NA: Esta historia es la Tercera Temporada de "La noche del tres de Abril", así que, si están confudidos en ciertos puntos es porque todas las explicaciones están en esa historia.
Sin decir más, comencemos.
—Yamato.— Escuchó que alguien lo llamaba, pero no puso atención simplemente dejaba que sus puños se estrellaran contra el rostro de Ryo.
La furia, ira y enojo no lo dejaban detenerse, estaba extremadamente molesto por esa situación, no soportaba que se rieran de él en su cara, mucho menos una persona como él.
—Yamato.— Otra persona lo llamó, sin embargo la ignoró, no quería saber del resto, ni de ese lugar, solo quería acabar con aquella sonrisa que tenía el Akiyama en el rostro.
El castaño hacia lo posible por defenderse, lanzaba puñetazos contra el rubio, pero el Ishida estaba siendo más rápido y mejores reflejos.
—¡Ryo, detente!— Una voz femenina entre la multitud que se encontraba al rededor de ellos.
Unos chicos se acercaron e intentaron separarlos, pero fue inutil, ya que ambos estaban empeñados en su pelea.
—¡Yamato, ya basta!— Fue el grito que dió Takeru al jalar de su hermano con todas sus fuerzas con ayuda de otras personas.
—Exijo que me suelten.— Habló el rubio, ignorando completamente que su nariz sangraba.
—No, hermano, no sigas peleando.— Respondió Takeru.
—Dejalo, a ver si así se siente feliz.— Musitó Ryo, quién también sangraba por la nariz y tenía un ojo morado— Veamos si golpeandome a mi se le quita el dolor de saber que su novia le vio la cara de idiota todo este tiempo.
Yamato apretó su puño, quería seguir golpeando a ese chico.
—Deja de provocar con tus comentarios Ryo.— Rika le habló, mejor dicho, le gritó al Akiyama.
—No estoy provocando, simplemente estoy diciendo la verdad.— Habló el castaño— Aunque, bueno, tampoco es aburrido burlarse de alguien como Yamato, un idiota, iluso.
—¡Callate!— Gritó Yamato enfadado antes de lanzarse de nuevo contra el Akiyama intentando zafarse de todos para golpearlo, pero los demás lograron sostenerlo.
Takeru hizo una mueca ante la mirada de su hermano, emanaba una ira que jamás había visto, ni cuando peleaba con Taichi (Y eso si era preocupante sobre todo cuando eran niños, ambos le había costado bastante ser amigos por las diferentes formas que tenían de comportarse)
—Hermano, por favor, tranquilizate.— Rogó el menor— Sé que estás enfadado, pero rompiendole la cara a Ryo no conseguirás nada.
Eso era verdad, pero no soportaba toda esta situación, que lo haya ofendido, ni mucho menos que se burlara de él.
—Dejame Takeru.— Habló Yamato.
—Si, dejalo, a ver si se le acaba lo de idiota.— Respondió Ryo.
El Ishida nuevamente forcejeo para lanzarse contra el Akiyama, pero antes que eso ocurriera un grito irrumpió en el lugar.
—¿Qué está ocurriendo aquí?— Ante sus ojos apareció la inspectora Onodera.
¡Rayos!
Pensó Yamato, lo que le faltaba ahora tener problemas con la inspectora o con la directora.
—¿Encontraste a Taichi teniendo relaciones con Catherine?— Preguntó la castaña.
—S-si...—Respondió la pelirroja mientras intentaba (inultilmente) secar sus lágrimas que no dejaban de caer al recordar aquel horrible momento.
—Pe-pero, yo pensé que a ella le gustaba Takeru.— Comentó Mimi— Y pensé que Taichi te quería a ti ¿no? D
—Bueno, eso mismo yo pensé, pero al parecer nunca me perdonó que haya terminado con él.— Respondió la Takenouchi— E Izumi tenía razón cuando decía que Catherine miraba de una forma diferente a Taichi.
Si, Izumi lo había dicho más de una vez, pero no le habían creído, ya que pensaban que ese comentario se debía a los problemas que habían tenido en el pasado cuando eran amigas.
—De seguro mostraba interés en Takeru para molestar a Hikari.— Comentó Mimi.
—No me extrañaría.— Respondió Sora— Esa chica es una bruja, siempre busca fastidiar.
—¿No se habrá involucrado con Taichi por eso?— Preguntó la Tachikawa— Para fastidiar a Hikari.
—A estas alturas nada me sorprendería.— Contestó la pelirroja— Ella siempre le hizo la vida imposible, no sé ¿cómo rayos quise ver algo bueno en ella? ¿Enserio soy tan idiota?
—No, Sora, no eres idiota.— Respondió Mimi antes de acercarse a su amiga y abrazarla.
—Claro que lo soy.— Contestó la pelirroja— Debí haberme dado cuenta, Izumi me lo advirtió, Hikari me advertía que esa chica no era de fiar, incluso Nanami me lo dijo y yo ignoré eso e igual intente ser su amiga, no quise criticarla por comentarios de los demás y por eso fui una tonta al ser tan ingenua.
—No, no eres tonta Sora.— Habló la castaña y acarició su rostro— Tú simplemente quisiste ver algo bueno en ella, porque tú eres buena, no ingenua, sino que tienes un muy buen corazón, por eso no criticas a plena vista y prefieres conocer por ti misma a la gente, lo que te hace una buena persona porque eso eres.
—¿Y de qué me sirvió?— Preguntó la Takenouchi— ¿De qué me sirvió ser buena persona? Catherine de igual forma se acostó con mi novio, ni siquiera valoró que fuera me comportara bien con ella, al contrario, hizo lo posible para acostarse con mi novio.
—No, no lo valoró.— Comentó Mimi— Pero eso no te hace culpable, tú simplemente fuiste educada, ella fue la gata, ella es la culpable de esto, no tienes que sufrir por ella.
—No es solo por ella que sufro.— Habló Sora— Lo más me duele es que Taichi haya caído, porque una cosa es que Catherine lo haya seducido, pero él cayó y eso es lo peor.
Si, sin duda era lo peor.
¿Cómo Taichi había sido capaz de eso?
Se suponía que él quería a Sora ¿no? Y que supuestamente había cambiado luego de todo lo que había pasado, hizo todo lo posible para reconquistarla, sin embargo ahora había tirado todo eso a la basura acostandose con esa chica.
—Taichi es un idiota, un idiota.— Musitó la pelirroja.
Mimi tuvo intención de afirmar aquello, pero se mordió el labio inferior, generalmente no le gustaba ser prejuiciosa con las personas y ahora que estaba en esta situación mucho menos se sentía con el valor de criticarlo.
—Al parecer Taichi no es el único que miente en este lugar.— La puerta de la habitación de Izumi se abrió y ante sus ojos apareció la rubia.
¡Rayos!
Mimi hizo una mueca al ver a la rubia.
—Izumi.— Sora pronunció su nombre.
—Hola.— Respondió la oji-verde— Disculpa no quería ser entrometida, pero no pude evitar escuchar su conversación.
—No te preocupes.— Comentó la pelirroja y a continuación un silencio se hizo presente.
Mimi observó a la rubia, Izumi pasó su mirada por la oji-miel, pero rápidamente desvío su mirada, no quería ver a esa chica, rápidamente tomó su bolso y se acercó a la puerta principal, necesitaba salir de ahí.
—Zoe...—La Tachikawa la llamó.
Izumi se detuvo ante esto y volteo hacia ella.
¿La había llamado Zoe?
¿Quién rayos se creía?
—¡No me hables!—Le gritó.
—Izumi, por favor escuchame.
—Ya te dije que no te quiero escuchar.— Respondió la rubia.
Sora alzó una ceja sorprendida ante esto—Hey.— Musitó— ¿Qué ocurre? ¿Por qué se hablan así?
Izumi frunció el ceño y volteo hacia la pelirroja— Preguntale a ella.— No quería hablar de ese tema, en verdad estaba enfadada, sin decir más salió dle lugar cerrando la puerta.
Sora volteo hacia la castaña— ¿Qué ocurrió?
Mimi hizo una mueca y tan solo recordar todo lo que había ocurrido la noche anterior provocó que aquel nudo en la garganta se formara nuevamente e inevitablemente lagrimas comenzaron brotar lágrimas— Lo peor que me pudo pasar.
Takeru, Hikari y Rika caminaron tras la inspectora y los dos imputados, Yamato y Ryo, quienes estaban apunto de sufrir el peor juicio frente a la directora, Rumiko.
—Esto es el colmo ¿cómo es posible que dos alumnos que están en este internado de Élite se coloquen a discutir como vándalos?
—No tengo porque darle explicaciones a usted.— Yamato le respondió a la inspectora Onodera.
—Yo tampoco.— Respondió Ryo.
La mujer frunció el ceño— A mi no, pero a la directora si se las tendrán que dar.— Respondió mientras caminaba.
Atravesaron la puerta del comedor seguido de los tres adolescentes.
—De esta no se salvan.— Rika le susurró a Takeru— Mi madre es una bruja.
Takeru hizo una mueca— Le dije a Yamato que se detuviera.
—No es su culpa.— Musitó Hikari.
—El idiota de Ryo fue quién lo provocó.— Susurró la pelirroja.
Los tres adolescentes dirigieron su mirada a los dos chicos, sin embargo al salir del comedor ante sus ojos aparecieron Kouji y Damar, quienes no pudieron evitar observar sorprendidos a Yamato y Ryo, quienes venían todos desastrados y con el rostro herido.
El rubio pasó su vista por la chica de mechones morados y para esta no fue desaperciba el enojo en aquella mirada.
La inspectora Onodera al verlos no pudo evitar detenerse— ¿Y ustedes dos?— Se cruzó de brazos—Señorita Tachikawa y joven Minamoto, hasta que al fin aparecen ¿donde estuvieron todo este tiempo?
Los dos adolescentes intercambiaron miradas y Kouji se dispuso a responder.
—No es necesario que nos pregunte, mi madre ya nos justificó.
—¿Con Tomoko?
Kouji asintió.
—Pero...—Onodera tuvo intención de decir algo, pero luego recordó que debía encargarse de otra cosa, suspiró— Luego me encargaré de ustedes.— Volteo hacia los otros dos imputados— Yamato, Ryo, vamos a la oficina de la directora.
¿A la oficina de la directora?
Damar y Kouji intercambiaron miradas sorprendidos.
—¡Hey! Tachikawa.— El Akiyama llamó a la castaña— Así que te tenías bien guardado aquel secreto.
—¿Secreto?— La chica alzó una ceja sorprendida— ¿Qué secreto?
—Preguntale a Yama...
—¡Ryo!— La inspectora alzó la voz molesta— ¡Silencio!— Lo tomó del brazo y lo jaló— Vamos.
El Akiyama simplemente sonrió y Damar no pudo evitar quedar más desconcertada, pasó nuevamente su mirada por el rubio, quién literalmente la estaba fulminando con la mirada.
—Yamato, vamos.— Exigió Onodera.
El rubio rodó los ojos y al igual que el Akiyama comenzó a caminar.
—¿En qué minutos esto pasó a ser un jardín escolar?— Pensó la mujer.
Damar no pudo evitar pasar por su mirada por Kouji, quién también se encontraba desconcertado.
¿Qué estaba ocurriendo?
Hikari dirigió su mirada hacia el rubio, quién en vez de seguir a Ryo y Yamato hasta la oficina se había detenido y observaba a la pareja de adolescentes— Takeru.— Lo llamó.
El chico simplemente mantuvo silencio.
Mientras tanto Rika ignoró todo, rápidamente se acercó a Damar y Kouji.
—Al fin regresaron.— Musitó la pelirroja.
—Hola Rika.— Saludaron ambos.
—Me alegra ver que regresaron.— Comentó Rika y se acercó a la castaña para abrazarla, acto que sorprendió a la Tachikawa pero que no dudó en corresponder, después de todo era su mejor amiga.
—Igual me alegra verte.— Respondió la castaña.
—¿Estás mejor?
Damar asintió— Si.— Respondió— Mucho mejor.
Rika sonrió— La escapada a la cabaña te hizo bien.
—Bastante bien.— Contestó la castaña.
La pelirroja dirigió su mirada al Minamoto— Al parecer que la hiciste feliz.
Kouji tuvo intenciones de responder, pero antes de que pudiera hablar la voz de Takeru se escuchó en el lugar.
—Damar.— El rubio llamó su atención.
La castaña volteo— ¿Si?
—Necesito hablar contigo.— Respondió el rubio.
—Rumiko, debes obedecerme.— Natsuko le exigió a la directora del internado.
—Lo siento, pero no puedo, primero debo saber que opina Keisuke al menos.— En verdad no lo sentía, amaba saber que entre Tomoko y Natsuko habían diferencias.
—Yo puedo removerte de tu puesto de directora.— Habló la mujer Ishida.
—Eso lo dudo.— Comentó Rumiko, sabía que no le agradaba, pero ni con todo el poder que tenía podía quitarla de ese puesto, finalmente ella no había llegado hasta ahí porque ella quisiera sino porque sus demás contactos si— Hasta ahora no lo has hecho ¿no?
Natsuko frunció el ceño enfadada, pero no pudo responder, ya que la puerta sonó.
¡Toc, toc!
—Adelante.— Musitó Rumiko.
Fue así como la puerta se abrió y al lugar ingresó la inspectora Onodera junto a los dos adolescentes.
—Permiso directora, pero estos dos se pusieron a discutir frente a todos y a los golpes.— Musitó la recién llegada y la mirada de Natsuko no pudo evitar porsarce en su hijo.
—Yamato.— Habló Natsuko.
—Madre.—Respondió el rubio.
—¿Yamato se enteró por Ryo que tenía una hija con Mimi?— Kouji le preguntó a la pelirroja mientras Takeru y Damar hablaban a la distancia.
Rika asintió.
—¡Rayos!—Exclamó Kouji al recordar la conversación que ayer había tenido con Damar, ella le había contado todo la noche anterior y no esperaba que todos también lo supieran.
—Nadie se lo hubiera imaginado ¿no?— Comentó Rika.
—Damar ayer me lo había dicho.
—¿Qué?— Preguntó la pelirroja.
Kouji asintió.
Damar observó atentamente a Takeru, literalmente no sabía que responder a lo que recién le había dicho el rubio ya que no esperaba llegar al internado y encontrarse con la novedad de que el secreto de su hermana haya salido a la luz.
Al parecer enserio ese lugar estaba maldito, siempre que regresaba se encontraba con algo malo.
—¿Por qué te quedas en silencio?— Preguntó el hermano de Yamato— ¿No sabes que responder, verdad?
Damar se mordió el labio inferior evidentemente el rubio no estaba agradado con la noticia, en su rostro demostraba cierta desilución. Suspiró— La verdad es que si, no sé que contestarte.— Admitió— No sabía que ya sabían la verdad.
El silencio nuevamente se hizo presente en el cual tanto Hikari como Rika se preguntaban ¿qué ocurriría? Takeru y Damar intercambiaban miradas pero ninguno reaccionaba. Era demasiado evidente que el Ishida había dejado a la castaña en jaque como en un juego de ajedrez que ni ella sabía de su participación.
El rubio suspiró y bajó la mirada— Ryo nos dijo la verdad.— Rompio el silencio.
—¿Qué?— Damar alzó una ceja sorprendida— ¿Ryo?
—Si.— Respondió Takeru— Ayer en la fiesta de mis padres.
¡Oh no!
Damar se mordió el labio inferior y apretó su puño ante aquella declaración ¿cómo rayos el Akiyama se había enterado de esto? ¿Por qué había revelado este secreto?
Rodó los ojos.
Ahora tenía sentido aquellas veces que había visto a Ryo junto a Nene, le parecía extraña esa amistad, pero ahora todo tenía sentido, seguramente ella le dijo (no le sorprendería, ambos eran cortados con la misma tijera) debió haberse imaginado que Nene no podría quedarse callada por mucho tiempo, finalmente había revelado el secreto de su hermana ¡Enserio le gustaba fastidiar!
—Jamás me hubiera imaginado que ustedes fueran capaz de esto.— Habló Takeru—Nos escondieron a la hija de mi hermano, mi sobrina.
—Takeru, yo...—Damar suspiró— Lo siento, no queriamos, pero no tuvimos opción, debíamos proteger a Natsumi de cualquier manera.
—¿De quién? ¿De nosotros?— Preguntó el rubio— ¿Creían que eramos un peligro para ella?
—No, Tk, claro que no.— Respondió la chica de cabello castaño y puntas moradas— Tuvimos que protegerla de mi padre, él no quería que Mimi fuera madre soltera.
—¿Y decidieron deshacerse de ella en vez de pedirnos ayuda a nosotros, su familia?— Cuestionó Takeru.
—No.— Contestó Damar— Nosotros si queríamos, pero no nos dejaron, no pudimos, estábamos lejos cuando ella nació.
—Pero ¿luego? Cuando ustedes volvieron.— Habló Takeru— Decidieron seguir ocultando esto.
—Takeru.—Damar hizo una pausa y respiró profundo, llevó mano a su frente— No tuvimos opción.
—Claro que si, la verdad siempre es la mejor opción.
—Si, pero no supimos como gestionar la situación.— Respondió la castaña.
—Lo que llevó a que nos enteraramos de todo de una mala manera.
—Tk.— Damar suspiró— Entiendo tu desilución, pero yo no soy quién para hablar de esta situación, hay una explicación tras esto, fueron las decisiones de mi hermana y pues, yo simplemente te digo que si quieres enojarte puedes hacerlo.— Dijo esto antes de voltear en dirección a la escalera principal.
—Damar.— Rika llamó a su amiga.
—¿Donde vas?— Preguntó Hikari.
—Iré a ver a mi hermana.— Respondió la Tachikawa.
Kouji suspiró, se suponía que se había llevado a Damar para librarla del estrés, pero apenas regresaban se presentaba esto.
—Damar.— La llamó.
La chica ante esto detuvo su paso y volteo— Tranquilo, no haré escándalo.— Habló— Por el momento.
—Yamato se enteró de…—Mimi suspiró— Mi verdad.
—¿Tu verdad? — Repitió Sora.
—Sobre Natsumi.
—¿Qué? — Preguntó Sora sorprendida ante esto— ¿Tú le dijiste?
—N-no…—Mimi respondió con dolor.
—Entonces ¿cómo lo supo? — Cuestionó la pelirroja.
—Ry-ryo…—Habló la castaña— Lo reveló ante todos en la fiesta.
—¿Cómo? — Sora no pudo evitar gritar al hacer esa pregunta— ¿Ryo lo dijo?
Mimi asintió.
—Pe-pero ¿cómo lo supo?
—Es amigo de Nene, era obvio que lo iba a saber. — Habló la castaña— Más extraño sería que no lo supiera, él tiene ojos en la espalda. — Suspiró— Pero lo peor de todo fue que…—Tragó saliva— Envió un mensaje.
—¿Un mensaje? — Preguntó Sora.
—¿No lo recibiste? — Cuestionó Mimi.
—Pues…— Musitó la Takenouchi y sacó de sus bolsillos su móvil, mejor dicho, lo que quedaba de su móvil.
La Tachikawa alzó una ceja— ¿Qué le ocurrió?
—Estaba tan enojada que lo lancé contra el suelo. — Respondió Sora— Y así quedó.
Mimi hizo una mueca, eso explicaba mucho.
—Pero ¿qué envió?
La Tachikawa suspiró e hizo una mueca— Cuando él supo que yo iba a abortar y…—Sacó su móvil y buscó entre sus archivos el mensaje— Envió esto.
Sora observó la pantalla, había una boleta de una clínica ¡Un minuto! La observó detenidamente.
—¿Esta es la consulta para la clínica donde ibas a abortar?
Mimi asintió.
—¿De dónde rayos sacó esto? — Preguntó Sora— Esto es confidencial ¿no?
—Se suponía que lo era. — Habló Mimi— Pero la tuvo y pues, está todo, la firma de mi padre, mi firma, todo.— Llevó sus manos a su rostro— No sabes la vergüenza que pasé.
—Ahora entiendo porque Izumi estaba tan enfadada, no se lo tomó bien.
—Ni ella, ni sus padres, ni...—La Tachikawa suspiró— Yamato.
Sora hizo una mueca— Pero ¿intentaste explicarle todo el tema de tu padre?
—Si, si lo intenté.— Respondió Mimi— Pero estaba tan enojado que no me quiso escuchar, ni siquiera quiere saber de mi.
—¿Has insistido?
—Si, bastante, lo llamé miles de veces, pero no me contesta.— Contestó la Tachikawa— Tenía intentaciones de ir a su departamento, pero justo me encontré con Izumi, y pues, bueno ya te imaginarás que discutimos, está enfadada y no es para menos, les mentí Sora, les mentí a los dos.— Llevó sus manos a su rostro.
Sora hizo una mueca y rápidamente se acercó a su amiga para abrazarla, así como ella lo había hecho hace unos minutos atrás cuando le había contado su vivencia con Taichi.
—Les ocultaste la verdad, pero no lo hiciste porque quisieras, tenías que cuidar a tu hija por eso ocultaste la verdad por tanto tiempo, y pues, ahora tú si planeabas decir la verdad, pero simplemente no supiste como decir la verdad.
—No supe, pero debí haberlo hecho.— Habló Mimi— No tengo excusas Sora, apenas llegué debí haberle dicho todo, tuve muchos momentos en los cuales pude haberlo hecho, pero preferí quedarme callada, cosa que no debió ocurrir después de todo el riesgo era mi padre no ellos, al menos no Izumi, ni mucho menos Yamato, es su hija.
Si, eso era verdad, pero no podía culparse completamente, su situación era difícil y compleja, apenas era una adolescente y en esta etapa todos a acostumbraban a cometer errores.
—¿Y Ryo le dijo quién era su hija?— Preguntó la Takenouchi— Digo ¿sabe que su hija es Natsumi, la hija de Alice?
—No, Ryo no se lo dijo.— Respondió Mimi— Se lo dije yo...—Suspiró— En las pocas palabras que me dejó decirle, le dije quién era su hija.
—¿Y como se lo tomó?
—Mal.— Contestó la Tachikawa— Igual que todo.
—¿Y que crees que hará?
—No lo sé.— Respondió Mimi— Solo espero que me perdone antes de todo, ya que sin él yo no puedo seguir.
Ahora más que nunca lo necesitaba, se había decidido a tener la custodia completa de su hija y para eso necesitaba su apoyo.
—Tranquila, tranquila.— Sora acarició su cabello— Todo se solucionará, estoy segura.
—Eso espero.
—Esto es el colmo. — Habló la directora— ¿Cómo es posible que dos chicos se coloquen a discutir a los golpes en mitad del comedor frente a todo el mundo como si fueran niños de calle?
Bueno, Yamato no era de la calle, pero Ryo si, ya que una cosa era ser un "supuesto" hijo no reconocido de un millonario a un recogido como él.
—Este idiota comenzó. — El rubio señaló al castaño.
—No me llames idiota. — Respondió Ryo— Padre del año.
—¡No me llames así! — Gritó el rubio apretando su puño a más no poder intentando por todos los medios controlar sus ganas de romperle la cara al Akiyama.
—¡Silencio! — Exigió Rumiko— No es posible que en la oficina discutan.
—Permiso Rumiko. — Natsuko quién se encontraba ahí tomó la palabra— Yo dudo que mi hijo haya tenido ese comportamiento por iniciativa propia, él es un chico decente, con buen comportamiento, de buenos valores.
—Habló la abuela del año. — Comentó Ryo antes de lanzar una carcajada ante este comentario de Natsuko ¿buenos valores? ¿Quién era ella para hablar de eso?
La mujer de Ishida frunció el ceño a más no poder ante este comentario— ¿Abuela? — Rió— Corrige tu vocabulario niño.
—Lo que faltaba. — Musitó Ryo— Que tú mama te venga a defender Yamato.
—No necesito que me defienda, puedo hacerlo solo. — Respondió el Ishida molesto.
—Por favor, silencio. — Nuevamente habló Rumiko, ya no estaba siendo divertida esta situación, sino que cansadora— Esto en verdad no es una situación agradable, al contrario, ustedes como habitantes de este internado de Elite deben tener buen comportamiento, al menos dentro del recinto de este lugar, es lo mínimo, afuera si quieren pueden golpearse, pero aquí no.
—Mi hijo no es un chico violento, Rumiko, él jamás tendría ese comportamiento ni adentro, ni afuera.— Respondió Natsuko.
—Mamá.— Yamato llamó a la mujer— Por favor, no hables.— Ella no lo conocía, tristemente si tenía expediente de ser violento, pero no hablaría de eso con ella.
—Si por favor.— Habló Rumiko— Porque ahora la que hablaré seré yo.— Se cruzó de brazos—Desde hoy ambos estarán castigados. Y no será un castigo agradable.
—¿Sora los encontró a Taichi y a ti juntos? — Preguntó Nene sorprendida.
Catherine asintió mientras observaba atentamente las marcas de los golpes que le había dado la pelirroja.
—Ahora entiendo porque te desapareciste de un momento a otro de la fiesta. — Comentó la castaña.
Catherine hizo una mueca— Ni me lo recuerdes.
~Recuerdo~
Sora salió del lugar seguida de Nanami y Taichi volteo molesto hacia la rubia quién sostenía en sus manos su rostro lastimado por los golpes de la pelirroja.
—Todo esto era parte tu plan ¿no?— Taichi le preguntó Catherine.
—¿Qué? — Preguntó la rubia sorprendida mientras tocaba su rostro.
—No sé como no lo imaginé, siempre que me involucro contigo termino teniendo problemas. — Habló el castaño— Debí suponer que el video no sería suficiente, quisiste que Sora nos viera ¿no?
—Claro que no. — Respondió la rubia— ¿Cómo crees?
—No mientras.
—No te estoy mintiendo.— Habló la francesa— No sabía que ella iba a llegar.
—¿Enserio crees te voy a creer eso?— Preguntó Taichi antes de tomar sus pantalones y acomodarlos.
—Pues deberías.
—¿Por qué?
—Porque no tendría sentido.— Musitó la rubia— Tan solo piensalo.— Se acercó a él—Con este secreto te tenía comiendo de la palma de mi mano. — Habló Catherine— Y no lo digo solo por Sora, sino por Hikari. — Musitó— Dime ¿crees que sería tan idiota de decirle la verdad a tu novia cuando podía sacar mucho provecho de este secreto?
Buen punto.
—De ti me puedo esperar cualquier cosa.
Catherine rodó los ojos— Bueno, pero ahora te estoy diciendo la verdad.— Habló— No soy tan idiota como para pemitir que esto ocurra, no solo quedaste mal tú, sino que yo también.— Pasó una mano por su rostro— ¡Auch!— Exclamó al rosar sus manos por una de las marcas que Sora le había dejado.
Taichi hizo una mueca, Sora la había golpeado con dientes y uñas, en verdad la había dejado mal.
~Actualidad~
—Yo pensé que te estabas divirtiendo, digo, el plan era perfecto y por lo que me dices Taichi estaba cediendo ¿no?
Catherine hizo una mueca, eso era lo peor, Taichi al fin había cedido, después de mucho tiempo se había dejado llevar, pero esa pelirroja lo había arruinado.
—Taichi por primera vez se dejó llevar por lo que sentía y no por un chantaje. — Habló Catherine— Si Sora no hubiera llegado habría sido una noche increíble.
—Es una lastima que los haya encontrado. — Habló Nene— Lo peor de todo es que defendió su relación con uña y dientes, mira como te dejó. — Se acercó y señaló su rostro— Tendrás que utilizar mucho maquillaje para ocultar ese rasguño, esa marca de su puño. — Luego señaló su cuerpo— Te sugiero que también uses algo con mangas.
La rubia suspiró— Lo peor no es mi físico Nene. — Musitó— Me importa mucho lo que piense Taichi, no quiero que él crea que fue un plan mío mucho menos ahora que lo tenía comiendo de mi mano.
—Tranquila. — Comentó Nene— Ya sabes que Taichi es débil ante ti, será más fácil persuadirlo para que te perdone. Sobretodo ahora que estará triste por terminar con su novia, necesitará alguien que lo consuele.
—Esto es el colmo Yamato.— Habló Natsuko— Primero lo de ayer y ahora nos dejas en ridículo colocandote a pelear a los golpes con Ryo.
El rubio hizo una mueca, no esperaba que su madre estuviera ahí esa mañana, justo lo había encontrado en aquella situación ¡Rayos! No quería hablar, ni tener que dar explicaciones, quería estar solo.
—No tengo porque explicarte lo que suce...
—Claro que sí.— Interrumpió la mujer— Soy tu madre.
Si ¿cómo no?
Era su madre solamente cuando le convenía.
—Lo de ayer no fue mi culpa.— Respondió Yamato— Fue Ryo quién dijo eso delante de todos.
—Claro que lo fue.— Contestó la mujer— Tú dejaste embarazada a esa niña.
El chico hizo una mueca ante esto, no quería recordar a Mimi, estaba enfadado con ella.
—Porque tú la dejaste embarazada ¿no?— Preguntó Natsuko.
Yamato alzó una ceja ante esto y la observó sorprendido— ¿A qué se debe esa pregunta?
—Creo que es obvio.— Respondió la mujer— ¿Puedo asegurar que esa bebé es tuya?
—Claro que sí.— Contestó el chico— Mimi me dijo que yo fui el único con el que ha estado.
—Esa chica no es de fiar.— Habló Natsuko— Si ocultó por tanto tiempo este secreto es razón suficiente para dudar de ella ¿no crees?
—Cuando yo la conocí ella era virgen, si fui su primer hombre y si tuvimos relaciones.— Respondió el rubio.
—Pero te cuidaste ¿no?— Musitó la mujer— Siempre te cuidaste ¿cierto?
—Bu-bueno yo...—Yamato hizo una mueca, aun recordaba aquel tiempo en el cual los preservativos eran defectuosos, por eso también había ocurrido el tema con Jun— En ese tiempo fui un poco descuidado.
—¿Descuidado?— Preguntó Natsuko.
No iba a hablar de ese tema, era un tanto vergonzoso, pero había sido mala idea utilizar los que regalaban en la farmacia (eran de pésima calidad)
—¿Cómo fuiste tan descuidado?— Preguntó Natsuko— Se suponía que tú sabías cuidarte ¿no?
Bueno, nadie le había enseñado a cuidarse, él había aprendido con amigos en fiestas a utilizar preservativo, no había sido hasta luego de esa noche del 3 de Abril que los padres habían contratado a una persona para que les diera una charla.
—No hablaré de ese tema contigo, mamá.— Respondió el rubio seriamente.
Natsuko rodó los ojos y suspiró, bueno tampoco le interesaba su vida intima— Bueno ahora lo importante es ir pensando en como nos desharemos de esa joven y su...—Natsuko hizo una mueca— Hija.
¿Qué?
Yamato alzó una ceja— ¿Perdón?— ¿Acaso había escuchado mal?— ¿Dijiste que te quieres deshacer de ¡Mi! hija?
—Escuchaste bien.— Respondió Natsuko.
—¿Estás loca?— Preguntó el rubio— No le harás nada a mi hija.
La mujer frunció el ceño— ¿Cómo dices?
—Lo que escuchaste.— Contestó Yamato— No digas, ni siquiera pienses en hacerle algo a mi hija.
Natsuko hizo una mueca ante esto, no le había gustado escuchar aquello.
¿Su hija?
¿Acaso estaba loco?
—No me amenaces niño, yo lo que te digo es por tu bien.
—¿Por mi bien?— Preguntó— Deshacerte de mi hija no es un bien.
—Claro que lo es.— Respondió Natsuko—Yamato, tú no puedes hacerte cargo de esa niña, tienes diecinueve años, eres un adolescente todavía, no trabajas, aún ni siquiera has sacado tu título, no tienes forma ni dinero para hacerte cargo de una hija.
Si tenía.
—Tengo el dinero de mi banda.
—Con eso no te mantienes ni a ti mismo.— Musitó Natsuko.
—Bueno, tengo ahorros del dinero que ustedes me dan.
—Tampoco te va a alcanzar, cuidar un hijo es como echar cosas a una bolsa rota, ya que no se cuida, se va sin más, sobretodo cuando es una bebé.
Yamato hizo una mueca— Tengo el dinero de mi herencia, puedo trabajar en la empresa, tengo muchas opciones.
—Pues no, no tienes eso.— Respondió Natsuko— Mientras sigas con esta idea olvida que tu padre y yo te daremos un yen.
—¿Cómo dices?— Preguntó el rubio.
—Lo que escuchaste.— Contestó la mujer— Mientras sigas con esta idea olvida que te daremos dinero, ya que nosotros no estamos de acuerdo con que reconozcas a esa niña.
Yamato frunció el ceño— ¿Por qué?— Preguntó— Es su sangre.
—¿Nuestra sangre?— Natsuko repitió con ironía— Creo que todavía no le tomas el verdadero peso a esta situación.— Con su mano derecha movió levemente su anillo anular derecho— Esa bebé es una mancha en nuestra familia, una deshonra, simplemente arruina nuestra imagen ¿acaso no pensaste en lo que dirán las demás personas?
—Eso es lo único que te importa ¿no?— Habló Yamato— Lo que dirán los demás, no lo que diga o piense yo.
—Eres un adolescente.— Musitó Natsuko— Apenas sabes de la vida.
—¿Y tú con tus engaños si?— Preguntó el rubio.
—A ver.—Musitó la mujer y frunció el ceño— No estamos hablando de mi, estamos hablando de ti y de este terrible error que cometiste al dejar embarazada a esa chica.
Yamato se cruzó de brazos, tal vez involucrarse con Mimi había sido un error, porque ella simplemente había jugado con él, pero su hija, Natsumi, no lo era, tal vez no lo habían planeado, sin embargo ella no sería como sus padres.
—Mi hija no es un error.
—Claro que lo es.
—No.
—Si, cuando esa chica quedó embarazada apenas eran adolescentes y ni casado estabas con Mimi, aunque luego de esto está más que claro que jamás estarán juntos.
Yamato hizo una mueca, no le gustaba escuchar eso de la boca de su madre, ya que no encontraba que fuera una persona muy agradable, pero tenía razón.
Él jamás volvería a estar con Mimi, ni casado, ni de novios, menos de amigos.
La sacaría de su vida.
milrose: Jajajaj me gusta que lo hayas encontrado fuerte, quería que así fuera y no es para menos, se enteraron de una gran verdad. Si es una pena como terminaron, pero debía ocurrir, quería que así fuera para lo que se viene en esta temporada, ya veremos como lo hará Mimi para que Yamato la escuché, ojalá lo haga. Bueno cuando Yamato quiera ver a su hija ya lo tengo planeado, incluso tengo una escena sobre, pero es del próximo capítulo. Sora simplemente defendió con uñas y dientes su relación o mejor dicho dejó que su rabia saliera, ya era momento que alguien la golpeara. Si a todos nos dolio, pero Taichi se la merecía. Bueno yo dije que Natsuko será odiada como Rumiko y no es para menos, ojalá la amen cuando la conozcan. Bueno, Izumi reaccionó mal porque no solo una persona la engañó si no que dos personas importantes y pues, siempre he dicho que para esta temporada necesito que esté sola para lo que le ocurrirá en esta temporada. Si jajajaj la única pareja feliz es Damar y Kouji, ya era hora, después de todo mientras todos estaban bien, ellos estaban mal y se le vienen más momentos lindos de compresión. Si, ahora nuestro Yamato se viene triste y solitario, sin duda es una pena, ya veremos que ocurrirá con él y como será ahora todo con esta verdad, ojalá sigas leyendo y comentando. Te mando un abrazo a la distancia.
