Hola a todos, lamento la tardanza con este en particular, pero hubo algunos proyectos que tenía que atender sí o sí, por lo que avanzaba muy a marchas forzadas aquí. Igualmente sigo vivo, acabo de descubrir que tengo una ligera adicción al chicle pero todo bien, seguiré escribiendo para traer más capítulos pronto (Y sí, corregir los capítulos en Wattpad pronto).
Sin Más, LET'S READ
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Capítulo 61: Papás
Puedo sentir que ella está a mi lado, tratando de encogerse tanto como físicamente le sea posible a una potra de su edad.
Ambos, por petición de la psiquiatra infantil, terminamos haciendo una "rutina para la recuperación". En resumen, es una lista de pendientes por hacer que involucran muchas cosas que para los ecuestres jóvenes debería ser algo regular hacer con familiares.
La lista comprende cosas simples como dar paseos, comprar comida, ver un espectáculo callejero y, en resumen, una larga lista de la que tenemos que arreglárnoslas para hacer la mayor cantidad de tareas posible antes del fin de semana, donde tendremos que reiniciar la lista y establecer la rutina para ayudar a Little Sun a lidiar con sus muy evidentes traumas.
Actualmente estamos haciendo una de las tareas: Sentarse en una banca del parque por un rato.
Supongo que quizás esto debió haberlo hecho Sweet Care, ya que para algunos ponys en este lugar sigo siendo una criatura extraña, por lo que atraigo mucho la atención. Atención misma que tal vez mi pequeña acompañante no está disfrutando en lo más mínimo.
Juaxen - ¿Deberíamos volver al castillo por hoy?
Le pregunto a la potranca que se acurruca bajo mi gabardina en un intento de pasar tan desapercibida como le sea posible.
Little Sun - Creo... que será lo mejor.
Me levanto suavemente para que ella me suelte, un proceso que en mi cabeza tendría todo el sentido del mundo, pero aparentemente Little Sun tiene otras ideas, pues apenas nota que me muevo un poco, ella de inmediato tira de mi gabardina, devolviéndome a mi asiento.
Juaxen - Ah... ¿Little Sun? Creo que debo moverme...
Digo intentando que ella me suelte. Sin embargo, sus ojos temerosos solo me hacen pensar en que quizás ni siquiera puede procesar lo que le he dicho.
Little Sun - L-lo siento... Creí que me dejarías sola.
Sus palabras me parten un poco el alma, haciendo que deba suspirar con pesadez mientras miro un poco a mi alrededor antes de poner mi mano sobre su cabeza, acariciándola en un intento de aligerar sus pensamientos.
Ella luce ligeramente relajada en cuanto paso mi mano por su melena, la sensación es suave, aunque en ciertos movimientos noto como su pelaje se pone algo áspero. Supongo que debido a que recién ha empezado a poder volver a lavar su crin regularmente.
Mientras distraigo a la pequeña con mi tacto me giro para ver el resto del lugar. Un paisaje bien iluminado, que permite sentir el calor matutino del sol, así como ver a algunas otras familias jugando, haciendo sus propias rutinas a través de los espacios verdes, decorados naturalmente con algunos arbustos florales o árboles jóvenes que crecen sin molestar a nadie alrededor del parque.
Little Sun - A veces pienso en el humano que me salvó...
Juaxen - ¿Ah sí?
Pregunto mientras uso mi pulgar para frotar su frente cuidadosamente mientras ella asiente ligeramente, viéndose mucho más calmada ahora.
Little Sun - Sí... ¿Crees que podré encontrarlo alguna vez?
Me pregunta logrando que salga una pequeña sonrisa en mi rostro y revuelva un poco su melena.
Juaxen - Bueno... no será fácil. Pero es posible que sí, así que si te esfuerzas lo suficiente creo que podrás encontrarlo.
Mis palabras parecen reconfortar un poco su pequeño deseo ligeramente infantil. Ella se desprende un poco de mí cuando parece algo envalentonada por nuestra última interacción. Lamentablemente, el sonido de un potro cayendo contra el suelo parece llamar negativamente su atención.
Frente a nosotros un pequeño potro que paseaba con sus padres se ha tropezado con una piedra, lastimándose un poco en el proceso. Sin embargo, por la repentina tensión en mi gabardina puedo darme cuenta de que el llanto fútilmente tranquilizado por los padres está haciendo que mi propia potranca empiece a sentirse mal.
Sus ojos están fijos en el pequeño en el suelo, su expresión es de un paranoico terror como si esperase a que de pronto viniera alguien a tratar de silenciar los llantos del potro por la fuerza.
Juaxen - Ven, vámonos.
Digo finalmente mientras tomo a Little Sun entre mis brazos, cargándola lejos de la escena. Su peso es realmente ridículo, apenas los suficientes kilos como para que lo note. La sensación me enerva la sangre y me empieza a hacer sentir enfermo.
Pareciera que, al menos por mi altura, ella no está acostumbrada a que la carguen, por lo que su primera reacción naturalmente es la de temblar suavemente entre mis extremidades superiores.
Juaxen - Sabes... Yo también perdí a mi familia.
Little Sun - ¿En serio...?
Miro al frente perpetuamente, tratando de no conectar miradas con la pequeña en mis brazos.
Juaxen - Fue... bastante difícil para mí en su momento. Tal vez incluso ahora lo es.
Mis pasos comienzan a guiarme hacia lo que creo que es un pequeño puesto de helados. Bajo suavemente a la pequeña y consigo ver en la expresión del tendero una sorpresa e incluso miedo a mi figura. Tanto que por casi un minuto solo se dedica a verme sin preguntar mi pedido.
Pido cualquier cosa una vez el pony me dirige la palabra. Y levanto un poco a Little Sun para que ella escoja su propio helado del mostrador. La sensación es algo extraña, al menos para mí. Su pelaje se siente suave en mis manos desnudas, puedo incluso sentir algunas de sus cosillas bajo su piel, logrando que recuerde por qué quise hablar de mi familia tras tantos años.
Cuando ella hace su pedido y pago con algunas de las monedas que Sweet Care ofreció darme para esto, solo puedo volver a levantar a la pequeña, ahora con un brazo para poder usar mi mano para sostener un helado de un color tan inusualmente azul que perfectamente podría pensar que es demasiado químico para que mi sistema lo soporte.
Llevo cargando a la pequeña potra en mi brazo, pensando en cómo poner en palabras lo que planeo decir, ella trata de estar atenta, pero lentamente puedo empezar a notar su impaciencia infantil comenzar a ganar terreno en su mente. Tras un minuto, ambos estamos sentados en una banca sobre el camino. El sol sobre nosotros comienza a permitir que nuestros helados se derritan, obligándome a comer un poco de él antes de hablar.
Juaxen - Mis padres... creo que ellos llevarán por lo menos unos diez años que se fueron. Una enfermedad grave que no tiene cura acabó con ellos.
Menciono mientras ella come un poco de su helado, haciéndome sonreír pesadamente antes de mirar el mío.
Juaxen - Yo... iba a tener un hijo también pero... bueno, ocurrieron algunas cosas muy, muy malas.
Digo sintiendo un fuerte dolor en mi pecho al intentar recordar aquello, viendo fugazmente sombras oscuras del pasado antes de sentir un pequeño casco acariciar mi brazo, haciendo que me gire para verla.
Little Sun - Lo lamento mucho.
Sus palabras se sienten bastante tranquilizadoras, incluso para ser solo una niña. Su expresión está consternada, como si tratara de ayudar en todo lo que pudiera sin saber como empezar. A su expresión solo sonrío un poco para entonces acariciar su cabeza una vez más.
Juaxen - Gracias, y no te preocupes, sé que Twilight encontrará a tus familiares, y yo con suerte sea capaz de encontrar a más humanos en algún lugar de Ecuestria.
Ella sonríe ampliamente mientras continua comiendo su helado, permitiéndome ver en la distancia a quien unicamente puedo identificar como Darkness acercándose al cine de Ponyville, haciéndome levantar una ceja en el proceso, aunque estar con Little Sun me parece algo mucho más productivo que acercarme a hablar con él.
