-¿Aún no es tarde para que la tierra me trague?*Akeno estaba parada en frente de lo que es el lugar donde se realizará la reunión dentro de la misma Capital del Inframundo.
Recapitulemos un poco…
Tras que la familia de Rias recibiera las cartas de ella y que la misma Sona lograra hablar por una línea privada con su amiga; la misma Sitri no dudo en pedir respuestas del porque Akeno tenía unas cartas y contacto de Rias que iban dirigidos hacia ellos.
Al final, Akeno revelo todo y que Rias se veía mejor el día que hablaron. Luego de eso, Sona le agradeció una vez más y siguieron con normalidad durante los próximos días hasta el día de la reunión.
Ya llegado ese mismo día, en la noche, Akeno y Hikaru decidieron que debían de asistir. En caso de que el grupo Sitri necesite un apoyo moral ante cualquier palabra de esos viejos demonios, dado que los Reyes Demonios estaban ahí como autoridades neutrales, no se podrían involucrar en caso de que algo ocurra.
Dicho eso, ahora mismo el grupo de jóvenes, donde los Demonios vestían el uniforme de la Academia Kuoh, Akeno su traje de batalla y Hikaru ropa casual, pero también para pelear, estaban enfrente del gran edificio. Con una Sekiryuutei empezando a retractarse de venir…
-No digas eso, Akeno-san…*Tsubaki le dio un empujón ligero a la hija de Barakiel*. No creo que sea tan malo. Además, tienes una invitación especial de Sirzches-sama para poder entrar, así como tu Imouto.
-El problema no es ese... la simple idea de tener un montón de Demonios tradicionalistas a nuestro alrededor será difícil dado que sus ideas chocan con las nuestras…*Hikaru notó como unos Demonios que entraban al lugar los miraban con...superioridad*. Sin contar que a pesar del tratado...nos seguirán viendo a nosotras como enemigos.
-No te preocupen chicas, yo también estoy nerviosa... estos eventos no me gustan mucho...*Reya se mostraba nerviosa, en verdad este no era su ambiente.
-Además, será un buen modo de conocer a los demás demonios de nuestra edad, será divertido…*Ruruko sonrió nerviosa ante las palabras de su amiga.
-Así es, no es hora de retroceder...*Yura miró a unos demonios que los veían con desprecio*. Si lo hacen, les estarán dando a esos idiotas el gusto de verlas afectadas.
-Vale. Tienes razón…*Akeno suspiro y se palmeo la cara, renovando su espíritu*. Y mi orgullo no me permitirá echarme para atrás.
-Dicho eso… ¡Vamos!
-¡Hai!
Todos asintieron con fuerza y siguieron a Sona al interior del edificio.
Al ingresar, todos se sorprendieron de ver el glamour que había, no era un nivel que uno diga...vaya...pero se dejaba sentir.
-Woah...y yo que creí que la casa de Kaichou era lujosa…*Saji miró a los demonios que estaban elegantemente vestidos.
-Sin contar que emanan ese aire de gente ricachona…*Hikaru observó con los ojos entrecerrados a los que pasaban al lado de ellos.
Akeno noto como Tsubaki se puso a su lado en señal de que no baje la guardia. Esta señalo a unos demonios algo mayores que la miraban con desprecio…
-Esos son de los que valoran la pureza de la sangre y demás…*Las palabras de la Queen Sitri hicieron que la Himejima mire a dichos Demonios*. No son muy amables con los seres de otras razas o con los demonios reencarnados.
-Ara ¿No?*Akeno sonrió con malicia para luego ver a esos demonios con los ojos de un dragón furioso. Ese simple gesto hizo que los demonios desvíen la mirada y se vayan de ahí*. Ufufufufu. Ahora se lo pensarán dos veces…*Ella sonrió al ver que su plan funcionó ante la risa ligera de Tsubaki.
-Puedes dar miedo cuando te lo propones.
-Práctica querida...mucha práctica…*La Shinra rio un poco al oír el tono orgulloso de la joven.
Los minutos pasaban y pasaban, Sona era llevada a conversar con demonios de alta posición que la llenaban de halagos y demás, de seguro para recibir un favor de la Maou Leviathan.
Los demás se dividieron en grupos para poder estar un poco más seguros y no ser presas de las miradas de los demonios que los veían con poca amistad.
Akeno se encontraba sola junto con Hikaru mientras iban a coger algo de la mesa de bocaditos.
-Se ve que la tienen difícil…*A esa voz, las dos hermanas voltearían y verían a un apuesto hombre de cabello plateado y ojos verdes que tenía rasgos europeos y vestía un elegante traje negro*. Un gusto, actual usuaria del Welsh Dragón.
-¿Y usted es…?*Hikaru podía ver que aquel hombre era diferente al resto de Demonios, ya que no las miraba con desprecio. Aunque, al leer mejor su aura…*¿Un reencarnado?
-Así es…*Asintió y afirmo el hombre, dando una reverencia*. Soy el actual 7mo Lugar de los Rating Games Profesionales, Rudiger Rosenkreutz.
Esa revelación sorprendió al par de hermanas Himejima que no esperaban encontrarse a uno de los profesionales del Ranking en este evento.
-[Devuelve el saludo…]*Ddraig saco a su compañera de su impresión.
-Ah, sí…*Akeno le extendería la mano*. Himejima Akeno, la actual Sekiryuutei, es un honor.
-Lo mismo digo, Lady Himejima…*Rudiger tomo su mano y besaría el dorso de la misma*. Les doy la bienvenida a este evento ¿Y cuánto se quedaran en el Inframundo?
-Lo que Sona Sitri se quede…*Respondió Hikaru con educación.
-Supuse que una de las familias de los cuatro Reyes Demonios serían los encargados de darle hospedaje, mi lady…*Rudiger entonces pasaría a ver los alrededores*. Ya debe de saber que la mayoría no las ven con buenos ojos.
-Lo sabemos…*Asintió Akeno, suspirando*. El rencor de una guerra de milenios no es algo que desaparezca de un día para otro.
-Aunque más que rencor, es porque creen que están rebajando su grandeza al alinearse con ''las sabandijas con plumas'', según ellos…*Rudiger entrecerraría los ojos*. Esto es más para los que vendrán después de nosotros y los que lo aceptan sin quejas, los que no simplemente nunca verán a las otras razas y reencarnados como iguales a pesar de ya no querer la guerra o la dominación. Incluso yo sigo siendo discriminado por los de mi rango por la espalda, pero saben de lo que soy capaz.
-Sin duda…*Afirmo Hikaru*. Me gustan sus juegos por cierto…*Le dijo con una sonrisa.
-Me alegra escuchar eso pequeña princesa…*La niña no reclamo cuando Rudiger le acaricio la cabeza*. Le agradarías a mi hijo.
-Ara ara…*Akeno le dedicaría una sonrisa que lo haría sudar frio*. Piense bien lo que dice, Amazing Magic-san.
-D-Descuide, no es lo que piensa, Lady Himejima…*Rudiger alzaría las manos con una sonrisa amarga, para después suspirar*. De cualquier forma, mi niño está gravemente enfermo y no creo que le quede mucho tiempo.
Ambas hermanas Himejima se sorprendieron ante lo escuchado…
-¿Cuál es la causa?*Pregunto Akeno algo insegura.
-Su Sacred Gear…*La sorpresa fue mayor ante la revelación de Rudiger*. Ya deberían de haber oído de casos similares.
-Cielos…*Hikaru se llevó sus manos a la boca*¿No han pensado en sellárselo o removérselo?
-El riesgo de muerte sigue presente aun con eso…*Rudiger suspiraría*. Solo puedo acompañarlo hasta que llegue el momento.
-Lo sentimos tanto…*Akeno entonces haría un saludo budista con sus manos*. Ojala pueda salvarse.
-Gracias por tan buenas palabras, Lady Himejima…*Agradeció Rudiger con una reverencia.
-Veo que alguien se acercó a hablarte, Akeno-san…*Cuando voltearon a ver a Sona quien les hablo, esta se sorprendió al ver al hombre*¡R-Rosenkreutz-sama!
-Un gusto verla, Princesa Sitri…*Rudiger la saludo con respeto, a lo que la Sitri suspiro cansada*. Veo que no aguanta más formalidades por el día de hoy ¿Verdad?
-Así es…*Asintió Sona.
-Yo también estaría igual si me vinieran con eso de...Sona-sama esto, Sona-sama aquello...bla bla. Se nota que todos van con otras intenciones…*Tsubaki estaba al lado de su ama y amiga, ella la acompaño en su ligero calvario.
-Lamentablemente, las influencias pesan, más en la sociedad demoniaca. Por eso todos desean llevarse bien conmigo para ganar el favor de mi hermana…*Sona tomo un vaso de refresco que había, tras dar un sorbo puso una expresión de asco y puso el vaso a un lado*. Ugh… Empiezo a extrañar los jugos naturales del mundo humano.
-Entiendo eso…*Las jóvenes reirían ante lo dicho por Rudiger*. Bueno, nos vemos señoritas. Fue un placer charlar.
-Igualmente, Rosenkreutz-sama…*Le dijo Akeno.
-Puedes llamarme Rudiger, Lady Himejima… Su influencia en el mundo es mayor que la mía.
-Entonces puede llamarme Akeno si quiere…*Le dijo ella con una sonrisa.
-Lo tendré en cuenta.
Dicho eso, Rudiger Rosenkreutz se retiraría, dejando a las chicas en el lugar.
-Nunca pensé que alguien como Rudiger Rosenkreutz-sama se acercaría a hablarles…*Les dijo Tsubaki con una media sonrisa.
-Pero con eso pueden ver que no todos son iguales…*Sona le siguió.
-Creo que era un poco de esperarse…*Dijo Hikaru encogiéndose de hombros.
-¿Hmm?*Akeno voltearía la mirada al sentir algo o a alguien acercándose…
-Hey, Sona…*La saludo un hombre joven bastante alto y musculoso, de cabello negro y ojos purpura*. Es bueno verte.
-Sairaorg…*Sona sonrió al ver al demonio cerca de ellas que caminaba hacia donde estaban*. Lo mismo digo.
Akeno pudo notar que su aura era un poco similar a la de Rias. A pesar de verse como un tipo rudo, tenía buena cara e incluso podía encontrársele parecidos con los hermanos Gremory. Además que emanaba una intensa aura de amante de las peleas. Si lo pudiera comparar con alguien, seria con Vali, solo que este tipo emitía una atmosfera incluso más pura… un peleador nato.
Y no solo él, también sus siervos parecían fuertes. En un análisis rápido y solo a juzgar por sus apariencias, solamente Tsubaki y Saji podrían equipararse a ellos.
-Kaichou…*A esa voz, los demás siervos Sitri habrían llegado al lugar y algunos mirarían curiosos al hombre musculoso.
-Al parecer hay gente que aún no conozco…
Akeno y Hikaru miraron sin vacilación al demonio en frente de ellas.
-Chicos, esta persona de aquí es Sairaorg. El primo de Rias de parte de su madre…*Sona lo presentaría.
-Soy Sairaorg Bael, próximo líder del Clan Bael…*Los que no lo conocían se sorprendieron al oír eso, la casa del Gran Rey... La casa que se dice es la más importante entre todas las casas demoníacas.
-También es el más fuerte entre los jóvenes demonios…*Agrego Tsubaki.
-Bueno...es un gusto…*Hikaru saludó con cortesía, al menos él no era como el resto de idiotas.
-Un gusto…*Saji y Ruruko también saludaron.
-Ellos son los nuevos sirvientes de Sona…*Tsubaki dio la información extra*. Y es bueno verte, Sairaorg.
-Digo lo mismo...y sirvientes de Sona, interesante…*La mirada de Sairaorg pasaría a Akeno*. Tú eres la actual Welsh Dragón ¿No?
-Hai…*Akeno siguió mirando con seriedad al demonio frente a ella*. Soy Himejima Akeno, la actual Sekiryuutei e hija del Cadre Barakiel. Es un honor conocerlo, príncipe de la Casa del Gran Rey…*Se presentó con una reverencia tradicional.
Sairaorg la vio con una ceja alzada, justo antes de soltar una carcajada que se escuchó por todos los pasillos.
Akeno se levantó con duda…
-¿Dije algo malo?*Pregunto algo insegura.
-No, no te preocupes…*Sairaorg negaría con las manos*. Sin duda fue un buen saludo, es solo que no es necesario que te comportes de esa manera tan educada conmigo. Como sea, no puedo sentir tu enorme poder, a pesar de que se dice que eres un milagro del mundo mismo y que pudiste derrotar a la descendiente de Leviathan, eso solo indica que también eres bastante hábil… Así que debo decir que también es un placer conocerte…*Le dijo tendiéndole la mano.
Akeno ahora lo vio con un rostro serio, al parecer él también había sentido algo de su poder. También podía ser que fuera más hábil de lo que quería aparentar.
Así que cuando ambos se dieron el apretón de manos, de inmediato se desato una enorme presión, tanta que incluso se hicieron unas cuarteaduras en el piso donde estaban parados.
Sona se llevó una mano a la frente sabiendo que eso iba a pasar, solo que paso antes de lo que ella esperaba.
Aun con sus manos sujetas, ambos tenían sonrisas retadoras.
-Sin duda es interesante…*Dijo Sairaorg sin perder esa sonrisa.
-Ara. Lo mismo digo…*Akeno le contesto igual.
-Ojala se dé una oportunidad…*Le dijo Sairaorg mientras besaba el dorso de la mano de ella.
-Ya lo veremos…*Dijo Akeno.
-Lo esperaba más de Sairaorg, pero ¿Tú también, Akeno-san?*Les dijo Sona con un rostro de aburrimiento.
-Bueno, admito que las peleas pueden llegar a ser divertidas siempre que no sean de vida o muerte…
-Opino lo mismo.
-Son unos sangre caliente…*Dijo Tomoe.
-Oh, eso es interesante…*Momo notaria que las dos únicas mujeres del sequito Bael veían con celos la interacción de su king con la Himejima.
-Entonces ¿A qué has venido aquí, Sairaorg?*Sona decidiría cambiar el tema*. Creí que estarías ya en la sala de espera, sé que no eres fan de los halagos falsos.
-Simple, la sala de espera parece un manicomio…*Todos miraron confusos a Sairaorg*. Agares y Astaroth ya estaban ahí cuando llegue, pero llegó Zephyrdoll y de inmediato ese imbécil empezó a discutir con Agares.
-¿¡Con Seek-chan!?*El nombre sacó de cuadro a muchos*. Oh... es una vieja amiga...*Sona se sonrojo por usar el nombre con el que llama a la heredera del Clan Agares.
De inmediato, se escuchó el sonido de una ligera explosión proveniente de la sala de espera para los jóvenes demonios.
Todos sin excepción fueron a dicho salón a verificar que no sea nada peor.
-Es por eso que no se aconseja encontrarse antes de la reunión…*Dijo Sairaorg.
Al llegar a un lado del salón del banquete, había una puerta que fue abierta por Akeno y Sairaorg, solo para ver que el lugar era un completo desastre. En medio de este había un campo de dos frentes, cada bando con armas en mano y listos para pelear...
-Ara ¿Quién dijo que las reuniones de los famosos son aburridas?
-¡Akeno-san, no es el momento de tus bromas...y no te rías Sairaorg!*Sona los regaño a ambos mientras el campo de batalla se calentaba aún más.
Uno de los grupos destacaba por tener al frente a un chico moreno de cabello azul con apariencia de elfo oscuro, mientras que el otro, constituido en su mayoría por mujeres, tenía al frente a una mujer hermosa que parecía estar en sus veinte, de cabello rubio verdoso largo y con lentes.
Los demás solo los veían expectantes, no iban a interferir en algo ajeno, a menos que alguno lo crea necesario.
En cualquier caso, ambos grupos tenían auras frías llenas de intenciones asesinas.
Pero en una mesa, alejado de este desastre, había un demonio vestido elegante... Akeno miró a ese demonio con sospecha, había algo en él que no le gustaba. Y le dio cosa al ver a las mujeres encapuchadas detrás de él, excepto a una que parecía la más joven, rubia y de ojos verdes, que tenía una mirada apagada, pareciendo un muerto en vida.
-¡Eres un miserable, retira lo que dijiste ahora!*Exclamo la mujer de lentes.
-¡Ja, ya quisieras perra!- el demonio del otro bando tenía una sonrisa y mirada que denotaban que era alguien vulgar e irrespetuoso*¡Necesitas de tu guardaespaldas para sentirte segura! ¡Encima de eso, eres una maldita virgen que sigue defendiendo lo cometido por esa zorra traidora!
-¡Cállate, Rias…Rias no es ninguna traidora!*El grito de la chica fue tal que algunos de los jóvenes se asustaron un poco...al parecer ella conocía a Rias.
-¡Es una puta traidora! ¡Decidió abandonar este lugar aliándose con esos anticuados y puso en peligro a nuestros líderes, todo porque no le daban la libertad que quería! ¡Se fue como una cobarde!*Esas palabras hicieron que Sona y Sairaorg miren con rabia al demonio*¡Encima que iba a ser líder de la tercera casa más importante de todo el Inframundo! ¡Solo es una cobarde egoísta! ¡Al menos Raiser Phenex hizo bien al despojarla de su patética pureza sin valor alguno!
-¡Hijo de...!*Seekvaira iba a decir algo pero se calló al ver una figura desconocida caminar hacia el demonio.
-¿¡Onee-sama!?*Hikaru y los demás vieron como la Sekiryuutei caminaba hacia el demonio con la mirada oculta bajo su cabello.
-¡Un minuto! ¿¡Qué estás haciendo Akeno-san!?*Le dijo Sona.
Akeno solo siguió caminando. Si algo no aceptaba es que alguien se burlara de una amiga y si bien ella y Rias apenas han interactuado hace unos días, ambas sintieron un nexo muy especial con la otra como si fueran amigas de toda una vida y ese insulto hacia ella era dirigido también a su familia y amigos... Eso no lo iba a permitir, camino hasta estar a un metro del demonio, quien sonreía confiado.
-¿Qué? ¿Deseas decir algo preciosa?* Zephyrdoll sonreía con soberbia*. No sé quién eres, pe-…
El demonio no terminó su oración ya que sintió el golpe de Akeno en la cara, la fuerza del puño fue tal que le rompió la mandíbula, unos cuantos dientes y además lo mando a volar contra el muro contrario ante la sorpresa de todos. Sairaorg, por su lado, sonrió al ver el despliegue de fuerza de la actual Sekiryuutei.
El demonio cayó totalmente inconsciente al suelo con sangre saliendo de su boca y nariz. Sus siervos al ver eso iban a atacar a la joven mujer, solo para quedarse helados al ver sus diez alas de Ángel Caído y que los brazos y piernas de ella estaban envueltos por guanteletes y botas rojos con gemas verdes y picos dorados que parecían las extremidades de un Dragón.
-Oigan... si tanto desean pelear, háganlo, pero les aviso... No me haré responsable de que queden inválidos…*Akeno alzó la vista y sus ojos con rasgos dragonicos brillaban en verde.
Sairaorg por su lado se acercó a los sirvientes del demonio noqueado.
-Llévense a su amo a que lo atiendan y considérense con suerte de que la hija de Barakiel reaccionó primero... Yo no hubiera sido tan amable con el sujeto que insulto a mi prima…*El tono de Sairaorg fue tal que daba pavor, era como tener a un león en frente tuyo.
Los demonios tomaron a su amo para retirarse. Hecho eso, Sairaorg ordenó a sus siervos que llamen a los encargados a que limpien este desastre, ellos obedecieron de inmediato y el demonio regresó con los demás mientras Akeno desmaterializaba su Sacred Gear y guardaba sus alas.
-Ese fue un buen golpe, yo hubiera hecho lo mismo.
-Aun así...no debiste reaccionar así, Himejima-san…*Momo tocó el hombro de la pelinegra, quien dio un suspiro.
-Lo siento, no pude evitarlo…
-[Es lo normal cuando alguien se mete con los que se han ganado el aprecio de un Dragón]*Dijo Ddraig alto y claro, para la gran impresión general de escuchar al Dragón mientras una luz verde parpadeaba en la mano izquierda de la chica.
-Conque ese es el Welsh Dragón, eh…*Seekvaira se acercaría a ellos*. Suena más amigable de lo que se cuenta.
-Pienso lo mismo… Seek-chan…*La mencionada miraría confusa a Sona*. Eje, creo que decidí dejar de ocultar mi cariño a mis queridos amigos…*La peliverde sonrió al escuchar eso*. Ya me doy una idea, pero… ¿Qué paso?
-Ese mal nacido insulto a Rias y a su familia, no pude quedarme callada...aun sabiendo que Rias en verdad se fue...*Seekvaira bajó la mirada*. Rias se fue por lo que esos bastardos de Raiser y el Consejo le hicieron.
Todos miraron a la joven mujer con tristeza, al parecer había una historia entre ella y Rias con Sona.
-Dejando eso de lado…*Sairaorg pasaría a ver a la mitad caído*. Gracias por lo que hiciste, Himejima Akeno.
-Igualmente… Gracias por tu ayuda…*Seekvaira sonrió al decir eso.
-Bueno ¿Qué les parece si entramos?*Todos asintieron ante la propuesta de Sona.
Con eso dicho, todos empezaron a ir al salón central a esperar a que comenzara el evento.
Tiempo después, comenzó el evento.
Después de una formal introducción por el que parecía ser el maestro de ceremonias, varios de los jóvenes Demonios entraron a otro salón al lado, donde personas importantes se habían reunido, entre los que destacaban por mucho los actuales Reyes Demonios, que estaban sentados en la parte más alta del palco principal.
A todos los formaron de pie en una fila al frente. Los amos iban al frente y los siervos atrás… mientras que Akeno y Hikaru fueron a sentarse en una mesa algo alejadas de todos para que no las molesten.
El par de hermanas Himejima pudieron ver por fin a los otros dos Maous. Ambos lucían como hombres jóvenes en sus treinta, al igual que Sirzechs y Serafall. Y también, al igual que ellos, ambos emitían un poder superior. Todos iban vestidos con prendas ostentosas.
Akeno también sentía miradas, pero estas eran de los hombres demonios de los otros grupos. Suspiro ante eso, solo para después darles una mala mirada y emanar un poco de su aura que los asusto y callo de una vez.
Una vez se dijeron unas cuantas palabras, los jóvenes demonios, incluyendo a Zephyrdoll, dieron un paso al frente. Akeno ni sintió lastima por este último cuando fue juzgado por el aspecto que llevaba y por el moretón de su rostro.
-Bueno, ustedes se han reunido aquí con el propósito de conocer los rostros de quienes, junto a ustedes, llevaran en sus hombros la carga en la próxima generación. Esto se hace regularmente con el fin de examinar a los Jóvenes Demonio…*Dijo un hombre demonio con voz solemne.
-Al parecer ya han peleado…*Se podían escuchar los murmullos con sarcasmo de otros cuantos.
-Bah… solo lo dicen por formalismo…*Susurro Hikaru.
Akeno no pudo evitar asentir de acuerdo y a la vez agradeció que nadie hubiera escuchado eso. Pero claro, eso es más por lo que son unos egocéntricos. Solamente cuatro jóvenes Demonios son el futuro del Inframundo, aunque una de ellos no esté aquí.
-Ustedes son todos los Demonios de la Próxima Generación que tienen el más alto rango de Nobleza. La verdad, no hay nada que objetar en su contra. Por eso quiero que compitan entre ustedes antes de su debut y de esa forma aumenten su poder…*Dijo Sirzechs desde el puesto más alto.
Hikaru inclino la cabeza ante ello. Sona también ya les había dicho acerca de ese evento. Uno donde todos los Jóvenes Demonio se enfrentan en Rating Games entre todos. Ella les dijo que a pesar de no ser Juegos Profesionales, estos contaban mucho para dar una buena impresión y que si se llega a jugar de una manera impecable, también influiría en la posición que les den en el Ranking una vez que comiencen a jugar como Profesionales.
-¿No vamos a ir a luchar contra la Khaos Brigade?*Pregunto Sairaorg sin ninguna clase de nervios.
Todos se quedaron expectantes a la respuesta.
-No lo sé. Sin embargo, quiero evitar enviar a los Jóvenes Demonios, si es posible…*Dijo Sirzechs.
-¿Por qué? Incluso si somos Jóvenes, nosotros realizamos nuestras responsabilidades como Demonios. Si nos limitamos solo a recibir la bondad de nuestros predecesores, nosotros nos vamos a…
Sairaorg comenzó a hablar, pero fue interrumpido por Sirzechs.
-Sairaorg, reconozco tu valentía, pero eres imprudente. Por encima de todo, quiero evitar que ustedes vayan al campo de batalla, el cual es cada vez mayor. Si algo les pasa a los Demonios de la próxima generación, sería una perdida enorme. Quiero que entiendas que todos ustedes son un tesoro más grande de lo que piensas. Es por eso que me gustaría que crezcan y experimenten las cosas importantes, paso a paso…*Dijo Sirzechs con un discurso que conmovió a algunos.
-Entiendo…*Fue lo único dicho por Sairaorg, aunque aún mostraba insatisfacción.
Después de eso, los Demonios mayores hablaban sobre los próximos juegos y sobre la tradición que estaba detrás de estos eventos. También hablaban de cosas como reglas y que debían prepararse para no dar una penosa actuación, cosa que Akeno sabía muy bien. Esa era la otra razón para ir al Inframundo, entrenar.
-Ahora bien, me disculpo por retenerlos con esta larga conversación. Bueno, eso es porque ustedes son la materialización de los sueños y las esperanzas de muchos. Unos tesoros…*Dijo Sirzechs insistiendo en la importancia que ellos tenían para inframundo.
Akeno y Hikaru sonrieron al ver que el Maou Carmesí también se comportaba de esa manera en su trabajo. Era una persona sincera por naturaleza.
-Para terminar con esto ¿Qué les parece si escuchamos las metas que tienen para el futuro?*Pregunto/propuso Sirzechs sonriendo.
Entonces, los jóvenes demonios hablarían…
-Quiero dirigir con orgullo mi clan.
-Quiero demostrar mi talento y llegar al consejo demoníaco.
-Quiero ser el mejor en los Rating Games Profesionales.
-Quiero traer prosperidad al Inframundo y a mi Clan.
Sonando todos como un montón de idiotas, típicos hijos de millonarios, que realmente no desean nada más que seguir gozando de la buena vida.
Para Akeno y los demás sería menos molesto si confesaran esos sentimientos con honestidad frente a todos, en lugar de simplemente ocultarlos de la manera plástica y fascista en la que hablaban.
-Yo, Diodora Astaroth, solo quiero seguir disfrutando de la buena vida…*Dijo haciendo una reverencia con la mano en el pecho.
-Al menos fue sincero…*Susurro Ruruko a sus compañeros de sequito, quienes asintieron de acuerdo.
-Yo he puesto mis ojos en muchos proyectos tecnológicos y en la ingeniería con cual traer en el futuro lo mejor que el Inframundo pueda conseguir. Sueño con traer lo imposible a este mundo...*Seekvaira hablo con un tono fuerte y decidido mientras se acomodaba sus anteojos de una manera que la hacía lucir muy genial.
Muchos de los herederos la vieron con admiración y respeto. Algo muy lógico, considerando lo codiciada que es y que sabe mantenerse neutral.
-Es un gusto estar frente a ustedes…*Muchos de los herederos y consejeros mirarían a Sairaorg de mala manera*. Mi meta es una desde hace mucho, deseo convertirme en Maou. Por supuesto, después de liderar a mi Clan y hacer cambios en la sociedad demoniaca. Sueño con cambiar a mi clan y a todo el Inframundo...*Él se inclinó frente a los demás con su gran sonrisa.
-¿Cambiar?
-Idiota, habla de cambiar al Clan más poderoso de todos.
-Ya es suficiente con que sea heredero ¿Ahora también desea ser un Maou?
-¿Cómo puede alguien como el llegar a ser un Maou?
Los murmullos eran de desaprobación de parte de la mayoría de personas. Algunos ni siquiera se molestaban en ocultar esos pensamientos.
-Admito que no hay antecedentes de un miembro de la casa del Gran Rey que quiera ser un Maou, y yo respeto eso...*Se notaba que el que parecía el líder de los consejeros es una autoridad puramente neutral. No se podía distinguir bien si despreciaba a los ''fracasos'' que lograron ascender a la cima o no.
Entonces, Sona daría un paso al frente…
-Planeo dirigir mi Clan con las intenciones de apoyar a los Maous y a la Alianza Bíblica...*Esa declaración volvió a causar murmullos entre los herederos y disconformidad a los consejeros*. También sueño fundar una institución en el Inframundo. Una escuela para enseñar a los menos privilegiados, donde el estudio no le será negado a nadie que desee obtenerlo...*Ella hablo decidida y muy determinada, recalcando su seriedad con sus fríos ojos.
Akeno pensó en eso. Ciertamente, estaba al tanto de que la educación en el Inframundo es muy valiosa. De ser así, el sueño de Sona era aún más noble de lo que creía. También, al ver la seguridad con la que lo dijo y a pesar de hablar apaciblemente, transmitió mucha fuerza y determinación. Sin duda, ella podía declararse un admirador de ella. Todos los siervos de Sona también se veían orgullosos.
Sin embargo…
-JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA.
Fuertes carcajadas se comenzaron a escuchar por toda la sala. Viendo alrededor, varios de los demonios con influencia presentes habían comenzado a reír.
Hikaru solo alzo una ceja ante eso.
-¡Eso es imposible!
-¡Esto es simplemente inaudito!
-¡Jajaja! ¡Es bueno ser Joven!*Dijo uno con sarcasmo.
-¡Sin embargo!... Que la próxima líder del Clan Sitri declare eso como su sueño. Es una suerte que lo haya dicho aquí antes de su debut y no haya hecho el ridículo allá afuera…*Dijo otro sosteniéndose la barriga de la risa.
Akeno incluso miraría a Serafall, quien hacía esfuerzos abismales para no explotar y congelar a los que se burlan de su hermana.
-Se ve que aún se creen superiores cuando sus poderes no demuestran ello…*Murmuro Hikaru.
-Lo digo enserio…*Dijo Sona con firmeza.
Los Demonios Ancianos endurecieron su semblante al ver que hablaba enserio, mientras que Serafall asentía con la cabeza y parecía estar diciendo "bien dicho".
-Sona Sitri-dono. Los Demonios de Clase Baja y los Demonios Reencarnados simplemente tienen que obedecer y trabajar para sus amos. Solo se seleccionan por su talento. La construcción de un centro de entrenamiento significaría para las viejas familias, que valoran las tradiciones y el orgullo, una completa pérdida de tiempo. No importa que tanto se diga sobre que el Inframundo ha entrado en un periodo de cambio, realmente no hay ningún beneficio en la enseñanza a la Clase Baja…*Dijo un anciano con palabras frías y despectivas.
-Entonces ¿Usted cree que no hay ningún beneficio en esto?*Pregunto Sona calmada.
-No, y creo que nunca lo habrá…*Dijo el anciano.
Saji al parecer estaba que hervía en cólera, pero fue tranquilizado por sus compañeras.
-Bueno, yo solamente dije mis metas para el futuro…*Sona se encogería de hombros, sin parecer importarle lo escuchado*. Prefiero mostrar los resultados de ello con lo que demostraremos en los Rating Games… Ya veremos quien ríe al último.
Los del Consejo se molestarían ante lo que reconocieron como un reto que ella les lanzo a la cara. Justo cuando los viejos iban a argumentar otra cosa…
-¡En ese caso!*Serafall se levantó de su asiento*. Si mi Sona-chan gana magníficamente en los Juegos, no habrá ninguna queja ¿Verdad? ¡Ya que muchas cosas son otorgadas por tener buenos resultados en los juegos!*Serafall se veía enojada, algo que era sorprendente*. Ustedes Viejos-sama, se han unido para atormentar a mi Sona-chan… incluso yo tengo mis límites. Si la siguen molestando, yo los atormentare a ustedes…*Dijo viendo con enojo a los viejos.
Sona se tapó la cara con aparente vergüenza. Akeno la miro con comprensión mientras que pensaba que nadie tiene derecho a menospreciar los sueños de alguien más.
-Muy bien, entonces podemos comenzar con los Rating Games entre los Jóvenes Demonios…*Todos voltearían a ver a Sirzechs*. Diodora, Sona ¿No les gustaría luchar entre ustedes?*Los dos mencionados mostrarían su sorpresa, una más que el otro*. Originalmente, estaba previsto que el juego de Sona tendría lugar en unos pocos días. Azazel ha reunido a varios Fans de los Rating Games de cada una de las facciones con el pretexto de ver a los Jóvenes antes de su debut…*Explico Sirzechs.
Dicho eso, Sona dejó escapar un suspiro, solo para después sonreír de manera desafiante…
-Puede que no sea oficial aun, pero para que el destino me diera a ti como mi primer oponente en los Rating Games, Diodora…*Dijo ella sin perder la sonrisa.
-Neh, no tengo problemas…*Dijo Diodora encogiéndose de hombros sin importancia.
-¡Un Juego entre Sona-chan y Diodora-san! ¡Esto será emocionante!*Dijo Serafall emocionada.
-La fecha será después del 21 de Agosto en el mundo humano, por lo que tienen hasta entonces para prepararse… pueden hacer lo que crean necesario para eso. Los detalles serán enviados más tarde…*Dijo Sirzechs dando la última información.
Todos pusieron expresiones serias. Esto podía ser divertido, pero al mismo tiempo complicado.
Tiempo después, con un pequeño discurso, se dio por finalizado el evento y todos se retiraron.
Ya de vuelta en la Mansión Sitri…
-Sean todos bienvenidos…*Chris daría una reverencia en saludo a todos, gesto que la mayoría devolvió*. Los estábamos esperando.
-Yuju, mocosos…*Apareciendo a un lado del mayordomo y saludando casualmente tranquilo con la mano alzada, estaba Azazel, sonriendo despreocupadamente*. Al fin llegan.
-Es obvio que ustedes no tuvieron reunión…*Dijo Akeno sin más.
-Por hoy…*Aclaro Azazel*. Mañana empieza su entrenamiento y tenía que estar aquí temprano. Hay que repasar unos apuntes antes de eso y mañana a primera hora empezamos.
Todos asintieron de acuerdo por lo escuchado.
Tras unos minutos, todos se reunirían en una habitación donde discutirían lo ocurrido en la reunión.
-Ya veo, así que será un enfrentamiento contra el grupo Astaroth, eh…*Dijo Azazel.
-Bueno, creo que ellos tienen este juego ganado ¿No?*Diría Hikaru no tan segura.
-Depende del tipo de Rating Game y de que tan capaces sean sus oponentes…*Agregaría Akeno, cruzándose de brazos*. Por lo que vi, su sequito está conformado por puras mujeres y la calidad de sus auras eran decentemente fuertes. Yo digo que excluyendo a Sona-san, Tsubaki-san y Saji-kun, las demás pierden por un poco contra ellas.
-Sin mencionar que Diodora tiene un sequito completo de 15 siervas…*Agrego Sona al final.
-Entonces hay que volvernos más fuertes en este entrenamiento…*Dijo Yura tronando sus puños.
-Además, la cantidad no es lo mismo que la calidad…*Diría Momo.
-Exactamente…*Asintió Azazel*. Bueno, hoy estamos a 1 de Agosto en el mundo humano, así que tenemos alrededor de 20 días para que sea 21 de Agosto. Eso es solo si comenzamos a partir de mañana.
-¿Y qué haremos nosotras?*Pregunto Hikaru.
-También entrenaran y ya tengo lo suyo decidido…*Dijo Azazel.
-Pero ¿Está bien que recibamos el asesoramiento del Gobernador de los Ángeles Caídos? ¿No es eso hacer trampa?*Pregunto Tomoe.
-En realidad no. Tengo la intención de dar los datos a los distintos miembros de la Facción de los Demonios. Además, se dice que la Facción del Cielo está preparando su propio sistema similar a las Evil Pieces. El resto depende de la soberbia de los Jóvenes Demonios. Si ellos en verdad quieren recibir apoyo, serán apoyados sin ninguna reserva. Jajajajajaja…*Dice Azazel.
Sus dos sobrinas suspiraron por esa actitud mientras el Grupo Sitri lo veía con ojos entrecerrados.
Casi al mismo instante que esa pequeña junta había sido disuelta, una Maid apareció en la habitación donde se llevaba a cabo la reunión.
-Todos, el baño termal está preparado…*Informa la Maid.
Todos sonrieron, esa era una gran oportunidad de deshacerse de todo el cansancio que habían acumulado en todo ese día. Así que rápidamente se dirigieron a las aguas termales que se encontraban en uno de los rincones más alejados del castillo Sitri, los cuales habían sido hechos al estilo japonés, un gran contraste con ese enorme castillo al estilo medieval.
Todos rápidamente entraron a los baños designados para hombres y mujeres. Rápidamente lavaron sus cuerpos y después se sumergieron en las aguas, las cuales tenían la temperatura ideal para relajarse.
Mientras las chicas se relajaban en su sección del baño, la mayoría de chicas Sitri no pudieron evitar mirar con asombro y envidia el glamoroso cuerpo de la actual Sekiryuutei.
-¿Cómo puedes tener un cuerpo tan sexy cuando se nota que también tienes algo de músculos?*Reya hizo la pregunta general.
-Herencia…*Akeno se encogería de hombros*. Y también influye un poco el aura de Dragón… Normalmente, cuando las Dragonas toman forma humana, siempre tienen cuerpos voluptuosos y fuertes bien equilibrados… pero créanme, debido a mi intenso entrenamiento, he quemado mucha grasa, por lo que esto es lo mejor que he podido mantener.
-¿C-Cuanto son tus medidas…?*Pregunto Tsubaki.
-102-60-89…*Todas se sorprendieron ante la respuesta de Akeno*. Creo que hubiera sido más sino hubiera hecho mi intenso entrenamiento o incluso pudo ser menos por el mismo entrenamiento de no ser por mi aura de Dragón que tuvo influencia.
-Maldición…*Yura mostraría su envidia*. Las de Tsubaki-san son 96-66-90, solamente habiendo sido superada por Rias-sama, pero ahora…
-Mejor déjenlo así…*Akeno haría un gesto con la mano y voltearía la mirada*. Sona-san…*La mencionada le prestaría atención*. Tocando de nuevo lo ocurrido en la reunión, me sorprende que hayas desafiado a esos imbéciles.
-Oh, es verdad…*Asintió Momo*. No esperábamos tal audacia.
-¿Cuál es la razón, Kaichou?*Pregunto Ruruko.
-Primero, llámenme Sona con el honorifico que quieran, al menos en privado…*Las chicas Sitri volvieron a sorprenderse por lo dicho por su ama, quien sonreía*. Y segundo… como le dije a Seek-chan, he decidido ya no ocultar mi cariño hacia los que me importan. Lo de Rias me hizo reflexionar y ahora estoy más decidida que antes en cuanto a cambiar al Inframundo para mejor… Antes hubiera bajado la cabeza y aceptado en silencio lo que esos viejos me dijeran, pero… ¿Cómo podría volver a ver a la cara a Rias si hiciera eso, después de lo que ella hizo?
-Nada mal la verdad…*Dijo Hikaru con admiración.
-Esos tipos eran unos cerrados de mente y eso es lo que más me molesta en personas que tienen influencia y el poder de hacer algún cambio significativo en pos del progreso…*Dijo Akeno con algo similar a un discurso político.
Sona y las demás se soltaron a reír.
-Es justo lo que pensaba…*Diría Tomoe.
-Chicas…*Sona llamaría la atención de sus siervas*. Agradezco que me sigan y me apoyen en todo… lo digo en serio.
-Sona...nosotras y Saji estaremos contigo hasta el final…*Tsubaki se acercó a su amiga y le dio un abrazo*. Antes que ser mi "king"... eres mi amiga.
-De todas...Sona es nuestra ama, pero nuestra amiga en primer lugar…*Yura y Tomoe se unieron al abrazo con todas las demás.
-Ustedes...*Sona sonrió al ver el gesto de sus siervas...de sus amigas*. Gracias...
Esa escena hizo que el par de hermanas Himejima sonría.
-Ara… Qué lindo ambiente…
-Si... Onee-sama... Suéltame, no respiro...*Hikaru pidió a su hermana que la deje... los pechos de Akeno le cubrían la cara, impidiendo la respiración.
Todas rieron al sentir el buen ambiente, todas estaban entre amigas...y lo sabían... Nada podría arruinar este momento.
-''¡Vamos Saji, sé un hombre y deja que te lance a ver el Shan-gri-la!''
-''¡Pero me matarán! ¡Además, Kaichou me crucificaría para luego incinerarme en la hoguera!''*El grito de Saji hacia Azazel acabó con el lindo ambiente.
-''¿¡Pero no dijiste que deseabas ver a Sona desnuda!?''*Azazel pregunto con simpleza, aunque en verdad deseaba joder un poco al rubio Sitri.
-''¡No si lo que me espera es la muerte!''
-No sé qué decir a eso...*Akeno se quedó sin palabras al escuchar el raro intercambio de palabras.
-Ese idiota... ya recibirá su castigo...*Sona tenía una vena en la frente al decir eso.
Todas rieron forzosamente al escuchar eso...
-Aunque no me molestaría compartir el baño con Saji-sempai… ¿Qué?*La mayoría miro a Ruruko con sorpresa*. Oigan, no es un secreto que él me gusta.
-¿Para qué negarlo?*Momo se encogería de hombros, sonriendo*. Solo que no tienes las agallas de decírselo…*Le dijo con burla, solo para recibir un baldazo de agua en la cara como respuesta*¡Maldita!
Con eso, una guerra de agua ocurrió en el baño... sería una linda experiencia digna de verse... ¿Verdad?
-Augh... ¿Cómo se te ocurrió lanzar esa bomba de agua en medio del baño?
-Pues es tu culpa...no debiste lanzarme agua fría…*Sona le respondió a Akeno con molestia.
La guerra escaló rápidamente y al final casi hubo bajas...
-Ufufufu. Me alegro que se hayan divertido…*Siena Sitri tomaba el té con tranquilidad, aunque a un lado de ella, Azazel tenía un enorme chichon en la cabeza*. Eso fue por tratar de hacer un acto inmoral en esta casa y tratar de influir a otro.
-Oh...*El caído no dijo más*. Demonios Akeno... pudiste abogar por mí.
-Ara ¿Y perderme este momento? Jamás...*Dijo Akeno sonriendo burlona.
-Vale…*Azazel suspiraría resignado*. Como ya dije antes, su entrenamiento empezara mañana y ya tengo sus regímenes de entrenamiento. Aproveche el baño y no fue nada difícil.
-Solo lo dice porque al no ser nosotras tan destacables, algo complejo no nos servirá ¿Verdad?*Le dijo Momo cruzándose de brazos.
-¿Para qué negarlo?*Azazel se encogería de hombros*. De Sona no hay problema, solo debe mejorar lo que ya tiene y ampliar sus horizontes… las demás serán entrenadas por Penemue que se tomó un tiempo libre mientras yo ayudo a Saji con sus futuros Sacred Gears.
-Solo no lo vayas a matar Azazel...*La cara de poker de Akeno hizo que el joven se ponga nervioso...*. Además, recuerda que necesitas muestras de mi sangre para reavivar el alma de Vritra.
-Ya se…*Azazel suspiraría*. Ya fui con Kiba Yuuto y Gasper Vladi desde la tarde y harán lo que les di, además de lograr hacer que Koneko se sumara, pero dudo que progrese sin que ponga de su parte.
-Ya veremos eso después…*Akeno recordaría cuando volvió a hablar con cierta pelirroja el día anterior.
-También tengo los regímenes de ustedes dos…*Las dos sobrinas de Azazel le prestarían atención*. Barakiel vendrá a ayudar a Hikaru.
-¿Y yo?*Pregunto Akeno, entendiendo que no le tocara entrenar con su padre.
-No te preocupes Akeno, hable con un viejo amigo que será tu entrenador. Dado que tenemos 20 días para entrenar sin parar, él será el maestro ideal para ti en cuanto a tu naturaleza como Dragón.
Akeno iba a hablar cuando escuchó el sonido de algo volando cerca a la casa. Todos saldrían a ver que era...
Lo que vieron los dejo literalmente helados... en el aire había un ser de por lo menos de 15 metros... era gigante... era un...
-¡DRAGÓN!
Todos los jóvenes gritaron al ver al enorme animal aterrizar en frente de la casa, se paraba en dos patas, su color de escamas era morado oscuro y tenía unos cuernos en su cabeza de color amarillo.
-[¡Tannin!]*Ddraig habló a través de la mano de Akeno al ver al gigante*[Cuanto tiempo]
-Sin duda Ddraig... han sido siglos desde nuestra última charla…*El dragón conocido como Tannin habló con algo de alegría al escuchar a Ddraig*. Se nota que has cambiado Ddraig, se te siente más calmado.
-[Los años no pasan en vano... ¿Cómo está el Blaze Meteor Dragón, antiguo Rey Dragón?]
-He tenido tiempos difíciles, pero los he superado…*Tannin se arrodilló para luego ver a Akeno*. Así que esta es la poseedora de Ddraig, eh... Será interesante...
-Ahm... ¿Azazel?*Akeno miraría a su tío, quien se notaba tranquilo*¿Por qué el antiguo Rey Dragón Tannin está aquí?
-Como sabrás Akeno, Tannin se volvió demonio por motivos personales que tal vez él te diga... Aun así, es de los pocos Dragones de nombre que aún vive con su cuerpo y él conoce mejor de la biología de los Dragones que cualquiera aquí presente. Le pedí que te entrene, ya que sé muy bien que no estas conforme con tu poder actual, pero de seguir con tu régimen habitual, te estancaras ¿Qué mejor que un Dragón de verdad como tu oponente y entrenador para ser más fuerte?
-Azazel me pidió el favor mujer. Además, será divertido entrenar a quien es la usuaria más fuerte del Boosted Gear en toda la historia…*Dijo Tannin.
-¿No era que el entrenamiento iniciaba mañana?*Cuestiono Saji.
-Decidí venir ahora dado que a donde llevaré a la niña nos tomará unas horas de vuelo.
-¿A dónde iremos?*Akeno preguntó algo temerosa.
-A mi territorio. Si fueras una novata te hubiera llevado a entrenar por aquí cerca, pero eres la hija de Barakiel y tal vez la mejor poseedora que Ddraig ha tenido en la historia. Te daré un entrenamiento digno de un Dragón.
-Ahm... ¿Es tarde para regresarme a mi casa?*Tannin atrapó a Akeno en una de sus garras*. Tomaré eso como un sí...
-[No te contengas Tannin, Akeno es capaz de resistir duros castigos. De hecho, una de sus capacidades es convertir el dolor en poder]*La pelinegra mostró horror al escuchar las palabras de Ddraig.
-¡Dragón Judas!*El Welsh Dragón rio al escuchar el tono de Akeno, la venganza era dulce.
-Así será...*Tannin sonrió al ver que la relación entre ambos era buena, de ahí debe venir su fuerza*. Me retiro, fue un gusto verla, Sona Sitri, estoy deseoso de ver su Rating Game…*La mencionada asintió a las palabras del dragón*. Les deseo a todos un provechoso entrenamiento.
-Yo les deseo lo mejor amigos…*Akeno saludó a sus amigos como pudo.
-Buena suerte Onee-sama, da lo mejor de ti…*Hikaru le dio su apoyo a su hermana al igual que los demás.
-Céntrate en tu entrenamiento, no te preocupes por nosotros, Akeno-san…*Le dijo Sona y la mencionada asintió.
-Akeno, buena suerte...Tannin, te encargo a mi sobrina.
-Déjala en mis manos Azazel…*Tannin alzo vuelo con tal fuerza y velocidad que la pelinegra sintió un mareo ligero por la fuerza G…
-¡Espera, no tan rápido que me va a dar vértigoooo….! ¡AUXILIOOOO!*El grito de Akeno fue opacado por la fuerza del viento.
-Y ahí va...*Siena apareció al lado del caído*. Se nota que la has entrenado bien, Azazel.
-Nah, ella se ha esforzado para llegar hasta aquí, nosotros solo le hemos dado un apoyo…*Dijo Azazel sin importancia.
-Bueno, a cenar y a dormir…*Todos asintieron ante lo dicho por Sona.
Dicho eso, todos se fueron a l interior de la casa para descansar.
En medio de un bosque en el mundo humano…
-¡Agh…!*Rias caería al suelo con varias heridas en su cuerpo y se levantaría mientras se sujetaba el abdomen*¡Oye, eso no fue amable!
-¡No esperes que el enemigo te tenga piedad-nya!*Le dijo Kuroka mirándola con cierta molestia.
Ambas estaban en una sección de entrenamiento de combate y la pelirroja sentía un gran dolor en un costado de su abdomen… A pesar de que el golpe que recibió no tuvo fuerza, el Senjutsu de la Nekoshou daño su cuerpo interiormente.
-Ju. Oye…*Rias suspiraría resignada*. Está bien, no nos llevemos bien si no quieres y estás en tu derecho de estar molesta conmigo… Lo de Koneko no tiene perdón, pero…
-¡Pero nada!*Kuroka la interrumpiría*¡Eres débil Rias Gremory! ¡Acéptalo! ¡Ese conformismo y orgullo tuyo te costó demasiado!
-¡Lo sé, y por eso quiero cambiar!*Rias se pondría de pie como pudo, sujetándose su abdomen*¡No quiero seguir sintiéndome así de miserable!
-Pues demuéstralo-nya…*Kuroka se le acercaría y tocaría el lugar donde la daño, aliviándolo*. Y si bien me molesta que Shirone llorara por lo que hiciste, al final fue lo mejor para ella… Mejor esto antes a que siguieras con ese pajarraco que de seguro se hubiera aprovechado de ella cuando se hartara de ti.
-Lo sé…*Asintió Rias, suspirando*¿Sabes?*Ella pasaría a verla*. Creo que puedo mover los hilos para levantarle los ánimos a Koneko… Según Akeno-san, no leyó mi carta y al parecer no va a entrenar.
-Obvio que no lo hará…*Kuroka pondría una cara algo lamentada*¿Cuál es tu idea?
-Tendré que hablar con mi hermano, pero creo que será más seguro actuar cuando sea la fiesta formal del evento de los jóvenes Demonios… Así no habrá tanta vigilancia.
-De acuerdo-nya…*Acepto Kuroka*. Pero no creas que esto nos hace amigas.
-Lo sé…*Asintió Rias, sonriendo*. Pero por Koneko, podemos tolerarnos y ayudarnos.
Kuroka sonreiría con amargura, pero aceptando lo dicho.
Con eso, ambas volverían a su entrenamiento, ahora con un mejor ambiente entre ellas.
