-Grayfia ¿Cómo vas con tu análisis de los círculos mágicos de transferencia que ocupan estos magos?*Le pregunto Sirzechs.

-En unos minutos terminare el análisis para deshacer esos círculos…*Dijo Grayfia.

Sirzechs solo asintió ante ello mientras pasaba de nuevo a ver la batalla campal que se estaba dando en el campus de la Academia Kuoh.

Los cielos del lugar estaban envueltos en luces, como si de fuegos artificiales se tratase, mientras los demás luchaban contra el ejército de Magos acompañados de los soldados Ángeles, Demonios y Caídos.

En eso…

-¿¡Es el Vanishing Dragón!?*Gritaban los Magos mientras veían a la persona con armadura blanca y gemas azules, acercarse hacia ellos.

Gracias a la habilidad de este ser, estos no podían moverse a la velocidad que deseaban y se vieron atrapados por el mismísimo Dragón Blanco de la Supremacía.

-¡Noooooooo!*Los gritos de los Magos hacían de coro en el lugar, mientras el despiadado Dragón Celestial explotaba sus cabezas de un golpe o los partía por la mitad con sus alas al volar.

Vali solo suspiro con cierto fastidio mientras arrojaba el brazo que había arrancado de alguien; ni siquiera recuerda el momento en el que lo tomo, posiblemente al arrojar a una mujer lejos de su camino, ya que la extremidad parecía ser femenina. Igual, no importaba nada.

-No valen la pena…*Dijo haciendo desaparecer su armadura, quedándose únicamente con su Sacred Gear, Divine Dividing, las alas del Hakuryuukou. De repente, sintió una extraña y más llamativa presencia junto con otra cerca de la sala de reuniones*. Katerea…*Reconocería su aura donde fuera.

En ese mismo lugar, Akeno y Katerea habían comenzado a combatir entre sí, teniendo ambos un intercambio de ráfagas de gran poder que chocaban de tanto en tanto… Su batalla era intensa, en el ámbito mágico. Ninguna había logrado atinarle a la otra.

-¡Veamos de lo que eres capaz, Sekiryuutei!* Burlona, divertida y con menosprecio, Katerea se envolvería en su aura purpura con toques azulados, para así crear a su lado una gigantesca serpiente de agua.

-Digno de la descendiente de Leviathan…*Dijo Akeno con una media sonrisa.

Con eso, la invocación de agua de la Leviathan arremetió a atacar de frente a Akeno, quien algo aburrida alzo su mano envolviéndose en su aura. Cuando la serpiente de agua estaba a un par de metros de la hija de Barakiel, ella con su mano alzaría un círculo defensivo que emanaría fuego y la criatura de agua se evaporaría al impactar dicha defensa, creando vapor.

-Uuuummm. Nada mal…*Le dijo Katerea con sorna y cierto halago.

-Me subestimas, descendiente de Leviathan… Eso te saldrá caro…*Tras afilar su mirada aun debajo de la máscara, Akeno desaparecería a gran velocidad…

Katerea no pudo reaccionar ni expresarse ante ello, sino hasta que sintió un fuerte golpe en su estómago que le quitaría el aire y escupir algo de sangre, conforme era impulsada hacia atrás unos cuantos metros, mientras Akeno estaba en donde antes estaba la Leviathan.

-M-Maldita…*Katerea vio a la joven con rabia mientras se agarraba el lugar golpeado que incluso le quemaba. Debió de usar algo de luz en aquel golpe*. Esto me lo pagaras.

-Hmph… Ni te esfuerces…*Akeno se cruzaría de brazos sin importancia alguna*. Ni siquiera me estoy esforzando…*Ella incluso sabe que usar su Balance Breaker contra ella es innecesario, pero por ahora jugara con ella.

-¡No me menosprecies!*Con su aura, Katerea crearía dos serpientes de agua enormes.

-Te daré un golpe de realidad entonces…*Akeno se envolvería en su aura roja con rayos dorados a su alrededor.

La Leviathan mandaría al ataque a sus serpientes de agua y la Himejima que desciende de los Caídos contraatacaría con Dragones orientales de fuego.

Los ataques crearon una fuerte explosión al impactar.

Al disiparse el humo, Katerea crearía dos cabezas de dragón a sus costados y estas de sus bocas lanzarían densos torrentes de poder demoniaco contra la actual Sekiryuutei… Akeno solo contraatacaría con dos poderosas lanzas de luz que lograrían destruir aquellos ataques.

A pesar del humo creado, Akeno lanzaría varias ráfagas de color rojo contra su oponente; no necesitaba verla para atinarle, le basta con sentir su aura y presencia. Al incluso descender de un Clan con conexiones a lo espiritual, esto no es nada para ella.

Katerea, quien no se esperó eso, cuando vio aquellas ráfagas acercársele, creo un círculo defensivo frente a ella para mitigar el ataque… Si bien resistió, no salió ilesa del ataque, ya que tenía unas quemaduras en la ropa y su piel, mientras se disipaba el humo.

-¿Eso es todo?*Le cuestiono Akeno con burla, cruzada de brazos*. Que decepción… pensé que me darías más pelea.

Esas palabras retumbaron en la mente de la descendiente de Leviathan mientras esta miraba a la joven con odio puro… Esos ojos, ese tono… la mira como si fuera una simple larva… mirándola desde arriba… Eso es… ¡Intolerable!

-¡Te voy a matar!

Con su aura a su máximo, Katerea crearía una decena de serpientes de agua que cargaban ráfagas de poder en sus bocas, mientras estas iban en dirección de la usuaria del Dragón Celestial Rojo de la Dominación.

Akeno solo crearía una espada de luz envuelta en su aura roja y rayos, para después…

[¡Boost, Boost, Boost, Boost, Boost!]

Tras esos aumentos, dar un poderoso tajo que destruiría sin tantos problemas a aquellos entes de agua, cuyas masas de agua caerían al suelo, empapándolo.

-¿¡C-Como…!?*Katerea no podría decir algo más debido a que recibiría un golpe en la cara que la haría retroceder otros metros hacia atrás*¡Maldita!

-Esto es aburrido ¿Sabes?*Akeno se encogería de hombros. Lo anterior no fue tan necesario, solo quiso presumir un poco.

Katerea se molestó ante ello mientras volvía al ataque…

Mientras, en la batalla contra los Magos en el campus, estos no podían llegar hasta donde estaban los lideres Bíblicos ni tampoco pasar a los guerreros más fuertes de los tres bandos que cooperaban mutuamente contra un mismo enemigo, incluidos los soldados Ángeles, Ángeles Caídos y Demonios.

Vali, por su lado, tras eliminar a un buen número de Magos, vería como iba la batalla de Akeno contra Katerea y no era sorpresa ver que ella solo estaba jugando con la patética descendiente que no le llegaba ni a los pies a la anterior Leviathan que fue asesinada en la Guerra Civil Demoniaca, según la historia e información de Azazel.

Sabe que es solo cuestión de tiempo para que ganen, pero… Mejor no alargar esto de manera innecesaria, y más en el estado en el que están Azazel y los demás líderes Bíblicos… Total, no hay diferencia si es ahora o después.

Equipando de nuevo su armadura de Balance Breaker, Vali volaría hacia donde estaban los círculos mágicos de teletransportación de los Magos… Al estar frente a estos, las alas de su armadura se expandirían aún más mientras empezaban a brillar, y entonces…

[¡Half Dimensión!]

Tras ese comando, se vería como aquellos círculos mágicos de transferencia se redujeron a la mitad de sus tamaños, pero hay no acababa…

[¡Divide, Divide, Divide, Divide, Divide, Divide!]

Tras ese comando, finalmente los círculos mágicos de transferencia de los terroristas se deshicieron en el aire… Aquello fue notado por todos en el campus, incluidos los líderes y demás, donde los Magos se empezaron a horrorizar y su moral bajo casi por completo.

-Si podía hacer eso ¿Por qué no lo hizo antes?*Saji mostro su cierta queja ante aquello mientras soltaba un profundo suspiro por el cansancio.

-Mejor tarde que nunca…*Fue lo único que dijo Rias con indiferencia.

-Supongo que es mejor así…*Sona respaldo lo dicho por su amiga.

-¡Neutralicemos a los que quedan de ello!

Ante lo dicho por Irina, todos reanudaron su ataque contra lo que quedaba de los Magos, donde un buen número de estos decidieron pelear hasta el final.

-Ara, parece que todo termino…*Akeno pasaría a ver a la descendiente que parecía sufrir más por sus heridas mientras su aura seguía a su máximo, cosa que la intrigaba.

Después de todo, a pesar de que la supera, Katerea ha lanzado continuos ataques con todo su poder durante todo su intercambio, y su aura no parecía para nada debilitada por todo eso. Es como si su poder mágico no se hubiese agotado desde que lanzo su primer ataque ¿Cómo es eso posible…?

-[Yo también lo noto, Akeno… Hay algo más en todo esto, esto no es normal…]*Hasta Ddraig podía ver que había algo oculto en todo esto.

-Maldita sea…*Katerea vería como la mayoría de Magos estaban siendo apaleados y que para empeorar todo, un buen grupo de estos se resignaron a seguir por las buenas. Ella pasaría a ver al responsable de aquello, y…*¡Vali ¿Qué crees que…?!

-¡Oh, cierra la boca!*Rápidamente, Akeno le propino a la Leviathan un buen golpe en la cara que la haría retroceder y que escupiera sangre de su boca.

-¡Agh, maldita! ¿¡Que crees….!?*Katerea no pudo seguir hablando debido a que sintió algo fuera de lugar…*¿Cómo…?*Sintió que caía a tierra por efecto de la gravedad… era imposible… sus alas deberían…*¡Mis alas!

Katerea vio con horror que sus alas habían sido cortadas… ¿Cuándo? Eso no importaba… Ella cayó al suelo mientras los demás veían con asombro y algunos con admiración tal despliegue de habilidad de Akeno.

-Que increíble despliegue de habilidad…

-Creo que era de esperarse de la anfitriona del Welsh Dragón.

-Aun así, que envidia.

Kiba, Karlamine y Siris estaban asombrados por el poder y habilidad de Akeno… ese era un claro ejemplo de lo más alto en técnicas de espadas.

Mientras Katerea intentaba ponerse de pie…

-Se acabó…*Akeno aterrizaría a unos metros frente a ella*. Es hora de acabar con esto, indigna del linaje de Leviathan.

Esas palabras pegaron muy fuertemente en Katerea, quien no pudo decir nada más cuando la joven empezó a emanar un aura roja muy intensa con rayos dorados a su alrededor que haría temblar el lugar donde estaba…

Es más, el poder que se sentía era… enorme, era como tener a un Dios… No, tener a un Rey Demonio o Rey Dragón ahí… su aura tan temible para sus enemigos y cautivadora para sus aliados era un indicativo de ello.

-¿Qué…Qué eres?*Katerea sonó temerosa, un ser inferior, una patética Dragón, con este poder… era ridículo.

-Tu final…

Al dar un solo paso, Akeno desaparecería de la vista de todos para luego ir hacia Katerea a una velocidad divina y cegadora…

Katerea solo pudo volver a ver a la Himejima cuando esta estaba frente a ella mientras sentía un fuerte golpe impactar en su abdomen, sacándole todo el aire mientras este le quemaba un poco por el poder de la luz y su consciencia se apagaba poco a poco.

Con eso, tras que Akeno retirara su puño de ella, el cuerpo de Katerea caería al suelo, estando está completamente inconsciente.

-Listo…*Dijo Akeno.

-Los Magos ya fueron retenidos…*Vali descendió un poco, aun estando en el aire, mientras disipaba su armadura Scale Mail, con su Divine Dividing aun desplegado.

-Con esto detuvimos el ataque…*Dijo Sona con una sonrisa.

-Sí…*Asintió Akeno*. Pero esto aún no termina…*Dijo con seriedad.

-Tienes razón…*Dijo Rias con el ceño fruncido.

Fue entonces que la barrera de la reunión desapareció por completo, dejando a todos sorprendidos, excepto a Akeno, Vali y Rias.

-Al parecer decidieron deshacer la barrera una vez hayamos retenido a nuestros enemigos…*Dijo Vali sin expresión alguna.

-Veo que todo fue un éxito…*Desde su lugar, Azazel veía todo gracias a la pared destruida por el cuerpo de Katerea cuando Akeno la saco para pelear, al igual que los demás líderes.

Todos ellos sonreían felices de que los jóvenes hayan podido encargarse de la situación.

-¡Estoy tan feliz de que So-tan este bien! ¡De no ser por este maldito estado, la abrazaría y daría mil besos!*Dijo Serafall mientras se movía de lado a lado en su silla como máxima capacidad de movimiento que podría lograr.

-Sin duda fue bueno confiar en ellos…*Dijo Michael mientras sonreía.

-Sí…*Asintió Sirzechs.

Todos los líderes elogiaron el trabajo de los jóvenes, luego las demás chicas Sitri se acercaron a su ama y amigos, Ravel dormía en su lugar debido a lo que sea que la haya debilitado con su hermano, Raiser, estando a su lado, y Dulio Gesualdo e Ikuse Tobio se encontraban en el mismo estado que la 4ta hija de los Phenex.

-Ahora leeremos la mente de Katerea y llegaremos al fondo de todo esto, al igual que la información de esa organización…*Dijo el Rey Demonio Carmesí con un rostro más serio.

-¿No es ilegal ese método?*Pregunto la Rook Phenex, Isabella, sorprendida por lo escuchado.

-Dada la situación, no creo que debamos preocuparnos por ello. Además de que hay que descubrir quien traiciono a su facción y revelo la hora, lugar y propósito de la reunión…*Dijo Sona, para que Saji usara su Sacred Gear en Katerea y la dejara frente a todos.

-Eso no hará falta…*Dijo Vali, para luego voltear y ver sin expresión alguna a uno de los presentes.

Fue en ese preciso momento que todos notarían como un rayo concentrado de color rojo-negro fue disparado, sorprendiendo a todos.

Saji se adelantó para apartar a su ama, pero el impacto del rayo nunca llego a ellos.

Confundidos, todos vieron como Katerea Leviathan caía al suelo con un gran agujero en su pecho, donde estaba su corazón.

Todos miraron al cadáver mientras un círculo mágico aparecía en su espalda. Todos se sorprendieron al identificar la escritura del que estaba hecho el mismo. Era el idioma de los Dragones…

Este no solo era un círculo muy extraño, la energía del mismo erizo la piel de los líderes, mientras que en el centro del mismo había un extraño emblema de dos serpientes entrelazadas mordiéndose la cola, formando con sus cuerpos el símbolo del Infinito.

-[No puede ser…]*Susurro Ddraig al ver ese símbolo.

Akeno miro con los ojos entrecerrados el cuerpo de la descendiente de Leviathan, para luego mirar a la responsable de tal acto…

-Rias Gremory…*Dijo ella con el ceño fruncido para que la pelirroja bajara su brazo, pues había apuntado con este a la mujer demonio.

-¿¡Rias!?*Grito Sona con incredulidad al ver lo cometido por su amiga de años, lo que acababa de hacer era algo inimaginable.

-Asesino con suma facilidad a la única pista que teníamos…*Dijo Gabriel entrecerrando los ojos tras lograr sentir algo en el corazón y emociones de la heredera Gremory.

-Rias ¿Qué significa esto?*Le pregunto Sirzechs desde su lugar, también muy incrédulo por lo ocurrido mientras que Grayfia a su lado no sabía ni como expresarse por todo esto.

-Juuu…*Rias suspiraría resignada*. Solo diré que… Me harte de mi condición actual y de todo lo malo que parece pasarme solo a mí. Aunque no se lo desearía a nadie más... No crean mal… Solo odio a Raiser y a los del Consejo, al igual que estoy decepcionada de mi propia familia… Esto es algo que debieron suponer hace mucho tiempo…*Al decir eso, ella se empezaría a elevar en el aire con sus alas de demonio.

-Hiciste bien en matarla…*A sus palabras, todos verían como Vali desaparecía y reaparecía casi en un instante al lado de la pelirroja*. Si de todas formas iban a inspeccionar su cabeza, seriamos descubiertos, pero con esto ocultamos los planes del viejo Shalba para que nos deje en paz…*Dijo con un tono de desinterés.

-Así que tú también, Vali…*Azazel lo miraría sin expresión alguna*. Ambos son parte de la Khaos Brigade ¿No es cierto?*Su tono denotaba que no estaba tan sorprendido por esto.

-Creo que nuestras acciones hablan por nosotros ¿No?*Vali entonces alzaría su mano que estaba preparada para dar un chasquido*. Creo que mejor nos presentamos como se debe.

Tras chasquear los dedos, un círculo mágico apareció y de este emergieron cuatro figuras… Un hombre rubio que usaba un traje elegante y unos lentes, otro hombre de cabello negro que usaba una armadura china, una mujer joven de cabello negro largo vestida con un kimono negro de lazos rojos y sandalias rosas, con la peculiaridad de tener un par de orejas negras extras de gato en su cabeza, sumado a un par de colas negras que ondeaban en su zona baja trasera, y la última era una chica como de unos 16 años de cabello rubio y ojos azules que usaba ropa de maga, una capa azul y un sombrero de bruja del mismo color. Además que estaba sentada sobre una escoba voladora.

-Nyaaa…*La chica con rasgos de gato saludaría con un gesto como de un verdadero felino*. Cuanto tiempo, Shirone…*Dijo viendo fijamente a cierta loli de cabello blanco.

El rostro de Toujou Koneko perdió todo color en este y su cuerpo empezó a temblar, pero no de miedo, sino de una rabia intensa. Aunque… de la nada se empezó a hiperventilar al ver a su ama junto a esa persona…

Al mismo tiempo, los demás se pusieron en guardia por la llegada de los intrusos… ¿Quiénes eran?

-Un grupo inusual… jamás creí ver en persona a una de las últimas Nekomatas-Nekoshou en el mundo que al mismo tiempo es una criminal de Clase SS buscada tanto por el Inframundo y otras organizaciones como la nuestra…*La Nekomata pelinegra sonrió ante las palabras de Azazel*. Además con el descendiente del legendario Sun Wukong del Viaje al Oeste, Bikou.

-Jajajajaja ¿Qué puedo decir? Soy un alma libre a diferencia del primero.

-Más bien un idiota en mi opinión…*Las palabras de Akeno molestaron al Youkai mientras la Nekoshou ahogaba la risa que quería dar*. Veo que también los hermanos Pendragon que descienden tanto del Rey Arturo y Morgana Le Fay.

-Es un honor que sepa de nosotros, Lady Himejima…*El rubio daría una reverencia en saludo con su mano en el pecho, como todo un noble*. Arthur Pendragon para ustedes.

-L-Le Fay Pendragon… Un gusto…*La joven maga también dio una reverencia con cierta timidez.

-Vaya grupo que tenemos aquí…*Dijo Barakiel con seriedad.

-¿¡Q-Que pasa aquí!?*Irina grito por el desconcierto de todo esto…

-Esto, pequeña Exorcista descarriada, es un grupo que yo forme para… liberarnos de las ataduras a las que las facciones que pertenecemos nos tienen… No es nada personal, los terroristas somos así…*Dijo Vali encogiéndose de hombros.

-Eso no me interesa… ¡Lo que me interesa es saber que tienen ellos que ver con usted, Buchou!*Kiba grito en busca de respuestas mientras veía como Sona, Koneko, Sirzechs y Grayfia estaban en shock. Hasta Raiser estaba incrédulo por todo esto… la revelación fue demasiado.

-Ya lo dije, Yuuto…*Rias se cruzaría de brazos*. Estoy harta de estar atada… desde que me forzaron a casarme con Raiser, he perdido mi libertad y derechos de hacer lo que quiera con mi vida… y eso me tiene harta.

Sona negaría con la cabeza por lo escuchado…

-¿¡Solo por eso!? ¿¡Eso es todo lo que te interesa, Rias!?

-¡Tu no lo entenderías, Sona!*Rias le gritaría mientras se aguantaba la angustia que sentía por la decisión y camino que estaba tomando*¡No sabes lo que se siente estar en mi lugar y ser la perra sumisa de ese maldito hijo de puta!

Para demostrar su punto de que va en serio, ella lanzaría una esfera de Hakai-no-Chikara justo hacia el salón de la reunión, y esta iba específicamente hacia Raiser Phenex, quien veía casi en shock como ese ataque iba hacia él…

Todos estaban en shock por lo ocurrido y por aquella revelación, que nadie en dicho salón salió a tiempo de su asombro para evitar la desgracia que se aproximaba, excepto el propio Barakiel que rápidamente se pondría frente al 3er hijo de los Phenex y con su Holy Lightning destruiría el ataque de la Gremory.

-¿¡Rias-chan!?*Serafall tenía los ojos abiertos a más no poder, mientras que Sirzechs a su lado tenía un rostro pálido y veía todo mientras su boca y manos temblaban, al igual que Grayfia.

Los demás líderes también veían lo ocurrido con asombro, a excepción de Azazel, que veía todo con seriedad.

-¿R-Rias…?*Raiser intento articular palabras por lo ocurrido mientras pasaba a verla, pero…

-¡Tu cállate!*Rias lo callaría, viéndolo con el más claro de los odios*¡Me repudia que me llames por mi nombre! ¡Te tolere antes, pero haz cruzado la línea conmigo y eso no te lo perdono!

-R-Rias-Onee-sama…*Koneko miraba entre pánico y confusión a su ama y hermana adoptiva, pero esta la miro con ojos que intentaban contener su llanto.

-No deberían de quejarse-nya… Si alguien tiene la culpa aquí, es su gobierno y ese consejo… A fin de cuentas, son ellos los que dictan que está bien y que está mal…*Kuroka pasaría a ver sin expresión a los Maous*. Ustedes fallaron como líderes-nya…*Les dijo sin pelos en la lengua.

Ese comentario no les vino en gracia a los Maous presentes, en especial a Sirzechs… Rias la vería también con enojo, pero lo oculto bien, sabía que aunque no le guste y sea cruel, debe pegarles a su hermano y a Serafall justo en su moral para que hagan mejor las cosas.

-Estas son las consecuencias de ser unos pésimos líderes, así de simple.

-¡Rias ¿Cómo te atreves?!

-¡Sona, cálmate! No podemos hacer un movimiento en falso…*Tsubaki retuvo a su amiga y ama, quien se notaba furiosa.

El silencio gobernó en el lugar unos segundos hasta que…

-¿Por qué…?*Sirzechs rompería el silencio mientras llamaba la atención de su hermanita*¿Hice algo mal…?*Rias apretó los dientes al oír el tono de su hermano mientras intentaba no verlo a los ojos*. Hice… lo mejor que pude… a pesar de todo… sabes que nunca aprobé tu compromiso arreglado… sino que fueras feliz… Lamento sino pude hacer algo por ti, Rias… pero… ¿Acaso…en verdad estas dispuesta a seguir este camino hasta el final?... ¡Respóndeme Rias!

Aun con la mirada gacha y su cuerpo temblando, Rias tuvo que forzarse a evitar llorar por ver como los que le importaba sufrían por su decisión egoísta… le dolía ver la expresión de su hermano… la de Sona, Grayfia… las de Kiba y Koneko… sabía que esto ocurriría, que su decisión tendría estas consecuencias… pero las iba a cargar… no va a conseguir volver a ser libre si se queda… debía de hacerlo… No había otra salida, ya que nada en la vida es como uno quiere… Como en verdad desea que todo hubiera sino diferente, pero…

-Hiciste lo que pudiste, Sirzechs… y no te culpo por lo de mi situación…*Rias lo pasaría a ver con firmeza tras dar un profundo suspiro*. Solo odio al Consejo y a Raiser, nada más… Además, nunca hubiera recuperado mi libertad si me quedaba… Así que… prefiero mil veces perder todo mi prestigio y el aprecio de todos los que me importan, y que me casen como a una criminal… Antes que seguir encerrada en esa jaula dorada de la que nadie jamás me va a sacar…*Ella entonces se cruzaría de brazos*. Con esto… es el adiós… hermano.

Esas palabras… fueron demasiado… Sirzechs no soporto el dolor en su ser y se cubrió la cara con su mano para que no lo vean llorar de la frustración por haberle fallado a su hermanita.

Algunos miraban con rabia la elección de Rias, se nota que está dispuesta a ser odiada.

-¡R-Rias-sama…no haga esto por favor…!*Karlamine intento hacerla entrar en razón, pero…

-¡Cállense!*Rias les lanzaría unas ráfagas de su poder a las siervas Phenex en el lugar, que serían salvadas por Akeno*¡Ustedes son igual de despreciables! ¿¡Cómo pueden amar a un desgraciado que solo ve a las mujeres como sus juguetes sexuales!? ¡Me molesta su baja autoestima como mujeres! ¡En verdad no entiendo que vieron en él!

Ninguna de las siervas Phenex dijo nada en contra o siquiera intentaron defender a su amo, ya que… las palabras de la pelirroja les dieron justo en su moral de la peor forma posible.

-Vali…*Akeno le llamaría la atención mientras lo veía sin expresión alguna*¿Qué hicieron para debilitar a los líderes?

-Simple…*Rias fue la que decidió responder por él, sacando y mostrando una botellita vacía*. Envenene el té de la reunión con una droga. Es por eso que no solo los líderes se vieron afectados, sino también todos aquellos que lo bebieron. El veneno no es letal, solo los debilita.

Aquello volvió a sorprender a todos mientras que Grayfia posaba su mirada en el intacto carrito de té con todo el juego del mismo intacto. Ahora entendían porque ella se ofreció a ayudar a servirlo.

-¿Y todo esto para qué?*Les pregunto Akeno, aun estando inexpresiva por todo esto.

-Mi intención no era asesinar a los líderes Bíblicos…*Rias empezaría a aclarar todo*. La Facción de Héroes de la Khaos Brigade uso los planes de Katerea para reunir a los Magos, yo solo les brinde información y lidere el ataque de los humanos como prueba para entrar a la misma brigada… Mi objetivo era dejar un mensaje a las Tres Facciones Bíblicas… Para los Demonios del Consejo, para los Caídos corruptos que solo buscan zacear sus caprichos y para los hombres de la Iglesia que han envenenado a la humanidad desde tiempos antiguos… Nosotros acabaremos con todo lo que está mal para forzar el cambio, sin importar el tener que ensuciarnos las manos para hacerlos entender… ¡Que sus acciones tienen consecuencias!

-Buchou…*Susurro Kiba mientras sentía sus piernas temblar, luchando para mantenerlo de pie.

Sona bajo la cabeza con empatía al saber porque Rias hacia todo esto. Su amiga no tuvo la suerte que ella sí y ahora su única salida era ser una criminal.

-Vali ¿Puedo pedir por lo menos una explicación?*Le pregunto Azazel.

-Desde hace un par de años he tenido contacto con Katerea y sus congéneres de la Facción Old Maous, y estos han intentado que vaya a su lado por su patética causa que me importa poco…*Algunos se intrigaron por lo dicho por Vali mientras este proseguía*. Fue hasta un par de días después de haber detenido a Kokabiel que Katerea me pidió que nos reuniéramos y me hablo de la Khaos Brigade. Además de darme una oferta tentadora… La oportunidad de pelear contra los más fuertes de otras facciones…*Otra vez la incredulidad invadió a muchos*. Cuando me dijo eso, era algo con lo cual quería poner a prueba mi poder, por lo que acepte, ya que tú dijiste que no quieres la guerra con ninguna facción, Azazel.

-Te dije lo fuerte que soy y hasta has peleado con Akeno que es tu rival para satisfacer ese insano deseo de batalla, pero… ¿Ni eso basta?*Cuestiono Azazel.

-Así es…*Asintió Vali*. Fue divertido jugar con Akeno, pero jamás hubo un ganador decisivo y ya me empezó a aburrir… Es obvio que allá afuera hay seres que nos igualan o que incluso nos superan. Vale la pena enfrentarlos para ser más fuerte.

-Ese tipo está loco…*Dijo Saji sin poder creerlo lo maniático batallador que es el Blanco.

-Ya veo…*Akeno suspiraría resignada, encogiéndose de hombros*. Siempre tuve el presentimiento de que algo así pasaría… Desde el momento en que nos conocimos hasta ahora, él solo quería pelear con gente fuerte.

-Oye, Akeno…*Vale le llamaría la atención*¿Qué tal si hacemos nuestra presentación completamente formal? Ya sabes, para que todos vean de lo que son capaces los Dragones Celestiales actuales… Los más poderosos de todos los tiempos habidos y por venir…

Sus palabras sorprendieron a todos aquellos que no lo sabían y algunos creían que estaba fanfarroneando, hasta que… de la espalda de Vali, junto al Divine Dividing, aparecieron diez alas de Demonio…

-Yo soy Vali… Vali Lucifer…*Aquello dejo sorprendidos a todos los que no lo sabían*. Actual usuario del Vanishing Dragón y descendiente del Rey Demonio Lucifer original… Soy el resultado de mi padre, el nieto de Lucifer, y mi madre, una mujer humana.

Esa revelación… esas simples palabras… hicieron que a muchos se les pare el corazón un segundo…

-El descendiente… del enemigo de Padre es… El actual usuario del Vanishing Dragón…*Gabriel no creía lo que veía.

-Dios mío… esto es…*Michael estaba serio mientras sudaba frio… Los anfitriones actuales de los Dragones Celestiales eran… los recipientes perfectos para el poder de ambos dragones… unos usuarios perfectos.

-Mierda…*Incluso Raiser no podía creer todo esto… primero la chica esa es hija de Barakiel y ahora el otro es descendiente de su fundador.

-Se lo que muchos piensan ahora… Soy una existencia que podría ser considerada un milagro, pero… Para los que no lo sepan, no soy el único aquí…*Vali miraría a su rival mientras desaparecía sus alas de demonio*¿Se los dices tú o se los digo yo, Akeno? Después de todo, somos iguales… Sin mencionar que a pesar de casi sufrir una perdida, así entendiste lo que es el dolor… Lo que te hizo fuerte…

Akeno suspiraría profundamente por lo escuchado, para así hablar…

-Soy Himejima Akeno…*De la espalda de ella se desplegarían sus diez alas negras con plumas que asombrarían a todos los que las ven por primera vez*. Actual usuaria del Welsh Dragón y la hija del Caído Holy Lightning of God, Barakiel, junto con una mujer humana que era una Sacerdotisa del Clan Sintoísta Himejima de las 5 Grandes Familias.

Con eso dicho, el asombro y la incredulidad volvió a invadir el lugar, más para los que no lo sabían… Incluso los que sabían de las 5 Grandes Familias estaban sorprendidos de que ella descienda del Clan Himejima que lleva consigo a la Bestia Sagrada del Verano, el Phoenix Japonés, Suzaku. Obviamente Tsubaki era la más sorprendida, con razón los rasgos de ella se le hacían familiares.

Con todo eso, otros pensamientos pasaron por la mente de todos… Ambos jóvenes eran los usuarios perfectos para el poder de los Dragones Celestiales… Rojo aumenta… Blanco divide… Akeno es una Ángel Caído y Vali un Demonio… Ambos eran talentosos, pero a la vez eran opuestos… casi enemigos naturales… ambos sabían sacar el máximo provecho del poder del Dragón que tienen… Esto no era coincidencia… Esto era una cruel broma del destino o del mundo mismo…

-¿Sabes, Akeno?*Ella pasaría a ver a Vali*. Fue divertido, en serio… Pero es hora de que busque diversión en otra parte y la próxima vez que nos veamos…

-Lucharemos a muerte…*Akeno termino lo que él iba a decir.

-[Hmph… que hayas llegado a esto para luchar con nosotros… Albion…]

-{A pesar de los buenos momentos, mis deseos de vencerte no han cambiado… Ddraig… esa actitud calmada que tienes… ya no eres el ser sediento de lucha que eras}

-[Con Akeno he aprendido que hay más cosas en la vida que solo luchar… Esa mentalidad que teníamos fue lo que nos llevó a este estado… Almas sin cuerpo]

-{Aun así, te demostrare que yo soy el más fuerte, Ddraig…}

-[En tus sueños Albion… si bien ya antes me daba igual… tras lo que acabo de ver… Nunca dejare que tú y ese mocoso nos venzan…]

-Bien dicho, Ddraig…*Dijo Akeno.

-Con eso, es todo…*Vali y su equipo aterrizarían en el suelo, a una distancia prudente de los demás*. De menos tendrán que preocuparse por nosotros… Tengan cuidado con la Khaos Brigade… En especial con los Old Maous y la Facción de Héroes… Ellos… no miden consecuencias.

Dicho eso, el Youkai-Mono llamado Bikou giro su bastón que tenía posando en su hombro todo el tiempo y con este traspaso el suelo. Al instante, una oscuridad negra se extendió sobre el suelo, apoderándose de Vali y compañía, haciéndolos hundirse en esta.

-R-Rias-Onee-…sama…*Koneko intento ir hacia ella, pero, Kiba, por alguna razón, la detuvo sujetándola del hombro.

-Adiós…*Fue lo único que dijo Rias cerrando los ojos y dejando que las lágrimas salieran al fin.

Con eso, ella junto con el Hakuryuukou y el resto de su equipo desaparecieron en la oscuridad.

Grayfia derramo lágrimas de dolor mientras caía al suelo… Sirzechs no pudo evitar dejar ver lo afectado que estaba por todo esto mientras que incluso Serafall lloraba… Los demás líderes no decían nada.

-Tal vez esta alianza sea más necesaria de lo que creíamos…*Dijo Irina mientras veía como Sona Sitri se sentaba en un escombro cercano, sosteniendo su cabeza como si le doliera el solo hecho de pensar. Sabía que eso era producto de su moral luchando contra su lógica y sentimientos al mismo tiempo*. El enemigo son antiguos Demonios que desean derrocar a los Maous actuales y posiblemente muchos otros seres sobrenaturales también.

-En momentos como estos, ya ni siquiera sabemos quiénes son nuestros aliados…*Dijo Akeno cerrando los ojos.

-Lo importante ahora… Es ver como seguiremos adelante… si nos ayudamos entre nosotros, podremos fortalecernos ante este enemigo…*Dijo Azazel con seriedad.

-Creo que aún hay esperanza en el futuro de la Sociedad Demoniaca…*Michael posaría su mirada en Sona Sitri y sus siervos, al igual que en los dos antiguos y abandonados siervos de Rias Gremory*. La esperanza es lo último que se pierde.

Con la paz pactada, una alianza a punto de nacer, el ataque de un grupo terrorista, una nueva amenaza presentándose en el mundo sobrenatural y la traición tanto del actual Hakuryuukou y de la Crimson Princess of Destruction…

La Reunión entre las Tres Facciones Bíblicas, se dio por finalizada… Con dolor por un lado, pero… Como se dice, el dolor hace crecer…

Tiempo después…

El primer día de vacaciones de verano llego para los estudiantes de Kuoh, pero para los Demonios que residían en esa ciudad, era otro día realmente duro y complicado.

Hace un par de días la Reunión de las Tres Facciones Bíblicas finalizo y las noticias sobre la misma ya estaban recorriendo el mundo sobrenatural entero.

La paz entre las Facciones Bíblicas fue pactada y los tratos de una Alianza comenzaron a realizarse entre sus líderes y sus máximos representantes. Durante las siguientes semanas, las personas encargadas de resolver los conflictos entre las tres facciones y llegar a una solución donde cada una se vez beneficiada por esta, discutirán hasta resolver todo conflicto posible y presentar la resolución en la Reunión de los Jóvenes Demonios, que se disputara el 1 de Agosto de este año en el Inframundo. Dicha reunión seria auge del futuro de la Sociedad Demoniaca y funcionaria como evento en el que se demostraría el compromiso de cada uno de sus líderes, como también llamar la atención de otras facciones.

Aunque no todas las noticas dichas sobre el encuentro eran positivas… La información del actual Hakuryuukou traicionando a la Organización de Grigori, junto a la destituida y pedida de captura de la actual criminal y traidora de Rango S, Rias Gremory… Eran de las cosas más comentadas entre el mundo sobrenatural. La información de la Khaos Brigade y la reciente adición de los criminales recién mencionados junto con sus aliados, era lo que estaba en boca de todo el mundo sobrenatural.

Los líderes Bíblicos estuvieron de acuerdo acerca de la idea de informar sobre todo lo sucedido al resto del mundo. Tomo como una muestra de buena fe, con el objetivo de reunir cualquier tipo de información que pudieran recibir sobre el grupo terrorista que amenazaba a la Alianza.

Por suerte, mencionar la victoria de los jóvenes representantes de los tres bandos frente a la denominada Khaos Brigade era algo que reconfortaba y mantenía el interés de la alianza en las demás facciones del mundo…

Sin mencionar que no se ocultaron los antecedentes de Himejima Akeno, la actual Sekiryuutei, hija de Barakiel y de una antigua Sacerdotisa del Clan Himejima de las 5 Grandes Familias… También se hablaba mucho de ella como de su rival, los dos Dragones Celestiales más poderosos de todos los tiempos y los más grandes milagros o caprichos del mundo mismo.

-Vale, es aquí…*Dijo Akeno mientras ella y Azazel estaban sentados en un acantilado en la zona fuera de Kuoh viendo la ciudad.

-¿Cuándo dijo que vendría?*Le pregunto Azazel.

-Hay que ser pacientes y lo sabes, que ese grupo terrorista los tenga en la mira todo el tiempo no hace fácil algo como esto…*Dijo Akeno suspirando.

Azazel asintió, era verdad… Lo cierto es que vino a esto para tomarse un descanso. Tenía los ojos irritados por la falta de sueño, gracias al incesante trabajo que tuvo desde que la reunión finalizo, por lo que hace media hora y decidió escapar, dejándole todo lo que quedaba a Shemhazai y Penemue, lidiara con ellos cuando esto termine…

Sin mencionar que Akeno lo trajo sin tener otra opción, ya que su padre estaba igual de ocupado, solo que él si hace su trabajo, no como su tío flojo.

-Por cierto…*Akeno decidió que mejor charlaran para matar el tiempo*. El Inframundo por el lado de los Demonios ha estado muy movido ¿Verdad?

-Así es…*Asintió Azazel, suspirando*. Según Sirzechs, su familia esta devastada por lo que ha hecho Rias… Incluso lo sorprendente es que su madre, Venelana Gremory, fue a dar un reclamo al propio Consejo y al Clan Phenex, pero poco fue escuchada… Al parecer se están aprovechando del estado actual de Rias como criminal para denigrar a la familia Gremory, aunque su partida fue un duro golpe para las castas nobles.

-Ya veo. Creo que era de esperarse…*Akeno sabía que esos estúpidos altos mandos jamás admitirían que por no cumplir el capricho de alguien como Rias, esta los termino traicionando, ya que a sus ojos, ella es alguien con solo una función y un futuro ya preestablecido desde su nacimiento. Ir contra esto implica en que no les sirve de nada, por lo que la denigraran*. Aun así, creo que lo hizo era lo mejor para conseguir de nuevo su libertad, a pesar de lo que perdió en el proceso… Solo el tiempo podrá reparar todo lo dañado, aunque no volverá a ser lo que era antes.

-Sí…*Asintió Azazel*. Sin mencionar que aunque no tuvieron participación en sus acciones, Kiba Yuuto y Toujou Koneko han sido interrogados por los altos mandos para asegurarse de que no sean posibles traidores o infiltrados. Sumado a que les dieron un arresto domiciliario en la casa Gremory hasta el final del verano solo como última prueba de inocencia tras comprobarse que no han formado parte de lo que ha hecho Rias.

-De seguro la que está peor es Toujou Koneko…*Akeno aun podía recordar lo quebrada que estaba la Rook Gremory tras que su ama y hermana adoptiva se fuera, volviéndose una criminal. Y para echarle más sal a la herida, también estaba ahí la persona que la abandono y le hizo pasar un infierno años atrás, su hermana mayor, Kuroka Hellcat… Un duro golpe para la pobre Koneko que por lo último que vio de ella, parecía un muerto en vida*¿Y la familia Phenex?

-Estos tampoco se salvaron de una demanda, esta vez de parte de los 4 Maous y la familia Gremory…*Azazel se encogería de hombros*. Lo único que pudo hacer la familia Phenex para compensar lo ocurrido fue destituir a Raiser Phenex de su derecho a próximo líder de su Clan, sumado a que confiscaron sus Evil Pieces y le han prohibido participar en Rating Games hasta nuevo aviso… Lo curioso es que este lo acepto de buena manera y que al parecer empezara a ir a terapia para solucionar su problema de soberbia y sus vicios. Además que la condición actual de Ravel Phenex seguirá siendo la misma, ya que ella es irrelevante en este caso.

-Supongo que eso es bueno…*Dijo Akeno, con una expresión estoica mirando el paisaje.

-¿Deseas que las cosas hubieran sido de otra manera?*Le pregunto Azazel un poco curioso.

-Supongo, y… Es raro…*Akeno suspiraría*. Tengo a mi familia completa y entiendo la importancia de todo esto, pero… siento un raro nexo inexplicable con los jóvenes demonios de esta ciudad, como si en otra vida todo hubiera sido diferente, ya que… Verlos así, sin tantos ánimos y desganados por todo lo ocurrido, me entristece un poco… Jeje… Es raro ¿No? No los conozco como se debe y aun así…

-Entiendo…*Azazel la interrumpiría, asintiendo*. Sí. También siento algo similar… Aun así, si tienen la voluntad para seguir creciendo a pesar del dolor, serán más fuertes que antes.

-Es cierto…*Dijo Akeno con una media sonrisa.

Ambos se quedaron viendo un rato más la ciudad mientras esperaban, el atardecer estaba cerca…

En eso, sintieron un par de presencias… familiares… Azazel sonrió y se levantó para irse…

-Los dejo un rato.

Azazel se fue a paso lento mientras Akeno suspiraba y miraba el atardecer… era hermoso… siempre le gustaron… sonrió al escuchar unos pasos y la presencia que había era familiar. Suspiro y solo siguió viendo al frente.

-Me sorprende que vinieras a hablar conmigo… Rias-san…

La Demonio de cabello carmesí se sentó al lado de Akeno y no dijo nada por unos segundos mientras sonreía…

-Je… La verdad, ni yo tampoco se el porque me anime a querer hablarte… es una sensación rara, ya que… Desde el día que te vi, sentí un raro nexo contigo que no puedo explicar exactamente, solo lo siento y ya…*Dijo Rias.

-Lo mismo digo…*Akeno miro el sol que se ocultaba para dejar a la luna gobernar el cielo nocturno*. Si… es extraño… tal vez el mundo se está burlando de nosotras y quizás trata de decirnos algo…*Akeno sentía esa sensación de que estaba hablando con una amiga de toda la vida*¿Sabes? Si regresas ahora, quizás…

-No… Ahora no volveré… Por ahora seguiré con Vali-san y los otros, deseo ver el mundo y ser más fuerte…*Dijo Rias mientras veía el cielo con una mirada tranquila.

-¿Te llevas bien con ellos?*Le pregunto Akeno con una media sonrisa.

-Algo así…*Rias se encogería de hombros*. Es divertido burlarse de Bikou-san y Le Fay-san me puede ayudar a mejorar en mi magia, aunque…*Ella pondría cara complicada, pero comprensible*. Solo Kuroka apenas me tolera y no la culpo… Abandone a Koneko y le cause un horrible dolor emocional por mi egoísmo… Ya es un milagro que no me matara.

-Je. Sin duda…*Akeno sabía que la Nekoshou era así con el tema de su hermanita, pero a pesar de todo ella está a salvo.

-Regresando al punto…*Rias acomodaría su cabello*. Como ya sabes, aprovecharemos las conexiones que tenemos con la Khaos Brigade para saber que harán y estar listos.

-Ser una espía… eso suena complicado…*Aunque dijo eso, Akeno sabía que eso era parte del plan. Incluso ella tenía algo similar.

-Tal vez, pero no deseo que el mundo caiga… He empezado a ver otras cosas que antes no podía…*Rias noto que casi era hora de irse*. Por cierto…*Ella le daría unas cartas… 5 en total.

-¿Y esto?*Pregunto Akeno.

-Son para mi familia… aquí… les digo varias cosas… incluso lo que voy a hacer… no tengo el valor para hacerlo cara a cara… Aun…*La pelinegro tomo las cartas de Rias y las guardo*. Dáselas cuando puedas.

-Lo haré… aunque creo que sé que haré…*Akeno ya tenía un plan*. Dentro de poco iremos al Inframundo y… ahí aprovechare en que todos las reciban… Me parece lo mejor que las cosas se calmen ahora…*La pelirroja asintió y se dio media vuelta para irse, pero…*. Rias-san…*Ella voltearía a verla*. Cuídate y suerte…*Le dijo con una sonrisa.

-Lo mismo digo…*Rias se despediría con la mano*. Akeno-san.

La pelirroja se retiraría del lugar mientras que Akeno pasaba a ver de nuevo el paisaje, esta vez estando de pie…

Al paso de un minuto escucho de nuevo pasos acercarse hacia ella y sonrió al reconocer quien era…

-¿Cómo te fue con Azazel?

-Normal…*Vali se encogería de hombros sin tanta importancia*. Dijo que cuando pueda le dirá a los demás líderes y a los de confianza sobre nuestra infiltración.

-Lo sé…*Akeno miraría la luna llena en el cielo nocturna que parecía iluminarlos a ambos*¿Seguro de esto?

-¿Por qué lo preguntas?*Le cuestiono Vali.

-Sabes muy bien que no era necesario todo eso…*Akeno lo miraría con cierta seriedad, pero a la vez preocupación*. Él está allí ¿Verdad?

-Supongo…*Vali pasaría a mirar el cielo nocturno*. Shalba aún no dirá nada, pero pronto le sacare respuestas.

-No ganaras nada si sigues con esto, Vali… Ella no lo hubiera querido…

El peliplateado bajo la mirada ante lo dicho por Akeno que parecía obligarse a contener su emoción por todo esto y de la decisión que él había tomado…

-No puedo detenerme por más que quiera, Akeno… Ya no sé si es venganza, solo que tengo que hacerlo…*Vali entonces se daría media vuelta para irse, pero…

Akeno lo agarraría de la muñeca derecha y lo obligaría a mirarla, donde antes de que él pudiera decir algo más, Akeno se le acercó y le dio un escueto beso justo en sus labios.

Vali al principio se sorprendió por aquello, pero no la rechazo… Como pudo siguió el beso mientras la abrazaba desde la cintura y ella hacia lo mismo desde su cuello…

Todo bajo la luz de la luna que parecía más brillante por este momento…

Aun en su beso, Vali empezó a sentir algo salado y no tenía que ser un genio o ver para saber que Akeno estaba llorando por él… tanto por este momento y porque es probable que no se vuelvan a ver si él sigue con ese camino.

Una vez se separaron del beso, Vali limpio las lágrimas en las mejillas de Akeno, para después darle un beso en el dorso de su mano y caminar hacia la espesura del bosque, despareciendo en este…

Akeno solo soltó un sollozo ante aquello, en verdad siente que le fallo y que aunque quiera, no puede detenerlo…

-[Lo que importa es que ha cambiado para mejor… se ve más calmado…]*Le dijo Ddraig.

-Sí… supongo que sí…*Akeno sonrió mientras se quitaba las lágrimas que amenazaban con salir*. Y yo me enamore de un idiota.

Por su lado, Vali al fin salió del bosque… estaba calmada, pero a la vez algo conflictuado…

-{Vali… no deberías de negarte a ser feliz, lo mejor es que pases página…}*Le dijo Albion.

-Quiero, pero no puedo… No hasta saldar esto…*Vali se sobaría la sien, estando algo frustrado*. Lo siento Albion, pero por más que quiera… Todos esos recuerdos simplemente no me dejan en paz.

-{Lo entiendo… si harás esto, tendrás que ser más fuerte para no morir… Mereces una vida, Vali}*Albion sabía que su poseedor y Akeno llegaran lejos si se lo proponen. La duda seria ¿Qué tan lejos llegaran? Solo el tiempo lo dirá.

-¡Vali-nya, date prisa que te estamos esperando!*Kuroka le grito al joven, quien solo suspiro. Total, puede tolerar a la gata.

-Paciencia mujer… te saldrán arrugas…*La Nekomata se ofendió un poco ante lo dicho por Vali, quien soltó una leve risa.

-En fin ¿A dónde iremos?*Pregunto Rias.

-Iremos al Norte de Europa…*Le Fay tenía una enorme mochila de viaje a su lado, cosa que intrigo a la pelirroja*. Amo los viajes.

-C-Claro…*Dijo Rias algo complicada.

Bikou le daría a ella una palmada en la espalda…

-Vamos roja, relájate un poco… esto será como una aventura.

-Eso y siempre y cuando el Primero no te atrape, Bikou…*El Youkai se puso nervioso al escuchar a Arthur*. Pero es cierto, será interesante… veamos que tiene el mundo para nosotros.

Rias solo sonrió a penas, pero en el fondo estaba ansiosa por esto… Miro al grupo en el que estaba ahora… era extraño… sentía que… ser amigos no está nada mal.

Con eso, el grupo infiltrado en la Khaos Brigade desapareció en la oscuridad de la noche…

El mundo tal vez marque a las personas, pero avanzar es lo que los hace fuertes… Crecer a pesar de la adversidad y el dolor… Si bien una paz se formó, el futuro aún es incierto… pero este será regido por los Dragones Celestiales más poderosos en la historia, siendo los que marcarían el futuro del mundo.

Inframundo - Territorio Gremory

En la mansión Gremory, Kiba Yuuto estaba frente a la puerta de la habitación en la que estaba su compañera y hermanita en todo menos sangre, Toujou Koneko. Una habitación asegurada para que no se lastime, de donde tampoco podría huir y cometer una locura.

Esto a Kiba le recordaba el estado actual de su otro compañero que ha estado sellado por unos años desde que se unió a la nobleza de su antigua ama. Sin mencionar que incluso le comentaron lo ocurrido y parece también haberse desmoronado emocionalmente como Koneko… Sabe que como el Sempai y hermano mayor de ambos, debe apoyarlos para seguir adelante.

Sabe que su ama no es mala ahora, sino que el camino que ha tomado es el único que le dio de nuevo su libertad, a costa de un terrible precio. Aun por eso, no puede odiarla ni llamarla egoísta. Es más, si ella se lo hubiera pedido, la hubiera acompañado para mantenerla a salvo, pero ella sabía que solo él podría cuidar de los dos más jóvenes de su nobleza, por lo que por eso no le dijo nada. Sabía que ellos dos, en especial Koneko, necesitaban a alguien que fuera como su ama lo fue para él y este sabía muy bien que era su deber cumplir con su papel, como si su Rey lo hubiese preparado para poder lidiar con ellos y poder ayudarlos.

Del otro lado de la habitación, Koneko estaba recostada en el piso mientras temblaba. No tenía fuerzas para ponerse de pie, tampoco parecía poder seguir llorando como lo había hecho desde que la reunión culmino. Con rastros de lágrimas en su rostro y su cuerpo todo sudado mientras temblaba, la jovencita solo repetía un par de palabras.

-Rias-sama… Nee-sama… ¿Por qué? ¿Por qué?... Rias-sama… Nee-sama… Nee-sama… No me dejen… No me dejen… Rias-sama…