Disclaimer: Los personajes corresponden en derecho de propiedad a sus respectivos autores, esta historia es sin fines de lucro. Sólo con el único fin de entretener a un público lector; de una fan para fans.
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Por Ladykya0
Pokeshipping week 2023
Fecha de publicación: Nov 1
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Día 1
Primera Cita
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Estaba nervioso.
Cuando le dijo que pasaría por ella al gimnasio Celeste, no pensó lo que en realidad significaba tener una cita.
— La primera cita — Recordó el tono, más parecido a regaño que le había dado Brock cuándo le contó las opciones que tenía.
Ash creyó que podrían tener alguna batalla de práctica, platicar, pasar el rato juntos o incluso, si su mente se esforzaba más; ir al cine a ver alguna película taquillera, aunque eso último no lo entusiasmaba demasiado. Pero, su amigo de inmediato lo hizo callar y sin decir nada más colgó la llamada que estaban teniendo, solo para llegar, sin aviso; dos horas después a su casa, en Paleta.
No sabía que ahora todo sería más difícil.
No sabía que ahora debía tomar más consideraciones o dedicarle más tiempo de sus pensamientos a la planeación de salidas. Él solo quería pasar tiempo a solas con Misty, ¿por qué parecía que se había complicado todo?
— A Misty le gustan las flores — le dijo.
Así que ahora estaba ahí con un ramo enorme de lirios blancos, los cuáles resultaban ser las favoritas de la Lider de gimnasio. El chico observó el reloj deportivo que adornaba su muñeca izquierda, y viendo que la hora se acercaba, comenzó a sentir mucho calor.
¿Cuándo había sido la última vez que se había sentido así? Ni en su coronación como campeón había estado tan inquieto.
— Pikachu no puede ir — sentenció el mayor y ambos, tanto entrenador como pokémon se observaron. — Al menos esta vez, déjalos estar solos — le guiño al tipo eléctrico y este de inmediato asintió, convirtiéndose esta vez en cómplice del moreno.
Comenzó a caminar directo al gimnasio, sintiéndose un poco solo, no era común no tener a su compañero a lado. Era extraño.
— Por esta vez deja tu gorra y tu ropa de entrenador y vístete decentemente — Lo observó de pies a cabeza. Eso si lo había ofendido bastante.
¿Qué de malo tenía la forma en la que él se vestía comúnmente?
Creía que estaba exagerando, pero esta vez fue su madre quién asomándose por la puerta de la cocina coincidió completamente con Brock.
— No puedo dejar que vayas a una cita con Misty usando esa ropa, Ash — Negó Delia.
El entrenador llevó su mano hasta su cuello intentando liberarlo, inútilmente, de la presión que sentía por haber abotonado en su totalidad la camisa celeste que llevababa puesta. No lo habían hecho vestir una corbata porque habría sido demasiado, y aún así sentía que era demasiado.
Suspiró pasando su mano por su cabello que también lo habían hecho acomodar. Por fin estaba de frente a la puerta principal.
Había llegado.
— Y, por último — sonrió triunfante el entrenador tipo roca — van a ir a cenar al hotel Diamante. Es uno de lo más lujosos en Celeste y por supuesto ya hice reservaciones — Finalizó.
— ¡Qué maravilla! — Contestó Delia.
— Siento que me ahogo — Se quejó él.
El resonar de las campanadas que marcaban las 7:00 pm en punto, lo hizo inhalar profundamente para después tocar el timbre que anunciaría su llegada. Una cosa que si era verdad era que se había esforzado en llegar a tiempo a esa cita, porque de alguna forma no quería arruinarlo. No quería a una Misty enojada, quería a una Misty feliz.
Porque, aunque no pareciese, le gustaba más cuándo le sonría.
Pero, ¿la haría feliz el plan que Brock había hecho para ellos? No tenía idea de qué esperar porque no se sentía él mismo y en realidad no sabía qué sentir, además del nerviosismo que parecía superar el que había tenido el día que ambos habían declarado sus sentimientos. No creyó que todo iba a cambiar tan repentinamente, pensó que todo seguiría igual y que solo la frecuentaría más. Pero de pronto se dio cuenta que ya no solo era su amiga Misty, sino que ahora también era su novia.
Su novia.
La puerta por fin se abrió. Y todo él se quedó en silencio.
Olvidó todo lo que estaba pensando, incluso la extraña incomodidad que había estado sintiendo desde el inicio.
— ¿Ash? — Escuchó su voz suave y él la siguió observando a pesar de haberla escuchado llamarlo. Era la misma chica pelirroja a la que le gustaba molestar, con la que entrenaba sin titubear y a quién quería ver alegre. — ¿Todo bien?
Por fin reaccionó y con una sincera sonrisa le dijo, lo único que Brock no había planeado. — Te ves muy bonita hoy —. Sintió sus mejillas arder ante sus propias palabras, mientras observaba el lindo vestido azul que vestía y con el que parecía ir a juego. Carraspeó un poco cuando al mirarla a la cara notó que ella se encontraba en las mismas condiciones.
Sonrojada y tímida.
Jamás creyó verla así.
Siendo tan amigos como lo eran y conociéndose como lo hacían, jamás había notado lo linda que se veía cuando se ruborizaba.
— Tú también te ves diferente hoy, Ash. Bastante bien, si me preguntas — le sonrió complaciente y él recordó la incomodidad en su cuello. — Pero es obvio que no estás cómodo —. Comenzó a acercarse a él y el entrenador pudo percibir el ligero dulzor que desprendía cada uno de los movimientos de la chica. Se sintió encantado cuando el suave roce de sus manos subió desde su cuello hasta su cabeza y revoloteó por sus cabellos, devolviéndoles su natural rebeldía. — Mucho mejor, ahora eres más tú.
Ambos se sonrieron, y Ash pudo sentir una ligera brisa rozar por su cuello que ahora percibía sin ninguna molestia, al tiempo que la chica parecía alejarse de nuevo.
Ya no sentía aquella presión del inicio, ahora todo parecía tener sentido.
— ¿Esas son para mí? — Preguntó tímidamente. El chico asintió, llevando al frente los lirios que había mantenido oculto tras él y que en su descuido Misty notó.
— Sé que son tus favoritas — dijo, y Misty le regaló una sonrisa que a Ash le pareció ser la más bonita que había visto en la chica. Por fin, después de todo; agradeció a Brock por eso. Mientras pensaba que, solo para ella, hacer traer todos los lirios de Kanto no sería mala idea.
Se sorprendió demasiado cuando cayó en cuenta de la magnitud de su pensamiento.
Sonrió, porque hasta ese preciso segundo, cualquiera podría decir que Ash no sabía mucho de relaciones románticas. Incluso, que las chicas le eran indiferente. Sin embargo, viendo caminar a la pelirroja a un lado suyo, abrazando sobre su pecho el ramo de flores blancas que reflejaban el violáceo atardecer, comenzó a sentir emoción e incertidumbre.
Porque lo entendió.
Supo que le gustaba lo que significaba esa nueva faceta, esa dónde ya no eran solo amigos y compañeros de batalla, sino que intentaban ser algo más profundo, tener un lazo mucho más fuerte. Y sí, todo se había vuelto más complicado, porque ahora significaba mucho más que solo pasar tiempo extra con la Líder de Gimnasio.
Era una nueva aventura.
Y a Ash Ketchum le gustaban las aventuras, tanto como le gustaba Misty.
Con esa nueva afirmación, el entrenador detuvo su andar, llamando completamente la atención de la chica quién no tardó en hacer lo mismo. Lo observó de manera curiosa cuando Ash solo con una sonrisa extendió su mano esperando por la de ella.
Misty le regaló una mirada llena de emoción y nerviosismo.
Sin decir nada más, ella tomó la mano de su acompañante. Titubeante al inicio, pero afianzando el agarre al final, dándose valor a sí misma, siendo correspondida de inmediato. Sintió una calidez que pareció recorrerle el cuerpo entero y entonces supo que ella ya no dejaría de buscar ese tacto.
Ambos se miraron y comenzaron a caminar de nuevo.
El hotel Diamante no se encontraba lejos, las estrellas comenzaban a adornar poco a poco el firmamento de esa noche cálida de verano, las cuales acompañaban su andar.
— Creo que es una excelente noche para nuestra primera cita.
Comentó Misty, Ash solo la observó de reojo para después asentir e inconscientemente halarla suavemente un poco más hacía él. Es dónde quería que la pelirroja siempre estuviera.
Cerca de él, a su lado.
— Creo que es una excelente noche porque estamos juntos.
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¿Hay alguien aquí con vida?
jajaja, Holas.
Pues miren, Ash se fue y yo no sé cómo va a ser el siguiente año con esta dinámica. A veces me dan ganas de leer esta ship pero solo veo muerte y desolación, y no de la que me gusta. Auxilio.
Entonces pues se dio la oportunidad y aquí andamos aunque sienta que ya nadie lee aquí :c
En fin, bonito pokeshipping week, porque al final del día sigue siendo una de mis OTP
