Varias semanas pasaron de manera normal donde los cuatro universitarios mantenían su agenda bastante apretada que apenas y podían hablarse.
Luego de que anunciaran el baile de bienvenida a los de nuevo ingreso, dieron algunos días de descanso lo cual muchos agradecieron ya que sentían que colapsarían en cualquier momento.
-¿Tendremos que ir a esa fiesta de manera forzosa?-comentó el bicolor frunciendo los labios paseándose por la casa en ropa interior al igual que el resto de los hombres
-Como tenemos una de las casa principales podemos ir o no a esa fiesta. Sugiero que vayamos a otra parte-comentó la peliverde quien traía solo una toalla cubriendo su parte inferior mientras que con otra secaba su cabello dejando expuestos sus pechos
-Secundo su idea, no quiero ver a ese montón de extras persiguiéndome durante todo la fiesta-Katsuki también se secaba el cabello quien tenía el seño fruncido al pensar que no estaría en paz si esos tres vinieran a molestarle
-Oigan, ya esta listo el jacuzzi. Está en su punto-comentó el mayor quien estaba completamente desnudo
-Excelente, vamos-Shoto se retiró la única prenda que traía y todos salieron rumbo a la enorme tina
Al estar dentro de la tina, Izuku y Shoto se acercaron a la pareja del contrario para iniciar una candente sesión de besos. Inasa y Katsuki aprovecharon el momento tocando cada parte del cuerpo y frotando sus partes íntimas.
-Ven aquí preciosa, juguemos un rato-la peliverde le abrazó con las piernas por la cintura, acomodó su enorme falo en la vagina de la chica y entró en ella en una sola estocada haciéndola gemir
-Vamos mitad-mitad, que te he traído ganas desde entonces-lo pegó a la orilla del jacuzzi teniéndolo de espalda y se introdujo en él de manera rápida y profunda sacándole un gemido
Ambas parejas disfrutaron del momento tocando, besando, mordiendo y maltratando sus cuerpos en un gran y sonoro ruido obseno que rodeaba la habitación.
Aceleraron las embestidas provocando una mayor cantidad de gemidos y movimientos rudos logrando llevarlos al clímax liberando sus esencias dentro suyo.
-Eso fue fantástico
-Fue increíble
-Fue un placer estar contigo
-Pero ahora quiero ocuparme de mi pareja
La peliverde y el bicolor regresaron con sus amantes originales y dieron rienda suelta a una segunda ronda.
-Siiii Kacchan maaaas, maaaas
-Oh Ina-chan, eres tan bueno ahhhhh
-Aprietas deliciosamente Zuzu
-Sho-chan, se siente tan bien dentro tuyo
Se deshacían entre gritos y gemidos, sus pieles se sentían arder por el enorme placer del calor del momento.
Entres varias embestidas más, de nueva cuenta volvieron a correrse quedando completamente satisfechos.
Entrada la tarde comenzaron a arreglarse para salir a celebrar su bienvenida. Decidieron ir a un lugar más alejado de la fiesta sosa de la universidad.
Entre todos decidieron vestir de cuero con playeras iguales pero de distinto color. La única que traía todo de cuero era la peliverde quien apareció con un sexy top de cuero que resaltaba sus enormes pechos y una mini falda plisada del mismo material junto con unas largas botas y guantes. Salieron del lugar en las motos de Inasa y Katsuki dirigiéndose al sitio que propusieron.
En media hora llegaron a una especie de antro/bar donde estacionaron sus motos y bajaron entrando sin ningún tipo de problema.
Tomaron una de las mesas y en poco tiempo, se acercó alguien a tomar su pedido.
-Cuatro jarras de cerveza, la botana especial y dos botellas de whisky-el mesero rápidamente escribió lo solicitado
-Enseguida-salió a llevar la orden
En pocos minutos regresó con su pedido y se retiró comentando que estaría al pendiente.
Conversaron y bebieron durante un rato pero al escuchar que la música mejoró, salieron a bailar.
Los cuatro eran bastante llamativos ya que despertaban pasiones y envidia en varios de los espectadores ya que no sabían si querían ser los hombres para bailar cerca de tan atractiva chica o ser la mujer para ser el centro de atención de tres apuestos chicos.
Conforme fue pasando la noche muchas personas ya estaban totalmente fuera de sus sentidos ya sea completamente borrachos, peleando o incluso vomitando hasta el alma.
Al terminarse su ronda de bebidas, solicitaron al mesero más cervezas y drogas como porros, pastillas y polvos.
-Aquí tienen, que lo disfruten-se retira para atender a otros
-Ahhh, esta es de la buena-comentó Izuku al encender un porro y soltar el humo de este
-Es verdad, hasta eso no venden de esa porquería sintética-Shoto puso un poco de polvo en su mano y lo inhaló
-Estas cosas tienen calidad-Katsuki se tomó una pastilla al igual que Inasa-pedimos estas especialmente para ustedes
-Así que pidieron cuatro de las negras-el bicolor se pegó a su novio
-Veo que no saldremos esta noche del cuarto-la peliverde también se pegó de forma sugerente al pelicenizo
Toman también las pastillas y proceden a besar a sus parejas.
En tiempo récord terminaron su ronda de bebidas y drogas, pagaron por lo consumido y salieron rápidamente del lugar con dirección hacia la casa.
En tiempo récord llegaron estacionado milagrosamente las motos de manera perfecta.
Bajaron de ellas y entraron con desesperación directo al cuarto. Estando ahí, las ropas volaron por toda la habitación y se besaron sin pudor alguno entre los cuatro.
Los tres chicos prepararon a la chica de manera calmada para como se estaban sintiendo en ese momento. Varios minutos de gemidos sin control de la chica, dieron resultado ya que vieron que estaba lista. De manera lenta Inasa y Katsuki entraron al mismo tiempo en la vagina mientras que Shoto entraba por su ano.
La chica gritó extasiada sintiendo que veía las estrellas. Al sentirlos completamente dentro, los tres comenzaron a embestirla sin control.
Los gemidos y el chapoteo de sus partes íntimas inundaron toda la casa, agradeciendo que estaban apartados de todos, podían gritar y gemir todo lo que quisieran.
Después de un tiempo, los tres hombres se corrieron dentro de ella llenándola por completo dejándola completamente satisfecha.
Salieron de ella y ahora era turno de Shoto de recibir la doble penetración mientras Izuku montaba su pene.
Ahora quien veía las estrellas era el bicolor sintiendo todo lo que hacían con su cuerpo.
Así continuaron con Inasa y Katsuki hasta cambiar y hacer infinidad de veces el sexo entre ellos.
Después de la noche de sexo, quedaron prácticamente exhaustos quedando profundamente dormidos. Tanto así, que despertaron hasta el domingo a mediodía.
Al ver esto vieron que habían dormido desde la madrugada del sábado hasta ahora.
-Esas pastillas si que son efectivas-comentó Katsuki preparando el baño junto con Izuku
-Quedé deshecha, pero satisfecha-ambos se rieron por lo dicho-ya esta el agua
-Oigan, ya esta listo el baño. Vengan acá
La otra pareja ingresó y los cuatro se dieron un relajante baño sin otras intenciones de por medio.
Al terminar, salieron a cambiarse e ir a reabastecer su alacena. Luego de ello cocinaron, limpiaron la casa y realizaron sus deberes pendientes.
Curiosamente se sentían renovados por lo que pudieron terminar todo a tiempo y descansar ya llegada la noche.