Preludio.
Ya saben, lo de la disgrafia, disculpas por los teclazos y horrores del auto corrector.
Y recuerden, Naruto y sus personajes son propiedad de Kishimoto sensei
Review.
Se los debo.
Mundo Pokémon, esa misma noche.
Esa noche, se estaba llevando a cabo una reunión en la sede oculta de la organización Team Rocket. Scott y Jean, dos ejecutivos Rocket responsables de los satélites de vigilancia de la organización, mostraban su último descubrimiento a un hombre con el rostro oculto en las sombras, el líder del Team Rocket.
Scott tosió nerviosamente, estaba pensando que los datos que tardó una semana en procesar aún requerirían mucho coraje para mostrárselos a su jefe.
-Bueno, señor, esto fue lo que nuestro espía satelital, el Venonat-G3, avistó mientras estaba sobre Pueblo Paleta, en la Región Norte del Continente Índigo- El hombre presionó un botón y una imagen infrarroja apareció en la pantalla grande.
-La imagen muestra una forma alada, del tamaño de un ser humano, volando en dirección al acantilado Paketa- Viridian- Jean explicó- Cinco minutos después, el ser detectado por el satélite voló en dirección a Pueblo Paleta, ya que este apareció en una imagen similar. Lo interesante es que el cuerpo principal del objeto tiene un calor corporal muy bajo, similar al de un Ditto grande, pero en el vuelo de regreso, se puede ver que lleva algo con calor corporal que coincide con el de un humano
El Jefe pasó unos momentos considerando las imágenes en la pantalla principal antes de hacer una pregunta que sonaba como una demanda:
-¿Fotos con luz normal?
-Señor, debe comprender que el Venonat-G3 es uno de nuestros satélites más antiguos. La resolución de las imágenes de luz visible es inferior a las imágenes infrarrojas y….- intentó excusarse Scott.
-Muéstralas- espetó el Jefe, no interesado en una conferencia.
La imagen mostraba, en muy baja resolución, una persona con alas y carne aparentemente hecha de algún tipo de material azul claro que brillaba a la luz de la luna reflejada como polietileno. Scott y Jean no pudieron ver la reacción del Jefe, y él permaneció en silencio, sin darles una pista de lo que pensaba.
-Señor, ¿quiere que cambiemos la órbita del DarkArticuno 2 para que sobrevuele Pueblo Paleta?- Preguntó Jenn
-No. No vale la pena- desdeñó Giovanni- Un cambio en su órbita impediría nuestro seguimiento de la ruta migratoria de los Gyarados en el Archipiélago Naranja. Además, tendremos que tener una suerte increíble de tener otro incidente como este- Le dio la espalda a sus agentes- Ya pueden retiraese- ordenó.
Después de que los dos Rockets se fueron, Giovanni Carpenter enterró su rostro entre sus manos. Se quedó así durante varios minutos pero, para él, le parecieron horas . Finalmente, el hombre se sentó en su silla de cuero y abrió el cajón derecho de su escritorio. Solo había una cosa adentro: una foto.
Su hermana menor lo había tomado durante una fiesta de Nochevieja, hace dieciocho años. En él, un joven Giovanni, un orgulloso Red Rocket, abrazó a una hermosa White Rocket pelirroja, mayor que él, pero aún joven en lo vivazmente viva que estaba. Se abrazaban muy fuerte, y el brillo travieso en sus ojos mostraba que había algo muy serio sucediendo entre ellos. Giovanni aún podía recordar la calidez de su cuerpo tan cerca del de él y ese aroma único que llevaba. Recordó el horror que le destrozó el alma cuando su madre le dijo lo que le había ordenado que le hicieran, "por el bien de la Causa" y la sensación de la culata del arma que presionó entre sus ojos de autómata sin vida para matarla y así liberar a su amada hermana de esa condición.
Si Giovanni todavía fuera un hombre completo, en lugar del cascarón vacío que le habían dejado años de actividad criminal y la ruina casual de innumerables vidas inocentes, habría llorado.
En cambio, solo miró al techo y habló, completamente sin ironía.
-¿Entonces sigues viva? ¡Felicitaciones!- Suspiró y sacudió la cabeza. -No sé si te agradezco por eso o si te odio por eso.
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Al día siguiente, Pueblo Paleta.
Era una mañana bastante normal en una cocina suburbana bastante normal. Una mujer estaba junto a una estufa, preparando el desayuno para su hijo. No había nada extraño en esta escena, excepto por la mujer misma. Esta mujer estaba hecha completamente de un fluido gelatinoso azul brillante y translúcido que no se movía ; que fluía desde una posición a otra como una especie de escultura surrealista. Lo que hizo que la escena fuera aún más alucinante fue el delantal rojo que usaba con la frase "¡Mamá # 1!" bordado en el frente.
Delilah Ketchum preparó el desayuno, mientras esperaba a que Ash saliera de su habitación y bajara las escaleras para desayunar. Ayer, después de escuchar sus revelaciones, le había pedido que lo dejara solo y le diera tiempo para pensar. Por supuesto que ella estuvo de acuerdo sin dudarlo ... entendió su situación.
Al escuchar a alguien bajar las escaleras, Delilah inmediatamente asumió su forma "humana". El fluido azul fluyó y se volvió a formar, palideciendo al color del tono de piel caucásico. Su cabello se oscureció a un rojo intenso y su cuerpo se reformó a sí mismo a semejanza de la ropa, tomando el color y la textura de la tela. Para cuando Pikachu y Chikorita aparecieron a la vista, no había forma de saber que Delilah era otra cosa que una mujer humana completamente típica. Por supuesto, los dos Pokémon sabían que ella no lo era .
"Pika-pi-chu-kachu-pika-ka". [Ash bajará en unos minutos], dijo formalmente el ratón eléctrico.
-Gracias, Pikachu- respondió Delilah. Tomó dos cuencos llenos de lo que Brock alguna vez llamó "Pika-chow" y los dejó junto a la puerta trasera. -Y aquí está tu desayuno- Los dos Pokémon observaron la comida que les preparaba durante unos instantes antes de empezar a comerla lentamente: era como si estuvieran comprobando si la comida era normal.
De espaldas a ellos, Delilah apretó las manos enojada.
" ¿Que hay de malo con ellos?" se preguntó a sí misma herida. "¿Creen que los envenenaría? ¿Quizás envenenar a mi propio hijo también?"
"¿Y no deberías haberlo hecho?" Preguntó su voz interior en un tono burlón.
Sacudió la cabeza, tratando de apartar el pensamiento de su mente. Fue difícil, por Arceus , fue tan difícil. Había pasado toda su vida adulta como terrorista y proscrita. No estaba acostumbrada a confiar en nadie y su condición lo hacía aún más difícil. Había sido programada sobre lo que debía hacer si alguien descubría su verdadera naturaleza. Amaba a su hijo, pero era una lucha continua contra un condicionamiento conductual que era mucho más perfecto de lo que pensaba.
-¿Mamá?- Hablando de su hijo Aquí estaba, entrando en la habitación. Se veía desordenado, como siempre lo hacía cuando se levantaba por la mañana. Se las arregló para contener una reprimenda brusca porque él ni siquiera se molestó en cepillar su cabello esta mañana como siempre. Ser madre era mucho más difícil que irrumpir en un Centro de Cría Pokémon fuertemente custodiado.
-¡Hola Ash! ¿Cómo estás?- preguntó, con su mejor y más cálida sonrisa.
-Bien, creo.-Ash se sentó a la mesa y se volvió para mirar a su Pokémon. -Chicos, ¿podrían ir a otra habitación por un tiempo? Necesito hablar con mi madre ... en privado.
"¿Chiko-kori-chi-ta?" (¿Estás seguro ?) Preguntó Chikorita, mirando a la mujer que olía cada vez más a una especie de amenaza cuanto más el tipo Planta enfocaba sus sentidos en ella.
Ash le dijo a Chikorita que estaba seguro, y dos Pokémon salieron, mirando nerviosamente a Delilah.
Delilah notó la seriedad en el rostro de su hijo y se sentó. Ahora estaban cara a cara. Respiró profundamente, tratando de reunir su coraje y determinación.
-Mamá, primero, quiero decirte que entiendo la razón por la que me has escondido …- Ash buscó la palabra correcta- tu condición.
-Gracias Ash- sonrió con alivio Delilah
-En segundo lugar, me gustaría hacerle algunas preguntas- retomó la conversación Ash.
-¿Claro, qué quieres saber?.
El joven Entrenador Pokémon miró a su madre a los ojos, tomó todo su coraje con ambas manos y saltó la brecha. -Bueno ... ¿Cuáles son las posibilidades de que me convierta en…. Ya sabes, algo como tú?
Delilah había estado esperando esa pregunta. Tenía que admirar la forma sutil con la que Ash le había preguntado si se convertiría en un monstruo mutante como ella. Sabía que eso preocuparía a Ash; diablos, esa posibilidad preocuparía a cualquiera que estuviera medio cuerdo. Afortunadamente, ella ya tenía lista una respuesta (que incluso logró ser una verdad parcial) para tranquilizarlo.
-Absolutamente cero. Ya que eres un bebé probeta, no tienes mis genes mutantes.
Ash ocultó bien su alivio, pero luego su cerebro se puso al día con lo que dijo su madre y parpadeó.
-¡Un momento! ¿Quieres decir que soy un bebé probeta?.
Ella asintió. Ash estaba confundido.
-Pero entonces ... ¿por qué me contaste historias sobre mi padre, que era un Entrenador Pokémon, y todo eso? Si soy un bebé probeta .
Delilah no pudo evitar sonreír divertida. -Pero esa parte es cierta cariño- le rectificó- no solo se trata de un óvulo, Ash. ¿de dónde cree usted que el esperma vino jovencito? Un amigo mío que es un donante de esperma fue quien dió la muestra para tu concepción
- ¡Oh! Oh, claro ... no había pensado en eso- murmuró Ash, poniéndose de un rojo brillante en una combinación de vergüenza y pena. Siempre actuaba así cuando surgía un "tema adulto" en cualquier discusión. Delilah recordó especialmente su larga discusión con Ash sobre ese sueño que ahora tenía sobre Misty y que había sido doloroso. Casi había estado tan asustado entonces como ahora.
-Pero, mamá ... aun así, ¡el óvulo vino de ti! ¿Cómo puedes estar tan segura de que no tengo tu mutación, no te ofendas, ok?
-Porque ... El óvulo vino de cuando era completamente humana cariño. Ahora Soy completamente estéril, Ash ... ni siquiera menstruo- murmuró, pareciendo avergonzada y más que un poco avergonzada de tener que admitir tal detalle. Ash se sonrojó de nuevo y miró hacia otro lado avergonzado. "Qué madre tan maravillosa eres" comentó su voz interior, irónica y sádica. "Con qué facilidad le mientes a tu precioso hijo"
Ignorando su propio tiro, añadió: había leído de más joven que entre más creces, la calidad de los óvulos va disminuyendo y eso aumenta la posibilidad de problemas pre natales y post parto, yo no quería eso, así que congelé una muestra de mis óvulos cuando era más joven, pensado en el futuro. He de decir que esa ha sido la mejor inversión de mi vida.
Halagado por eso, e incómodo también, Ash decidió pasar al siguiente tema. Uno que fue la causa de un trauma aún mayor para un adolescente en crecimiento.
-Cuando ... bueno, cuando te cambiaste ... tu ropa también se transformó . ¿Eso significa que tu ropa, en realidad, es parte de tu cuerpo?.
-Sí. Durante los últimos dieciséis años- respondió ella sin imutarse.
La barbilla de Ash cayó y su rostro se sonrojó de horror cuando entendió lo que significaba su respuesta, tan fácil y casualmente.
-¿Quieres decir entonces que estuviste desnudo ... todo ese tiempo?.
Delilah se encogió de hombros con facilidad. Técnicamente no era el caso, pero no era el momento de dar un sermón a Ash sobre la mecánica de la biología proteica adaptativa. El término "desnudo" era bastante exacto.
-Supongo que podrías decir eso, sí- respondió ella.
Ash solo se desmayo, rojo cuál Hyuga apenado, suspirando su madre por esa reacción de su hijo.
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Dos horas después.
Luego de recuperarse, Ash leyó un cómic en la cama, mientras Pikachu, sentado en el suelo, comía su Pika-chow. Entonces Ash escuchó un golpe en la puerta.
-¿Ash?
-Sí, pasa, mamá.
Delilah abrió la puerta. Ash notó que estaba en lo que ella llamaba su forma "predeterminada". Ella le había explicado que, como un ditto, tenía que gastar energía para tomar y mantener cualquier otra forma. Todavía lo hacía sentir un poco nervioso, ver a su madre en ese extraño fluido azul parecido a un gel, pero ya no le molestaba tanto. Llevaba una gabardina negra hasta la rodilla, ceñida con un cinturón para evitar su modestia y los nervios de Ash. Ash no era el más perceptivo de los chicos, pero se había dado cuenta de que esta era la única prenda de vestir con la que su madre realmente se sentía cómoda vistiendo. Entonces, cuando estaban en casa y sin invitados, amablemente le permitió usarlo o simplemente transformar su piel en ropa si quería. Era otro aspecto de la naturaleza de su madre al que poco a poco se estaba acostumbrando. Le alarmó bastante lo fácil que era llegar a un acuerdo con una madre habitualmente desnuda.
Delilah se metió las manos en los bolsillos.
-Hola, Ash- dijo con su habitual amabilidad- ¿estás ocupado? Necesito tener una charla rápida contigo.
-¡Seguro!- Ash se sentó y le hizo un gesto para que entrara y se sentara en su escritorio frente a su cama.
Delilah entró en la habitación, notando que Pikachu todavía la miraba nerviosamente. Había decidido que el ratoncito eléctrico no le tenía miedo, sino algo que ella representaba . Solo deseaba poder averiguar qué era eso.
Ash frunció el ceño, notando que su madre parecía nerviosa y preocupada. -¿Hay algo mal? preguntó preocupado
-Sí, Ash- admitió su madre, sus ojos extraterrestres verdes entrecerrados mirando a sus ojos marrón chocolate.- Tengo que hablarte de algo muy importante.
Pikachu saltó al regazo de su entrenador, sintiendo su preocupación.
-¿Acerca de?- Preguntó Ash, entre curioso y preocupado.
"Es ahora o nunca, Omega" Pensó Delilah.
-Ash, dijiste que entendías la razón por la que me escondí … y creo que hasta hiciste las paces con eso
-Sí- confirmo él- Entiendo, mamá, al final de cuentas eres mi madre y siempre has hecho lo mejor para mi
-Por respuestas así, es que a veces creo que eres mucho más de lo que yo merezco- sonrió con mucho amor en su mirada Delilah, pero casi en seguida, suspiró, cruzó las piernas y miró a su hijo con expresión seria. -Entonces creo que entenderás por qué te pido que hagas esto. Ash, no quiero que le cuentes a tus amigos sobre mi condición. Ni Brock, ni Tracey y ni siquiera Misty deben saberlo- Especialmente Misty- agregó en silencio.
Ash frunció el ceño profundamente y se reclinó.
-Mamá- protestó después de un momento- confío en ellos. Nunca harían nada para lastimarte.
Delilah suspiró, si ella era sincera consigo misma, de hecho todos ellos le parecían buenas personas, aún la asalta cunas que tenía por "amiga". Aún así, ella le explicó sus motivos para hacerle esa petición- segura de que confías en ellos, cariño- convino con él- Pero recuerdas cómo reaccionaste cuando supiste por primera vez de mi condición?- le recordó. Ash hizo una mueca, recordando su carrera salvaje por el bosque…. Veía el porque no quería que les dijera, especialmente a Misty, su fobia a los tipo insecto y a los tipo fantasma la hacían candidata segura para tener una reacción peor a la suya. No quería ni imaginar que sucedería en ese escenario- ¿Puedes estar seguro de que no entrarán en pánico cuando se enteren?
Ash suspiró suavemente. Odiaba la idea de ocultar algo a sus amigos. Por otro lado, entendía sus razones.
-Está bien mamá, no les diré nada- declaró de manera comprensiva- . Quiero decir ... sé que los demás pueden no entender que ser "diferente" no significa automáticamente que eres un peligro para ellos.
Ash movió inconscientemente los cómics apilados a su lado.
En la portada de una reimpresión de una historia de X-Men de sesenta años, cuatro cyborgs Prime Sentinel estaban arrancando el techo del avión Blackbird de los héroes y el título "Operación: Tolerancia Cero" resonaba en la portada. Sí, hubo muchas personas cuyo odio y miedo a lo desconocido les hizo contemplar medidas extremas.
-De todos modos- continuó Ash después de su momento de introspección- realmente no podemos difundir muchas noticias de todos modos. Teniendo en cuenta tus poderes, hay muchas organizaciones a las que les encantaría tener algún tipo de control sobre ti ... tal vez las Fuerzas de Defensa de la ONU o el Equipo Rocket.
Dalila reaccionó con alarma al escuchar ese nombre pronunciado en este contexto.
-¿Por qué mencionaste al Team Rocket?- preguntó, un poco… más bien de manera bastante brusca.
Ash no entendió su miedo. (En ese mundo, Mewtwo no existe, así que jamás ha visto al Team Rocket hacer algo parecido a ella e igual de antroz)
-¿Eh ...? Bueno, ¡porque el Team Rocket es la organización terrorista más grande del mundo! A ellos les encantaría poner sus manos sucias sobre ti - Ash de repente se quedó en silencio cuando su ingenio, reconocidamente lento, finalmente se puso al día con la situación. Se puso de pie de un salto de emoción. -¡ES ESO, ¿NO?!- él gritó entrando en pánico. -Tienes miedo de que el Team Rocket te capture, ¿no es así?.
"Ni siquiera puedes imaginar cuánto", pensó Delilah, sonriendo débilmente por la vergüenza.
-Sí, tienes razón- admitió.
Ash le sonrió a su madre y se puso un poco más erguido y orgulloso.
-No te preocupes, mamá. ¡Pikachu y yo te protegeremos! - dijo haciendo una pésima pose heroica- ¿Verdad, Pikachu?.
El ratón eléctrico asintió, sudando de nerviosismo.
-Gracias, Ash- sonrió, empapada de sudor con solo pensarlo. Ella sabía que su hijo quería decir que eso todo su corazón y alma. Nuevamente ¿Que había hecho ella para merecer a un muchacho tan maravilloso?
Después de unos minutos de escuchar las estrategias de su hijo para darle una paliza al Team Rocket, Delilah lo dejó para trazar estrategias defensivas con Pikachu, Chikorita, Cyndaquil y Totodile. "¡Dios mío! ¿Cómo hace eso? ", Pensó aturdida. Cuando le dijo que la protegería del Team Rocket, había estado en una pose heroica, que en cualquier otra persona sería totalmente ridícula, pero que era perfecta para él. Ella no entendía por qué debería ser así. Era como si Ash tuviera vocación de héroe o algo así.
" No sé de quién heredó eso" pensó. "Porque sé que él no lo heredó de mí".
Llegó a la conclusión de que ser demasiado consciente de quién y qué ella había estado en el pasado …
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Mundo Shinobi.
Konoha.
Kushina estaba furiosa, realmente debió haber hecho algo malo en su vida pasada para que esto le sucediera.
Mito decía que la biblioteca que estaba en la finca Uzumaki tenía los libros más importantes con el conocimiento del clan que podía existir. Aparentemente eso solo abarcaba los conocimientos sobre fuinjutsu, genjutsu, Taijutsu y ninjutsu y no historia, leyes o costumbres Uzumaki.
Por lo tanto, aunque Kushina estuvo leyendo asiduamente los pocos libros de historia, leyes y costumbres Uzumaki que existían, jamás pudo encontrar algo que le sirva para recuperar a Naruto de las garras de la arpía de Arcelia. Al contrario, encontraba más motivos de esa bruja para quedarse con él.
-Deberia haber algo aquí, quizás no busque con suficiente atención- medito en voz alta Kushina- lo que sea que me ayude a recuperar a Naruto y mi estatus como Uzumaki.
Hacer esto se estaba convirtiendo en una actividad cada vez más difícil de llevar a cabo.
Debido a que ya no era una Uzumaki de sangre, solo Asami podía acceder a la biblioteca y a los libros más selectos de su colección, los que ella debía llevarle para que ella le de acceso a ellos. Con las actividades de Asami con el equipo siete, era más y más el tiempo de espera que tenía que tener para que ella le diera el acceso necesario.
Sumando al hecho de que ella comenzaba a negarse cada vez más a hacerle ese favor porque se dió por vencida de ayudarla, Kushina necesitaba un buen plan para poder hacer realidad su sueño de recuperar a su hijo.
Solloso, ahora las palabras de su amiga Hana Hyuga tenían más peso que nunca.
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Hace algunos años, cuando los gemelos tenían 5 años de edad.
Había estado corriendo, huyendo de los aldeanos que querían perjudicarlo, por lo que le pareció raro oír una gentil voz llamándolo mientras corría por su vida. Lo que lo distrajo el tiempo suficiente como para que tropezara y cayera de bruces al suelo.
Naruto miró hacia la fuente de la voz. Vio a una mujer, no pudo distinguir mucho sobre ella, no quería. Simplemente se puso de pie de un salto y empezó a correr.
-¡Espera, soy una amiga!- Ella gritó mientras corría tras él.
Tan pronto como ella dijo eso, se detuvo por completo.
"No quiere hacerte daño"
Esas fueron las palabras que Kurama usó para describirla cuando la mujer de ojos perlados se estaba acercando a él. Decidió confiar en ella, una señal de buena fe para esa voz que podía escuchar en su cabeza.
-¿Quién eres tú?- Preguntó todavía cauteloso Naruto.
La dama se acercó y miró al niño y casi deja escapar un sollozo.
Estaba cubierto de sangre, mucha sangre seca. Con la cantidad que vio, fue un milagro que él no hubiera estado muerto, un adulto lo habría estado. Su ropa estaba rota, básicamente estaba cubierto de harapos. Las partes de su cuerpo que se veían eran igualmente horribles, estaba tan desnutrido que ella podía ver sus huesos a través de su piel. La peor parte fueron sus ojos.
Sus ojos estaban llenos de más desconfianza que un Shinobi paranoico y pícaro. Detrás de la paranoia había una mirada que lo hacía parecer viejo y la desconfianza en su caso era muy justificable. Detrás de eso, estaba la ira embotellada, la tristeza y algo más.
Mientras ella lo estudiaba, él la estudió a ella.
Vio por la forma en que se vestía que provenía de la riqueza. Aunque lo que llamó su atención fueron sus ojos. Eran grandes y sin pupilas, pero tenían un tinte azul claro.
"Ojos muy hermosos" Pensó para sí mismo.
-¿Quién eres tú?- Repitió con insistencia Naruto.
-Te dije- Ella habló amablemente- soy una amiga.
Naruto le envió una mirada sarcástica.
-He escuchado eso antes- dijo de manera molesta el ojiazul.
-Soy Hana, la esposa del lider del clan Hyuuga- Hablaba con aire regio- Estoy aquí para ofrecerte un lugar donde puedas comer bien y descansar un poco.
-Ya he oído eso antes también- comentó más enojado Naruto- La gente dice que son mis amigos, incluso me dan comida solo para que muera envenenado- Él la fulminó con la mirada.- O esperan a que me relaje antes de apuñalarme con un kunai, en el mejor de los casos.
Hana Frunció el ceño con tristeza al escuchar esas palabras.
"Kushina, has hecho algo tan horrible" Pensó. "¡Abandonando a tu hijo no mereces que te llame madre!"
-Tengo una hija propia" ignoró lo mejor que pudo su mirada enojada-. Quizás ustedes dos puedan ser amigos.
-¿Por Qué querrías eso?- Preguntó Naruto.
-No todo el mundo te odia Naruto.- Ella habló, usando su nombre para demostrar su punto- he oído que Anko Mitarashi y Neko te cuidan, yo también quiero hacerlo.
-Sí, bueno, no todos quieren ayudar tampoco- Habló mientras se giraba para irse. -Buenas noches, creo que me iré a buscar a hebi hime a ver si ella tiene algo de comer.
Se detuvo cuando sintió una mano en su hombro. Habría intentado liberarse, pero luego sintió que ella lo abrazó.
-Quiero ayudarte- Ella susurró- Si me permites.
Naruto apenas había escuchado las palabras salir de su boca. Estaba más concentrado en lo agradable que se había sentido el abrazo, lo cálido que era.
"Se siente como los abrazos que Neko y Anko me dan" Pensó pacíficamente.
Apenas se dio cuenta de que ella lo conducía fuera del callejón.
Luego de sacarle de ahí, Hana llevo a Naruto a dónde vivía, asombrando al ojiazul al ver al enorme complejo Hyuga que era más grande que el Uzumaki, de lejos.
-¡¿ESTE ES EL LUGAR DONDE VIVE?!- gritó a todo pulmón el aún entonces Uzumaki.
Había echado un vistazo al complejo Hyuuga y vio que era más grande que todo su hogar en su conjunto. Al menos tres veces si había calculado medianamente bien.
Hana solo pudo reír ante su arrebato.
-Sí, aquí es donde vivimos la Rama principal y secundaria del clan Hyuuga- respondió con más humor luego de lo que vivieron hace apenas media hora- Aunque, por favor, trate de mantener la voz baja, la gente suele preferir dormir a esta hora.
Fue entonces cuando Naruto se dio cuenta de lo tarde que era. Las estrellas estaban altas en el cielo y la mayor parte del pueblo estaba tranquilo, la mayoría de los noctámbulos estaban comenzando a comenzar la noche.
-Perdón- susurró Naruto apenado- Estaré callado lo mejor que pueda.
Como si la suerte estuviera en su contra, su estómago se rebeló contra su boca. Soltó un fuerte gruñido que exigió atención inmediata.
-... Eso es simplemente genial- Naruto murmuró rojo brillante por la vergüenza
Pero su anfitriona habría encontrado su puchero junto con el escenario lindo y se habría reído, pero no pudo. Ella había visto su estómago y sabía que no era motivo de risa.
-Déjame traerte algo de comer- le ofreció
Ella lo llevó a la cocina, que era más grande que su dormitorio, y comenzó a trabajar. Vio como ella comenzaba a sacar ingredientes específicos que lo hacían babear.
-¡Estás haciendo ramen!- Dijo en un susurro fuerte.
Ella se sonrojó mientras lo miraba.
-Sí, me disculpo porque mis habilidades culinarias son limitadas- dijo de manera regia.
-¿Limitadas?- Preguntó incrédulo- ¡el ramen es la mejor comida del mundo!. Habló un poco más alto, en un tono que sin duda no era un grito, pero casi.
-Entonces espero no decepcionarte- comentó la matriarca Hyuga, mientras le entregaba un cuenco- come con confianza. Hay mucho más ramen de donde vino ese.
Ella miró con el corazón apesadumbrado mientras comía la comida con un vigor casi desesperado. Como si la comida lo abandonara si no se lo tragaba todo.
Eso le estrujó aún más el corazón y la hizo enfurecer como nunca.
"Los Uzumaki no abandonan a la familia" pensó con sarcasmo "¡Que se pudra esa jodida hipócrita! Haré algo para remediar el asunto yo misma".
##########
Tiempo presente.
Kushina recordó con el dolor fantasma de esa lesión, la pelea a golpes que ella y Hana tuvieron a causa de ese incidente en particular, desde ese día, dejaron de hablarse, no sin antes advertir su ex amiga que sus acciones le iban a regresar a morder el culo con dureza algún día. Y que ella merecía varios títulos, pero madre no era uno de ellos.
Parece ser que en parte tenía razón. Al menos en la parte en la que se iba a arrepentir. En lo otro, demostrará que estaba muy equivocada.
Y corte.
Creo que le ha pegado mucho el castigo al fic y el hecho de que parecería que la historia no va a ningún lado.
Ojalá me equivoqué.
Y aunque pudiera ser verdad, de que lo acabo, lo acabo.
Nos vemos pronto.
Ya saben, dejenme su review, así no solo me animan a escribir, habrá retro alimentación entre nosotros.
