Mis terrones de azúcar, aquí les traigo una actualización de este fanfic, que sé que están esperando con mucha emoción.
Diré que este es un regalo para un terrón de azúcar que hoy anda de manteles largos.
AzucenaSanCU, espero que lo disfrutes mucho.
Pero antes... ¿Ya fueron a ver el nuevo vídeo de la semana?
Si no, ¿Que esperan?
Aquí les dejo el link:
watch?v=dH910RfdPaU&list=UUsXOkmNxMv5aXgnG5lXNjjA&index=1
Aquí el nombre del vídeo:
Audio Fanfic Saint Seiya. Un Papá Para Kiki, Capítulo 14 (Abuelos) [ShaMu] {ShakaXMu}Y aquí el nombre de mi canal para que se vayan a suscribir:
AMMU TEIKOKU YUDAINA.
Ahora si, a leer se ha dicho.
Solo fue cuestión de escasos minutos, desde que toco la puerta, para que la puerta fuera abierta lentamente, dejando ver a un curioso y confuso Omega de cabellos lilas y mirada verde, que tiene aún entrecerrada la entrada por algo de protección, a la vez que él se topa con unos ojos viridian, cabellera azul eléctrico y una sonrisa de sorpresa.
Aquel hombre, parece bastante impresionado a primera vista, con esa sonrisa que se mantiene serena, esperando palabra del extraño, y esos ojos abiertos como platos están embobados a la preciosa imagen que nunca creyó contemplar.
Mu desde luego no es para nada grosero, aunque solo han pasado segundos de a verlo visto, le sonríe amigablemente, como muestra de su cortesía, pero aún sigue sujetando la perilla de la puerta, sin dejar de ver por completo su rostro, le decide hablar de forma natural –Hola, ¿Necesita algo?- Le cuestiona rápido al extraño, pues aunque este llamo primero no es capaz de hablar.
Si alguien pudiera escuchar el corazón del peli azul, sabría que está latiendo con rapidez y desenfrenó, golpeando fuertemente contra su pecho, dejando escapar un suspiro, por estar admirando el rostro del lindo omega que tiene delante. Sus mejillas se tornan rojas, hipnotizado por la belleza que jamás soñó, pero por estar en su ensoñamiento no se da cuenta de que sus labios se mueven solos –Que lindo…- Habla en un tono bajo al recalcar que le ha parecido el pelilila.
Claro que Mu de inmediato se sorprende de esto, frunce sus curiosas cejas, y abre su boca en señal de confusión -¿Cómo dice?- Inclina la cabeza hacia el frente, aun sujetando por delante la puerta, preparado por si este hombre resulta ser peligroso.
Es allí que el peli azul reacciona al escuchar la pregunta en tono incomodo del pelilila que acaba de conocer.
Su primera reacción es dar un leve salto en su lugar, sonrojándose aún más, para desviar su mirada, rascándose la mejilla, y riendo nervioso –Digo… Hola… ¿Cómo estás?- Le extiende la mano para saludarlo.
Para este punto, sin duda Mu, está considerando seriamente cerrar la puerta y ponerle seguro, pero quiere darle una oportunidad a ese hombre que desconoce y llamo a su puerta, pues cree que no todos los extraños tienen malas intenciones, aunque uno siempre debe dudar de todo y todos.
-Emh… Bien, pero… ¿Se te ofrece algo?- Vuelve a cuestionarle, estando a un costado de la puerta, protegiendo su cuerpo, estando ya listo para cerrarla si la situación se vuelve peligrosa.
-¿A mí?- Se señala a sí mismo, prendado por la belleza del Omega, que parece resaltar en una nube rosa con estrellas iluminando su alrededor. Claro que, según la imaginación de este hombre.
-Ah… Bueno. Tu tocaste mi puerta- Le explica Mu, pues ahora si cree que esta persona no es muy inteligente, o no entiende en el contexto de la situación. Ya que le habla como si fueran conocidos, que desde luego no son –Así que, creo que necesitas ayuda, aunque si no es el caso… Mejor vuelvo a mis cosas…- Es oficial, el pelilila ya está a nada de cerrar la puerta, ya que recuerda perfectamente las advertencias de sus mejores amigos que le dieron al irse a la ciudad.
Es allí que el contrario reacciona, sorprendiéndose y abriendo los ojos como platos, sintiéndose aún más avergonzado de lo que ya está, llevando ambas manos hacia el frente, queriendo detener al otro sin invadir su espacio persona –No, espera…- No alza la voz, pero si se escucha suplicante.
El Omega, está más adentro de su vivienda y la puerta casi entrecerrada, sin embargo aún le da cierta curiosidad, y quiere ayudar si es ese el caso.
Niega con la cabeza y ambas manos, dándole un toque bastante torpe a este desconocido sujeto –Perdona, es que…- Claro que primero debe pensar detenidamente sus palabras, ya que se ha quedado atolondrado por la insuperable belleza del pelilila que tiene delante de sus ojos, sin embargo debe volver a estar tranquilo, ya que si sigue actuando de manera torpe, lo van a tachar de loco –Si necesito ayuda- Comienza a hablar acompañado de sus manos, bastante apenado por su comportamiento absurdo –Mi moto se descompuso aquí enfrente- Señala con ambos pulgares por encima de su hombro derecho –Y llame a los otros departamentos, pero nadie abrió y necesito saber si la puedo dejar por hoy encargada aquí, ya que voy muy tarde para mi trabajo y tengo miedo que me la vayan a robar y…- Empieza a hablar demasiado rápido, casi hiperventilándose por lo preocupado que se volvió de golpe –Es mi primer día de trabajo en este hospital, y si llego tarde me van a despedir sin siquiera a ver llegado y… Y… de verdad necesito esto y…- Su comportamiento ahora demuestra una total angustia y nervios que congelan su corazón.
Claro que el buen Mu, con su personalidad gentil y actitud siempre caritativa lo va a entender.
-Oye, oye… Tranquilo- Es allí que abre por completo su puerta y da unos cuantos pasos hacia afuera, tratando de calmarlo sin tocarlo en si –Respira un poco, y dime despacio lo que te sucede- Le da concejos para motivarlo a que continúe.
Mu, le regala una linda sonrisa, el ver ese rostro con mayor claridad, ese lindo y bien formado cuerpo, sin olvidar la delicadeza que desprende de todo su ser, como el velo lila que cae por su rostro y espalda, y le da ese toque mítico de un ser fuera de este mundo.
El corazón del peli azul sigue latiendo con desespero por la belleza que tiene enfrente, sin embargo debe ordenar sus ideas y ser consciente de que no puede asustarlo como lo hizo antes.
Aspira profundamente por la boca y lo suelta por la boca, tocándose el pecho –Mi moto se averió aquí- Se acerca al barandal del pasillo, señalando al vehiculó de dos ruedas, buen motor, de color negro y llamas en azul eléctrico –Iba en dirección al hospital que queda a una cuantas cuadras. Es mi primer día como guardia o mejor dicho noche- Se fija en su celular, y cierra los ojos apretándolos con fuerza, porque la angustia lo invade –Y entro en media hora, pero debo caminar aun, y tengo miedo que si no llego a tiempo me despidan y apenas lo conseguí y de verdad… No puedo perderlo…- Con mucha confianza, es capaz de hablarle abiertamente al pelilila sobre su problema.
El rostro de aquel hombre se nota de verdad preocupado, no encuentra ni un gramo de mentira o maldad en sus palabras, así que le sonríe, asiente –Entonces, ¿Necesitas dejarla aquí?- Le pregunta, pues el otro se quedó callado de golpe.
Desde luego este asiente gustoso, porque ya no sabía cómo continuar, porque ya se empezó a alarmar –Si, necesito saber si la puedo dejar aquí, si estará bien y no existe problemas y como eres el único que me abrió- Junta ambas manos al frente al nivel de su pecho, apretándolas con fuerza y cerrando sus ojos, para suplicar -¡POR FAVOR! ¡AYÚDAME!- Solo espera que el pelilila se apiade de él y le confirme la asistencia.
Para el Omega, este comportamiento se le hace bastante curioso y le da gracia, además que no percibe ser algún tipo de trama o mentira ante sus ojos, y dando algunos pasos hacia el barandal para confirmar lo que dice de la moto –A esta hora, en un sábado, la mayoría de los que viven aquí aun no llegan del trabajo. Así que es entendible el por qué nadie te abriera- Le habla con más naturalidad, girándose a verlo.
-Ahora lo entiendo- Respira aliviado -Creí que los había asustado- Desvía su mirada avergonzado, para sonreír a medias.
Niega con la cabeza –Las personas de aquí son bastante amigables y más de una te hubiera ayudado, pero como no fue ese el caso- Asiente y le sonríe ampliamente, señalándose con el pulgar a sí mismo, lleno de confianza –Así que si, la puedes dejar aquí, yo te la cuido. Solo estaciónala en el espacio del segundo piso- Le habla con naturalidad, dándole la afirmación que el otro más deseaba.
-¡¿DE VERDAD?!- No pude contenerse el gritar, que casi estaba a punto de tomar las mano del pelilila pero sus brazos se detienen al simple hecho de que no debiera hacerlo, denotando que tiene actitudes muy espontaneas, pero debe calmarse en no hacer una tontería –Digo, gracias…- Claro que no quiere parecer un completo raro para quien lo ayuda.
-De nada- Mu deja escapar una leve gotita de sudor de su frente, porque en efecto se da cuenta de sus intenciones, y claro que si manera de actuar es retroceder con una agradable sonrisa en sus labios –Pero deberías darte prisa. El hospital más cercano sí que está un poco lejos de aquí- Le recalca este punto para hacer que se apresure y no pierda el tiempo.
De inmediato, el contrario abre sus ojo de nuevo como platos –Tienes razón, me iré ahora mismo y la dejare en tu espacio- No cabe de su felicidad y satisfacción –No sabes cuánto me ayudas en esto… Ehhh- Es allí que cae en cuenta que aún no se ha presentado apropiadamente y vuelve a sentir la vergüenza en su cara.
La gentileza natural de Mu le hace sonreír, por ayudar al otro –Me llamo Mu Aries- Le extiende la mano derecha con confianza.
El peli azul rápidamente ve esto como una hermosa oportunidad de tocar la mano de un precioso ser fuera de este mundo, pero no puede quedarse una vez más embobado por la belleza de ese joven Omega que le brinda su ayuda –Me llamo Saga Diastash y… Mañana sin falta vengo por mi moto para arreglarla y para agradecerte por tu ayuda te invitare algo- Sí que no quiere perder el tiempo, mientras se presenta ante quien robo su atención.
-He, he, he- Le da mucha gracia ese comportamiento, pero pronto se alejan sus manos –No hace falta la invitación, pero gracias y no te preocupes-.
La sonrisa de Mu, nuevamente hace acelerar el corazón del otro y que se pierda en su hermoso rostro, sin embargo, en esta ocasión parece ser mucho más evidente para el pelilila.
Ante aquel saludo, Saga rápido se debe despedir para acomodar su moto en donde Me le indico.
El bajar la escalera es rápido, casi se tropieza por pensar en ese lindo hombre que acaba de conocer, y que aún no sabe por completo su segundo género, ya que nada lo puede alertar de esto.
Hizo todo a la velocidad casi de la luz, dejo su moto donde el otro le dijo, y salir corriendo para llegar a su nuevo trabajo, llevando una mochila negra, usando una camisa blanca, corbata negra y pantalones azules como parte de su uniforme, alza su mano para decirle adiós al nuevo amigo y héroe que lo acaba de salvar de este predicamento.
Desde aquel punto alto, Mu le sonríe y de igual forma se despide de él, alzándole la mano y moviéndola de derecha a izquierda, sonriendo, para despedir a quien acaba de ayudar.
El Omega lo ve correr por la banqueta, esquivando personas, hasta que lo perdió de vista, dándole una enorme gracia ese encuentro tan raro y peculiar, pero sin darle mayor importancia al asunto. Solo está ayudando a una persona que necesito de él, no es la gran cosa para Mu, el cual le da un último vistazo a la moto que le parece bastante genial, y se devuelve a su departamento, despreocupado pero agradeciendo que llevara ropa decente para abrir la perta, por lo menos no estaba usando su pijama de borregos, sino hubiera sido la burla de ese peli azul.
Al cerrar la puerta, rápido vuelve a reanudar la conversación con quien hablaba por videollamada, contándole lo que había ocurrido.
Claro que para Aldebarán lo ocurrido es bastante raro y sospechoso, pero no por completo imposible, que a veces esas situaciones ocurren y necesiten ayuda algunos extraños.
Aun así, regaña al Omega y le vuelve a mencionar que debe tener mucho cuidado a quien le abre la perta, y más por a ver salido así de despreocupado ante un desconocido, sin embargo entiende que para Mu es imposible no brindar su ayuda, y solo le advierte que cuando regrese no lo deje pasa a su departamento y todo lo vea desde el pasillo.
Se nota lo sobreprotectores que todos sus amigos son con el soltero y as inocente del grupo.
Claro que para Mu, esto le da mucha alegría en el corazón, ya que significa que sus amigos lo quieren mucho al grado de que se preocupan bastante por él. Sin duda es muy afortunado y lo sabe, aunque si fuera sincero con Aldebarán y consigo mismo, le hubiera gustado más que quien llamara a su puerta fuera Shaka, pero está bien ayudar.
Por otro lado y en el momento en que Mu cerró su puerta, alguien parece respirar con calma y tranquilidad.
Al parecer no se dio cuenta de ese carro conocido, pues esta algo fuera de su rango de visión, pero Mu no está fuera de del suyo.
-Al parecer se fue ese hombre- El castaño de Aioria habla, mientras se fija desde el lado del conductor, como se aleja el peli azul.
Por raro que sea, en el asiento del copiloto está el rubio, mirando fijamente por la ventana justo al departamento del pelilila que ha cerrado la puerta, con las piernas cruzadas, serio, apoyando su mano al nivel de su boca –Tardo mucho hablando con él, ¿No crees?- Hace esa observación, con el ceño fruncido.
-Según lo que pudios ver, tiene que ver con la moto que dejo en ese estacionamiento- Señala con la cabeza, mirando de reojo a su efe y amigo –Solo debió pedirle que lo cuidara en lo que va por algo o alguien- Alza los hombros un tanto despreocupado.
-Mmgh- Es lo único que deja salir, mientras afila sus ojos azules, que miran aun la puerta cerrada de ese departamento, apretando su puño sobre el asiento.
Las palabras de esa mujer Dysnomia, resuenan en su cabeza y eso le molesta tanto.
¿Cómo se atreve en amenazarlo con su nuevo juguete?
Aunque, su corazón parece no querer verlo de este modo.
-¿Crees que él sea quien mando esa loca?- Le pregunta, ahora si mirándolo de lleno.
Lanza un suspiro fastidiado –Es muy inteligente como para hacer un movimiento tan arriesgado y sin pensarlo con brevedad-.
-Entonces es un no- Se inclina hacia el volante, apoyándose sobre el mismo.
-Tsk- Frunce el ceño –No lo puedo descartar en su totalidad. Y más porque se notó bastante cercano a Mu- Los celos empiezan a relucir, porque en efecto cuando ese peli azul quiso acercarse de más al pelilila y este retrocedió, justo en el momento en que pensó en tomarle las manos, Shaka estuvo a nada de abrir la puerta del auto, ir directo a alejarlo y gritarle que no toque lo que es suyo.
Pero su prudencia y orgullo se lo impidió hacerlo, al igual que la reacción del Omega.
Sin embargo, para el otro Alfa, que puede oler las feromonas irritadas que deja escapar el rubio, le dicen otro punto de la realidad.
Aioria solo sonríe, le divierte un poco el jugar al detective, y ver las reacciones soberbias de su amigo, sin embargo, su rosto se ensombrece un poco por sus pensamientos –Oye, y si realmente esa loca cumple sus promesas y amenazas… Y quiere fuera de su camino a Mu, ¿No deberías decirle algo?- Le señala el departamento del Omega –Digo, él está en peligro gracias a ti… Puede pesarle cualquier cosa o que le hagan algún daño - Sin duda la preocupación del Alfa castaño claro, por Mu es genuina, no contienen dobles intenciones, sino que no le gustaría que le pasara algo malo, le tiene cierto aprecio y más porque se nota que el rubio está feliz junto a él, aunque lo niegue.
Shaka cierra sus ojos, pensando con atención en las palabras de su amigo, pero lanza un suspiro cansino –Vámonos- Le dice sin mayor rodeos, acomodándose en el asiento y recargando su espalda.
Esto indigna al castaño claro y enojado, le alza la voz para regañarlo –¡OYE! Tú primero querías venir aquí a asegurarte de que este bien, y saber que está tramando esa loca- Gira sus ojos y frunce el ceño –Y vez algo medianamente sospechoso ¿Y no piensas siquiera advertirle a Mu?- Se cruza de brazos, bufando fastidiado -Que si me dejas te recuerdo, él está en este aprieto, porque a alguien le gusta estar jugando con los omegas, para usarlos un rato, y luego desecharlos como si nada- Le sigue recriminando su falta de empatía y compromiso con una sola pareja.
Sin embargo, y por muy extraño que parezca, Shaka esta calmado en ese momento, y no parece querer reaccionar para mal ante la discusión que le brinda el Alfa contrario –Dysnomia, no es tonta… No va a avisarme previamente que hará algo, simplemente lo hará cuando menos lo espere…- Parece tranquilo al decir esto.
-Por eso debes decirle a Mu- Extiende ambos brazos hacia el frente, desesperado y frustrado por la indiferencia del rubio.
-¿Y qué le digo?- Pregunta en son de burla –Que porque yo antes me acosaba y revolcaba con cualquiera, y ahora que siento ganas de solo tener a alguien por más tiempo, y que a él le puede llegar a pasar algo malo por mi culpa, gracias a una loca, ja- Rueda los ojos, con una sonrisa sorna, mero la mirada frustrada -¿Crees que sea buena idea contarle todo eso y que crea mis intenciones?- No grita, pero si esta enfurecido, aunque conserva la calma, a pesar de que está en su límite.
Para Aioria, esto es un cambio demasiado extraño, casi que está asustado de escuchar a su amigo de esta manera preocuparse por alguien… Toma muy en cuenta esas palabras y dedica una sonrisa algo satisfecha, alzando sus cejas y encendiendo el auto –Entonces, si te gusta, de verdad…- Entrecierra sus ojos para verlo antes de girar su vista y mirar que no vengan autos por su flanco izquierdo.
-¡¿QUÉ?!- Shaka le contesta enojado ahora si -¡NO ESTÉS DICIENDO ESTUPIDECES! ¡MU SOLO SERÁ MI JUGUETE PERSONAL POR UNA LARGA TEMPORADA, HASTA QUE ME ABURRA DE ÉL!- Rápido vuelve a recordar su postura inicial, cruzándose de brazos y frunciendo el ceño colérico, mientras mira hacia el frente.
-Ja, ja, ja, lo que digas- Le canturrea riéndose a carcajadas mientras se dirigen a su nuevo destinó –Pero aunque lo niegues y no lo quieras aceptar, si estás viendo a Mu con otros ojos que no son solo de lujurioso- Le encanta tener la razón como a cualquiera, y más por que quien creyó un verdadero idiota que solo piensa con la cabeza de abajo, le está demostrando de mala gana que ese Omega no es tan solo un juguete como lo quiere hacer creer.
Aprieta sus puños, también como su mandíbula y no soporta más sus estúpidas palabras -¡ERES UN IMBÉCIL AIORA! ¡MU NO ES MÁS QUE SOLO UN OMEGA PARA DIVERTIRME YO CON ÉL!- Antes de continuar, mira una última vez la puerta por donde el pelilila desapareció, y al sentir su corazón latiendo rápido y la molestia por recordar que alguien estuvo tan cerca de él, le hace incomodar –No lo veo de esa forma…- Murmura esas palabras entre sus dientes, sigue aun en su molestia inicial, pero algo… Es diferente.
Justo cuando aquel automóvil de color negro se aleja de la zona de departamentos donde Mu vive.
La voz de una persona se presentar, estando justamente sentado en una cafetería de frente, vestido de manera casual, con pantalones de mezclilla, camiseta a curados, con lentes oscuros, gorra que oculta su cabellera, y el libro de tapa verde que lee, también impide ver bien su rostro –Como usted lo dijo señorita Dysnomia, vino directamente hasta aquí-.
-Ja, ja, ja. Ese tonto es demasiado predecible. Aunque me ofende que cree que yo igual lo soy- Habla por el teléfono que sostiene el que vigila aquel lugar –Pero duele tanto que prefiere proteger a ese inservible Omega- Su voz parece de dolor fingido.
-¿Cuál es el siguiente movimiento que desea que haga?- El hombre de seguridad de la mujer, acatara cualquier orden que le dé.
-Solo quédate allí una hora más, si vuelve mi amado Shaka, infórmamelo de inmediato, sino… Vete a tu casa y que se prepare la siguiente sorpresa para ese… Ja, tal Mu. Ej, je, je, je- Habla encantada, riendo a carcajadas a burla del rubio que sin duda también ha caído en su nueva trampa.
-Como orden, señorita Dysnomia- Cuelga rápido la llama, para seguir bebiendo su café helado, y "Leer" el libro que sostiene delante de su rostro, en donde está colocado casualmente con la mirada para el departamento del pelilila, que no despega su vista ni por un breve segundo de allí.
Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quien me ha robado el reloj?
¿Como están mis terrones de azúcar?
Espero que les gustara el capitulo del día de hoy y que... Jijijiji, bueno... A veces es bueno pensar las cosas mas detenidamente y no creer siempre lo obvio.
Aunque me conocen muy bien, nunca niego ni confirma nada, mis palabras y acciones pueden variar de repente, pero con lógica, o pude ser lo que pensaban igual... Mmmh, ¿Quien lo podría adivinar?
A si, solo yo jijijiji.
Primero vayan a felicitar a mi terrón de azúcar cumpleañero del día de hoy.
AzucenaSanCU, espero que en tu día lo estés pasando super bien, y sobre todo que debo aclarar que este es tu regalo del año pasado, así que disfrútalo y el de este año... Pues, ya se vera jajaja XD.
Te vamos a cantar la canción oficial de la familia terrón de azúcar, así que prepárate.
Un día feliz para ti, hoy es tu cumpleaños si que si, felicidades AzucenaSanCU, tu cumpleaños si que si.
Un día feliz para ti, hoy es tu cumpleaños si que si, felicidades AzucenaSanCU, tu cumpleaños si que si.
Espero de todo corazón que de verdad disfrutaras tanto tu regalo, es una muestra de mi enorme cariño y amistad que siento por ti, ya que somos amigas ya desde hace bastante tiempo y me siento super afortunada de que sigamos están en contacto a pesar del tiempo trascurrido.
Te quiero mucho amiga, cuídate y come mucho pastel.
Ahora vamos a responder los hermosos comentario de mis terrones de azúcar:
KuranKaname01: Jajajajajajajaja ya sabes como soy, me gusta dejarlo en lo mero bueno, pero... Veremos que tal el de hoy.
No te mueras terrón. Jajaaja
Me alegra tanto que te gustara tu regalo, igualmente ten un lindo día.
LotoAries: Hola, terrón. Jijijiji, eso ya te lo había dejado en una respuesta de comentario anterior, por andar curioseando y queriendo saber para que sirve algunas cosas, no me fije bien y coloque a algunos en la lista negra para saber como serví y ya vi que si funciono, perdón terrón... No me fije que te deje a ti y a otro terrón allí, fue mi culpa... Perdóname... Ya no debo andar de curiosa jajaja.
Me alegra mucho que te gustara el capitulo de la vez pasada, y sé que lo has estado esperando mucho, y lo disfrutas como los otros, gracias.
Jijijiji, no te preocupes no me tomo a mal tu concejo, es bien apreciado. Solo que creo como sabes, ya tengo todo bien planeado, o sea ya esta escrito todo el fanfic en borrador y solo lo corregido es lo que actualizo, así que... Era el momento para él... Pero... Te diré algo, no sera el único rival que llegues a ver.
Zukilove: Jjajajajajaja, ojala se pudiera teletrasportar, pero... No puede aquí.. No tiene esos poderes. Sin duda, Mu esta en un peligro inminente.
Bueno terrones, gracias por comentar, votar y darme siempre su apoyo, de verdad lo agradezco de todo corazón.
Me paso a despedir, no sin ante recordarles que son los mejores terrones de azúcar del mundo y siempre apreciare su enorme apoyo.
Nos leeremos en la próxima.
Cuídense y manténganse a salvo.
Los quiero mucho.
Ammu se va.
