Aclaraciones:
1.- los personajes están levemente antroficados para mayor comodidad y sentido a la historia. en el caso de los ponis están sobre sus cascos traseros, poseen manos y dedos y su figura esta levemente cambiada (como en el caso de las yeguas que poseen busto) pero básicamente poseen el mismo tamaño y diseño.
2.- esta historia se sitúa poco después del ascenso de Twilight al poder pero ignora la 10ma temporada del comic (salvo un detalle sacado de este que saldrá mas adelante)
3.- leve contenido de violencia, ecchi (no Lemon) y mas.
espero que les guste cualquier aclaración, sugerencia y mas en los comentarios
Disclaimer: Mlp es propiedad de blah blah blah...
comencemos.
Los invasores.
Equestria… un reino mágico habitado principalmente por ponis terrestres, pegasos y unicornios, así como otras criaturas parlantes tales como grifos y dragones. Otros tipos de criaturas y animales también habitan en Equestria y sus alrededores. Todos conviven en paz y armonía bajo el concepto de la amistad, impulsada por la actual monarca del reino; Twilight Sparkle, antigua estudiante de la anterior soberana, la princesa Celestia.
A pesar de lo pacifico de este lugar, no ha estado exento de situaciones violentas y peligrosas que han puesto en jaque al reino en varias oportunidades. Sin embargo, gracias a la princesa Twilight y a sus amigas; Applejack, Pinkie Pie, Rarity, Fluttershy y Rainbow Dash, todas portadoras de los elementos de la armonía, han podido salir victoriosas.
Ha pasado casi 2 años desde el ascenso de Twilight al poder y las cosas parecían ir de maravillas, todo parecía pintar un futuro brillante para el reino y sus aliados. Pero ahora, Equestria estaba por sufrir la que quizás sea la crisis más grande que haya tenido en su historia.
Lejos muy lejos, en el llamado oeste desconocido se estaba produciendo una disruptiva en el espacio tiempo, el cielo parecía fragmentarse. De repente de una de sus fisuras una extraña punta de acero aparece y pronto comienza a crecer cada vez más y más, este en realidad era parte de una especie de nave/castillo o algo por el estilo, de tonalidades doradas y rojas. En ella sobresalía un escudo de armas el cual era una cabeza ecuestre con rasgos femeninos, el cuerno levemente separado de la cabeza rodeado de una corona y un par de alas también levemente separados de la cabeza. La nave era en verdad enorme, tan grande que podría aplastar medio Canterlot con solo aterrizar.
Y hablando de Canterlot, justamente la ahora soberana de Equestria, la princesa Twilight había sentido algo que ni ella misma sabía que era. Al mismo tiempo en Seaward Shoals, en la casa de retiro de las hermanas alicornio, Celestia también sintió esa misma perturbación mientras ordenaba su jardín. En ese momento su hermana Luna llego volando
-hermana, ¿lo sentiste?- exclamo la menor
-¿tu también?-
-que significa-
-no tengo idea… y no me gusta-
En el imperio de cristal dicho acontecimiento no era ajeno para la gobernante y su hija de 2 añitos tirándole a 3 quien lloraba asustada mientras su madre intentaba calmarla, su padre entra de golpe asustado de manera graciosa.
-¡que sucede, que le pasa!-
-creo que también sintió esa extraña perturbación y la asusto-
-perturbación, de que hablas. No entiendo… que significa-
-yo… no lo sé…- aclaro preocupada la cual contagio a su esposo mientras miraban hacia el horizonte.
De vuelta con la nave al parecer ya no podía mantenerse más tiempo en vuelo porque comenzó a descender hasta impactar con unas montañas nevadas, más las montañas eran las que parecían recibir más daño que la propia nave. Tras un aterrizaje forzoso que parecía haber durado una eternidad, esta finalmente quedo entre las faldas de dos montañas y no muy lejos de ellos lo que parecía ser el mar.
A su vez en un poblado pequeño ubicado a la vista de las montañas del oeste desconocido sus habitantes lograron escuchar el ruido de la nave aterrizando aunque de manera muy muy leve. –"¿truenos?... pero no estaba programada una tormenta para hoy"- exclamo una linda unicornio de piel limón y cabellos rojo cereza con líneas blancas, típica ama de casa con vestido corto floreado y delantal blanco, parecía la versión ponificada de Rapunzel (la de cabello corto). Iba acompañada de sus dos pequeños, unicornio de piel limón y cabellos grises y potrilla de tierra de piel roja y cabellos color limón, más jóvenes que las Crusaders pero mayores a Pipsqueak, curiosamente la niña llevaba consigo un peluche de la princesa Twilight. Al ver que la cosa no seguía ya no le dio importancia y siguió su camino junto a sus pequeños.
Regresando a la nave todo se había calmado y dentro de sus oscurecidos pasillos sus ocupantes comenzaron a moverse para con los análisis de daños. En lo que parecía ser el centro de mando se notaba la gran diferencia científica y tecnológica comparada con Equestria la cual era en verdad abismal.
-informe- pregunto un varón con una voz algo desagradable, alguien al parecer de complexión robusta.
-en resumen, muy mal… la nave no volara en un tiempo- hablo una subordinada
-repárenla. Ahora- amenazo la voz más joven de otro varón, alguien más esbelto, al parecer unicornio
-nos tomara mucho tiempo, Sr.- respondió otro subordinado
-no quiero excusas- aclaro el más joven
-el Star Palace debe volar, si o si- secundo el viejo
-cálmense, niños- hablo una sensual voz femenina un poco más grave que el de Celestia, al parecer una alicornio por las alas y el cuerno. Esta se encontraba sentada en un trono con las piernas cruzadas mientras movía una. –Tenemos todo el tiempo del mundo-
-sí, Milady- se disculpó el mayor haciendo una reverencia
-mil disculpas- hablo el más joven igual haciendo una reverencia
-por ahora exploremos nuestro nuevo hogar y veamos que tiene para ofrecernos-
-a la orden… ¡desplieguen drones!- ordeno el viejo
Y tras repetir la orden dada los subordinados se pusieron a programar sus máquinas, del llamado Star Palace comenzaron a abrirse varias compuertas de las cuales salen varios drones modelo Predator que se dispersaron por toda Equestria.
Han pasado unos días desde dicho acontecimiento, al no haber pasado a mayores Twilight casi se había olvidado de lo sucedido, pero ahora debía encargarse de sus asuntos reales y uno de estos era hacer una visita diplomática a la Señor Dragón Ember. Pero no iría sola, iría acompañada de sus más grandes amigas y su fiel asistente y ahora consejero real.
Twilight había cambiado un poco en estos últimos años, ahora era un poco más alta que sus amigas debido a que poco a poco estaba adquiriendo su forma alicornio definitiva y sus cabellos ya comenzaban a ondear cada tanto.
Finalmente sus amigas llegaron, básicamente todas usaban las vestimentas de sus contrapartes de equiestria girls, salvo por dos pequeñas excepciones. En vez de falda, Applejack usaba pantaloncillos cortos de mezclilla y Rainbow Dash usaba leggings negros en vez de shorts deportivos bajo una falda. Sus cutie marks aparecían mágicamente sobre sus vestiduras cada vez que se cambiaban de ropa. En el caso de Spike, quien ya rosaba la adolescencia y comenzaba a mostrar los primeros indicios del estirón, su vestimenta era más de cultura urbana (básicamente usaba la ropa de Sans de Undertale).
Todos se preparaban para abordar el dirigible que los llevaría a la lejana tierra de los Dragones, y mientras las chicas discutían como acomodar el equipaje, especialmente porque Rarity volvió a exagerar, Twilight conversaba con su hermano y su cuñada que estaban de visita, o más bien a petición de ella de encomendarle los asuntos reales del palacio en su ausencia.
-será solo un par de días, no tardaremos- aclaro la soberana
-no te preocupes, nos ocuparemos de todo en tu ausencia- respondió su cuñada
-si. No es que Equestria vaya a ser invadida de repente- bromeo su hermano
-a estas alturas, no me sorprendería si eso pasara. Pero si llegara a ocurrir; que espero que no, hagan lo que crean conveniente-
-descuida. Todo saldrá bien- aclaro Cadance
-bien, hora de irnos… dile adiós a tía Twilie, chiquitita- abrazo a su querida sobrina haciéndola reír
-adiós, tía Twilie- se despidió la pequeña Flurry Heart quien ya comenzaba a articular palabras
-¡Muy bien, todos a bordo! ¡Próxima parada, la tierra de los dragones! ¡WHOOOOOH!- exclamo Pinkie con su típica alegría dicharachera. Y dicho todo simplemente se embarcaron despidiéndose y todo eso, alejándose de a poco de la capital Equestriana.
Pero de vuelta en el llamado oeste desconocido, específicamente en la nave/castillo de los recién llegados sus ocupantes continuaban con sus labores. Fuera de la nave se había comenzado a construir asentamientos para su albergue, y dentro el movimiento continuaba.
Sus ocupantes eran ponis y de las 3 razas, tan parecidos a cualquiera de Equestria que podrían pasar casi desapercibido entre ellos… y digo casi pues una discrepancia a los lugareños era justamente sus cutie marks… no tenían, y no había nada en su lugar.
Todos usaban el mismo uniforme, un overol grisáceo de cuerpo entero cuya única diferencia eran las identificaciones de división y sección, todos usaban botas militares y todos iban armados al menos con un arma corta en la cintura.
Y mientras todos continuaban con sus actividades, en uno de los pasillos de la nave sus ocupantes al notar la presencia de alguien importante dejaron de lado sus actividades para mostrar sus respetos con una leve reverencia. Ese alguien era una alicornio de aspecto más madurita que Celestia, de piel dorada, su crin y cola eran de varios tonos de purpura alineado horizontalmente pero que rotaban y también tenían ese aspecto nebuloso y ese efecto ondeante como las princesas.
De cuerpo escultural y sexy, busto grande y caderas pronunciadas que no dejaba nada a la imaginación con el largo vestido plateado que llevaba. Delgadas tiras lo sostenían, escote en V, con hendiduras en ambas piernas a la altura del muslo que al andar lograban mostrar que ella SI tenía una cutie mark, la cual era un escudo de armas purpura con una estrella dorada en medio cuya punta principal emulaba un cuerno y las otras dos puntas superiores unas alas, en la punta llevaba una corona.
Como toda miembro de la realeza esta llevaba una corona dorada con una gema purpura un poco más ostentosa que la de Celestia, aretes de gemas purpura, un collar de oro con una gema purpura, varias pulseras doradas, un par de anillos con gemas random y zapatillas doradas con detalles purpura.
Con una sonrisa y andar sugerente camino por los pasillos recibiendo sus respectivos respetos hasta llegar a una puerta corrediza la cual se abre al instante para no detener su camino, había llegado al centro de comando en cuyas pantallas tenían información recopilada de los drones lanzados.
-¡atención! Su majestad, la reina Goldstar. Soberana de Imponium- hablo el ser de aspecto robusto, aunque no era tan gordo en realidad. Si bien tenía algo de sobrepeso, en especial por la leve papada se notaba que compensaba eso con ejercicio, de piel naranja y cabellos castaños, típico peinado aristocrático de raya en medio y usaba un monóculo. Su uniforme gris era el típico de un oficial militar, saco largo lleno de medallas y adornos en los hombros, pantalones que parecen que le sobra tela por los costados y botas negras (las clásicas botas militares).
-¿listo para su informe, General Wrench?- dijo la soberana en un tono algo sensual mientras se sentaba en su trono cruzando las piernas
-bueno, milady. O aterrizamos algo lejos de la civilización más cercana, o el territorio resulta ser más grande de lo que pensábamos. Alcanzando su máxima capacidad de vuelo los drones solamente lograron registrar estos poblados-
En las pantallas se mostraban lo que básicamente seria el territorio noroeste de Equestria cerca del mar, dos de esos poblados eran básicamente ciudades y lo demás eran pueblos pequeños tal y como Ponyville.
-por lo que hemos recapitulado, parece que estas tierras son habitadas mayoritariamente por ponis igual a nosotros, aunque al parecer con poco avance tecnológico. Apenas y tienen máquinas para trabajo pesado-
-¿nivel de defensa?- pregunto la reina
-desconocido hasta ahora-
-sugiero arrasar con todo con una lluvia de fuego y metralla para no arriesgarnos- hablo el más joven como apenas rosando los 30. A diferencia de general, el chico más bien vestía como un príncipe. Casaca azul, pantalones blancos y botas negras como las del general, su piel era dorada como la reina pero sus cabellos eran entre blanco y gris. Era bien parecido, en forma, de aspecto disciplinado y con falta de empatía o algo de emociones al dar su sugerencia.
-pienso que eso es un poco extremo, ¿no cree, príncipe Purple Heart?-
-y su punto es…-
-cálmense, muchachos. Pero el general tiene razón, querido. Después de todo, debemos mostrarnos flexibles hacia aquellos a quienes vamos a gobernar- aclaro para luego ser reverenciado por ambos –¿su plan de batalla, General?-
-enviar dos regimiento a tomar los poblados más pequeños y dos más para las dos ciudades grandes. Mantenerlos aislados el tiempo suficiente hasta recopilar la información necesaria para saber a qué nos enfrentamos-
-entiendo. Cómo va el asentamiento-
-aquí, al 40%. Hemos enviado destructores a explorar las aguas en busca de territorio para colonizar- respondió el príncipe
-quiero colonización lo antes posible. Monten fábricas y busquen recursos. Debemos mantener nuestro poderío a tope hasta saber con qué lidiamos… y traten de encontrar una calurosa playa, me gustaría broncearme un poco, para variar *fu fu fu*- ordeno para ser reverenciada una vez más por los varones. Por su parte el general comenzó a trabajar pero el príncipe se acercó a la reina para entablar conversación.
-¿está segura de que es prudente ir de a poco, madre?-
-primero conoce a tu enemigo, estúdialo, analiza sus fuerzas y encuentra sus debilidades. Jamás juegues tus mejores cartas hasta el final, hijo mío… solo hasta el final-
-entiendo… ¿y su condición?-
-poco a poco voy recobrando mi poder. Ciertamente ese viaje interdimensional me dejo agotada… *sigh* maldito Golden Coin, su acto suicida nos obligó a esto… lo único reconfortante es que al final su estupidez fue su propia perdición-
Compuertas inferiores del castillo se abrieron y comenzaron a salir varios vehículos terrestres desde autos todo terreno hasta camiones los cuales se embarcaban a los navíos. En las compuertas superiores salían pequeñas y medianas aeronaves con capacidad vertical pero estas no iban lejos pues aterrizaban en los navíos para su traslado. Con todo listo una gran flotilla parte rumbo a la costa Equestriana, todo esto observado desde las pantallas del centro de mando del palacio haciendo sonreír satisfecha a la reina.
Era el inicio del atardecer del día siguiente en el territorio de Equestria, específicamente en un pueblo pequeño algo parecido a Sire's Hollow, era el pueblo cercano a las montañas del oeste desconocido, la misma donde salió esa mamá unicornio con sus pequeños, un pueblo cuyo letrero decía "bienvenidos a Free Gallop".
De repente sus habitantes escucharon extraños ruidos que se hacían cada vez más fuertes, y entonces aparecieron. Desde el cielo varias máquinas voladoras aparecieron sobre su pueblo, eran oscuras, grandes (aunque no tanto como una casa) tenían alas y en cada una llevaba rotores entremetidas en ellas, tenían pintados el escudo real.
De estas comenzaron a saltar los invasores para sorpresa y susto de los lugareños especialmente por la visible altura a la que estaban pero los soldados rápidamente abrían paracaídas amortiguando su caída. Su uniforme gris era el mismo diseño que el de los soldados universales de la primera película (con detalles de camuflaje, claro), usaban cascos militares modernos y sofisticados, en el caso de los unicornios con un diseño exclusivo para proteger su cuerno, cada uno con un arma larga cilíndrica y una corta en la cintura. Poseían el escudo en la parte izquierda del pecho, el casco y en los hombros.
Los habitantes de Equestria siempre han sido algo volátiles en cuanto a lo desconocido o lo que este fuera de sus normas, aunque considerando lo que han vivido; como la invasión del Rey Tormenta en su momento, fuera comprensible, por lo que la reacción natural al verlos fue correr despavoridos, unos hacia sus casas y otros fuera del pueblo, especialmente cuando los invasores comenzaron a abrir fuego con rayos laser para cortarles la huida a estos últimos, afortunadamente no les disparaban ni siquiera para herirlos sino para amedrentarlos.
Los pegasos buscaron escapar de la única manera que sabían hacerlo, volando. No obstante de esas mismas naves desplegaron también pegasos cuyo uniforme era diferente, si bien era gris como todos estos emulaban a pilotos de combate al igual que sus cascos. Pero lo más llamativo era el equipamiento que llevaban consigo.
Armados con un arma larga en su brazo derecho conectado a un exoesqueleto, en la izquierda una especie de manubrio como de motocicleta y una pequeña caja con tubos también conectada a un exoesqueleto que juntos estaban conectados a un Jetpack de dos turbinas. La fuerza aérea les dio caza a los pegasos fugitivos activando su máquina y acelerando con el manubrio cual motocicleta no solo alcanzándolos sino adelantándoles cortándoles la salida poniéndose de frente a ellos y disparando al aire como advertencia, la líder de ese grupo les ordeno que aterrizaran y volvieran al pueblo, cosa que por temor tuvieron que hacer.
Otro grupo de ponis en tierra buscaba escapar por el oeste, lo que personalmente me parece estúpido considerando que los invasores venían de ahí, especialmente cuando vehículos pequeños con torretas armadas aparecieron seguidos por camiones de las cuales descendieron más tropas haciéndolos volver al pueblo.
Motocicletas todo terreno vigilaban los alrededores y de vez en cuando amedrentaban a aquellos que intentaban escapar obligándolos a volver al pueblo, poco a poco el lugar estaba siendo tomado haciendo prácticamente imposible cualquier huida.
Pero la toma no terminaba ahí, los invasores entraban a los hogares y negocios en busca de más habitantes ordenándolos salir, afortunadamente nadie oponía resistencia y por lo tanto nadie era lastimado. Es en una de estas búsquedas donde la muy mencionada mamá pony se ocultaba junto a sus pequeños en el sótano de la casa debajo de las escaleras.
-mamá, tengo miedo- aclaro la pequeña
-guarden silencio, niños. Todo va a salir bien- dijo abrazando a los pequeños
Tristemente su casa también había sido irrumpida por 3 soldados asustando a la familia al escuchar los ruidos, uno ordeno que salieran pero no hubo respuesta, la madre y los hijos buscaban desesperadamente mantenerse ocultos y en silencio.
-parece que no hay nadie aquí- dijo uno de ellos
-infrarrojos-
Se colocaron visores especiales para detectar mediante el calor, inspeccionaron de arriba abajo hallando algunos pequeños vestigios de calor pero nada importante, hasta que caminando más adentro y mirando al piso hallaron a la familia. Mediante señas se dijeron buscar la entrada al sótano, no tardaron mucho en dar con la entrada, una simple puerta la cual derribaron asustándolos y revelando su escondite apuntándolos con las linternas de sus cascos.
-¡salgan de ahí, ahora!-
-¡por favor, lo lastimen a mis niños!-
-¡afuera, ya!-
Sin más remedio la madre obedeció protegiendo a sus pequeños y los escoltaron afuera junto al resto de los lugareños que estaban siendo llevados a reunirse en el centro de la comunidad. En la alcaldía justamente el mandatario, un viejo unicornio había sido llevado afuera y puesto junto al resto del pueblo, a los pocos pegasos que se encontraban ahí se les coloco una especie de esposas en los troncos de las alas que básicamente les impedía abrirlas de manera óptima para volar, estaban sometidos en tierra.
Varios vehículos comenzaron a acomodarse en puntos estratégicos del poblado, uno de ellos, un todo terreno con torreta estaba llegando cerca de la multitud hasta que detiene su marcha. De este desciende un potro de tierra, de aspecto mayor aunque más joven que el general, con un mentón cuadrado que le daba cierto aire varonil, su color de piel era gris cenizo y sus cabellos blancos. Una característica muy peculiar era su ojo izquierdo, tenía una cicatriz que pasaba verticalmente y su lóbulo ocular estaba deformado, básicamente era tuerto.
-¿capitán Buster?- le hablo a un subordinado que se le acerco, el mencionado se quitó el casco revelando a alguien joven, potro de tierra de la edad del príncipe y con los mismo colores de su oficial.
-Coronel Ironheart-
-informe-
-toma del poblado exitoso, tenemos el control total-
-¿control o destrucción de comunicaciones?
-no hay comunicaciones como tal. Su sistema es obsoleto. Básicamente es correo- la respuesta le extraño al coronel pero lo dejo pasar
-¿bajas y heridos?-
-ninguna de los dos bandos. No hubo resistencia, solo intentos de huida-
-¿alguna fuga?-
-ninguna hasta ahora-
-mantengámoslo así. ¿Están todos reunidos?-
-sí, Sr.-
Dicho todo el coronel subió a la parte trasera de un camión que había sido preparado como plataforma para ser visto siendo recibido por sus subordinados y tomo un micrófono para dirigirse a los asustados y nerviosos habitantes expectantes de su cruel destino.
-atención. Nosotros somos Destrier, fieles soldados bajo las órdenes de la reina Goldstar y este poblado ahora forma parte del régimen de Imponium. A partir de este momento se impondrán algunas normas que se aplicaran de inmediato. Se impone un toque de queda que iniciara a las 1930 horas. Por las mañanas se les permitirá seguir con sus actividades diarias siempre y cuando sean dentro de las inmediaciones del pueblo. Cualquier intento de escape será severamente castigado… ¿preguntas?-
Hubo un pequeño momento de silencio, mayormente por los nervios, pero un joven unicornio levanto la mano para preguntar a lo que le dieron la palabra y a como pudo pregunto tratando de no ensuciar sus pantalones.
-ahm… s-siii… bueno, mi pregunta es… ¿Qué es un toque de queda? Y a que se refiere con eso de las 1930 horas-
-¿es en serio?- pregunto estoico el coronel
-ahm… - vio a los demás del pueblo con la misma duda hasta el punto de perder el miedo… por ahora -¿sí?-
La reacción de los Destrier fue de confusión, se miraron entre ello e incluso uno de ellos encogió los hombros ante su coronel desconociendo la naturaleza de la pregunta. Llegando a la conclusión de que quizás se trataba de un simple caso de diferencia cultural el oficial respondió con calma.
-al decir que habrá toque de queda significa que básicamente no podrán salir de su casas durante la noche… a partir de las 7:30 pm.- curiosos todo mundo incluyendo a los Destrier voltearon a ver el reloj de la alcaldía la cual mostraba que la hora designada ya pasaba por casi 10 minutos, a lo que los pobladores voltearon de vuelta al coronel dudosos.
-dado que ya paso la hora designada, haremos una pequeña excepción el día de hoy. Tienen hasta las 8:00 para poner sus cosas en orden. Si no hay más preguntas, pueden retirarse-
Sin más remedio los habitantes obedecieron y de forma calmada aunque aún nerviosos volvieron a sus hogares. Aquellos que iban de paso, como los pegasos capturados fueron invitados a hospedarse en la posada del pueblo. La mama pony llevaba a sus pequeños a casa mientras su hija se aferraba a su peluche de Twilight… y de vuelta con el coronel y su subordinado…
-este pueblo tiene una estación del tren- hablo el capitán
-si es así, debe tener un mapa-
-lo tiene, le mostrare-
Efectivamente en las paredes de la estación había un mapa con las líneas ferroviarias, a donde iban y donde se conectaban, una subordinada estaba escaneando el mapa cuya información era enviada y recibida en tiempo real al palacio, y ese mapa no era el único. De las otras localidades invadidas recibían más mapas escaneados las cuales unían para formar uno solo de manera que fuera lo más específicamente posible. También recibían información de otras cosas que resultaran relevantes… de vuelta a la estación.
-este es el mapa, la nación se llama Equestria. Estamos aquí, y según nos contó un lugareño este es la capital del reino… Canterlot-
-aún estamos lejos de la capital-
-un pueblo se posiciona entre la capital y este poblado, justo aquí. En lo que llaman Ponyville-
-mmm… cuando llega el siguiente tren-
-a las 1100 horas del día de mañana-
-sus órdenes, capitán. Tome 200 Destrier y apodérese de ese tren. Vayan a Ponyville y tómenlo. Una vez establecidos ahí tendremos la capital equestriana cerca-
-¿con solo 200 tropas, Sr.?
-añadiré 200 más vía aérea. Una vez que hayan abordado el tren ellos irán tras de ustedes. Vean si pueden transportar más equipo en él.-
-Entendido-
Terminado los asuntos en la estación abandonaron el lugar, en la alcaldía se abrió un centro de mando y a sus alrededores montaron tiendas para expandir dicha función. Se montaron más tiendas para la función de vigilancia en los alrededores del pueblo y se asignaron sitios de aterrizaje para las aeronaves… y finalmente dieron las 8 en punto.
-oficialmente inicia el toque de queda- hablo una yegua en parlantes –regresen a sus hogares de inmediato. Tendrán solamente 10 minutos de tolerancia… repito. Regresen a sus hogares de inmediato. Tendrán solamente 10 minutos de tolerancia-
Igualmente no había muchos ponis en las calles desde el aviso del coronel pero otros aprovecharon la oportunidad dada para poner sus cosas en orden como les habían dicho. Pasado el tiempo de tolerancia un par de ponis random de tierra llevaban una carreta por las calles cuando fueron interceptados por un par de Destrier, unicornio y yegua de tierra.
-pasó el tiempo de tolerancia, que hacen aun en las calles- hablo la yegua
-lo sentimos, nos retrasamos más de lo que pensábamos porque la carga es muy pesada- hablo uno de ellos-
-p-pero igual no vamos lejos. Ahí está nuestro hogar, mire-
Efectivamente a unos cuantos metros de ellos estaba una casa en cuya entrada una yegua los observaba nerviosa esperando que la cosa no pasara a mayores, el par de vigilantes lo pensaron por un momento al grado de que el unicornio llamo al centro de mando mediante su comunicador en su casco.
-control, interceptamos unos pobladores violando el toque de queda pero su hogar básicamente esta visible. Esperamos instrucciones-
-Déjenlos- respondió el coronel Ironheart –solo asegúrense de que vayan a casa-
-entendido. Bien, andando-
Con nervios el par de ponis agradecieron y siguieron su camino, la yegua hace señas al aire, resulta que en los techos de las casas habían unos cuantos Destrier mas apuntándolos pero la señal básicamente les había dicho que los dejaran por lo que apartaron la puntería de ellos .
Ya pasaban de las 9.00 pm. Los alrededores del pueblo eran vigilados por guardias que hacían rondas, muchos de ellos incluso tenían perros. Había mucho silencio… un silencio algo incómodo que daba nervios a los pobladores. Pensamientos invadían sus mentes, preguntándose de dónde venían, que querían, qué pasaría con ellos, ¿serian esclavos? ¿Los destruirían?. Algunas yeguas iban más allá, preguntándose en qué momento los potros invasores irían por ellas.
En casa de la muy mencionada mamá pony, más específicamente en su habitación ella había arropado a sus pequeños. Por miedo los potrillos les pidieron dormir con ella a lo que acepto por las mismas razones.
-mamá, que va a pasar con nosotros- pregunto el potrillo
-no lo sé, querido. Solo sé que por ahora debemos hacerles caso para que no nos hagan daño-
-tengo miedo… pero sabes que, mamá. Estoy segura de que la princesa Twilight vendrá a salvarnos- dijo la pequeña con confianza y alegría abrazando su peluche
-es cierto. La princesa Twilight y sus amigas ya han salvado Equestria en otras ocasiones. Como con el rey Tormenta, o la malvada reina Chrysalis o Tyrek-
-*risitas* tienen razón, niños. Estoy segura de que ella vendrá a salvarnos… pero por ahora, debemos mantenernos juntos y a salvo, ¿ok?. Ahora duerman un poco-
-sí, mamá. Buenas noches-
-buenas noches, mamá-
-buenas noches, mis niños-
Y así los pequeños cerraron sus ojos con una dulce sonrisa mientras sentían el cálido abrazo de su madre y poco a poco se quedaban dormidos. Ese momento fue más que suficiente para relajarla un poco y hasta se había contagiado del optimismo de sus bebes. Mientras tanto, los protegería a cualquier precio.
Finalmente el sol salió y muchos de los pobladores realizaron sus actividades diarias tal y como se los habían permitido, algunos tenían trabajos en los campos y les dejaron realizarlos con la debida vigilancia. Era algo complicado hacer sus cosas sabiendo que estaban custodiados por invasores pero se las ingeniaban, de hecho no era difícil. Los invasores básicamente no hacían contacto para nada con ellos salvo para aclaraciones o llamadas de atención.
Por otra parte los Destrier demostraron ser un grupo muy peculiar, no muy sociables y no en el aspecto hostil sino más bien en el mismo sentido de la palabra. No hablaban mucho ni siquiera entre ellos salvo para cosas relacionadas a sus labores. Se mantenían firmes, alertas y sobretodo poco inexpresivos lo que les daba un aire intimidante.
Y seguían llegando más tropas de a poco, ya sea vía aérea mediante sus naves o en tierra por los camiones, además de más equipo por parte de los dos medios. Provisiones, municiones, armas y vehículos pequeños como motocicletas o los mismos jetpack de los pegasos.
En la alcaldía tanto el coronel como el capitán iban a una "reunión" con el alcalde para obtener más información, una subordinada unicornio de aspecto tomboy como Zipp, de piel amarilla, crin corta como la antes mencionada y cola café con líneas amarillas iba con ellos dándoles el informe de la situación de los otros poblados tomados en el camino.
-la primera fase de la ocupación tuvo éxito pero, tuvimos problemas en unas de las ciudades grandes, una de nombre Vanhoover. Al parecer encontramos resistencia de una compañía de su ejército. No hubo bajas pero si varios heridos de ambos bandos… sobre todo del nuestro-
-que tan armados estaban- pregunto el coronel
-ahm… solo llevaban armaduras, espadas, escudos, lanzas… Cosas así-
-es broma, ¿cierto?- pregunto el capitán
-no, señor. No es ninguna broma- dijo mostrando imágenes en una Tablet de lo confiscado
-entonces como pudieron dar problemas- pregunto Ironheart
-los unicornios tenían… poderes-
Lo último les pareció extraño pues para ellos solamente su reina era capaz de utilizar magia, incluso para la yegua que era de la misma especie era impensable que un unicornio pudiera tener poderes…y ahora que lo pensaban, se dieron cuenta de que iban a tener una reunión con el alcalde que era un unicornio.
En la reunión el mencionado estaba en su escritorio nervioso y sudando frio. La razón, no solo estaba con los oficiales al mando de la ocupación, sino que había al menos 8 Destrier vigilando cada uno de sus movimientos.
-ahm… ¿esto es realmente necesario?-
-en Vanhoover encontramos resistencia por parte de unicornios con poderes- hablo el coronel –aquí también había unicornios, sin embargo ninguno de ellos mostro ningún ápice de resistencia. ¿Cómo funciona su poder?-
-si bien poseemos magia, no todos los unicornios tenemos el mismo nivel y habilidad. La magia mayoritariamente proviene de nuestros talentos. Lo más común que podemos hacer todos es mover objetos- dijo mientras levitaba cosas para demostrar su punto con una sonrisa nerviosa, lo que causo que los guardias le apuntaran y asustado cesara de hacerlo dejando caer todo –no disparen- suplico con las manos en alto a lo que el coronel hizo ademan de dejarlo en paz, para su alivio.
-entonces su poder dependerá de que tan habilidoso sea con su… ¿magia?... tiene algo de sentido, considerando que esos unicornios estaban en las fuerzas armadas- dedujo el capitán Buster
-bueno, no precisamente debe ser miembro de la guardia real- aclaro el alcalde –si la magia resulta ser su talento, podrán realizar hechizos muy poderosos. Esto es como todo, con estudio y dedicación se puede llegar lejos.
-¿está diciendo que un civil puede estar al nivel de un miembro de su guardia real?- pregunto el capitán-
-puede incluso superarlos- sonrió nervioso. Aunque la aclaración solo trajo más incertidumbre a los invasores –¿entonces, dicen que ella no puede usar magia?- pregunto por la subordinada a quien no había podido prestar atención de que era unicornio por los nervios, la mencionada solo puso cara de ¿? A su vez que era vista con curiosidad por sus demás colegas y superiores. Terminada la reunión los Destrier salían de la oficina.
-tal parece que subestimamos el poder de fuego del enemigo. Llamare al Star Palace para que envíen refuerzos y equipo pesado. Iré a Vanhoover a valorar la situación en persona-
-¿cancelamos el avance hacia Ponyville?-
-no. Debemos avanzar lo más posible hacia la capital mientras aun tengamos el elemento sorpresa. La teniente Laser Disk ira contigo como tu asistente-
-entendido-
-A la orden, Sr.- aclaro la unicornio
Dicho todo el Coronel abordo una nave y se dirigió a su compromiso, la hora pactada del tren se estaba acercando y rápidamente se movilizaron y prepararon todo para su toma y ascenso. Le dejo encomendado el pueblo a otro capitán recién llegado, con todo listo era solo cuestión de tiempo de esperar el tren.
Y hablando de este finalmente estaba llegando a los territorios del pueblo, el maquinista iba feliz y tranquilo disfrutando de su trabajo, silbando y todo. Pero cuando vislumbro el pueblo tanto el mencionado como sus pasajeros no pudieron evitar ver el estado en el que se encontraba, sobre todo por los llamativos ponis uniformados y esas extrañas máquinas y vehículos en el lugar. Cuando finalmente paro en la estación la teniente esperaba al maquinista junto a un par de soldados.
-ahm… ¿es un asalto?- pregunto nervioso
-confiscaremos este tren para nuestro uso exclusivo y requeriremos de su servicio para ir a Ponyville-
-oh… ok-
En cuando a los pasajeros cuando se abrieron las compuertas de los vagones fueron abordados por algunos soldados en principio, en uno de estos vagones el capitán Buster hizo acto de presencia… -lo siento, última parada- aclaro.
Una vez tomado el tren y descendido los pasajeros comenzaron con el ascenso y carga de este. Los vagones de carga eran vaciados para su uso aunque se tomaron la molestia de hacerlo de manera ordenada y sin dañar los contenidos para posteriormente ser reemplazados con equipo, suministros y vehículos pequeños.
Los vagones de pasajeros se llenaron de Destrier, algunos ocuparon lugares y otros irían de pie. Otros ocuparon los vagones con camarote excediendo un poco su capacidad mientras que unos más fungirían de guardia en sus pasillos y los faltantes irían en los de carga. Un par vigilaría al maquinista para que no intentara nada y los superiores irían junto a sus subordinados en uno de los vagones de pasajeros.
Con todo listo el tren comenzó su marcha siendo vistos tanto por sus aliados como por sus prisioneros, sorpresivamente su avance era monitoreado en el centro de mando del palacio, en el mapa actualizado se podía observar el avance de su ejército desde el noroeste y los poblados ocupados la cual iba a paso lento pero seguro, todo esto para total agrado de la reina quien sonreía satisfecha agitando una copa. Parecía que Canterlot estaba a nada de ser tomada, solo un pueblo se encontraba en medio… un lugar llamado Ponyville.
