsunami

-Ella… me… gustaba…-dijo Sonic tratando de ignorar el creciente dolor. Este se detuvo de golpe, haciendo que el erizo comenzara a respirar agitadamente y viese su mano, quien pensó que con el dolor que había sentido estaría destrozada, pero se encontraba normal.

Miles empezó a reír mientras Kitsunami se cruzó de brazos y levantó una ceja.

-Miles, te toca- dijo Kitsunami

El zorro detuvo su risa y vio al erizo azul, quien lentamente se ponía de pie.

-Veamos…-dijo Tails poniendo su mano en la barbilla, intentando pensar en una excelente pregunta – ¿Ella correspondió a tus sentimientos? -

Sonic agachó las orejas. Recordó todos esos buenos momentos que tuvo con ella, los festivales, las salidas a comer, cuando ella lo abrazaba al conseguir vencer algún desafío o simplemente se dedicaban una sonrisa mientras contemplaban las estrellas. Luego la recordó cuando se encontraba ante la familia real. Ella no se inmutó. No le dirigió una palabra. ¿Acaso ella había rogado piedad por él o su llegada al palacio la obligó a tomar su rol de princesa en serio?

-No lo sé…-dijo el erizo desviando la mirada.

Ambos notaron el cambio de semblante del erizo.

-Si lograses culminar tu misión acá…-preguntó Kitsunami gastando la octava pregunta –¿Tu regresarías con ella? -

Mantuvo el silencio por unos minutos. -Aun si decidiese hacerlo…creo que no podemos estar juntos- dijo el erizo azul algo serio – Es obvio que no soy bien visto por su familia-

-¿Entonces porque quieres completar la misión de Amaterasu? – preguntó Miles lanzando la ultima pregunta que el tenía, para dejar disponible la décima pregunta a Kit.

Esa pregunta lo desconcertó.

Si el vencía la prueba, su vida sería perdonada. Su familia tal vez no podría acogerlo, dado que causo muchos problemas. Pasaría tal vez el resto de sus días vagando por el mundo espiritual, buscando algún propósito, pues había deshonrado su profesión, su familia…todo por ella…quien probablemente pasaría el resto de sus días codeándose con su familia, vestida por las mas finas prendas, comiendo los manjares más exquisitos y tal vez conociendo a alguien más adecuado para ella, alguien a quién su familia recibiría con los brazos abiertos.

El brazalete empezó a actuar, pues no había brindado una respuesta después de varios minutos en silencio. Esta vez el erizo trato de ignorar el dolor.

-¿No piensas responder?- dijo Kit

-Para ser sincero…no se si haya alguna razón en concreto para completar la misión- dijo el erizo algo desanimado

Kit se sorprendió con la respuesta.

-Podrías quedarte acá y convertirte en un Akuma…-dijo Miles con su semblante alegre

-Miles-dijo Kitsunami interrumpiéndolo

-Si duras muchos siglos acá puede que logres convertirte en un rey demonio o mejor en un dios demonio- dijo sonriendo mientras continuaba y pensaba en esa posibilidad

-Miles-repitió Kit

-Podrías tal vez buscar venganza en el mundo espiritual y…-

-¡Miles!- llamó Kitsunami

Miles se detuvo y observo al erizo, quien ahora conservaba un semblante sombrío mientras miraba el suelo.

El dolor que emitía el brazalete no había cesado.

-Aún no has dicho la respuesta correcta-dijo Kit viendo como el erizo trataba de ignorar el dolor

¿Por qué quería de completar la prueba? Tal vez muy en el fondo, esperaba que completando la prueba todo regresase a la normalidad…pero sabía que no sería así.

El dolor se volvió más intenso, sintiendo casi como que le estuviesen destruyendo el brazo. Poco a poco, estaba alcanzando su hombro y cuello. ¿Tal vez esto sería más misericordioso? Dejar que un tonto juego arrebatase su existencia para no continuar sus días vagando sin un rumbo y un propósito. Pero luego la recordó. Durante todos los días que paso con ella, se sintió satisfecho de verla disfrutar, sonreír y descansar. Ella siempre lo elogiaba por sus habilidades y conocimientos.

-Oye, ¡Oye!- dijo Kitsunami llamando la atención

-Oh vaya, que mal- dijo Miles cruzando los brazos

Recordó como ella lo rodeaba con sus brazos, en señal de felicidad, de saber que había regresado, o que había triunfado venciendo a un Akuma. Recordó cuando compartieron un beso, a la luz de la luna. Sintió una sensación de plenitud y felicidad. Ella tenía las mejillas rojas, algo desconcertada por lo que hicieron. El también se sonrojo y desvió el rostro. Tal vez se había excedido. Se disculpó por el atrevimiento e inclusive al verla nuevamente recordó que era la princesa nieta de la diosa del sol. Realizó una reverencia para disculparse nuevamente…pero fueron las palabras que exclamo lo que lo desconcertó más.

-Podemos… ¿Podemos hacerlo otra vez?-

El dolor ya se estaba extendiendo a su cabeza y pecho. Sus piernas estaban empezando a flaquear.

-Porque quiero verla una vez más-dijo con voz débil -Quiero despedirme y disculparme por los problemas que cause…-

El dolor dejo de extenderse y se detuvo. Instintivamente se puso una mano en el pecho. Ya no se encontraba en dolor, pero aun así…

-Kit te toca-dijo Tails aún con los brazos cruzados, algo desinteresado

-Para ser sincero ya no se me ocurre nada que preguntar-dijo Kitsunami desinteresado

-¿Qué?-grito Miles exaltado -Puedes preguntarle quién le dio esa espada, o que tipo de máscara portaba, o tal vez como fue que la perdió, o cuantos guardias personales de Amaterasu vio, o…-

-Ya basta- dijo Kitsunami molesto -Es obvio que tu tenías más preguntas para él-

-Bueno, ya sabes lo curioso que soy- dijo Miles mientras colocaba su mano tras la cabeza y reía nervioso

Kit observo al erizo azul. Este aún se notaba algo deprimido.

-Eso quiere decir…-dijo Kit viendo de reojo al erizo –¿Aun tienes sentimientos por ella?-

Una pequeña sonrisa se escapo de él. -Creo que sí-

El brazalete se aflojo del erizo. El erizo miro su muñeca, como el brazalete ahora estaba colgando.

Tails observó a Kit con una mirada acusadora.

-¿Qué?- dijo Kitsunami. El zorro azulado cerro los ojos y suspiro. -Bien Elige a quien le preguntaras-

Sonic observo a ambos zorros.

-Muy bien, te elijo a ti- dijo el erizo con una sonrisa, confiando que su decisión era la correcta.