Harry no sabía que así sería el infierno.
Cuando fue a ese bosque, cuando acepto su destino y el rayo verde lo impactó no imagino ni remotamente que se encontraría con esto.
Muchos pensarían que es un tipo de alivio observarlos, y estar con ellos, pero ahora no hay nada peor que esto.
¿Así se sentian sus padres toda su vida al observarlo? No quiere una respuesta a eso.
Harry se dió cuenta que fue muy joven para ver la verdad, que ingenuo.
Nada es sencillo para el, nisiquiera muerto.
Lo supo cuando lo vio, su Draco.
El no lloro cómo los demás, ni se unió en el frenesí del terror por su muerte en pleno salón.
No. Draco solo lo observó fijamente.
Cómo si nada de lo que estaba pasando fuera real, no podría hacerlo.
Y se sentó en el suelo a esperar.
Harry no sabe qué, pero se sienta a su lado mientras se taba los oídos tratando de ignorar los gritos de dolor de sus amigos.
No sabia, que esa tranquila mirada de Draco era un presagio de algo mucho peor.
El falló.
De nuevo, le fallo a tantas personas, le fallo a su corazón.
Es un sentimiento irreal estar en tu propio funeral, ver personas que jamás conociste llorando como si su alma se fuera en ello, se le rompió el corazón ver a sus amigos destrozados despidiéndose de su cadáver sin vida.
Trata de buscar a Draco todo el tiempo.
Él no se ofende, sabe lo difícil que debe ser ir a ver a tú novio muerto tan repentinamente.
No lo culpa, encuentra cierto alivio de no verlo derrumbarse no Él.
Harry no cree soportarlo si lo hiciera.
Pero lo hizo, de alguna manera el salón estaba completamente vacío y cuando Harry volteo a verlo casi se cae de espalda por la expresión de su rostro, Draco parecía simplemente nada, cómo si un vértice se tragara todo su ser y fuera un simple recipiente y nada más.
Y eso dolió más que todas las lágrimas que presenció hoy.
Se acercó a su ataúd y le acaricio con infinita ternura su rostro memorizar cada centímetro, hay algo en la pequeña sonrisa que aterrorizó por completo a Harry, tiene un mal presentimiento.
Harry no pude evitar gritar, y sabe que es inútil pero simplemente no puede hacer nada.
— Draco para, no te hagas esto a ti mismo, podrás resistir esto soportaste al maldito de Voldemort en tu propia casa solo tomate lo que necesites y sigue tú camino, eres un sobreviviente Draco Malfoy y me sobrevivirán.
Pero Draco no escuchó, se inclinó y le dio un suave beso en la frente mientras le susurraba.
— Eres un cobarde Harry Potter, me prometiste que volverías y ahora soy yo quien te busca sin parar sin encontrarte, por ahora.
No no no no.
Draco no hagas esto, porfavor porfavor.
Debes vivir, hice lo que hice para que pudieras ser libre, que todos lo estén.
Harry sollozó violentamente.
Ahora, ¿cómo se supone que salva a su Dragón si fue el mismo que lo destruyó?
Él no tiene a nadie, está completamente solo.
Y Harry rompió cada una de sus promesas al morir.
— L'amour m'a toujours fait respirer, mais ce même amour m'a détruit. Et quelle belle façon de mourir que de t'aimer Harry Potter, je t'aime tellement mon beau Léon.
Y con eso se fue y sintió frío, llevándose consigo la poca calidez que habitaba en el salón.
Harry de manera distante sintió lágrimas en su rostro se cubrió con sus manos su voz se quebró cuando intentó un último intento de llamar a Draco y se sintió que en efecto, está en el infierno.
Sólo pudo rogar por una cosa, que Hermione encontre su carta y ayuda a Draco.
Pronto, antes que sea demasiado tarde.
Y Harry se dispuso a seguirlo.
No se rendirá, por él nunca.
