Kate pov:
Despues de el haberme sincerado con clint de todo lo que me estaba consumiendo de sentimentos actuamente estoy en la habitacionde mi tia en la cama escribiedno lago que depues quemare por que nadi ddberia de leerlos
A partir de ahora olvídate de tus temores y al igual que eres valiente para no preocupar a los demás, sé valiente para sincerarte contigo y descubrir en qué punto estás. Mírate al espejo y date el amor que tantas veces se te olvida para recuperar tu bella autenticidad, esa que echaste a un lado por el bien de los demás. No tengas miedo. Lo más grave que puedes descubrir es a una desconocida frente a ti.
Si es así, abrázala, abrázate. Para reencontrarse con una misma no hay mejor medicina que el calor de sentirse querida… y eso hace tiempo que has olvidado hacerlo. Trátate con cariño, libre de juicios y críticas para recoger cada parte que tu tristeza ha hecho añicos y comprenderla.
Para ello, lo que me encantaría y esto te lo pido con mis mayores fuerzas es que por favor dejes de tratarte mal a ti misma. Sea lo que sea lo que haya sucedido recriminarte a voces o en bajito hace que tu herida sangre más fuerte.
Te será de gran ayuda perdonar tus errores, las veces que no supiste hacerlo bien y otras tantas que ni siquiera sabías cómo hacerlo. Nadie nace sabiendo. Tus equivocaciones forman parte de tu aprendizaje. Seguro que detrás de cada una de ellas ha habido un avance. Lo que sucede es que no te has dado cuenta. Lo mínimo que puedes aprender es que esa forma de hacer las cosas no es válida y ¿a quién no le gusta descartar opciones? Cada vez que lo hacemos estamos un paso más cerca.
También deja a un lado a tus queridos porqués: "¿Por qué me ha tenido que pasar a mí?", "¿Por qué siempre es lo mismo?", "¿Por qué se ha comportado así conmigo?"… Tan solo te seducen para que formes parte de una espiral sin salida que te aprieta el alma
La reconocerás porque está repleta de justificaciones, explicaciones y evasiones de toda clase de sentimientos y responsabilidades. Si los dejas acabarán por hacer de tus días tristes tu propia rutina. Si quieres preguntarte que sea con el cómo, el qué, el cuándo o el para qué. Será más constructivo y reparador. Créeme.
Ahora, tras abrazarte y reflexionar es el momento de volver a mirarte al espejo para reconocer a quien eres de verdad. Busca tus ojos, conecta con ellos y mientras lo haces pronuncia esta sencilla frase de dos palabras y grandes efectos: "¡Me quiero!". Quizás te des cuenta de que has estado demasiado tiempo esperando a que alguien te valore y te quiera como esperabas. Así, olvidaste que la única persona que podía hacerlo se encontraba siempre contigo.
Acéptala y siéntela. No la retengas ni la ocultes, deja que fluya por todo tu cuerpo. Si tienes que llorar o gritar, hazlo. Este es en tu momento. No te escondas detrás de ninguna máscara, porque después de llevarla durante mucho tiempo, al final acaba rozando y haciendo heridas. Baja tu autoexigencia. Muchas veces nos presionamos y exigimos mucho más a nosotros mismos que a otros. No seas tan duro contigo misma. Escucha a tu tristeza. Tiene algo que decirte importante. Puede que sea que hayas acumulado mucho, que no debes ser siempre fuerte, que debes pedir ayuda o que necesitas parar. Si intentamos callarla o la ignoramos, no se va a ir. Perdónate. Las veces que has cometido errores, sean los que sea. Nadie nace sabiendo y es lícito equivocarse, así como perdonarse a uno mismo. Tus equivocaciones forman parte del aprendizaje de la vida y te han hecho a ti mismo. Libérala. Una vez sepas por qué permanece tu tristeza, es hora de que la dejes marchar. Toda emoción, tiene su principio y su fin. No la retengas. Así, dejarás espacio para experimentar otras emociones. Dedícate unas palabras bonitas. Antes de cerrar esa carta, busca esas palabras que te reconfortan porque dicen verdades. Refuerza esas fortalezas que son las que te dan la energía para continuar adelante. Y agradécete todo lo que has hecho para llegar hasta dónde estás. Despídete de la tristeza. Como si de una buena amiga se tratase y que ha venido a ayudarte y a escucharte, dale las gracias y despídete de ella. Abrázate. Quiérete mucho. Busca un espejo y mírate, no para encontrar fallos, sino para encontrarte a ti misma. Sé lo más sincera que puedas. Busca tus ojos y conecta contigo.Para terminar, recuerda que aunque tras tus días tristes el sol aparezca con pequeños destellos para no deslumbrarte, depende de ti salir a recibirlo o, por el contrario, cubrirte con una manta para no darle la bienvenida. Lo que te propongo es que te atrevas. Que seas valiente una vez más para sentir y comprender tu tristeza, sin dejar en el camino de ser auténtica.
Por que me pasa esto ami despues la quemo la crta para nadie lea mis mas pensamientos mas oscuro que estan en mi corazon
Por que se que ella sido por lo cual e derramado ya demasiadas lagrima pero nadie debo de saberlo sera mi mas amrgo recuerdo
