Sinopsis
"Ada usó su poder para cambiar los papeles entre Boruto Uzumaki y Kawaki. En ese momento, un poder dentro de Sarada despertó al saber que Boruto había matado al Hokage, su ídolo. Por ello, Sarada partió ir a las fronteras, a vigilar como chunin. El equipo 7 se disolvió y todo contacto con ellos. Con el paso del tiempo, solo podía pensar en la injusticia que se había cometido, con su padre, con Boruto y con su familia. Hasta que llegó un día que recibió una carta de la villa, solicitando que volviera. Si se negaba, Ada sospecharía y Kawaki, quien se había convertido en un político, la destruiría, la única esperanza de la verdad"
Capítulo: El regreso
Sarada Uchiha, actual chunin de la villa de la hoja regresaba de una larga misión de 3 años. Estaba nerviosa por lo que pudo encontrar, sobre todo, después de lo que pasó en la villa cuando Ada lo cambió todo. Ahora tenía 16 años y comprobó con horror desde la ventana del tren lo avanzado que se vio la villa en tecnología y arquitectura. Finalmente llegó a la estación y vio a sus amigas y su madre.
-Te extrañé mucho amiga- Dijo Chouchou, quien había adoptado un cuerpo dotable para su edad- ¡Te ves genial!- Aclaró una vuelta sobre sí misma a Sarada. Sarada se había crecido y su físico era tan parecido como una jovencita aceptable a su edad. Vestía una blusa roja y pantalón negro de tobillo.
-También te extrañe Chouchou- Se giró a Sumire- Me alegro de verte- Luego miró a su madre y no dudó en abrazarla.
-Ya, basta, estamos haciendo una escena, vamos a casa- Dijo más animada Sakura. Caminaron juntas y Sarada no pudo evitar ver las ojeras de su madre.
-¿No estarás descuidandote mamá?
-Claro que no- Dijo con una sonrisa gentil.
Sarada se dio cuenta que había algunas miradas de disgusto mientras pasaban. Parece ser que la aldea no se había olvidado lo que había pasado hace tres años. Observó como las calles se vieron diferentes, como la gente vestía diferente y algunos carteles de la ciudad visualizaban a ADA, como modelo de moda y cantante. Lejos del centro de la villa, Ada se había instalado junto a su hermano y Kawaki, en una casa de lujo propia de una idols. Sus managers hablaron por teléfono de las últimas sesiones, fueron canceladas porque Ada lo había ordenado, sabía que Sarada había vuelto.
-No olvides invitar a la fiesta de esta noche a Sarada Uchiha, quiero que esté presente- Dijo Ada levantándose del sofá y dejando su vaso de coñac en la mesita. Vio por el radillo bajar a su hermano, con apenas 14 años parecía mayor a su edad -¿Dónde vas tan arreglado?¿Otra vez a la mansión hyuga?
-Puedes ver donde estoy en cada momento, ¿para qué preguntas? -Se abotonó su chaleco blanco y salió por la puerta,haciendo el mismo recorrido de nuevo.
Ada paseo por la casa hasta llegar al cuarto contiguo al suyo, era el cuarto de Kawaki. Miró dentro y vio que estaba ordenado por el servicio de la casa. Volvió a caminar hacia su cuarto, vio el vestido azul que llevaría esta noche. Miró con detenimiento cada curva que le resaltaría-Esta noche será la gran noche... Boruto.
En el centro de la villa, Sarada caminaba hacia su casa sin poder evitar ver las manchas de pintura sin salir en las paredes de su edificio. A pesar de haber pasado 3 años, la pintura siguió sin salir "Escoria" "Traidores" recordaba que había leido hace 3 años.
-Camina rápido Sarada- Sugirió Sumire mientras miraba hacia atrás. Al fin, llegó a casa y Sarada había visto que su casa había cambiado sobre todo...su hermano pequeño Taichi. La señora shizune le dio la bienvenida junto a su hermano.
-Hermana... hermana-Decía el pequeño a quien Sarada abrazó.
-Al fin nos conocemos hermanito... -Dijo Sarada con lágrimas en los ojos. Su cabello oscuro junto a sus ojos, le hacía ver en parte a su padre Sasuke de niño, salvo que el estilo de peinado era diferente.
Sakura observaba con alegría el tan esperado encuentro. Taichi siempre preguntaba por Sarada ya que casi no salía de casa y era para su pesar muy solitario. La fiesta de bienvenida de Sarada empezó en la tarde, jugo, comida y muchas risas llenaron la casa. Pero nada más termina el té sonó el timbre de la entrada. Sakura miró a Shizune con preocupación, Shizune agarró a Taichi y esperó a que Sakura abriera la puerta. Era un mensajero y Sakura cambio su expresión a alivio. Taichi fue soltado.
-¿Qué deseas?
-Vengo a traerle esta invitación a la señorita Sarada Uchiha. Con permiso, firme aquí-Sarada considerable y abrió la invitación.
-¿Un baile en el salón tortuga?-Miró a Chouchou y Sumire.
-Nosotras también vamos, Ada debe querer que vayas tú también.
-No creo que sea buena idea, aun tengo que hacer mi informe e ir a la oficina del Hokage.
-Ahora se llama administración civil, Sarada, no lo olvides. Recuerda, si no vas, ¿qué crees que hará Ada?
-¡Ada llegó!-Todas se sobresaltaron al ver aparecer por la habitación de Sakura a Ada, había aterrizado por el balcón. Su Senrigan brillaba amenazante junto a su cara seria.
-No puedes entrar en cuartos ajenos...-Sakura fue interrumpida por Ada.
-¿I can't? Siento haber entrado por su habitación señora Uchiha, pero estoy seguro de que no se me habría abierto la puerta- Se giró a ver a Sarada- He venido para convencerte de que vengas a la fiesta Sarada.
-¿Y si me niego?-Preguntó con nerviosismo, actuaría como si su omnipotencia le afectara.
-¡No puedes!- Abrió muchos los ojos- Esta noche será una gran noche, Kawaki-kun vendrá tan bien, ¿no quieres verle? Después de todo, sois amigos de la infancia.
Sarada lo penso mejor, Ada aun no sabia que ella era inmune a su encanto.
-Pero mi familia...
-Ya los verás mañana, esta noche, vendrás y disfrutarás como nunca.
Y con las mismas fue volando por el balcón de la casa.
-Será...-Sakura iba a maldecirla, pero Sarada la detuvo.
-Mamá por favor no.
-La verdad me sorprende también a mi Sarada que no quieras ver a Kawaki-Kun- Dijo Chouchou- Siempre pensé que te importaba.
-Exacto Chouchou, tú lo has dicho- Dijo Sumire con una gota de sudor resvalando de su cabeza y luego la miró. Sarada entendió que debía ir a esa fiesta y ver de nuevo a Kawaki, el hombre que actualmente despreciaba.
Continuará-
