Disclaimer: los personajes de Twilight son propiedad de Stephenie Meyer. La autora de esta historia es anhanninen, yo solo traduzco con su permiso.
Disclaimer: The following story is not mine, it belongs to anhanninen. I'm only translating with her permission. Thank you, Ashley, for letting me share another one of your stories! :3
Capítulo 45
Al instante que Emmett se va a su turno de noche el viernes, le escribo a Edward que saldré pronto. Aunque tendré que volver a casa alrededor de las seis de la mañana para estar seguros, aún ansío tener una noche con Edward. Será la mayor cantidad de tiempo que habremos pasado juntos a parte del viaje ida y vuelta a Seattle, y no puedo esperar.
Lo necesito de nuevo como necesito el aire.
Incluso el viaje se siente demasiado largo, y presiono el acelerador un poco más, queriendo estar con él de inmediato pero rápidamente me doy cuenta de mi error sobre la ruta mojada y comienzo a resbalar.
—¡Mierda, mierda, mierda, mierda!
Logro salvarme —o el Jeep logra hacerlo, para ser honesta— y me detengo mientras mi corazón repiquetea en mi pecho. Emmett no se equivoca; soy una conductora horrible. Respiro profundamente, calmándome lo suficiente para comenzar de nuevo.
Literalmente nada se interpondrá en mi camino para llegar a Edward, pero voy despacio por el resto del viaje hasta que estaciono frente a su casa. Él me está esperando en su porche y rápidamente viene a mi puerta, abriéndola justo mientras le quito el seguro.
Él me toma en sus brazos y suelto un chillido.
—Hola, hermosa.
Nuestros labios se encuentran, y no puedo tener suficiente de su sabor.
—Hola a ti. —Me carcajeo mientras él cierra la puerta del Jeep con su pie y me carga hacia su cabaña—. Entonces, ¿no tengo permitido caminar esta noche?
Él sonríe con satisfacción.
—Bueno, no serás capaz después de que termine contigo.
Me muerdo el labio mientras el calor se esparce por mi rostro y mi pecho. Esta va a ser una de las mejores noches de mi vida, y preferiría saltarme la cena e ir directo al grano, pero él se esforzó mucho para preparar una linda comida.
Cuando entramos, él finalmente me baja, pero primero, me besa profundamente y no le permito apartarse rápido. Lo disfruto, saboreando su lengua mientras se enreda con la mía.
—Mierda, sabes maravilloso —dice—. Y bien, hice lomo de cerdo envuelto en tocino. Es horrible para ti. No lo he hecho antes, así que, con suerte, sabe bien.
Mi estómago gruñe, y supongo que será mejor esperar a esa follada increíble que sé que me dará.
—Suena increíble, guapo. Me gusta como rompes mi dieta saludable para el corazón.
—Un poco de tocino no te hará mal. Además, el tocino es bueno para el alma, y te lo mereces.
Me gusta como piensa.
Me siento frente a su pequeña mesa, y él trae los platos, los cuales lucen increíbles. Él se ha superado a sí mismo, y no puedo creer lo bien que sabe esto. Mi apetito ha sido un asco últimamente, pero siento que no puedo tener suficiente de esta comida.
—¿Cómo ha estado tu semana? —pregunto.
—No tan mala. He estado esperando esto, así que me mantuvo de buen humor. ¿Qué hay de ti? ¿Cómo estuvo el trabajo ayer?
Asiento, decidiendo no contarle lo exhausta que me dejó.
—Estuvo bien. Hice un montón de muffins de terciopelo rojo con glasé verde y granas blancas. Me encantan los pasteles navideños. También hice galletas y les di forma de árboles y hombres de nieve. Intento hacer lo suficiente de todo para dos días, pero odio que no estarán muy frescos.
—Bueno, no puedes presionarte a estar allí todos los días, y estoy seguro que aún así tenían un sabor increíble después de un día.
—Sí, tienes razón. Mañana, haré un pastel de bodas para corte. Es el primero que hago, así que estoy nerviosa. Mi decoración es decente, pero definitivamente no soy una profesional.
Él sacude la cabeza, tomando mi mano sobre la mesa.
—Saldrá perfecto. Todo lo que haces lo es.
Sonrío tímidamente.
—Gracias. Además, si lo de ser doctor no funciona para ti, serías un chef asombroso. Esto sabe increíble.
—Gracias, pero creo que seguiré siendo doctor. —Se ríe—. ¿Cómo te sientes? ¿Algún problema con el desfibrilador?
Me encojo de hombros.
—Creo que trabajó un poco ayer y esta mañana, pero ninguna descarga, afortunadamente. Creo que preferiría ser pateada en el pecho que sentir eso de nuevo. Pero esta noche, mi salud no es tu preocupación. Esta noche es solo sobre nosotros.
Él asiente mientras toma nuestros platos vacíos.
—Oh, sí, esta noche eres toda mía, y me aseguraré de que lo sepas. —Guiña un ojo y mi cuerpo vibra con anticipación.
Sí, esta definitivamente va a ser la mejor noche de mi vida hasta el momento.
