Fic

Historias de Albert y Candy

Presenta

La Heredera del Clan

Por Mayra Exitosa

Portada imagen de Lorena Montalván

Equipo participante en Octo Bert 2023

Durante los siguientes meses, la imagen del rubio se fue idealizando en la jovencita, al grado de recordar su sonrisa y como se había embadurnado de la tarta al comerla. Muchas veces se reía sola recordando con aprecio un momento así, tratando de olvidar a Mela y John en la cocina, pues había sido algo que no deseaba recordar en lo que le quedara de vida. La partida de su segundo hermano a las tierras de la familia de su madre y posteriormente el tercero dejo el castillo más tranquilo de lo normal, los fríos inviernos afectaron las estructuras, los caminos y hasta el lago que fue rodeando parte del castillo y ya no había patio trasero, este se había ido inundando lentamente. Su padre y ella conversaban sobre los temas importantes de la familia asegurando que continuarían juntos mucho tiempo más, incluyendo que sus hermanos no regresarían por un largo tiempo, ya que había habido problemas en el clan de la familia a la que perteneció su madre y no podía más que ayudar, posiblemente uno de sus hermanos podría quedarse de responsable y las distancias los alejaban de ellos por más que desearan evitarlo. - Candy están llegando más ingleses, hay que tener cuidado, se creen de la realeza y no aceptaran nuestras costumbres, nos creen inferiores y aunque digan que son amistosos, no confíes en ninguno de ellos. - Lo que usted ordene, padre.

Las personas que trabajaban para los McKenzie eran mayores y conforme pasaban los años, más avanzaba en ellos el encanecido cabello, la demacrada angustia de los días fríos y de los temporales que tenían con vientos que parecían traer remolinos en cada paso, dejando claro que las tierras eran por mucho un lugar donde no se daban fácilmente los ingleses, más todos parecían irse adaptando y los pueblos se iban colmando de ellos, en cada que había un espacio y un enlace con los del otro país.

- Los de la familia esa, ya no son escoceses, se casaron con ingleses y han tomado su nuevo camino, trata de no unirte a ellos. - Padre, debemos saber como hablan, como piensan, al enemigo mejor mantenerlo cerca y vigilado, déjalos que sigan su paso, nosotros no nos iremos de nuestras tierras. - Tus hermanos se harán vida en otros clanes, ninguno a regresado, y solo quedas tú, deberíamos ver si alguien de aquí mismo se interesa en ti y… - ¡Papá! Todos son como mi familia, no digas eso, lo mejor es una unidad con un clan que valga la pena y que no abandone nuestras tierras. - Bien, te dejo esa tarea a ti, elige bien. - ¿no escogerás un buen hombre para tu hija? - No lo creo, eres muy lista, no aceptarías a un hombre solo porque lo elija, debe ser de tu agrado, eres la que vivirá con él, por eso elige a un buen hombre. - Esta bien padre, pero para eso falta mucho.

En el clan Andrew, habían atrapado a varios de los primos y cada mes había una boda, asegurando que se casaría el principal de los Andrew, lo cual nunca resultaba ser cierto y continuaban buscando a William para que dejara de esconderse, la partida del abuelo, fue suficiente motivo, para reconocerlo ampliamente y ahora era él quien se haría cargo de todo el clan Andrew y próximamente también se le otorgaría el título de jefe de los clanes escoceses, aunque deseara evitarlo, estaba en su línea sanguínea y nadie podía ni tenía las capacidades para serlo, ellos estaban muy preparados y ese hombre más que todos, había heredado no solo la responsabilidad de un clan tan grande como el Andrew.

William VII ya no era un joven alegre, era alto de espalda ancha, músculos rígidos y bien formados, atractivo y claro que agradaba a todos para formar parte de la unión con los clanes, así en pleno sepelio del abuelo, las hijas de otros clanes, parecían las viudas de los Andrew, habían viajado junto a sus padres, para dar sus atenciones a la perdida más importante del clan, pero a la vez, para que vieran y conocieran a sus hijas que aun continuaban solteras y que podrían ser un buen lazo entre clanes poderosos.

Para el rubio el ambiente no era el adecuado y cuando lo fue, tampoco lo deseaba, algunas veces en las damiselas buscaba la mirada de la niña que había conocido hacia algunos años, más nunca iba acompañada de esa sinceridad y sin el interés por atraparlo, mucho menos de comprometerlo en algo, eso no era lo que veía entre las mujeres que llegaban a saludarlo y darle los pesares por la partida de su abuelo.

- William, hijo, ella es mi muchacha, Eleonora, una mujer lista para casarse, te aseguro que serán buenos descendientes, tales como tú. - Mc Claude, no es el momento de hablar de eso, no estoy de ánimo. - En algún momento la soledad te apremiará, así que es mejor que vayas conociendo a mi hija, te conviene el trato entre nuestros clanes, te apoyaremos como jefe que nos representes a todos. - No lo haga, estoy despidiendo a mi abuelo, no es un tema que debamos tratar. - Todos estamos apenados por la partida de tu abuelo, el más que nadie quería que tuvieras la mejor mujer a tu lado, vaya si los sabré, hable mucho con él, por eso sé que mi hija será la mejor. - Si, mi abuelo también habló con todos ellos y sus hijas, pero como le explique, no estoy disponible para ese tema, si me disculpa, permítame atender a mi familia.

Mc Claude giraba a ver los rostros refunfuñados de sus similares, otros jefes de muchos clanes que habían asistido, pero al ver a sus hijas, este se sentía poderoso, pues su hija era muy alta, y casi podía alcanzar la altura de William, así no tener que correr el riesgo de menospreciar la poderosa oportunidad de tener nietos enormes y fuertes, por lo que este se sentía seguro de que William se decidiría por su hija, así que esperaría el momento adecuado, ahora que lo había visto, se parecía mucho a su difunto padre, pero la mirada y el rostro predominaba un parecido a la madre y por lo que estaba de buen ver, su hija de inmediato se hallaba más que segura de querer quedarse ahí, para tratar de atraparlo, ahora que ya lo conocían todos.

Continuará…


Gracias por leer y comentar, esperando sea de su agrado Participación para el Octo Bert 2023

Agradecida por no tomar mis escritos, ni adaptar ni utilizar por ningún medio auditivo o plataforma alternativa, en parte o completa ninguno de estos.

Un Abrazo a la Distancia

Mayra Exitosa