Capítulo 4: Una intensa mirada
***Rin***
Me había venido a la casa de Kagome tal y como ella me lo pidió, pero conforme iban pasando las horas sabia que tenia que regresar a mi casa. Una parte de mí no quería hacerlo, aquí con ellos me sentía tranquila, segura y sin miedo a comportarme como la verdadera Rin. Pero me había llegado un mensaje de mi padre el cual por mas que quise evitar de ver no pude.
Sera mejor que regreses esta noche a casa, no sé qué planes tengas, pero hoy no puedes dormir afuera. Así que ven pronto.
Me quede unos segundos sin poder decidir que hacer. Al final solo suspire y conteste el mensaje por miedo de que llegara otro.
Está bien padre, iré a casa.
Cuando volví mi vista hacia enfrente me di cuenta de que Kohaku estaba viéndome directamente ni si quiera se molesto en desviar su mirada, al parecer quería que me diera cuenta de que me miraba, o tal vez, se había quedado pensando en algo y casualmente miraba hacia mí, quise creer que la segunda era la respuesta correcta. Escribí rápido en mi celular y se lo mostré, pestañeo un momento sorprendido y después leyó el mensaje.
-¿Pasa algo?- en su cara se veía que algo le preocupaba y de pronto se me olvido aquella incomodidad que había estado sintiendo con él y casi por instinto me senté a su lado y lo vi directamente a los ojos. Quería encontrar algo en su mirada que me diera la razón en lo que estaba pensando, no me di cuenta de que estaba demasiado cerca de él.
-Rin…- su voz sonó diferente y de repente me di cuenta de la situación en la que lo había puesto, obviamente se iba a sentir incómodo. Me hice para atrás y escribí rápidamente en mi celular
-Lo siento, parece como si te pasara algo. Solo quería comprobar que estuvieras bien- Kohaku suspiro y yo logré ver que sus mejillas estaban un poco rosadas y me sentí culpable por eso- No quise incomodarte
-No, no lo hiciste, solo me sorprendiste. La verdad no me había dado cuenta de que estaba tan concentrado en mis pensamientos- de pronto sentí como me tomaba de la mano y yo me sobresalte un poco- me da gusto que te preocupes por mi- de pronto la preocupación se fue y la sustituyo de nuevo la incomodidad. Solo sonreí y fui deslizando mi mano hasta que fue liberada de la suya, tomé mi celular y escribí
-Si hay algo que te preocupe no dudes en contármelo. Por ahora tengo que irme- Kohaku se quedo sorprendido tras leer el mensaje
-¿Te vas?- lo dijo un poco fuerte así que segundos después escuché la voz de Kagome detrás de mi y al escuchar su voz supe que no sería tan fácil para mi irme
-¿Cómo es eso que vas a irte? Se supone que pasaras la noche aquí- Kagome me hablaba con voz firme, la voz que ponía cuando quería obtener lo que deseaba.
-Lo siento, pensaba quedarme, pero recibí un mensaje de mi papá y quiere que vaya a casa esta noche- Kagome se quedo viéndome, como si estuviera buscando la mentira en mí, pero ella sabía que no mentiría con ese tipo de cosas.
-No es justo, se supone que nos divertiríamos esta noche, además tu estabas llo…
-No lo digas o si no Kohaku no me dejara irme- Kagome volteo a ver a Kohaku quien no se perdía de la conversación aun cuando no estuviera entendiendo nada- vendré mañana después de la entrevista, al final de cuentas prometí cuidar de Shippo
-Me parece bien, entonces, decidiste ir al final de cuentas- había un brillo en sus ojos que me resulto extraño, quise preguntarle, pero sé que al final no me diría lo que pensaba
-El mensaje me resulto sincero, tal vez me equivoque, pero, quisiera darle una ultima oportunidad- Kagome solo puso la mano en el hombro y después comenzó a hablarme en lenguaje de señas, me supongo que era para que Kohaku no pudiera entenderla.
-Cualquier cosa que te hagan, no dudes en pedir ayuda, yo les daré su merecido- me dio un poco de risa que dijera eso, sabia que era capaz de hacerlo, solo que siempre me sorprendía que una chica igual de tímida que yo dijera semejante palabras.
-Gracias Kagome, no te preocupes estaré bien- le mostré mi sonrisa mas sincera para que ella se tranquilizara y creo que le funciono porque suspiro y asintió- Tengo que irme ahora o si no jamás llegare a casa y puedo tener problemas
-Claro, te acompañare hasta la parada del autobús- sabía que después de esa frase el que seguía en mencionar algo era Kohaku, estaba esperando que dijera algo cuando de pronto se escucho un celular, el de él. Se alejo y yo tome el momento para voltear de nuevo con Kagome.
-Vayámonos antes de que él cuelgue la llamada- Kagome se rio y yo la empuje hacia la puerta para irnos rápido de ahí, sango también se encontraba en el teléfono, así que solo le hice un ademan con la mano para decirle adiós a lo cual ella contesto. Cuando salimos del edificio y estábamos caminando hacia la parada Kagome de pronto dejo de sonreír y supe que algo no andaba bien- Algo paso anoche ¿Verdad?- Kagome se sorprendió y luego sonrió, pero fue una sonrisa triste
-Me atrapaste, Sango me ha estado tratando de sacar lo que paso anoche, pero, ella piensa que se trata de algo bueno
-Esta claro que no fue así- Kagome negó con la cabeza y seguimos caminando mientras ella veía al suelo- ¿Quieres contarme que fue lo que paso?- vi que Kagome se quedo pensando un momento su contestación, al parecer era algo que le estaba molestando mucho y podía comprender por qué no quería contarme las cosas. Estaba a punto de decirle algo mas cuando vi a alguien conocido caminaba hacia nosotras.
-Oh vaya, pero si es la pequeña Rin- ver a Inuyasha por aquí se me hizo muy extraño, no era su barrio, pero aun así solo le dije hola con la mano
-Hola Inuyasha- vi que Inuyasha me saludo alegremente y después sus ojos se posaron en los de Kagome y no se apartaron por unos largos segundos, después vi a Kagome y ella se había quedado helada, de pronto volteo conmigo y me hablo.
-¿Ustedes se conocen?- Kagome tenia plasmado en su cara que no entendía ni un poco lo que estaba pasando, yo me quede un momento pensando y tratando de entender que era lo que estaba pasando, pero al no encontrar nada solo asentí y le explique brevemente
-Conocí a Inuyasha hace unas semanas, venia mucho a la tienda de conveniencia donde estuve trabajando, ¿Verdad?- Inuyasha se quedó viéndome un momento, después recordé que él aun no entendía el lenguaje de señas del todo así que lo mas probable es que solo haya entendido unas cuentas palabras. Escribí rápido en mi celular y se lo mostré- le estoy contando como nos conocemos
-Iba mucho a la tienda donde ella trabajaba, la verdad me sorprende lo pequeño que es el mundo. No pensé encontrarte esta noche aquí Kagome- Entonces ellos también se conocían, tenia mucha curiosidad de preguntar, pero en eso vi que venía el bus así que me despedí rápidamente y subí en él.
Me sentía mal por dejarlos de esta manera, pero, era el ultimo que pasaba y no podía perderlo, tenía un mal presentimiento de no llegar a casa, como si algo pasara. Mi padre jamás me mandaba un mensaje, tenia mucho tiempo sin importarle si yo llegaba o no a la casa. Cuando me baje del bus camine hacia mi casa y estando en frente dude un poco en entrar, pero aun así camine hacia la puerta. Apenas pasé el umbral y estaba quitándome los zapatos cuando vi la figura de mi padre aparecer por el pasillo.
-Acompáñame hasta la sala- su voz era la misma de siempre, sin sentimientos ni cariño. Lo seguí con la cabeza hacia abajo, era obvio que iba a regañarme y no podía hacer nada para evitarlo- siéntate- hice lo que me dijo y me senté. Espere unos segundos, pero él solo me miraba fijamente sin decir nada- ¿Dónde estabas?
-Estudiando- si se enterara que estaba con Kagome y los demás empeoraría las cosas, le molestaba mucho que estuviera concentrada en otras cosas que no fueran trabajo o estudio, aun cuando la carrera que había elegido tampoco le gustaba.
-¿Estudiando?- asentí y él se quedó mirándome una vez más- ¿Por qué me mientes?- sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo, me sentí atrapada.
-No estoy mintiendo, en la mañana fui a una entrevista de trabajo y después estuve estudiando y…
-Rin, sabes que detesto que me mientas- su voz había subido de tono y yo no sabia bien que hacer o que decir- No se con quien andas perdiendo el tiempo pero espero y no seas tan tonta como para desperdiciar mi dinero- se levantó del sillón sin si quiera mirarme, aunque quisiera contestarle ahora no podía hacerlo- no puedo esperar mas de una muda, tendré que cargar contigo para siempre- quería decirle algo, estos momento deseaba con toda mi alma el poder gritarle, aunque fuera una sola palabra, pero como siempre no podía hacerlo.
No me di cuenta a la hora en la que me subí al cuarto, ni la hora en la que dejé de llorar. Puse la alarma para antes de que amaneciera ahora no quería por ningún motivo encontrarme con él. Estuve toda la mañana sentada en un parque en el que se podía observar un lago enorme, trate de perderme en mis pensamientos y solo me permití escapar de ellos cuando vi que faltaban treinta minutos para que mi entrevista comenzara. Me levante y camine con cierta seguridad hacia el gran edificio, deseaba con todas mis ganas que mi vida cambiara, que esta compañía me contratara y que por fin pudiera independizarme. Aunque no supiera en ese momento que muchas cosas iban a venir y que mi vida definitivamente no volvería a ser la misma de antes.
Cuando llegue y registre mi nombre con la recepcionista me menciono que el señor Jaken me estaba esperando en la recepción del penúltimo piso de esa gran torre, así que me dio un pase de entrada y me dirigí al elevador, cuando las puertas se abrieron me sorprendió ver al doctor que me había entrevistado el día anterior, me hizo sentir de nuevo todo el coraje por las palabras que me había dicho, pero había otra persona mas con él, un hombre de mediana estatura, se le veía gruñón y de alguna manera sentía que algo le estaba molestando.
-Buenos días, señorita Takumi, me alegra que haya decidido venir a la entrevista- su sonrisa parecía sincera, pero luego dejo de sonreír cuando el doctor hablo.
-¿Entrevista? Señor Jaken, esta niña no puede ser parte de la compañía, ni si quiera puede hablar- estaba por contestarle de alguna manera, pero el Señor Jaken me hizo un pequeño ademan con la mano, en señal para que no interfiriera.
-No fue idea mía señor Tanaka, si gustan pasar por favor- el Señor Jaken le dedico una sonrisa solo por cortesía al doctor mientras que a mi me sonrió ampliamente mientras que me invitaba a pasar, estaba algo nerviosa e insegura de lo que se venia y cuando cruzamos esas puertas vi por primera vez al hombre que estaba detrás de esta gran compañía. En el momento en el que nuestros ojos se encontraron me di cuenta del porque muchos querían conocerlo, él era alguien especial. Tenia el cabello plateado y largo, de alguna manera me recordaba al cabello de Inuyasha, solo que la persona en frente mía lo tenia mas aplacado, como mas cuidado. Todo en él estaba perfecto, desde su pelo, sus ojos dorados, sus facciones marcadas, su traje gris perfectamente alineado, simplemente todo- Buenos días Joven Sesshomaru, los dejare solos para que puedan hablar- estaba inclinándose para irse cuando Sesshomaru hablo mostrando su gruesa y sensual voz
-Espera Jaken, aun no puedes retirarte- Jaken solo volvió a inclinarse y dio unos pasos hacia atrás poniéndose a un lado mío- Usted debe de ser la señorita Takumi, ¿Cierto?- yo solo asentí, pensé un momento que lo mejor seria escribir la respuesta en mi celular y mostrarme un poco mas cortes, al final de cuentas no estaba hablando con cualquiera. Pero Sesshomaru volvió a hablar- no es necesario que lo escribas con el simple asentimiento entiendo- quise darle las gracias, pero no me dio tiempo- Tengo entendido que ayer vino la señorita Takumi a una entrevista, ¿Puedo saber porque no la acepto, Doctor Tanaka?- ni si quiera lo estaba viendo, miraba unos papeles mientras esperaba su contestación.
-Vera Señor, yo la entreviste ayer, pero, hay algunas inconsistencias en su currículo, no podía dejarlas pasar por alto- se podía notar el nerviosismo en su voz y estoy segura de que no era la única que pudo notarlo.
-¿Cuáles fueron esas inconsistencias?- él seguía sin voltear a verlo, firmaba y anotaba cosas en los papeles que tenia
-En sus trabajos anteriores nunca había trabajado como asistente de algún doctor, ni si quiera algo que le se acercara y no podía arriesgarme a contratar alguien con ningún tipo de experiencia en el campo- me sorprendió con la facilidad que estaba inventando todo, yo sabia mejor que nadie que esa no era la verdadera "inconsistencia" cuando estaba por protestar, de cualquier manera posible, el Señor Jaken me toco levemente el hombro y voltee a verlo, con su dedo índice me hizo el ademan de que guardara silencio.
-Ya veo, pensé haber escuchado que se trataba de otra cosa, Señorita Takumi ¿Tiene algo que decir?- por primera vez desde que comenzó a hablar dejo de ver sus papeles para dirigirse a mí, estaba tratando de escribir algo cuando volvió a hablar- no se preocupe, puedo entender el lenguaje de señas- me sorprendió mucho que él me dijera eso, pero, solo asentí y conteste a su pregunta
-Me parece que el doctor Tanaka se ha confundido, ya que yo si tengo experiencia en un laboratorio, no fue mucho tiempo, pero aprendí muchas cosas ahí, además de que soy una persona que aprende rápido- me sentía algo nerviosa al contestarle, hasta sentía que mis manos temblaban un poco, pero rezaba para que no se hubiera notado. El doctor me miraba y miraba a Sesshomaru como tratando de entender de lo que estábamos hablando.
-Ya veo, quiero hacerle otra pregunta Señorita Takumi y quiero que me responda con sinceridad ¿Usted realmente se sintió cómoda con la entrevista del día de ayer?- me hizo la pregunta a mí, pero en el ultimo momento desvío su mirada para ver al doctor que estaba aún más nervioso que antes
-Señor Sesshomaru, yo trate bien a la señorita Takumi, no entiendo su pregunta- Sesshomaru endureció su mirada y el doctor se quedó callado
-No tanto, pero estoy acostumbrada de cierto trato con mi condición, no es algo nuevo para mí- él se quedó unos segundos pensando en lo que le había dicho, hasta llegue a pensar que no me había entendido y estaba punto de escribirle un mensaje cuando salió de sus pensamientos.
-Vera doctor Tanaka, leí el currículo de la señorita y el anuncio que pusimos para los reclutas. Pedimos un practicante, no un doctor titulado, ¿Sabe lo que eso significa?- como si todo lo hubiera tenido a la mano le paso unos documentos al doctor donde se podía ver mi currículo y el anuncio que vi por internet
-Fui yo mismo quien puso el anuncio señor Sesshomaru, pero sigo sin ver en lo que realmente pueda ayudar esta señorita
-Lo que yo veo es que realmente quien no puede ser útil es usted Doctor Tanaka- hasta yo sentí un escalofrío recorrer mi columna al escucharlo decir esas palabras, la cara del doctor cambio de color, paso a estar blando y después se puso rojo.
-¿Me van a despedir?
-Aun lo estoy considerando, pero ¿Qué opina usted?- de alguna manera me sentía culpable por esto, jamás me había tocado ver esta clase de escenas.
-Opino que me parece absurdo que me despida solo por una muda, solo me encargue de cuidar la imagen de la empresa señor Sesshomaru- por fin había soltado sus verdaderos pensamientos, al parecer ya no le importaba detenerse en decir las cosas simplemente las dejaba salir tal cual las sentía.
-¿Imagen?- Sesshomaru se paro de su escritorio y yo sentí un poco de miedo, él imponía demasiado con tan solo una mirada, además de que también estaba muy alto. Rodeo su escritorio hasta ponerse en frente del doctor, yo di unos pasos hacia atrás y Jaken también hizo lo mismo- Me preocupo mas el darme cuenta la clase de imagen estaba transmitiendo usted que no puedo permitir que siga trabajando para mi compañía y no se preocupe en regresar con su superior él mismo me dio su carta de despido así que váyase de mi vista en este momento- me sentía cada vez peor, quería decir algo pero Jaken susurro algo en mi oído.
-Tranquila señorita, el Señor Sesshomaru sabe lo que hace- yo aun así sentí una angustia inmensa, realmente me sentía mal por él.
-Nunca pensé que perdería mi trabajo por una persona discapacitada- yo aprete los puños y quería darle un golpe, quería desquitar mi ira contra él, por todos aquellos que me trataban de esta manera si el pensaba que yo era una discapacitada le mostraría con mis propias manos que no era así. Pero alguien fue más rápido que yo. Sesshomaru.
-Las personas como tu son las que mas detesto- el doctor se encontraba en el suelo por el puñetazo que le había dado Sesshomaru yo me había quedado congelada sin saber bien que hacer o que no hacer- ya no me hagas perder más tiempo, Jaken
-Si señor- Jaken ayudo al doctor levantarse y después se lo llevo casi a empujones de la oficina, yo me quede viendo todo y después Sesshomaru volvió a hablarme
-Siento mucho todo esto, tengo una ultima pregunta- yo aun lo miraba sorprendida pero aun así solo asentí para que continuara- ¿Puedes seguir una receta médica?
-Si, hacia algo parecido en el laboratorio donde trabajaba- Sesshomaru se arreglo un poco el traje y después asintió
-Muy bien, comienzas mañana, ve con Jaken él te dará todas las indicaciones ahora tengo una junta que atender- me sentía muy feliz, aunque confundida, no sabia como reaccionar por lo mismo, sentía como si hubieran pasado muchas cosas en tan solo unos momentos. Aun así, le di las gracias con una reverencia y después salí de la oficina con una enorme sonrisa- no llegues tarde Rin- alcance a escuchar antes de cerrar la puerta, sentí como si mi corazón saltara al escuchar mi nombre de sus labios. Tal vez esa fue la primera vez en la que sentí mi corazón tan agitado por alguien…
***Notas de autor***
Espero y les haya gustado este capitulo, yo tenia la idea de que desde un principio los dos hermanos mostraran un interés en sus respectivas parejas jeje así que por eso la actitud de Sesshomaru por lo que le dijeron a Rin, además de que, realmente odia que alguien sea tratado con discriminación a lo cual estoy totalmente de su lado.
Saludos y espero leerlos prontoooo n_n/
