Crazy Isla del Tesoro
Nota: Bueno, otro capítulo de esto.
Nota 2: Aquí me voy a poner más divertida porque me saltaré un poco de la trama hasta la parte en que ya todos son petrificados.
Capítulo 2: Kanna y Sia
Escuchó el crack de la piedra y supo que sus nanobots habían activado el protocolo de defensa en caso de petrificación y ella sólo tenía líquido suficiente para despetrificarse a sí misma y a otra persona. Era una tonta, había olvidado por completo que ellos serían petrificados en el barco y que su tío Ryusui sólo tendría tiempo de salvar a su madre, que estaba escondida en un barril. Todo el estrés de Hiningen la había dejado demasiado ansiosa y realmente había olvidado la parte histórica del asunto.
Se levantó de la piedra a duras penas y evaluó cuánto líquido le quedaba. Sí, sólo tenía para despetrificar a una persona y lo más lógico sería despetrificar a su leoncito, ¿cierto? Tenía la fuerza suficiente para poder defenderlos, pero tenía una idea mejor que sería mucho más útil para modificar a su favor los hechos de la Isla del Tesoro, la bomba sexy de la escuela: Asagiri Kanna.
—Perdón, leoncito —expresó acercándose a la estatua de Sen y besándolo en la mejilla, para luego irse a donde se encontraba Kanna—. Y perdón, Kanna —habló antes de activar su protocolo de despetrificación nuevamente y hacer que sus nanobots aplicaran el líquito en sitios estratégicos para liberar a Kanna de la piedra.
—¿Pero qué rayos pasó? —se quejó la chica de cabello bicolor al romper la piedra y miró con enojo a su mejor amiga—. Esa cara… estás a punto de pedirme algo que no me va a gustar, ¿cierto?
Sia asintió. Kanna la conocía bien.
—A ver…
Sia le explicó el plan a Kanna, mientras salían del camarote y corrían a cubierta. No había tiempo, ni siquiera para buscar a su mamá o a Ginro, que debían estar ya a punto de esconderse en el barco para luego ser vistos durante la noche. No había tiempo, tenían que esconderse, porque ellas no sabían pelear y necesitaban buscar a Senku, Gen y Kohaku de inmediato. Ellos seguramente estaban ya reunidos con Amaryllis y lo mejor sería irse nadando hacia la cueva.
—Escucha, Kanna, sé que tu habilidad física es un asco, pero necesito que uses tus nulas habilidades deportivas para nadar hasta la cueva, esperaremos ahí a todos —dio las instrucciones Sia, mientras estaban ya en cubierta.
—¿Por qué siempre termino arrastrada a estos planes? ¿Qué hice yo para merecer esto, Sia? —lloriqueó Kanna.
A la pequeña de cabello bicolor no le dio tiempo de decir nada más, porque ya en ese momento Sia se había lanzado al agua. Tenía suerte de haber sido criada por una madre perteneciente a un pueblo del agua, lo que la hacía tener algo de habilidad como nadadora. Supo que Kanna la seguía y que la odiaría poco después, pero no había tiempo, tenían que irse antes de que llegaran los enemigos, porque podrían petrificarlas nuevamente.
…
Y lo que Sia no había pensado era que llegarían a la cueva muchas horas después. Definitivamente iba a actualizar la historia en cuanto pudiera. Por suerte, en el tiempo que estuvo esperando, había utilizado a sus nanobots para construir una pequeña choza, algunos recursos y hacer una pequeña fogata para cocinar, lo que les permitió comer algo de pescado mientras los demás llegaban.
—¿A qué hora vienen? Me aburro —expresó Kanna con fastidio.
—No lo sé, deberían haber llegado hace algún tiempo a la Cueva Zafiro, aunque la historia no es específica respecto a eso. —Sia no tenía mucha información realmente, pero esperaba que se apuraran—. Ya deben estar por llegar, es de noche afuera.
Poco después, vieron una luz brillante ingresar y una especie de perro grisáceo corriendo hacia ellas. Kanna chilló asustada y se lanzó a abrazar a Sia, que simplemente rodó los ojos por lo que tenía que soportar.
"Disculpen si las asusté" —habló una voz en la cabeza de Sia y Kanna la miró fijamente.
—¿Escuchaste eso? —indagó Sia.
"Sí, ambas escucharon" —aseguró la voz en su cabeza—. "Soy Hiningen. Disculpen que esté en esta forma, pero me recupero más rápido así. Me dejaron sola en ese barco y ya me estaba asustando un poco cuando empezaron a llegar muchas personas".
El extraño animal grisáceo las miró con ojos azules brillantes y temerosos, lo que hizo que ellas entendieran que definitivamente era ella. ¿Cómo rayos ella podía tomar esa forma? Pero no hubo tiempo para investigar nada más, porque en ese momento oyeron un extraño sonido.
—Escóndete en esa choza, Hiningen —pidió Sia, mientras señalaba la pequeña choza que habían hecho sus nanobots. La princesa le hizo caso y corrió a esconderse mientras las dos amigas se fijaban en lo que estaba pasando.
Pero se tranquilizaron cuando vieron ingresar el laboratorio en la cueva. Poco después, cuando bajaron en esa parte, Amaryllis chilló sorprendida.
—¡No puede ser! ¡Se supone que nadie conoce esta cueva!
—Descuida, esas niñas vienen con nosotros —explicó Senku mirándolas con algo de molestia—. ¿Por qué están aquí y no se quedaron en el barco?
—Lo siento, fue un error de cálculo, pensábamos que vendrían a esta cueva antes de buscar el laboratorio —contó Sia—. Pretendo actualizar la wikia cuando regrese —afirmó con algo de enojo.
Senku se rascó el oído con el meñique y empezó a preparar todo.
—¿Y cómo es que no se petrificaron? —interrogó él sin dejar de trabajar. Sia se acercó a su lado para explicar.
—Los nanobots de mi mamá se activaron y con lo que me quedaba de líquido despetrificador, despetrifiqué a Kanna. —Senku la miró fijamente—. ¡Espera! Puedo explicarlo todo. Kanna será un recurso mejor que mis otros amigos, aunque tenga 14 años. Ya te muestro por qué.
Después de eso, Sia sacó una navaja de una de sus botas y se acercó peligrosamente a su amiga de cabello bicolor que empezó a caminar hacia atrás.
—Espera, no…
Kanna estaba totalmente sonrojada cuando chocó contra la pared, sabiendo que ya no tendría escapatoria. En ese momento, Sia sin ningún tipo de piedad cortó la sudadera cinco tallas más grande que usaba Kanna y que cubría todos sus atributos, para luego abrirla y dejar que todos vieran el físico de la pequeña Asagiri, quien tenía unos pechos demasiado grandes para tener 14 años, una fina cintura y unas caderas que parecían de modelo.
—Perdón, Kanna.
—¡Kukukuku! Sí, definitivamente esa niña será un buen apoyo para la misión —comentó Senku rascándose el oído con el meñique.
—Senku-chan, te recuerdo que estás hablando de mi futura hija, que de paso es menor de edad y sólo tiene 14 años~ —se quejó Gen con voz cantarina mientras ayudaba a Kanna a cubrirse y miraba con desaprobación a Sia, la cual parecía un poco avergonzada por lo que hizo, pero a la vez bastante tranquila pese a que acababa de dejar a su amiga en ropa interior.
—Ni la conoces, mentalista. Hasta tú tienes que reconocer que será fácil que la seleccionen. Y si sabe al menos dónde está guardado lo que Byakuya nos dejó, seguramente será de mucha ayuda —explicó el científico sin darle importancia y volvió a lo suyo—. Amaryllis… necesito que busques algunas cosas —pidió Senku y luego volvió hacia la joven pelinegra para darle una serie de instrucciones.
Amaryllis asintió y salió corriendo a buscar los recursos que solicitaban
"Yo también quiero ayudar" —dijo una voz que Sia escuchó en su cabeza y en ese momento Hiningen salió de su escondite en su forma animal—. "¿Qué puedo hacer?" —indagó.
—¡Kukuku! Será excelente tener alguien que puede comunicarse por telepatía, alienígena. ¡Esto sí me emociona! —expresó con alegría Senku.
…
Después de vestir a todos y de un intento fallido de darle una apariencia femenina a la mayoría de los hombres del grupo, lo cual Sia no impidió porque siempre había tenido curiosidad de saber cómo habían sido las cosas en esa parte de la historia, finalmente estuvieron listas Kohaku, Kanna, Amaryllis y Ginro.
—Estás preciosa, Kanna. No entiendo por qué siempre escondes tu físico —mencionó Sia al oído de su amiga, que le dedicó una mirada de odio—. Te dejaré uno de mis brazaletes para que te comuniques, aunque igualmente Hiningen estará comunicándose telepáticamente con todas, facilitará mucho la misión. Recuerda tener cuidado con ya sabes quién, ¿ok?
—Kanna-chan, aun puedes retractarte de participar en esto, pienso que estás muy pequeña para arriesgarte de esa forma~ —intentó convencerla Gen, pero ella negó con la cabeza mientras se ponía en su antebrazo derecho el brazalete derecho de Sia.
—Puedo hacerlo. Sólo debo tener cuidado con Mozu, pero… ya sé defenderme de su hijo en mi universo, no creo que sea peor —explicó ella.
—No sé quién es Mozu, pero si dices que puedes encargarte, pues sé que puedo confiar en tus habilidades, que algo debes haber aprendido del mentalista —expresó Senku, mientras se rascaba el oído con el meñique.
Ella sonrió con presunción.
—En realidad, el mentalista es mi hermano, pero sí sé hacer algo. —La adolescente sacó de un pequeño compartimiento a un lado de la falda que llevaba unos naipes y empezó a mezclarlos ágilmente.
Senku y Gen la miraron con una gota de sudor cayendo por sus sienes.
—¿Y para qué…? —pero Gen no terminó de formular la pregunta, porque en ese momento Kanna arrojó un naipe hacia una piedra con total precisión, rompiéndola a la mitad.
Todos quedaron boquiabiertos con lo que acababa de hacer, luego ella caminó y tomó nuevamente su naipe y lo introdujo entre los demás.
—Esto está hecho con piedra divergente y diamante, lo que lo hace mucho más duro que materiales normales, pero al mismo tiempo lo suficientemente flexible para darle la forma de naipes. Hay que saber arrojarlos para que no se curven, y mi padre me enseñó a usarlos desde que descubrimos la piedra divergente —explicó mientras volvía a guardarlos—. Así que descuiden, aunque no soy una mentalista, tengo mis ases bajo la manga.
El chiste que acababa de decir Kanna era patético, pero lo había acompañado con un guiño de su ojo izquierdo, haciéndola ver bastante coqueta, con lo que había logrado que Ginro babeara al verla, por lo que Kohaku le había dado un zape en la cabeza para que dejara de mirar de esa forma a la adolescente.
—En fin… ¡estamos listas! —exclamó emocionada Kanna, motivando a los demás a salir.
…
Como era de esperarse, todas fueron elegidas para irse al harem del cabeza de la isla, lo que fue excelente para los demás, Sia se ofreció a ayudar con la elaboración del dron que pensaban hacer, ya que eso maximizaría la eficiencia de los planes de los muchachos. Conseguir el platino fue tarea fácil con Kanna teniendo una idea general de dónde se encontraba, lo que había sido útil ya que, según les había comentado, viajaban seguido a la isla a visitar a sus amigos.
En una noche fueron capaces de recuperar el platino y agilizar sus planes para poder elaborar más rápidamente el líquido para despetrificar, por lo que contaban con una buena planificación. Trabajar con Sia y sus nanobots agilizaba el trabajo y en ese tiempo Senku aprovechó de aprender un poco más sobre ellos.
—Así que tu padre trabaja con un científico llamado DJ Ions specialista en nanotecnología. —Sia asintió.
—La verdad es que mi papá es increíblemente inteligente… y mi mamá también. —Sia miró de reojo a Suika—. Ella es la que más se ha metido en la parte de la nanotecnología con el doctor Ions, y pues a mí me gusta bastante. Mi papá es más de los videojuegos y de desarrollar programas informáticos muy buenos, además de que ha avanzado muchísimo con la inteligencia artificial que utilizan los nanobots, así que básicamente es una "empresa conjunta". También nos ayuda mucho la mamá de Kanna por sus conocimientos en neurociencias que son la base de nuestra inteligencia artificial y nanotecnología actual.
Oír hablar a una niña con tantos conocimientos era sorprendente y Senku no pudo evitar sentirse emocionado al saber que el mundo avanzaría tanto en el futuro y que habría tantas personas grandiosas trabajando a su alrededor. Sia también le explicó un poco las bases de la nanotecnología de Nanami Informatics y estuvo explicándole muchas cosas a Suika también, en su mayoría sobre matemáticas.
—Te servirá en un futuro saber mucho de matemáticas —le dijo sonriente.
Al lograr preparar el líquido para despetrificar finalmente, estuvieron listos para buscar a los demás.
El problema fue que, debido a los errores en la precisión de la información, Sia no pudo avisarles que las estatuas serían arrojadas al mar, lo que generó un problema enorme, que empeoró cuando se dieron cuenta de que se habían llevado a Ryusui a la aldea en la que se encontraba Ibara.
Fueron a ver desde lejos, preocupándose al notar que parecían estar queriendo que todas las chicas cortaran en pedazos a Ryusui, pero por suerte Kohaku rompió la piedra en pedazos prolijos, con los que fuese sencillo armar a Ryusui.
Ya habiendo despetrificado a Ryusui, él miró la situación y tuvo una idea general de todo. Sia se emocionó al ver a su tío en acción, hablando con su instinto de marinero, aunque no iba a mencionarlo.
—Sia… quédate aquí con Hiningen, porque de momento no podemos llevar tantas personas a investigar —indicó Senku y los mayores se fueron a evaluar las condiciones del territorio.
Sia no podía dejar de pensar en su leoncito y cuánto lo extrañaba, pero sabía que tenía que ser fuerte, porque no valía la pena tenerlo ahí en ese momento, cuando la utilidad de otras personas era mayor, eso incluyendo a Kanna.
Le preocupaba un poco los días que estaban pasando y el tiempo que estaban demorando sus padres en encontrarlas, lo que quería decir que probablemente las cosas estaban medio complicadas entre la salida de las mayores y la salida de ellas. Seguramente, también habían puesto a muchas personas a la búsqueda por el multiverso y también era altamente probable que hubieran descartado varios universos en el proceso de buscarlas. Lo peor era que ella seguía sin poder contactar algún Nanami Sai de algún universo conocido.
Suspiró. Los días ahí iban a ser una locura, pero ella intentaría acomodar lo mejor posible las cosas. Sabía que necesitarían a Kaseki, porque sus dones de artesano eran necesarios, pero sabía que llegaría un punto en el que requerirían un luchador: cuando Mozu se diera cuenta de lo que estaba pasando.
…
Por otro lado, en la aldea, Kanna había estado pasándolo bastante mal todos esos días, y más porque casi no lograba comunicarse con Sia para estar más tranquila en medio de todo. Además, tener que lidiar con hombres intentando molestarla constantemente, la mayoría siendo personas mayores que realmente creían que ella era mayor de edad por su cuerpo tan desarrollado, agravaba un poco la situación.
Se sentía indignada de que su mejor amiga la estuviera tratando como un cerdo para el matadero, pero al menos estaba conociendo un poco de la vida de los demás. Pero también le molestaba que vieran su cuerpo como un trozo de carne, y era por eso que siempre solía usar esas ropas tan anchas como su mamá.
—¿Y cómo soy yo en el futuro? —preguntó de repente Ginro mientras estaban en un momento perdiendo un poco el tiempo.
—Pues… supongo que genial, siempre tienes historias que contar, pero no he conocido nunca que tengas una pareja estable —mencionó Kanna—. ¡Igualmente, sigue adelante siempre! Yo suelo tener algunas citas al mes, unas dos citas al mes —confesó la chica y Amaryllis y Kohaku se sonrojaron—, pero es porque Draco siempre arruina todas mis citas. Cada vez que salgo con un chico que está medianamente interesado en mí, aparece él con alguna tontería… ¿pueden creer que una vez compró un centro comercial e hizo que llegara un equipo de demolición que sacó a todas las personas del centro comercial y yo estaba en medio de una cita comiendo helado con un chico?
Las mujeres se sorprendieron y sonrojaron mucho más.
—¡Le gustas!
—Que hermoso es el amor —mencionó Amaryllis ruborizada y tanto ella como Kohaku hicieron un gesto de complicidad como si estuvieran totalmente motivadas por lo que ella acababa de decir.
—¿Gustarle? ¿A Draco? ¡Se la pasa molestándome siempre! Es imposible que le guste —aseguró Kanna con algo de tristeza.
—Yo también creo que le gustas, aunque no sé qué es un centro comercial, ni tampoco lo que es un equipo de demolición —agregó Ginro en ese momento.
Kanna explicó todo lo que era y los tres aldeanos pusieron cara de sorpresa y luego Amaryllis se sonrojó mucho más.
—¡Imagina estar dispuesto a destruir todo por amor! ¡Eso sí que vale la pena! —aseguró la joven emocionada.
—Ya les dije que no le gusto a Draco, sólo es un insoportable que siempre quiere molestarme y ya —bufó Kanna, indignada.
Ginro iba a hablar en ese momento, pero justo apareció una anciana avisándoles que, en la noche, "Gin" tendría que ir a la habitación del cabeza de la isla para cumplir sus labores, lo que asustó terriblemente a Ginro, quien empezó a lloriquear y pedirle a Kohaku que lo protegiera. Kanna en ese momento sintió que estaba olvidando algo importante.
"No debe ser nada, aunque supongo que para el próximo 1 de abril voy a mejor quedarme viendo el programa del Día del Héroe que hace papá, porque realmente estoy sospechando que olvido algo importante" —pensó Kanna, intentando recordar.
…
Ya con varios despetrificados, el trabajo fue cada vez más eficiente, especialmente cuando despetrificaron a Shizuku, que se convirtió en un excelente apoyo para Kaseki y para Yuzuriha, pese a que era tan menudita y que su fuerza no se equiparaba del todo a la de Kohaku. Jiyu participaba parcialmente en las cosas que su cuerpo alcanzaba a hacer y contribuia en cuidar a Hiningen, que parecía haberse vuelto muy cercana al joven Ishigami.
Por otro lado, Sia miraba constantemente la estatua de Sen, quien había sido petrificado dormido y se veía durmiendo tan plácidamente que no podía dejar de mirarlo y solía agacharse junto a su estatua. Ella quería que él volviera a estar con ella, porque se sentía solitaria, igualmente extrañaba a Kanna y Draco.
—Prometo que pronto nos veremos, mi leoncito —dijo en un susurro.
—Nos tomará un par de horas tener el líquido suficiente para…
—¡Oigo alguien venir! ¡Son dos personas! —exclamó Ukyo y Senku corrió hacia donde estaban sus amigos y Sia empezó a intentar recordar la historia.
Eran Amaryllis y Kanna y estaban completamente solas y con una mirada angustiada. Empezaron a contar que habían atacado a Ginro y Sia se palmeó la frente, recordando ese evento y preguntándose por qué rayos Kanna no lo sabía.
—¡Kanna! ¿Cómo es que tú…? —intentó preguntar, incorporándose lentamente, cuando en ese momento habló Mozu, que había aparecido de la nada donde ellos se encontraban.
Sia no estaba segura de esa parte de la historia, pero sabía que hablarían con Mozu e intentarían negociar para conseguir más tiempo. Ella empezó a pensar en qué podrían hacer, y pensó en que su leoncito podría enfrentar y vencer sin problemas a Mozu, la cosa es que todavía faltaba el líquido y Senku había prometido que él sería el próximo en ser despetrifcado.
"Dependemos de Asagiri Gen en este momento" —pensó Sia, mientras veía que ellos lo mandaban a negociar y Kanna lloriqueaba, seguramente al ver que su padre estaba en problemas—. "Kanna, sí eres tonta, no puedo creer que ni siquiera sepas de esta negociación, fue una mala idea enviarte allá".
La negociación fue poco a poco y Sia tuvo una idea para intervenir y apoyar a Gen, mientras hablaban, así que intentó comunicarse con Hiningen.
"Hiningen, ¿me escuchas? ¿Estás oyendo mis pensamientos?" —pensó Sia.
"Sí, ¿qué deseas?" —preguntó en su mente la criatura.
"Transfórmate en ser humanoide, y salta junto al papá de Kanna, por favor" —le pidió Sia.
"Está bien" —respondió Hiningen, quien hizo lo que se le dijo y en ese momento Gen aprovechó de demostrar que eran magos poderosos capaz de convertir seres humanos en criaturas extrañas, lo que pareció descontrolar a Mozu.
—Además… llamó su atención Sia, puedo proyectar tu futuro —comentó la joven informática y se adelantó tecleando algo en uno de sus brazaletes de Nanami Informatics.
Por suerte, Dyon era muy bueno utilizando edición de vídeo y le había hecho de regalo de aniversario a sus padres un hermoso vídeo que reseñaba la vida de ellos juntos como pareja, así que mostró a Mozu una proyección de fotos con música romántica de fondo, en formato holográfico. Esta información la tenía Sia, por suerte, debido a que él le había pedido ayuda en el proceso de edición y para preparar el vídeo final y tenerlo listo a tiempo.
La proyección empezaba con un vídeo de Mozu de rodillas pidiéndole matrimonio delante de todo el Reino Científico y Luna sin saber qué responder, y luego hacía una transición al día de la boda, en donde el ramo de flores le caía a una de las hermanas de la Aldea Ishigami. Luego una frase muy cursi de: "El amor siempre triunfa" antes de empezar la siguiente parte del vídeo.
En ese momento, la proyección pasaba a Luna embarazada en el gender reveal y gritaba: "¡Son niños!", en referencia a los gemelos: Lyon y Dyon. Luego una conmovedora escena del nacimiento de los gemelos con Mozu diciéndole: "Son nuestros hijos, serán los mejores y más guapos guerreros". Luego una transición de año tras año en los cumpleaños de los gemelos, en donde Mozu y Luna mantenían una apariencia bastante juvenil pese al paso de los años. Y, finalmente, una imagen de Mozu y Luna besándose en sus vacaciones en Hawái.
Sia miró al Reino Científico, que parecían asqueados con el cursi vídeo y Mozu parecía horrorizado con lo que acababa de ver.
—¿Cómo es que estoy con una sola mujer? —Fue todo lo que pudo preguntar—. ¿Qué clase de horrible futuro es ese?
—¡Oh, vaya, Mozu! ¡Qué preciosa mujer! ¡Es la más linda que he visto en mi vida! ¡Seguramente encontraste a la mujer más hermosa del mundo y por eso la hiciste tu mujer! ~ —aseguró Gen interviniendo.
—¡Exactamente! ¡Ella será declarada la mujer más hermosa del mundo! —mintió terriblemente Kanna, sacando sus naipes y barajándolos para fingir que estaba leyendo las cartas o algo así.
Gen también utilizó sus trucos para mejorar la historia y desviar el tema de conversación lo suficiente para aprovecharse del momento y hacer que Mozu concordara con ellos. El hombre pareció bastante convencido después de un momento y finalmente aceptó a unirse a ellos.
Y así lograron su aliado temporal.
Saltaron sobre Gen, emocionados porque habían conseguido a ese aliado y luego agradecieron firmemente a las muchachas por ayudar.
—Aunque creo que se ha dañado la posible relación de Mozu y Luna, no creo que en este universo vayan a poder estar juntos teniendo en cuenta lo que ustedes acaban de hacer —mencionó repentinamente Jiyu, que parecía genuinamente preocupado.
—Bueno, verdaderamente no me importa, Lyon es un dolor en el trasero —mencionó molesta Kanna—, nadie quiere como descendencia de Mozu a un sujeto tan despreciable, Dyon cae mucho mejor.
—Nus es un buen tipo en mi universo, él y mi hermana hacen linda pareja —añadió Jiyu, que parecía bastante apenado por lo que acababa de suceder, y Kanna simplemente le palmeó la espalda.
—Ahora vamos a empezar a preparar nuestro contraataque contra el reino petrificador —mencionó Senku.
—Oh, cierto… debería hablarte un poco más sobre cómo funciona medusa, para asegurarme de que las cosas salgan bien en los próximos días —comentó Sia, y fue a quitarle su brazalete a Kanna—. Pero antes, necesito que despetrifiquen al león, será el mejor aliado en caso de que Mozu intente modificar los planes a última hora, teniendo en cuenta que no le gusta para nada eso de estar "con una sola mujer".
Todos asintieron y se fueron a preparar el líquido despetrificador.
…
¡Y eso es todo del capítulo 2 de esta loca historia! ¡Espero que les haya gustado mucho tal como a mí me gustó escribirlo! De verdad que disfruto mucho contar historias con mis niños, especialmente mi grupo favorito: Sen, Sia, Kanna, Draco y Tai. Lástima que no pude meter a Tai en esta historia, pero es que inicialmente iban a ser sólo Sen, Shizuku y Jiyu, jeje.
En fin… como saben, los personajes de Dr. Stone no me pertenecen, sino que pertenecen a Inagaki y Boichi; sin embargo, yo los utilizo para mis fines en estas historias que escribo. El personaje de Shizuku pertenece a Celeste Kaomy y el personaje de Jiyu pertenece a KrashDaimont.
Espero que les haya gustado este capítulo y que puedan dejarme un comentario, porque con sus comentarios es que me motivan a seguir escribiendo. ¡Los amo!
