Cumpleaños

Estoy dando vueltas en mi cabeza otra vez ¿Que se supone que haga sin tí?

Mr. Loverman by Ricky Montgomery


Esas noches estaban prendidas en fuego de nuestro amor, no sabíamos que teníamos todo y que al final pagamos un alto precio.

Está devastado, todos los días se despierta enfrentándose a la mayor pérdida de todas.

Compró una casa, unos días antes de su primer cumpleaños.

Era justo cómo Harry y él imaginaban, aislados con solo un bosque alrededor, un gran jardín, todo de madera y tapizado de cuadros rojos y blancos.

Acogedora.

Se siente cómo un hogar.

Tiene el pelo negro azacahe hoy, se dirige a comprar lo que necesita casualmente encontró en una tienda unos marcos de lentes redondos que no pudo evitar comprarlos.

— Nunca tuve un par nuevo, gracias a la magia los reparo cada vez que puedo.—Lo dijo sonriendo, cómo si eso no mostrara lo descuidado que fue durante toda su infancia.

Draco se compró 5 pares de esos lentes.

No se a drogado hoy, quiere hacerlo con desesperación pero al menos, hoy no.

"Nunca tuve un verdadero cumpleaños infantil, con los gorritos y la música horrible, pastel en todos lados y los gritos llenos de regaños de las madres. Siempre quise saber cómo se siente."

"Entonces te prometo que en cada cumpleaños tú y yo en privado lo celebraremos."

Draco se lo prometió, y él al menos si cumple sus promesas.

Por eso compró esa casa, para usarlo un solo día al año, habla con Lucas y le dice que traiga a sus hermanos y los amigos de estos para celebrar su cumpleaños, que piensa que es suyo.

No lo corrige.

Pasa el día con los niños, jugando, celebrando comiendo pastel, abriendo regalos que compro para los niños.

Lucas se ve suave de alguna manera ridícula pero compresible. Disfruta de la felicidad de sus hermanos.

Vive y respira para ellos.

Eso es terriblemente triste, no poder tener tú propia vida.

— Muchas gracias señor Harry.— La hermana más pequeña le agradece cuando todo acaba.

La mira, y de alguna manera la vista de sus ojos puros y llenos de sentimientos sinceros le hicieron que su lengua fuera incapaz de moverse.

Harry a su lado, mira todo con una triste sonrisa.

— Ojalá entendieras que me importaría más que te cuidaras, quizás entrar a una clínica que te brinde todo lo que necesitas. —Le toca suavemente el cabello, pero aún así siente su pecho extrañamente cálido, quizás en vida nunca pudo disfrutar de algo así pero ver qué otros niños en situaciones parecidos a él y que Draco consciente de esto armara cada cosa, es algo que lo llena de calidez y orgullo por su amado.

— Extraño el verdadero tú Draco, hace tanto que ya no lo veo qué siento que te perdiste—

Draco solo asiente a lo que dicen los niños, Lucas se despide para llevarlos a casa para volver ayudarlo con la limpieza.

Se dedica en la próxima hora en dejar todo justo cómo estaba antes de regresar este año.

Es hora.

Se dirige a la habitación principal, sus dedos rozan el tapiz, sus pies hacen crujir la madera debajo de ellos, Harry dice decía, que siempre encontró reconfortante ese sonido le recordaba que no estaba completamente solo en una gran casa.

"¿Es capaz de escuchar el eco de mi corazón, que suena en su ausencia?".

No quiere una respuesta de eso hoy, no en su día al menos, entrando en silencio lo primero que lo saludo en la fotos de ellos dos juntos y su varita al lado.

Se acerca y toma la foto recorre todo su rostro y las curvas de sus ojos, la sonrisa amplia y sincera.

Está tan embelesado observando que no nota las lágrimas que caen en ella.

De un segundo a otro, solloza con fuerza. De esa que te desgarrada por dentro y quema cada articulación de tú cuerpo, sientes que mueres pero no lo haces. Eso es peor.

Harry está a su lado rodeándolo con sus brazos, lágrimas cayendo de sus ojos.

No sabe cuánto tiempo lleva allí, pero se levanta y va directamente al espejo de cuerpo completo enfrente de la cama.

Es una suerte que cerró con llave la habitación, se quitó el hechizo que teñía su cabello y el de sus ojos.

Delante a él está de nuevo Draco Malfoy.

Él matón.

Él niño sediento de contacto humano.

Él niño mimado.

Él niño quería ser amado.

Él mortifago si fue amado.

Pero no fue suficiente.

Draco Malfoy nunca consigue lo que quiere.

No entendió en ese entonces que no vale la pena desear algo si solo vas a alargar una vida de agonía, pero no sé arrepiente de haberlo amado, lo amará por siempre.

No puede ofrecer lo que nunca tuvo, el amor no es algo que merezca no nació para ello aún así no quería perderlo, ahora descansando en la bañera llena de agua y jabón aromatizante lo comprende, "todo lo que vale la pena desear es lo que siempre estará fuera de mi alcance en el momento que pienso que lo obtengo."

Sale después de lo que parece horas, y justo fuera de la puerta encuentra a Lucas con los hombros tensos y los ojos serios.

Pensó que se mataría.

Sin palabras lo siente seguirlo a la cocina y les prepara a ambos dos tazas de té en silencio, cargados de un tensión triste, digna de alguna manera extraña, Draco está permitiendo que este chico lo vea vulnerable sin que las drogas estén involucradas o algo tipo lo esté violando hasta que se desmaye. Le muestra la tristeza del verdadero Draco.

Tomando algunos sorbos, Lucas al fin preguntó.

—¿Cómo fue?—Cuestiona.

—¿Cómo fue que?.—Le contesta.

—¿Cómo murió Harry, el nombre que usas?. —Le pregunto directamente.

Draco jadeó ligeramente cuando menciona su nombre, le duele.

—La única persona que amo de verdad.— Su voz baja un cuarto, adolorido y extremadamente vacío.

—Debió ser jodido por lo manera que estás usas su nombre y te puedo apostar que la apariencia de esta mañana tuya era la de él, esta casa y los cumpleaños literalmente él es tú mundo.—Afirme con una mirada gentil Lucas.

Draco se ríe, y ríe por unos segundos enteros.

—No quieres ser cómo él, te lo aseguro.—El ardor de la tasa de alguna manera le quema, pero ese ardor lo tranquiliza y lo trae de nuevo fuera de sus pensamientos.—No quieres ver todo lo que he visto.—Pauso Draco.

—Estoy muriendo.—Draco dice una verdad.

—Si no quieres que tus seres queridos lleguen a esto, debes detenerte, morir a una edad temprana sin haber verdaderamente vivido ni un solo momento no es una vida, te mientes a ti mismo diciendo que saldrás y podrás comenzar una vida nueva cuando ellos la tengan, ¿Quedará algo de ti para que ellos te puedan llorar, así como estoy yo?.— Finalizó.

Nadie dijo nada.

Nadie se movió.

Pero las palabras de Draco están en el aire.

"Estoy muriendo"