Capítulo 2: Enfermo
Lo había sabido el primer año, Kawaki no había ido tras Ada ni le había pedido que deshaciera lo que había hecho. Kawaki actuaba como si fuera el auténtico hijo del Hokage, con su altanería, sonrisa burlona y su desprecio hacia Boruto. Había sido él y ella estaba furiosa. Tanto que ahora, cuando se arregló para el baile con un vestido rojo, se miró a sí mismo y se dijo en su mente "Tu puedes" "No puedes fallar" Se puso unos pendientes circulares y salió.
-Guau hermana, estas guapa- Dijo Taichi mirándola mientras leía un libro.
-Sarada estas preciosa-Dijo Sakura examinándola desde la cocina.
-Gracias, intentaré no volver muy tarde, iré a saludar y volveré.
-¡Pasalo bien!
Salió por la puerta y se encontró con los vecinos que la miraron mal. Sin hacerles caso, avanzó a las escaleras y caminó hacia el salón de la invitación. Podía sentir la mirada de varios jóvenes sobre ella y se sentía más fuerte. Esta noche debería pasar desapercibida si no quería ser el blanco de Kawaki y el enfado de Ada. Saludó a Sumire que la guardaba con Chouchou y los demás en la puerta principal. De repente se almacenaron todos los chicos y la saludaron. ¡Qué cambiaron estaban! Inojin se había dejado más coleta, Shikadai llevaba gomina y Genki había sido el que más había cambiado.
-¡Estás increible Sarada!-Dijo Metal y ella se lo agradeció. Entraron todos juntos y vieron que había bastante gente en la fiesta.
-¡Sarada! Me alegre que vinieras- Dijo Ada con un vestido negro- Estás espectacular- Llevaba gafas de sol- ¿Lo has notado? Con las gafas de sol mi habilidad se anula ¿Es genial no?
-Si, lo noto, es un alivio-Dijo ella más relajada.
-Disfruta mucho, Kawaki anda lejos, ya sabes, hace mucho que no os veis- Le guiño el ojo. Sarada se acercó tragando saliva.
-¡Vayamos a por el catering!-Sugirió Sumire "Acepta Sarada".
-Claro, nos vemos luego Ada- Se alejaron viendo que Chouchou llegó primero a los manjares. Sarada vio varios platos que nunca había visto y probado probarlos.
Pasó varios minutos charlando con sus amigas cuando sintió que una mano le tocó el hombro. Un escalofrío le sacudió el cuerpo. Era él. Kawaki la miró con una sonrisa y la apareció.
-¡Estás preciosa!¿No te alegras de verme? ¿A qué viene esa cara? -Las preguntas surgían con cierta arrogancia en su mirada y sonrisa. La sonrisa de Sarada no apareció.
-Hola Kawaki, cuanto tiempo- Dijo secamente.
-¿Y eso? ¿Así saludas a tu mejor amigo?
-No hemos estado en contacto, ¿no?
-Estaba ocupado. Himawari está deseando verte- Kawaki se hizo a un lado y Himawari apareció delante de ella. Sarada molesta.
-Oh Himawari, cuanto tiempo- Dijo acercándose a ella.
-Hola Sarada, me alegre tanto verte- Dijo Himawari con una sonrisa gentil. Sarada recordaba que la sonrisa de Hima no volvió a ser la misma desde aquel día que Ada cambió todo.
-¿A ella si lo sonries?
-Callate- Dijo ella molesta.
-Ustedes no cambian, siguen de malas- Dijo Himawari con una risa calida.
-Hima, ¿bailamos?-Preguntó Deimon y ella aceptó. Alejándose, Sarada se preguntaba desde cuando se llevan tan bien. Derepente sintió una mano en su cadera.
-¿Bailamos?-Pregunto Kawaki con arrogancia y Sarada lo mató con la mirada.
-¿Estás loco? ¿Y Ada?
-No sé porque te molesta tanto, ya no es una amenaza.
-¿Qué dices? No recuerdas que ella es
-Ya no lo es Sarada, yo soy más poderosa que ella. Ella me teme a mi-Declaró él tomandola a la fuerza a la pista de baile. Ella se sintió enferma.
Danzaron como podían, ya que Sarada se resistia cada vez que él intentara acercarse y mas hasta que las luces se apagaron. Todos pararon.
-Por fin- Declaró Ada en voz baja con su vaso de champán.
De arrepentirse se escucharon gritos "ES ÉL", "HA VUELTO". Sarada sintió que Kawaki desaparecía de su lado y como la gente salía, mientras ella se quedaba hay parada con su corazón palpitando.
Boruto había aparecido en los archivos de la Hoja, buscaba algo importante cuando fue interrumpido por varios ninjas, él pudo con ellos rapidamente.
-¡Al fin apareces!-Gritó Kawaki sacando una vara del silencio, un arma otsutsuki.
