La familia Rivaille, era conocida por haber sido los fundadores del Ejército de las Murallas, cuyo objetivo era el de defender a los habitantes de la isla de Paradis de los amenazantes titanes. Una familia que dejó un gran legado militar funcional de generaciones pasadas durante el último siglo.

Zoey Rivaille fue la última miembro de la familia en asumir el legado de sus antecesores, tomando el lugar de su abuelo, convirtiéndose en una soldado ejemplar y una figura importante dentro del ejército. Sin embargo, elegir la vida de soldado implicaba seguir un camino repletó de penurias, tragedias y dolor.

Antes de la idea de formar parte de la milicia, Zoey tuvo una feliz y cariñosa infancia, gracias a estar rodeada por su familia. Su padre Matt, su hermano Nate, y su querido tío Trevor, ejercían sus deberes como soldados en la "Legión de Reconocimiento".

Su abuelo Kitz era el comandante de la policía militar y su abuela Sara era la encargada de cuidarla desde el momento en que Zoey nació, después de que su madre Chloe enfermara con gravedad y falleciera al momento del nacimiento de la pequeña.

Pero para que su historia y la de la familia Rivaille se diera a conocer, será necesario retroceder unos años en el tiempo.


Entre los años 724-737, se desató un gran conflicto bélico que arrasó a ocho de las nueve familias más poderosas del imperio eldiano. Familias que hacían uso del poder de los titanes para atacarse mutuamente. Dicho conflicto fue conocido como la Gran Guerra de los Titanes, la cual culminó al tener al país de Marley atacando al debilitado imperio eldiano tras obtener el poder de siete de los nueve titanes, reclamando así, gran parte de su territorio y llevando a dicho imperio a su disolución.

En dicha guerra, participaron miles de soldados que luchaban por apoderarse del territorio y ejercer su dominio sobre las naciones.

El rey Karl Fritz contaba con el apoyo de las fuerzas armadas del país Hizuru, y también con la familia Ackerman; un clan genéticamente modificado para poseer los poderes de los titanes, pero conservando su forma humana.

Por otra parte, la planificación y ejecución de los ataques, estuvo a cargo de un general de rango superior llamado Kilian Rivaille; un eldiano con un vasto conocimiento militar, a quien el rey le confió el mando de su ejército gracias a su amplio entrenamiento en estrategias de combate, experiencia en batallas e ingenio táctico. Kilian y su familia habían recibido un entrenamiento especial en distintas disciplinas militares y además, eran expertos en artes marciales múltiples y especialistas en armas.

Para el año 737, Paradis era la única zona bajo el control de Eldia, entonces el rey al mando; Karl Fritz, trasladó la capital a la isla donde construyó tres grandes murallas para proteger a la humanidad, bautizadas como María, Rose y Sina. El rey usó el poder del Titán Fundador para dirigir a un gran número de titanes colosales, ordenándoles que endurecieran su cuerpo y, de este modo, edificar las murallas que aislaban a la población eldiana del resto del mundo.

Al culminar con su construcción en el año 743, Karl inició un proceso de lavado de cerebro que solo afectaba a los descendientes directos de Ymir, entre ellos, los miembros de la familia Rivaille. Por el contrario, los eldianos de otras razas no perdieron sus recuerdos y se les permitió vivir como nobles a cambio de su silencio. Aquellos que se opusieron a esta medida, como el clan Ackerman y el clan Azumabito, fueron perseguidos y exterminados.

El rey Fritz, consideraba que las enormes murallas no eran suficientes para proteger al pueblo Eldia de algún ataque por parte de las naciones enemigas, o ni siquiera, la protegería de los mismísimos titanes. A pesar de que los descendientes de Ymir ignoraban la razón por la que se encontraban encerrados entre esas murallas y desconocían el origen de los titanes, los eldianos compartían el mismo temor hacia esas enormes criaturas. Por esa razón, el rey le encomendó al general Rivaille, la creación de un ejército militar encargado de defender el territorio de Paradis. Fue así como Kilian fundó el Ejército de las Murallas y se convirtió en el primer Comandante en Jefe del Ejército.

Pocos años después, se crearon nuevas divisiones, las Tropas de Guarnición; encargados de mantener el orden dentro de las murallas, la Policía Militar; que servían como guardias personales del rey y su familia, y la Legión de Reconocimiento; cuyo objetivo era explorar fuera del territorio humano y luchar contra los titanes, con la misión de recaudar información útil sobre cómo vencerlos.

Para cumplir con dicho propósito, el ejército se vio obligado a idear una herramienta capaz de combatir contra las enormes criaturas. Dicha herramienta fue llamada EDM3D "Equipo de Maniobras Tridimensionales"; un dispositivo de propulsión a gas que le permitía a los soldados moverse por cualquier superficie, en cualquier inclinación e incluso surcar por los cielos. También contaba con unas cuchillas hechas de acero super endurecido, diseñadas para cortar la gruesa piel de los titanes.

Varios miembros de la familia Rivaille, eligieron unirse a esta división, sin embargo, muchos perdieron la vida al exponerse a los riesgos que implicaba enfrentarse a un enemigo de nulo conocimiento para ellos.

A pesar de la conformación del ejército, el rey continuaba sintiéndose desprotegido, sobre todo, luego de ser traicionado por los Ackerman, quienes anteriormente servían como guardaespaldas de la familia real. El rey, asustado, le pidió a Kilian que se hiciera cargo de la Policía Militar y de su protección. Aún así, sin saber el motivo por el cual el rey sentía tanto temor, decidió aceptar su petición asumiendo el cargo de Comandante y juró velar con lealtad y honor por la protección de la familia real, dando inicio al legado militar de la familia Rivaille, en el cual, un miembro de la familia debía ceder el cargo de Comandante de la policía militar para resguardar la seguridad del gobierno real. Por esa razón, luego del fallecimiento de Kilian unos años más tarde, su hijo mayor, Liam Rivaille, fue el encargado de asumir el puesto.

El gobierno real había impuesto una estricta prohibición y censura de libros o cualquier tipo de material que contenga información relacionada con el mundo exterior, y por mandato del rey, sus propietarios debían ser castigados hasta con la muerte de forma inmediata. Esto llamó tanto la atención de Liam, que él mismo, estaba dispuesto a llegar al fondo del asunto.

Con la ayuda de sus hermanos, comenzó a investigar a la monarquía y a su selecto grupo de fieles seguidores quienes gozaban de una vida acomodada y una posición privilegiada dentro del gobierno real.

Cuando los nobles y monarcas se percataron de dicha investigación, llevaron a cabo una minuciosa estrategia para deshacerse de sus espías. Primero, los hermanos de Liam fueron asignados a una serie de "misiones" que implicaban perseguir y capturar a un grupo de criminales provenientes de los barrios bajos de la capital, entre ellos, la Ciudad Subterránea. A pesar de haber atrapado y entregado a varios de ellos a la policía, un día sus hermanos son asesinados en una taberna del distrito Ehrmich, ubicado en el sur, fuera de la muralla de Sina. Al poco tiempo, el Comandante Liam, fue encontrado muerto en su oficina a causa de una severa intoxicación.

El propio gobierno se encargó de divulgar la noticia, alegando que fue a causa de un envenenamiento hecho por los mismos responsables de las muertes de sus hermanos: los Ackerman. Aunque, la realidad sobre esto, se tratasen de simples rumores falsos, esparcidos por la monarquía que escondía a los verdaderos responsables. Lo que provocó, a causa de esa noticia, que la Policía Militar iniciara una intensa persecución contra los miembros de la familia Ackerman.

La muerte de su comandante causó mucha preocupación entre los miembros de la policía ante la inmensa cantidad de compañeros soldados que estaban siendo cruelmente asesinados.

El encargado de tomar el lugar del comandante fue su único hijo, Kitz Rivaille -abuelo de Zoey- quien no sólo se convertiría en el Comandante más respetado y apreciado por la Policía Militar y el pueblo de Eldia, sino también, uno de los primeros soldados en desenmascarar a la familia real y descubrir uno de los secretos más grandes oculto dentro de las murallas.

Kitz era un hombre amable y gentil, de estatura media baja, de cabello castaño y bigote. Cualquiera diría que debido a su personalidad cálida y tolerante, no sería la persona más adecuada para comandar dentro de la Policía Militar, sabiendo que su persona no se caracterizaba por ser alguien demasiado estricto con sus soldados. Sin embargo, Kitz era un hombre muy moralista, sabio, brillante y apasionado con su trabajo. También era un hombre muy organizado y observador, siempre estaba al tanto de todo lo que sucedía dentro y fuera de la policía y no dudaba en reprender a los que lo merecían, pues era un fiel defensor del orden y de su pueblo que no toleraba ninguna clase de injusticia. Por esa razón, se dedicó a combatir los constantes abusos de autoridad y negligencia llevados a cabo por varios superiores de la Policía Militar, como apropiación de tierras, alimentos y dinero de los impuestos perteneciente a los ciudadanos, y también ventas ilícitas de armas en el mercado negro.

El abuelo de Zoey se encargó de revertir la situación e ideó un control exhaustivo de cada una de las tareas ejecutadas por sus subordinados. Con los años, dichos actos de corrupción fueron disminuyendo, ganándose el cariño y la gratitud del pueblo eldiano, junto con el respeto de aquellos soldados que también defendían la justicia y querían hacer lo correcto por el pueblo.

Kitz estaba decidido en continuar con la investigación que había iniciado su padre algunos años atrás, con el claro objetivo de descubrir no sólo los secretos que ocultaba la familia real, sino también, la verdad sobre los misterios que rondaban a la repentina muerte de su padre. Kitz logró entablar una buena relación con los miembros de la monarquía y las familias más nobles de la capital, con el fin de obtener algún tipo de información para continuar con su investigación. Pero todo esto, fue logrado gracias a la ayuda de su gran amigo y camarada, Dot Pixis.

Dot Pixis; comandante de las Tropas de Guarnición, era considerado un hombre bastante excéntrico, que supo cómo ganarse la confianza de los Lords y otros miembros influyentes del gobierno, además de ser uno de los miembros de la milicia más leales a la corona.

Aunque Kitz nunca le reveló sus verdaderas intenciones, Pixis no dudó en actuar como puente para que su amigo se acercara a ellos. Fue así como logró descubrir que el actual rey Fritz no era quien tomaba las decisiones de gobierno, sino que era influenciado por otros miembros de la monarquía y del Culto de las Murallas. La fuerte intervención religiosa y política de dicho culto en los asuntos de la corona, llamó la atención de Kitz y despertó su curiosidad. Dando como resultado a una rara creencia por parte de una fracción del culto, que creían que las murallas eran una divinidad y no debían ser intervenidas de ninguna manera por los seres humanos. El Comandante Rivaille hizo una discreta investigación al respecto, sin embargo, no pudo descubrir nada de utilidad debido a que sus miembros eran demasiado reservados.

Durante ese tiempo, los abuelos de Zoey se conocieron. Kitz y sus camaradas de la Policía Militar solían frecuentar un lujoso restaurante, donde su abuela Sara trabajaba como chef. Ella era una mujer de cabello rubio oscuro y ojos marrones. Además de ser una mujer muy dulce y afectuosa, era reconocida por sus clientes por los exquisitos platillos que preparaba. En pocos años, Kitz y Sara se unieron en sagrado matrimonio, se mudaron a una residencia en el Distrito de Stohess y tuvieron dos hijos, a los cuales llamaron Trevor y Matthew.

Trevor Rivaille -tío de Zoey- era un hombre corpulento, fornido, recto e imponente, de carácter rudo y autoritario. Tenía cabello castaño y ojos marrones. Luego de graduarse de las Tropas de Reclutas, él y su hermano menor se unieron a la Policía Militar para luego decidir cambiar de división. Trevor regresó a las Tropas de Entrenamiento para volverse instructor de cadetes, destacándose por ser un hombre muy estricto y exigente con sus alumnos. Aquellos soldados que eran considerados débiles, no eran capaces de soportar sus duros métodos de entrenamientos. Algunos años más tarde, Trevor se convirtió en el instructor de los reclutas novatos del Cuerpo de Exploración, instruyendo a sus alumnos en el arte de combatir y asesinar titanes.

Por su parte, Matthew Rivaille -padre de Zoey- era un hombre esbelto, musculoso y galán. Tenía cabello castaño y ojos color miel como su padre. A diferencia de su hermano, él tenía un carácter más amistoso y simpático. También era un hombre muy caballeroso, respetuoso y sociable. Durante sus años de entrenamiento en las Tropas de Recluta, conoció a quienes se convertirían en sus dos mejores amigos: Erwin Smith y Nile Dok.

En un inicio, "Matt" se había enlistado en la Policía Militar junto con Nile, pero poco tiempo después decidió unirse al Cuerpo de Exploración junto con Erwin, pues ambos compartían los mismos ideales, queriendo conocer el exterior y descubrir la verdad sobre los titanes, aún si eso significaba arriesgar sus vidas.

Aunque el padre de Zoey era bastante popular entre las mujeres y cada tanto aceptaba los halagos y compañía de alguna de sus admiradoras, él dejaba en claro que no quería tener ningún tipo de compromiso con ninguna de ellas. Sin embargo, eso cambió cuando conoció a la madre de sus futuros hijos, Chloe.

Chloe era una encantadora y hermosa muchacha de cabello rojizo y ojos verdes brillantes como esmeraldas. Matt la encontró caminando sin rumbo por las calles de Shinganshina.

La joven había decidido escapar de su hogar, luego de que su padre intentara golpearla y hasta abusar de ella. Su madre, la mujer que debía de protegerla, no parecía tener interés en rescatarla o ayudarla de las garras de su padre, por lo que tomó conciencia y escapó de ese lugar, huyendo hacia el Distrito Trost, situado en el sur de la Muralla Rose.

Matt decidió ayudarla. Sin querer dejar a la joven a su suerte, le ofreció llevarla a su casa en Stohess. Su familia la acogió con amabilidad y la ayudaron a salir adelante para que comenzara una nueva vida, alejada de los constantes abusos de sus padres. La dulzura y delicadeza de Chloe cautivaron los corazones de los Rivaille, especialmente el de Matt, quien no pudo evitar enamorarse de aquella joven tan radiante y llena de luz. Chloe era una mujer sensible, pero a la vez era muy fuerte y valiente. En tanto ella, tampoco había podido evitar enamorarse de aquel joven apuesto que se había convertido en su héroe y protector. En poco tiempo se casaron y un año después nació el hermano mayor de Zoey, Nate Rivaille; un niño de cabello rojizo como su madre y ojos color miel como su padre.

La familia Rivaille estaba pasando por uno de sus mejores momentos y toda esa felicidad había hecho que el viejo Kitz dejara a un lado su investigación, sobre todo porque le preocupaba el bienestar de su familia. Por más discreto que pudiera actuar, sabía que cualquier movimiento en falso pondría en riesgo sus vidas.

El tiempo pasó y 7 años después, la familia recibió la grata sorpresa de que Matt y Chloe estaban esperando otro bebé. La llegada de Zoey llenó de alegría a sus seres queridos que la esperaban ansiosos. Pero toda esa felicidad, se vio interrumpida con el lamentable fallecimiento de Chloe.

Un año antes, Chloe enfermó y su condición había empeorado con el transcurso de los meses, por lo cual, este segundo embarazo implicaba un alto riesgo para ella. Pese a las advertencias del médico, Chloe decidió continuar, dispuesta a hacer lo necesario para que su hija naciera sana y salva. Cuando Zoey llegó al mundo, su madre se sentía agradecida y dichosa de haber dado a luz a una preciosa niña, tan saludable y vigorosa. Chloe deseaba con todo su corazón que su pequeña pudiera crecer fuerte y rodeada de mucha felicidad y amor, aún sabiendo, que el mundo en que había nacido podría ser inhóspito y aterrador.

Matt estaba devastado. Acababa de perder a la mujer de su vida. A la persona que le mostró que el mundo podía ser atroz y maravilloso a la vez, y que es posible encontrar un rayo de luz en medio de tanta oscuridad.

Tomó a su hija entre sus brazos y vio reflejada en su rostro, la viva imagen de su amada esposa. Mostrando en su pequeño y angelical rostro, la misma sonrisa encantadora que su madre alguna vez les dio. En ese momento, su padre pensó que sería capaz de protegerla de cualquier peligro y cumplir con el deseo de su esposa, pero el destino es completamente incierto y la vida es tan impredecible que es casi imposible coincidir con lo que uno desea.

Ni imginando el peor escenario posible, Matt hubiera sido capaz de prever todo lo que su hija tendría que afrontar para convertirse en la soldado que iba a ser. Ni siquiera Zoey hubiera podido imaginar todo lo que le esperaba en el futuro.

Pero de haberlo sabido... ¿acaso habría elegido otro camino?