Buenas, espero que se encuentren bien, hoy les traigo ya el séptimo capítulo, espero que lo disfruten.
Renuncia de derechos: Todo lo referido al universo de Starcraft le pertenece a Blizzard Entertainment, sin embargo toda la historia me pertenece.
En el capítulo anterior: -
Mientras decía esto, Samuel le dijo a los demás que el iría primero, estos le desearon suerte y que tenía que ganar si o si, dándoles una sonrisa.
Aidan miro al techo a los 20 caballeros reales, y para su asombro estaban los 4 templarios oscuros cerca de ellos, con su invisibilidad activada, los logro reconocer por el vínculo que tenían.
El príncipe vio al grupo de plebeyos y reconoció a Aidan.
Daniel: Así que el que se enfrentó a mi hermanita va a tomar el examen eh... -Dando una sonrisa-
Comienzo del capítulo 7: -
Aidan miro al techo a los 20 caballeros reales, y para su asombro estaban los 4 templarios oscuros cerca de ellos, con su invisibilidad activada, los logro reconocer por el vínculo que tenían.
Daniel vio al grupo de plebeyos y reconoció a Aidan.
Daniel: Así que el que se enfrentó a mi hermanita va a tomar el examen eh... -dando una sonrisa-
Mientras tanto, Samuel entro en la barrera y del otro lado se encontraba un chico que parecía venir de una casa noble, y llevaba una armadura ligera.
Saizen aterrizo al medio de los jóvenes y los miro a ambos
Saizen: ¡Que comience la primera pelea, den lo máximo de si! -Dio un gran salto, saliendo de la barrera y cayó al lado del rey-
Samuel tomo una posición de combate y libero 3 esferas alrededor de su espalda y se ató la cadena en su muñequera en la mano derecha mientras que sostenía el gancho en la misma.
Samuel (En voz baja): Acabare con esto rápido - Lanzando el gancho con la cadena hacia su oponente-
Pero este corrió hacia adelante para rodar y esquivando por poco el gancho, rápidamente apunto con sus manos a Samuel y salieron disparados 6 agujas de color hueso.
Samuel al ver esto, sabía que no le daría tiempo para esquivar, así que uso las 3 esferas para repelerlas, al ser magia estas fueron absorbidas.
Samuel: Agujas eh, parecen simples pero no creo que eso sea todo, ¿o me equivoco? -Mirando seriamente-
Joven noble: Veo que te diste cuenta, sabía que los plebeyos tenían potencial. -Dando una sonrisa para nada normal-
Samuel: Me sorprende que digas eso en tu posición -No creyendo en lo que decía su oponente- por lo general, ustedes los nobles nos desprecian.
Joven noble: Vamos, no seas gruñón, tengamos un buen combate. -Sonriendo igual que antes-
El noble empezó a disparar las agujas en dirección de los pies de Samuel, pero este los esquivo corriendo de manera circular y lanzando el gancho para enredar al noble.
Pero dio un gran salto hacia atrás para continuar disparando sus agujas.
Esto siguió así por unos 30 segundos, hasta que Samuel tuvo que usar 2 esferas para atacar, ya que no podía atacar con el gancho debido a la agresión continua.
Por suerte logro sorprender al noble y se llevó un fuerte golpe en el estómago y la nariz por las 2 esferas, la última estaba atrás de Samuel escondida y brillaba de un color morado oscuro.
El noble retrocedió unos cuanto pasos, de su nariz salía un poco de sangre, al sentir su sangre, sonrió de manera poco natural.
Joven noble: Guau...buena estrategia, me hiciste sangrar, déjame ahora a mi hacerte un poco de daño. -Sonriendo-
Samuel: ¡¿Que?! -Sorprendido-
Joven noble: Vamos, deja que una aguja aunque sea te rose. -Riéndose alegremente-
Samuel: Sé que hay algo en estas agujas y no lo voy a comprobar. -Mientras lanzaba su cadena a su rival-
Por estar distraído, las cadenas se enredaron en sus piernas y Samuel empezó a tirar con fuerza para golpearlo contra el campo de fuerza
Logro golpearlo 3 veces, iba a seguir un poco más, pero de golpe, sintió un ardor en la pierna, tenía clavado 5 agujas y soltó la cadena con el noble.
Noble: Me olvide contarte que también puedo soltar espinas a través de los pies. -La sonrisa empezó a ser menos evidente pero más siniestra-
Samuel esta vez se puso serio y saco el resto de sus esferas pero escondiendo la morada, envió a todas a atacar para terminar la pelea lo más antes posible, ya que su pierna sangraba bastante.
El noble le costaba bastante esquivar las esferas, aunque gracias a que no es normal, su condición física es superior al promedio.
Samuel sabía que era cuestión de tiempo para que su rival se cansara, pero sintió una sensación rara en su pierna, al verlo vio que su pierna lentamente se ponía de color morado,
Se arrodillo por el dolor y no podía mover su pierna.
Mientras el noble esquivaba miraba sonriendo como empezaba a tener posibilidades de vencer.
Noble: Mis agujas tienen un veneno paralizante, no te podrás mover por una hora -Respirando agitadamente- en unos minutos llegara a todo tu cuerpo.
Samuel lentamente empezaba a tambalearse debido al veneno.
Samuel: Maldición...no tengo tiempo. -dirigió casi todas las esferas en un punto, esperando que el noble cayera en la trampa-
Y paso lo justo que estaba planeado por Samuel, Su rival estaba concentrado en las esferas y logro escabullir la esfera morada detrás de él.
Samuel: ¡ Acabare con esto ahora! -mandando las esferas con las que estaba distrayendo a atacar-
El noble se puso en posición para esquivar pero las esferas cayeron de golpe al suelo, desapareciendo, cuando vio esto, sonrió y miro a Samuel, el cual estaba ya por la mitad cubierto por el veneno y arrodillado completamente.
Joven noble: Oh, veo que ya no puedes usar tu don -Acercándose a Samuel a paso lento- si hubieras atacado con todo desde el principio, me hubieras ganado.
Al acercarse, agarro la cabeza de Samuel y lo levanto.
Joven noble: La victoria es mía -Sonriendo con superioridad-
Samuel: Jajaja, has caído en mi trampa. -Sonriendo levemente-
Joven noble: ¿Que? -Sorprendido-
Antes de decir algo más, sintió una esfera chocando en la espalda, provocando que diera un grito, escupiendo un poco de sangre y chocando contra el campo de fuerza.
Cuando el noble se levantó, vio con exasperación como su cuerpo desde el torso se empezó a cubrir de color morado.
Joven noble: ¡¿Que me hiciste?! -Borrando totalmente la sonrisa que tenía antes-
Samuel: Mis esferas absorben la energía de los dones y la devuelven con contacto físico.
-Liberando las esferas que recién hizo desaparecer-
Y fingí ya no poder pelear más, para que bajaras la guardia al máximo.
El joven noble solo miro con horror como su cuerpo empezaba a quedarse inmóvil mientras que se acercaban las 6 esferas hacia él.
Samuel: Repetiré lo mismo que dijiste, la victoria es mía. -Sonriendo levemente-
Samuel controlando las esferas, le dio una paliza al noble, sin oportunidad de moverse gracias al veneno, golpeaba las piernas, torso, brazos y la cabeza del noble.
Lo que provoco que este estuviera magullado por los golpes.
Después de 2 minutos, Samuel solo le faltaba la cabeza para que el veneno lo cubriera por completo, Pero por suerte logro noquear al noble antes de que ocurriera eso.
Al ver eso, Saizen entro a la barrera, acompañado de 4 personas más, estaba disgustado de que haya ganado un plebeyo, pero eran órdenes de los superiores.
Saizen: Muy bien...joven -Diciéndolo con un poco de dificultad- has ganado la pelea, ellos te curaran para que estés en óptimas condiciones para la final.
Las cuatro personas se separaron y fueron 2 para Samuel, los otros 2 fueron hacia el noble inconsciente.
Samuel miro a sus amigos y sonrió levemente por su victoria, estos lo aplaudían por su demostración, mientras este se lo llevaron para su recuperación.
Saizen: Que entren los nuevos competidores, ¡Ahora! -Levantando la voz-
Al decir eso Saizen volvió al lado del rey, avisándole que solo quedaban 44 participantes.
Paso un tiempo en el cual transcurrieron 18 combates, en el campo de los enfrentamientos se notaba secuelas de las peleas que tuvieron acabo.
Aidan y el resto estaban un poco impresionados por la exhibición de poderes.
Desde dones de aumento de capacidades, hasta la manipulación de elementos en ciertas partes del cuerpo, manejos increíbles de armas, entre otras, el combate actual acababa de finalizar.
Aidan: Muy bien, me toca a mí. -Con cierta emoción-
Aidan iba a entrar pero Zoe se le adelanto, entrando primero.
Aidan: ¡Oye era mi turno! -Molesto-
Zoe: No me interesa. -Dijo con un poco de pereza-
Al entrar Zoe en la barrera, vio que había un chico de en la otra punta, este tenía una vestimenta pobre.
Ella dedujo vagamente que él era igual que ellos, Lo que más se le resaltaba era que tenía tapado un ojo.
El chico hizo una reverencia a Zoe y se le notaba cierto tono de nerviosismo.
¿?: Es un gusto ver a...alguien... Igual que yo -Con nerviosismo- es grandioso que otros quieran luchar para ser caballeros.
Zoe miro esto con cierto desinterés pero admitió en su mente, que el chico era por lo que dijo hace unos segundos era de un buen corazón.
Zoe: Entonces intentare no lastimarte...mucho.
El combate había empezado, Zoe rápidamente hizo una espada de hielo y se puso en posición de combate.
El joven se tomó enserio las palabras de la chica y antes de ponerte en posición, inflo las mejillas, tomando todo el aire que podía.
Todos lo miraron con intriga, porque hacia eso, pero antes de lo previsto el joven expulso todo el aire que en el interior se convirtió en humo.
Todos se sorprendieron como el humo empezó a expandirse por toda la barrera, era un humo negro espeso, pero en los pensamientos de Zoe, ella no entendía por qué podía respirar sin dificultad.
Paso un minuto y el humo rodeo toda la barrera, en el interior no se veía absolutamente nada, solo podías ver 2 metros frente tuyo.
Rápidamente en la otra mano hizo un pequeño escudo de hielo mientras miraba en todas direcciones, mientras avanzaba lentamente.
Después de 10 segundos, Zoe sintió un impacto en su espalda que la arrojo un par de metros hacia adelante, ella dio un leve quejido por la sorpresa.
Ella se paró rápidamente y se dio vuelta, justo para ver como el joven desparecía nuevamente entre el humo.
Ahora tenía una idea de que atacaría por la espalda, así que estaba atenta, al pasar unos segundos, ella vio una sombra a su derecha y rápidamente lanzo un corte pero no hizo contacto a nada.
Esta vez, Zoe sintió un golpe en las costillas que nuevamente la mando hacia la dirección contraria unos cuantos pasos atrás, esto provoco que ella soltara esta vez sus armas.
Ella al estar indefensa creo 2 lanzas de hielo y volvió a su posición inicial.
Zoe (En su mente): Si esto sigue así me va a vencer...quiero acabar con esto y ponerme a leer. -Lo decía algo aburrida y levemente preocupada-
Antes de seguir pensando escucho un ruido de hielo rompiéndose, ella por instinto con las lanzas dio un golpe sin usar la punta.
Sintió como una de sus lanzas sintió el contacto con un cuerpo, al hacerlo, sintió un pequeño quejido en la neblina.
Zoe (En su mente): Así que... esto servirá. -Sin ganas-
Ella empezó a correr con un poco de velocidad y mientras lo hacía empezó a soltar escudos de hielo en el suelo.
Aunque se al hacerlo se cansaría mucho más rápido, al final se detuvo y creo un gran palo de hielo.
Zoe espero pacientemente y con su gran palo dio un golpe en el humo, al hacerlo, sintió como alguien había pisado uno de sus escudos.
Al escucharlo, ella aprovecho y se dirigió al ruido, golpeo fuertemente en el humo y sintió como su palo se hundía en algo.
Se escuchó un fuerte quejido de dolor del joven que escupe humo y como choco con la barrera.
Ella entendió que él podía evitar los escudos, pero si ella lo obligaba a esquivar hacia que el tropezara y pisara uno de sus escudos.
Pasaron unos minutos y la pelea seguía, Zoe esparcía escudos de hielos por toda la superficie del campo y de vez en cuando golpeaba aleatoriamente para ver si lograba interceptar a su oponente.
De vez en cuando lograba interceptarlo y dar unos buenos golpes, pero el joven escupe humos también lograba golpearla.
Después de unos segundos, Zoe escucho otra vez el ruido y esta vez lanzo el palo, aunque no sabía si había acertado.
Tenía heridas y su ropa estaba sucia, estaba cansada y respiraba de manera rápida.
Ella decidió crear una larga cadena de hielo y empezó a girarla con gran velocidad, tenía que acabar rápido con esto o no duraría mucho más.
Zoe lo lanzo como un látigo y atravesó la niebla rápidamente, aunque no atrapo nada, lo intento una y otra vez, pero estaba fallando.
En un último esfuerzo creo una lanza con su mano y logro escuchar como un escudo se rompía, ella disparo con toda su fuerza la lanza apuntando hacia los pies.
Zoe (En su mente): Si esto funciona y el cae en la trampa, entonces con mi cadena podre atraparlo en el aire. -Con apenas un poco de seriedad-
Al oír su lanza tocar el piso, lanzo la cadena en un último intento de lograr agarrar a su oponente, y por suerte, sintió como su cadena se envolvía.
Con toda la fuerza que tenía, trajo hacia ella la cadena hasta que por fin logro ver a su oponente, que al igual que ella se le veía herido.
Cuando estaban a solo centímetros ella uso su rodilla para clavárselo en la boca del estómago.
El chico escupió un poco de sangre mezclado con saliva mientras sus blancos se ponían blancos.
Fuera de la barrera.
Los minutos pasaban y no se lograba ver nada ni tampoco se escuchaba un sonido.
En el techo de la arena, un caballero de aspecto delgado y armadura ligera, con un leve tono de color bronce empezó a actuar.
Este caballero activo su don y sus ojos se volvieron verdes con un patrón de cruz en las pupilas, al hacerlo dio un gran salto hasta un costado de la barrera, toco el suelo con una de sus manos y hablo hacia el rey.
Caballero Real: Mi rey, uno de los participantes esta inconsciente -Lo decía mientras miraba al rey-
Al oír eso, el caballero Real que creo la barrera la hizo desaparecer, haciendo que todo el humo se dispersara, pasaron 20 segundos hasta que por fin se pudo ver a los dos combatientes.
Se veía en el suelo inconsciente al joven que escupía al humo y la chica estaba sentada con las piernas cruzadas.
Zoe: Si que tardaron mucho, Los estaba esperando... -Lo decía aburrida mientras jugaba con un pequeño fragmento de hielo-
Rey: Muy bien, lástima que no pudimos ver este combate -Enojando- pasemos inmediatamente a la siguiente pelea.
Esta vez, entro en la barrera Aidan y el último chico noble, ya que los demás ganaron sus combates, solo el que había peleado contra Samuel fue el único que perdió.
Zoe y el joven fueron llevados para que los curaran, ella tenían una pequeña sonrisa mientras levantaba la mano en señal de victoria a sus compañeros que ya habían participado.
Alexander había ganado la pelea con facilidad ya que fue subestimado por ser pequeño, el enterró a su oponente en el suelo con su don.
Haciendo lo líquido y después sólido, todos quedaron sorprendidos de su don y que haya ganado la pelea con tal rapidez.
James le toco un oponente que su don era de convertir su piel en metal, a James se le hizo un poco complicado ya que a pesar de que le lanzaba grandes piedras, su rival no caía.
Fue obligado de tomar una de las pociones porque ya empezó a sentir los efectos del sobre uso de su dos, al final tuvo que usar un montón de piedras para inmovilizarlo, obteniendo la victoria.
A Reí le toco un oponente que tenía una ropa muy grande, todos pensaban que eso lo pondría en gran desventaja.
Pero su don era crecimiento de cuerpo y alcanzo los 4 M de altura con gran musculatura, ella uso su arma y disparo los dardos, pero el cuerpo de su oponente era tan duro que no lograba atravesarlo.
El combate quedo en empate ya que los clones de Reí pudieron debilitar enormemente al mini gigante y con eso pudo atravesar su piel con los dardos dejándolo casi inconsciente.
Pero antes de que ella pudiera ganar fue impactada con uno de los puños del rival.
En todo el combate ella mantuvo la distancia mientras sus clones lo atacaban porque solo bastaba un solo golpe para dejarla noqueada.
Saizen: ¡Que empiece el combate N° 20 y solo nos quedan 3 más!
Aidan: Hola, mi nombre es... -Animado-
Iba a decir su nombre pero fue interrumpido.
¿?: No me interesa saber tu nombre, después de todo vas a terminar perdiendo. -Lo decía de forma aburrida-
Aidan: Pero...-Enojado-
Nuevamente fue interrumpido.
¿?: Te diré mi nombre para que recuerdes quien fue que te puso en tu lugar -Tranquilo- mi nombre es Renzel un noble de muy alta clase.
Aidan (En su mente): ¡Te cerrare la boca! -Enojado-
Aidan quiso sorprender a Renzel atacando con una patada a gran velocidad, pero fue bloqueado por el antebrazo del anterior.
Renzel: Tienes una buena velocidad y fuerza, pero...-El otro puño de Renzel se cubrió de piedras- en cuestión de fuerza, yo soy superior.
Con el puño cubierto de piedras golpeo a Aidan en el estómago, mandándolo 10 metros hacia atrás rodando, este escupió un poco de saliva.
Con un poco de dificultad se volvió a parar y se puso en guardia.
Aidan: Un don de protección corporal de piedra...será difícil. -Sobándose el estómago-
Aidan nuevamente fue atacar pero esta vez con sus puños, Renzel manifestó piedra en los dos brazos.
Estando a un solo metro de distancia, Aidan se deslizo por debajo de Renzel esquivando uno de sus puños de piedra, Y lanzando una patada impactando en el cuello.
Renzel fue enviado en contra de la barrera levantando un poco de polvo.
Cuando se fue el polvo se lo veía bastante relajado y la zona donde impacto la patada de Aidan estaba cubierto de piedra.
Renzel: Vaya...si no me hubiera cubierto con mi don ese golpe me hubiera noqueado, como recompensa por buena estrategia me pondré un poco más serio.
Esta vez, Renzel se cubrió con piedra ambas piernas y empezó a correr con una gran velocidad, para saltar 6 metros para dar un golpe de talón con su pie.
Aidan al ver eso, logro saltar para esquivar el ataque, pero vio con asombro como rompió el piso y varios metros alrededor con un solo golpe.
Aidan (En su mente): A pesar de que tengo un cuerpo más fuerte que los caballeros reales, sus dones los potencian mucho, será realmente difícil ganarle. -Cayendo fuera del rango de destrucción-
Tomando un impulso con sus pies, de nuevo fue atacar con una patada, Renzel pensaba que iba a hacer otra estrategia parecida cuando le dio el primer golpe poniendo sus brazos en la cabeza.
Pero no espero que en realidad Aidan cambiara la dirección de la patada, de la cabeza a los pies, haciendo una barrida dejando al noble en el aire.
Y con el otro pie hizo una patada descendiente impactando en el estómago.
Nuevamente el piso se rompió hundiéndose Renzel en el suelo y este soltó un quejido de dolor, mientras Aidan se retiró saltando hacia atrás.
Aidan sabía que no había ganado, su oponente era resistente como él y no tenía que confiarse.
Renzel: Oye... ríndete y no te haré daño ¿vale?
Se veía como Renzel solo tenía un poco rota la ropa y un poco de sangre en la mejilla.
Aidan: Lo siento, pero vine aquí para ganar. -mientras estiraba los brazos-
Renzel: Entonces te recompensare por tu valentía...mostrando todo mi poder -Empezando a transformarse en un gigante hecho de piedra, todo esto lo decía relajado-
El gigante de piedra se veía imponente, mientras Aidan empezó a temblar levemente con la guardia armada.
Aidan: Maldición, esto será muy complicado, no sé si podre ganar. -Mirando seriamente a su oponente-
Renzel: ¡¿Qué pasa?! No me digas que te asustaste, te ofrecí la oportunidad de rendirte pero lo ignoraste, ahora te haré pagar por hacerme desperdiciar mi tiempo.
El gigante de piedra fue corriendo hacia Aidan y con ambas manos dio un golpe de mazo.
Aidan salto esquivándolo, pero recibió la onda expansiva del golpe, cayendo en la otra punta de la arena.
Pero el ataque no ceso ahí, el gigante salió otra vez y con un salto para aplastar a Aidan con su pierna pero este último no logro esquivarlo.
Aidan: Ahh... -Tensando el cuerpo-
Aidan estaba aguantando el peso del gigante con sus dos manos con mucho esfuerzo, mientras Renzel se reía de manera burlona.
Renzel: ¡Reconozco que tienes mucha fuerza, pudiste soportar el peso de un gigante de piedra, déjame mostrarte aún más! -Sonriendo levemente-
El gigante de piedra levanto nuevamente la pierna para volver a aplastar a Aidan con aun más fuerza.
Pero por suerte logro esquivarlo moviéndose a la derecha y con sus piernas dio un salto hacia arriba para que con su mano derecha diera un gancho en la cabeza del gigante.
Al impactar su mano en la cabeza de piedra logro sacársela pero esto provoco que su mano quedara roja y con muchos cortes, pero retrocedió de una manera rápida.
Aidan: Ay...duele... -Agarrándose el brazo- solo podre dar unos cuantos golpes antes de quedar herido.
Aidan vio con asombro como el gigante cayo en el suelo secamente.
Aidan: ¿Acaso gane? -Sorprendido-
Pero para su mala suerte el gigante volvió a levantarse con su cabeza reconstruida.
Sin pensarlo nuevamente se arrojó para que con una patada lograra sacar una pierna del gigante y con la otra pierna girando por la espalda dio una patada con el talón en el centro atravesándolo.
Cuando Aidan saco la pierna vio que su patada casi le había dado a Renzel que estaba ubicado en el corazón del gigante de piedra, nuevamente retrocedió para pensar en un plan.
El noble reconstruyo al gigante y miro a Aidan con una sonrisa para nada tranquila.
Renzel: Vaya...me sorprendiste, casi consigues golpearme, admito que te subestime...pero no volveré a hacerlo. -Serio-
En todo el cuerpo del gigante de piedra empezaron a salir agujas de piedra de más o menos el tamaño de un brazo.
(En el balcón donde estaban el rey, la reina y sus hijos)
Daniel: Padre, está intentando asesinarlo, debemos para la pelea. -Seriamente-
Zaid VII: No importa, es solo un plebeyo, es reemplazable. -Sin expresión-
Daniel (En su mente): Tsk...No puedo ir en contra de mi padre, ojala puedas ganar chico. -Leve preocupación.
(Afuera de la barrera)
Los compañeros de Aidan estaban preocupados porque ese noble tenía intenciones de asesinar a su compañero.
A pesar de que desconfiaban de él, perder un compañero seguía siendo doloroso, como la vez anterior.
Samuel: ¡Maldición, el desgraciado del rey va a dejar que el combate siga! -Levemente frustrado-
Zoe: Va a hacer lo mismo que las otras veces... -Seria-
Todos los compañeros se acordaron de golpe cierto suceso y se dieron vuelta para ver a Reí, que tenía una cara muy enojada y apretaba muy fuerte sus puños.
(En la arena)
Renzel: ¡Me asegurare de que nunca vuelvas a caminar!
La cara tranquila de Renzel se había ido totalmente y estaba totalmente enfadado porque un plebeyo lo había golpeado.
Aidan: ¡Maldición...! -Preocupado-
El gigante con pinchos fue corrido y cada paso que daba destruía el camino, se dirigió a Aidan tirando un golpe con su puño.
Aidan esquivo el golpe pasando a un lado de él, pero se llevó unos grandes cortes debidos a los pinchos en la parte izquierda de abdomen, retirándose a 10 metros del gigante.
Aidan: Esto...no es bueno...arde mucho. -Cerrando un ojo y tocándose la herida, viendo que salía sangre-
Renzel: ¡Tu castigo recién comienza! -Furioso-
(En el techo del coliseo)
Se veía a los 4 templarios oscuros con caras de preocupación por lo que estaba pasando en la pelea de su Jerarca.
Helena (Conexión): Hermanos, tenemos que asistir al jerarca, a este paso va a morir. -Preocupada-
Templario oscuro 1 (Conexión): Hablemos al jerarca, que sepa que nosotros lo vamos a ayudar y que no tardaremos.
Helena (Conexión): Eso are, prepárense hermanos.
Los templarios oscuros intentaron enlazar su mente con la de Aidan.
(En la arena)
Sintió que algo quería entrar en su mente, aún estaba en guardia y tocándose la herida que le ardía mucho, dejo que eso fluyera en su mente y escucho una voz.
Helena (Conexión): ¡Jerarca! -Preocupada
Helena y los protoss al conectarse sintieron el dolor que sentía Aidan, haciendo que se preocupen aún más.
Aidan (Conexión): ¿Helena? ¿Qué sucede? -Veía al gigante moverse hacia el-
Helena (Conexión): ¡Jerarca, usted está muy herido déjenos ayudarlo y acabar con ese humano!
Aidan (Conexión): ¡No...No intervengan, yo terminare con esto! -Quejándose del dolor-
Mientras hablaban por medio de la conexión, Aidan esquivaba al gigante e inmediatamente se alejaba, pero al hacer esos movimientos solo le provocaban más dolor y más sangre saliera de la herida.
Helena (Conexión): ¡Si usted sigue así va a morir!
Aidan (Conexión): Prometo sobrevivir, acabare con esto... -Suspirando-
Aidan recordó de la katana que Talion le había dado y tenía un plan aunque no sabía si iba a funcionar.
Se fue corriendo hacia Renzel y este en consecuencia levanto los dos brazos del gigante para aplastarlo.
Aidan retrocedió rápidamente antes de que golpeara el piso y se desato una gran nube de polvo, cegando a todos y no dejando ver nada.
Saco la katana y logro ver la zona del corazón del gigante donde estaba Renzel ubicado, también vio un gran pincho en ella, se preparó para dar todo en este último intento.
Lanzo la katana de forma vertical a gran velocidad en dirección del pincho en la zona del corazón mientras que él iba corriendo unos cuantos pasos atrás del arma.
Renzel no veía nada hasta que fue demasiado tarde, vio como una katana partía por la mitad el pincho que lo protegía haciendo que quedara una zona perfecta para golpear.
Aidan antes de que lograra llegar al gigante, retrajo el brazo izquierdo para cargar el golpe y sus ojos brillaron de azul eléctrico.
Rodeando su puño con la misma energía con la que el lanzaba los rayos, todo esto lo hacía mientras tenían una cara de gran esfuerzo y le corría la sangre por la boca.
Aidan: ¡Esto se acaba ahora!
Con su puño izquierdo rodeado de energía dio un fuerte golpe, atravesando la piedra y golpeando a Renzel en el pecho.
Provocando que este diera un grito y saliera por la parte de la espalda del gigante, chocando ruidosamente contra la barrera.
Aidan cayó al suelo, unos metros lejos del gigante que poco a poco se desintegraba, al cabo de unos segundos se fue totalmente la nube de polvo y todos lograron ver lo que sucedía.
Aidan estaba en el suelo aun cociente a duras penas, con el brazo derecho morado y con cortaduras.
La parte izquierda de abdomen tenía una herida profunda y su brazo izquierdo estaba morado pero también tenía rastros de quemaduras.
La ropa estaba destrozada de la parte de arriba y los pantalones estaban rasgados.
Renzel estaba inconsciente, este estaría completamente bien si no fuera por una gran marca de un golpe en su pecho que parece haberle roto unas costillas.
El que dirigía los exámenes que era Saizen salto al interior de la barrera y dio como ganador a Aidan por aun mantenerse en la realidad, segundos después este entro en la inconsciencia debido al dolor y la energía gastada.
(En el balcón)
Daniel tenía una sonrisa notable, ya que hoy no murió nadie por ahora y vio de manera impresionada como Aidan se llevó la victoria.
Daniel: Fue un buen combate... ¿Qué opinas hermana? -Sonriendo-
Zaiara: Es una lástima que no haya muerto ese plebeyo. -Levemente enojada-
Daniel: ¿Por qué dices tales cosas hermana?
Zaiara: Es simple, no me gusta que ellos estén aquí, no son de una buena procedencia y la mayoría son pobres y sucios.
Daniel: Ya veo... -Girando la cabeza con desaprobación-
Su hermana al ser la menor de la familia fue malcriada y se le inculco al odio hacia los plebeyos.
Espera que algún día ella cambie a mejor, que vea el potencial y el bien que la ve en las personas sea de clase alta o baja.
(Afuera de la barrera)
Todos se relajaron al ver que Aidan gano y fue asistido por los médicos de los combates, Aunque todos se sentían mejor, Samuel miraba curioso la herida de quemadura que tenía Aidan.
Él sabía que ninguno de los dos tenía un don que tuviera la capacidad de generar quemaduras, esto se lo hizo muy raro, le preguntaría a Aidan que paso después de que este despierte.
(En el techo del coliseo)
Helena (Conexión): Por suerte, el jerarca ha ganado la pelea y ahora lo llevaron para curarlo-Mirando la entrada de la enfermería- hermanos sigamos al Jerarca.
Los otros templarios oscuros siguieron sus órdenes, bajaron del techo y escoltaron a Aidan a través de las sombras.
Los combates restantes terminaron, todos los nobles que participaron que eran 12, solo 2 perdieron.
Pero lo extraño es que a ningún noble le toco enfrentar a los otros nobles, solo contra los plebeyo, que sin mucho esfuerzo lograron llevarse la victoria.
Con el tiempo transcurrido Aidan se despertó en una cama dentro de una gran habitación con múltiples camas y personas siendo atendidos por médicos.
Se sentó al borde de la cama y se tocaba el cuerpo mientras veía las vendas en su cuerpo con un leve tono rojizo.
Algunas pequeñas heridas y la grande en su abdomen, aunque tuviera una leve regeneración, esta solo lo ayudaba con heridas leves.
Aidan: Logre ganar... si hubiera actuado tarde estaría muerto, aun soy bastante debí, sin la katana hubiera perdido. -Voz baja-
Helena (Conexión): Jerarca, ¿Cómo se encuentra?
Aidan miro en dirección de las sombras se veía la silueta de Helena y de los otros templarios oscuros.
Aidan (Conexión): Me encuentro bien, después de esta actividad iré al nexo para poder curarme completamente... -Mirando el techo-
Necesito que exploren la ciudad entera y me den informes de las habilidades que vayan encontrando.
Helena (Conexión): Pero jerarca, no habrá nadie quien lo cubra. -Leve tono de preocupación-
Aidan (Conexión): No se preocupen, mí combate ya término, creo que ya no peleare más.
Aidan se levantó y se dirigió a una silla que estaba al lado de su cama, ahí estaba la katana que con la funda, y la parte superior de su ropa, pero estaba bastante destrozada.
Se puso lo que quedaba de ella para no quedar totalmente descubierto de la parte superior, se ató la katana en la espalda y se dispuso a ir a la puerta.
Aidan (Conexión): Mantendré la conexión para que no se preocupen ¿De acuerdo? -Sonriendo levemente-
Helena asintió y se retiró junto a sus hermanos sin que nadie los detectara, mientras que Aidan salía del lugar y veía a sus compañeros esperándolo mientras los demás estaban con su respectivo grupo.
Alex: ¡Por aquí Aidan! ¡Aquí! ¡Aquí! -Levantando la mano de manera desenfrenada-
Todos miraron al grupo de Aidan por los gritos constante de Alex.
Zoe: Oye todos nos están mirando por favor haz silencio. -Sin interés-
Pero Alex seguía gritando y no dejaría de hacerlo hasta que Aidan llegara con ellos.
Samuel: ¿Lo haces tú o lo hago yo? -Mirando a Zoe-
Zoe se acercó a Alex por la espalda mientras los gritos de Alex no cesaban, levanto la mano en alto hasta que bajo.
Zoe: ¡Ya calla! -Golpeando en la cabeza-
Alex: Ay... ¿Por qué me pegas? -Voz baja-
Zoe: Por que estas gritando como loco y llamas mucho la atención, si lo vuelves a hacer… -Haciendo una espada de hielo-
...Te voy a dejar en la piel lo que pasa si te descontrolas. -Sin interés pero con una sonrisa para nada tranquila-
Alex: Si...sí. -Temblando-
Aidan al llegar con el grupo vio como Zoe amenazaba a Alex con una espada de hielo y este solo temblaba.
Aidan: ¿Cómo están chicos? -Sonriendo levemente-
El primero en acercarse para hablar fue Samuel, acompañado de los demás.
Samuel: Estamos bien, los demás se han recuperado casi totalmente, solo estamos cansados y con un poco de hambre.
Pero tú la has pasado mal, te ha tocado justamente alguien que tiene un don perfecto para usar contra ti. -Mirando de pie a cabeza a Aidan-
Aidan: Jajá si la he pasado mal. -Sobándose la cabeza-
Se acerca Alex, metiéndose en la conversación de ambos.
Alex: Me sorprendiste que haya ganado Aidan. -Sonriendo-
Aidan: Gracias Alex...-Interrumpido por Alex-
Alex: Iba a apostar que perderías en menos de un minuto. -Ampliando la sonrisa-
Aidan se quedó blanco por la respuesta tan motivadora de su compañero, mientras este se reía por la cara de su compañero.
Pasaron los minutos hasta que se escuchó nuevamente la voz de Saizen en medio de la arena.
La barrera ya había desaparecido y el campo estaba siendo arreglado por un caballero real con el poder de manipular la tierra.
Saizen: ¡Escuchen, dejen de parlotear y escúchenme atentamente!
Todos prestaron atención a Saizen, haciendo silencio para escuchar.
Saizen: Todos hagan una posición en filas ¡Ahora!
Todos rápidamente empezaron a formarse, pero los nobles se pusieron en primer lugar con una sonrisa descarada, los demás estaban atrás de ellos con una cara de disgusto por lo anterior hecho.
Saizen: ¡Todos los que ganaron los combates, serán elegidos por el príncipe Daniel y la princesa Zaiara para formar grupos!
¡Para entrenarlos personalmente en todo lo que necesitan para ser grandes y honorables caballeros Reales!
Todos miraron el balcón donde estaban sentados los ya mencionados, estos se pararon y dieron un gran salto, cayendo al lado de Saizen con sus respectivas armaduras y armas, excepto sin el casco.
Daniel: Gracias Saizen, ahora nos encargamos nosotros de ellos. -Tranquilo-
Zaiara: Muy bien novatos, escuchen atentamente, tendrán el honor de entrenar con nosotros y espero que sepan valorar eso, ya que si no lo hacen, los corregiré personalmente, ¿les quedo claro?
Los 25 participantes: ¡Si!
Todos los que no eran de clase alta, la miraban con desprecio oculto ya que pensaban que era muy arrogante, en cambio los de clase alta, la adoraban y la seguían como unos perros por "su nobleza y belleza"
Daniel miraba con los ojos cerrados por la actitud de su hermana, él ya tenía claro que los de clase baja ahí presentes la miraban de forma rencorosa y tenían motivos para ello.
Daniel: Escuchen, formaremos 4 grupos, yo me encargare de designar los miembros para cada grupo. -Mirando a todos-
Daniel (En su mente): Sé que no podre poner en un grupo de nobles a un plebeyo porque no me quiero imaginar que pasaría.
Si es al revés se negaran a trabajar y se separarían, lastimosamente tendré que separarlos a todos sin posibilidad de empezar a hacer las paces.
Daniel junto a Zaiara separaron los 4 grupos, el primer grupo está formado por 5 nobles.
Aunque Samuel y Aidan estaban molestos porque reclutaron a los que habían derrotado y los demás que perdieron fueron expulsados del lugar.
El segundo y tercer grupo estaba formado por 7 integrantes, que por lo que se veía, se empezaron a llevar bien al instante.
Solo faltaba el cuarto grupo, Zaiara iba a formarlo, hasta que reconoció a Aidan y su cara empezó a tornarse enojada, desenfundo su espada y se envolvió con rayos.
La razón de que ella recién se daba cuenta de que era Aidan es que no se molestó en ver quiénes eran los plebeyos, solo observaba a los nobles.
Todos la miraban con impresión porque no sabía que iba a hacer, excepto una persona que ya lo tenía más que claro.
En un arranque de velocidad, Zaiara iba a cortar a Aidan por la mitad, pero fue detenido por una gran espada rodeada de los mismos rayos amarillos.
Todos miraban con asombro lo que había sucedido, todos prestaban suma atención, excepto Saizen y los reyes.
Daniel: Eres predecible Zaiara...-Endureciendo los músculos-
Zaiara: Te dije que no te metieras en mi camino Daniel, cuantas veces tendré que repetírtelo. -Enojada-
Daniel: Y yo te repetiré lo mismo una y otra vez, yo seré rey en un futuro y no dejare que asesines así como así a nuestra gente.
-Mirando de manera desafiante- Sabes que no puedes vencerme, te supero en años de entrenamiento.
Zaiara gruñía porque sabía que tenía razón su hermano mayor, aun estabas lejos para poder vencerlo.
Ella se retiró con una furia clara en sus ojos, guardando su espada y desactivando sus rayos, con un gran salto salió del coliseo y desapareció.
Sin pensarlo miro a Aidan y empezó a hablarle.
Daniel: Disculpa a mi hermana, ella es muy orgullosa y cuando alguien se le pone en el frente, los castiga sin piedad.
Y si se defienden o la contradicen ella les da la muerte, todos a los que ella intento matar los envié al límite de la ciudad para que ella jamás los pueda volver a encontrar.
Pero a veces llegue tarde y ella ya había arrebatado varias vidas.
Aidan se quedó atónito de lo que estaba diciendo Daniel, su hermana estaba cegada por el orgullo y quería matarlo por defenderse.
No podía creer que ella podía llegar hasta ese punto, no solo eso, si Daniel no estuviera allí, ese golpe sin duda lo hubiera matado.
Zaid VII: ¡¿Que estás haciendo hijo mío?! ¡¿Por qué te interpones entre tu hermana y ese plebeyo?! -Enojado-
Todos miraban como el rey se le notaba molesto con su hijo mayor.
Daniel: Discúlpame joven... -Voz baja-
Sin previo a aviso Daniel golpeo fuertemente el estómago de Aidan provocando que este cayera de rodillas poniendo sus manos en donde recibió el golpe.
Daniel: Padre, defendí a este sucio plebeyo por que no vale la pena matarlo, vimos como derroto a uno de los nuestros y su poder nos podría servir para un futuro. -Con voz seria-
Daniel procedió poner su pie en la cabeza de Aidan.
Zaid VII: ¿Y por qué está tu hermana molesta? -Dudoso-
Daniel: Por que el no conocía el lugar, esto provoco que ella se enojara.
Y no vale la pena derramar sangre sucia con una espada como la nuestra y si se preguntan cómo se cosas de este plebeyo, es porque lo interrogue después.
Zaid VII: Mm...-Pensando-
Daniel: La ofensa que cometió con mi hermana no será pasada por alto, me asegurare de castigarle después del examen pero no lo matare ya que nos servirá en un futuro.
Zaid VII: Mmm...así me gusta hijo mío, siéntete libre de castigar como quieras a este sucio plebeyo.
Los reyes procedieron a retirarse y fueron acompañados de todos los caballeros Reales.
Daniel: ¡Todos, retírense a sus hogares, nos veremos mañana al salir al sol, si alguien llega tarde será castigado, su entrenamiento es muy importante para futuro!
Todos se retiraron, excepto Aidan que aún seguía en el suelo dolido por el golpe y sus compañeros estaban en guardia por cualquier cosa que intentara Daniel.
Aidan se levantaba lentamente viendo fijamente al que le dio ese golpe.
Daniel: Discúlpame joven por golpearte... -Dándole la mano para ayudar a levantar a Aidan-... si no fingía que te odiaba, habría muchos problemas.
Tomo la mano de Daniel con cierta duda y un pequeño temor.
Daniel: Admito que me olvide de decirte que ese día que intentaras no encontrarte con ella por un tiempo, si no intentara matarte.
Aidan: No entiendo...-Confundido-
Daniel: Es complicado, ¿sabes que yo seré un rey a futuro no?
Aidan: Si... -Desconcertado-
Daniel: Mis padres creen que odio a los plebeyos y por eso soy el sucesor.
Si se llegaran a enterar que salvo gente que ellos odian, me destituirían del trono y me mandarían a ejecutar a pesar de que soy su hijo.
Mi objetivo es cambiar las cosas a mejor cuando sea rey, discúlpame por golpearte.
Aidan: Eh...está bien, no hay problema, no eres un mal sujeto después de todo. -Sonriendo levemente-
Daniel: Te recomiendo que no vengas por dos días al entrenamiento, yo fingiré que te di una paliza por lo anterior sucedido, de paso le contare a mi hermana así no intenta matarte de nuevo jajá.
Aidan: Gracias por la ayuda Daniel, si no me hubieras ayudado yo ya habría muerto desde ese día.
Daniel: De nada, y veo que te acuerdas de mi nombre, ¿Me podrías repetir el tuyo que me lo olvide jajá?
Aidan: No hay problema, me llamo Aidan.
Daniel: Sera un placer trabajar contigo Aidan, espero mucho de ti en el futuro y si me disculpas, me retiro, tengo un par de asuntos que atender.
Aidan hizo una reverencia y se retiró junto a sus compañeros, después de un par de metros de distancia Alex hablo.
Alex: ¿Por qué será que el príncipe querrá ayudarnos, después de todo, su familia nos odia?
Samuel: No se la verdad, es un poco raro, porque por lo general los nobles nos odian.
Mientras hablaban, cada vez se iban alejando más, lo que dijeron Alex y Samuel, Daniel los escucho gracias a sus capacidades aumentadas.
Daniel: Después de todo, mi mejor amigo, la mujer que amo es como ustedes y me han enseñado a vivir. -Sonriendo levemente y diciendo esto en voz baja-
El tiempo paso hasta que el grupo llego a la base oculta, cuando atravesaron la barrera, el campamento estaba totalmente en silencio.
Eso les extraño al grupo ya que la gente a estas horas se movía mucho.
Samuel: Que extraño, ¿Dónde están todos?
James: La verdad es que no tengo idea. -Confundido-
Alguien se acercaba por detrás al grupo de jóvenes y empezó hablar.
Talion: ¡Chicos!
Los chicos se asustaron, cada uno con su respectiva forma, Aidan pego pequeño grito.
Zoe sé que blanca del susto, Samuel dio un salto, Alex casi le pega una patada a Talion pero este lo esquivo sin muchos problemas, Reí y James estaban con una cara de tranquilidad pero sintieron un gran escalofrió, temblando levemente.
Todos le gritaron a su Maestro por haberlos asustado, pero él los amenazo que si le volvían a gritar, no sería compasivo con su entrenamiento, dejando a sus estudiantes callados sin reproches.
Talion: Dejando esto de lado... ¿Cómo les fue? -Lo decía tranquilo por fuera pero por dentro estaba nervioso-
Todos sonrieron levemente y dijeron al mismo tiempo.
Los 6: Todos pasamos...
Talion sonrió levemente, ya que tenía la esperanza de que todos pasarían, excepto Aidan que lo entreno por poco tiempo, aunque se sorprendió de que pasara.
Talion: Escuchar eso me hace sentir orgulloso de ustedes, tenía la esperanza de que pasaran...excepto de ti -Señalando de manera acusadora a Aidan-
Todos se empezaron a reír en voz baja por lo dicho de su maestro, excepto Samuel y Reí que tenían una mirada seria.
Aidan: ¡¿Oye...tan poca fe me tenías?! -Gritando-
Talion: Si...pero de igual manera me alegra que lo hayas logrado -Mirando a todos- les tengo preparado una sorpresa.
Toda la gente del campamento salió de manera frenética, recibiendo con alegría y aplausos al grupo.
Después de unos minutos de ovación, empezaron a preparar mesas llenas de comida, algunos trajeron instrumentos musicales para empezar a cantar, y otros barriles de alcohol.
Todos disfrutaban de la noche, Samuel apenas ver el alcohol fue corriendo para empezar a beber.
Talion solo vigilaba a Alex para asegurarse de que no hiciera ninguna broma, Zoe y James hablaban tranquilamente mientras comían algo, Reí estaba un poco apartada leyendo un libro.
Aidan quería quedarse en la fiesta pero tenía curiosidad de lo que sucedía en su base, estaba por retirarse sin que nadie se diera cuenta pero fue detenido por una mano que se posó en su hombro.
Talion: ¿A dónde vas Aidan? -Serio-
Esto provoco que Aidan se asustara momentáneamente, tenía que inventar una excusa para poder irse sin levantar sospechas.
Aidan: Ah... Hola Maestro Talion, bueno tuve un problema con la princesa del reino y su hermano me salvo de que ella me asesinara.
Me dijo que no fuera a los entrenamientos durante dos días para que simule que él me dio una paliza.
Talion no veía mentiras en lo que Aidan decía, pero algo no le quedó claro.
Talion: Entonces... ¿por qué no te quedas aquí hasta que pasen los dos días?
Aidan no se esperaba eso y se retó mentalmente por no pensar en el campamento oculto.
Aidan: Es que...quería aprovechar ese tiempo para contarle que aprobé el examen a un grupo de amigos que tengo fuera de la ciudad, con dos días me alcanza para contarles y volver sin problemas.
El maestros de sus compañeros o estaba muy convencido de la respuesta, después de todo ya tenía experiencia con mentirosos.
Talion: Escúchame chico, sé que tienes secretos que nos ocultas a todos y no me interesa saberlos, pero si traicionas a mi gente o intentas hacerles daño, yo mismo iré a buscarte. -Serio-
Aidan abrió los ojos de par en par por lo que escuchaba, al principio no sabía que pensar, pero al cabo de diez segundos ya tenía una respuesta.
Aidan: Si, tienes razón, tengo secretos que les oculto a todos, pero ninguno de ellos lastimara a tu gente o cualquier otra, eso te lo puedo prometer. -Sonriendo fingidamente-
Talion: Me arriesgare en confiar en ti, no me decepciones chico. -Retirándose para volver a la fiesta-
Aidan: Si...no te preocupes. -Voz baja-
Aidan salió del campo ilusorio y se dirigió a un callejón oscuro, donde creo un cristal pequeño y la enterró profundamente en el suelo.
Aidan (Conexión): ¡¿Kaldarius me oyes?!
Kaldarius (Conexión): Fuerte y claro Jerarca ¿Necesita algo?
Aidan (Conexión): Necesito que me tele-transportes al nexo, ya tengo el cristal enterrado en mis pies.
Kaldarius (Conexión): De inmediato jerarca.
Aidan empezó a brillar de color azul, este cerró los ojos y desapareció de repente.
(14:25 hs)
Al abrir los ojos estaba dentro de un edificio protoss que él no conocía, se dispuso en ir a la salida del mismo y cuando salió, vio que el edificio era un Portal.
Aidan: Es hora de ver a los forjadores... -Sonriendo-
Fin del capítulo 7: Plebeyos y las elecciones.
