Hola:
Dejo el capítulo treinta. De acuerdo a los Gaiden, siempre me quedó la idea de que el santo de Cáncer se llevaba bien con Piscis y Aries. Así que en éste universo alternativo, veremos a Manigoldo, Albafica y Shion divirtiéndose.
Atención: Todos los personajes de Saint Seiya y Saint Seiya: The Lost Canvas, pertenecen a Masami Kurumada y Shiori Teshirogi respectivamente. La historia es de mi autoría personal, la cual solamente escribí por diversión.
Día 30: Karaoke en el bar
Manigoldo, Albafica, Shion.
Universo alternativo, amigos, diversión, risas.
Era viernes por la noche, día de pago y el cumpleaños de Manigoldo. Después de salir de la oficina, los tres muchachos caminaban despreocupadamente por la calle, pensando en cómo celebrar el aniversario veinticinco de su amigo.
—Entonces, ¿A dónde vamos? — preguntó Shion, buscando un taxi con la mirada. —Escojan algo tranquilo por favor. —
—No seas aburrido, borrego— dijo Manigoldo, dándole un leve codazo. —Es mi celebración, así que yo elijo. —
—Ya te dije que no me digas borrego, ya no estamos en la Universidad— se quejó Shion. —Además, prometiste que moderarías tu consumo de alcohol, si no lo vas a hacer, te dejamos solo, ¿Verdad, Albafica? —
El mencionado asintió.
—Él tiene razón, te acompañamos, pero que sea diversión sana— indicó el joven de cabello aguamarina. —La última vez que te emborrachaste, te pusiste a bailar encuerado a mitad del parque y la policía te arrestó por exhibicionista. —
—¡Cállate, ni me lo recuerdes! — Manigoldo rodó los ojos y resopló. —Cuando mi viejo fue a sacarme de la cárcel, me sermoneó toda la tarde. —
—¿A dónde quieres ir? — interrogó Shion.
—Que les parece aquel sitio— señaló Albafica.
Los otros miraron en la misma dirección. Unas calles más adelante, se podía distinguir un edificio con un llamativo letrero que decía: "El Santuario, Karaoke Bar".
—Vaya, se ve llamativo— Manigoldo se frotó la barbilla, evaluándolo. —Creo que de pronto me dieron ganas de mostrarle al mundo mis dotes de cantante, así que vayamos. —
Albafica y Shion se miraron entre sí, no pudiendo ocultar una mueca de diversión. Su amigo era muy extrovertido así que, el Karaoke en el bar le quedaba como anillo al dedo.
…
Rato después, Shion trataba de mirar para otro lado, fingiendo que no conocía al tipo que cantaba en el escenario. Por su lado Albafica estaba grabando con su celular la graciosa, y escandalosa, interpretación de Manigoldo, sin dejar de reírse por lo bajo.
—No puedo creerlo, canta horrible, y eso que está sobrio— comentó Shion, tomando un trago de cerveza.
—Déjalo que sea feliz, así nos aseguramos de que no terminará detenido por la policía— dijo Albafica.
—Claro, sólo espero que los demás clientes no vayan a levantar una denuncia— Shion se tapó los oídos cuando Manigoldo soltó un chillido que el micrófono aumentó considerablemente.
Albafica grabó las reacciones espantadas de los demás comensales y luego regresó al escenario con su amigo, quien realmente se veía feliz interpretando aquella canción. Bueno, no todas las personas nacen con dotes musicales.
Continuará...
Gracias por leer.
