Naruto Zarya
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Este año en lo personal y lo laboral ha sido complicado. Me gustaría decir que esto marca mi regreso con regularidad a los fics, pero ya no estoy seguro… Quisiera acabar el año con otra actualización, pero siendo honesto, no sé si me sea posible. Espero que 2024 ya no me dé más desarrollo de personaje.
En fin, pasamos a los reviews:
CCSakuraforever
Naruto logró vencer a Orochimaru por fin, pero Diva lo tenía todo planeado ya que es una asesina de sangre fría y ahora todo se pondrá feo para nuestros héroes y bueno, se viene un momento clave en la historia.
dragon titanico
Ya vamos en la parte final. Últimamente he tenido problemas para conectar el sitio, pero ahora proveché para actualizar.
Ahora vamos al fic:
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LIII
Espíritu indomable.
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Diva se mostraba boquiabierta. Parpadeó incrédula al ver que su trampa mortal no había concluido con su labor debido a la intervención de Azula.
— ¡Azula! —Touma exclamó hacia la esfera de siniestro fuego carmesí—. ¡¿Estás ahí dentro?! ¡¿Cómo se encuentran?!
— ¡Naruto y yo estamos bien por el momento! —La castaña se mostraba firme, aunque en su cara el sudor comenzaba a escurrir abundante por el tremendo calor dentro del fuego.
— ¡¿Cómo te diste cuenta de la trampa?! —Cuestionó Shiryu, expectante.
— ¡Desde que acabó el combate estuve a la expectativa!— Contestó la castaña menor, apretando los dientes como señal clara del esfuerzo que estaba haciendo—. Si bien podíamos confiar en Iron Courtain y Orochimaru… ¡Con el infeliz de Nubes es distinto!
«A-Azula…» El Sannin se mostró sorprendido.
La Sombra Sangrienta no tardó mucho en recuperar aquella sonrisa discreta y burlona luego de reponerse de la sorpresa. Se cubrió la boca con la mano derecha y luego lanzó una risilla sutil.
— Felicidades por el movimiento, pequeña Azula… Aunque tu jugada no fue tan buena como piensas… —La azabache se desvaneció, llamando la atención de Shiryu.
«¿Por qué no se quedó?» Pensó intrigado el Caballero del Dragón. «¿No terminará con su trampa?»
— ¡Aaahhhh….!
El grito de Azula llamó la atención de todos, que de inmediato regresaron la atención hacia la esfera de llamas, que continuaba con el flujo de fuego.
— ¡¿Qué pasa, Azula?! —Touma estaba realmente consternado.
— ¡Maldita sea…! La chica cerró su ojo derecho como señal del tremendo esfuerzo que estaba haciendo para detener las llamas—. ¡No podré sostenerlo por mucho tiempo más! ¡Sáquennos de aquí…!
Poco a poco, en el interior de The Withered Lover, el pilar de fuego Gouka le iba ganando terreno al Hyouton de una Azula claramente consternada por saber que no estaba muy lejos de su límite y apretaba los dientes, tratando de sacar fuerzas de su interior para continuar resistiendo.
— ¡Está bien! —Rimururu dio un paso al frente, para sorpresa de los primeros alumnos de Ryu—. ¡Vamos Konril! —La criatura se posó delante de la Daimyo mientras ella realizaba una secuencia de sellos de mano—. ¡Hyouton: Upun Opu (Elemento Hielo: Upun Opu)…!
De inmediato la princesa colocó sus manos con las palmas al frente delante de Konril, que se convirtió en una especie de espejo de hielo, del cual surgieron cientos de estacas de hielo que impactaron contra la trampa infernal de Diva. Shiryu y Touma se mostraron discretamente sorprendidos porque aquella criatura era capaz de sincronizarse con el Chakra de Rimururu y darle un aumento considerable de poder…
Pero para sorpresa de los tres, luego del intenso bombardeo de cientos de estacas de hielo contra ese fuego abrasador, no ocurrió nada y los fríos proyectiles simplemente se derretían al contacto, como si las flamas no recibieran ataque alguno.
— ¡No puede ser! ¡Mi Hyouton no tiene ningún efecto! —La castaña se mostró consternada ante la inutilidad de su ataque.
— ¡¿Por qué no funcionó?! —Artemis alternó su vista entre el fuego y su amiga—. ¡Azula puede contener ese fuego con su Hyouton!
— Incluso teniendo mi Kekkei Genkai, hay demasiada diferencia entre mi control de Chakra y el de Azula… —Rimururu apretó los dientes, impotente—. Ahora que Azula está atrapada ahí, será imposible extinguir esas flamas con Ninjutsu desde afuera…
La Daimyo, el Arquero y el Caballero se limitaron a observar con creciente desesperación la trampa de su enemiga…
…
Nubes miraba a través de la enorme esfera de cristal la crítica situación en la que se encontraban Naruto y Azula, ya que al parecer sería sumamente complicado escapar de la trampa, si es que eso en realidad era posible.
— Regresaste demasiado rápido para la forma tan precipitada en la que te marchaste para atrapar a Naruto… —El Rey Dragón Demonio orientó su mirada hacia la Sombra Sangrienta, que recién había aparecido cerca de él.
— Bueno… —Diva sonrió de forma sutil, mirando a su líder y creador—. Creo que no fui la única que se puso en alerta luego de ver la batalla entre Naruto y Orochimaru, ¿cierto?
Nubes se limitó a ver de forma fría a su creación.
— Primero fue ese impresionante Hadou Shouryuken y luego esa bestialidad de Jutsu, el Shinpuuryuken… Naruto-kun realmente ha desarrollado dos Jutsu que ni siquiera podrían soñar los humanos en apenas unos días y no debemos olvidar que además de ser hijo de Shirona-sama y el Yondaime Hokage, ha demostrado un crecimiento individual sin precedentes… ¡Ese niño es una bestia que no para de crecer! Por eso debemos encargarnos del problema antes de que se salga de nuestras manos… —Se arrodilló respetuosa frente al Rey de Dos Mundos—. Disculpe mi atrevimiento, Nubes-sama…
— Je, je, je… Está bien, Diva… —El peliazul lanzó una risilla—. Aunque haya desarrollado esos dos Jutsu, no perdería nunca contra Naruto… Pero debo admitir que el que pudiera desarrollar esos dos ataques, sí me impresionó y si muere en esa trampa, no me importaría…
— Es por eso que regresé, Nubes-sama… Como sabe, cada una de las trampas de mi Black Zodiac son verdaderas obras de artes en cuanto al asesinato se refiere… —Una mirada tétrica se hizo visible en el rostro de Diva—. Ver a mis presas luchando contra la desesperación así como una polilla en medio de las llamas, es algo que no puedo disfrutar si tengo que estar vigilando mis infalibles trampas… Naruto-kun ya está condenado y como extra, la pequeña Azula decidió entrar también.
— Ya veo… Ahora que estás aquí, a esos tres solo les queda intentar sacar a esos dos desde afuera… —Nubes regresó su atención hacia la esfera.
— Y ambos sabemos que eso es imposible con la pequeña Azula ahí dentro…
El Rey Dragón Demonio y la Sombra Sangrienta no pudieron evitar sonreír al darse cuenta de que tenían esa victoria en sus manos.
…
— ¡Khhh…! —Poco a poco, la princesa de la Nación del Fuego comenzaba a encorvarse por el enorme esfuerzo que estaba haciendo.
— ¡Azula…! —Naruto miraba a su amiga, incapaz de levantarse debido al agotamiento extremo que tenía.
— ¡Naruto, Azula…! —Rimururu estaba realmente angustiada ante la impotencia de no poder hacer nada por sus amigos—. ¡¿Qué podemos hacer?! —Volteó a ver a un Touma que permanecía serio, mirando con frialdad hacia la esfera de llamas carmesí—. ¡Si no hacemos algo pronto, ellos dos van a…!
— ¡Ambos, háganse a un lado…!
El Arquero y la Daimyo voltearon hacia atrás para encontrarse a Shiryu con los puños cerca de la cintura, en la posición conocida para realizar el más poderoso de sus ataques, con su aura esmeralda rodeándolo como señal evidente de que estaba elevando su Cosmos hasta su límite máximo…
— Rozan Hyuka Ryu-ha… —Murmuró atónito el peliazul.
— ¡Esa trampa no se destruirá con un ataque cualquiera! —Replicó el Caballero del Dragón mientras sus amigos le daban espacio para apuntar libremente hacia la trampa de Diva—. ¡Así que usaré mi ataque más destructivo a su máxima capacidad!
— ¡Azula! —Touma gritó hacia las llamas carmesí—. ¡Shiryu va a usar el Rozan Hyaku Ryu-ha para destruir la trampa! ¡Tengan cuidado!
— ¡¿Qué?! —La aludida replicó de inmediato—. ¡¿Cómo diablos voy a tener cuidado?! ¡Tengo las dos manos ocupadas y Naruto no se puede mover! —Claramente se escuchaba preocupada.
— ¡Tendrán que prepararse para el impacto, Azula! —Shiryu echó sus brazos hacia atrás para liberar su aterrador Jutsu—. ¡Rozan Hyaku Ryu-ha…!
De las manos de Shiryu surgieron los cientos de dragones de Chakra a una velocidad extraordinaria hacia la trampa de Diva, chocando contra el fuego carmesí y finalmente detonando en una explosión luminosa que encegueció a todos en el lugar mientras que un pilar resplandeciente de tono esmeralda se elevaba hacia el cielo, siendo visible incluso desde la superficie de la tierra, resquebrajando el piso del área al instante y elevándolo hacia el cielo en forma de pequeños trozos de roca…
El azabache miraba expectante el resplandor, que no se disipó de inmediato… Pero la incredulidad se apoderó de su rostro una vez que pudo ver el resultado de su ataque.
No había resultado. La trampa continuaba intacta ante la creciente desesperación de Shiryu, Touma y Rimururu…
— No puede ser… —Shiryu empezó a respirar agitado, negando estupefacto con la cabeza.
— ¡Shiryu…! —Touma corrió al instante a ayudar a su amigo, ya que después de librar su ataque le costaba trabajo permanecer de pie.
— P-Pudo resistir el Rozan Hyaku Ryu-ha… No puedo creerlo… —El Caballero del Dragón trataba de controlar su respiración. «E-Entonces Diva se fue porque…»
— ¡Oigan! ¡¿Qué pasó?! —Azula gritó desde el interior del fuego—. ¡Solo hubo una luz, pero no ha pasado nada aquí adentro…!
Las palabras de la castaña menor solo sirvieron para aumentar la creciente impotencia de los tres que seguían libres…
…
— Se lo dije, Nubes-sama… No hay mejor espectáculo que este, ver morir a la escoria poco a poco mientras sus aliados se dan cuenta de que no tienen escapatoria.
Nubes sonreía de forma casi imperceptible ante la escena… Pero la expresión de lúgubre placer de Diva, con sus dejando ver el éxtasis, entrecerrados con deleite ante la desesperación e impotencia de Shiryu, Touma y Rimururu, era una siniestra del placer que estaba sintiendo al ver que el Equipo Ryu simplemente no podía hacer nada contra su trampa…
— Admito que lo estoy disfrutando… —El Rey Dragón Demonio cerró los ojos—. No obstante, para nada se compara con el deleite que debes estar sintiendo ahora, Diva… No cabe duda de que eres la existencia más cruel de este planeta…
…
— ¡Naruto! ¡Azula…!
Rimururu gritaba angustiada ante la visión desesperanzadora de The Withered Lover, puesto que poco a poco, la esfera de fuego se compactaba ante la impotencia de los tres.
— ¡¿Qué podemos hacer, Touma?! —Volteó a ver al Hashiba, quien le ayudaba a Shiryu a mantenerse de pie—. ¡¿Cómo podemos ayudarlos?! —Artemis miraba angustiado cómo su amiga levantaba la voz—. ¡Si no hacemos algo, ellos morirán y nosotros sólo podremos ver…!—. El aludido miraba de nuevo hacia el fuego, con expresión seria—. ¡¿Me estás escuchando…?!
— No hay forma de ayudarlos… —Rimururu enfocó su mirada incrédula en el azabache, quien se acuclilló bajando la cabeza.
— Shiryu… ¡¿Cómo puedes…?!
— Touma lo dedujo antes que yo, por eso no te responde, Princesa… Desde aquí afuera no hay nada que nosotros podamos hacer… —Shiryu cerró los ojos con fuerza.
— P-Pero…
— El Rozan Hyaku Ryu-ha no funcionó y es el poder del Cosmos llevado más allá de los límites como un ataque concentrado en cientos de impactos —Replicó Touma, con sepulcral tranquilidad—, lo que solo puede significar que esa maldita trampa tiene la capacidad de resistir cualquier tipo de ataque que no sea usando Ninjutsu elemental… De no ser así, Shiryu habría podido destruirla…
— Diva estaba consciente de eso, por eso se marchó… —Complementó el Caballero del Dragón—. Y si no podemos destruirla por fuera, la única forma de sacarlos de ahí sería forzar a Diva a desactivar su trampa… ¡Por eso se fue! —Shiryu golpeó el suelo con su puño derecho, incrustándolo varios centímetros—. Ya no tenemos tiempo para ir tras Diva, porque seguramente debe estar en el corazón del palacio con Nubes y a Azula no debe quedarle mucho tiempo… ¡Esa desgraciada nos ha dejado sin posibilidades!
«Con Naruto y Azula ahí dentro, no podemos usar Ninjutsu elemental con la fuerza necesaria para extinguir las llamas desde aquí…» En ese momento, la Daimyo sonrió de golpe—. ¡Eso es! —Volteó a ver a Touma—. ¡Puedo volver a usar la Luz de los Cinco Colores con tu ayuda y la de Shiryu para disminuir el poder de las llamas!
— No servirá de nada, princesa…— Replicó inexpresivo el peliazul.
— ¿Qué?
— No olvides que Serpentera ya está bajo la influencia de la Luz de los Cinco Colores… Si utilizas un Jutsu como la Luz de los Cinco Colores en un área que ya está afectada por el mismo, la segunda ejecución no tendrá efecto alguno, solo será un desperdicio de Chakra…
— P-Pero entonces… ¡¿Cómo puedes estar tan tranquilo?! —Rimururu, presa de la impotencia, encaró molesta a Touma—. ¡¿No estás preocupado por ellos?!
— ¡Claro que lo estoy! —Replicó el arquero perdiendo la compostura, claramente furioso—. ¡Mi novia y uno de mis mejores amigos están ahí dentro! —Se calmó de golpe, regresando la atención a la trampa—. Pero en este momento, es cuando más sereno debo de estar, porque si pierdo la cabeza, podría dejar pasar algún detalle que podría ser clave para ayudarlos…
— L-Lo siento… Discúlpame, Touma… —Murmuró avergonzada la castaña.
— No importa. —Replicó inexpresivo el peliazul.
«Princesa…» Shiryu miró de reojo a la castaña que apenas podía contener el llanto. «Si Touma y yo fuéramos capaces de afectar esa maldita trampa, Diva no se habría ido de aquí…»
…
— ¿Oíste eso, Naruto? —Azula apretaba los dientes mientras hablaba—. Al parecer ya no tenemos esperanzas…
— Maldición… —Arrodillado junto a su amiga, Naruto miraba su mano derecha, la cual temblaba de forma involuntaria—. Si tan solo pudiera moverme bien…
«Esto está muy mal…» Azula entrecerró la mirada, mientras el sudor recorría abundante su rostro. «No podré aguantar el Hyouton por mucho tiempo, porque no lo he practicado como hubiera deseado… A este paso, pronto mi Chakra se agotará y las llamas nos acabaran… Además, no pueden hacer nada desde allá afuera…» Abrió los ojos de golpe a toda su capacidad. «E-Eso… ¿Eso significa que este es el final?»
— ¡A-Azula! —Naruto volteó a ver a su amiga, que ya casi estaba arrodillada.
— ¡Lo siento, Naruto…! —Replicó la chica, visiblemente agotada—. ¡Intenté hacer algo! Di lo mejor… ¡Pero no fue suficiente! ¡Creo que hasta aquí llegamos!
— Azula… —El rubio observó con pesar a su amiga.
— ¡Maldita sea…! —Con los ojos cerrados, la chica estaba llegando al límite de sus fuerzas.
— ¡Imbécil…!
Confundida, la castaña volteó hacia el lado contrario de donde estaba Naruto, para encontrarse con la visión de Orochimaru tendido bocabajo, mirándola con clara molestia, apretando los dientes mientras que de su cuerpo surgían pequeños hilos de polvo que se elevaban al aire por las llamas.
— ¡¿Acaso esa es la actitud que debe de tener un alumno de Akahei?! —Orochimaru encaró a Azula.
— ¡¿Qué dijiste?! Azula se molestó claramente por esas palabras.
— Si mueren en este lugar… ¡Ryu se avergonzará de ustedes en el otro mundo!
— ¡¿Qué…?!
— L-Los… Los alumnos de Akahei, a los que yo enfrenté llevando mi vida al límite… Esos guerreros de corazón indomable y voluntad inquebrantable son capaces de lograr milagros en los momentos más críticos…. —El Sannin apoyó sus manos en el frío piso de Serpentera—. ¡¿Esa no es su arma más poderosa?! —Las palabras del Rey Serpiente dejaron sorprendidos a los dos últimos alumnos de la pelirroja.
— O-Orochimaru… —Murmuró sorprendido el Namikaze.
— Este infeliz mató a Ryu-sensei y ahora sale con eso… —La furia en el rostro de Azula dio paso a la sorpresa. «Es como si Ryu-sensei en persona nos estuviera hablando…»
— Si están en problemas, piensen en algo… ¿O acaso van a morir por vencer a un andrógino miserable como yo?— Naruto asintió a las palabras de Orochimaru.
«Kh…» Azula cerró los ojos. «Ahora el enemigo no está enseñando lo que significa ser alumnos de Ryu-sensei… Él lo entiende mejor que nosotros…» Apretó los dientes con fiereza. «¡Él lo comprende a la perfección…!» La chica comenzó a erguirse—. Es verdad, yo debo… ¡Debo luchar hasta el fin!
El rubio ahogó una expresión de sorpresa cuando vio que el Emblema en el pecho de Azula comenzaba a brillar de forma intensa ante la discreta sonrisa del Sannin. La castaña finalmente pudo reincorporarse por completo, mientras el flujo de Chakra Hyouton surgido de sus manos recuperaba la intensidad del comienzo…
«Azula recuperó la esperanza…» Naruto parpadeó asombrado.
«Bien, ya estoy de vuelta… ¿Ahora qué?» Decidida, miraba al frente. «Naruto no puede moverse, desde afuera no pueden hacer nada y yo estoy fija aquí… Si igual no tenemos alternativa, la situación no cambia mucho… ¿Qué podemos hacer?»
En ese momento, Azula levantó la mirada en busca del alguna posibilidad… Y entonces, mientras su Chakra contenía las temibles llamas Gouka, notó que el fuego surgido de los ocho pilares que generaba The Withered Lover se unía en el centro, varios metros sobre su cabeza, para descender con el fin de acabar con ellos…
— ¡Eso es…! —La princesa de la Nación del Fuego exclamó, llamando la atención de todos dentro y fuera de la trampa de Diva—. ¡Ahí está la única salida!
— La única… ¿Salida? —Naruto repitió confundido aquellas palabras.
— ¡Naruto! —Azula volteó a ver a su amigo—. Sé que estás agotado por completo y apenas puedes moverte, pero… ¿Eres capaz de realizar un Jutsu?
— Creo que puedo hacerlo, pero no creo que sirva ahora… —Replicó el Namikaze, confundido—. Además, ya casi no tengo Chakra…
— ¡No necesitas mucho Chakra, porque es un Jutsu muy simple! —Contestó seria la castaña—. Undoufuujin…
— Espera, ¿qué?
— Realizas el Undoufuujin y sales disparado hacia arriba…
— Si hago eso, me estrellaré en las llamas y terminaré rostizado… —Temeroso, Naruto miraba el flujo indetenible de fuego Gouka.
— No te preocupes, en ese momento no habrá ningún obstáculo… ¡Porque te abriré paso con el Mesatsu Souzou! —La chica sonrió decidida.
— ¡Ahora entiendo! —El rubio golpeó su mano izquierda con su puño derecho.
— ¡Sí! —Azula asintió con creciente entusiasmo—. El Mesatsu Souzou es el Ninjutsu más poderoso de todos y puede abrirse paso por lo que sea… —Orientó su mirada hacia la cima de la mortal trampa de fuego—. Diva dijo que los pilares de fuego se reúnen en el centro para concentrarse, ¿verdad? Entonces si disparo el Mesastsu Souzou hacia ese centro, el pilar de fuego se separará y ese momento lo aprovecharemos para huir… —Se enfocó decidida en Naruto—. Entonces, yo me quedaré sin Chakra y haré un último movimiento para alcanzarte antes de que realices el Undoufuujin, ¿Entendido?
— ¡De acuerdo! —Replicó el rubio, atento.
En ese momento, los dos recordaron a Orochimaru y voltearon a verlo, quien a su vez los observaba expectante. Desviaron la mirada al pensar que el destino del Sannin sería morir calcinado en ese infierno…
— ¿Ya encontraron la forma de salir? ¡Dense prisa! —Jaou endureció la mirada—. ¡No me digan que a éstas alturas se van a preocupar por su enemigo!
Azula cerró los ojos por un momento y luego orientó la cabeza hacia el frente.
— ¡Touma, Rimururu, Shiryu…! —Los tres se enfocaron en la esfera de fuego luego de escuchar la voz de la castaña menor—. ¡Vamos a intentar una última cosa! ¡Pidan por nosotros!
— ¡Azula! —El Samurai Trooper rompió su estatus de seriedad para sonreír optimista.
— ¡Aquí vamos…!
La chica cortó su flujo de Hyouton para liberar sus manos y empezar el Mesatsu Souzou. No obstante, apenas interrumpió su Chakra, el flujo de las llamas Gouka se dirigió a toda velocidad hacia ellos con toda la fuerza que llevaba acumulada, lo que obligó a la chica a romper la formación de los Chakra Ying y Yan para liberar de nuevo el Chakra frío para contener las llamas carmesí…
— ¡Azula…! —Naruto observó contrariado a su amiga, quien a su vez se mostraba consternada.
— ¡Maldición! —La castaña exclamó, afligida—. ¡El fuego está acumulándose desde que lo detuve y apenas corte el flujo de Hyouton, caerá sobre nosotros con toda su fuerza…!
Orochimaru miraba desde el suelo el desesperado intento de esos dos chicos por salvarse. Recordó cómo se burló de Azula por acabar con las vidas de Itachi y de Ryu, con clara culpabilidad, dándose cuenta de lo mucho que había cambiado desde esa versión de sí mismo: cruel, ventajosa y miserable… Agachó la cabeza, apretando los dientes.
— ¡¿Qué podemos hacer?! —Gritó desesperada Azula al no poder responder su propia pregunta.
«Erica, Alphonse, Bisharp, Mercurymon, Machina… Quiero ayudarlos, pero ya estoy al límite y mi cuerpo ya no me responde… Es por eso, que le pido humildemente…»
¡Préstenme la enorme fuerza de sus almas para ponerme de pie…!
Naruto y Azula vieron con incredulidad cómo el agonizante Orochimaru pisó firme con su pie derecho para levantarse de golpe y levantar sus manos con las palmas hacia arriba, liberando su propio Chakra Gouka con una fuerza superior al Hyouton de Azula y tomando su lugar para contener el temible infierno de la trampa de Diva…
— ¡Ésta es tu oportunidad, Azula…! —Bramó el Rey Serpiente mientras varias grietas se extendían por toda su anatomía de Quimera Parca, comenzando a desprenderse pequeños pedazos de todo su cuerpo—. ¡Aprovéchala!
«O-Orochimaru está…» El atónito rubio miraba a su amargo enemigo usando lo poco que le quedaba de vida para ayudarlos.
— ¡¿Qué es lo que estás haciendo?! —Azula volteó a ver al Sannin al notar que su Hyouton junto con el Gouka del sujeto al que más odiaba, eran capaces de hacer retroceder ligeramente el fuego de The Withered Lover.
— ¡Eso no importa, yo quiero hacerlo! —Replicó el demonio—. ¡Ejecuta tu Jutsu!
— O-Orochimaru… —La chica estaba tan estupefacta como su mejor amigo.
— Entregué todo mi ser para poder tener este combate… —Las grietas en su cuerpo se iban extendiendo poco a poco en todas direcciones mientras apretaba los dientes—. Y no dejaré… ¡No dejaré que la maldita trampa de Diva lo arruine…! —Sus articulaciones comenzaban a colapsar—. ¡Este es el esfuerzo final de Iron Courtain! —En medio de su agonía, la Quimera Parca le sonrió a la chica—. ¡Date prisa y salva a tu amigo…!
De inmediato la aludida cortó su flujo de Hyouton para preparar los dos Chakra particulares de su Jutsu definitivo y rápidamente preparó el Mesatsu Souzou, apuntando hacia el pilar de fuego producto de los ocho flujos originales, mientras Orochimaru cerraba sus ojos y apretaba los dientes para concentrar todo su ser en el Chakra que contenía la trampa mortal…
— ¡Naruto! —La castaña estaba lista para liberar su Jutsu—. ¡Vamos a hacerlo!
— ¡Sí! —Replicó el Namikaze, endureciendo su expresión.
— Kh… —El pelinegro abrió los ojos de golpe—. ¡Ahoraaaaaaa!
— ¡Mesatsu Souzou…!
La flecha de Chakra resplandeciente se dirigió de golpe hacia el fuego, abriéndose paso para finalmente emerger de la esfera de llamas carmesí, ante la mirada sorprendida de Shiryu, Touma y Rimururu…
«¡El cielo…!» Naruto de inmediato reaccionó a la visión del cielo azul de la mañana.
— ¡Rápido, Naruto…! —Gritó el Rey Serpiente a todo pulmón—. Ahhhh… ¡Gaaahhhh!
Luego del sonoro grito, se formó una grieta en la mejilla de Orochimaru mientras su brazo derecho y su pierna izquierda se partían por la mitad a la altura del codo y la rodilla respectivamente, provocando que cayera de espaldas por efecto del impulso de su propio Chakra. Azula, que estaba por alcanzar el hombro de su amigo, volteó a ver al Sannin luego de agónico grito…
— ¡Undoufuujin…! —Naruto cerró los ojos y exclamó con todas sus fuerzas.
Por un momento, un destello de luz iluminó todo el lugar. Touma fue el primero en recuperar la claridad de su visión para voltear hacia el cielo en todas direcciones, encontrando un pequeño resplandor que rápidamente se estrelló contra el piso a unos metros de todos ellos.
— ¡Lo lograron! —El arquero sonrió triunfal.
De inmediato los tres corrieron para encontrarse con una pequeña nube de polvo que se disipó rápidamente para revelar a un agotado Naruto respirando muy agitado, que de inmediato fue auxiliado por la Daimyo de la Nación del Agua.
— ¡Naruto! —La castaña lo tomó en brazos.
— ¡¿En dónde está Azula…?! —Shiryu cuestionó de inmediato al notar la ausencia de la chica.
— ¿Q-Qué? —El rubio volteó a su alrededor, confundido.
— N-No…
Touma volteó a ver con marcada incredulidad hacia la trampa de Diva, dándose cuenta de que su novia solo podía seguir adentro de ese lugar… Incluso podía notarse ligeramente la silueta de la princesa de la Nación del Fuego entre el fuego que recuperaba su fuerza luego de ver cortado el flujo del pilar central por el Mesatsu Souzou.
— Lo lamento mucho, Touma… —Dijo débilmente Azula, sin que los recientes novios se pudieran ver directamente—. Lamento que por mi cobardía, no disfrutáramos de mucho más tiempo juntos…
— ¡Azula…! —El peliazul se rompió, gritaron hacia ese infierno de fuego con todas sus fuerzas mientras las lágrimas escapaban de sus ojos.
— ¡No…! —Naruto observaba con el gesto descompuesto cómo su mejor amiga había quedado atrapada entre las llamas
— Azula… —Rimururu desvió la mirada, impotente.
Shiryu se limitó a negar con su cabeza, visiblemente afectado, al saber que su amiga no tendría una segunda oportunidad para escapar de la terrible trampa de la Sombra Sangrienta…
…
— Amo esas expresiones de impotencia, sabiendo que sus seres queridos mueren uno a uno sin que puedan hacer nada al respecto…
Diva observaba con lúgubre satisfacción cómo si bien Naruto había conseguido escapar de forma casi milagrosa a cambio de que Azula terminara atrapada sin escapatoria dentro de The Withered Lover. Nubes se mantenía expectante, casi como si esperara un segundo milagro que ayudara a la chica…
— Tal parece que Orochimaru y esa humana van a convertirse en polvo… —El Rey Dragón Demonio volteó a ver a su más cercana colaboradora—. ¿No estás molesta? A pesar de que atrapaste a dos presas, Naruto consiguió salvarse…
— No importa… La pequeña Azula era la que le daba ánimos a su grupo al tener algún truco bajo la manga y como era la mejor para realizar Ninjutsu, una trampa parecida a The Withered Lover será una sentencia de muerte para las presas que caigan en ella—. Diva entrecerró los ojos—. Y así tenga que encargarme de esos niños uno por uno… —Sus ojos brillaron por un instante—. Los enviaré a todos al infierno en medio de un sufrimiento inenarrable…
El Rey Dragón Demonio chasqueó los dedos de su mano derecha, con lo que aparecieron dos copas de cristal cerca de los dos, las cuales contenía el líquido vital carmesí en su interior. La Sombra Sangrienta tomó una ante la mirada expectante de la sonriente Luna y Nubes tomó la otra que se había manifestado delante de él.
— Salud entonces, Diva…
— Sí… —Los dos levantaron sus copas—. ¿Hm? Parece que de alguna forma, la pequeña Azula se está resistiendo, puesto que The Withered Lover sigue activa… —La asesina enfocó la mirada en su trampa.
— No importa… Solo debe ser un intento desesperado que será infructuoso. —Nubes le dio un sorbo al contenido de su copa, restándole importancia.
— Sí… —La perversa mujer replicó la acción de su creador, tomando del adminículo con sobria elegancia—. Es verdad…
…
Azula yacía tendida bocarriba sobre el suelo, con gesto de marcado agotamiento, resignada a su suerte, la Princesa de la Nación del Fuego pensó que era irónico que su vida terminara en ese infierno de llamas ardientes. Se mantuvo tranquila, esperando su inevitable final, pero al no sentir cómo su cuerpo se quemaba, abrió los ojos confundida, para mostrarse sorprendida…
— O-Orochimaru… —Murmuró la chica, para luego sonreír de forma sutil—. En verdad que te gusta retrasar la muerte…
— No te rindas… —Replicó el Sannin, reflejando el marcado esfuerzo que hacía en su rostro—. ¡Ponte de pie…!
Orochimaru se había tendido sobre ella para cubrirla con su espalda y emitiendo Chakra Gouka de su cuerpo, había logrado crear una pequeña barrera entre ellos y la mortal trampa, de forma que podía sobrevivir por el momento, aunque el calor en ese pequeño espacio era apenas soportable y seguramente no pasaría mucho tiempo antes de que el escaso poder del Sannin fuera superado y la trampa concluyera su labor…
— Je… Ya no tengo ni fuerza, ni Chakra para levantarme… —La chica suspiró, claramente cansada—. Pero Naruto logró salir, eso es lo importante…
— ¡¿Por qué?! —El Rey Serpiente endureció su expresión—. ¡Tú también podrías haber escapado si te hubieras aferrado a Naruto…!
Azula no contestó de inmediato. Cerró los ojos un momento y luego volteó a ver con inesperada tranquilidad a Orochimaru…
— No pude evitar voltear a verte…
— ¿Qué?
— En ese momento me di cuenta de que realmente estabas dispuesto a dar tu vida para salvarnos… Aún cuando sé que estás agonizando, no pude dejarte aquí… —Levantó la mirada hacia donde podía ver el Chakra de Jaou evitando su muerte—. Y es que es verdad…
Tú dejaste a un lado tus oscuras ambiciones y te entregaste de corazón, diste lo mejor que podías para enfrentarte a nosotros junto a tus compañeros, renunciaste a tus horribles métodos del pasado… ¡Y nos enfrentaste cara a cara, de forma justa!
— ¿En verdad eres diferente a nosotros? —La castaña encaró al Sannin.
«A-Azula, en verdad tú…» El Rey Serpiente se mostró incrédulo ante esas palabras y cerró los ojos, conmovido—. A pesar de todo lo que te hice en el pasado, no pudiste dejar de tenderme una mano al final y es por eso… Que no pudiste alcanzar a Naruto…
— Voy a morir por intentar salvar al enemigo… —Naruto, Shiryu, Touma y Rimururu escuchaban desconsolados a su amiga, incapaces de ayudarla—. Seguramente Ryu-sensei va a regañarme en el otro mundo… No, no lo creo… Si le explico todo, sabrá por qué lo hice…
— ¡Azula…! —Touma se dejó caer de rodillas y comenzó a golpear el piso con sus puños muchas veces, desesperado e impotente.
La castaña cerró los ojos para esperar su inevitable final. Pero los abrió de nuevo luego de la desconcertante sensación de sentir una gota caer sobre su rostro, la cual se evaporó casi al instante.
Entonces se encontró con la imagen del rostro de Orochimaru llorando encima de ella…
— O-Orochimaru, tú…
— Azula… Vas a perder la vida por una escoria como yo… —Abatido, el Sannin apretaba los dientes con los ojos cerrados, realmente conmovido—. Por todo… Perdóname…
— Llegué a odiarte con todo mi corazón… —Azula sonrió mordaz—. Pero ahora solo puedo agradecerte… Sin ti, no habría podido salvar a mi mejor amigo… —Para entonces, las sinceras lágrimas de Jaou que caían en el rostro de la chica, se evaporaban apenas entraban en contacto con su piel—. Gracias, Orochimaru… —La chica suspiró—. ¿Sabes? Es triste morir en un lugar como este, donde incluso las lágrimas se evaporan en un instante…
¡Kami! Kami de los humanos… ¡¿Puedes oírme?! Seguramente muchas de mis víctimas te suplicaron misericordia mientras jugaba con sus vidas… Pero ahora, soy yo quien te ruega, aunque tenga que sufrir eternamente en el infierno por todo lo que he hecho… ¡No me importa! Pero por favor… ¡Por favor! ¡Salva a esta persona tan asombrosa…! Te lo ruego… ¡Kami!
…
— Tal parece que The Withered Lover está a punto de llegar a su conclusión…
Diva sonreía ante la escena de la esfera de Charka Gouka a punto de compactarse por completo, lo que significaba que el glifo de la tétrica imagen de la mujer quemada estaba por entrar en contacto con las llamas, siendo precisamente Azula y Orochimaru, lo único que lo evitaba…
— Ja, ja, ja —Luna escalaba por el cuerpo de la Sombra Sangrienta para posarse en su hombro derecho—, ¡Que se queme la basura…!
…
— ¡No…! —Rimururu sujetaba a Naruto, quien desesperado, intentaba lanzarse él mismo al fuego para intentar algo.
Shiryu y Touma solo podían ver impotentes cómo la castaña menor estaba a punto de morir, sin tener posibilidad alguna de ayudarla. El fuego Gouka aumentaba de potencia y su intensidad comenzaba a aumentar al punto de deslumbrar a todos. Fue el arquero el último en abrir los ojos, incapaz de mirar al frente, ya que no quería ver la imagen de lo que fuera que quedara de la trampa de Diva… Resignado, volteó a ver a Naruto y Rimururu, que lejos de lo esperado, se mostraban incrédulos. Entonces volteó la mirada hacia lo que quedara de la trampa, esperando lo peor…
¡Senpou: Gosenki Gamazan…!
(Arte Sabio: Cinco Sabios de Roca de la Montaña del Sapo)
Pero lo que se encontró fue con Orochimaru sobre Azula, con los dos mirando atónitos que a su alrededor había cinco pequeñas estatuas con forma de sapo, que lucían trajes de sabio, que portaban túnicas y que se encontraban realizando el sello de manos "Tatsu" (Tigre), todas dándoles la espalda a la Princesa de la Nación del Fuego y al Rey Serpiente. Debajo de las pequeñas estatuas, surgían líneas rectas que se entrelazaban para formar una estrella de cinco picos rodeada por un pentágono…
— Orochimaru, tal vez me faltó esforzarme lo suficiente… Pero veo que a final, has regresado a la luz…
El aludido y la castaña menor voltearon incrédulos al frente, para encontrarse a unos metros con la imagen de aquél reconocido Shinobi, cuyo cabello blanco erizado y largo era reconocido por todos los Ninja. Cruzado de brazos, se encontraba el famoso Gama Sennin, mirando con una discreta sonrisa tanto a la hija de su único estudiante con vida así como al sujeto que en el pasado había sido su compañero de equipo.
— ¡Ero-sensei…! —Exclamó Naruto, parpadeando incrédulo.
…
Nubes sonrió de lado mientras le daba otro sorbo a su copa, mirando de reojo a su creación. Diva, al contrario que su líder, se mostraba totalmente atónita, incrédula, estupefacta…
La copa de cristal que sostenía la Sombra Sangrienta cayó al suelo y se convirtió en cientos de pedazos, dejando caer su contenido por todo el suelo.
…
— J-Jiraiya-sama… —Murmuró sorprendida la hija de Ozai.
— No te muevas, Azula… Tenemos que revisarte antes que otra cosa… —El albo se acercó para ayudarle a Orochimaru, sujetándolo de forma que pudiera sentarse en el suelo—. Creo que debo agradecerte por ayudar a los hijos de mis estudiantes, Orochimaru…
— Jiraiya… —Susurró débilmente el otro Sannin, con los ojos cerrados—. En verdad, eres tú…
— La verdad no puedo creer todo lo que hiciste por Naruto y por Azula, es algo que nunca habría imaginado del Orochimaru que alguna vez fue mi compañero, pero en serio… —El único Sannin que jamás desertó de Konoha, se mostró conmovido—. A pesar de todas las veces que luchamos a muerte, a pesar del pasado…
— En serio… ¿Me lo agradeces? —Jiraiya se mostró confundido por las palabras del Rey Serpiente—. ¡Imbécil…! —Bramó el demonio, mientras su rostro se descomponía de forma violenta por la ira—. ¡¿Crees que no te conozco?! —De la mano que todavía tenía, surgieron sus puntiagudas garras de hueso—. ¡Ahora mismo te enviaré al infierno…!
Con incredulidad, el albo se quedó impotente al ver cómo la mano de Orochimaru iba guiada hacia su pecho, a tal velocidad que le sería imposible esquivarla. Naruto, Azula y Rimururu se mostraron boquiabiertos ante el tan intempestivo como sorpresivo ataque de la Quimera Parca, mientras que Touma y Shiryu no pudieron ocultar la sorpresa…
No obstante, con sudor frío en su rostro, Jiraiya vio cómo el ataque de Orochimaru se siguió de largo a un costado de su corazón y se quedó rígido, pero las garras desaparecieron en la nada, surgieron dos hijos rojos en medio del aire. Segundos después, Diva se materializó detrás del Gama Sennin, con una expresión de incredulidad total mientras las garras del Hebi Sannin se encontraban incrustadas justo en el punto para cruzarle el corazón.
La espada de la creación de Nubes estaba a centímetros de cortarle el cuello al albo…
— ¡No volverás a interrumpirme de nuevo, Sombra Sangrienta…!
— Aaahhhh… —Estupefacta, la azabache, se desplomó de espaldas al piso con los ojos en blanco.
«En realidad atacó a Diva…» Azula se mostró atónita.
— ¡Orochimaru! —El Gama Sennin observó sorprendido cómo el brazo de Orochimaru comenzó a desmoronarse como si fuera un simple terrón de arena.
— Ku, ku, ku… —El demonio sonrió luego de cerrar los ojos—. Esa era mi última gota de Chakra…
— Orochimaru, en verdad tú…
— ¡Deja de lloriquear! —Orochimaru fue detenido por Jiraiya antes de caer al suelo—. El Rey Dragón Demonio es un enemigo como jamás habrá en este mundo… No tienes tiempo para llorar a una basura como yo… Naruto y los demás necesitarán de tu experiencia en el campo de batalla… ¿Sabes? —El Rey Serpiente susurró, mientras su cuerpo poco a poco se iba desmoronando como si fuera arena, levantando polvo hacia el cielo—. Los alumnos que Ryu formó son en verdad increíbles… Tanto, que incluso lograron cambiarme a mí…-
— ¡Orochimaru! —Naruto se mostró consternado, sabiendo que el final del Sannin había llegado.
— Ayuda a Naruto y a sus amigos… Eso puede hacer para agradecerme… —Orochimaru abrió sus ojos de nuevo, sonriendo decidido, encontrándose con la mirada de Jiraiya.
— ¡Orochimaru…! —Azula gritó, con tristeza en su rostro.
— A-Azula… El Kami de los humanos me dejó sorprendido…
— ¿Q-Qué? —Replicó desconcertada la Princesa de la Nación del Fuego.
— Escuchó mis ruegos y ha salvado tu vida… —Lo poco que quedaba del cuerpo de Orochimaru, era su cabeza y su torso, los cuales también comenzaban a convertirse en polvo que se llevaba el viento—. A-Además…
Me ha permitido morir en los brazos del único ser humano al que alguna vez llegué a considerar un amigo de verdad…
— Orochimaru… —El albo se puso de pie mientras miraba el polvo que terminaba de elevarse hacia el cielo, sin dejar rastro alguno del Rey Serpiente.
«A pesar de todo lo que nos hiciste pasar…» Azula cerró los ojos de forma respetuosa. «De todo lo que sufrimos por ti… Gracias…»
…
La batalla entre Karen del Oeste y la Espadachín Legendaria cimbraba el campo de batalla entre las tropas del Tengun y el Ejército del Mundo Humano, una batalla que todos peleaban decididos hasta el final…
La Sannin Tsunade, sin embargo, dejó de prestarle atención al temible escenario por un momento, luego de destrozar a una enorme bestia haciendo uso de su afamada fuerza, para mirar hacia el imponente Serpentera que se mantenía levitando en el cielo y que con su sombra oscurecía toda el área…
…
— Me alegra haber llegado a tiempo…
Jiraiya se mostró sonriente, mientras tomaba a Azula en brazos y se acercaba a los demás. Para su sorpresa, pronto el arquero le hizo el relevo para cargar a la chica, quien se ruborizó por la muestra de afecto por parte de su novio.
— ¿Estás bien? —Cuestionó el peliazul.
— Sí, no te preocupes… —Replicó la chica con suavidad, recargando la cabeza en el pecho del Samurai Trooper, para luego recibir un beso en su cabeza.
— Bueno, eso es casi tan inesperado como la ayuda de Orochimaru… —Rimururu dijo al aire mientras la chica se abrazaba al cuello de su novio.
— Felicidades, Azula. —Artemis se acercó sonriente.
— Gracias… —Contestó sonrojada la chica, mientras el Hashiba sonrió de forma discreta.
— Oye, Ero-sensei… —Naruto se mostró serio frente a su otro maestro.
— ¿Qué pasa? —Replicó el Gama Sennin.
— ¿Dónde estuviste todo este tiempo? —Replicó el rubio.
— Sobre eso… Enseguida te explico, solo que me gustaría quedarme un momento a solas, ¿les importa adelantarse?
Sabiendo el pasado entre su maestro y el Rey Serpiente, Naruto hizo un gran esfuerzo para ponerse de pie y comenzó a caminar hacia el frente. Rimururu lo ayudó de inmediato al ver que le costaba trabajo y pronto Artemis los escoltaba. De inmediato Azula miró suplicante a su novio, quien asintió y luego comenzó a seguir al rubio y a la Daimyo. Al final, Shiryu cerró los ojos y se dio media vuelta para alcanzar a sus amigos…
Una vez que el Equipo Ryu estaba alejado varios metros, Jiraiya sonrió de forma suave al sentir un frío cercano a su cuerpo.
— Sorprendente… Orochimaru te cruzó el corazón y aún así, sigues con vida…
Detrás de él, Diva sonreía de forma sombría, con la punta de su arma posada a centímetros de la espalda de Jiraiya. En su cuerpo eran visibles las heridas que el fallecido Jaou la había hecho en el pecho, las cuales apenas comenzaban a cerrarse, dejando solo las marcas en su ropa como evidencia…
— Lo lamento, pero yo soy inmortal… Así no importa qué clase de herida me hagan, solamente el Mesatsu Souzou de la pequeña Azula podría acabar conmigo… Hace un momento, el infeliz de Orochimaru te salvó el cuello, pero ésta vez pagarás por arruinar mi trampa… —A pesar de parecer sonriente, la molestia era perceptible en su voz—. Si tienes la capacidad de reprimir mi trabajo de esa manera, tengo que matarte de inmediato…
— Lamento decirte que no te daré el gusto… —Jiraiya cerró los ojos, sin dejar de sonreír.
— Así que Jiraiya, el Gama Sennin… —La Sombra Sangrienta se relamió los labios, sintiéndose victoriosa—. A pesar de ser un gusano que ni siquiera pudo con Orochimaru antes de que se uniera al Tengun, tienes mucha confianza en ti mismo… Aunque notaste que seguía viva, al menos tienes eso a favor… Pero alejar a Naruto-kun y a sus amigos solo será inútil, porque The Withered Lover no es mi única trampa, así que Naruto-kun y los demás no llegarán muy lejos…
— Así que tú eres la Sombra Sangrienta… —El albo se mantuvo impasible—. Supongo que puedes controlar tus trampas a voluntad, ¿no es cierto? —La azabache se mantuvo expectante, entrecerrando la mirada—. Así que debes controlarlas con tu Chakra como cualquier Jutsu… Pero, ¿qué pasa si estás atada de manos?
— ¿Qué? —Diva rompió su habitual sonrisa para dejar ver la sorpresa que sentía—. Ya lo comprendo, les dijiste que siguieran para que no pudiera activar las trampas en el Palacio de Nubes-sama… —Endureció su expresión—. En verdad eres muy astuto, anciano… Como lo pensé, no puedo dejarte vivir por más tiempo… Luego de matarte, acabaré con Naruto-kun y los demás con mis mejores trampas; la mayoría de ellas están dentro del palacio…
— Gracias por el dato, lo tomaré en cuenta. —El albo volteó a ver a su enemiga por el rabillo del ojo.
— ¡Hora de silenciarte para siempre!
La Sombra Sangrienta tomó vuelo para apuñalar al Gama Sennin, pero cuando quiso enterrar su Katana en el cuerpo de Jiraiya, horrorizada, se dio cuenta de que estaba paralizada y sus brazos simplemente no le respondían.
— ¿Qué pasa? —Jiraya se mantuvo sereno—. ¿Problemas para acabar con el gusano?
— M-Mi cuerpo… La mitad de mi cuerpo no responde…
Diva entonces notó que al lado opuesto de la herida que le había infringido Orochimaru, se encontraba clavado un Kunai en su pecho, el cual llevaba en el mango rojo grabado el mismo Kanji que en el protector frontal del albo, "Myoubokuzan", el cual brilló de forma intensa por un instante.
— Ésta cosa es la que me impide moverme… ¿C-Cuando?
— A pesar de que estabas tirada en el suelo, tenías una vibra horrible, así que por si acaso, yo… — Jiraiya se dio la vuelta para encarar de frente a la sorprendida Diva.
— Ahora verás… —Como pudo, la Sombra Sangrienta se forzó a tomar el Kunai con su mano izquierda, pero una corriente de Chakra surgió del objeto, forzándola a soltarlo.
— No es muy divertido caer en una trampa, ¿verdad?
El Sannin se mostró firme mientras sus ojos se marcaban con una sombra naranja y sus irises se coloreaban de tono amarillo, al tiempo que sus pupilas se volvían alargadas y rectangulares. Entonces, de entre sus ropas sacó el Hiraishin Kunai, arma característica de Minato Namikaze, el cual comenzó a infundirse de Chakra para liberar una hoja similar a una Katana, una vez que con su mano derecha empezó a transmitirle el flujo.
— ¿Sabes? Orochimaru se corrompió porque siempre supo que era diferente y con el tiempo arruinó la vida de muchísimas personas… —Diva se limitaba a observar con clara furia a Jiraiya—. ¡Pero él por lo menos se manchaba las manos! Tú estás en un nivel inferior a él, porque ni siquiera te atreves a hacer tu trabajo sucio de frente… —Ante la naciente impotencia de la azabache, tomó vuelo alzando su mano en alto—. Orochimaru se fue antes de tiempo… ¡Y ésta va por él!
El Gama Sennin lanzó el poderoso corte, pero en el último instante Diva fue capaz de retroceder y evadir el golpe. Cayó con elegancia y se enfocó en su enemigo, recuperando la sonrisa a unos de distancia.
— Ese Chakra y ese cambio de apariencia…. Es lo que llaman el Modo Sennin (Modo Sabio)… —La Sombra Sangrienta cerró los ojos—. Pero ni siquiera con esas tonterías me detendrás…
— Je, je, je… ¿De verdad?
En ese momento, la azabache pasó de la confianza al desconcierto total, puesto que frente a ella, su peinado se deshizo y su cabello se soltó de forma caótica luego de que un corte se manifestara en el área de su trenza cercana a su oreja izquierda. Algunos mechones cayeron al piso y otros cabellos más fueron arrastrados por el viento, mientras aquella siniestra mujer quedaba en shock.
— ¡Ahora escucha bien! No me gusta hacerlo, pero yo también sé pelear sucio… La próxima vez no habrá consideración alguna.
El Gama Sennin observaba con sutil desprecio a la mujer, que una vez se recuperó del impacto de ver su cabello cortado, esbozó un rictus de una profunda ira, una cólera que realmente le daba un aspecto intimidante, mientras temblaba por la rabia que la invadía al verse humillada de esa manera…
— N-No… Escúchame tú a mí… —Los ojos de la Sombra Sangrienta brillaron intensamente mientras su gesto dejaba ver la cólera que la invadía—. Te juro… Te juro que… La próxima vez que nos veamos, me encargaré de matarte… ¡Por mi vida eterna que lo haré…!
Antes de desvanecerse en el aire, Diva clavó con rabia su Katana en el suelo, dejando un rastro de cabellos revoloteando por el lugar, ante la mirada fría de Jiraiya. Al notar que la enemiga realmente había desaparecido, el albo suspiró y luego se dio la media vuelta para también desvanecerse en el aire…
…
Naruto, Azula, Shiryu, Touma y Rimururu observaban con cautela aquella enorme y elegante construcción delante de ellos…
La entrada al Palacio de Nubes en lo que podría definirse como la base del cuello de Serpentera, era una edificación enorme, que bien podría definirse como varias veces del tamaño de Konoha, con varias torres sobresaliendo de la elegante construcción que opacaba con facilidad la opulencia de la arquitectura de Cydonia.
— Oh… —Naruto se mostraba realmente impresionado.
— En verdad es enorme… —Azula apenas podía disimular su asombro.
— ¡Seguro que en todo el mundo no hay otro edificio tan enorme!
Los cinco alumnos de Akahei no pudieron evitar sorprenderse al notar que apenas un par de pasos atrás, Jiraiya sonreía de forma maliciosa, cubriéndose con la mano derecha el sol de mediodía. Shiryu fue el primero en recuperar la serenidad, mientras los demás seguían sorprendidos.
— ¿Cuándo llegó aquí, Jiraiya-sama? —La castaña menor parpadeaba confundida.
«Es verdad, no sentí que viniera detrás de nosotros…» El peliazul reflexionó, desconcertado.
— ¡Para ser sincero, los seguí casi de inmediato! —El Gama Sennin sonrió amistoso.
«Eso no es cierto» El azabache entrecerró los ojos, mirando sobre el hombro al afamado Ninja de Konoha. «Yo dejé de sentir su presencia por un momento… El Gama Sennin Jiraiya tiene algo distinto a cualquier Ninja que haya visto antes…»
Shiryu ahogó una expresión de sorpresa al recordar de forma fugaz el Jutsu que utilizó para suprimir la trampa de Diva. El fuego Gouka, una fuerza que realmente era poderosa, fue debilitado por completo con una facilidad impresionante por Jiraiya… Ciertamente sabía que el Gama Sennin tenía renombre en el Mundo Ninja, pero no estaba al tanto de que tuviera una capacidad semejante…
«Eso sólo significa que el Sannin Jiraiya…»
— Bueno, lo mejor será empezar por…
— ¡Suficiente…!
Naruto, Azula, Touma, Rimururu y Artemis dejaron de atender al albo para observar con claro desconcierto al Caballero del Dragón. El Gama Sennin, por otro lado, se mostró confundido por el gesto severo que el antiguo Shogun del Suigun le dedicaba.
— Deja de fingir, yo sé cuál es tu verdadero poder…
— ¿Verdadero poder? ¿A qué te refieres, Shiryu? —El rubio miraba confundido a su amigo.
— Justo a eso, el Sannin Jiraiya es débil… Si se une a ésta lucha solo conseguirá la muerte… —Shiryu cerró los ojos ante la evidente confusión de los demás.
— ¿Qué quieres decir con eso, Shiryu? —El Hashiba puso toda la atención en su amigo.
— ¡Gracias a Jiraiya-sama sigo aquí! —Replicó Azula—. Él está aquí para apoyarnos y… ¿Sales con esto?
— Entonces contéstame… —Shiryu y Azula se miraron a los ojos—. ¿Realmente crees que este sujeto está al nivel de Shiryuu o Nubes?
— Yo… —La castaña menor se quedó sin palabras.
— Éste sujeto jamás pudo vencer al Orochimaru que apenas empezaba a descubrir sus capacidades como demonio, mientras que Orochimaru aumentó una y otra vez sus poderes hasta que finalmente se convirtió en una Quimera Parca… —El azabache permanecía serio—. Jiraiya ni siquiera le llega a los talones… El poder de este sujeto ya no sirve en una guerra que ha alcanzado éstas dimensiones… Nosotros hemos entrenado todo este tiempo para superar una y otra vez los límites que nos imponía el enemigo, por lo que ahora existe una diferencia enorme entre nosotros e individuos como los Sannin humanos…
Una recelosa Azula y un expectante Touma se limitaban a mirar fijamente a su amigo, en tanto que Naruto y Rimururu permanecían a la expectativa ante la sorpresiva actitud del Caballero del Dragón.
— Al ver a Orochimaru, aún cuando se encontraba agonizando en el piso, justo a tus pies, ¿realmente sentiste que estabas a tu nivel? —Shiryu miró fijamente al albo, quien se limitó a negar con la cabeza—. Pues Naruto lo derrotó en un combate mano a mano, sin la ayuda de nadie… ¿Cuánta diferencia de nivel crees que hay entre tú y Naruto?
— Pues… Posiblemente mi fuerza al máximo no sea ni la tercera parte de la que tiene Naruto ahora… —Replicó el albo, serio.
— Je, je, je… Al menos eres honesto… —Shiryu sonrió con sutil ironía.
— Pero entonces… —Murmuró la Daimyo, insegura.
— Esto se sencillo… —El azabache se dio media vuelta y comenzó a caminar dándole la espalda al Palacio de Nubes—. Yo no pienso cuidar de un Ninja como Jiraiya, así que si se va a unir al grupo, yo no pienso moverme de este lugar…
Ante la sorpresa de todos, el Caballero del Dragón se cruzo de brazos y se quedó de pie, sin hacer algún otro movimiento.
El desconcierto se apoderó de todos y a pesar de que Azula se mostraba algo molesta, estaba tan confundida como los demás por la actitud de Shiryu. Jiraiya incluso se mostró incómodo y luego de pensarlo un momento, decidió acercarse al pelinegro. No obstante, Touma le cortó el paso con el brazo derecho y fue él quien decidió acercarse al primer alumno de Ryu…
— Shiryu… ¿Qué es realmente lo que sucede?
El aludido volteó a ver sobre el hombro a su amigo y cuando la mirada de los dos se encontró, al peliazul le tomó apenas un instante entenderlo. Luego de ahogar una expresión de sorpresa, cerró los ojos y con gesto serio, se dio media vuelta, caminando de frente hacia el Palacio de Nubes.
— Vámonos. —Dijo con tranquilidad, pasando junto a los demás.
Naruto, Azula y Rimururu se voltearon a ver entre sí, claramente confundidos, pero luego de pensarlo un poco, siguieron al arquero junto a Artemis, que simplemente volteó por un instante para ver la espalda de Shiryu y finalmente algo cohibido, el Gama Sennin decidió seguir al grupo, que poco a poco comenzó a aumentar su velocidad para iniciar finalmente, el asalto al Palacio de Nubes.
— ¿Qué es lo que realmente sucede, Touma? —La castaña menor se acercó discreta a su novio.
— Clase 12. —Contestó el Hashiba sin apartar la mirada del frente.
— Eso significa que…
La chica no pudo terminar de hablar, puesto que de los varios ventanales del palacio surgieron cientos de luces brillantes que se estrellaron delante del Caballero del Dragón, revelando varias entidades, entre sujetos prácticamente idénticos a seres humanos hasta hombres bestia y auténticos monstruos que lucían poderosos y con experiencia en combate, seguramente mejores que las fuerzas que se habían quedado a combatir en la superficie al Ejército del Mundo Humano.
El Caballero del Dragón levantó el puño derecho por un instante, como señal de que confiaran en él…
— ¡Shiryu! —Gritaron Naruto y Rimururu parando en seco, para observar horrorizados cómo ese auténtico ejército se preparaba para combatir al azabache.
— Espera… —La Princesa de la Nación del Fuego fue detenida en seco del amago de regresar por el Gama Sennin, quien la tomó del hombro izquierdo—. Creo que su amigo se dio cuenta de las habilidades que obtuve y por eso se ha quedado atrás, para cubrirles las espaldas…
— ¿No fue eso lo que hiciste durante el ataque de Shirona? —La castaña mayor cuestionó a la menor.
— Si nos hubiera dicho lo que pensaba, no lo hubiéramos dejado ir solo… —Touma cerró los ojos por un momento—. Vámonos, no debemos desperdiciar la oportunidad que nos va a dar Shiryu desde ahora…
Naruto, Rimururu y Azula asintieron a las palabras del Arquero, mientras que el albo volteó a ver al azabache.
«Gracias por la confianza… ¡No te arrepentirás!» Jiraiya volteó a ver de reojo al portador de la Armadura del Dragón.
— ¡Vengan! —Shiryu adoptó postura de combate—. ¡Porque para pasar tendrán que matarme primero!
El primer alumno de Ryu observó con detenimiento al ejército delante de él. Lo más sorprende, además de las variadas formas y tamaños de sus integrantes, era que su líder parecía ser una mujer de aspecto humano…
Era una mujer aparentemente joven, de piel clara, una constitución esbelta, ojos marrones y cabello rosado que llevaba atado en una coleta alta, la cual le llegaba a los hombros. Portaba un qipao de tono fucsia bastante ceñido a su cuerpo, con forro negro y diseños amarillos, sobre el que portaba una particular armadura de tono rosado que le cubría el costado izquierdo de su cuerpo, incluyendo pierna y brazo. Su pierna derecha estaba protegida por una tobillera negra y usaba zapatos cortos de artes marciales. Su brazo derecho tenía un brazalete negro casi al codo, con detalles amarillos similares a los de la tobillera.
— Así que ustedes son parte del verdadero Tengun… —Shiryu se mantenía impasible.
— Somos la Tropa de Defensa a cargo de la protección del Palacio de su excelencia, Nubes-sama. —Replicó solemne la mujer de aparentes 18 años—. Mi nombre es Maam y soy la líder… Valiente de tu parte intentar detenernos solo, pero será inútil… ¡Quítate del camino!
— Valiente no, más bien tonto, ¡Ja, ja, ja…! —Dijo un monstro verdoso gran estatura
— Anda, antes de que te enviemos al infierno… —Agregó un ser similar en apariencia dragón, pero con proporciones corporales humanas.
— ¿En verdad nos enfrentarás solo? Es una pena que un chico guapo como tú sea un humano tan ingenuo y miserable… —Declaró confiada una chica de particular uniforma revelador consistente en leotardo, zapatos de tacón y falda naranja, de larga cabellera rubia, bastante hermosa.
— No solo eso… —Un dragón de varios metros de altura sonrió confiado—. Nadie puede ingresar al palacio de Nubes-sama sin su autorización, ni siquiera nosotros…
— Eso me tranquiliza. —Shiryu cerró los ojos—. No habrá problema entonces…
— ¿Qué dices? —Cuestionó la líder de la División, claramente más cautelosa que sus subordinados.
— En primer lugar, yo me encargaré de todos ustedes. —Shiryu abrió los ojos con dureza en su expresión—. Y en segundo lugar, ya nadie puede detener a los que avanzan detrás de mí.
— ¡¿Qué?! —Varios monstruos se mostraron sorprendidos.
— ¡Eres un insolente! —Bramaron otras bestias.
— ¡Prepárate a morir…!
— ¡Al ataque…!
Ante la expectativa de Maam, varios integrantes de su ejército se dirigieron de lleno hacia Shiryu, quien colocó su mano derecha al frente en posición de golpe de espada…
— ¡Excálibur…!
La pelirrosa ahogó una expresión de desconcierto puro, al ver cómo ocho de sus subordinados sucumbían al instante, partidos por la mitad, apenas el Caballero del Dragón agitó su brazo hacia delante. Lo demás integrantes de la Tropa de Defensa se quedaron incrédulos al ver la facilidad con la que varios de sus compañeros caían ante aquél humano.
— ¡Si van a atacarme, les recomiendo que vengan por lo menos diez a la vez! —Shiryu agitó su temible brazo derecho, para reafirmar su advertencia.
— ¡Ahora verás…! —Replicó Maam, con marcada irritación.
Naruto volteó de reojo hacia la naciente batalla, mientras el grupo se detenía en la enorme entrada del Palacio, que para creciente preocupación del Namikaze, era exactamente igual a la entrada a Serpentera…
Se trataba de otra Puerta de Zedd.
— De nuevo ésta puerta… — El rubio dejó ver su preocupación.
— ¿Crees que puedas romperla como la de la entrada de la cabeza? —Cuestionó la castaña mayor.
— No lo sé… Como estamos cerca de Nubes, seguramente será más resistente que la anterior…
— Orochimaru tenía razón sobre ustedes… —Las palabras de Jiraiya llamaron la atención de los portadores de los Emblemas.
— ¿Qué quieres decir, Ero-sensei?
— Así como su amigo ahora, hace un momento yo me quedé atrás para evitar que la Sombra Sangrienta nos sorprendiera por la espalda… —El albo se enfocó en la enorme puerta justo frente a sus ojos.
— ¿Diva? —Preguntó Azula.
— Esa mujer aprovechó el último ataque de Orochimaru para intentarlo, pero logré detenerla y pensaba cubrirles las espaldas en la medida de que me fuera posible… Sin embargo, su amigo Shiryu tomó ese lugar, puesto que se dio cuenta de que necesitarían de las habilidades que he estado obteniendo en este tiempo… —El Gama Sennin sonrió de forma sutil—. Azula… ¿Tu padre te contó alguna vez del Modo Sennin?
— Sí… —Replicó la chica, tomándose la barbilla en actitud pensativa—. Pero ni él ni Minato-san fueron capaces de dominarlo… A la fecha, mi padre viaja ocasionalmente a Myoubokuzan para seguir practicando…
— Después de la batalla en Kiri, durante la cumbre de los líderes, me sentí todo un inútil al no tener la capacidad de combatir en una guerra de estas dimensiones, por lo que viajé a Myoubokuzan para perfeccionar el Modo Sennin y de paso, aprender todo el Senpou (Arte Sabio) que pudiera para la batalla… Denme espacio, porque ahora les enseñaré la razón por la que su amigo se encargó de la retaguardia para que yo viniera al frente con ustedes…
Ante la expectativa de todos, ya que sabían que Naruto y Shirona habían tenido que unir sus fuerzas para destruir una puerta igual durante el primer ataque, el Sannin se dispuso a realizar algo… Abrió ligeramente el compás y junto sus manos frente a su rostro de forma similar a un aplauso, para cerrar los ojos por un momento y al abrirlos, mostraron una coloración dorada así como una sombra rojiza a su alrededor.
Con rapidez realizó una breve secuencia de sellos para luego colocar sus manos arriba, luego las abrió a sus respetivos lados y las posó abiertas a la altura de los hombros, después las bajó a la altura de la cintura y finalmente las colocó con las palmas abiertas al frente. Siguiendo sus movimientos en el aire, se formó una estrella de cinco picos rodeada por un pentágono y en ese momento el albo pisó con fuerza.
— ¡Senpou: Gosenki Gamazan…!
De las cinco puntas de la estrella surgieron las cinco estatuas con forma de sapo, que se dirigieron a toda velocidad hacia la Puerta de Zedd, para replicar el trazo de la estrella de cinco picos rodeada por el pentágono sobre ella, brillando con una intensidad deslumbrante por varios segundos…
Shiryu, con una secuencia de golpe y patadas venció a varios monstruos para creciente preocupación de Maam, que no podía creer que un humano tuviera el nivel como para enfrentar con esa facilidad a varios miembros de su tropa. Sin embargo, el feroz combate se detuvo apenas aquella luz deslumbrante invadió el área, llamando la atención todo ese frente de batalla.
«¡Lo sabía!» El pelinegro se mostró serio ante la demostración de la capacidad oculta del Gama Sennin.
Cuando el brillo cesó, la puerta se abrió por su sola, abatiendo hacia fuera, ante la sorpresa de los cuatro alumnos de Akahei presentes, cimbrando el palacio con un gran estruendo de forma que llamó la atención de todos, incluso en la superficie…
— ¡Increíble! —Exclamó sorprendida la castaña menor—. Así que esto es el Senpou (Arte Sabio)…
— ¡Es imposible…! —La bella rubia de la Tropa de Defensa no podía creer lo que estaba pasando.
— ¡La Puerta del Palacio de Nubes-sama se está abriendo! —Exclamó incrédula la líder de la tropa.
Shiryu se limitó a observar de forma fugaz, regresando de inmediato la atención hacia el enemigo…
— Bueno, es hora de irnos… —Jiraiya, sin embargo, no avanzó al notar que Naruto lo miraba atento—. ¿Qué sucede, Naruto?
— ¡Gracias, Ero-sensei! —Contestó el Namikaze, para sorpresa de los demás—. Cuando vi esa puerta pensé que la ocasión anterior tuvimos que romperla entre mi madre yo… Pero ahora sé que incluso podíamos hacerlo sin usar la fuerza…
— Naruto…
— Así que, terminé por convencerme de algo… —Naruto sonrió alegre—. ¡Nubes está equivocado! La justicia no se puede lograr solo por medio del poder…
— Así es, el poder siempre debe estar acompañado del deseo de buscar la paz verdadera… ¡Ahora vamos!
Naruto, Rimururu, Touma y Azula comenzaron el camino hacia el interior del palacio, mientras que Jiraiya se enfocó en el Caballero del Dragón, quien al sentir la mirada del Sannin, volteó a verlo por un momento. El Gama Sennin aprovechó para hacer una respetuosa reverencia en señal de agradecimiento para luego alcanzar a los otros portadores de los emblemas…
Entonces el Caballero del Dragón regresó su atención al frente.
— ¡Rápido, acabemos con este infeliz para detener a esos sujetos! —Bramó una de las bestias de la Tropa de Defensa.
— Eso no será posible…
— ¿Qué? —Maam murmuró desconcertada.
— Ahora que tienen a alguien más para encaminarlos, ya puedo dejar de ser el hermano mayor y ahora puedo jugar con mis reglas… —Shiryu sonrió de forma sutil.
— ¿A qué te refieres con eso? —Replicó la líder de la tropa del Tengun, con cautela.
— A que ahora puedo pelear a mi manera, sin tener que preocuparme por las consecuencias… —Contestó mientras se veía rodeado por su imponente Cosmos, posando sus manos cerca de su cintura.
— ¡Miren, Shiryu…! Naruto volteó al ver aquél resplandor.
— Él va a… —Azula ahogó una expresión de sorpresa.
— Es la segunda vez que lo utiliza hoy… —Touma susurró sin detenerse.
— ¡Rozan Hyaku Ryu-ha!
El siguiente grupo de varios monstruos y engendros del Tengun recibieron el poderoso ataque del azabache mientras que la luz producto del impacto se expandía en todas direcciones…
…
Notas
Pues bien, luego de un intenso esfuerzo por sobrevivir, Naruto y Azula finalmente lograron salvarse de la trampa de Diva, mientras que Orochimaru los ayudó lo más que pudo, en lo que podría definirse como un arrepentimiento sincero que no llega como tal a una redención, sino al deseo de morir intentando hacer lo que consideraba lo correcto al tiempo que se daba cuenta de sus propios errores en la vida, tratando de dejar algo, por muy pequeño que fuera, antes de desaparecer.
El favorito de muchos, su majestad Jiraiya, ha regresaron luego de un laaaargo rato para mostrar lo que puede hacer un Sennin a full capacidad en la terrible lucha contra Nubes y que tendrá su importancia en el comienzo de la parte final de la historia en un duelo persona contra Diva, que le ha tomado resentimiento por el asunto de evitar que asesinara a las presas en su trampa.
Ha comenzado la invasión al Palacio de Nube y Shiryu se ha quedado a cubrirle las espaldas a Naruto y los demás, en un guiño a la Saga de Hades, cuando cuida a Seiya y los otros ante el ataque sorpresa que planeaban Alraune, Minotauro y Basilisco frente al Muro de los Lamentos. Como líder de la tropa de defensa aparece, como primero de mucho cameos, Maam de Dragon Quest: Las Aventuras de Fly, aunque del lado de los enemigos al ser de los protagonistas, la que menos me cae bien, así como Minako Aino a.k.a. Sailor Venus igualmente en el bando enemigo.
Creo que es todo por ahora.
