Capitulo 7
-Gracias Takeda… -Shizuru se encontraba en el asiento del copiloto, mientras que Takeda encendía el coche.
-Por nada Shizuru, sabes que para mí es un placer el poder ayudarte. ¿Te llevo al hospital? –El moreno mantenía su vista al frente, solo de reojo miraba a Shizuru.
-No, mejor a mi casa. Es una simple gripa. -Pasaron varios segundos en los cuales ninguno de los dos dijo algo.
-Shizuru… escuche que se está organizando un baile para el 14 de febrero… ¿quieres… ir conmigo? –De pronto el moreno pregunto, tenía un sonrojo en su rostro. Sin embargo Shizuru iba perdida en sus pensamientos y ni siquiera volteo a ver a su acompañante.
-Takeda… no creo… con la doc y compañía estamos organizando una fiesta…
-Oh está bien… -Takeda lo dijo en un susurro. Shizuru lo pensó brevemente, tal vez sea buena idea invitar a Takeda, puede que la ayude en su plan para conquistar a Natsuki. Si ella muestra interés en la ojiverde pero Natsuki ve que alguien más muestra interés en ella, en este caso Takeda, puede que Natsuki piense que realmente la quiere y se anime a dejar lo que sea que ha iniciado con su prima.
-¿Quieres ir? –Takeda frena de golpe, por poco se estrella con el auto de enfrente. La pregunta de Shizuru lo tomo por sorpresa, no se lo esperaba.
-¿En serio? ¿Me estas invitando? –Aprovechando que el semáforo estaba en rojo, Takeda giro un poco su rostro para ver a Shizuru, ella también lo miro.
-No hagas que me arrepienta…
-Sí, voy, acepto.
-En la semana te doy más detalles, ahora si no te importa cerrare un poco mis ojos, estoy cansada.
-Claro que no Shizuru, descansa. –Shizuru no vio la sonrisa que sus palabras provocaron en él. En silencio continuaron su camino a la mansión Fujino.
…
…
…
Natsuki y Alisa estaban caminado por el centro comercial, estaban buscando el vestido perfecto para Alissa.
-Natsuki…
-Dime…
-¿Quieres ir a la sala de juegos? –La ojiverde detuvo su andar. Alisa la imito.
-¿Te gustan?
-Pues no se mucho de videojuegos ¿me enseñas?
-¿segura? –Natsuki sonrió.
-Si… El vestido lo podemos comprar cuando mi prima se recupere…
-Por mí no hay problema, vamos por el vestido...
-Eres un amor Natsuki… -Alisa le regalo una sonrisa que Natsuki correspondió. La rubia la agarro del brazo y ambas se quedaron viendo.
-Vaya, vaya ¿miren a quien tenemos aquí? A mi ex y a su "salvadora" –Esas palabras no eran de otro más que del ex de Alisa.
-Vámonos Natsuki… -Alisa cambio de rumbo, no quería discutir con su ex novio.
-No pensé que cayeras tan bajo Alisa, mira que cambiarme por esta…
-Cállate, no tienes derecho a expresarte de Natsuki de esa manera… tu menos que nadie… poco hombre…
El tipo perdió su sonrisa al escuchar las palabras de la rubia, quien en un arranque tomo de la mano a la ojiverde y comenzó a caminar para alejarse de su ex, el tipo se quedo impotente viendo como se alejaban ambas, detrás de él se escucharon unas risas, eras sus amigos quienes se estaban burlando.
-Si serás idiota…
-Cállate imbécil, se va a arrepentir por cambiarme por esa…
-Lo que digas Casanova… ¿podemos ir a comer? Muero de hambre. -El seguía viendo a las chicas que pronto perdió de vista, le hervía la sangre, como era posible que Alisa prefiriera a esa simple tipa a él, que proviene de una de las familias más ricas.- O ¿prefieres seguir revolcándote en tu miseria?
-Ella será mía, no de esa estúpida…
A unos metros de distancia las chicas continuaban caminando, seguían tomadas de la mano, Alisa pensó que Natsuki se sentiría incomoda y trato de soltarse, sin embargo la ojiverde la tomo con un poco mas de fuerza sin llegar a hacerle daño, tratando de demostrarle que no se sentía incomoda, en lo absoluto.
-¿Lo recordaste?
-Claro que si Natsuki… eres muy importante para mi… -La rubia bajo su rostro, se habían detenido hace unos segundos, Natsuki sonrió, recordó parte de la plática que tuvieron cuando se conocieron.
Inicio del recuerdo
-De verdad, por favor, déjame invitarte algo, un café por lo menos.
-No es necesario, de verdad. –Alisa en un intento por convencerla tomo la mano derecha de Natsuki entre sus manos al momento sintió que la ojiverde se tenso por el contacto, fue como si se quedara paralizada. Alisa temió que le fuera a dar algún ataque o algo por el estilo y lentamente dejo libre la mano de la ojiverde y agacho su cabeza, no se sentía digna de mirar a Natsuki.
-Lo siento, no fue mi intención… molestarte…
-No, no tienes porque pedir disculpas, es algo mío… el contacto físico me cuenta un poco. –Natsuki lo dijo y en su rostro apareció una tonalidad rosita, tirándole a rojo, no solo el contacto físico le costaba, si no también decir sus pensamientos y expresar sus emociones. Alisa levanto su rostro y le sonrió de forma comprensiva a Natsuki, quien correspondió.
Fin del recuerdo.
Ahora se encontraban caminando por el centro comercial, iban tomadas de la mano, varias personas las miraban con curiosidad pues formaban una pareja algo rara y a la vez adorable. Esto de que las observaran comenzaba a incomodar a Natsuki, pues el ser el centro de atención nunca ha sido su deseo, le inquieta que la observen. Alisa lo noto.
-¿quieres ir a otro lugar?
-¿Segura?
-Sí, guíame a algún lugar que te guste… después volvemos, el centro comercial no irá a ningún lado.
-Bueno en ese caso vamos.
…
…
…
-Hemos llegado. –Takeda lo dijo al momento de estacionarse en la estrada de la mansión, giro su rostro para ver que Shizuru estaba dormida, la imagen le pareció adorable, sin quererlo su corazón comenzó a latir como loco, la chica le gustaba desde que la conoció. Se quito su cinturón de seguridad y se recargo en su asiento para ver mejor a Shizuru. La ojirubi lentamente abrió sus ojos y observo que ya se encontraban en su casa, volteo a ver a Takeda quien palideció pues fue descubierto.
-Lo siento… yo… no quise despertarte… -Shizuru suspiro.
-No te preocupes Takeda, gracias por traerme.
-Si… -Shizuru se quito su cinturón, el moreno rápidamente se bajo del auto dispuesto a corres y abrirle la puerta a Shizuru quien no espero y abrió la puerta, sin embargo al tratar de caminar sintió un mare y Takeda la sostuvo para que no cayera.
-Te acompaño… te sirvo de apoyo…
-No te emociones… -Shizuru se lo advirtió, ella no desconoce los sentimientos que él tiene por ella, sin embargo no los quiere alimentar o que el moreno mal interprete las cosas.
-Nada de eso… ¿está bien?
Caminaron unos metros para llegar a la puerta de la mansión, Takeda quería entrar para acompañar a Shizuru pero la ojirubi le dijo que no, educadamente, le agradeció el traerla a su casa y se despidió de él. Ella entro con dificultad pero ya por su propio pie.
-¿Dónde está tu prima? –En cuanto cerró la puerta su tía comenzó a interrogarla.
-Se quedo en el centro comercial…
-Sí, y mira con quien… -Alison le mostro una foto en el celular donde se ve a la rubia de la mano con Natsuki. –Esto no es parte del trato, tu las alejas, no las acercar…
-Me siento mal tía, y por un rato que estén a solas no pasara nada… además… comencé con mi plan y esto que ciento es algo fortuito… ya lo verá…
-Eso espero porque si tu abuelo se entera de esto…
-Que se entere, no me dio una fecha limite o algo así, solo quiere que las separe y si lo hago como quieren no duraran ni una semana lejos la una de la otra y volverán a unirse.
-Shizuru…
-Para que te quedes tranquila, tía. Mi plan es separarlas definitivamente, por siempre. Así que deja de sermonearme. Iré a descansar… -Shizuru comenzó a subir las escaleras, llevaba unos cuantos escalones cuando se detuvo. Alison la estaba viendo, quería ir a ayudarla, pero no se atrevía.
-Tía, por favor, mándeme esa foto y si hay otras, también envíemelas. –Shizuru lo dijo sin siquiera voltear a ver a su tía y siguió su camino a su cuarto.
-Vamos al doctor… -Alison dijo sin embargo Shizuru no le respondió, entro a su cuarto y cerro con cerrojo, lo que necesitaba era dormir.
…
…
…
-Wow… no pensé que jugaras tan bien básquet…
-De hecho es la primera vez que lo hago… mi primera vez… eres buena enseñando… -Alisa lo decía al tiempo que lanzaba el balón a la canasta y encestaba.
-¿Cuantos vamos? –La rubia lo dijo sonriendo. Natsuki fue por el balón.
-Vamos quince, diez, aun te voy ganando…
-No por mucho tiempo… -La rubia le arrebato el balón a Natsuki, quien no pudo alcanzarla y la rubia termina encestando.
-¿De verdad nunca habías jugado?
-No, de verdad… tal vez el ballet me dio ese poder… -Nat iba de nueva cuenta por el balón.
-¿Practicas ballet?
-Antes, lo deje hace algunos años… -Alisa tenia de nueva cuenta el balón sin embargo en un salto Natsuki lo gano, y comenzó a botarlo alrededor de la rubia.
-¿Entonces no podre ir a verte a algún recital o algo así?
-¿Quieres verme bailar? –Alisa se sorprendió por lo que Natsuki le dijo y dejo de moverse. Natsuki comenzó a correr hacia la canasta, Alisa ya no opuso resistencia alguna.
-Si… -Natsuki encesto.
La rubia se quedo estática en su lugar, recordando que hace algunas minutos le había dicho a Natsuki que la ayudaría a conquistar a su prima sin embargo al estar pasando más tiempo con la ojiverde la hizo cambiar de opinión. La chica frente a ella era algo increíble, muy diferente a las personas con las cuales ha tratado desde niña, es demasiado sincera, alegre y siempre se preocupa por los demás. Quiere ayudarla, de verdad desea ayudarla sin embargo ahora cae en cuenta que tal vez no sea tan fácil, pues su corazón late, de nuevo late y la causante no es otra más que Natsuki. La rubia esta en un dilema, en una encrucijada.
-Te toca. –Natsuki le lanza el balón, mientras ella se pone en posición de defensa. Alisa sonríe. Decide no lamentarse por lo que aun no pasa, disfrutara los momentos que este con Natsuki. Eso es lo único seguro.
