Disclaimer: Bleach y sus personajes no me pertenecen son propiedad de Tite Kubo, pero la historia es completamente mía.
Ahora soy consciente de cuánto tiempo ha pasado desde que la historia inició, ¿hemos cambiado mucho verdad?
"Cuando una flor muere nunca vuelve a florecer. La gente, las aves, los insectos, incluso las estrellas, que brillan intensamente, la vida ocurre solamente una vez, por eso es tan hermosa y preciada."
–Orfeo de Lyra (Masami Kuramada)
CAPITULO VIII – "Un pasado turbio. Parte III"
Pov Ichigo
Regresó a casa antes de que acabara el trabajo, no podía continuar pensando en otra cosa que no fuera la dirección que Urahara había escrito en ese papel y la imagen de Rukia en aquella fotografía. ¿Qué diablos hacia su esposa en un hospital? Y más aún ¿Quién era el hombre al cual acompañaba? Le dolía la cabeza y estaba bastante enfadado.
Entró por la puerta principal de su casa y miró alrededor, por la hora Kei ya debería estar en casa con Riruka, suspiró y decidió buscarlos para llevarlos a comer, aunque su acción no fue necesaria cuando vio a su hijo acercarse hacia él. Una sonrisa natural surgió en su rostro al ver al pequeño.
–¡Papá! Llegaste temprano –La voz de su pequeño sonaba tan animada.
–El trabajo fue bastante ligero y por eso llegue antes ¿Dónde está Riruka?
–Está en la sala viendo televisión
Debía admitirlo, Riruka era de gran ayuda en casa cuidando de Kei –Bien, debo hablar con ella. –Se dirigía a la sala cuando la voz de su hijo le detuvo.
–Papá, espera yo quería preguntarte si… hay algo que quiero con muchas ganas para mi próximo cumpleaños.
Levantó la ceja interrogante, cualquier cosa que su hijo quisiera la tendría. Si no mal recordaba su cumpleaños era poco menos de dos semanas. –Dime, ¿qué es lo que quieres?
El niño parecía dudar de sus palabras y nerviosamente jugaba con sus manos, algo que también lo puso nervioso a él. ¿Su hijo estaría bien? –La verdad papá, es que me he estado sintiendo un poco solo y creo que hay algo muy importante que…
Su atención estaba 100% enfocada en su hijo, hasta que sintió unas manos rodearlo por la espalda y darle un fuerte abrazo.
–¡Ichigo por fin llegaste! Me alegro tanto de que llegaras temprano. Kei y yo estábamos hablando de ti.
Volteó su rostro encontrándose con Riruka, que al instante le soltó rápidamente y le dio un corto beso en los labios. Esa mujer no perdía ni una mísera oportunidad de tocarlo, aunque para él solo resultaba ser una reacción a veces molesta. Mucho tiempo estuvo pensando en dejar a Riruka e intentar construir algo nuevo con Rukia, aunque su odio siempre le frenaba en su intento. Entonces, sus instintos bajos no pudieron ser controlados de otra manera, no cuando Rukia siempre intentaba tener intimidad con él, era imposible no sentirse atraído o excitado por la mujer que había amado toda su vida, Rukia era su maldición y Riruka lo distraía de ella
–¿Es cierto lo que dice Riruka? ¿De que hablaban hijo?
Kei parecía dudar en contestarle –Yo, le platique a la señorita Riruka de lo que quería de regalo para mi próximo cumpleaños y…
–Así es Ichigo, Kei me conto que se ha sentido muy solo últimamente y que para su próximo cumpleaños desea un perrito que le acompañe, pero está preocupado de que tú te molestes o no quieras tener un mascota en casa, por eso ha estado triste últimamente.
Vaya, con que ese era el motivo por el que Kei estaba tan nervioso. Como es la infancia, los niños de verdad se preocupan por cosas tan insignificantes. –No te preocupes hijo, yo no tengo ningún problema por que tengamos una mascota, es más no importa la raza, nos haremos cargo de él.
Puse mi mano sobre la cabeza de Kei y la sacudí gentilmente, ese niño era un tesoro, todos decían que era tan parecido a mí a diferencia del color de cabello y ojos, sin embargo la mayor parte de su actitud era el fiel reflejo terco de su madre.
Kei me veía con bastante asombro. Probablemente pensaba que no lo dejaría tener una mascota, pero… ¿qué padre le puede negar a su hijo la posibilidad de tener un compañero que le haga compañía y juegue con él?, más aun si se tienen las posibilidades para ello. –No te preocupes lo iremos a buscar pronto, pero por ahora que les parece si vamos a cenar.
Pov Kei.
Mi padre no dudó en ningún segundo en las palabras de Riruka y eso me hizó sentir que me hacían de lado nuevamente, ser pequeño no significaba que te podían ignorar o menospreciar cuando quisieran, estaba triste porque al final no importaba que tanto me esforzara en decirle algo a mi papá, siempre que interfería Riruka terminaba manipulando mis palabras para que terminara diciendo otra cosa y si llegaba a encontrar a mi padre solo, por más que insistía en hablar con él, siempre salía con una excusa del tiempo o del trabajo. Era realmente frustrante, nadie lo escuchaba. Aunque en parte era su culpa lo que estaba sucediendo, tal vez no le debía de haber contado a Riruka de que quería que mi madre volviera, la chica puso una cara de desagrado cuando le contó que eso es lo que quería de regalo.
–Discúlpame papá, pero… ¿puedo ir a acostarme? Estoy cansado y no tengo ganas de cenar.
Mi padre parecía mirarme preocupado. Claro, que niño normal se dormiría temprano –No hay problema hijo, pero… ¿estás seguro que no quieres cenar?
Asentí con la cabeza y me dirigí a mi cuarto lentamente hasta que la voz de papá me detuvo. Volteé al escucharlo.
–¡Kei! No importa que pase, sabes que puedes contar conmigo para lo que sea.
¿Debería volver a intentarlo? Tal vez papá si me comprendería si me explicaba bien y…
–Vamos Ichigo no exageres, Kei solo está cansado y es parte de su crecimiento. Los niños no pueden tener energía para siempre y tus estas armando un alboroto solo por un pequeño cansancio. ¿No crees que eres muy sobreprotector?, probablemente Kei este más abrumado que nada por tu constante acoso paternal.
Mi padre volvió a mirar a Riruka y después se dirigió a mí, ahí estaba esa mirada de nuevo. Él le había vuelto a creer todo… –Supongo que tienes razón. Lo siento hijo, descansa.
Las lágrimas empezaron a acumularse en sus ojos y se dirigió rápidamente a su habitación. Mientras se metía a su cama y tomaba un peluche de un pequeño conejo entre sus manos. Ese peluche pertenecía a su madre, aun tenia impregnado el perfume de jazmín que ella tanto usaba y abrazarlo le producía cierta seguridad. ¿Por qué tardaba tanto en volver? Se supone que solo serían unas vacaciones cortas, pero… pronto se cumplirían 7 meses desde que se había ido…
Abrazo al conejo fuertemente y le hablo a la nada, como si sus palabras fueran a ser transmitidas mágicamente por el viento.
–Mami… ¿por qué no vuelves'. Prometo que me portare bien, lo siento por ser tan malo contigo, si vuelves te prometo que ya no lo haré. Por favor… regresa.
Pov Ichigo
Su hijo no se veía tan bien, pero tal vez Riruka tenía razón y él estaba sobreprotegiéndolo. Todo era más difícil ahora que Rukia no estaba, sentía la necesidad de proteger fuertemente a su hijo, como si dicha acción supliera el cuidado que Rukia tenía con su hijo. Muy en el fondo agradecía que el infante no preguntara por su esposa y que tampoco se viera muy afligido por su ausencia. Eso lo quitaba un gran peso de encima.
–Ichigo… yo no tengo mucha hambre y supongo que tú tampoco.
Riruka se acercó y se empezó a restregar contra él de una manera que ya conocía muy bien. Se quiso alejar lentamente.
–Hoy no Riruka, estoy muy cansado y no tengo ánimos.
La chica volvió a acercársele y aprovechó el descuido para darle un beso en los labios y seguir con un rastro por todo su cuello. Gruño instintivamente.
–Vamos Ichigo hace más de dos meses que no tenemos nada y me estoy impacientando, no me digas que a ti no te hace falta también. –La pelirosa llevo sus manos a su entrepierna y empezó a estimular su miembro, mientras sus besos no paraban.
Su respiración se empezó agitar y su ritmo cardiaco se elevó. Reacciones instintivas que la fisiología de su cuerpo manifestaba y no podía detener. Sentía como empezaba a endurecerse por las contantes atenciones de la chica y no lo soporto más.
La tomó con ambas manos y la acorraló contra una pared, besándole salvajemente.
–Vamos a mi habitación. Ahora.
La chica le sonrió –Ese es el Ichigo que me gusta.
Llegarón a su habitación y cerró la puerta rápidamente para tumbar a la chica en su cama. La misma cama que compartía con Rukia. Ahí es cuando empezaba él teatro.
Todo era meramente instintivo y salvaje, se besaban mutuamente con desesperación y agresividad. La chica se le restregaba mientras se deshacía de sus pantalones y él se encargaba de besarla y tocar sus pechos mientras intentaba deshacerse de la estorbosa blusa que le dificultaba completar sus actos a la perfección.
–¡Ahhhhh! Vamos Ichigo tómame soy completamente tuuuuya!
El gruñía al escuchar a la chica, intentando excitarse más de lo que ya estaba. La chica gemía fuertemente mientras él metía una de sus manos en su ropa interior, tocándola fuertemente en su centro, preparándola para la consumación del acto. No había nada de cariño en sus acciones, simplemente la preparaba. Pronto Riruka experimento un gran orgasmo mientras él continuaba con su toque, la chica por su lado al bajar de su cima imitó sus acciones, metió sus manos a sus bóxer tomando su gran miembro y estimulándolo. Fue rápida y precisa en sus acciones, toda una maestra en la seducción y aun así él no había podido llegar de ninguna manera, todo se sentía tan seco, mientras Riruka al parecer de sus gestos, ya estaba disfrutando de su segundo orgasmo gracias a sus habilidosas manos.
Al sentir que Riruka ya estaba lista, se deshizo del resto de sus ropas con la ayuda de la chica y se preparó para penetrarla. Restregó su pene contra la entrada de la vagina de la chica, para penetrarla bruscamente de una sola estocada, haciendo que la chica se aferrara fuertemente contra él, al parecer estaba teniendo otro orgasmo. La empezó a penetrar fuertemente en un ritmo continuo mientras la chica gemía de placer y sus uñas se clavaban en su fuerte espalda. Por otro lado él se sentía atascado, de nuevo lo mismo, cada vez que tenía intimidad con Riruka pasaba por eso, por más que intentaba llegar al orgasmo o sentir un poco de placer, todo se veía opacado al ser consciente de sus acciones. La única manera de lograr terminarlo era…
–¡Dame más Ichigo! ¡Más! ¡Por favor!
Las suplicas de la chica se fueron ensordeciendo en sus oídos, mientras los gemidos de otra persona se hicieron presentes. Dejó que su imaginación tomara control de la situación, al cerrar los ojos por un momento y volverlos a abrir, ahora se encontró con la imagen de Rukia debajo de él, suplicando con su voz anhelante que le complaciera. Su cuerpo se estremeció y no le tomó más de tres estocadas terminar fuertemente dentro de la chica. Veía como su esposa se regocijaba del placer, mientras él le mantenía protectoramente pegado a su pecho y le besaba sensualmente. El placer le consumió por escasos segundos, cegándolo por completo. Dejó que su esencia entrara en el cálido y fértil vientre de ella, mientras Rukia le veía con esos ojos violeta completamente satisfechos y llenos de amor. Se acercó a ella, le beso cálidamente y suavemente, todo era tan perfecto… aunque poco duro la magia cuando la voz de Riruka se hizo presente de nuevo y él salió del sueño. Ahora miraba a la chica pelirosa, donde se supone había visto a Rukia y regreso su conciencia al lugar donde estaba, entonces sintió como se hacía cada vez más grande el hueco que estaba en su pecho. El vacío…
Se levantó de la cama rápidamente y empezó a vestirse, ante la mirada de la chica.
–Siempre me sorprendes Ichigo. Eres tan bueno en el sexo, pero jamás vas más allá de una ronda por noche.
–Voy a ver a Kei. Duerme ya es tarde.
Riruka se levantó y lo abrazó fuertemente. –Vamos Ichigo una ronda más.
La separó de él y terminó de vestirse mientras refunfuñaba. –Es suficiente Riruka te dije que estoy cansado.
Salió de la habitación mientras dejaba a la chica en ella. No podía soportar estar más tiempo en ese lugar. La imagen de Rukia y todo lo que había vivido con ella lo atormentaban, ella era una asesina y traidora, y aun así no sabía cómo su corazón se sentía tan destrozado cada vez que la engañaba, se sentía como un vil bastardo.
Pov Rukia
–Grimmjow, yo asesiné a Kaien. Desde ese momento Ichigo me empezó a odiar y lo puedo entender, yo maté a su único hermano, pero con Kei fue algo diferente, él solía ser un niño de amplia sonrisa, amable y muy unido a mí hasta que entró en la escuela, entonces… se volvió frío y grosero, por alguna razón me empezó a despreciar de la misma forma que Ichigo. Por más que quise cambiar su actitud no logré hacerlo. Él prefería salir con Ichigo y estar a su lado, mientras que yo al parecer quede relegada al puesto de sirvienta. No era la madre de Kei, tampoco era la esposa de Ichigo ya que al parecer él salía con otra mujer, una mujer que Kei veía como una madre.
Grimmjow le miraba con confusión –Rukia…
Ella no le desvió la mirada –Todo comenzó hace poco más de siete años, yo tenía 23 años y me acababa de graduar de contaduría. Ichigo también tenía 23 años y se estaba a punto de graduar de relaciones internaciones, unos meses antes me había propuesto matrimonio durante una gran cena y claro que acepte, poco después me entere de mi embarazo e Ichigo se emocionó mucho al enterarse, en ese momento solo él y yo sabíamos de esa noticia. Esos días fueron hermosos.
Cerró los ojos recordando aquellos momentos.
–Nuestra boda estaba planeada para el final de ese mismo año en él que ambos nos graduaríamos. En ese momento todo parecía tan mágico y casi pensaba que nuestra vida estaría completa, pero de un momento a otro, todo cambió cuando recibí una llamada.
Flashback.
–Estaba muy feliz por su embarazo y su próxima boda. Río al recordar la cara de Ichigo cuando le dio la noticia, el muy idiota se quedó paralizado en un inicio para después caer en con un fuerte estruendo al suelo. Aunque se asustó por un segundo, toda duda fue acabada cuando el pelinaranja reacciono de nuevo y se lanzó a abrazarla eufóricamente. El tonto cabeza de zanahoria estaba bastante contento.
Dicho recuerdo fue interrumpido cuando de pronto su celular comenzó a sonar. No lo dudo dos veces antes de contestar.
–Bueno
Una voz agitada le contesto en la línea –¡Rukia, que bien que me contestes, necesito verte urgentemente!
Esa voz… –¿Kaien eres tú? ¿Qué sucede, porque estas tan agitado?
–Rukia, por favor necesito contarte todo en persona. No hay manera en que pueda decírtelo por teléfono.
–¿Pero estas bien? ¿Nadie está herido cierto? ¿Ichigo está bien?
Escucho gruñir a Kaien –Todos están bien Rukia, soy yo el que necesito hablar contigo. ¿Podemos vernos mañana en la tarde?
La propuesta la tomo desprevenida. ¿Qué le sucedía a Kaien? ¿Estaría bien? –Si es muy urgente puedes venir a verme a mi departamento Kaien, llamare a Ichigo y entonces….
–¡NO! Ichigo no debe de enterarse. Por favor Rukia, no puedo verte hoy, pero es de suma importancia que nos veamos.
Si era algo tan importante, no podía fallarle a Kaien, él era como su hermano. –Bien, entonces ¿Dónde te veo Kaien?
–Gracias Rukia. Nos encontraremos mañana en el hotel Royal Nishitetsu a las seis en punto. Por favor no faltes.
Kaien de verdad se oía muy ansioso. –No lo haré, pero si necesitas que le diga algo a Ichigo, Masaki o Isshin, no dudes en que se los haré saber.
Esperaba que Kaien le contara más de la situación pero solo obtuvo un silencio prolongado de varios segundos –Te veo mañana Rukia.
El sonido acabó y la llamada se cortó.
Eran las seis en punto y llego al hotel esperando encontrarse con Kaien que no tardo más de unos cuantos minutos en hacer acto de presencia. Se le veía cansado y con un semblante bastante malo. No dudo en acercarse a él y preguntar por su estado.
–¿Qué diablos te sucedió Kaien? Pareciera que un caballo te pasó por encima.
El muchacho apenas le alzó la mirada –Rukia, necesito que hablemos.
Le miró interrogante –No entiendo que pasa Kaien.
Observó como Kaien se adentraba en el hotel y se dirigía a la recepción, al parecer para pedir una habitación en específico. Tomó las llaves con la recepcionista y le pidió que le siguiera. Ambos llegaron a una de las últimas habitaciones de ese elegante hotel, nunca antes había estado ahí pero sabía por su padre que ese era uno de los hoteles más caros en la ciudad y con mayor reputación, una importante familia con prestigio le administraba. Entraron en la habitación y Kaien llegó hasta un pequeño sofá que estaba dispuesto en el medio de la habitación mientras lo vio sentarse y llevar sus manos a la cabeza.
–Rukia, tengo un gran problema –La voz del chico apenas salía como un susurro.
¿Un problema? –¿Qué sucede Kaien?
El chico levantó la cara y le miró fijamente –Se trata de Miyako… yo… la encontré engañándome con otro y yo…
–¡¿Qué dices?! ¡Debe de ser un malentendido, ella te ama profundamente! Ichigo, toda tu familia y yo lo hemos visto. Esa chica daría lo que fuera por ti.
Kaien se levantó de repente y le gritó fuertemente –¡Más bien daría lo que fuera por mi dinero Rukia!
–Pero…
–Basta Rukia, no quieras defenderla, ella es una víbora en búsqueda de mi dinero, no solo la vi engañándome con otro tipo, sino que me quede el tiempo suficiente para oírlos hablar del asunto. Fue una suerte que les escuchara, de otro modo me hubiera terminando casado con una vil arpía.
El pelinegro estaba bastante tenso y su rostro lo reflejaba –Entiendo por qué estás tan mal… cualquiera estaría así de enfadado y estresado si tuviera que pasar por una situación igual.
Kaien se volvió a sentar en el sillón y se quedó en silencio. Se sentó al lado de él y puso una de sus manos en su hombro en muestra de apoyo.
–Te equivocas Rukia, no estoy así de mal porque Miyako me haya engañado o porque me hubiera mentido en nuestra relación. Esa situación solo fue la gota que derramó el vaso.
El chico tomó su mano y la apretó con fuerza –Si de algo debo de agradecerle a Miyako es que su engaño me abrió los ojos. No sentí ni la más mínima pisca de dolor al descubrirlo y eso me permitió comparar mis sentimientos, aclararlos y darme cuenta de que en verdad no estaba enamorado de ella, sin embargo, siendo sincero en comparación, solo hay un momento en mis bastos recuerdos en los que siento la rabia recorrer mis venas y eso es cuando te veo al lado de mi hermano.
¿Qué acababa de decir Kaien?, esto… debía de ser una broma. Intento alejar su mano de la del chico, pero este solo aumento la fuerza de su agarre.
–¿Qué… que estás diciendo Kaien? No puedes hablar enserio…
Kaien no le soltó en ningún momento –No bromeo Rukia. Yo te amo.
Miles de pensamientos cruzaron por su mente. ¿Desde cuándo Kaien…? ¿Por qué le decía eso? ¿Ichigo estaría enterado? No… definitivamente no era fácil para ella creer eso, Kaien siempre había sido el prototipo de hermano al que admiraba fielmente y a diferencia de Ichigo, él nunca le dio un indicio de sentir algo por ella más allá de una amistad fraternal. Jamás…
Se levantó del sillón y deshizo el agarre del chico, alejándose varios pasos –Kaien…
–Rukia… Yo no pretendo que me correspondas, mejor que nadie soy testigo de la fuerte relación que tienes con mi hermano… pero… no puedo aceptarlo. Necesito que me ayudes.
¿Qué pretendía Kaien? Le miró a los ojos y no supo que hacer –¿Cómo conseguiría ayudarte? Kaien, jamás podría cambiar mis sentimientos por Ichigo. Yo lo amó solo a él.
–Aunque me encantaría y estaría muy feliz de que te enamores de mí, como ya te dije sé que es algo imposible. Pero, si tan solo me permitieras estar contigo una sola noche, yo podría…
No… definitivamente ese no era el mismo Kaien con el que Ichigo y ella se había criado desde niños.
–¡¿Te estas escuchando Kaien?! No puedo creer que me estés pidiendo eso.
El chico llevo sus manos a su cabeza y empezó a jalar de sus cabellos con fuerza. Después volteó bruscamente y la tomó entre sus brazos. Se quedó pasmada varios segundos hasta que sintió los labios de Kaien sobre los suyos, ahora se sentía completamente petrificada, aunque no le tomó mucho tiempo el salir del horrible trance en el que estaba. Empujó al pelinegro con fuerza y le dio una bofetada.
El muchacho llevo su mano justo en donde le había golpeado.
–Yo… lo siento Rukia, no se supone que esto deba de pasar. Tienes razón, no sé en qué estaba pensando al pedirte semejante cosa.
Kaien volvió a tomar asiento ante el silencio que se mantenía. –Debo verme completamente patético ¿no Rukia?
¿Qué le podía decir a un hombre completamente destrozado?, se volvió a sentar al lado de él manteniendo su distancia – Kaien… Ichigo y yo estamos esperando un bebé.
Sintió como él chico se tensó cuando pronunció esas palabras. –Aun no les queríamos dar la noticia, esperábamos que fuera una gran sorpresa para todos.
El tono del pelinegro se volvió apagado y triste –Y vaya sorpresa, ja… jajajajajaja – No supo cómo interpretar la risa del muchacho, de repente su tono era más alegre, pero aun así melancólico.
– ¡Voy a ser tío! Que buena noticia, y yo aquí comportándome como un bastardo que solo piensa en su propio cuello. Debo parecer un verdadero monstruo, de seguro mi madre me regañaría y ni hablar del viejo, me apalearía fuertemente si se enterara de esto. No sé qué estaba haciendo, perdona Rukia será mejor que te vayas.
El chico de verdad se veía mal. No podía solo salir de la habitación y abandonarlo, tal vez no lo amara, pero ella de verdad lo quería y apreciaba. –Kaien no pienso dejarte solo, no en estas condiciones, no estás bien. Tal vez no puedo darte lo que quieres, pero te ayudare a mi manera, no me moveré de aquí hasta asegurarme de que estés mejor y si eso significa que nos quedemos toda la noche aquí hablando, entonces así será. Escuchaste Kaien, así que deja de poner esa cara de perdedor y levanta el ánimo.
Kaien le miró y una pequeña sonrisa se asomó en sus labios –No cualquiera se queda al lado del lobo herido, sabiendo el peligro que corre. Eres única Rukia, de verdad el tonto de mi hermano tienen tanta suerte por conseguir una mujer como tú. Pero si de eso se tratan tus palabras, entonces que te parece si mejor me acompañas toda esta noche mientras me ahogo en alcohol y me desahogo en mis penas, eso también me haría sentir muy bien. ¿Qué dices?
Suspiró largamente. Tal vez no era tan mala idea. –Está bien, pero solo te acompañare hasta que estés mejor.
–Entonces ya está dicho.
Kaien tomó de la cava de la habitación varias botellas de alcohol, ella podía distinguir en el pequeño mueble fácilmente más de 30 botellas, al parecer había desde vino hasta vodka, la mayoría de las marcas se veían bastante caras, vio como el chico se sentó de nuevo en el sofá y empezó a tomar de varias de ellas sin control alguno, mientras de trago en trago le relataba con detalle como su relación con Miyako jamás había llegado a tener una pequeña pisca de amor. Le decía con anhelo, como los días más preciados para él eran cuando salían juntos. Así toda la noche hablaron la vida de Kaien y como él mismo sentía que estaba cada vez más vacía, una vil fachada para una vida reprimida. Siempre intentando ser el mejor en lo que sus padres y la sociedad querían, como había dejado de lado lo que realmente quería hacer eso incluía el amor que le profesaba a ella, dejándole el camino libre a Ichigo, su peor error. Se limitó a escuchar e intento consolar al chico, no podía cambiar el hecho de que ella solo amaba a Ichigo y que ahora ambos estaban esperando un hijo. No podría sanar el corazón de Kaien, pero podía acompañarlo en la tarea. Sin embargo así misma se reprendía, no sabía si era correcto dejar que Kaien tomara semejantes cantidades de alcohol para sentirse "liberado", de verdad se veía muy mal. Ya llevaba más de 8 botellas y ya eran las 2:00 am.
–Kaien, creo que has bebido suficiente.
El chico le miro desorientado –Rukiiaia, aaa… ¿porrrr qu-eee no meeee pp pue-deees amaaar?. ¿Porrr quuu-e soy taaan cobaaar-deeee?
De verdad el pelinegro estaba en su límite –Basta Kaien, deberías descansar, veraz que mañana en la mañana te sentirás mejor. Necesitas dormir.
Kaien se levantó del sillón y la intento abrazar, pero en su estado etílico lo único que logró fue desestabilizarse y caer con un fuerte estruendo al piso, ante su mirada impotente.
–¡Kaien! –Se acercó rápidamente al chico y lo levanto con mucho esfuerzo, recostándolo de nuevo en el sofá.
Miró como el chico se llevó una mano a la frente, tapando su mirada y empezó a llorar. A pesar de estar bastante borracho parecía hacer su mejor esfuerzo por hablarle correctamente –Rukiaaaa, yo, yo… tennnngo uuuuna viiii-da taaaan miseraableee, to-todo es tan fa-falso y nunca he hechooo lo que he quueriido y…. cuando por fin… me de-decidoooo a luchar pooor el amor que siento –Kaien dejo de cubrirse la mirada y la vio directamente. Lo vio tomar un gran aliento y lo escuchó gritar fuertemente –¡ME ENTERO QUE LA MUJER QUE HE AMADO TODA MI VIDA ESTA ESPERANDO UN HIJO DE MI HERMANO!
El pelinegro volvió a cubrirse la mirada y ella apenas podía hablar–Kaien… yo… lo siento.
–Nooo eesss tu cul-culpa, el inútiil aquí soy yo, soy… patético. No debeeería vivirrr.
Frunció el ceño al escucharlo –Deja de decir estupideces, te repondrás y desde hoy te propondrás a hacer todo lo que quieras, no harás lo que tus padres o la sociedad esperen de ti, harás solo lo que tú quieras hacer, eso incluirá el amor.
El chico no le respondió y cerró los ojos largo rato. Preocupada se le acercó para asegurarse de que solo estaba dormido, pero rápidamente sintió como este la jaló fuertemente y la sometió contra el sillón, poniéndose arriba de ella.
Kaien jadeaba y su voz se hizo más clara –Sabesss… Rukia… ¿por qué te pedí vernos hoy? Si ayer te hubiera tenido en las mismas condiciones, en mi desesperación no habría dudado en acerté mía no importando lo que me dijeras. –La mirada del pelinegro era profunda y tenía implícito un brillo de deseo. Sus manos alrededor de su cintura aumentaron su agarre y se acercó a su rostro. Sentía su aliento en su piel, intento moverlo y quitarlo de encima pero él solo la apretaba con mayor fuerza contra su cuerpo. Se empezó a preocupar, sin embargo todo acabó cuando el chico se levantó y entre tambaleos tomó más botellas de alcohol y se fue a recostar a la gran cama de la habitación. –Pero… por suerte eso fue ayer, tienes mi palabra Rukia. No te hare daño, lo prometo. –El chico bebió más alcohol de la gran botella de vodka que sostenía, mientras miraba al techo. –Sé que no me podrás dar lo que busco Rukia… pero… ¿te molestaría mucho si duermes hoy conmigo?
–Kaien yo no…
El chico la interrumpió –No me refiero a que te acuestes conmigo, solo quiero que duermas junto a mí, por favor… eso me haría sentir mucho mejor.
¿Sería correcto hacerlo? No lo pensó mucho, él era su amigo desde la infancia simplemente no podía desconfiar de él. Kaien con muchos esfuerzos se deshizo de su camisa y quedo con el torso desnudo. Se recostó a su lado y escucho su pesada respiración por largo rato hasta que esta se calmó y pudo intuir que al fin se había dormido.
Fin del flashback
–Después de que Kaien se durmió, creí que ese mal episodio de nuestras vidas había acabado y que solo quedaría como una anécdota que recordaríamos con el tiempo. Pero la realidad es que estaba muy equivocada.
Grimmjow le escuchaba atentamente. –Sabes Rukia, el tipo ese era un completo cobarde en todo el estilo de la palabra, intentar tomarte y después usar el alcohol para pretender olvidar… él huía de sí mismo y terminó cayendo por su propio peso. Compadezco al infeliz.
Apretó sus puños fuertemente, tal vez Kaien si había actuado como una cobarde, pero ella no lo había detenido. – Eso no es todo. Él solo durmió como dos horas, volvió a despertar y siguió tomando sin control. Yo realmente no sabía qué hacer, si llamar a Ichigo o a alguien más. Después de un rato nos dieron las 7:00 de la mañana y Kaien estaba mucho peor, incluso me contaba que deseaba suicidarse para huir de todo. No lo soporte más y lo deje en la habitación, le dije que regresaría rápidamente, me fui a pesar de que él me pidió que no lo hiciera, me suplicó que no lo dejara solo, que tenía miedo de sí mismo. No le di la importancia adecuada a sus palabras, realmente no iba a tardar. Solo iba a la farmacia por un suero para la deshidratación que Kaien había empezado a padecer, se veía muy pálido.
El peliceleste le miraba intrigado –¿Entonces?... ¿Qué sucedió pulga?
–A la mitad del camino me di cuenta que había dejado mi bolso en la habitación del hotel y que no llevaba dinero para comprar el suero, así que me decidí a regresar, pero… cuando abrí la puerta…
Contar aquello aun le causaba estragos en su alma. Dolía como una espada clavándose en su pecho. –Encontré a Kaien tirado en la cama con un gran puñal clavado en su espalda. Corrí hacia él mientras gritaba su nombre, tenía que hacer mi mayor esfuerzo por salvarlo. Puse mis manos en ese cuchillo y lo saqué con todas mis fuerzas de su espalda, lo lance lejos y con mis manos intente detener la hemorragia, pero no funciono. Salí de la habitación para pedir ayuda al personal del hotel, pero no encontré a nadie cerca, también salí a la calle por ayuda, pero el resultado fue el mismo, ni siquiera me aleje más de dos cuadras o me tarde más de 3 minutos, cuando regresé corriendo al hotel en búsqueda de mi celular para llamar a emergencias ya estaban ahí varias patrullas y una ambulancia. Tal vez debí llamarles por teléfono primero a ellos antes que nada, pero yo estaba demasiado conmocionada. Al verme llena de sangre y con un semblante "sospechoso" me aprendieron en ese instante.
Miró como Grimmjow se llevó una mano a la cabeza –Pero no entiendo… ¿no les explicaste tu versión?
Volvió apretar con fuerza sus puños –¡Lo hice! Pero no me escucharon, más aun cuando en el juicio aparecieron pruebas que me inculpaban.
–¿Cómo es posible eso?
Negó con la cabeza –No lo sé.
–Aun así no entiendo por qué dices que lo asesinaste. Claramente solo intentaste salvarle la vida y lo acompañaste en su dolor.
Observó al chico a los ojos y por primera vez desde que conocía a Grimmjow vio en su mirada un verdadero semblante de preocupación. Suspiró y sintió como el peso del pasado volvía a subir a sus hombros. –Yo lo asesine Grimmjow, él era mi amigo y familia, y yo lo abandone. Si yo no lo hubiera dejado solo cuando él me lo pidió… probablemente él hubiera…
Grimmjow la tomó por sorpresa y le dio un gran abrazo. Lo escucho gruñir fuertemente –¡Él hubiera es para imbéciles Rukia y tú no eres uno de ellos! El puto pasado es pasado y solo lo podemos dejar atrás. Tú no eres una asesina y la personalidad que me has mostrado en este tiempo lo dice, eres una chica fuerte que no se molesta en darle su merecido a quien se lo merece. Eres una fiera guerrera y con un carajo, eres una persona de buen corazón, con el simple hecho de cuidar a Saito lo demuestras, así que no quiero volver a ver en ti esa cara melancólica y ese semblante patético de culpa.
Pov Grimmjow.
De verdad no podía creer todo lo que Rukia le acababa de contar, todo parecía tan irreal y grotesco. La chica enfrente de él, no era una asesina. A pesar de sus acciones, ella no era una asesina, todo había sido una mala jugada del destino, en la cual ella no tenía la mínima culpa, fue una víctima también.
–Tú no eres una asesina pulga y espero que te quede bien claro, porque desde hoy, yo te protegeré porque para ser sinceros eres tan débil que ni siquiera matarías a una mosca.
Estaba claramente mintiendo, la chica obviamente tenía suficiente fuerza para cuidarse por sí misma, pero eso no evitaba que él quisiera cuidar de ella.
La pelinegra cambio su semblante a uno más relajado, lo miró fijamente y le sonrió. Y ahí estaba de nuevo esa sensación tan cálida por su cuerpo.
–Gracias Grimmjow. Pero soy lo suficientemente fuerte para cuidarme, no necesito a un perro rabioso para ayudarme
–¡¿Cómo me acabas de llamar?! ¡Eres tú la pulga debilucha! ¡Joder! Deja que te proteja con un carajo, es mi acción buena del año.
Vio como la chica parecía empezar a enfadarse y le gritaba –¡Por que no vas a hacer alguna beneficencia en su lugar!
Ambos se miraban fijamente y se retaban con la mirada cuando una pequeña voz los distrajo.
–¡Mamá, papá ha vuelto!
Saito corrió hacia él y lo abrazo por la cintura, ante su mirada y la de Rukia. Ese cachorro humano era todo un caso. –¡He campeón! No debiste venir hasta acá arriba. Debes regresar a dormir.
El niño apenas lo soltó para responderle – Pero papá, escuche tu voz hace rato y salí a buscarlos, siempre vienen aquí para hablar y yo quería verte, siempre llegas tarde y quiero que me cuentes como esta Nibelungo. –El niño le hablaba con anhelo.
¿Qué podía hacer? Ese cachorro humano sacaba una parte extraña de él –Está bien Saito, te contare como está Nibelungo. Pero ya deberías irnos a dormir. ¿No Rukia?
La chica los miraba con una pequeña sonrisa en el rostro. –Es cierto Saito, es hora de dormir. Grimmjow te contara, pero deberás ir a dormir después de eso. ¿Ok?
–¡Sip, lo prometo! –Saito lo soltó y empezó a dirigirse hacia el apartamento de Rukia, mientras esta le seguía. Él los siguió hasta que la voz de Rukia le llamo.
–Sobre lo que falta Grimmjow…
–No tienes que contarme más Rukia. Yo sé que no eres una asesina y los que me tengas que contar después de eso, para mí no tiene el más jodido valor. Yo sé quién eres y eso es suficiente.
No espero a que la chica le contestara, simplemente caminó en dirección del departamento.
2 meses después.
Pov Rukia.
Todo estaba saliendo mucho mejor de lo que había imaginado, si bien la empresa donde trabajaba no era muy grande y las cuentas eran relativamente fáciles de llevar, de verdad agradecía que le hubieran dado vacaciones a pesar de no llevar más de un año ahí. Ese tiempo libre era bastante importante, podía estar más tiempo con Saito y ayudaría a Grimmjow con un Nibelungo ya no tan cachorro. Apenas podía creer que ya había pasado tanto tiempo desde que le contó a Grimmjow de su pasado con Ichigo y su familia, al hacerlo no pudo sentirse más liberada y más tranquila. Aunque en su corazón aún estaba latente el dolor de ser odiada por Ichigo y por Kei, sabía que no podía seguir atormentándose, si la felicidad de Ichigo y de su hijo dependía de que ella no estuviera, entonces así sería. Aunque no habría nada que evitara que ella los extrañara.
También después de su cita con el médico, se sentía mucho más tranquila, según el especialista ella se estaba recuperando de excelente manera de su cuadro de desnutrición, los desmayos ahora eran apenas ocasionales. Sin embargo no pudo evitar librarse de los exámenes que le querían aplicar, para cubrir todo los escenarios posibles y estar seguros que estaba completamente sana. Llegó a su departamento y abrió la puerta con cuidado. Sus llaves cayeron al suelo y al recogerlas una mano se le adelantó. Levantó la vista para agradecer al desconocido su amabilidad, pero se encontró con…
–Tanto tiempo sin vernos Rukia.
su peor pesadilla…
–Ichigo
o su sueño más anhelado…
Guest: Una actualización lista. Aunque un poco tardada xD espero disfrutaras el cap.
Yocel: Mi conciencia me está torturando por dejarlos esperar tanto para el capítulo y luego los dejo con más suspenso.
L3onn: Me encanta dejarlos con ganas de más capítulos xD significa que no lo hago tan mal. Ahora ya sabemos casi todo el pasado de Rukia, pero aún falta un poco más, aun así con lo que tenemos ya podemos hacernos una gran idea de la situación. ¿Me pregunto qué sucederá con Urahara? Y como me encanta (tu lo sabes) los dejo al final del capítulo con más suspenso.
shinny26: Creo que los hechos hablan por todos. Rukia ha contado parte de su versión y ya ha quedado claro en parte que es lo que paso ese día del asesinato de Kaien, por otro lado ¡ya tenemos reencuentro! xD
Strellita: Que bueno que te gustara el capítulo anterior :33 Solo puedo decir que… tienes predicciones muy buenas, ya sabemos del pasado de Rukia en cuanto a la muerte de Kaien, pero aún no se aclara del todo, hay partes del rompecabezas que aún faltan por unirse. La situación medica de Rukia y el estatus de Urahara… mmm… eso dejémoslo para la intriga xD y… ¡ya tenemos reentro! Aunque al final :PP Muchos saludos y nos leemos pronto.
Guest: A ti te llamara Guest II, perdona la tardanza pero por fin les traje la actualización xD Saludos, espero disfrutaras del cap.
Guest: Tú serás Guest III Espero que el tamaño del capítulo compensara la espera xD Saludos y nos leemos pronto.
Yuki05: ¿Superé mi cronometro de rapidez? Tenemos un barquito pequeñito y oxidado, pero aun flota :'v No te preocupes que a veces no salen las palabras de nuestra mente para opinar, te lo digo vamos un poco lento pero seguro, como las abuelitas dicen. Yo se que les debo mucho u-u por eso me esforzare más para ya no tardarme, cada vez estamos más cerca de la continuación deseada que todos queremos xD Saludos, muchas emociones positivas y nos leemos pronto.
KassfromVenus: Juró que ya no tardare, te lo prometo :'v
Hola de nuevo a los viejos lectores y quizá a los nuevos, aquí me tienen luchando contra el sueño por traerles un capitulo. Muchas gracias por su apoyo, por sus review, fav y follow, todas sus opiniones son importantes y la leo con ánimo, son mi motor para continuar escribiendo, así que no olviden dejarme un bonito review con su opinión sobre el capítulo, si les gusto o no les gusto. Sin más por ahora, muchos saludos y nos leemos pronto. Vinsmoke fuera.
