—¿P-Puedo cambiar el tema? —Bélgica se le echa un poquito encima.

Asiente.

—¿Puedo cambiar el tema a la boda? —pregunta sonriendo de lado.

Aprieta los ojos

—Vaaaale, vale. No.

—Es queeee…

Bélgica se ríe, abrazándole y él se deja, abrazándola de vuelta.

—Quizás podamos discutir mejor el asunto de hacer bebés —sonríe, tomándole el pelo porque qué bebés van a hacer...

Fuck!

Bélgica se muere de risa escondiéndose en su cuello

—No, no, vale... la boda. Dime, ¿qué hay que hacer?

Le da un besito secreto en el cuello y hace que se sonroje.

—Rentar el... castillo o el lugar en el que vamos a hacerla. ¿no? —se separa un poco—. Conseguir el lugar ideal, una vez hablemos con Galia.

—¿Un... castillo?

—Pensé que si era una boda celta podría... solo se me acaba de ocurrir, es una idea, pero si es una boda celta puede ser en tu casa en uno de esos castillos tan bonitos.

—C-Creo que hay algunos que los alquilan para eso, ¿o quieres uno con fantasmas?

—¡¿Fantasmas...? —se ríe.

Yes.

—¿Qué tipo de fantasmas?

—De los que antes eran gente viva.

—¿Los rentan? ¿Como los de la peli de Harry Potter?

—No seas horrible, ¡son personas! Se contratan… Los zombies, por otro lado…

—¿Disfrazadas?

—¡Muertas!

—¿Y les pagas a las personas muertas?

—En general, no con dinero.

—¿Con... qué podrías pagarle a... un supuesto muerto?

—Pues con cosas que quieran los muertos. A veces es... decirle algo a alguien o hacer algo que les quedó pendiente o arreglar su tumba.

Bélgica parpadea

—No creo que... alba, ¡deja de tomarme el pelo!

—¿Porque iba a tomarte el pelo?

—Como siempre lo haces con estas cosas.

—¡Anda ya!

—¡Pues!

—Vale, vale, sin fantasmas.

—Si son amigables no tengo problema...

—Igual no te vas a enterar si están.

—Es un gasto innecesario.

—Oh, ¿ese es un argumento válido?

—Para ti, NO.

—¿Cómo qué no?

—¡Toda la boda es un gasto innecesario!

—Exacto —sonríe.

—Eso no vale.

—¿Por qué no?

—¡Porque no podemos decir que la boda es innecesaria!

—Vas a tener que buscarte un mejor argumento entonces.

—Es... peligroso.

—¿Los fantasmas? Nah. Pesados, sí, pero peligrosos…

—Eso crees tú que los ves y los controlas.

—¿Controlarlos yo? Si no puedo ni controlar mi vida.

—El DRAMA —Bélgica se ríe.

—Pues quéjate cuanto quieras, pero...

—No controlo yo tu vida...

—¿Y quién si no? Por qué crees que he dejado que me saquen de la Comunidad Europea.

—¿Q-Qué estás diciendo? —Bélgica parpadea.

Se ríe porque la cara de susto.

—¡Tonto! —le da un golpecito.

—¡Y además me agrede! —se ríe más

—Porque es serio estoooo.

—Además de la opresión psicológica, también violencia física.

—No te hago... ¿¡que opresión psicológica?! —protesta ella, sonriendo.

—No Me Hace Opresión Psicológica —repite con la mirada vacía como si fuera un robot. Bélgica se ríe.

—Ojalá así de bien respondieras a bajar la tapa de baño después de mear.

—Necesito tener alguna victoria moral para sentir que opongo alguna resistencia pacífica.

—¡Venga ya!

—Pues es que tú no sabes lo que es esto.

—¿Horrible? —besito en los labios.

—¡Mucho!

—Pobrecito. Algo hay que hacer para rescatarte —besito.

—Me temo que volvería a caer indefectiblemente en esto, aunque lo hubiera —le sonríe

—Ah ¿sí? ¿Soy como una droga?

—Más bien yo soy idiota.

—Que vas a ser idiota.

—Ah, ¿no?

—Eres completamente listo.

—¿Por?

—Mira qué novia tienes...

—Alaaaaaa

Bélgica se ríe

—¿Entonces cuál es el plan? Hablar con Galia... ir a buscar dónde casarnos...

—Aja...

—TU tienes que encargarte de la música, yo me encargaré de las flores... hay que ir a comprar o rentar la ropa tuya y de tus padrinos, yo me encargo obviamente del mi vestido y las damas de honor.

—¿Mis... padrinos?

—Si, tus hermanos, me imagino.

—Todos ellos tienen sus propios kilt.

Bélgica sonríe con eso.

—Podríamos adquirir uno para mis hermanos o... ¿estoy exagerando? No sé si quieran ponerse uno.

—Pues no van a poder venir si no si lo ponen.

—¿Toda la boda tiene que venir con Kilt? Ohhhh!

—¿No?

—¡Esa es una GRAN idea, Alba!

—¿Eh? —parpadea porque no se esperaba esa reacción. Bélgica sonríe.

—¿Tú sabes el lío que se va a hacer con... la mitad de los invitados? Imagina a... —vacila un segundo —. España con kilt —la verdad iba a decir Alemania pero ya saaaaaabe la carrilla que le va a echaaaaar

—Seguro se queja porque no le hace buen culo o algo.

—Pero se va a armar un líoooo. Me encanta la idea. Tiene que ser en tu casa y todos con Kilt —es que está imaginando a todos los chicos medio incómodos, medio nerviosos.

—Habrá que ponerlo en las invitaciones cuando sepas la lista de invitados —Sonríe y asiente sin saber muy bien porqué él lío, pero vale. Como a él no le pone nervioso...

—Quizás deberíamos pedir que las chicas vayan con algo afín. Si, si... ¡No hay que olvidarlo! De hecho, espera —se estira por si teléfono donde ya tiene una lista. Además, le hace ilusión que dé ideas... que además son ideas buenas.

—¿Regalos?

—Si queremos algo específico podemos poner una lista de cosas que nos gustaría que nos regalen.

—¿En... serio? —No le dejes hacer eso. Bélgica entrecierra los ojos.

—¿Que querrías?

—Y la gente tiene que... ceñirse a la lista, claro. Para eso se hace.

—Albaaaa... dime cómo que cosas estás pensando...

—Pues no sé, ¿crees que nos regalarían... cocaína? O... ¿algo que no existe y que se volvieran locos buscando? O cosas absurdas super específicas como... una gaita que suene peor aun que las que odias.

—Yo que tenía la esperanza de que pusieras un coche —Bélgica se ríe

—Mmmm...si quieres...

—No un... no vamos a pedir un consolador de dragón o algo así.

—¿Por qué no? No creo que nadie nos compre un coche... ¿o sí? Tal vez deberíamos pedir una casa con piscina —recuerda la que tenían en la otra realidad.

—Lux podría comprarnos un coche. Yo podría comprarnos la casa con piscina.

W-What?

—Bueno, si quieres una. ¡Tú lo has dicho!

—¿Pero cómo vas a comprar tú una casa?

—Pues... con dinero. Si te hace ilusión tener alberca...

—Pero es una cosa... para los dos o sea... de ambos.

—Sí... ¿querrías pagar la mitad?

—Creo que... sí, o sea... ¿cómo a la iba a sentir mía si no?

—Podría ser nuestro regalo de bodas para nosotros mismos —Bélgica le sonríe.

—¿No es... la boda, eso?

—Bueno, también, pero ya que estamos...

Escocia la mira de reojo

—Solo si quieres, ¡no quiero meternos en más líos y estresarte más! —sigue ella.

—Creo que... podemos primero acabar con uno antes de meternos a otro.

—Vaaaale, vale. ¡No me meteré en más líos!

Thank you

—Déjenos la idea de la mesa de regalos en puntos suspensivos. La música tú, las flores las hago yo...

—Vale, hablaré con Eire.

—La noche de bodas y la Luna de miel —Bélgica sonríe—. Eso... seguramente alguien nos lo va a regalar pero necesitamos un plan B

—¿Por? —Se sonroja.

—Pues si nadie nos lo regala... no quiero vacacionar quince días en casa comiendo pizza.

—Ah, creía que tu plan B era ir con alguien más por si algún idiota se le ocurría ir a regalarte un viaje conmigo o algo así.

—Ya, claro, una semana con un completo desconocido —Bélgica se muere de risa.

—A lo mejor no, a lo mejor con... yo qué sé. Uno de mis hermanos. O Germany.

—Claro... una luna de miel con un mal sustituto tuyo o trabajando. Mis felices opciones.

—Bueno, o alguien más que tú quieras, qué sé yo.

—Con quien quiero ir es contigo —le mira con ojitos de corazón. Él se sonroja y carraspea—. Venga... ¿qué más?

—Ehm... no sé, ¿la comida?

—Uuuy... uy! ¡Eso es un lío en tu casa!

—Supongo que pueden traérnosla.

—O venir a hacerla aquí.

—Ah, sí, también.

—Vale, yo me encargo de eso. Tú de la bebida.

Asiente

—Aunque tiene que ser variada

—¿A qué te refieres? Hay muchas variedades de Whiskey.

—Varios tipos de cerveza y whiskey, no tengo problema pero si debe haber champan y ginebra y vino o me matan, y... cosas.

—Cosas...

—Vodka y... Ginebra... y Ron.

Levanta una ceja

—O... ¿no? Bueno todos beben mucho siempre en las bodas.

—Vale, vale.

—El pastel... entra dentro de comida, lo hago yo. La lista de invitados... esa vas a tener que ayudarme.

—¿Qué ayuda necesitas

—Quien sí, quien no, quien tal vez. A quienes quieres tú.

—Yo no quiero a nadie así que...

—¡Que mentira!

—No es mentira.

—¿Te basta con tus hermanos y tu madre?

—De hecho, a ellos no los quiero.

Ojos en blanco.

—¿Qué hay de France?

—Tampoco.

—Tu madre has dicho que si... ¿Galia?

—Que va, ninguna de las dos.

—¿Yo?

—Bueno, vale, tú puedes venir.

—Hombre, ¡que honor!

—¿A qué te desinvito? —se ríe.

—A que me desvistes.

—¿Ahora? ¿O luego?

—Pues... Espero que ahora en algún punto.

—Oh, mira por dónde, quien tiene suficiente del tema ahora.

—¡Pues me estás desinvitando de la boda!

—Pues porque dices cosas raras.

—Qué va, ¡no digo nada raro!

—Como que yo quiero invitar a mi familia a algún sitio.

—¿Sabes que yo me voy a convertir en tu familia? —Bélgica hace los ojos en blanco.

—Ehm... sí, por eso.

—¡No, no me vas a empezar a hacer esas cosas feas qué haces a los otros!

—son las cosas que yo hago a mis familiares.

—Yo seré la excepción que confirma la regla.

—¿Por?

—Porque a mí si me vas a querer y va a querer pasar tiempo juntos.

—Es... decreto ley, por lo visto.

—¿V-Vas a dejar de quererme? —ella le mira un poquito a los ojos medio.

—Es lo que hago con mi familia —se encoge de hombros.

—No lo hagas conmigoooo.

—Pues es lo que hay.

—Noooo, no quiero que dejes de querermeee —se le echa encima para abrazarle.

Escocia se ríe sin poder evitarlo abrazándola de vuelta.

—Venga no seas malooo —se le acurruca un poco

—No lo soy.

—Un poquitooo.

—¿Quieres que sea... un poquito malo contigo y lo verás? ¿Eh? —frunce un poco el ceño sin dejar de sonreír. Bélgica se humedece los labios

—A ver...

—Así que sí... ya veo —sonríe más.

—Pues quiero poder comparar —se sonroja un poco.

—Pues prepárate... —cierra los ojos y le cambia la cara para... meterse en personaje. Abre los ojos, tan serio y la tumba en el sofá, sentándose sobre sus caderas. La toma de las muñecas y se las levanta por encima de la cabeza, apoyándose en ellas para tener una mano libre—. Como ya sabes... mis chicos y yo hemos venido de pillaje a arrasar con este asentamiento.

—A-A... A... —es que se muere del sonrojo absolutamente.

—A arrasar. Con todo. No creas que he elegido esta choza aleatoriamente. Hace días que os observamos para saber cuál es el mejor momento para atacar, viendo cuando los hombres están de caza... y te he visto... bañarte en el río —con la mano libre empieza a desvestirla.

Es que Dios mío, va a combustionar y no lleva ni treinta segundos jugando a esto.

—Te vi, escondido entre unos arbustos, con el pelo suelto al sol y el agua... pasando por todos los recobecos de tu cuerpo —una vez le ha abierto la blusa le acaricia un poco con los dedos como si fuera el agua, mientras lo describe.

Traga saliva. Es que tiene un ESCALOFRÍO

—Y tus pechos... —los mira y se emboba un poco como cada vez. Hace una pausa y levantándola con fuerza para poder desabrocharle el sostén, quitándoselo.

Bélgica, que ha perdido la capacidad de habla en su totalidad, abre la boca tontamente. Él la mira a los ojos y le sonríe con complicidad un segundo.

—Me atormentan. Cada noche se me aparecen como una obsesión hasta que me despierto empapado en sudor y... firme como una roca —sigue explicándole, sonrojándose un poco, pero acariciándoselos con cuidado, como sabe que le gusta.

Bélgica sonríe un poquito con esa cara, e igualmente traga saliva cuando sigue hablando él. Otros varios múltiples escalofríos, se le pone la piel de gallina donde pasa la mano.

—Oh... dios mío.

—De nada te va a servir rezar o encomendarte a los dioses que quieras. Llevo semanas anhelando esto, tocándome yo solo, únicamente con tu imagen en mi mente y no pienso desperdiciar esta oportunidad ahora —asegura yendo a besárselos y a bajarle los pantalones.

Es que como te asomes ahí entre las piernas vas a ver que está... perfectamente lista para cualquier tipo de acción. De hecho, lo hace y sonríe al notar que esto funciona. Es que... le apagaste el switch del cerebro casi del todo.

—Y ni creas que planeo ser delicado o cuidadoso contigo, no es como que tenga mucho tiempo, así que lista o no... —empieza a abrirse sus pantalones—. Más vale que te relajes y trates de disfrutar si no quieres que te duela, porque no es como que tengas más opción.

—N-No... no me... n-no... —es que hasta suelta un gemidito.

—Desde luego tampoco va a servir de nada que te niegues... —se ríe burlándose un poco y le levanta las piernas, yendo a meter A en B sin mucho miramiento.

ES que casi se corre solo con esto. No sé cómo es que no habías descubierto esto antes, Escocia, pero debes conocerla lo bastante bien como para saber que está DIS FRU TAN DO.

La verdad, va a ser hasta un poco bestia con embestidas y eso agarrándola con fuerza de las piernas para intentar que aguante un poco más... pero sin parar de moverse.

Es que nada de eso hace que ella lo disfrute menos, la verdad. Pero ni siquiera un poco menos, ella... hace lo que puede... ni siquiera está intentando ponerse en el personaje de la chica del rio... de lo ida que tiene la cabeza.

De hecho... no es necesario que te lo pongas. La verdad, que se corra ayuda mucho a Escocia, que... esta aun un poco incomodo con esto, pero... es que mira que buen efecto surge.

Será por historias de estas... si no te lo tiraras cada vez nada más verlo, lo haría más a menudo.

O sea... es que créeme que no parece en lo absoluto que la estés violando, solo... está siendo más rudito que de costumbre y menos amoroso, pero mira qué bien sale.

Bueno, sí, rudito es... eso desde luego. Y es que además a él... entre estar en personaje y que ella esté disfrutando tanto... no creo que necesite mucho más para acabar también.

Es que va a acabar toda sudada, despeinada, agotada y... bien cogida. Venga no que no lo acabe con frecuencia, solo esta vez la rudeza y eso lo hace un poco más... guarro.

Ya, ya... como si no supiera que le gusta así...

I love you

Gracias, eso le tranquiliza. La abraza una vez terminan todo que haya que terminar. Ella le abraza completamente, casi sin aire... respirando como si hubiera corrido una maratón... O varias.

—¿Estás bien?

—A-Absolutamente... ¿t-tu? Cielos, eso fue... buff!

—No quería... sé que no lo hice, sé que no lo hice.

—No, darling... no lo hiciste en lo absoluto.

Asiente, ella le da un besito en el cuello y él suspira.

—Esto... me pone muchísimo.

—Lo sé. Siento no estar... más cómodo con esto.

—Pero de vez en cuando... No está mal. ¿Tú estás bien? —le sonríe

Asiente. Bélgica sonríe, aún con la respiración agitada

—Tengo que acostumbrarme a esto pero que me dijeras que sí querías que fuera malo, ayudó.

—Cielos es que... —Bélgica traga saliva notando que... esto podría ser incómodo para él por... el asunto—. Ohh... si. Si, sí. Claro que quería, es que cuando te pones así... todo rudo y sexy y duro... ¡y las cosas que dices!

—Si es por la historia...

—Eres tú en esa... fantasía. ¿A-A ti te pone nervioso?

—Un poco.

Bélgica aprieta los ojos.

—Pero... no pasa nada, si es... sí solo es un juego.

—Lo siento... es un poco absurdo que me guste tanto, pero...

—No, no... no pasa nada. Si sé que es un juego está bien. Si será por historias...

—Si un día no lo es por algo te lo dejaré muy claro... buff, pero como te has sacado el asunto y me has... ya, ya sé que tienes miles de historias posibles, ¡y nunca repites!

—Pero si quieres, la repito.

—Nah, si siempre me... ufff —Bélgica se ríe contra él, que la acaricia un poco—. Gracias. Eres el hombre más sexy qué hay.

Se sonroja con eso.

—¿Tu solo terminaste una vez?

—Nah, no te preocupes por mí, hoy era para ti.

—Me siento mimada últimamente —Bélgica sonríe con esa respuesta, apretándole un poco contra si.

—Ya veo que por lo visto ni siendo malo consigo fastidiarte... Tal vez sí seas la excepción.

—Claro que soy la excepción —se ríe.

—La parte buena es que, si alguna vez quiero un rapidito, ya sé cómo hacerlo.

Bélgica se ríe apretando los ojos, escocia se acerca a darle un beso y ella le responde el beso con muchas ganas, porque lo otro está bien pero el cariñito y la parte suave... le hacían falta.