De acuerdo a lo que habían acorado la tarde anterior, Georgiana pasó a buscar a Elizabeth por su habitación, y bajaron juntas al comedor familiar a desayunar.

Elizabeth estaba muy nerviosa y ansiosa, y prestó muy poca atención a sus alrededores; era la primera vez que iba a ver al Sr. Darcy después que rechazó tajantemente su propuesta de matrimonio, y el Sr. Darcy le entregó la carta defendiéndose, y sobretodo previniéndola sobre el carácter de Wickham.

Era consciente que había sido muy injusta con el Sr. Darcy, y estaba profundamente avergonzaba de las cosas que le había dicho e incluso acusado. Sumado a ello, el Sr. Darcy no solo la estaba hospedado a ella y sus tíos en Pemberley - cuando no tenía ninguna obligación de hacerlo – sino que también se había encargado que el doctor de Lambton estuviera a su disposición.

Deseaba poder disculparse con él, y agradecerle todo lo que había hecho por ella y sus tíos.

Al entrar en el bonito y amplio comedor familiar, notó que su tía estaba conversando amenamente con el Sr. Darcy.

Darcy levantó la vista, y sus ojos se encontraron con los de Elizabeth. Elizabeth se ruborizó y bajo levemente la mirada. Elizabeth respiró hondo tratando de contener sus emociones y levantó la vista y lo miro nuevamente a los ojos con una leve sonrisa. Trató de transmitirle con los ojos el agradecimiento que sentía por él.

Al ver a Elizabeth, Darcy sintió un torrente de emociones, entre ellas alivio al ver que estaba mejor. Se levantó y se acercó a Elizabeth y a su hermana. Después de los saludos de cortesía y preguntarle a Elizabeth por su salud, Elizabeth se sentó al lado de su tía.

A pesar de los deseos que Elizabeth sentía de conversar con el Sr. Darcy, se sentía cohibida, y habló muy poco durante el desayuno. La Sra. Gardiner, comentó que su tío estaba recuperándose, y estimaban que en pocos días iban a poder regresar a Londres.

Después del desayuno, Darcy ofreció hacer un tour de las principales habitaciones de Pemberley para Elizabeth y la Sra. Gardiner. Ambas damas aceptaron, y Georgiana también se unió.

Darcy les contó la historia de Pemberley, mientras les mostraba cuadros de sus padres y ancestros. Elizabeth miró detenidamente el cuadro de los padres del Sr. Darcy, y comprobó que el Sr. Darcy era muy parecido a su padre, mientras que Georgiana se parecía a su madre.

Posteriormente fueron a la sala de música, donde había un elegante piano, un arpa y cómodos sillones. La decoración de la habitación era en colores rosa y amarilla, había varios bonitos adornos de porcelano y grandes ventanas. Luego, fueron al gran salón donde se celebraban las fiestas. Dicho salón, era el doble de grande que el de Netherfield Park, y más lujoso.

Después recorrieron dos salas más, una de ellas, era una sala de visitas informal, y la otra una sala de negocios. Posteriormente, llegaron a la gran biblioteca.

Elizabeth abrió muy grande los ojos por la sorpresa, la sala era magnifica, y exclamó, "Sr. Darcy, la Srta. Bingley no exageró cuando habló sobre su biblioteca. Nunca vi una colección privada tan impresionante."

Darcy sonrió levemente. "El crédito no es solo mío, Srta. Bennet. Esta biblioteca es la obra de varias generaciones de Darcys."

Elizabeth asintió. "Pero tengo entendido que usted ha adicionado varios títulos a la colección."

"Es cierto. Como usted ya sabe, me gusta leer, y si un libro me gusta o estimo que es importante añadirlo a la colección, suelo comprarlo."

Elizabeth sonrió, y comenzó a caminar lentamente mirando algunos de los títulos, mientras seguía conversando con Darcy sobre la biblioteca. Darcy le explicó la forma que estaban ordenados los libros, y, además, le mostró un catálogo de los títulos que había en la biblioteca.

Mientras tanto, la Sra. Gardiner – que no sentía la misma pasión por la lectura que Elizabeth - le contaba a Georgiana algunos detalles de Lady Anne Darcy. El difunto padre de la Sra. Gardiner, había sido párroco en Lambton, y como Lady Anne participaba muy activamente de las obras de caridad de la iglesia, la Sra. Gardiner – aunque tenía 10 años menos que Lady Anne - había tenido oportunidad de conversar varias veces con ella.

Después de la visita a la biblioteca, que se extendió por más de media hora, acordaron en la tarde hacer un tour de los jardines.