Realmente no supe que pasó luego de que Ayame me noqueara pero salimos de la aldea de los elfos oscuros y parece que Flare estará bien por su cuenta, emprendiendo su propio viaje para conocer más, ya con eso continuamos por nuestro camino y ahora íbamos en la carreta, atravesando el bosque.
- ¿Cuánto tiempo llevamos en el camino? – Preguntó Nene, Fubuki revisó su teléfono.
- Desde que salimos de la aldea, han sido unas tres horas.
- Este bosque no tiene fin, no parece que salgamos en algún momento. – Matsuri dejó salir un suspiro. – Quisiera comer algo…
- ¿No saben de alguna otra aldea o sitio de descanso cercano? – Pregunté, Fubuki negó con la cabeza.
- Nuestra única opción es llegar hasta la ciudad costera, pero para eso nos falta bastante, si queremos llegar hasta Pekoland, habrá que cruzar el mar antes. – Tal parece que seguiremos en el camino de este bosque durante un rato más.
- ¡Quiero comer! – Se quejó Nene, el resto también teníamos hambre y hace poco tuvimos el desayuno en la aldea, pero ya estaba siendo mediodía muy pronto.
- Oye Fubuki-senpai, creo que deberíamos descansar un poco, no sé si las otras dos aguanten. – Subaru señaló a Matsuri y Nene que estaban al borde del hambre, la kitsune se hundió de hombros.
- Bien, solo déjame buscar si hay algún sitio cercano. – Dirigió la carreta a un costado, entonces entre algo de manglar sucio estaba escondido un letrero.
- Ahí dice algo. – Lo señalé, me levanté de la carreta para apartar ese mangle y leer lo que dice. – Casa de la necromancer a veinte metros…
- Eso parece ser un sitio para descansar. – Comentó Nene, por el hecho de decir necromancer, ya sabía a qué se estaba refiriendo.
- ¿Crees que nos reciban? – Pregunté a Fubuki.
- Hay que intentarlo, puede que sea una buena persona. – Sin decir nada más, seguimos el letrero y fuimos a aquella casa. No tardamos mucho cuando entonces logramos ver una casa, Fubuki estacionó la carreta a un costado y nos levantamos.
- ¿No estás agotado Yusei-san? – Me preguntó Ayame, negué con la cabeza.
- Estoy bien, solo queda ver si nos pueden dar algo de comida en este sitio.
- La verdad, tengo hambre. – Expresó Matsuri, nos acercamos a la puerta para tocar en ese momento.
- Buen día, queremos ver si podemos descansar de nuestro viaje un rato. – Habló Fubuki, esperábamos a que saliera la dueña que ya conocía pero pasó un rato y no hubo respuesta.
- ¿Estará en casa? – Preguntó Subaru, yo igual estaba algo dudoso, sé de aquella necromancer pequeña y que le gusta gritar bastante también debe encontrarse en este mundo, Fubuki intentó tocar una vez más sin respuesta alguna.
- No hay nadie al parecer.
- Eso no puede ser, al menos no debe ser una casa abandonada. – Matsuri intentó abrir la puerta y resultó que no tenía seguro. – Está abierta.
- Podemos entrar entonces. – Señaló Nene, ambas chicas entraron.
- No creo que sea lo mejor entrar a una casa ajena. – Subaru pensaba lo mismo que yo, Matsuri soltó un suspiro.
- Subaru-chan, luego podremos excusarnos por haber entrado, lo importante ahora es que podamos descansar, vamos que seguro hay comida. – Realmente no hacía bien entrar a una casa sin permiso.
- Luego nos disculparemos, esas chicas no se detendrán ahora. – Fue la respuesta de Fubuki antes de entrar, ya solo quedé con Subaru y Ayame.
- Yusei-san, entremos, si tienes hambre, es mejor que comas. – Expresó la oni, para entrar a su casa sin permiso, no hacía bien pero el resto siguió.
- Vamos entonces. – Señalé a Subaru la cual tampoco es que tuviera otra opción, de ese modo entramos a su hogar.
En sí era una casa bastante sencilla, todo era de madera y tenía algunos tubos de ensayo, además de muebles de madera, una mesa y demás, supongo que estar en el bosque esperaba que fuera así, igual había algunas fotos en la pared de la dueña de la casa que reconocía muy bien.
Uruha Rushia, su personaje de una necromancer y cuya mayor virtud es que parece tranquila pero tiene un grito potente que destruye oídos, se enoja con mucha facilidad, es alguien muy llamativa, esperaba encontrarla en este mundo igual y si vive aquí apartada, entonces pensé que igual la vería, este es su hogar pero parece que no se encuentra disponible, al menos no de momento.
- Parece que hay comida por aquí. – Señaló Matsuri, ahora también tomaríamos su comida, pero ya viendo que la sacaron, no había opción, esto es saqueo, estábamos tomando su comida sin permiso.
- Parece ser fresco, podremos preparar algo, Subaru-senpai, tu turno. – Señaló Nene, la pelinegra no tuvo de otra, mientras nos sentamos en la mesa, Matsuri observó las fotos.
- ¿Ella es la dueña? Es muy linda~ - Esa sonrisa cruzó su rostro.
- Pues no la veo por ninguna parte, quizás salió a algún sitio. – Respondió Nene.
- Luego emitiremos una disculpa por tomar su comida si es que vuelve ¿entendido? – Preguntó Fubuki, todos asentimos. – Bien, por ahora podemos comer.
- La comida pronto estará lista. – Señaló Subaru, yo por mientras me levanté a ver un poco de los alrededores de la casa, Rushia no tenía muchas cosas, pero aquí parece vivir de acuerdo a su personaje, quizás todo lo preparado aquí es de acuerdo a que ella es una necromancer, una especie de mago que trae de vuelta a los muertos o maneja los cadáveres, quizás ha realizado experimentos o algo así al respecto.
- Aquí hay algo… - En ese momento vi algo que captó mi atención, era una especie de gema que estaba cubierta en un frasco, no sabía por cual razón estaba ahí, pero decidí tomarlo y revisarlo. – Brilla demasiado, parece ser importante así que…
- Yusei-san. – Aquello me sorprendió a tal punto que solté el frasco con la gema y este cayó al suelo, rompiéndose. - ¿Qué hiciste?
- Ayame. – Ella me acabó sorprendiendo, debido a que la gema cayó, entonces empezó a brillar totalmente.
- ¡Yusei-san! – Fubuki y el resto de chicas vieron lo sucedido, esa gema brilló más hasta el punto de cegarnos.
- ¡Chicas! – Después de lo ocurrido, no recuerdo nada más…
La luz finalmente desapareció, esperaba que eso fuera todo y que volviera a la normalidad, pero entonces fue que vi lo sucedido, ya no estaba en la casa de Rushia, estaba en otro sitio, solo veía paredes de piedra y un largo pasillo, de algún modo fui transportado a otro sitio.
Realmente no puedo creer la mala suerte que tengo, esa gema solo resultó en ser malas noticias, no solo estoy en otro sitio, sino que igual me he separado de las demás, claramente esto no podría ponerse mucho peor.
Por ahora necesitaba estar calmado, ya sé de todo lo que puede pasar en este sitio y luego de lo vivido en la aldea de los elfos oscuros, ya sé que solo puedo esperar problemas y más problemas en el futuro; es justamente en momentos como estos que puedo aplicar todas esas horas de entrenamiento que Fubuki le ha dedicado a hacerme alguien fuerte, no desperdiciaría tales esfuerzos así que este era uno de esos momentos donde puedo demostrar que soy autosuficiente para protegerme.
- Por ahora tengo que seguir adelante…
Sé que caminar en un sitio desconocido no es lo mejor pero no me dejan otra opción realmente, si puedo llegar hasta el fondo de todo esto y encontrar una salida será lo mejor, y como no fui el único involucrado, las demás fueron rodeadas por el brillo igualmente, deberé encontrarla en algún punto y si nos reunimos será mucho mejor.
Por ahora empecé caminar, lo bueno es que llevaba el arma conmigo, de tal modo cualquier ataque enemigo sorpresa no sería un problema para mí, estaba listo para lo que fuera a aparecer en este lugar.
- Por ahora espero que las demás estén a salvo… - En el caso de Fubuki y Ayame no tenía problema alguno, ellas dos eran fuertes y seguro los enemigos no representarían amenaza alguna, en quien si debería poner mi preocupación es en las otras tres, Subaru, Matsuri y Nene son personas normales, puede que te muestren sus locuras y demás pero no tienen un solo punto para pelear, ellas igual tienen armas pero no poseen el mismo tiempo de entrenamiento que yo, si puedo encontrarlas y protegerlas, demostrará que soy suficiente para pelear, es mi deber como su amigo…
Ahora que tenía una mejor visión, el sitio era cerrado, no había forma de ver lo que se encontraba afuera, si es que estábamos en otro lugar, seguimos en el bosque o fuimos llevados a otra parte, la verdad es que nuestra situación era bastante incierta en estos momentos.
Luego de caminar un rato llegué a un camino separado, tenía dos opciones por las cuales ir, no sé si al final pueda volver pero necesitaba escoger un camino, de tal modo me decidí por la izquierda, fui por ese sitio, justo al avanzar, pisé algo y que activó una trampa, al instante a mis espaldas el camino fue cerrado por una pared que salió de repente.
- Genial… una trampa… - Parece que este sitio también contiene trampas, de algún modo eso estaba en mis pensamientos y que este no sería un paseo sumamente tranquilo, por el momento necesitaba evitar pisar cualquier otra trampa, ser sumamente cuidadoso y…
- … - De nuevo pisé algo y se hundió. – Por qué tengo tan mala suerte…
En ese momento se abrió algo en el techo y entonces vi caer una piedra, ya sé lo que ocurrirá ahora, por qué estas trampas tan clichés ocurren en sitios laberinticos como este.
- ¡Mejor corro! – Empecé a correr con todas mis fuerzas mientras la roca empezó a rodar cuesta abajo, dispuesto a aplastarme, tenía que perderlo de algún modo, pero no encontraba alguna abertura u otro camino por el cual esconderme, esto no tenía fin. – Maldición, necesito algo, aunque sea una señal.
En ese momento pisé otra trampa en mi recorrido y entonces el suelo se abrió, iba a caer, por qué esto seguía ocurriendo, al final caí por esa trampa pero no fue tan alto, solo vi como la roca se fue en ese momento mientras asomé mi cabeza, eso me trajo un alivio.
- Menos mal… - Salí de ahí, ahora estaba a salvo, ya ahora tenía conocimiento de que ese sitio tenía trampas en todos sitios, no podía ir con la guardia baja, pero estaba cansado, me apoyé con la pared, justo ahí este se movió y di la vuelta, quedando al otro lado, era otra trampa.
- Auch.
- Eso duele. – Choqué con alguien. - … Yusei-kun.
- ¿Nene? – Al fin, algo de luz dentro de toda esta oscuridad, de algún modo esa trampa me llevó a otro pasillo y pude encontrarme con ella, no podía expresar mi alivio.
- Estás bien… no sé qué pasó, pero de repente aparecí en este lugar y estuve sola, me alegra verte.
- Igualmente. – Le levanté y la ayudé en ese momento. – Parece que fue obra de la gema que estuve observando, fuimos transportados a otro sitio.
- Ciertamente, este no es el hogar donde estábamos antes.
- … Lamento, las metí en este problema por mi culpa. – me disculpé, debido a mi curiosidad acabé involucrándolas en algo, ella solo me sonrió.
- Descuida, de cualquier modo ya es normal que nos metamos en alguna locura, además estamos todos juntos en esto.
- Nene… - Como me alegraba escucharla, puede que sea una pervertida sin remedio pero es reconfortante tenerla a mi lado. – Tenemos que encontrar a las demás, si estamos aquí, por consiguiente el resto igual.
- Muy bien, esta es otra aventura para nosotros. – Expresó, sin decir nada más, continuamos en nuestro camino, así ya no iba solo, poco a poco iríamos encontrando a las demás y llegaríamos al final de todo esto.
- Por ahora déjame avistarte que este lugar tiene trampas, así que vigila tus pasos y…
Otro sonido de algo que se activó, vi a Nene y ella pisó una baldosa que se hundió, este solo pudo sonreír nerviosamente.
- … Ups. - Se abrió algo en las paredes y entonces dispararon flechas.
- ¡Cuidado!
- Kyah. – Tomé a Nene de repente y la aparté antes de que fuera atravesada por las flechas, eso estuvo cerca, ella pudo haber muerto en ese momento.
- Al menos no fue tan mala esa trampa, sí que esto peca de antiguo.
- … Esto, Yusei-kun…
- ¿Sí? – Le pregunté a ella, la tenía muy cerca en un abrazo, fue ahí que me di cuenta, la estaba abrazando prácticamente, sentía sus pechos hundirse en mi torso, rápidamente la solté. – Eh, esto… lamento, pero si no lo hacía, ibas a morir de algún modo.
- Eso lo entiendo… gracias… - El ambiente de repente su puso raro entre los dos, estaba tan convencido de que la personalidad de Nene es tan caótica y pervertida que se me olvidó del hecho de que ella igual es una chica y bastante atractiva, la tuve tan cerca que incluso sentí el aroma de su cabello, era tan suave… no, no debo pensar en eso ahora mismo, estamos en una situación problemática, no hay tiempo para dejarme llevar por mis obvios impulsos de joven hormonal.
- … Por ahora sigamos, vigila tus pasos la próxima vez ¿entendido? – Le pregunté, ella asintió ya un poco más tranquila, aún veía ese leve rubor en sus mejillas, maldita sea, deja de ser tan linda ahora mismo.
- Esto… para que vayamos más seguros, quizás debamos ir tomados de las manos. – Esa sugerencia llegó a mis oídos y era algo que no podía creer ¿yo? ¿Ir de la mano con Nene? Era la primera vez en toda mi joven vida que iría de tal modo con una chica y además con una de las vtubers que tanto amo, sé que anteriormente dije que tengo mala suerte pero ahora creo que dios me bendijo con una gran fortuna.
- (Dios, te amo.) – Pensé dentro de mí. – B-Bueno, sí con esto te sientes más segura. – Extendí mi mano, mi corazón estaba latiendo como loco, entonces sentí el tacto externo, estaba caminando tomado de la mano con Nene, aunque fuera por motivos de seguridad, era como si fuéramos una pareja, la felicidad que estoy sintiendo en este momento es tan grande que no puedo evitarlo. – Jeje…
- ¿Yusei-kun? – Me preguntó ella, rápidamente alejé todo pensamiento lascivo para verla.
- ¿Sí?
- Gracias por protegerme, quizás si no estuvieras aquí, podría haberme pasado algo, igual estoy preocupada por las demás, sé que Fubuki-senpai y Ayame-senpai no necesiten protección realmente, pero quiero que estemos todos reunidos nuevamente.
- Eso haremos, no importa cuánto tiempo tome, vamos a llegar a reunirnos todos una vez más. – Le aseguré, por ahora ese era mi objetivo, este laberinto o lo que sea no iba a separarnos por siempre, así pase las horas, llegaremos hasta el final.
Entonces nuevamente mi pie se hundió, me puse palido al saber que pisé otra trampa y miré a Nene al rostro, ella igual estaba del mismo modo.
- … Caímos otra vez.
Muros empezaron a aparecer detrás de nosotros para cerrar el camino, los dos comenzamos a correr lo más rápido que se pudo para evitar quedar encerrados en algún punto.
- ¡Yusei-kun, eres un tonto!
- ¡Lo siento!
No había caso en discutir, enfocamos toda nuestra energía en correr y evitar un encierro, si nos llegaba a alcanzar uno de esos muros, estábamos muertos, pero la otra situación es que no había otro camino, era lineal y si eso significaba seguir recto mientras nos cerraban el paso, entonces íbamos a cansarnos, necesitaba pensar en algo.
- ¡Wuah! – En ese momento algo jaló a Nene y como aún íbamos juntos, yo igual fui arrastrado, atravesamos un muro pero no era sólido, sino que parecía ser una ilusión, no sé cómo pasó pero estábamos a salvo.
- Sabía que escuché algo. – Esa otra voz la reconocí, levanté la mirada, era Fubuki.
- ¡Fubuki-senpai! – Nene saltó a abrazarla. – Gracias por salvarnos.
- Tuvieron suerte de que pude escucharlos y que esta pared es una ilusión, aunque sigo sin entender algunas cosas.
- Lo importante es que ahora somos tres. – Señalé, ahora con Fubuki no había peligro alguno que pudiéramos pasar, ella podría protegernos. – Solo nos queda encontrar a las demás y salir de aquí.
- He intentado buscar una salida, pero es complicado, también hay muchas trampas escondidas. – Respondió ella.
- Eso lo sabemos, caímos en varias de camino a este sitio. – Complementó Nene. – Es peligroso este sitio.
- Debe haber un eje central o al menos un camino que lleve a una salida, esto es un laberinto que posee muchas trampas, todo pasó cuando toqué esa gema. – Esa es la razón por la que estábamos en ese problema, no sé qué es lo que Rushia ha hecho antes, pero quizás si nos adentramos más, podremos saberlo.
- Será la mejor opción seguir recorriendo y en el camino encontrar al resto. – Fubuki se dio la vuelta. – Hay que seguir, parece que algunas paredes son simple camuflaje para esconder caminos ocultos.
Siguiendo los instintos de Fubuki, continuamos nuestro camino y era verdad lo que dijo, hay caminos ocultos a simple vista, como ella era semihumana por así decirlo, sus instintos animales la ayudaban a encontrar esos caminos, algo que Nene y yo, como simples humanos no podríamos conseguir.
- Yusei-san, Nene-chan, todo este tiempo han ido agarrados de las manos ¿pasó algo? – Preguntó la kitsune con una sonrisa traviesa, me di cuenta y es que los dos aún íbamos de esa forma, rápidamente nos soltamos, estaba algo rojo y me di cuenta que ella igual. – Parece que finalmente quieres ir tras una pareja ¿no?
- N-No es eso, es solo que para evitar separarnos y que otro caiga en una trampa, sugerí que fuéramos de la mano ¿no es así Nene?
- S-Sí, es lo que Yusei-kun dice Fubuki-senpai, no hay nada más. – Los dos buscamos excusarnos pero esa kitsune no borraba esa sonrisa.
- Como digan~ - Genial, ahora Fubuki malentendía nuestra relación, necesitaba encontrar algún modo de que sepa la verdad y que las demás tampoco se enteren. – Deténganse.
- ¿Pasa algo? – De repente ella nos detuvo, no supe de qué se trataba, entonces fue que sucedió, no muertos, esqueletos con armas se levantaron y empezaron a rodearnos.
- ¿Qué es eso? – Preguntó Nene con algo de temor, Fubuki se puso seria, sacando su arma.
- Son enemigos, Yusei-san, ya sabes qué hacer.
- Claro. – Era el momento de pelear, estos eran simples esqueletos con armas, no son enemigos tan fuertes así que incluso alguien como yo podría hacer algo, tomé mi espada y empecé mi ataque, estos esqueletos eran lentos y no tenía demasiada movilidad, como si hubieran sido hechos con ese propósito o a las apuradas, así no representaban ninguna amenaza y eran fáciles de detener, ese era mi momento.
Fubuki pudo acabar con varios de un solo ataque, para alguien tan fuerte como ella no era problema alguno, solo veía los huesos volar, pero debía concentrarme en mi propia batalla, bloqueé el ataque de uno de esos huesudos y lo desvié, así contraataqué y pude quitarle la cabeza a esa calaca, haciendo que cayera.
- Soy bueno. – Estaba lleno de confianza, sabía que eran enemigos muy débiles pero no podía evitarlo, al final acabamos con todos.
- Bien hecho Yusei-san, eran enemigos débiles, pero pudiste superarlo.
- Menos mal se acabó. – Nene pudo estar tranquila. - ¿De dónde salieron?
- Los esqueletos no surgen de forma natural, así que solo debieron ser creados, eso normalmente es obra de necromancers. – Empezó a explicar Fubuki. – Los necromancers son expertos en artes oscuras, mayormente se especializan en la magia que controla las almas y a los muertos, pueden crear undeads o esqueletos que mantienen como sirvientes y manipular almas para transferirlas a nuevos cuerpos, normalmente estos se mantienen alejados de la civilización ya que sus prácticas no son bien vistas.
- Entonces la dueña de esa casa ¿es una necromancer?
- Por lo que observé en sus muebles e investigaciones, ese parece ser el caso. – Terminó de hablar Fubuki.
Uruha Rushia lleva la vida de Necromancer en este mundo entonces, si me he fijado que todas se mantienen al papel del personaje que llevan, Fubuki es una kitsune real, Mio fue una chica zorro, Miko una sacerdotisa, Noel una caballero y Flare una elfa oscura, así que siguiendo el patrón, Rushia es lo mismo y las demás también estarán apegadas a su propio lore, debo tenerlo en cuenta para próximas situaciones.
- Hay que continuar, no sabemos que otros enemigos puedan aparecer. – Seguimos a Fubuki, ella nos seguiría manteniendo a salvo y evitaría las trampas, tendríamos un recorrido tranquilo de momento.
Algo he podido observar sobre este laberinto cerrado, los caminos mayormente tienen dos rutas únicamente y es a la izquierda o de regreso, nunca se ha visto caminos hacia la derecha y no creo que sea algo adrede, de ese modo incluso los caminos ocultos simplemente ofrecen otra opción para ir por esas simples rutas, durante todo este recorrido he creído que solo estamos yendo en círculos, porque no hemos llegado a una nueva zona.
- Estoy cansada… - Me fijé que Nene no podía caminar más y a decir verdad, yo igual me estaba agotado, Fubuki nos observó y asintió.
- Vamos a descansar entonces, un rato. – Así nos quedamos a un lado del camino para sentarnos a descansar.
- Como quisiera agua en este momento… - habló Nene por debajo.
- De momento no hemos encontrado alguna salida u otro camino. – habló Fubuki. – Eso se me hace raro.
- Así que piensas igual. – Empecé a hablar. – Llevo algo que me está molestando durante un tiempo.
- ¿Puedes decirnos que es? – Preguntó Fubuki, asentí, era momento de explicar mis pensamientos.
- No sé si te has fijado pero nuestros caminos solo tienen una sola dirección que es hacia la izquierda, incluso los caminos escondidos que has localizado, solo van hacia esa dirección. – Ella asintió. – Eso me hizo pensar cómo es que no hay caminos hacia la derecha, así que hice una prueba, tomé uno de los huesos de los enemigos que derrotamos y rayé una pared cuando estábamos de paso, entonces conté las veces que pasamos por esa raya… en total fueron unas tres veces.
- ¡¿Caminamos en círculos!? – Expresó Nene con asombro, yo asentí.
- Ese es el caso, parece que nuestro recorrido va en círculos y solo por una dirección, puede dar la impresión de que solo existe el camino a la izquierda, pero… - levanté el dedo. - ¿Qué tal si el camino a la derecha está bloqueado?
- ¿Qué quieres decir? – Fubuki me observó fijamente.
- Este laberinto está dividido en dos bloques, uno que solo tiene un camino a la izquierda y otro a la derecha, esos dos bloques están separados por un bloque central que podría ser nuestra salida, claro que esto es solo una suposición ya que no tenemos un mapa completo de esta estructura, pero no se puede descartar la posibilidad de que sea algo posible.
- ¿No se puede acceder a esa zona? – Preguntó Nene.
- Por los menos una entrada visible no se ve, pero si pudiéramos romper los muros. – Para mí esa era la posibilidad, no sé cómo surgió este laberinto, si la propia Rushia lo creó o ya estaba de antes y si era así ¿por cuál razón escogió este sitio? Algo me dice que tuvo que esconder algo, si ella lleva a cabo su papel de necromancer, quizás lo hizo por algún experimento, no sé pero ese bloque central tendrá las respuestas que necesito.
- Así que solo tenemos que romper las paredes. – Fubuki hizo crujir sus nudillos, eso solo significaba una cosa.
- ¡E-Espera! No digo que debamos hacer algo tan radical la verdad. – Busqué detenerla.
- Solo así podemos llegar a la sala central ¿no? Entonces no tenemos otra opción, vamos a abrirnos paso. – Ya parecía algo imposible el poder decidir otra opción, fue entonces que vi a Fubuki ir a una pared de la derecha. – Vamos a encontrarnos con las demás.
En ese momento lanzó un fuerte golpe a la pared lo que formó una grieta, ya sabía que era fuerte pero eso es demasiado, al ver que no cedió, lo golpeó otra vez, ahora la pared empezó a agrietarse más hasta que no aguantó y se rompió.
- Lo hizo en serio…
- Yay, Fubuki-senpai es muy fuerte. – la diferencia de respuestas entre yo y Nene era tan distinta, la kitsune se veía orgullosa de lo hecho.
- Esa fue una pared, vamos por otra más. – Y empezó a repetir el mismo patrón, no sabía si esto iba a resultar, después de todo solo eran conjeturas mías, pero había que agarrarse de esa fe, ya dejé que todo pasara como tiene que pasar.
Fubuki siguió rompiendo más y más paredes sin detenerse, abriendo el camino para nosotros hacia la sala central y de algún modo me sorprendía que no hubiera represalias al respecto, alguna trampa o algo así, quizás porque parecía ser algo sumamente imposible de hacer pero teníamos aquí a nuestra kitsune que lo está haciendo frente a nuestros ojos.
Pasaron unas diez paredes más que repitió el mismo patrón, Fubuki no se veía para nada cansada al respecto, en ese momento dio un pequeño golpecito.
- Esta parece hueca… debe ser el sitio que buscábamos. – Ella no se retuvo y golpeó la pared, al final se vio un sitio más grande en medio. – Parece que llegamos.
- Bien hecho Fubuki-senpai. – Felicitó Nene, quizás fue una forma muy brusca de abrirnos paso pero nada quita que acabó siendo efectiva, ahora estábamos en esa habitación grande.
- Ya que llegamos aquí, ahora si podemos buscar a las demás… - En ese momento en el otro extremo de la pared también estaba roto.
- Lo hicimos… ¡Fubuki-senpai, chicos! – Escuché a Subaru, observé que las otras también pensaron lo mismo.
- ¡Yusei-san! – Ayame fue corriendo hasta donde estaba. - ¿Estás bien? ¿No te lastimaste en ningún lado?
- Me encuentro bien, no pasa nada. – La calmé. – Veo que pensaron igual y rompieron las paredes.
- Aunque fue más porque Ayame-chan se desesperó por no encontrarte. – Respondió Matsuri, eso trajo un gotón a mi frente.
- Lo importante es que estamos todos juntos nuevamente. – Comentó Fubuki. – Este laberinto fue problemático pero llegamos a la raíz, ahora quizás podamos escapar de este sitio.
- Debe encontrarse en medio, vayamos a ver. – Señalé, así fuimos a ver que se encontraba en ese sitio, lo que mis ojos lograron captar fue una estatua en medio, no sabía que trataba, pero si esto fue algo hecho por Rushia, quizás habría pistas de su paradero.
- No hay nada. – Comentó Nene, las otras también respondieron algo similar, realmente no se encontraba nada en ese sitio.
- Parece que es un callejón sin salida. – Respondió Subaru, no podría ser que hasta aquí llegara todo, Rushia ¿Qué podría haber tenido en mente cuando modificó este laberinto?
- Parece que estaremos encerrados para siempre, eso significa sobrevivir a cualquier costa, quizás vivir y formar una familia juntos… eso significa tener bebes y como Yusei es el único hombre aquí. – Matsuri me observó con una sonrisa burlona. - ¡Quiero ser la primera en tener sus hijos!
- ¡De eso nada! – Gritó Ayame, no había tiempo para bromas, tenía que encontrarse una salida por este rumbo, decidí investigar un poco más, observando esa estatua, ya que era la única construcción en ese sitio, debía de tener algo, fue así que vi por la parte trasera. - … Aquí hay algo.
Era una especie de palanca, no sabía que podría ser pero esto debía activar alguna especie de salida o algo por el estilo, la jalé, en ese momento todo el sitio empezó a temblar.
- ¡Que pasa! – Exclamó Ayame con asombro.
- ¿Hiciste algo otra vez Yusei-san? – Me preguntó Fubuki.
- ¡Solo jalé una palanca, es todo! – En ese momento vi a la estatua moverse, levantando un pie, me aparté en ese momento, eso no era una estatua, era una criatura no muerta, otra vez estábamos en una trampa y mucho peor.
- Esto se puso feo de repente. – Comentó Ayame, hizo aparecer una bola de fuego en su mano. - ¡Toma!
La lanzó contra ese undead pero no le hizo nada más que solo enojarlo más por el rugido que soltó, no iba a ser sencillo, Fubuki sacó su arma.
- No tenemos otra opción más que pelear, Yusei-san, protege a las demás, Ayame-chan y yo nos encargaremos de esto.
- Claro. – Asentí, era mejor dejarle la carga pesada a ellas que podrían manejarlo, señalé a las otras tres que se acercaran mientras iba a protegerlas.
Fubuki saltó con su espada para buscar cortar a la criatura, aunque lo intentó, no pasó nada, tenía una piel gruesa como para que esa espada no pueda atravesarlo.
- Es mejor presionar con fuerza. – Ayame ahora buscó atacar con golpes para ver si podía hacerle algo, esos ataques físicos funcionaban un poco mejor por lo que observaba ya que lo hacía perder el equilibrio pero el undead no se quedó quieto y agitó su gran brazo, buscando golpearla.
- Yo te cubro. – Fubuki ayudó a cubrir el ataque de la criatura, algo que Ayame agradeció y ella pudo continuar atacando, las dos se complementaban bastante bien lo que no daba tiempo de reacción a la criatura.
- ¡Lo están logrando! – Exclamó Nene con alegría, las demás igual apoyaban, menos mal no era necesario ahí, al final Ayame saltó y con un golpe fuerte le pudo arrancar la cabeza al undead, este finalmente cayó inmóvil al suelo.
- ¡Lo hicimos! – Ambas chocaron palmas, me agradaba ver lo buenas amigas que se habían vuelto.
- Ahora estamos libres de peligro, no debería suceder nada más. – Otro temblor empezó a ocurrir, eso nos tuvo alerta por si ocurría algo más pero solo vimos en la pared por la cual estaba abriendo.
- ¡Es la salida! – Las chicas se alegraron, finalmente íbamos a salir de aquí, Fubuki y Ayame suspiraron del alivio.
- Hasta que podemos escapar de aquí, menos mal. – Ayame dejó caer sus hombros. – No quisiera vivir algo así nuevamente.
- Comparto el sentimiento. – Respondió Fubuki. – Buen trabajo en cubrirme Ayame-chan.
- Igualmente Fubuki-san. – Las dos sonrieron. – Yusei-san, es hora de irnos.
- Claro. – Yo estaba por irme pero noté algo en el cuerpo del undead, dentro se encontraba un sobre… era una carta, fui para tomarla en ese momento y entonces salir con las demás.
¡Aire, al fin! – Estábamos afuera, pudimos salir de ese laberinto finalmente, luego de todo lo que ocurrió, fue una aventura algo peligrosa y extraña… lo que en sí me sorprende es que en ningún momento vimos a Rushia, era su hogar y estaba abandonado ¿por qué?
- Estamos cerca de la ciudad, ya que parece que estamos lejos de la carreta, hay que seguir a pie. – Informó Fubuki, fue una lastima dejarla atrás pero no podíamos hacer un viaje de vuelta solo por buscarla, decidimos seguir adelante, aún tenía el sobre que había dentro de ese undead, era el momento adecuado así que lo tomé y abrí, dentro había una carta.
"Para quien lea esto.
Mi nombre es Uruha Rushia, soy una necromancer que ha vivido durante miles de años, durante todo ese tiempo he llevado a cabo distintas investigaciones, he experimentado con muchos cuerpos, usando mis poderes para revivirlos y hacer distintas tareas, más que nada para no sentirme sola, pero no debería decir eso, soy una mujer adulta y con un gran boing boing…
No me saldré del tema.
El caso es que, luego de siglos de investigación, acabé agotada, viví en esa casa aislada casi toda mi vida, no tuve amigos y cuando los tuve, estos morían antes que yo, presencié sus entierros y busqué llenar el vacío, poniendo almas nuevas en sus cuerpos pero eso no me dejó satisfecha, al final mejor pensé en abandonarlo todo, si por alguna razón entraste al laberinto que modifiqué, para ese entonces me habré ido, decidí irme en un viaje lejos de aquí para buscar un nuevo propósito en la vida, quizás reencarnar como una nueva persona, a pesar de todo… no estoy triste, tuve muchos momento felices en mi vida, solo quiero un nuevo comienzo, uno donde pueda ser feliz realmente sin preocupaciones, quizás reencarnar como una chica gato, me gustan los gatos y tener grandes boing boings, eso me agradaría.
Gracias por leer mis palabras, los lamentos de una pobre chica que buscará empezar desde cero."
Cerré los ojos, Rushia debió estar sola durante todo ese tiempo, no sé cómo funcionan realmente las cosas en este mundo, creí que todas eran amigas desde el inicio pero están más separadas, en el caso de Rushia, no pudo esperar más, se fue y creo que nunca podré encontrarla, si así fuera, quisiera confortarla… lo importante es que, si ella hará lo que escribió, tendrá un nuevo inicio donde será más feliz, en ese caso que ella buscará perseguir sus sueños, yo igual tengo que alcanzar mi objetivo.
- ¡Yusei-san, no te quedes atrás! – Escuché la voz de Fubuki llamarme, al final metí la carta nuevamente en el sobre y lo guardé, llevaré esas palabras de Rushia conmigo.
Luego de un par de horas, sé que las demás estaban cansadas por tanto caminar pero finalmente pudimos verlo, una ciudad que se abría frente a un mar grande.
- Hemos llegado a nuestro destino, la ciudad portuaria, si atravesamos por barco, llegaremos a Pekoland. – Informó Fubuki, ya estábamos en la civilización y eso me acercaba cada vez más a mi objetivo, mi viaje junto a ellas iba a seguir, estaba listo para lo que vendría y no iba a detenerme.
nahariyanash: No fue precisamente una aparición puntual pero considero que es la mejor forma de rendir homenaje a ella y pues siento que quedó mejor de lo que pensé, ya con otras, eso aún sigo pensando pero con Coco tengo ideas para más adelante.
Luego de meses ya traigo un nuevo cap, la verdad este cap no lo tuve planeado pero las circunstancias me hicieron hacerlo, ya con las graduadas, pienso hacer algo similar, sea menciones o apariciones pequeñas, tengo mucho por delante con esta historia y planes por poner, el próximo cap ya el grupo llegó a la ciudad portuaria y deberán viajar por barco, seguro habrá alguien que podrá darles un aventón por el viaje, quizás una pirata, eso lo veremos en el próximo cap. Saludos.
