Capítulo 4: Cupcakes.


(Evil-Nota.- Muy bien, mis queridos amigos, lo único que diré es que el título es un preámbulo de lo que está a punto de suceder, así que si conocen la referencia y no les gustó, dejen de leer en este mismo momento, y si no la conocen pero son fans del Gore, creo que les gustará, y dependiendo del punto de vista de cada uno, éste capítulo será incluso más cruel que el anterior)


(Octubre 31, 2016 [Calendario local] - 04:00 horas desde la infección inicial - Reloj de misión de la Resistencia - Locación: Helicarrier de S.H.I.E.L.D.)


El pánico se había extendido como el fuego en un campo seco.

Reportes de todas las ciudades del mundo, en especial aquellas con superhéroes, llegaban sin ton ni son, hablando sobre personas que simplemente empezaban a comerse a otras sin mediar palabra.

Nadie sabía qué estaba pasando, al menos hasta ahora.

Como tal, Nick Fury se había dado la tarea de reunir a todos los héroes y villanos que pudo para formar una resistencia, en un intento desesperado por frenar la infección.

Y ahora, en la sala de control del Helicarrier, se encontraban varias decenas de héroes y agentes de S.H.I.E.L.D., acompañados remotamente por más héroes, villanos y agentes de W.A.N.D. y S.W.O.R.D. desde el Sitio y la Base Damocles, todos ellos esperando noticias y el plan de ataque para frenar y curar o eliminar a los zombies.

Mientras todos se preguntaban qué clase de plan había ideado Fury, junto a la plataforma donde iban a hablar, un par de médicos estaban terminando de colocarle los vendajes al muñón que Majestia tenía tras haber perdido el brazo contra Style Queen al tratar de salvar a sus hermanas Streak y Stretch, y por su parte, Fury la veía con una rarísima expresión para el siempre estoico Director de S.H.I.E.L.D., preocupación.

- Loud, no tienes porqué estar aquí, debes quedarte en la enfermería. - Dijo Nick Fury.

- Perdí un brazo, Fury, no estoy muriendo. - Dijo Majestia mientras miraba el muñón que le quedaba por brazo derecho. - Además, necesitan mi testimonio, Leni es por mucho la más peligrosa de todos ellos y sólo yo he visto su potencial.

- No digas que eres la única, Majestia. - Dijo Firestar. - Yo fui una de sus maestras.

- Sí, pero créeme cuando te digo que ella se había estado conteniendo todo este tiempo.

Con eso dicho, Fury, Firestar, Tom, American Son y Majestia caminaron hacia el centro de la sala, atrayendo la atención de todos, principalmente debido al hecho de que a Lori le faltaba un brazo.

Una vez que estuvieron en el centro de la sala de control, Majestia asintió y dijo:

- Bien, seré breve porque para este punto, todos ya tienen una buena idea de lo que pasa y cada segundo que perdemos esto avanza más y más. - Dijo Majestia. - Aparentemente, la lunática de mi hermana y el idiota de Mr. Fantástico mintieron acerca de la misión en otro universo, ya que cuando Party Blast y la Ranger Amarilla regresaron, ellas trajeron un presente bastante malo.

- Hasta ahora, tenemos informes de que Party Blast, Spider-Man, Ladybug, Rena Rouge, Carapace, Puño de Hierro, Stream, los Rangers Amarillo y Rojo, Ace Savvy, Style Queen, la Mujer Invisible, la Mole, Ethan Morgan, el Capitán América y Sarah Fox han sido infectados por el virus, y tenemos confirmación de que Chat Noir, Queen Bee, la Princesa Star, Streak, Iron Heart, Stretch, Mr. Fantástico, y los Rangers Negro y Rosa han muerto. - Dijo Fury.

- Como pueden ver, la situación se está poniendo bastante fea, por lo que debemos actuar rápido y con cautela. - Dijo Majestia. - El plan es simple, mientras nosotros somos divididos entre las ciudades y poblados que se han visto afectados por el brote para intentar salvar a todos los inocentes posibles, los técnicos y genios que todavía no han sido infectados estarán trabajando en la Base Damocles, reconfigurando el motor temporal para convertirlo en un motor translumínico.

- Y por más que quieran a los infectados, no se puede hacer nada por ellos, Iron Heart se lo confirmó a Majestia antes que Ace Savvy le aplastara la cabeza, así que no duden, sean quienes sean los infectados, tendremos que eliminarlos a todos si queremos sobrevivir. - Espetó American Son.

La muchedumbre de héroes y villanos se dividió en ese momento, entre los que estaban dispuestos a hacer lo que fuera para poder vivir un día más ante lo que parecía ser un posible fin de la raza humana, y los que aún tenían dudas y se negaban a asesinar a sus amigos, familiares y compañeros, pues cabía la posibilidad de que Iron Heart hubiera mentido sólo para desmoralizar a Majestia.

- Sea lo que sea que pase, chicos, ustedes hagan lo que puedan. - Dijo Tom. - Cúbranse las espaldas y sobre todo, no se contengan. Quienes hayan sido en el pasado y las viejas rivalidades que haya habido entre nosotros no pueden interponerse en esto si queremos tener aunque sea una mínima chance de sobrevivir.

- Y sobre todo, tengan mucho cuidado, no permitan que los rasguñen o los muerdan. - Dijo American Son.

- K.A.R.E.N., comienza la división los equipos y prepara los jets para el despliegue. - Dijo Majestia.

- Enseguida... - Respondió la IA de Spider-Man en un tono inusualmente seco.

- ¿Estás bien? - Preguntó Firestar.

- Bueno, ahora que lo preguntas, me siento como una mierda. ¿Y cómo putas no podría sentirme así? Mi papá se acaba de comer a mi mamá y a mi tía May, y ahora, en lugar de buscar una cura para ayudarlo, los estoy ayudando a matarlo, y ahora te pregunto... ¿Qué putas mierdas te hizo pensar que esa era una buena pregunta?

- Ya es suficiente. Lo siento mucho, K.A.R.E.N., pero es por el bien común. - Dijo Twilight mientras se acercaba al grupo. - Sabemos cómo te sientes, pero escuchaste a Majestia...

- Sé lo que dijo y sé que Lisa Loud era un monstruo y una idiota, algo me dice que lo que dijo sobre que esta mierda no tiene cura fue solo una mentira.

- Me gustaría que así fuera, pero aunque tuvieras razón, yo he visto y he sentido las atrocidades de las que son capaces. - Dijo Majestia mientras miraba su muñón. - Créeme que no eres la única que pasa por este sentimiento de dolor y frustración al no haber otra salida.

- Pero debes entender que ellos ya no son nuestros amigos, no después de lo que ví que hicieron Jackie y Marco con Star. - Dijo Tom crudamente. - Son unos monstruos horribles que deben ser eliminados cuanto antes para evitar que se sigan esparciendo.

- En especial Ladybug... - Gruñó Hawk Moth mientras él y el Duende Verde caminaban hacia el grupo. - Marinette Dupain-Cheng me ha arrebatado a mi hijo aún cuando juró jamás lastimarlo y por su culpa perdí toda oportunidad de revivir a Emilie, y yo haré que ella sea borrada de la faz de la Tierra aunque sea lo último que haga.

- Ustedes se van a apegar al maldito plan, en especial tú, padre, que si alguien va a ponerle un alto a Peter y Marinette, voy a ser yo. - Espetó American Son mientras estrellaba al Duende Verde contra la pared. - Ustedes son tan estúpidos que seguramente terminarían monologando y dando una oportunidad para que se los coman o los conviertan.

- Como quieras, Harold, ambos sabemos que no tienes las agallas de hacer lo que se debe y yo tendré que asesinar a Spider-Man de una buena vez. - Rió el Duende Verde.

- Qué bien que todos sigan con ánimos de charlar en estas condiciones y bajo éstas circunstancias, pero debemos actuar ya. - Dijo Lola Loud, alias Bunnix, mientras suspiraba y se acercaba a su hermana mayor.

- ¿Por qué no simplemente usas tu poder para arreglar todo? Romperle el cuello a Richards antes que se vuelva Mr. Fantástico y evitar que Iron Heart nazca, así nada de ésto estaría pasando. - Dijo Firestar.

- Porque eso sería demasiado peligroso. - Dijo Sunset. - Nos guste o no, y aunque ellos ahora se hayan revelado como un par de villanos hace poco, Richards y Loud hicieron contribuciones sustanciales a la línea temporal, sin ellos no hay 4 Fantásticos ni Pandilla del Full, y sin esos grupos no hay línea temporal como la conocemos, lo cual ocasionaría una paradoja que terminaría de mandar todo nuestro universo, incluyendo el pasado, el presente y el futuro, al demonio.

- En serio odio cuando tienes la razón... - Dijo Rainbow Dash, alias Wonderbolt, mientras suspiraba.

- Y ya lo había intentado, pero hay ciertos eventos que son inamovibles, aún para mí. - Suspiró Bunnix.

- En fin, hora de irnos. - Espetó Juleka Couffaine, alias Umbra. - Lola, tú, tu gemela y los demás menores se van a quedar en el Helicarrier hasta que los demás volvamos.

- ¡No podemos quedarnos aquí sin hacer nada! ¡No cuando fue culpa de Lisa el que todo ésto pasara! - Dijo Lana Loud, alias Monkey-Maniac. - ¡Y no es justo! ¡Lucy también va con ustedes!

- No están listas para ésto, y definitivamente no vamos a dejar que ustedes vean lo que pasa allá abajo. - Espetó Majestia tajantemente. - Lucy se salva de eso porque... bueno, porque es Lucy, ella ha visto horrores indescriptibles antes.

- Los transportes y Quinjets ya están listos, deben irse ahora, yo cuidaré a las gemelas. - Dijo K.A.R.E.N. - Y también repaso la amenaza de American Son a Hawk Moth y el Duende: Si se pasan de listos, se mueren.

- Muy bien, chicos, y ancianos dementes. - Dijo Majestia, señalando a Hawk Moth y el Duende Verde. - Hora de salvar al mundo. Y recuerden, bajo ninguna circunstancia duden ni se contengan, porque ellos no lo harán, que yo misma sea un recordatorio de lo que pasa si dudan o se contienen.

Los héroes alrededor de Majestia se dispersaron mientras K.A.R.E.N. le bloqueaba el paso a las gemelas Loud, quienes sólo pudieron ver impotentes cómo sus cuatro hermanas restantes se unían al grupo que pretendía salvar a la raza humana de la extinción, aún cuando la posibilidad era prácticamente nula.


(Octubre 31, 2016 [Calendario local] - 05:45 horas desde la infección inicial - Reloj de misión de la Resistencia - Locación: Escuela Canterlot, Equestria, Ohio, Estados Unidos de América)


Las cosas estaban muy mal.

La una vez vibrante y llena de vida ciudad de Equestria estaba en ruinas, con cadáveres roídos y desmembrados por doquier, y los últimos reductos de población civil se hallaban tratando de huir de lo que llamaron "el monstruo rosa".

Dentro de la Escuela Canterlot, vemos a un grupo de personas, conformado por tres adultos y las Crusaders, atrincheradas en el aula de música, habiendo bloqueado las puertas y ventanas tanto como les fue posible con escritorios, sillas y los pizarrones, y se habían improvisado armas para intentar defenderse con escobas, palos, los instrumentos del aula y demás, mientras la joven Sweetie Belle miraba en su celular las noticias emitidas por Comunicaciones J3, presentadas por el malhumorado dueño de la compañía, J. Jonah Jameson.

- ... En otras noticias, acabamos de recibir informes de una movilización masiva de superhumanos liderada por S.H.I.E.L.D. que busca contener a los infectados y proteger a los que aún permanecemos sanos y salvos. Los mantendremos al tanto de los acontecimientos conforme vayamos recibiendo más información. - Dijo Jameson con una inusual cara de preocupación. - Mientras, le pido a la población que mantenga la calma y busque refugio donde les sea posible, y de tener la posibilidad, tener un arma a la mano y apuntar a la unión entre el cráneo y la columna vertebral, no a la cabeza dado que tenemos confirmación de que ellos pueden sobrevivir aún con heridas graves en la cabeza...

En ese momento, se escuchó un desgarrador grito de mujer, luego bastante ajetreo y finalmente, un vidrio fue roto por un objeto que cayó sobre el escritorio de Jameson, algo que dejó horrorizado al hombre de bigote.

- J. Jonah Jameson... Ésto de verdad lo voy a disfrutar... - Rió una voz fuera de cámara.

- ¡Spider-Man! ¡Siempre supe que terminarías convirtiéndote en un monstruo! - Dijo Jameson.

- O tal vez las estupideces que dices sobre mí finalmente me hartaron y es hora de darte lo que te mereces...

Con eso dicho, Spider-Man saltó sobre Jameson y lo derribó, desgarrando su carne con una facilidad aterradora y devorándolo mientras sus gritos de agonía eran captados por la cámara.

Tras unos segundos, Sweetie Belle apagó su celular y lo guardó en su bolsillo, abrazando sus piernas con fuerza y tratando de olvidar los gritos de Jameson y todo el horror que estaba pasando, así como las horrorosas imágenes de haber visto a Pinkie Pie partirle el cráneo a Snips y Snails para comerse sus cerebros.

- Todo estará bien, Sweetie Belle, ya lo verás. - Dijo Apple Bloom en un intento de tranquilizar a su amiga.

- Todo se acabó, Apple Bloom, sin importar nada, estamos muertas. - Suspiró Scootaloo en derrota. - No somos sino sardinas en una lata esperando a que alguien la abra para comérselas...

- Ya cálmense. - Gruñó un hombre de aspecto desaliñado con cabello largo y una barba de candado, y quien vestía un chaleco de piel y jeans rasgados. - Dejen el pesimismo de lado, o cuando menos guárdenselo.

- Estaremos bien, sólo tenemos que esperar a que S.H.I.E.L.D. venga por nosotros. - Dijo un hombre rubio que usaba una chaqueta beige.

- No guardes esperanza, Ethan, Daryl tiene razón, lo único que podemos hacer es guardarnos nuestro pesimismo. - Suspiró un hombre que usaba una camisa azul de manga larga y un pantalón café.

- No ayudes tanto, Ash... - Gruñó Daryl.

- Mi hermana vendrá, yo sé que sí, ella es una superheroína y nos salvará a todos. - Dijo Sweetie Belle, tratando de convencerse más a sí misma que a los demás.

- Acéptalo, Sweetie Belle, lo más probable es que ya no tengas hermana... Así como el señor Winters ya no tiene ni esposa ni hija, ni Dixon a su familia, o el tipo del supermercado a... - Intentó decir Scootaloo antes de recibir un puñetazo.

La chica de cabello morado cayó al suelo y pudo sentir un leve sabor a cobre en su boca, luego se giró y vió a Daryl reteniendo a Apple Bloom del brazo, mientras ésta lloraba y la fulminaba con la mirada.

- ¡Ya déjate de esas mierdas pesimistas, Scootaloo! ¡Ya suficiente tenemos con la situación que estamos viviendo para tener que soportar tu puta depresión...! - Gritó Apple Bloom antes que Daryl le cubriera la boca con la mano.

- Cállate si no quieres que nos descubra. - Dijo Daryl antes de mirar a Ethan. - ¿Atrajo su atención?

- Al parecer no... Pero gracias a la pelimorada ahora estoy muerto de pánico... - Admitió Ethan tras mirar por una hendidura en la ventana tapada. - Primero esos raros de Louisiana y ahora esta mierda... En serio, que se joda quien sea que está detrás de todo esto...

De repente, las puertas fueron golpeadas por algo afuera, cosa que hizo que Daryl soltara a Apple Bloom y se apresurara a tomar su ballesta, alzándola amenazadoramente hacia la puerta mientras las Crusaders corrían a esconderse tras los adultos.

Ethan y Ash rápidamente alzaron un par de lanzas improvisadas con un par de palos de escoba, sin poder evitar sentirse estúpidamente inservibles al recordar que estaban a punto de enfrentar a zombies con superpoderes usando unos simples palos.

El dedo de Daryl se estremeció sobre el gatillo, mientras apretaba los dientes ante otro golpe contra la puerta.

- Vamos... No me iré sin pelear... - Dijo Daryl.

- ¿Qué tanto podemos pelear contra monstruos con superpoderes? - Preguntó Ash.

- Lo suficiente para que las pequeñas escapen. - Dijo Ethan con un dejo de valentía.

- No es tiempo de jugar al héroe y lo sabes, Winters... - Dijo Daryl.

Los golpes contra la puerta se intensificaron y se volvieron más frecuentes, haciendo que el corazón de los seis diera un vuelco y se acelerara con cada golpe.

Luego, finalmente la barricada cedió y la puerta se abrió de golpe, y los adultos alzaron sus armas para atacar, sin embargo, antes de hacerlo, los tres notaron que quienes derribaron la puerta sólo eran un grupo de estudiantes de Canterlot, acompañados por un oficial de policía rubio y de ojos azules, quien inmediatamente apuntó a Ethan, Ash y Daryl con una escopeta.

- Bajen las armas y aléjense de las niñas. - Ordenó el oficial.

- Sé que se ve mal, oficial, pero sólo tratábamos de protegerlas. - Dijo Ethan mientras soltaba su lanza y levantaba las manos en señal de rendición.

- Las encontramos vagando por el centro comercial donde trabajo. - Añadió Ash.

- Y como ya se habrá dado cuenta, estar allá afuera y solo es exactamente igual a un suicidio. - Dijo Daryl mientras ponía su ballesta en el suelo a regañadientes.

El oficial inspeccionó a los hombres, luego vió a las niñas y notó que definitivamente no estaban siendo retenidas contra su voluntad, a juzgar por la forma en la que buscaban refugio detrás de los adultos, luego suavizó su expresión y bajó su arma mientras el grupo de estudiantes entró al aula, siendo conformado por Bulk Biceps, Trixie Lulamoon y Wallflower Blush.

- Oficial Leon S. Kennedy. - Dijo el oficial mientras cerraba la puerta y comenzaba a levantar la barricada de nuevo. - Departamento de Policía de Equestria.

- Sí, lo podemos notar. - Suspiró Daryl mientras levantaba su arma. - Gracias por posiblemente llamar la atención de la rosa...

- Estamos buscando sobrevivientes.

- Sí, y lo único que lograrán es atraer la atención de los infectados. - Espetó Ash.

- Eso le dijimos a Bulk Biceps, pero insistió en derribar la puerta. - Dijo Trixie.

- Manténganse alertas entonces, porque en cualquier momento podrían llegar... - Dijo Daryl.

En ese momento, un escudo mágico con forma de diamante atravesó la ventana con una facilidad aterradora y le dió a Bulk Biceps justo en la cabeza, cortándole la parte superior y clavándola en la pared mientras el cuerpo del joven fisicoculturista caía sin vida al suelo con un ruido sordo.

Ante lo que había pasado, las Crusaders soltaron un grito de horror y se alejaron de la ventana, escondiéndose detrás de Ethan, Ash y Daryl nuevamente, justo antes que la ventana fuera volada en pedazos y tres figuras se aproximaran al hueco en la pared, siendo las heroínas infectadas Sarah Fox, Diamond Shield y el monstruo rosa, Party Blast, mejor conocida como Pinkamena Diane Pie, quien estaba jugueteando con un frasco de chispas de azúcar en su mano.

- Gracias por abrir la lata de sardinas, querida... - Dijo Diamond Shield mientras se relamía los dientes, cortándose la lengua en el proceso debido a la putrefacción de su cuerpo, con la mirada fija en su hermanita. - Sweetie Belle, querida, quédate quieta y déjame comerte...

- Suficiente charla, Rarity... - Dijo Sarah mientras siseaba y mostraba sus colmillos. - Yo quiero al rubio...

- De tin marín de do pingüé... - Dijo Party Blast en su usual tono alegre, pero con un dejo de malicia mientras señalaba a los humanos al azar. - Cómanse a los otros, pues a Trixie yo marqué...

Ante la amenaza, Daryl alzó su ballesta y la disparó contra Party Blast, atravesándole el cráneo justo en medio de la frente, sin embargo, Party Blast sólo rió y se quitó la flecha de la cabeza con facilidad.

- Eso no fue amable... - Rió Party Blast.

- Puta madre... - Gruñó Daryl mientras recargaba su arma.

- Good bye. - Dijo Leon antes de disparar su escopeta.

Diamond Shield rió y levantó un escudo frente a sus compañeras zombies, quienes rieron ante el patético intento del oficial de detenerlas.

- Suficientes juegos... - Dijo Sarah antes de correr hacia Leon.

La vampiresa infectada siseó y usó su velocidad sobrehumana para acercarse al oficial de policía, doblar el cañón de la escopeta cuál si fuera de hule y levantarlo por el cuello.

- Hora de comer...

Antes que Sarah pudiera acercar sus fauces al oficial Kennedy, un borrón azulado entró por el agujero en la pared sin que Party Blast y Diamond Shield la pudieran detener o siquiera notar, y le rompió el brazo a Sarah con una facilidad alarmante, seguido por una patada al estómago que, además de terminar de separar la extremidad del cuerpo de Sarah, alejó a la infectada del policía, quien se quitó los restos del brazo de la vampiresa de su cuello y soltó varios jadeos para recuperar el oxígeno perdido.

Antes que Party Blast y Diamond Shield se abalanzaran sobre la recién llegada Wonderbolt, un par de manos las tomaron por el cuello de sus ropas y las arrojaron lejos del lugar, haciéndolas estrellarse contra el pavimento.

Después de eso, Applejack, enfundada en su traje mágico de Orchard Strength, y Erica Jones entraron por el hueco en la pared, analizaron la situación un segundo y corrieron a patear la barricada.

- ¡Por aquí! - Gritó Orchard Strength.

Daryl e Ethan rápidamente cargaron en brazos a Scootaloo y Sweetie Belle, mientras Apple Bloom salía corriendo tras su hermana y Ash se deslizaba en el suelo para recuperar la escopeta doblada del oficial Kennedy, luego tanto las heroínas como los humanos sin infectar corrieron por los pasillos de la Escuela Canterlot para tratar de escapar de los infectados.

- ¡¿Para qué trajiste eso?! - Espetó Daryl a Ash.

- ¡Puede ser útil! - Dijo Ash mientras se encogía de hombros.

- ¡Corran y no se detengan! ¡Esas tres no son las únicas infectadas del lugar y los otros pueden usar tijeras dimensionales! - Dijo Erica.

Los humanos simplemente corrieron tras las heroínas, mientras detrás de ellos aún podían escuchar a las infectadas corriendo tras ellos.

De repente, los humanos y las heroínas comenzaron a escuchar explosiones a diestra y siniestra, por lo cual Wonderbolt se detuvo un instante, dejó que todos la rebasaran y comenzó a vibrar sus manos a gran velocidad, creando una poderosa corriente de viento, la cual arrojó contra el pasillo, destruyendo todo a su paso y regresando la ráfaga de la explosión hacia su causante.

Las infectadas sisearon en respuesta ante la corriente de viento que regresó la explosión que Party Blast había causado, luego Sarah y Party Blast se lanzaron dentro de un par de salones para escapar de las llamas, pero lamentablemente Diamond Shield no tuvo tanta suerte y acabó en el medio de ellas.

Los gritos de agonía de Diamond Shield pronto llenaron los pasillos de la preparatoria Canterlot, haciendo que Rainbow Dash hiciera una mueca de disgusto ante lo que acababa de hacer y retomara su camino hacia la salida.

Una vez en el estacionamiento de la escuela, el grupo se encontró con dos agentes de S.H.I.E.L.D., una mujer pelirroja y un hombre de cabello negro, y lo curioso era que en las identificaciones de ambos se podía leer C. REDFIELD.

- ¡Guíenlos al Quinjet, nosotras distraeremos a Pinkie y Sarah! - Indicó Orchard Strength. - Nos reuniremos con ustedes tan pronto acabemos con ellas...

- Y si no llegamos en 5 minutos, signifca que o nos convirtieron o nos mataron. - Dijo Erica.

- Entendido. - Dijo el hombre mientras le hacía un ademán a los civiles. - Por aquí...

Los civiles asintieron y comenzaron a correr tras los agentes, sin embargo un escudo mágico fue disparado contra ellos, logrando eludir a Orchard Strength, Rainbow Dash y Erica. El escudo con forma de diamante voló a toda velocidad y le dió a Ash, fallando en matarlo pero logrando cercenar la mitad de su antebrazo derecho, haciéndolo soltar la escopeta para agarrarse el muñón mientras gritaba de agonía.

Los agentes rápidamente se dieron la vuelta y desenfundaron sus desintegradores, disparando varios tiros, los cuales impactaron contra un escudo creado por Diamond Shield, quien miraba al grupo con una expresión de odio puro, revelando que ahora estaba casi completamente calva con toda la parte frontal de su cuerpo tenía toda la piel quemada, y con algunas partes exponiendo músculo vivo a la intemperie con escamas de piel quemada aún desprendiéndosele mientras Diamond Shield jadeaba furiosamente.

- ¡LOS MATARÉ A TODOS POR ESTE ULTRAJE, RAINBOW DASH! - Rugió Diamond Shield.

Dicho eso, la infectada apuntó su brazo hacia Wallflower, haciendo que la chica se agarrara el estómago en señal de dolor, luego Diamond Shield abrió su mano y antes que alguien pudiera hacer algo, un escudo se expandió dentro de Wallflower hasta que la partió desde dentro, dividiendo su cuerpo y haciendo que ambas mitades cayeran al suelo con un ruido sordo, dejando expuesto el interior de su cuerpo.

Wonderbolt intentó arremeter contra Diamond Shield para dejarla fuera de combate, pero Sarah saltó sobre ella y la derribó, intentando someterla pero al faltarle un brazo, ni siquiera con su fuerza de vampira pudo lograr gran cosa antes que Erica la tomara por la blusa y la arrojara contra Diamond Shield, quien creó un escudo frente a ella para cubrirse, haciendo que Sarah se quebrara una pierna al chocar de mala manera contra el escudo. Sin embargo, para mala suerte de Erica, alguien más la derribó y trató de morderla, siendo rápidamente identificado por la vampiresa como su ex-amigo Rory Keaner.

- ¡Quítate de encima! - Rugió Erica. - ¡Váyanse!

- ¡Llévenselos de aquí! - Dijo el agente hombre.

- ¡Nosotros trataremos de distraerlos! - Dijo la mujer.

- ¡Ese no era el plan! - Espetó Wonderbolt.

- ¡Ustedes pueden protegerlos mejor que nosotros! ¡Váyanse!

Rory se limitó a rugir y seguir forcejeando con Erica, mientras los agentes de S.H.I.E.L.D. abrieron fuego contra Diamond Shield a la defensiva con sus disparos, haciendo que Wonderbolt y Orchard Strength gruñeran y se dieran la vuelta, comenzando a correr y alejando al grupo de supervivientes de la zona, con Scootaloo recogiendo la escopeta de Ash y las heroínas rogando porque Erica y los Redfield pudieran sobrevivir aunque fuera unos minutos.

Una vez que estuvieron lo suficientemente lejos, Wonderbolt y Orchard Strength se detuvieron y se las ingeniaron para sellar la herida de Ash con bio-espuma y detener el sangrado con un torniquete.

- Eso debería mantenerte vivo... - Dijo Orchard Strength. - Dash, llévate a los civiles. Yo voy por los Redfield y por Erica, si no llego en cinco minutos, váyanse sin mí.

- ¡No, Applejack! - Dijo Apple Bloom mientras se aferraba a su hermana con un abrazo. - ¡No puedes irte! ¡No tengo a nadie más!

- Tengo que hacerlo, caramelo. - Suspiró Orchard Strength mientras le daba un abrazo a su hermanita. - Es lo que hacemos los héroes.

- Ten cuidado. - Dijo Wonderbolt.

- Ustedes también.

Rainbow Dash asintió y se echó a Scootaloo a la espalda mientras Ethan y Trixie hacían lo mismo con Apple Bloom y Sweetie Belle, al mismo tiempo que el oficial Kennedy sacaba su pistola y junto a Daryl se puso en la retaguardia para cubrir al grupo, luego todos salieron corriendo a toda prisa de ahí.

Por otro lado, Orchard Strength se ajustó los guantes y corrió de vuelta a la pelea contra los infectados, esperando llegar antes que algo malo pasara.

Para su infortunio, la granjera escuchó un par de gritos ensordecedores, los cuales la instaron a correr más rápido aún, llenando su cabeza con falsas esperanzas de poder salvar a Erica y los hermanos Redfield.

Al llegar de nuevo a la escena, Orchard Strength gruñó al ver que Erica ahora yacía en el suelo, prácticamente hecha pedazos, con Party Blast, Rory, Diamond Shield y Sarah devorando su cadáver y el de Wallflower, así como no había ni rastro de los Redfield.

Sin mediar palabra, Orchard Strength arrancó un árbol y lo arrojó contra los infectados, logrando darle de lleno a Rory y Sarah, atravesando al primero directamente en el corazón con una de las ramas, haciendo que se desintegrara con un grito agónico, mientras Sarah gritaba de dolor al ser empalada por las ramas en varios lugares de su cuerpo.

Seguido de ésto, la campirana levantó un auto, usándolo como escudo contra una lluvia de chispas de azúcar explosivas que arrojó Party Blast, luego sin pensarlo, dió un salto tan alto como pudo, esquivando un escudo que casi la corta a la mitad, aún con el auto en sus manos y lo arrojó contra sus atacantes, quienes se cubrieron tras un escudo mágico, salvándose de la explosión mientras los trozos del automóvil volaban por todos lados, algunos de ellos llegando hasta Sarah, clavándose en su brazo y ojo derecho.

Los gritos de Sarah no hicieron sino sentir a Orchard Strength peor de lo que ya se sentía por tener que atacar y matar a sus amigas, sin embargo, Majestia había sido clara y ella estaba de acuerdo: Esos infectados ya no eran sus amigos y debían ser eliminados para terminar con esa pesadilla.

Tras aterrizar, Orchard Strength gruñó y se lanzó al ataque contra sus ex-amigas, esquivando los escudos de Diamond Shield y los dulces de Party Blast, llegando hasta ellas para conectar dos potentes puñetazos contra sus mentones, decapitando a Diamond Shield en el acto y enviando a Party Blast hacia atrás.

Casi de inmediato, Party Blast se levantó y arrojó un cupcake contra Orchard Strength, logrando que estallara justo frente a ella y lanzara a la granjera hacia atrás.

Negándose aún a ser vencida, Orchard Strength se levantó rápidamente y esquivó varias galletas que Party Blast había lanzado con tanta fuerza que más bien parecían shurikens al quedarse clavadas en el suelo.

Y tras eso, la campirana escuchó un chiflido que la hizo voltear sobre su hombro y ver a los hermanos Redfield, aún vivos pero con un par de heridas visibles en el hombro y la pierna, aunque ninguna parecía una mordida o rasguño.

Al verlos, Orchard Strength sonrió y miró a Party Blast.

- Hora de un truquito que aprendí de alguien más... - Dijo Orchard Strength.

- Qué gracioso, justamente iba a decir eso mismo... - Rió Party Blast mientras sacaba lo que parecía ser un par de katanas hechas de alguna especie de caramelo, de su espalda.

Orchard Strength se sorprendió un momento, sin embargo ignoró su sorpresa y aplaudió con todas sus fuerzas, causando una fortísima onda de choque que envió a Party Blast hacia atrás junto al cuerpo y la cabeza de Diamond Shield.

Tras eso, Orchard Strength corrió hacia los Redfield, los levantó sin dificultades para echarlos sobre sus hombros y salir corriendo, sólo para tener que detenerse casi de inmediato.


(Entre tanto)


Wonderbolt y el grupo de supervivientes se encontraban a las afueras de Equestria, habían logrado finalmente llegar al Quinjet, donde la peliarcoiris rápidamente inició la secuencia de arranque de los motores y se aseguró que Ash recibiera una rápida revisión para asegurarse de que llegaría vivo al Helicarrier, luego se dió la vuelta e intentó salir del Quinjet para regresar con Orchard Strength, pero Scootaloo se prendió a su pierna y la detuvo.

- No te vayas, por favor, Rainbow Dash... - Pidió Scootaloo. - AJ... AJ ya debe estar muerta...

- ¡No digas eso de mi hermana o yo te mataré a tí, Scootaloo! - Gritó una iracunda y dolida Apple Bloom mientras Daryl la detenía.

- ¡Cálmense las dos! - Gritó Wonderbolt. - El Quinjet las llevará al Helicarrier, estarán a salvo, yo debo ir por Applejack, y si de verdad Scootaloo tiene razón, se los diré...

- No quiero que te pase lo mismo... - Dijo Scootaloo con lágrimas en los ojos.

- Me temo que es una posibilidad, Scootaloo, por eso ustedes deben sobrevivir. - Dijo Wonderbolt mientras tomaba a Scootaloo y la sentaba, para luego girar la mirada hacia Ethan y el oficial Kennedy. - Ustedes dos están a cargo ahora, asegúrense que el Quinjet llegue a salvo al Helicarrier.

- No sé pilotar ésta cosa. - Dijeron ambos rubios.

- La Gran y Poderosa Trixie sí. - Dijo Trixie mientras se sentaba en el asiento del piloto. - MJ y Adrien le enseñaron el verano pasado.

- Bien, ten cuidado, Trixie. K.A.R.E.N. los vigila, sólo manténganse alertas en los controles de armas.

En ese momento, mientras Trixie iniciaba la secuencia de despegue, Leon suspiró y miró a los supervivientes, decidiéndose firmemente a protegerlos a como diera lugar al ver la expresión decidida de la heroína adolescente, por lo que simplemente se sentó en el asiento del copiloto y trató de acostumbrarse a la consola de tiro. Luego de ésto, la peliarcoiris saltó del Quinjet mientras éste levantaba el vuelo y se marchaba hacia el Helicarrier, dejando a Wonderbolt sintiéndose preocupada y asustada. Ella nunca había prestado mucha atención a cosas como la religión, sin embargo, en esos momentos que bien podían ser sus últimos, ella no pudo evitar rogarle a cualquier ser superior que la escuchara, que por favor le permitiera vivir, o al menos salvar a Orchard Strength, siendo que apenas la mitad de sus amigas seguía con vida.

"Les fallé a Pinkie, Rarity, Twilight y Fluttershy... No puedo fallarle a Applejack también..." Pensó Wonderbolt.

Dicho eso, la chica salió corriendo a toda prisa, recorriendo las calles hacia la Escuela Canterlot en pocos segundos, sin embargo, pocas calles antes de llegar, Wonderbolt oyó un rugido acercándose a ella y, antes que pudiera darse cuenta, alguien la golpeó en el rostro y la hizo dar una voltereta inceremoniosa, rodar por el suelo y terminar estrellándose de cara contra un auto, haciéndose un par de cortadas en la cara al romper una ventana.

Sabiendo que no tenía tiempo para recuperarse, pues sin lugar a dudas quien la había atacado era un velocista también, Wonderbolt se levantó de un salto, esquivando por muy poco a Alix Kubdel, mejor conocida como Splitsecond, quien estrelló su cara contra la puerta del auto contra el que se había estrellado Wonderbolt.

- El virus te está volviendo lenta, Alix, se supone que eres más rápida que yo. - Dijo Wonderbolt mientras se arrancaba una manga para limpiarse la cara.

Ante las palabras de la peliarcoiris, Splitsecond simplemente río maliciosamente y se puso de pie, dejando su cara literalmente estampada en la puerta del auto y se giró hacia Wonderbolt, quien tuvo que reprimir el impulso de vomitar al ver el rostro en putrefacción de la otra velocista, pues tanto había avanzado el virus en ella que su sangre estaba coagulada y emitía un pungente olor a descomposición.

- Aún eres más lenta que yo, Dash... - Gruñó Splitsecond. - Y por eso... te devoraré...

Dicho eso, Splitsecond dió un salto y volvió a tratar de abalanzarse sobre Wonderbolt, pero ésta última simplemente la esquivó y la tomó por la ropa, aprovechando el impulso de la arremetida de la pelirrosa, dando varios giros para arrojarla contra la pared con una fuerza tan grande que le destrozó completamente el cuerpo, matándola instantáneamente y creando una repugnante mancha en la pared.

Wonderbolt resistió el impulso de vomitar no sólo por lo asqueroso que lucían los restos dejados por el cuerpo de Alix, sino tambien por el haber tenido que asesinarla, habiendo conocido bien a la velocista y habiendo sido tanto amiga como rival de ella.

Sin embargo, al escuchar un Aplauso Atronador en las cercanías, Wonderbolt distrajo su atención lo suficiente para olvidar lo que había pasado y regresar a la realidad, recordándole qué es lo que estaba haciendo.

De inmediato, Wonderbolt salió corriendo de nuevo hacia la Escuela Canterlot, llegando en un instante, pero para su desgracia, al llegar, ella recibió una sorpresa repugnante.

Por otro lado, Orchard Strength tosió fuertemente al sentir algo frío atravesándole el torso, perforándole el corazón y haciendo que la boca se le llenara con un sabor a cobre.

Y mientras la vista se le nublaba y su agarre sobre los Redfield comenzaba a fallar, la granjera escuchó un grito y, antes de caer al suelo, alguien la tomó en brazos y le dijo cosas que ella ya no pudo entender justo antes que todo se pusiera negro.

A su vez, Wonderbolt soltó un grito de horror al no sólo ver una de las katanas de caramelo de Party Blast atravesándole el pecho a Orchard Strength, sino porque también recibió varias gotas de su sangre en la cara, y mientras la chica y los Redfield caían al suelo, Wonderbolt corrió hacia ella y la atrapó, tratando de pensar en una forma de poder mantenerla viva, aunque por la expresión perdida de la granjera, ella sabía que no iba a ser posible.

- ¡Applejack, por favor, resiste! - Rogó Wonderbolt a su moribunda amiga. - ¡Te llevaré al Helicarrier! ¡Te pondrás bien! ¡Sólo aguanta...!

La rubia de ojos verdes simplemente exhaló su último aliento y sonrió levemente mientras sus ojos se tornaban vidriosos y su cuerpo quedaba completamente inmóvil, cosa que hizo que Wonderbolt soltara un grito ahogado de horror mientras lágrimas salían de sus ojos.

- ¡Applejack! ¡Applejack, por favor, no te vayas...! - Lloró Wonderbolt. - ¡No tú también...! ¡Por favor...!

- Es una pena que todo haya tenido que terminar así... - Dijo Party Blast con una sonrisa siniestra. - Pero bueno... es hora de comer...

Ante las palabras de la heroína infectada, algo dentro de Wonderbolt se quebró e hizo que viera todo de color rojo, luego puso el cuerpo sin vida de Applejack cuidadosamente en el suelo y tomó su sombrero para ponérselo ella misma, mirando a Party Blast con ira asesina mientras se ponía de pie.

Pero antes que la velocista pudiera atacar, un par de borrones saltaron sobre los Redfield y se los llevaron entre gritos que pronto se apagaron, sin embargo, Wonderbolt salió corriendo tras los otros dos velocistas, encontrando a Speed Demon y Quicksilver devorando los restos de los agentes de S.H.I.E.L.D.

Antes que cualquiera de los velocistas pudiera hacer algo, Wonderbolt corrió hacia Speed Demon, lo derribó con una patada y, antes que tocara el suelo, lo tomó de la pierna y lo arrastró detrás de ella mientras corría a toda velocidad, estrellando al infectado contra autos, paredes, postes, haciendo pedazos el cuerpo del velocista y finalmente arrojando lo que quedaba de su pierna hacia el bosque. Después de eso, corrió de regreso hacia Quicksilver y esquivó una arremetida suya, tomándolo por el cabello y después estrellándolo contra el suelo para comenzar a correr, erosionando el cuerpo del infectado y dejando un rastro repugnante por toda la ciudad hasta que sólo quedó una parte del cráneo del velocista aún colgando por los cabellos de la mano de Wonderbolt.

La velocista soltó el último fragmento del cuerpo de Quicksilver y se acomodó el sombrero de Applejack, luego corrió de regreso hacia la Escuela Canterlot y alejó a Party Blast del cadáver de Applejack de una patada, buscando evitar a toda costa que los infectados mancillaran su cuerpo.

Después vió que la cabeza de Diamond Shield estaba en el suelo y corrió para patearla cual balón de soccer, destrozándola al instante y, finalmente, se giró para encarar a Party Blast, quien tragó con dificultad y dió un paso hacia atrás en señal de miedo.

- Tú no eres Pinkie Pie... - Dijo Wonderbolt mientras apretaba sus nudillos hasta hacerlos sangrar. - Mataste a Applejack, infectaste a Rarity y Twilight, y se comieron a Fluttershy... Tú mataste a mi amiga Pinkie... Y por todo ello, en nombre de mis amigos caídos y todos los que aún están luchando... te voy a matar...

En ese momento, Party Blast gruñó y apretó los dientes, y antes que pudiera hacer algo, Wonderbolt la golpeó en el estómago con todas sus fuerzas, enviándola hacia atrás. Después, la velocista intentó el mismo movimiento que había usado con Quicksilver, tomando a la pelirrosa del cabello, pero ésta reaccionó a tiempo y la golpeó con el codo en el rostro y la alejó de ella con una patada giratoria, luego volvió a sacar su katana de caramelo y se puso en guardia para pelear.

Ante las acciones de Party Blast, Wonderbolt simplemente se acomodó el sombrero de nuevo y corrió con todas sus fuerzas, dándole un puñetazo en el estómago a la infectada, logrando hacer que tosiera un poco de sangre coagulada y terminara estrellándose contra la pared a varios metros detrás de ella.

La infectada gruñó y arrojó su katana contra Wonderbolt, quien simplemente la esquivó y la golpeó en la hoja, haciéndola pedazos y haciendo que su mango cayera al suelo. Tras eso, Party Blast volvió a arrojar varias galletas con toda su fuerza, pero Wonderbolt simplemente las esquivó con la misma facilidad pasmosa.

Party Blast gruñó y sacó todo tipo de dulces, caramelos y pasteles de su cabello, corriendo alrededor de Wonderbolt y arrojando los objetos que sacaba, tratando de herirla, sin embargo, la peliarcoiris simplemente reía entre dientes y veía con burla cómo todas las armas y ataques de la infectada eran totalmente inútiles contra ella.

- ¿En serio planeas matarme así? ¿Arrojando cosas muchísimo más lentas que yo al azar? - Preguntó Wonderbolt de manera irónica.

- No... pero parece que olvidaste cuáles son mis habilidades, Dashie... - Dijo Party Blast antes de sonreír diabólicamente.

Mientras Wonderbolt seguía pensando a qué se refería la infectada, ésta chasqueó los dedos y una poderosa explosión ocurrió alrededor de la velocista, gracias a todos los dulces que Party Blast había arrojado, lanzando a la peliarcoiris por los aires y dejándola sumamente aturdida.

Aún así, mientras comenzaba a caer al suelo luego de las explosiones, Wonderbolt escuchó una carcajada que le heló la sangre, luego abrió los ojos y lo último que vió fue a Pinkie Pie esbozando una sonrisa literalmente de oreja a oreja mientras usaba un mazo gigante hecho de chocolate para golpearla tan fuerte como podía en la cabeza, haciendo que todo se pusiera negro para ella.


(Octubre 31, 2016 [Calendario local] - 15:00 horas desde la infección inicial - Reloj de misión de los Vengadores infectados - Locación: Desconocida)


Oscuridad, frío, entumecimiento y dolor.

Cuando despertó, ella sólo podía ver oscuridad, tanta que ni siquiera podía distinguir si tenía abiertos o cerrados los ojos; no podía mover más que los dedos y aún eso le pesaba muchísimo; y más importante, sentía un punzante dolor al lado de su cabeza.

Lentamente, Wonderbolt fue recuperando energías y la sensación en sus miembros, sin embargo, al intentar moverse, ésta descubrió que había varias correas atándola a una superficie, impidiéndole moverse más allá de retorcerse para intentar liberarse.

Poco a poco, Wonderbolt recuperó la memoria y comenzó a hiperventilarse, tratando de usar sus poderes para liberarse, sin embargo, pronto un cuchillo que se clavó justo al lado de su cara la detuvo y una luz cegadora se encendió al mismo tiempo que un olor putrefacto invadía su nariz.

- Hola, Dashie... - Dijo una voz que le causó escalofríos a la heroína.

La vista de Wonderbolt rápidamente se acostumbró a la luz, pero hubiera deseado no haberlo hecho ya que a su alrededor vió a Iron Man, Spider-Man, Ladybug, Puño de Hierro, Ace Savvy, Style Queen, Midnight, Mastermind, el Capitán América, Stream, Hulk, los Rangers Rojo y Amarilla, Ethan Morgan, Yellowjacket, Avispa, Wendy Corduroy y Rena Rouge, todos con los labios arrancados y mostrando filas de dientes torcidos y amarillentos, así como cuerpos en descomposición con miembros caídos o arrancados, así como heridas de sus batallas anteriories para alimentarse, y obviamente viéndola fijamente y relamiéndose los dientes ante la expectativa de devorarla.

Sin embargo lo peor para ella fue ver a Pinkie con frente a ella con un atuendo similar al de una enfermera completamente ensangrentado y jugueteando con una mesa con rueditas que tenía toda clase de instrumentos punzocortantes, algunos oxidados y sin filo, y otros que relucían como nuevos, aunque todos ellos con manchas de sangre seca.

- Es hora de pagar... Llegó el juicio final... Un sacrificio hicimos... Y tu vida toca tomar... - Canturreó Pinkie mientras tomaba una motosierra y la encendía. - Sin arma disparamos... A todos enfrentamos... Y nada nuevo es... Es sólo lo que nos gusta hacer...

Sin previo aviso, Pinkie Pie bajó la motosierra a la pierna derecha de Wonderbolt, quien gritó de agonía al sentir cómo la motosierra iba lentamente cortando su carne, destrozaba su fémur y hacía que su pierna cayera al suelo con un ruido sordo, todo mientras Pinkie cantaba felizmente.-

- ¡PREPÁRATE A MORIR! ¡PREPÁRATE A MORIR!

Tras eso, Pinkie tomó la pierna de su amiga y la mordió, degustando su carne y haciendo que Wonderbolt soltara una lágrima, al saber que moriría de la peor manera posible, siendo cortada a pedazos por los zombies y devorada por ellos, todo mientras estaba atada a una mesa sin poder liberarse ni hacer nada más que ser testigo de su cruel destino.

- Sólo... mátenme... por favor... - Rogó Wonderbolt.

- Descuida, Dashie, no morirás hoy... - Dijo Pinkie. - Además, casi nos hemos quedado sin comida, así que tenemos que racionar todo lo que tenemos, ¿cierto, Leni?

- Cierto, Pinkie, aunque gracias a Dash ya no tenemos tantos con los que compartir... - Dijo Style Queen mientras convertía su brazo en una especie de pala plana. - No es que nos agrade el que hayas matado a Rarity y Alix, pero sí que hayas matado a Speed Demon y a Quicksilver...

Dicho eso, Style Queen hizo que su brazo con forma de pala se tornara al rojo vivo y una vez en ese estado, lo presionó contra el sangrante muñón que Wonderbolt tenía por pierna derecha, haciendo que la chica soltara un grito de agonía nuevamente, mientras su carne viva era cauterizada, sin embargo la peor parte de todo era lo que habían dicho Leni y Pinkie.

Ella no iba a morir rápido como sus otros amigos.

Ella iba a ser lentamente destazada y convertida en alimento para los zombies frente a ella.

Y mientras la pobre chica lloraba de impotencia ante la imposibilidad de escapar a su destino, Pinkie Pie sacó un cuchillo y comenzó a cortar la pierna de Rainbow Dash con su típica maestría culinaria, luego sacó una bandeja de cupcakes del horno y tomó algunos trozos de la pierna de Rainbow para ponerlos encima de los pastelillos, tras lo cual la repostera infectada sonrió, tomó uno de los cupcakes y se lo echó entero a la boca, relamiéndose los labios y los dedos mientras gemía de gusto al masticar.

- Oh, cielos... - Dijo Pinkie. - Éstos tienen que ser los mejores cupcakes que he hecho en mi vida, y eso que he hecho miles y todos fueron buenísimos.

- Aún no entiendo cómo es que logras comer pasteles, ninguno de nosotros soporta otra cosa que no sea carne... - Dijo Ladybug mientras tomaba un trozo de la pierna de Rainbow para devorarlo. - Pero he de admitirlo, Rainbow es definitivamente más jugosa que Adrien... Aunque Adrien era más delicioso y más dulce…

- Ciertamente, lo bueno es que gracias a tí, Rainbow, tendremos un suministro de carne mientras comenzamos nuestro mayor golpe… - Dijo Spider-Man.

Con eso dicho, los infectados se giraron para mirar hacia una holo-mesa, donde Rainbow Dash pudo vislumbrar con su vista borrosa que en el fondo se encontraban colgando los cadáveres roídos de Streak, Chat Noir, Queen Bee, Tom Lucitor y Orchard Strength colgando de ganchos como si fueran reces en un matadero.

Pero lo peor fue ver un modelo holográfico de la Base Damocles, cosa que la hizo jadear de sorpresa.

"Por favor, chicos... Terminen el plan y váyanse antes que lleguen a ustedes..." Rogó Rainbow Dash en su mente antes que la pérdida de sangre y el dolor la hicieran desmayarse de nuevo.