Capitulo 20: Sentimientos
***Rin***
Cuando entre a la cocina me sorprendió darme cuenta de que no había nadie, aunque debo de admitir que también me hizo sentir mas tranquila. Esta casa era enorme y aun así siempre había gente por todos lados, así que sentir esta soledad por unos momentos era realmente reconfortante. Al no haber nadie tomé un poco de agua y una manzana del refrigerador, me di cuenta de que en la cocina había una puerta que al parecer daba al jardín de la casa. Necesitaba un poco de aire fresco así que salí tranquilamente. El jardín ya lo había recorrido el día anterior, pero aun así no logro acostumbrarme a la majestuosidad del lugar, además de todos los colores que se podían apreciar. Decidí sentarme en un espacio donde el césped se podía ver fresco y cómodo, me quedé unos minutos observando el lugar, las flores, las plantas y los grandes arboles que se hacían lugar por la residencia. No eran muchos, pero si los suficientes para generar una sombra cómoda y fresca, estaba muy perdida en mis pensamientos cuando sentí una mirada puesta sobre mi, era tan pesada que no podía moverme. El sentimiento que generaba esa mirada es como si estuviera a punto de ser comida por algo, en este mismo momento me sentía la presa.
-¡Ah-Un vuelve aquí!- alcance a escuchar el pequeño grito de alguien cuando voltee a ver de que se trataba, el blanco, enorme y peludo ya se encontraba encima de mi, sin darme tiempo alguno de poder reaccionar- ¡Ah-Un no lo hagas!
-¿Por qué lo dejaron salir con la señorita ahí?- yo aun no podía ver absolutamente nada mas que el enorme animal encima mío.
-Dijeron que no había nadie afuera- escuche a las dos mucamas acercarse rápidamente. Mientras tanto utilice mis manos para quitarme gran parte del pelo que no me dejaba ver y lo siguiente que observe fueron los dientes. Se trataba de un perro enorme- ¡Ah-Un quítate de la señorita!- lo siguiente que se escucho fue un gruñido fuerte y claro que me hizo estremecer. Tenia miedo por lo que podía esperar, pero después en lugar de sentir sus dientes fue algo suave y lleno de liquido, su lengua. El enorme perro comenzó a lamer mi cara de manera cariñosa, como si estuviera feliz de verme y por lo mismo comenzó a hacerme muchas cosquillas. Yo comencé a acariciarlo de la cabeza mientras trataba de apartarlo lo suficiente para poderme enderezar- Lo siento mucho señorita- la voz de la mucama parecía preocupada, hasta podría decir que tenia miedo, mas miedo que yo hasta hace un momento con el perro.
-Tranquilas no paso nada- ya me había sentado y el enorme perro se había sentado a mi lado dejando que lo siguiera acariciando.
-Estábamos sacándolo a pasear, cuando me imagino que la escucho y se soltó a correr. Deje que me lo lleve- yo asentí mientras veía como volvían a tomar la correa, todo iba bien hasta que Ah-Un sintió como era jalado y acto seguido volteo furioso con ella, le gruño mostrándole los dientes hasta que ella por el susto soltó la correa.
-Ah-Un tienes que dejar que te llevemos, ella no es el Joven Sesshomaru- la otra mucama dio un paso hacia el perro pero él siguió gruñéndole en señal de que no se acercara a lo que ella dio el paso hacia atrás y el perro tomo con su hocico la correa y volteo felizmente conmigo dejándome la correa en mis piernas.
-Lo sentimos mucho señorita, Ah-Un suele ser muy dócil, solo se comporta así cuando ve al Joven Sesshomaru, no sabemos porque se esta comportando así con usted- el perro seguía meneando su cola alegremente y me miraba con mucha ternura, yo volví a acariciarle la cabeza y tome la correa en mis manos. Después me levante y limpie un poco mi vestido.
-¿Les molesta si soy yo quien le da el paseo?- Las dos se quedaron viendo la una a la otra, como si estuvieran dudando en que contestar.
-El señor Sesshomaru no deja que nadie toque a Ah-Un fuera de nuestro personal
-La verdad es que tampoco hay alguien que se atreva a acercarse a él- las dos se encontraban muy nerviosas.
-Tendrán un mayor problema si el perro no quiere que ustedes lo toquen, así que no se preocupen, lo llevare a dar una vuelta y después lo traeré con ustedes- Ellas se quedaron un momento observando al perro y después a mi para después solo lanzar un pequeño suspiro de resignación.
-Entonces lo dejamos a su cargo, lo sentimos mucho por estas molestias- las dos me dedicaron una reverencia y después caminaron de nuevo para la casa.
"Ahora solo somos tu y yo Ah-Un" El perro se me quedo viendo para después volver a mover su cola con mucha energía. Comencé a caminar y el iba en todo momento en frente de mi, olfateando todo lo que había a su paso. Ahora que lo veía bien estaba hermoso, su pelaje era de un blanco demasiado brillante, también era esponjoso de manera que no podías asegurar en que momento tocarías su piel. A pesar de verse grande, realmente no lo era, me llegaba un poco debajo de mi cintura solo que su pelaje lo hacia ver como si fuera enorme aunque para ser sincera sabia que tenia la fuerza suficiente para sacarme arrastrando de aquí. De vez en cuando dejaba la correa un poco suelta y si él sentía que se estaba alejando volvía conmigo a lamer mis manos o simplemente sentarse a un lado mío. No se cuanto tiempo paso, solo me di cuenta de que ya era tarde cuando las luces del jardín se encendieron, anunciando que estaba oscureciendo.
"Es hora de que vuelvas a tu casa Ah-Un" Sabia que no podía leer mi pensamiento pero aun así lo acaricie de la cabeza y él volvió a lamer mi mano como si fuera su respuesta. Después caminamos de regreso para la casa, a pesar de ser un lugar muy grande no estábamos muy lejos de la casa. De repente vi una luz muy grande que al parecer era un carro y mas por instinto que por otra cosa me escondí en uno de los arbustos junto con Ah-Un. No tengo idea de porque lo hice, pero, me quedé viendo como la Señora Irasue salió de la casa con Sesshomaru casi corriendo detrás de ella, tuve que hacer un doble esfuerzo para poder escuchar lo que estaban diciendo.
-No puedes irte solo así- Sesshomaru sonaba demasiado enojado
-Te dije que tengo asuntos importantes que atender, deberías de darle las gracias a tu pequeño hermano, cada vez hace su trabajo de mejor manera- Ella aun no había subido al carro y a pesar de su voz dulce había algo que no estaba bien. "¿Con hermano se refiere a Inuyasha?"
-Prometiste que lo mantendrías lejos de todo eso
-¿Lo hice? Mi único objetivo es que llegues gloriosamente a ocupar el lugar que te corresponde y tu hermano comparte esa meta- definitivamente algo no andaba bien, Sesshomaru cada vez se tensaba aun mas- Tu hermano y yo no dudaremos ni un segundo de quitarte todas las cucarachas que quieran aferrarse a ti, en especial…- en ese momento Ah-Un chillo en mi oído seguido de que lo lamio, así que no pude escuchar absolutamente nada de lo que dijo. Lo quite rápidamente y me limpie la saliva mientras volvía a poner a atención a la conversación pero la Señora Irasue ya estaba subiéndose al auto- Espero volver a vernos pronto Hijo, disfruta de tus cortas vacaciones, serán las ultimas que tengas.
-Con cuidado madre- dicho eso el auto avanzo. Yo me quede aun oculta, no sabia bien si salir o no aun cuando el carro dejo el lugar. Sesshomaru se había quedado parado justo en la entrada, así que no sabia cuando era conveniente salir de mi escondite sin ser notada, solo tenia que esperar un poco mas. Tal vez lo hubiera logrado, de no haber sido por Ah-Un, ese traidor que en cuanto vio a Sesshomaru se fue corriendo hacia él arrastrándome en el proceso. Tuve que correr por unos metros mientras era arrastrada por Ah-Un y casi caigo al suelo de no haber sido por Sesshomaru, bueno, por su cuerpo para ser específicos, choque con él sin poder detenerme- ¿Rin? ¿Ah-Un?- yo me quedé unos segundos escondida en su cuerpo para después posar mis ojos en el culpable de esta situación, quien estaba saltando de lado a lado para llamar la atención de Sesshomaru- ¿Qué hacen aquí?- "Traidor" le dije mentalmente a Ah-Un antes de contestarle a Sesshomaru.
-Salí a dar un paseo con Ah-Un- Sesshomaru volteo a ver a su perro, quien seguía saltando y moviendo su cola con toda su fuerza, reclamando la misma atención que me había pedido a mi hace unas horas.
-¿Un paseo? ¿Dejaste que Rin te paseara?- lo acaricio con mucho cariño y el perro no paraba de mover su cola con emoción- ¿Verdad que es fantástica?- en este momento no se si era Ah-Un o yo la que se había emocionado mas por sus palabras, mi corazón no paraba de retumbar y hubiera seguido así de no haber sido por Ah-Un que había ido a lamer mi mano- ¿Dónde estaban? Pareciera como si hubieran salido de algún tipo de escondite- me dio una sensación de alivio cuando vi que su rostro ya no se encontraba tan tenso y preocupante como hace unos momentos con su madre, así que decidí que era mejor no mencionar lo que había escuchado.
-Estábamos dando un paseo por los alrededores, estaba recogiendo mi arete cuando Ah-Un te vio y me jalo con él- Quise que fuera lo mas natural posible y la verdad ahora Ah-Un pareciera que estaba de mi lado, porque comenzó a lloriquearle a Sesshomaru por mas mimos.
-¿Querías traerla conmigo? ¿Era eso?- Ah-Un volvió a ladrar y mover su cola con mucha emoción, como si estuviera contestándole a su pregunta. Sesshomaru se enderecho y paso su brazo sobre mis hombros y me acerco a él- Te has ganado un premio por eso, así que vamos a dártelo- Ah-Un ladro aun mas fuerte y se fue corriendo hacia donde supongo esta su casa Sesshomaru comenzó a caminar sin despegarme de él así que técnicamente me arrastro hacia donde se había ido Ah-Un.
-Puedo caminar por mi cuenta- me sentía un poco incomoda, casi nos veíamos como si fuéramos una pareja y no quería que mi mente si quiera comenzara a imaginarlo, porque luego seria un deseo.
-Lo se pero, ahorita mismo, necesito compañía- voltee a verlo rápidamente al escuchar el tono con el que me hablo, era como si estuviera totalmente derrotado y al ver su cara aun tensa y su mirada perdida, decidí no decir nada mas y continuar así, al final de cuentas solo seria unos minutos mas. Cuando alcanzamos a Ah-Un ya estaba sentadito justo a un lado de su plato de comida, esperando pacientemente a Sesshomaru no se movía ni un poco aun cuando vio que se acercaba con una bolsa de comida él se quedo totalmente quieto. Solo se movió cuando Sesshomaru termino de ponerle la comida y se separo.
-Se ve que te quiere mucho, ¿Lo tienes desde hace mucho?- quería que se distrajera un poco, que despejara su mente de lo que fuera que estuviera pensando, de lo que fuera que su mamá le haya dicho.
-No es mío, Ah-Un era un regalo
-¿Un regalo? Pareciera que ha crecido contigo
-Era para mi hermano, nunca logre dárselo. Justo después de comprarlo no lo he vuelto a ver- sus ojos de nuevo mostraban esa inmensa tristeza, era algo desgarrador e inimaginable poder ver a este gran hombre de esa manera. Así que como un impulso solté las siguientes palabras.
-Cuando hablas de tu hermano, ¿te refieres a Inuyasha?- Casi tan rápido como le dije eso me arrepentí de hacerlo, Inuyasha era mi amigo, lo que me había dicho (aun cuando no fuera toda la historia) no podía salir de nosotros y mucho menos con su hermano, con la única persona en el mundo que no quiere ver.
-¿Qué dijiste? ¿Tu lo conoces?- Sesshomaru me había sujetado de los brazos y apretaba con fuerza
-Algo así, él esta tratando de salir con Kagome- Me sentía mal por mentirle, aunque en cierta manera no lo era, solo estaba omitiendo parte de la verdad, aun así Sesshomaru no me soltó ni aflojo su agarre
-¿Sabes donde se encuentra ahora? ¿Puedes llamarlo?- no sabia que contestarle, no podía darle el numero de Inuyasha, no sabia que hacer- Rin, contéstame ¿tienes su contacto?- cada vez apretaba mas su agarre mientras que mi mente estaba confundiéndose cada vez mas y comenzaba a doler. Fue entonces cuando se escucho el llanto de Ah-Un quien estaba empujando cariñosamente la pierna de Sesshomaru- Lo siento, no quise hacer eso- aflojo su agarre pero no quito sus manos, ahora acariciaba la parte que estaba rosada. Solo así se tranquilizo Ah-Un y se recostó a mis pies, no los tocaba, pero era como si estuviera protegiéndome de alguna manera. "Gracias" le dije mentalmente mientras volvía a mirar a Sesshomaru.
-No tengo su contacto, eso lo debe de tener Kagome
-Si, ella debió decírtelo, aunque si ya lo has visto no hay que pensar mucho para darse cuenta de que somos muy parecidos- pareciera que estaba tratando de calmar un poco su interior, yo solo asentí y espere a que estuviera mas tranquilo.
-Lo siento por tocar un tema tan sensible- Sesshomaru relajo su mirada y siguió acariciando mis brazos, solo que ahora no eran de un modo tranquilizador, su toque se había vuelto mas suave, casi con deseo estaba tan concentrada en su caricia que no me di cuenta lo que se estaba acercando su cara a la mía aunque solo pego su frente con la mía, mi cuerpo entero se estremeció.
-Creo que en este punto los dos sabemos demasiadas cosas intimas del otro- hizo un énfasis en la palabra "intima" que sabia exactamente a lo que se refería, no pude evitar reírme. Me aleje un poco de él para poder hablarle.
-Necesito comer ¿Puedo entrar?- vi su cara de decepción, cara que rápidamente cambio para volverse neutral, el mismo Sesshomaru de siempre.
-Vamos a alimentarte que esta noche te necesito con fuerzas- sentí como los colores subían por mi rostro sin poder contenerlos y lo aparte aun mas de mi.
-¿Qué quieres decir con eso? Me iré primero- Acaricie a Ah-Un antes de irme hacia la casa, sin voltear hacia atrás sabia que Sesshomaru venia conmigo, podía sentirlo detrás de mi.
La cena transcurrió en total tranquilidad, Sesshomaru no hizo ningún otro comentario con dobles intenciones. De vez en cuando me pregunto si la comida era de mi agrado y en otras simplemente me platicaba un poco de la historia de la casa. La verdad, fue la primera vez que tenia una conversación normal con él y tan amena. Cuando terminamos de comer ya era demasiado tarde, mi cuerpo se encontraba cansado y estaba cayendo prácticamente del sueño.
-¿Te debería llevar a la cama?- estábamos en la sala y yo estaba casi recargada en el sillón así que cuando dijo eso trate de enderezarme pero el sueño no me quería soltar
-Puedo hacerlo yo sola-
-Esta claro que si, pero a mi no me molesta hacerlo- dicho esto sentí como me levantaba del sillón y me llevaba cargada en sus brazos. Quise protestar pero aun así el no se detuvo en ningún momento, hasta que estuvimos en la habitación, aunque el me quería acostar yo me volví a sentar en la cama.
-No tendremos sexo hoy- había llegado a un punto en el que el cansancio y el sueño se estaban apoderando de mi.
-¿Hoy no? ¿Entonces cuando sí?- no veía muy claro pero algo me decía que se estaba divirtiendo con mis comentarios.
-Cuando dejes de atormentarme
-¿Te atormento? Creo que es al contrario
-¿Al contrario? Claro que no, siempre estas en todas partes. A cualquier parte que volteo estas, cuando quiero estar sola, cuando no quiero estarlo, cuando estoy en problemas, parece que supieras cuando te estoy pensando- dejé salir un suspiro y sentí como Sesshomaru acariciaba mi mano- ¿Cómo te puedo atormentar yo?
-No tienes idea de como lo haces- aun no podía enfocar bien, pero se veía como si su mirada de nuevo se encontrara perdida o con dolor
-Esa no es una respuesta aceptable, así que si no piensas darme una respuesta aceptable mejor ayúdame- me voltee para que viera que necesitaba ayuda con el cierre del vestido.
-¿Estas segura que quieres que lo haga? Creo que sabes que no podre detenerme- volví a voltearme con cara de desafío.
-Te dije que esta noche no pasara nada- Sesshomaru se rio un poco y después me hizo la seña para que me volteara y bajo de la manera mas lenta que pudo el cierre y en su paso fue rozando mi piel mientras deslizaba el vestido, dejando una deliciosa sensación a su paso.
-Hablas con mucha seguridad sobre ti misma- antes de dejarme que me diera la vuelta me dio una pequeña mordida en mi cuello estremeciéndome.
-Lo hago porque tengo un as bajo la manga- me levante y mi vestido termino por deslizarse hasta mis pies, para después volverme a sentar justo a un lado de Sesshomaru, ahora podía verlo con mas claridad y sus ojos tenían ese conocido brillo- ¿Quieres saber cual es?- Me acerque aun mas hasta sentir su aliento cerca del mío.
-Estas jugando con fuego Rin- la voz de Sesshomaru se había endurecido y se que estaba haciendo todo el esfuerzo del mundo para no tomarme en este momento.
-No querrás empezar algo que no podrás terminar, yo en cualquier momento me quedare dormida- Sesshomaru puso su mano en mi cintura y una nueva sensación disfruto mi cuerpo
-Podría simplemente despertarte- su boca de nuevo se acercaba a mi cuerpo pero alcance a detenerlo.
-No podrás despertarme, porque después de meses puedo conciliar el sueño y es gracias a ti- él se quedo paralizado cuando fui yo la que lo besé. Fue un beso algo torpe, mas que ser romántico o pasional, fue de agradecimiento un tipo de ofrenda de paz. Tal como le había dicho sentí como mi cuerpo iba perdiendo fuerza y caía en la inconciencia. Se que estuvo llamándome hasta que se dio cuenta que había caído en un sueño profundo. No se quien de los dos se aferro a quien, pero él termino acostándose a mi lado y me acurruco en sus brazos. Recuerdo que escuche su voz aunque no estoy segura si aquellas palabras fueron solo parte de mi sueño o las había dicho en realidad.
-A partir de ahora no me volveré a separar de ti Rin… ni si quiera ella te va a separar de mi…
En ese momento no me importaron mucho sus palabras, fueron guardadas muy en el fondo de mi corazón, al menos mi inconsciente podría estar tranquilo de alguna manera sabiéndolo. Tal vez si hubiera estado consciente hubiera entendido sus palabras, hubiera al menos estado preparada para lo que fuera a pasar en el futuro…
***Notas de autor***
Creo que estamos viendo una nueva etapa en la relación SesshoRin y la estoy disfrutando muchísimo. Estaré leyendo sus comentarios y muchísimas gracias a todos aquellos que aun continúan firmes con esta historia.
Una ultima cosa… díganme que no fui la única que murió de ternura con Ah-Un :3 creo que fue de lo mejor del capitulo jeje
Saludoos :*
