Capítulo 19
Azize apretó los labios para no reírse cuando vio a Cevdet revolverse incómodo en la silla, estaban en una entrevista, París había quedado en la nebulosa luego de una semana atareada y llena de entrevistas…
Sentían que no podían quejarse, los productores habían hecho un muy buen trabajo y habían promocionado el documental… y en los dos tráileres que habían lanzado para testear el interés de la gente, Ali se había encargado de mostrar partes de Azize y Cevdet hablando y leyendo las cartas… y el tema de la química se había instalado…
-Pero entonces usted dice que no había planeado intervenir en la filmación…- dijo la mujer que lo entrevistaba y él la miró brevemente, cansado.
-Así es… sucedió luego, cuando encontramos esas valiosas cartas, que comenzamos a pensar cuál sería la mejor manera de mostrarlas en el documental… y un día, probando de leerlas en cámara… al equipo y al director les gustó la idea… y me propusieron… nos propusieron hacerlo…
-Con la señora Azize…
-Así es…
-¿Ustedes ya se conocían?
-No… yo había visto algunos de sus trabajos y la recomendé con los productores…
-Y ¿cómo es su relación?
-Creí que hablaríamos del documental…
-Créame, coronel… a las personas también les interesa la parte personal…
-Bien… nuestra relación es muy buena… pensamos igual en muchas cosas, por eso nos abocamos a este proyecto y estamos muy felices…
-Le preguntaré esto y… la verdad es que hay rumores de que usted y la señora Azize…- Cevdet giró la cabeza y la miró. Ella supo que él estaba saturado y que no había nada que ocultar, que solo habían querido preservarse precisamente, por no pertenecer al medio del espectáculo.
-¿Qué cambiaría para el éxito o el fracaso del documental?
-Ustedes se ven como una pareja real… yo creo que la gente lo asimilaría de manera positiva…
-Yo no estoy acostumbrado a estas cosas… mi vida nunca estuvo en la pantalla de televisión…
-Coronel…
-Azize y yo nos queremos… hemos descubierto que el amor y la admiración es mutua y nos proponemos seguir adelante…
-Me está confirmando una relación…
-Así es…- dijo y sonrió de costado luego de ver la sonrisa en la cara de Azize.
-Se lo agradezco… se que usted cree que es un detalle…
-No es eso… es solamente que no soy un actor… o alguien relacionado con el espectáculo y no creí que fuera importante revelar hechos de mi vida privada…
-Coronel… le deseo mucha suerte… he visto el documental y es de los que llegan al alma por cómo esta contada la historia… y el condimento de usted y la señora Azize leyendo esas cartas, hablando de eso, esa forma en la que se miran… es muy contundente…
-Le agradezco su opinión…- dijo Cevdet y entonces la entrevista terminó.
Azize se acercó luego de que Cevdet se levantara del sillón y fue a saludar a la periodista…se conocían de alguna entrevista que la mujer le había hecho en su anterior trabajo...
-Nasli… ¿cómo estás?
-Muy bien… aquí… terminando la entrevista con el coronel Cevdet… y feliz por ti…
-Gracias, yo también lo estoy…- dijo con una sonrisa ella.
-Le decía al coronel que me ha encantado el documental… y el trabajo de ustedes es magnífico…
-Muchas gracias… la verdad es que no lo hemos visto totalmente terminado… pero nos satisface como a ti…
-¿Y cómo es él? - preguntó la mujer y se perdió en los ojos de Azize, que se suavizaron un poco.
-Es un excelente profesional… tenía muy en claro lo que quería lograr y lo que necesitaba contar en ese documental… y a mí me encantó la idea…
-Me refería a lo personal…
-¿Es parte de la entrevista?
-Sólo es curiosidad…
-Me he enamorado profundamente… a veces pienso que fue rápido… como un flechazo… pero en otros momentos me parece que fue tan de a poco que casi no me di cuenta… lo importante es que es mutuo…
-Así es… eso es notorio…- le dijo y ambas sonrieron.
Azize caminó por el estudio buscándolo cuando pudo zafarse de la charla "amena" con Nasli… creyó que él había ido a refugiarse al camarín, pero no lo encontró allí…
Müge le dijo que lo había visto salir a la terraza… un lugar frecuentemente utilizado por los empleados para airearse o tomar un descanso, pero ella apenas había estado allí…
Lo vio de lejos, sus manos tomando la baranda, él mirando hacia el mar…
-Cevdet…- dijo con suavidad y él no se giró, solo entrecerró los ojos al escuchar su voz.
-¿Podemos irnos?- dijo en voz todavía mas suave que la de ella.
-¿Te sientes mal?
-Solo un poco cansado…- dijo y sintió las manos de ella sobre sus hombros.
-Vámonos… no se si quedó algo pendiente, pero hablaré con Müge y lo pasaremos para otro día…- le dijo comprensiva.
Él giró para mirarla y se perdió en sus ojos. Ella lo notó algo cansado, el maquillaje tabapa algunas imperfecciones de su cara que a ella le fascinaban, pero no creyó que fuera el momento para decirlo…
-¿No quieres quitarte el maquillaje que te pusieron?
-En casa… creo que me siento más agotado que las veces que estuve en el frente de batalla…- dijo y ella volvió a apretar los labios para no reírse.
-Ven aquí…- dijo y lo apretó entre sus brazos.
Cevdet cerró los ojos y se entregó a ella, que acarició su espalda y besó suavemente su cuello…
-Debes aprender a relajarte un poco, mi vida…- le dijo cuando se sentó tras el volante y encendió el motor.
-Lo se… lo intento… pero cuando periodistas como la de hoy comienzan con esos gestos suspicaces… la creí capaz de preguntarme si teníamos intimidad…- dijo y ella no pudo evitar la carcajada.
-Tú eres el exagerado aquí…
-Azize…
-Hablo en serio… tú me amas, yo te amo… eso se ve en el documental… la gente hablará de eso, nos guste o no… pero aún estamos a tiempo de cortar nuestras intervenciones, contratar dos actores y que se hable de ellos… o no se hable más del documental… no se si soy clara…- dijo ella y alzó las cejas.
-Créeme… lo entiendo… y entiendo lo de la química… pero ¿hace falta querer conocer cada detalle?
-El periodismo del espectáculo es así…- dijo y se alzó de hombros- ¿vamos a casa y te preparo uno de esos baños? - le ofreció y él sonrió con ternura.
Llegaron un rato después y subieron directamente a la habitación. Gül les había dejado la comida preparada, pero decidieron que el baño sería primero…
Cevdet se sentó, un buen rato después, disfrutando del clima húmedo y cálido del baño, mientras esperaba que ella se cambiara…
Cerró los ojos y sonrió, pensando en lo hermoso que era poder compartir su casa, ese sueño de vivir allí, en su lugar en el mundo con quien era la mujer de su vida…
Sonreía con ganas cuando ella llegó y al abrir los ojos, la vio contagiada de su felicidad…
Ella se sentó a su lado, con la toalla anudada debajo de sus brazos y apoyó su cabeza sobre el hombro de él…
-Todo esto terminará… y serán anécdotas que podremos contarle a nuestros hijos… ¿no crees?
-Así es…- dijo él y la acercó más a su cuerpo.
-Y con respecto al casamiento…
-Dime…
-¿Dónde lo haremos?
-¿Te refieres a la fiesta?
-Me refiero a dónde nos casaremos…
-Si quieres ir a Estambul… lo entiendo…
-Estambul es una ciudad que amo… allí nací y me crié… pasé casi toda mi vida…
-Bien… no hablemos más entonces…
-Pero aquí es donde quiero continuarla… y ser feliz… contigo… ¿acaso Izmir no es tu lugar en el mundo?
-Mi lugar en el mundo es contigo…- le dijo y besó su frente con ternura- pero sería maravilloso casarnos aquí… y vivir en esta casa… ¿qué te parece?
-Creí que tu duda era donde casarnos… que era un hecho que nos quedaríamos a vivir aquí…
-No quiero imponerte nada… este es un lugar maravilloso… pero no tienes por qué estar de acuerdo con eso…
-¿Cómo podría no estarlo? No he echado de menos mi ciudad ni un momento… digamos que te ocupaste de mantenerme ocupada…
-Así es…- dijo y ambos sonrieron.
Cevdet tiró de ella y la hizo sentar sobre sus rodillas. Ella lo abrazó y besó sus labios. El beso se extendió y por momentos se tornó intenso, pero decidieron terminar con el baño y dedicarse al placer luego de la cena… ambos estaban hambrientos…
Unas horas más tarde se abrazaron extenuados para dormir. Azize entrecerró los ojos al apoyar su cara en el torso de él, en donde pudo apreciar los latidos agitados de él, calmándose de a poco…
-Decidí… que quiero dejar de cuidarme…- dijo en voz baja y él se tomó un momento para contestar.
-Me alegra…- dijo y ella levantó la cabeza y le sonrió con ternura.
-Tendremos esa mini Azize… o un mini Cevdet…- dijo y alzó las cejas.
-Te amo…
-Te amo…- le dijo ella y se acurrucó en sus brazos, relajada y feliz…
Bueno, ya queda solo un capítulo para el final... espero que sigan disfrutando esta historia y disculpas por las demoras, esa esa época del año en la que surgen nuevas cosas todo el tiempo! Nos vemos en el final de esta historia!