Cuando te encuentras en una carrera contrarreloj, esperas lograr llegar a tiempo sin ningún tipo de problema, excepto cuando un grupo de asesinos de la montaña te evitan el paso, eso es lo que justamente le pasaba a nuestro grupo de protagonistas en aquel momento.
- Ok, no parece que esto sea por la vía fácil. – Señaló Haji. – Lord ¿algún plan?
- Podría tenerlo, el caso es que Assassin puede seguir generando más copias como pueda y seguir evitando nuestro paso, hasta que alcance su límite de cien, pero no tenemos un estimado de cuanto ha sido.
- Si no piensan atacar, lo haré yo. – La pequeña comandó a los asesinos para que fueran hacia ellos, el combate parecía ser inevitable, entonces en ese momento Lancelot aterrizó con fuerza entre ellos, soltando un rugido, este empezó a disparar contra ellos.
- Parece que se adelantó a mis intenciones. – Diarmuid también dio un paso al frente. – Será mejor que vayan, Berserker y yo los mantendremos entretenidos.
- ¿Estás seguro de esto? – Preguntó Rika, el Lancer sonrió.
- A pesar de haber sido enemigos, me dieron esta oportunidad y realmente no ha sido malo, he sobrepasado ya por bastante el destino que se me ha asignado como lancer, así que voy a devolver esa amabilidad.
- … Ok, es mejor si nos movemos. – Sugirió Haji.
- Lancer, no mueras. – Expresó Mash, el pelinegro simplemente hizo un gesto con la mano mientras encaró a los Hassans.
- No permitiré que escapen. La Assassin buscó atacar al grupo, pero fue desviado por Lancelot que soltó un rugido.
- Aprovechemos ahora. – Al aviso de Waver, el resto corrió lejos de ahí, ahora los dos servants que se quedaron para enfrentar a los Hassans, Diarmuid estiró los brazos.
- Y pensar que, quizás hubiera muerto antes en todo esto de la guerra, pero este trabajo es algo mejor de mi calaña… vamos Berserker. – Y ambos se lanzaron al ataque.
El resto del grupo siguió adelante, poco a poco se iban acercando al grial, solo tenían que atravesar el bosque para llegar a la zona dentro de la montaña y de ese modo evitar el desastre.
- Detecto otra señal de servant cerca de ustedes. – Informó Roman, en ese momento se escuchó un disparo, justo en aquel momento Arturia bloqueó el ataque que iba en dirección hacia su master.
- ¡Sal de ahí! – Reclamó ella, en ese momento apareció el misterioso servant encapuchado que les había estado siguiendo. - ¿Qué es lo que quieres con mi master?
- … Ella debe morir. – Fue lo que dijo aquel servant que comenzó a moverse velozmente, sacando un cuchillo para matar a Irisviel, claro que la Saber no iba a permitirlo y fue al mismo paso que él, bloqueando el ataque.
- ¿Estarán bien? – Preguntó Mash.
- Es mejor que sigan adelante, es bastante obvio que su objetivo soy yo. – Respondió la albina.
- ¿Estás segura? – Preguntó Waver, según el rostro de ella, ya había tomado su decisión, algo que respetaría. – Entiendo, sigamos.
- Buena suerte. – Señaló Rika, Irisviel asintió con una sonrisa antes de desviar su mirada nuevamente a la batalla entre su servant y el renegado.
Arturia chocaba fuertemente contra el servant desconocido, las chispas salían volando y hasta el momento ninguno de los dos había recibido daño de parte del otro, Arturia probó algo distinto, en esta ocasión ella giró su espada para lanzar un corte vertical desde abajo, causando que el servant se viera al descubierto una vez su cuchillo estaba apartado.
- ¡Ahora! – Ella entonces lanzó su ataque directo a la cabeza de este, pensando que con cortarla ya podría acabar con él, pensó en tener la victoria pero este actuó más rápido de lo pensado y saltó hacia atrás, la rubia chasqueó la lengua. – Es veloz.
El servant desconocido estaba a una distancia prudente de ellos, eso fue una llamada cercana para él pero tampoco salió totalmente ileso; en ese momento el vendaje que cubría su rostro se rompió, dejando ver lo que había debajo. Un rostro serio, carente de emociones, ojos vacíos con una mirada perdida, cabello blanco y piel oscura, Irisviel sentía algo de pena al verlo.
- (Se observa muy vacío por dentro… ¿Qué fue lo que le pasó para acabar así?)
- Esto no se ha terminado. – Respondió la Saber. – Iri, hay que acabar con esto.
- … Sí, tienes razón. – Ella cerró los ojos, no tenía por qué sentir lástima por el enemigo, ese servant ha estado buscando matarla durante todo ese tiempo, lo mejor era acabar de una vez por todas. – Antes, quiero que me respondas algo… ¿Por qué quieres matarme?
- … Son ordenes, eres peligrosa. – Respondió el servant Assassin, Irisviel no expresó nada, de algún modo sentía que era una razón válida.
- Es por lo que soy ¿no? Si me acerco a ese grial, algo malo podría suceder, ya nos han dicho que está corrupto y es peligroso para dejarlo ileso, por eso hay que destruirlo. – Declaró la Einzbern pero ese Assassin no parecía alguien que escuchara razones.
- Mi única misión es que mueras y nada más, así que, por el bien del mundo, tienes que desaparecer. – Este sacó su pistola rápidamente y le disparó a la peliplateada, antes de que la bala impactara contra ella, esta fue desviada por Arturia.
- Sí tanto quieres acabar con mi master, tendrás que pasar sobre mí. – Declaró ella, el Assassin entrecerró los ojos.
- Como desees. – Y este se movió velozmente una vez más para ir al ataque, Irisviel solo podía estar al pendiente del combate de su servant.
- (Espero que Haji y Rika puedan conseguirlo.) – Pensó mientras seguía observando todo.
El resto del grupo siguió adelante, ya según la señal de Roman, el grial estaba bastante cerca y tenía que ser destruido pero quedaba un único obstáculo antes de poder llegar y justamente se puso al frente de ellos.
- Para que llegaran tan lejos, parece que los otros obstáculos no fueron suficientes. – Declaró Iskandar.
- Si sabes muy bien lo contaminado que está el grial, es mejor que nos dejes ir. – Señaló el Lord, pero el Rider enemigo no tenía ese plan.
- Creí haberlo dejado bien claro que vamos a ser quienes tengamos el grial, después de todo tengo un deseo que cumplir.
- Serás… tu deseo no se cumplirá porque el grial está maldito gracias a Angra Manjuu, solo ocurrirá una catástrofe si no se destruye.
- No creo que escuche nuestras razones. – Comentó Haji. – No tenemos otra opción más que pelear.
- Ese parece ser el caso, si solo así nos escuchará ese terco, hay que bajarlo de sus cabales. – Y el Lord se preparó, Alexander sonrió.
- Nunca antes me había enfrentado a mí mismo, pero siempre hay una primera vez para todo.
- Bueno chico, apóyame como siempre lo haces. – Comentó Iskandar, Waver asintió.
- Entonces Rider, ve y acaba con ellos. – Este sonrió de forma segura.
- ¡Claro! – Y entonces comenzó con su ataque. Alexander fue el primero en lanzar su ataque, con su espada buscó cortar a su versión mayor pero este lo detuvo sin el mayor esfuerzo.
- Realmente tienes energías, no cabe duda de que eres yo, pero aquí yo poseo la experiencia. – Iskandar empezó su ataque con fieros espadazos en aquel momento, los cuales Alexander empezó a bloquear pero le costaba, Rika extendió la mano y usó una de las skill de su código místico para potenciar la fuerza de ataque del Rider. – Parece que quieren jugar así, chico, hazlo igual.
- Claro Rider, acaba con ellos. – Usando uno de sus sellos de comando, potenció del mismo modo a Iskandar que se puso a la par en cuanto a fuerza en aquel momento.
- A este ritmo, el grial se corromperá lo suficiente para causar el desastre del gran fuego. – el Lord se mordió el pulgar en aquel momento, todo era una carrera contrarreloj después de todo, no sabían hasta qué punto Angra Mainyu se manifestaría para corromperlo por completo, debía de hacer algo y sí es que el servant no escucharía, tendría qué hacerlo con el master.
- Tú, escucha. – Se dirigió a su versión joven.
- ¿S-Sí?
- No tenemos tiempo, esta estúpida disputa no llegará a nada, solamente queremos evitar que el grial se termine corrompiendo y cause un gran desastre en la zona.
- ¿Y cómo estás seguro de eso? No creo que simplemente lo estés diciendo para librarte de esta batalla. – Waver estaba escéptico al respecto, el Lord se llevó la mano al frente.
- ¡Esto no es una mentira! El lugar corre peligro de forma real, y solo nosotros podemos hacer algo para evitarlo, es la razón por la que estamos aquí.
- Lord, es mejor que se relaje. – Haji tomó un paso al frente, mirando a Waver. – Sé que puedes estar desconfiando de nosotros, pero no mentimos, de otro modo no nos hubiéramos involucrado en esta guerra que no nos pertenece hacerlo.
- Ya de por sí poseen servants extras cuando no debería de ser así ¿realmente están diciendo la verdad? – Quería asegurarse que fuera así, Haji asintió.
- No mentimos para nada, nuestro objetivo es hacer el bien mayormente, salvar a la mayor cantidad de personas posible y, aunque tu o tu servant quieran pedir un deseo al grial, este simplemente no será concedido porque ese grial se encuentra infectado por una maldad pura, una la cual tenemos que acabar y tenemos un modo de hacerlo. – Las palabras del pelinegro eran lo mayormente elegidas cuidadosamente, sí de algo sabe es que toda la experiencia que Waver ha pasado le ha hecho desconfiar de los sucesos actuales y mayormente ha sido Iskandar quien ha movido las cosas, era de esperarse de alguien sumamente carismático, respecto a este.
Continuaba el combate entre los dos Rider, las espadas de ambos acababan chocando, ninguno de los dos mostraba signos de cansancio, mejor dicho, estaban emocionados como nunca.
- Ciertamente, nadie más puede vencerme que yo mismo. – Exclamó el Rider mayor. – Sin embargo, todo tiene que llegar a su fin y estoy dispuesto a hacerlo. – Extendió su espalda al aire en aquel momento, Alexander ya sabía que es lo que iba a hacer.
- No me digas, realmente va a hacerlo aquí. – La sonrisa de Iskandar lo decía todo.
- Mi sueño, mi deseo es mi más grande impulso en este momento y no puedo dejar que todo termine aquí. – El Lord ya sabía lo que estaba por llegar y entonces al ver como el Rider estiró los brazos, todo el panorama cambió, antes de que se den cuenta, estaban en un desierto, ahí estaba el conquistador y atrás de él se manifestó un gran ejército.
- Reconozco esto… así que decidió usar su Noble Phantasm. – Comentó Alexander.
- Esta es una demostración de lo enserio que voy, ahora mi ejército, es hora de que demostrar porque siempre hemos tenido la victoria, ahora vayan, Ionioi Hetairoi.
Todos los soldados soltaron un fuerte rugido y comenzaron a correr hacia ellos para atacarlos, el poder de ese NP era bastante grande por lo que poco podían hacer para defenderse.
- No tan rápido, Mash. – Señaló Haji, la shielder se preparó para desplegar su NP.
- ¡Lord Chaldeas! – El gran campo defensivo se extendió, pero no sabían si sería suficiente para evitar un ataque de ese gran tamaño, no saldrían totalmente ilesos de ello.
- Para despejarlo, hay que atacar la fuente. – Comentó Waver, así que su mejor opción actual era ir contra Iskandar.
- Es mi llamado entonces, aunque vaya contra mi propio ejército, no retrocederé. – Invocando su montura, el pelirrojo fue al frente, Iskandar observó a su versión joven lanzarse al ataque.
- Así que solo tú ¿eh? Como es de esperarse de mí mismo, ni ante una gran desventaja dejaré que me haga retroceder.
- Sí entiendes eso, quiere decir que sabes lo qué haré. – Sacando su espada, fue y entonces comenzó a atacar, los soldados fueron contra él, pero siendo la fuerza mayor entre ellos, comenzó a atacarlos, sin importar que alguna vez fue su ejército, pelearía para proteger a las personas que conoce en el presente, Iskandar simplemente se quedaba observando en aquel momento.
- Combates contra todo pronostico, sabiendo que esto es totalmente inútil, y a pesar de todo, lo haces para proteger a la gente que te importa… debo admitirlo, siendo yo, te estás ganando mi respeto… pero todo debe de llegar a un final. – Hizo el salto al frente en aquel momento, con su espada, cargó contra Alexander haciendo que sus espadas chocaran en ese momento. – Después de todo, no hay mejor forma de terminar esto que siendo yo quien acabe con tu vida.
- Eso es lo que estamos por ver. – Alejó a su versión adulta para tomar distancia, quedando ambos, sobre sus respectivas monturas, observándose fijamente, un par de segundos más tarde regresaron al combate, ambos aceros chocaban sin buscar ceder contra el otro, una danza la cual se llevaba a cabo entre ambos.
- Están igualados. – Comentó Rika. – Lord ¿no hay nada qué podamos hacer?
- Muy a mi pesar, este combate es de ambos, involucrarnos sería un insulto a sus orgullos, así que esto queda en manos de ellos.
- Pienso lo mismo. – Haji no retiraba la vista de la batalla. – Es un combate con sus orgullos en juego, meternos los perjudicaría, aunque no sé si entiendan eso.
- Claro que lo hacemos. – Señaló Rika con molestia. – Solo quiero que todo salga bien.
- Lo hará, de eso estoy seguro. – Respondió Waver. Regresando al combate, los dos continuaban repeliéndose mutuamente con sus armas, volviendo a tomar distancia en aquel momento.
- Claro que no podría haber nadie más a mi altura más que yo mismo. – Iskandar estaba feliz por tener tal combate. – Se encuentra a la altura de mis expectativas.
- Puedo decir lo mismo. – Alexander compartía la misma emoción. – Esto es lo más divertido que he peleado en mucho tiempo, pero no puede durar para siempre, debe de haber un ganador.
- Muy bien, demos nuestros golpes finales, llenémoslos de nuestros sueños y esperanzas.
- ¡Ahí voy! – Los dos caballos comenzaron a correr, así entonces se fueron acercando poco a poco, quedando a solo centímetros.
Lanzaron sus respectivos ataques, pasando uno al lado del otro, entonces fue que se detuvieron, viendo el resultado…
- … Jeje, no podía esperar más de esto. – Iskandar miró al frente, observando su pecho, tenía la espada de Alexander clavada fijamente en su corazón, entonces escupió sangre.
- ¡Rider! – Su master se preocupó por él, ya que el Reality Marble desapareció, volviendo al terreno original, la montura de Iskandar desapareció, cayendo al suelo, el joven Waver se acercó.
- Chico… parece que al final tendré que irme, al menos lo hice peleando de una gran forma, como esperaba…
- No digas eso ¿acaso no pensabas cumplir con tu deseo? De ser el más grande conquistador.
- Por supuesto… pero si acabé perdiendo de esta forma, es que no lo di todo para hacerlo realidad, tampoco te mortifiques, todo esto fue decisión mía después de todo.
- Rider… - Iskandar le acarició el cabello por última vez.
- Es momento de irme, recuerda, no dejes de sonreír, es como mejor te ves. – Y entonces desapareció, Iskandar ya no estaba ahí, el joven Waver solo pudo ver al suelo donde alguna vez estuvo su servant.
- Así es la guerra del Santo Grial, él luchó por lo que creía que era correcto y no se rindió hasta el final. – Habló el Lord al haberse acercado.
- … Dijeron que quieren ir al grial ¿no? Está por ahí. – Señaló Waver, el Lord lo miró una última vez, quizás necesitaba un tiempo a solas por lo que no dijo nada más.
- Vamos. – Señaló al resto. Así continuaron adelante, dejando atrás a Waver que necesitaba esos momentos luego de haber perdido a su servant.
El grupo continuó, esperando llegar a tiempo para poder acabar con el grial antes de que se corrompa más, ya entonces llegaron a ver al fondo de la cueva.
- Ahí debería estar ¿no? – Preguntó Rika.
- Así es, y lo cierto es que detecto una fuente grande de energía mágica, tengan cuidado. – Advirtió Roman, justo ahí unos rayos casi los golpean, solo porque Mash los bloqueó con su escudo.
- Que mal, esperaba que hubieran muerto ahí. – Escucharon una voz femenina, en ese momento vieron bajar una figura.
- ¿Irisviel-san? – Ahí estaba la peliblanca pero había algo distinto en ella, no llevaba su abrigo sino que una especie de ropa de color negro, como una túnica con un gorro del mismo color y teniendo un rostro feroz y seguro.
- Esa soy yo, o mejor dicho, la manifestación de la corrupción del grial, nada podrá detenerla, muy pronto propagaré todo el mal por la ciudad. – Declaró ella, el Lord apretó los dientes.
- ¿Acaso llegamos tarde?
- No será así. – Escucharon atrás de ellos, ahí estaban la verdadera Irisviel y Arturia, pero no estaban solas.
- ¿Por qué está el Assassin contigo? – Preguntó Mash, la peliblanca sonrió.
- Es una larga historia, pero ahora mismo lo importante es detenerla a ella. – Señaló a la Irisviel negra, esta sonrió de forma malvada.
- Así que decidiste venir, es momento de que te prepares, nada está completo hasta que te fusiones con el grial, así que te obligaré a que seamos una sola para traer la mayor catástrofe nunca antes vista.
- No si lo evitamos. – Señaló Rika. – Vamos a acabar contigo, pase lo que pase. – la retó, la Irisviel negra sonrió divertida.
- Me gustaría que lo intenten, pueden venir todos así que no se repriman. – Exclamó de forma maniática. Ya era el combate final para evitar la mayor de las catástrofes, se enfrentarían a esa Irisviel oscura para evitarlo, el destino de la singularidad dependía de ellos…
Buenas, luego de un tiempo finalmente traigo el siguiente cap, lamento un poco la tardanza de un mes, es que, entre ocupaciones y flojera, no les voy a mentir, solo escribía párrafos durante el día pero ya finalmente pude acabar este cap, ya les digo que el siguiente será el fin de este evento para avanzar a otras cosas, eso sería todo lo que tengo que decir, nos vemos en el próximo cap. Saludos.
