Kintsugi:
capítulo 1:
Baile bajo la lluvia:
En aquellos días el milenio de Plata gozaba del periodo de paz más largo que la galaxia había tenido, al punto quizás de llegar a ser aburrido. Para Rei Hino princesa heredera de marte que según la tradición de su familia era una guerrera sangrienta desde la más tierna edad, su única diversión real era pasar tiempo con su mejor amiga y también princesa Heredera de júpiter practicando sus técnicas de ataque en una u otro planeta.
Por desgracia para las herederas de la corona de sus planetas, la Reina Gea y el Rey Etlio les habían invitado a celebrar el cumpleaños de su primogénito en el planeta tierra y aunque a ninguna de estas princesas les interesaba aquella reunión sabían que era algo que no podían rechazar ya que hacerlo podría tener un costo diplomático tan alto que nadie estaba dispuesto a pagar por lo que aquella mañana en el patio central del palacio de Marte aterrizó la nave espacial de la familia de Júpiter a la que prontamente varios sirvientes marcianos apresuraron a subir el equipaje de su princesa, sus padres estaban a su lado esperando a que terminaran de subir las cosas.
-Rei, sabes que vas en representación de todos los ciudadanos de Marte ¿verdad?-advierte el Rei Ares
-si, padre. Lo sé ¿pero no podrías excusarme?
-lo lamento, Hija-coloca la madre su blanca mano en el hombro de su primogénita-ya estás en edad de cumplir compromisos diplomáticos y en esta ocasión no podemos acompañarte.
Rei asiente resignada y se gira agachándose y colocando sus manos en el abultado vientre de su madre.
-me debes una muy grande pequeña Hanabi. Ya nos pondremos al día cuando nazcas… y ni se te ocurra salir antes de mi regreso.-amenaza la princesa Heredera
-¡Hey, piensas tardar toda la mañana despidiendote?- grita la alta heredera de Júpiter desde la puerta de su nave espacial
-me voy, padres… prometo ser una digna representante de Marte-promete Solemne la pelinegra
-y…
-y no meterme en problemas ¡adiós!
La joven hace una reverencia y se aleja de prisa de sus padres. Es su primer viaje diplomático sola y agradece con el alma que Makoto pase por ella.
-Sin llorar, flamita-se burla la castaña
-¿llorar? En mi planeta eso no existe, truenito
-pues te ves triste
-es porque no quiero ir a la tierra. Lo sabes-refunfuña Rei tomando una manzana del cesto de fruta ante ella
-sé que lo odias, pero yo muero por estrenar los vestidos que mandé a hacer para este baile.
-Mako-chan. Sabes que la fiesta solo es un pretexto para hacer una pasarela de princesas herederas para el único heredero hombre del sistema solar ¡es tan anticuado!
-pues si. Pero como ese rarito y yo compartimos sangre yo solo voy a pasarla bien y divertirme. No soy la enferma de Serena que a pesar de compartir sangre con Endymion no pierde la oportunidad para ir a cuanto evento le dicen que irá. ¡asco!
-¿no te parece raro? Ni tú que eres su prima lo ha visto nunca.
-según mis tíos es una rata de biblioteca…con otras palabras. Es muy tímido y se la vive encerrado con tutores.
-quizás está deforme-se burla Rei
-quizás su lápiz es muy pequeño-se burla la castaña y ambas ríen divertidas y ven por la ventana al bello orbe azúl que también las observa¿qué les esperaba en aquel sitio?
Planeta tierra:
El príncipe Endymion estaba terminando de colocarse la capa de su traje cuando su madre apareció por la puerta sin tocar.
-Hijo, luces como todo un príncipe-emocionada la mujer rubia ataviada con un bello vestido de Seda Blanco
-es porque es un príncipe, majestad -interrumpió el rubio secretario de ojos verdes- las princesas Ami y Mina han llegado ya a palacio. Las hemos instalado en sus habitaciones y las princesas exteriores han avisado que llegarán un poco más tarde por la distancia.
-¿qué pasa con la princesa de marte y mi sobrina?
-ambas princesas llegarán en la nave del planeta Júpiter y la princesa Serena no debe tardar en llegar aunque no ha preguntado por ella.
-es porque sé que jamás faltaría a un evento así. Hijo ¿por qué no aprovechamos que luces tan guapo para ir a recibir a tu prima Makoto y a la princesa de Marte?-pide la madre
-por favor hazlo tú, madre. Aún tengo que revisar las notas del discurso y sabes que no estoy para nada de acuerdo con esta fiesta.
-bien, pero te advierto que cometes un error al no venir conmigo. Andrew, por favor que no se escape. -pide la Reina
-Si, majestad-acepta el rubio y la reina sale de las habitaciones de su hijo.
-ahora ayúdame a quitarme esto
-¿qué vas a hacer? ¿No oíste a tu madre? ¿Quieres que pierda mi título? Te advierto que si lo pierdo y termino siendo un campesino y no un diplomático en otra vida te cobraré el doble cada que vayas a mi negocio por alimentarte y divertirte.
-no seas dramático. Nada de eso va a pasar; solo quiero distraerme un poco de tanto ajetreo
-llevas toda la vida escondiéndote del ajetreo
-además quiero evitar a la princesa Serena. Es tan insistente. Una vez casi logra entrar a mi estudio, es demasiado insistente
-bien. Te ayudaré pero iré contigo. Si sales solo tu madre me matará
-¿qué hay de tus títulos?
-si me desheredan, te advierto que en otra vida te succionaré el dinero como una garrapata.
-anda, démonos prisa. No quiero ver princesas herederas. Es demasiado vil que nos usen para ganar más poder.
-pobre príncipe, llorarás sobre tu cama de plumas por casarte con una chica linda. Ya vi a las princesas de mercurio y Venus y son bastante lindas pero he oído que las demás son…uyyy
-eres un enfermo, Hansford
Patio central del palacio del planeta tierra.
En la plancha central del palacio del planeta tierra aterrizó la nave de los reyes del planeta Júpiter, de este salieron un par de enredaderas que se extendieron y entrelazaron hasta formar una firme escalera de la que bajó la bella y castaña princesa de Júpiter, seguida por la delgada y pálida princesa de Marte.
-¡Reina Gea!-saluda efusiva la castaña y corre a abrazarla
-soy tu tía, solo llámame tía.-sonríe la rubia luego de recuperar el aliento- esa mirada la reconocería en cualquier lugar del universo: princesa Reiko Hino, heredera del poder de marte y la belleza de tu madre.
-gracias, majestad. Encantada.-reverencia la pelinegra
-¿por fin podré conocer a mi misterioso primo?
-más tarde, querida. Por favor ahora vayan descansar, no le digan a nadie pero les asigné las habitaciones con la vista más bella y hay algunos refrigerios.
-tía, eres la mejor. Vamos, Rei. Necesitamos descansar y…
-no le digas a tu madre pero puse tu licor favorito y chocolates en su habitación, princesa Rei
-gracias, majestad-sonríe la pelinegra. Seguramente toda esa amabilidad era para esconder la monstruosidad de su heredero. No cabía duda.
La reina del planeta tierra sonrío al ver alejarse a esas jóvenes, su corazón de madre le decía que ahí iba la futura esposa de su hijo.
Para desgracia suya, la nave color plata con el sello de la Luna apareció segundos después haciéndola salir de sus pensamientos.
-¡majestad!-saluda sonriente y efusiva tras hacer una reverencia exagerada a la reina de la tierra.
-Serena..
-Princesa, Serena, Majestad-interrumpe la sirvienta de cabellos negros y rizados a la reina de la tierra
-Luna… no creí que Serenity enviaría sirvientes para cuidar a su hija. Ninguna princesa heredera de los planetas lo hizo.
-en la Luna nos caracterizamos por tener clase, majestad- sonriente la sirvienta que acomoda el vestido de su princesa
-y muchos gastos innecesarios para ser solo un satélite.¿vendrá Serenity? Quiero hablar con ella de eso
-dijo que haría lo posible, majestad. La princesa está cansada. ¿Estarán listas ya sus habitaciones?
-claro. El personal las guiará-señala la reina.
Luna guía sonriente a la ingenua princesa y Gea niega con la cabeza. Serena es una niña tierna e ingenua pero no le gusta nada las intenciones evidentes de su prima y la consejera Luna que son más que evidentes.
Área de habitaciones de invitados en el palacio real de la tierra.
Las princesas herederas de los planetas Mercurio y Venus inspeccionaban los pasillos de palacio y a pesar de la seriedad de la princesa de Mercurio seguía la corriente a la rubia y feliz jóven.
-Mira, Amy, tienen piso de mármol de Urano.
-este piso se valua en su peso en oro-explica la muchacha de pelo azul.
-mira esos cuadros. Tienen la firma de lord Fraicoise Kaioh. Es el antepasado de la princesa de Neptuno y sus cuadros valen una fortuna-maravillada la rubia
-es correcto
-¡y estas deben ser las princesas de Marte y Júpiter! ¡ay son tan bonitas!-brinca la rubia- yo soy
-princesa Minako Ahino, heredera de Venus y la célebre e inteligente Ami Mizuno del planeta Mercurio-completa Rei-encantadas
-¿quieren ver las habitaciones? La reina Gea se aseguró de que todo sea perfecto-explica Minako abriendo las puertas de las habitaciones de las jóvenes-dejaron batas con nuestros nombres ¡son de seda!
-en verdad se lucieron con las habitaciones-apoya.Makoto.viendo una cesta con frutas en la mesa de entrada.
-todo es muy bello-apoya Rei
-bueno, nosotras las dejamos pero más tarde podríamos charlar en una de nuestras habitaciones. No hemos tenido oportunidad de conocernos bien-ofrece Mina-tengo chocolates
-encantadas entonces. Después de la cena estaría genial-ofrece Makoto y las princesas de mercurio y Venus salen dejando solas a las muchachas.-no me gusta tu cara, Rei. Algo tramas
-¿no te gustaría explorar un poco la tierra?
-¿lo dices en serio? Nos van a matar nuestros padres si nos descubren
-anda..Phobos me consiguió un mapa, podremos ir a pasear y volver para la cena-pide Rei
-ay, ya qué. Siempre te sigo en tus ideas ¿trajiste tus ropas de terrícola?
-traje un traje para cada una. Será pan comido-ofrece Rei y mete de sus maletas un par de vestidos dentro de una mochila que se cuelga a la espalda-anda, vamos
-solo porque oí que aquí puedo conseguir algunas piezas de damasco.
-y chocolates…
Makoto y Rei ríen y se las arreglan para salir sin que nadie las vea de palacio y atravesar los muros. Una vez fuera se colocan unos vestidos de campesinas al estilo terrícola. Consiguen esconder la mochila en un arbusto y escapan solo con un pequeño saco de monedas terrícolas para hacer un par de compras.
Ambas jóvenes lucen maravilladas. A excepción de la Luna que habían visitado previamente, la tierra era hermosa y prospera, podía verse en los rostros de la gente que vivían con tranquilidad y dependiendo las profesiones podían vivir holgadamente o humildemente pero jamás con hambruna como pudieron ver en su escape en la luna. Ambas chicas disfrutaron ver las tiendas y a los niños correr felices por las calles, era algo que no esperaban ver.
-¿contento, príncipe? Volvamos a palacio antes de que tus padres se den cuenta. Por favor, tú eres su hijo, a mi podrían matarme
-anda, solo un poco más. Me encanta ver a la gente disfrutar de todo-pide emocionado el joven pelinegro
-Endymion…-chilla Andrew pero su vista se pierde en una joven castaña que revisa las flores con todo cuidado y emoción, luce como un hada de las flores-madre mía…
-¿qué es lo que ves?-pregunta Endymion volteando hacia donde lo hace su amigo pero sus orbes azules no se detienen en la castaña, sino en la pelinegra que sujeta dos dagas en sus manos y las mueve con maestría mientras corta el aire con ella-increíble.
-¡disculpe, bella Señorita!-se lanza Andrew tras la castaña y Endymion lo sigue para evitar que cometa una locura.
-¡ey, ey, ey!-grita la pelinegra amenazando con el cuchillo al rubio-no te acerques tanto a mi hermana
-lo…lamento, siento ser imprudente ¿podríamos bajar las armas?-pide el rubio con la punta de la daga sobre su garganta.
-lo lamento. Mi primo es así de imprudente, jamás quiso asustarles-Se disculpa Endymion
-¿asustarnos? ¿Cree que nos asustó?-se ríe la pelinegra-solo aléjese
-no nos presentamos correctamente-sonríe Andrew a la castaña una vez libre su cuello-mi.nombre es Andrew Hansford y él es…
-Mamoru Chiba-se presenta el pelinegro-encantado
-nosotras somos Rei y Lita Miller-presenta la castaña a su amiga con el mismo nombre falso que ella.
-¿nos permitirían invitarles algo?-pide Endymion
-qué detalle. Hoy todo es gratis por el cumpleaños del principito -se burla Rei-aun así gracias
-¿y un baile?-pregunta Andrew mientras se escucha a los músicos tocar por las calles, pero en ese momento el reloj suena
-debemos irnos-explica Rei y tira de su amiga
-pero si volvemos a encontrarnos, ese baile es un hecho-ofrece Makoto que guiña un ojo al rubio.
Ambos ven a las chicas marcharse y Endymion se da cuenta que a la pelinegra se le ha caído un arete y lo recoge del suelo. Él muchacho sale corriendo detrás de las jóvenes pero comienza a llover, esto no lo detiene.
Makoto y Rei corren callejón abajo cuando la lluvia inicia y justo al estar frente a una fuente con un león en ella la marciana se detiene.
-¿qué haces, Rei?
-lluvia…
-si. Es lluvia, date prisa
-¿Sabes qué tan común es que llueva en Marte?-interroga Rei con una sonrisa
-tanto como que Serena apruebe sus exámenes con sobresaliente
-anda, Mako-chan. Baila conmigo, disfrutemos la lluvia-pide la pelinegra a su amiga y la toma de las manos a lo que está le sigue el juego. Es tan raro ver feliz a la princesa de marte que nada le cuesta seguirle el juego y reír a su lado.
Un par de minutos después, Andrew y Endymion consiguen alcanzar a las jóvenes, pero se detienen a unos metros de ellas, el espectáculo es como sacado de uno de los cuadros que hay en palacio, ambas parecen dos ninfas de la lluvia bailando al rededor de la fuente, rodeadas de risas y juegos. Ninguno se atreve a interrumpirlas y el arete… ya habrá otra ocasión de entregarle su arete a aquella misteriosa muchacha
Planeta tierra, Época Actual:
El joven de ojos azules despertó luego de aquel extraño sueño; a menudo soñaba con episodios de su vida en el milenio de Plata que no tenían nada que ver con lo que les habían contado cuando "recuperaron sus recuerdos "aquel sueño se había sentido tan real que definitivamente podía oler la lluvia entre sus manos. En su mano derecha algo lo lastimaba un poco y al abrirla se encontró con un arete de rubí en forma de estrella.que conocía de sobra.
Como tantas veces se puso su ropa deportiva y salió de casa con destino al templo Hikawa, nadie lo.sabía pero era algo que hacía a menudo, visitaba aquel sitio y entre los arbustos se conformaba con ver a la muchacha de cabellos negros en su hábitat natural…
Rei había tenido un sueño extraño, uno en el que se.cruzaba con el príncipe Endymion en el milenio de Plata mientras escapaba del castillo pero eso no podía ser posible.
Se levantó de su cama en su camisón blanco y lo hizo.con cuidado.para no.despertar a Makoto que se había quedado a.dormir para charlar de todo y de nada.
La pelinegra se asomó por la ventana y el.viento de lluvia la envolvió por debajo de sus ropas, escuchando una melodía en su Cabeza salió de su habitación para caminar descalza sobre el piso mojado y la lluvia que comenzaba a caer cálida sobre su piel de fuego luego de haber soñado esas pupilas Zafiro mirarla de esa forma, ella bailó totalmente absorta en sus pensamientos, sus ojos cerrados no se dieron cuenta que alguien estaba frente a ella hasta que chocó con un grueso torso y abrió los ojos…
-Darien…
-prometiste que la próxima vez que nos encontraramos bailarias conmigo-sonrió él y ella lo mira recordando su sueño, él abre su mano y muestra el arete de la jóven
-mi arete…pero cómo…
-¿me concede esta pieza, princesa?
-por supuesto, majestad…
Rei aceptó la mano de Darien que sujetó su talle con decisión. Si, había mil cosas que los separaban, si, era imposible estar juntos pero esa noche, solo esa noche…el bailar bajo la lluvia era un secreto que solo les pertenecía a ellos..
hola:
Me tomé un pequeño descanso de escribir mis fics en emisión para participar en el flufto er y lanzar esta historia corta que en un inicio solo.iba a ser un oneshot pero al.final se hizo una historia corta pero muy coqueta. trabajo en el capítulo final así que será una semana de un capitulo diario para contarles esta pequeña historia que espero les guste tanto como a mi.
¡feliz Octubre!
la maga del Mal
