Ejem, esto... estamos de regreso.


Hay momentos en los cuales uno debe de hacer algo que no se esperaba, se podría pensar que trabajar con tu antiguo enemigo es una de esas cosas y realmente nadie se esperaría que un desarrollo así se lleve a cabo, dentro de Chaldea existen varios servants que fueron enemigos en la vida real o tuvieron algún roce dentro de alguna guerra, gente antagónica que una vez pusieron vidas en peligro ahora luchaban por proteger y salvar a la humanidad o simplemente rencillas que había entre ciertos individuos. Justa se abarcará a uno de estos individuos.

Asagami Fujino era la más reciente Archer invocada en Chaldea, ella fue una enemiga en el anterior problema que hubo dentro de los apartamentos y luchó en contra de los jóvenes masters de Chaldea y sus servants pero lo que fue más, luchó contra su vieja enemiga Ryougi Shiki, las dos comparten una historia bastante larga y sumamente dolorosa, más que nada para la peliazul que no puede contar cuantas veces ella se metió en su camino, siendo ambas usuarias de ojos místicos, un choque era inevitable más que nada por la obvia inestabilidad de Fujino, para su suerte no fue invocada como Berserker sino como Archer por lo que conservaba su cordura de antes pero no cabe decir que recuerda muy bien las batallas que llevó a cabo.

- Esto es malo… - Ahora mismo la Archer con uniforme de monja se encontraba en una habitación que se le otorgó para descansar, recostada en la cama de esta. – Shiki-san está aquí… eso ya es malo, porque no puedo olvidar todo lo que ella me hizo… - Se llevó la mano a la frente. – Entiendo que mi master dijo que todos aquí somos aliados, pero ciertos odios… son difíciles de olvidar.

Justo en ese momento tocaron a su puerta, no tenía idea de quien pudiera ser y es que realmente no conocía a nadie más en Chaldea más allá de los masters, si estos tenían algo que decirle, no era algo que pudiera ignorar, fue a abrir esta, y al ver quien era no cabe decir que acabó asombrada.

- Ey Fujino. – Shiki estaba ahí sosteniendo un bote de helado de fresa el cual comía, la Archer se quedó paralizada durante unos segundos cuando cerró la puerta en su cara.

- (¡Que rayos hace Shiki-san aquí!) – Pensó con desesperación, su archienemiga prácticamente la saludó de forma casual, era algo impensable para la peliazul. – (Cálmate Fujino, no armes una escena, por más que quieras distorsionar las entrañas de ella… ahora mismo no desea pelear…) – Tomó un respiro hondo para calmarse y abrir la puerta nuevamente.

- Oye, cerrarle la puerta en la cara es de mala educación ¿no sabes de modales?

- Lo siento Shiki-san, es solo que estuve… asombrada…

- Eres realmente extraña. – Respondió esta con rostro inexpresivo.

- ¿Puedo preguntar porque vienes a hablar conmigo?

- La verdad, eres la única en este sitio que conozco, los demás son espíritus heroicos de leyendas de hace tiempo, nosotras somos las únicas que pertenecemos al periodo presente, por así decirlo, además de que tenemos historia.

- No me lo recuerdes… - Fujino bajó la mirada.

- Entiendo que tengas una maldición en mi contra…

- Maldición es muy suave para llamarlo.

- Lo que quiero decir es que sé que me odias y yo precisamente no tengo la mejor opinión de ti, pero ahora esta es nuestra realidad, quizás seamos copias de nuestros yos verdaderos que podrían haber desaparecido junto a la humanidad y por eso logramos ser invocadas como espíritus heroicos.

- Aunque no entiendo que hice para ser invocada, no soy realmente… alguien heroica.

- Y yo solo mataba espíritus pero ese trono de héroes trabaja de formas muy extrañas, pensé que en que podríamos ser aliadas aquí y ahora.

- ¿Aliadas? – Aquella propuesta dejó ensimismada a la Archer.

- Sé que te sorprende pero si deseamos ayudar en estas situaciones, es mejor dejar de lado las maldiciones entre nosotras y colaborar.

- … Bueno… - Para Fujino, pelear al lado de Shiki era algo impensable realmente y en el pasado se hubiera rehusado totalmente, pero la situación era distinta ahora, la humanidad había sido incinerada y si para restaurar todo había que pelear, ella tendría que hacerlo, aún si fuera al lado de la asesina pelinegra. – Lo haré…

- Es una tregua entonces. – Extendió su mano entonces. – Seremos aliadas.

- Claro, trabajaré contigo Shiki-san. – Ese momento ya marcó que las dos no pelearían por nada, a pesar de los rencores pasados que hayan tenido, la situación era mejor para pelear juntos y eso harían.


Era un día libre y en ese momento Haji y Rika decidieron ir a recolectar materiales a pedido de Da Vinci, para ello llevaron a sus más recientes servants para probarlas en batalla, siendo estas Shiki y Fujino, luego de transportarse por los sarcófagos, llegaron a su destino que era un bosque.

- Aquí estamos, espero que ambas puedan desempeñarse bien. – Comentó Haji, Shiki asintió.

- Descuide master, unas cuantas criaturas no serán suficiente para detenerme. – Respondió la pelinegra soltando un bostezo.

- Shiki-san, debes de concentrarte. – Reclamó Fujino. – Lo haremos, ya decidí que pelearé con todo.

- Es bueno saberlo, que ambas parecen llevarse bien. – Sonrió Rika. – Entonces, es hora de cazar criaturas.

Los cuatro se movieron por este bosque para buscar a criaturas de las cuales puedan encontrar materiales, para su suerte vieron unos cuantos orcos y también hombres bestia, ahí ambos masters comandaron a las dos chicas para que fueran a pelear.

- son débiles. – Shiki cortaba con su cuchillo a estos sin que hubiera resistencia alguna, por su parte Fujino apuntó con su mano mientras sus ojos brillaron, en ese momento un par de orcos fueron totalmente desfigurados hasta quedar hechos bola, sus huesos se contractaron totalmente, cayendo muertos., Shiki soltó un silbido al verla. – Veo que no has perdido practica Fujino.

- No es momento de hablar Shiki-san, parece que vienen más.

- No es nada. – Los ojos de Shiki brillaron, vio los hijos rojos de la muerte en tres enemigos, ella se movió velozmente, pasando su cuchillo por estos hilos, cortó directamente a los enemigos en el punto de unión, al volver sus ojos normales, las criaturas cayeron totalmente muertas al suelo. - ¿Lo ves?

- Esos ojos tuyos siguen siendo tan peligrosos como siempre… - Comentó Fujino por debajo. Ambas servants siguieron atacando a las criaturas hasta no quedar ni una sola, al final todo terminó.

- ¿Es todo? Pensé que darían más pelea. – Comentó Shiki hundiéndose de hombros.

- Buen trabajo. – Respondió Haji al acercarse. – Ahora vamos a recolectar todo de los cuerpos que sea útil. – Se pusieron a cortar carne y agarrar todo lo posible, para ambos masters ya era algo común así que estaban acostumbrados.

- No puedo creer que despedacen cuerpos como si nada… - Comentó Fujino algo asombrada.

- Ya tenía cierta idea, pero nuestros masters han pasado por varias batallas. – Respondió la pelinegra. – Me di cuenta durante nuestra pelea en los apartamentos, ellos están acostumbrados al combate y a tan corta edad… realmente a uno lo hace pensar ¿no?

- Lo dices como si fuéramos viejas Shiki-san, seguimos siendo adolescentes.

- Je, habla por ti.

Una vez ambos acabaron de recolectar todo, lo enviaron de vuelta a Chaldea donde seguro la Caster staff estaría complacida.

- Eso parece ser todo, quizás debamos de volver… - Un rugido interrumpió a Rika, justo en ese momento una criatura saltó y buscó atacarlos, Shiki se puso en medio, bloqueando el ataque del nuevo enemigo.

- Una quimera, parece que llegó de repente al detectar la sangre que generamos. – Respondió Haji, la criatura hibrida de varios animales miraba con fiereza a los cuatros, Shiki sonrió de forma segura.

- Ahora este enemigo si es uno que pueda entretenerme, me encargaré de él.

- ¡Espera Shiki-san, hay que pelear juntas! – Fujino buscó detenerla pero la Assassin se había adelante. – Esa mujer terca…

Shiki corrió mientras usaba sus ojos para ver el hilo de muerte de la quimera, ya entonces pudo detectarlo, preparó su cuchillo para el ataque final pero se llevó la sorpresa cuando esta criatura la esquivó.

- ¿Cómo?

- Las quimeras son distintas, porque utilizan su olfato para esquivar. – Respondió Haji. – No podrás acercarte por métodos convencionales.

- Es verdad, Fujino-san, si pudieras apoyarla. – Ordenó Rika, la peliazul asintió y apuntó con su mano hacia esta criatura.

- Veremos si puedes esquivar mi poder. – Disparó unos cuantos rayos a la criatura pero esta la esquivó y dada la casualidad que Shiki se puso en su camino, la pelinegra se dio cuenta a tiempo y desvió estos con su cuchillo los cuales impactaron un árbol que acabó destruido.

- ¡Fujino, casi me das con eso!

- ¡Pues no te metas en mi camino! – Las dos se gritaron, siendo enemigas anteriormente, trabajar en equipo resultaría complicado y aún más el coordinarse.

- Debemos haber algo nii-san. – Expresó Rika, el pelinegro asintió.

- Pongamos orden, Shiki, no ataques a menos que veas el momento adecuado, no es bueno el lanzarse como si nada.

- Bien… - Respondió esta.

- Fujino-san, lo mejor que podemos hacer es acorralar a la quimera para que Shiki-san tenga una oportunidad, sigue disparando tu poder.

- Claro, eso haré. – La peliazul se concentró, manteniendo a la criatura en su rango de vista, sus ojos rojizos se fijaron en este ahora que Shiki ya no estaba en el camino, podría trazar una ruta en la cual la quimera no podría escapar, sonrió por debajo. – Te tengo.

Comenzó a disparar rayos, la quimera comenzó a esquivarlos pero era parte del plan de la Archer para dirigirlo, así este continuó moviéndose según lo que ella quería, entonces lo llevó donde un grupo de árboles estaban unidos y le bloqueaban el paso.

- ¡Ya no podrá escapar, ahora Shiki-san! – Gritó Fujino, la pelinegra sonrió de forma segura.

- ¡Buen trabajo Fujino! – Podía ver el trazo firmemente, la Assassin se movió directamente con el cuchillo en su mano, siguiendo la línea, en ese momento realizó un fino corte al final de este y pasó de largo a la criatura, esta cayó al suelo en ese momento, terminando con su vida.

- Lo hicieron. – Sonrió Haji.

- ¡Es cierto, trabajaron bien! – Celebró Rika, Fujino soltó un suspiro, todo había terminado.

- Buen trabajo Fujino. – Shiki se acercó a ella, levantando su mano, la peliazul solo la vio unos segundos. - ¿Qué esperas?

- Ah, esto, claro… - Ambas chocaron palmas, ella nunca pensó que haría ese gesto con su peor enemiga, pero a pensamientos de la Archer… no se sintió mal. Al final de todo destazaron igual a la quimera y tomaron sus valiosos materiales, ya regresando a Chaldea, ese día terminó bastante bien.


Fujino estaba en su habitación, era de noche, aunque los servants no requerían dormir, si era necesario para recuperar energías, pero no sentía sueño por alguna razón, se levantó de su cama y salió de su habitación.

- (Lo de este día fue totalmente irreal… peleé al lado de Shiki-san, de aquella mujer que no hizo más que causarme problemas en el pasado… espero no estarme suavizando…) – Soltó un suspiro, en ese momento observó en una ventana, estaba una figura reposando. - ¿Shiki-san?

La reconoció con la pelinegra pero se veía distinta, en vez de llevar su típica ropa de siempre, ella portaba un kimono blanco y por alguna razón su cabello era un poco más largo, su mirada serena se posaba sobre la ventana la cual señalaba la ventisca que nunca se acababa, Fujino no pudo evitar quedar encandilada por esa vista hasta que la pelinegra se dio cuenta de su presencia.

- Fujino… - Esta sonrió de forma suave, una sonrisa que nunca había visto en ella. - ¿Qué haces despierta? ¿No puedes dormir?

- B-Bueno… quería buscar un poco de agua, a ver si podría conciliar el sueño…

- Entiendo, yo solo quería reposar un poco aquí… - Respondió ella. – Fue un buen día ¿no lo crees?

- Esto… claro…

- Ambas podemos trabajar juntas si la situación lo requiere. – Comenzó a hablar Shiki. – Nuestras batallas pasadas siguen sin ser olvidadas pero considero que este es el nuevo inicio que las dos merecemos… y realmente espero que nuestra empiece a cambiar.

- ¿Eh? – Ahora esas palabras si son algo que nunca esperaría que la siempre estoica Shiki pudiera decir ¿Quién era esta Shiki tan femenina?

- ¿Estás bien? Pareces asombrada.

- No es nada… debo ir a la cocina, descansa bien Shiki-san…

- Claro, igualmente Fujino… - La peliazul se fue dejando a Shiki en ese momento, ella caminó hasta no sentir presencia alguna de ella, en ese momento, se apoyó en la pared, respirando agitadamente.

- (¡Que le pasa a Shiki-san! Ella se ve tan… femenina, preocupada y perfecta… es como si fuera una mujer diferente, yo… ugh, me da nauseas…) – Se tapó la boca. – Esa Shiki-san… creo que la odio mucho más que la Shiki-san que conozco… hasta me hace apreciarla mucho más.

Luego de haber ido a buscar algo de agua para tomar, volvió aunque temía ver de nuevo a esa Shiki, para su suerte ya no estaba ahí, debió volver a su habitación, suspirando de alivio entró y se acostó para dormir, esperaba que esa situación no volviera a repetirse.

Llegó la mañana, todos despertaron para del desayuno que empezó a ser preparado por Emiya, Boudica y Tamamo Cat en ayuda del staff de cocina de Chaldea, todos los servants se sentaron para comer, Fujino igual estaba ahí.

- Ey Fujino. – Shiki se sentó en su mesa, al menos era la misma de siempre en el pensamiento de la peliazul. - ¿Por qué la mirada? Te ves pálida.

- No es nada… - Soltó un suspiro, entonces sonrió por debajo. – Te prefiero de esta forma.

- ¿Oh? – La Assassin ladeó la cabeza. – No entiendo de que hablas.

- No es nada… son solo cosas mías…

- Eres realmente extraña…

Fujino podía tener mucho más tiempo para aprender acerca de Shiki más de lo que sabe de ella con anterioridad, ese mundo era extraño para la Archer pero seguro podría aprender y seguir peleando, y entonces, quizás su mundo pueda expandirse, solo el tiempo lo diría.


Ok, lamento que tuvieran que esperar más de un año pero finalmente volvemos con todo con este fic, ya me siento revitalizado luego del hiatus que le di y he regresado con más ideas, además de que seguir jugando me ha entregado muchas cosas, en este evento de verano saqué a casi todos los servants, Kiara de verano llegó en NP3, Ilya NP2 y ayer saqué a Abi y Tomoe NP2, me está yendo bien.

Ya aviso que tendremos cambio de publicación, ahora los caps saldrán los días miércoles cada semana, espero sigan disfrutando de esta gran historia hasta el final que tenemos para rato, hasta el próximo cap. Saludos.