Disclaimer: Bleach y sus personajes no me pertenecen son propiedad de Tite Kubo, pero la historia es completamente mía.

Mi compromiso es igual de grande que mi amor al fandom xD, que hablando de fandom, tengo algunas historias olvidadas de otro fandom peculiar, así que supongo que también tendré que darles caña un día de estos :BB

"El verdadero hombre sonríe ante los problemas, cobra fuerza ante la angustia y crece valiente mediante la reflexión."

–Thomas Paine

CAPITULO XVIII – "Lo correcto"

1 mes después…

Pov Byakuya

Su despacho siempre había sido aquel lugar predilecto para pensar, un refugio al cual acudir cuando sus pensamientos se encontraban en conflicto, justo como se encontraba ahora. Las estaciones pasaban tan rápido y cuando menos se dio cuenta fue consiente que todos sus esfuerzos durante años eran solo una pérdida de tiempo, que si llego a creer que podía manejar las cosas solitariamente, había sido una completa equivocación. Día a día fue observando como su pequeña hija se convertía en una gran mujer, se desarrollaba como una Kuchiki en fuerza, carácter, elegancia por no decir que en astucia e inteligencia, mientras que él y Hisana se volvieron simples espectadores, pero después… paso todo el incidente del asesinato de Kurosaki, cuando su hija se vio envuelta, fichada por las pruebas como una asesina, como una basura. ¿Dónde estaba esa niña que por las mañanas le sonreía feliz y le llevaba el desayuno con alegría? Ahora todo aquello era un difuso recuerdo. Miró con nostalgia el pequeño peluche desgastado que sostenía entre sus manos, era curioso que ese viejo conejo fuera el juguete favorito de Rukia. Suspiró derrotado antes de que escuchar como tocaban su puerta.

Guardo rápidamente el peluche en uno de los cajones de su escritorio y no dudo en hablar para hacer pasar a su invitado, hace mucho que estaba esperando aquel momento. –Adelante.

La puerta se abrió rápidamente mientras su huésped lo saludaba cortésmente con una reverencia y se sentaba enfrente de él. –Espero no sea un mal momento.

Se mantuvo imperturbable ante sus palabras, mientras analizaba a aquel hombre Sabes por qué estás aquí, ¿cierto?

El hombre frente de él se rió levemente y oculto su mirada en el curioso sombrero que traía consigo –Claro que lo sé. Me has contratado para lo mismo que toda la gente me busca, ¿verdad?

Empezaba a sentirse irritado por la actitud arrogante de aquel sujeto. –Estoy cansado que los errores carguen conmigo y con mi familia, no quiero que mi esposa sienta su peso ahora que su salud ha estado tan débil, más que nunca necesito hacer esto. Años de trabajo en los que he pensado tantas cosas y solo ahora por azares del destino termine contigo.

El hombre frente a él lo miro a los ojos y le sonrió. –Entiendo a qué quiere llegar y créame que me caracterizo por mi eficacia, sin embargo entenderá que mis métodos a veces no son muy ortodoxos.

La sonrisa de aquel tipo de verdad le mantenía alerta. Cerró los ojos y los abrió lentamente. –Lo entiendo, tienes libertad mientras te encargues de ser discreto.

–La discreción es una de las cualidades más importantes en este trabajo, cuente con mi ayuda señor Kuchiki.

El peso de lo que estaba concibiendo empezó a caer lentamente en él ¿Qué estaba haciendo? –Entonces borra de un tajo la vergüenza y la deshonra de mi apellido, yo solo no lo he logrado y me doy cuenta que jamás seré capaz de hacerlo por mi cuenta.

–Es entendible después de todo es padre, no se preocupe… yo me haré cargo de su hija.

Si, él era padre… pero hace mucho que había dejado de sentirse como uno.


Pov Ichigo

Sentado en un sillón de su gran sala, su mirada viajaba del reloj de la sala principal al de su muñeca, bastaba con saber que las manecillas de los mismos se movían para que él creyera que el tiempo avanzaba. Gruño cansado mientras buscaba en el bolsillo de su pantalón un tabaco y su encendedor. Puso dicho objeto en su boca, lo prendió con cuidado dándole una larga calada y expirando largamente. Rukia no debía tardar mucho en estar lista junto con su pequeño.

Portaba un traje de color negro con toques azules marinos, con un chaleco del mismo color acompañando con una corbata azul un poco más clara, se podría decir que era uno de sus atuendos "elegantes". No se consideraba un hombre vanidoso y cualquiera pensaría que le daba igual escoger un traje entre los muchos que tenía, algo que normalmente seria cierto, pero la verdad… se había pasado todo la mañana escogiendo entre todos ellos por una simple razón, después de insistirle todo un mes a Rukia apenas había logrado que la misma bajara un poco las grandes defensas que había levantado contra él y por fin que la misma aceptara una invitación suya para la cena. Pero todo no había sido tan fácil, las cosas se habían complicado aún más desde aquella vez que Rukia le pidió el divorcio.

Flashback

Su corazón latía con fuerza –¿A qué te refieres? No puedes hablar en serio Rukia.

Vio a la chica negar lentamente –No lo hagas más difícil de lo que ya es. Yo solo…Quiero el divorcio Ichigo.

Con un nudo en la garganta se quedó petrificado varios segundos antes de entender por completo lo que implicaba la petición de su esposa. –¡NO! Escucha lo que me estas pidiendo Rukia, no puedes decir eso a la ligera, no prometimos que estaríamos juntos por siempre, que nos apoyaríamos uno al otro, que nos protegeríamos y pelearíamos cuando el otro no pudiera hacerlo.

La chica le miro duramente antes de contestarle. –¡No seas creído Ichigo!, entonces… ¿Qué estuviste haciendo estos últimos años? ¿Crees que para mí es fácil tener que pasar por esto? Hablamos de siente años llenos de humillaciones, de desprecio, de engaños y de burlas. ¿Tú serias capaz de olvidarlo como si nada? ¡Las heridas son demasiado profundas, por favor entiéndelo!

Apretó con fuerza sus puños y tenso la mandíbula. Claro que la entendía, pero… el simplemente no quería perderla, no lo soportaría, la amaba demasiado y debía encontrar una manera de convencerla – Por favor Rukia, piensa también en Kei, esto podría afectarle demasiado. Acabas de regresar y sé que estas consienten de lo mucho que te extrañaba nuestro hijo, si ahora le decimos que nosotros nos vamos a separar, sería bastante injusto y duro para él.

Vio a Rukia dudar y tomó su oportunidad. –Dejemos que esta inestabilidad desaparezca y pensémoslo adecuadamente más adelante. Kei necesita a sus dos padres juntos por ahora, dame una oportunidad para demostrar que soy un padre digno de mi hijo y un esposo digno de ti, tú sabes que yo te amo y jamás dejare de hacerlo.

Su esposa clavo su mirada violeta a su persona, extrañamente parecía que perdía brillo. – Tal vez en algo tengas razón… debemos dejar que esto se tranquilice un poco por el bien de Kei –La chica hizo un pausa antes de continuar – Pero escucha bien, no te daré otra oportunidad Ichigo, no hasta que me des el divorcio.

Fin del Flashback

Por más que quiso acercarse a Rukia en ese mes entero, ella siempre lo evitaba o rechazaba tajantemente, sus avances había sido pocos, sin embargo ese día tenia suerte, pues lograrla convencerla de ir a casa de sus padres a la cena que su madre había planeado, ya era una buena señal o al menos eso cría. Esperaba que aquella festín junto con toda su familia pudiera servir para ablandar el corazón de la ojivioleta.

También se sentía fatigado por el hecho de seguir constantemente con las investigación de Urahara, no importaba que Rukia ya estuviera con él, no descansaría hasta reunir las pruebas suficientes y llevar de nuevo el caso de su mujer a la corte, se encargaría de demostrar por completo la inocencia de su esposa a su vez que desenmascaría la verdad, se encargaría de todos aquellos que se habían aprovechado de la desgracia de su seres amados. Localizaría al asesino de su hermano.

Escuchó como bajaban las escaleras, se quedó boquiabierto y tiró su cigarrillo al ver a Rukia sosteniendo a Kei por una de sus pequeñas manos, ella lucía un sencillo vestido corto color azul turquesa, la chica mostraba un maquillaje ligero y sin embargo brillaba como la mismísima luna, una parte de él no pudo evitar excitarse inevitablemente, hace mucho que no tenía un contacto con ella y ya lo ansiaba con demasiada fuerza, su cuerpo y su alma se lo pedían con urgencia.


Pov Rukia

Terminó de arreglarse con un atuendo sencillo pero elegante y sostuvo a Kei mientras le arreglaba con cuidado el cabello, su pequeño hijo se había negado a alejarse por de ella, siempre le daba prioridad y no pudo negarse a estar compartiendo momentos a su lado, ella también lo disfrutaba mucho, aunque por otro lado, cada instante que pasaba con Kei le hacía recordar a Saito y esto a su vez a Grimmjow, todo aquello le dolía en el pecho. Le pidió a Kei que fuera a buscar algo con que abrigarse y cuando el pequeño salió del lugar, ella se dirigió a la cómoda donde guardaba sus cosas en la habitación, saco de una pequeña caja el folder que contenía toda la investigación de Starck sobre su persona, dentro de la misma removió la fotografía donde Saito, Grimmjow y ella estaban en el parque, esa imagen le daba tranquilidad. Desde que había vuelto con Kei su corazón se alegró al estar al lado de su hijo, pero no se sentía completo y pleno, la respuesta para ello, la confundía y esa fotografía solo hacía que el dolor se atenuara, en verdad los extrañaba.

Continúo mirando la foto hasta que una punzada en el abdomen le hizo soltarla de repente, la acidez se incrementó y jadeó involuntariamente mientras llevaba su mano a la boca del estómago intentando disminuir el dolor. Desde que había llegado a Japón no se había atrevido a salir de la casa Kurosaki, evitaba lo más posible a Ichigo y se la pasaba jugando con su hijo, por lo que ignoró por completo los pequeños malestares y mareos que la invadían, pero la última semana estos se habían incrementado tanto en frecuencia como en dolor, justo como cuando había hablado con Ichigo acerca del divorcio, esa noche casi se había desvanecido. Poco a poco el dolor fue cediendo y lentamente se reincorporo. Tenía que ir al médico pronto, aquello para nada era normal. Levanto la fotografía pesadamente y la volvió a dejar dentro del folder mientras lo guardaba en la caja.

En cuanto Kei regreso bajaron para encontrarse con Ichigo, el cual vestía un traje que no podía negar lo hacía verse muy bien, recordó así su primer baile de graduación del instituto, justo antes de entrar a la universidad Ichigo le había hecho saber lo mucho que odiaba usar trajes y ahora años después eran su vestimenta predilecta, las cosas cambiaban demasiado.

Kei se lanzó de inmediato a los brazos de su padre. Mientras que Ichigo lo recibió gustoso, también la tomó por la mano, por unos cuantos segundos se quedó congelada antes de que la mirada anhelante del pelinaranja la convenciera y decidiera ceder un poco correspondiendo su agarre. No negaría que Ichigo se había esforzado bastante durante ese mes por llamar su atención, siempre llegaba temprano del trabajo para jugar con Saito y pasar el mayor tiempo posible con él, los fines de semana estaba en casa, había vuelto a cocinar y muchas veces era él quien preparaba el desayuno o la cena, regresaba a casa con diversos regalos siendo tan pequeños como una flor o tan caros como un collar de zafiros. Ichigo buscaba en todo momento hacerle una conversación amena y a pesar de estar consiente que ella lo evitaba lo mayor posible, esto no hacía más que el muchacho se esforzara más en llamar su atención. Películas por la noche junto con su hijo, canciones que solo él sabía que a ella le gustaban, cocinarle su platillo favorito y regalarle flores a montones. Esos detalles…

El muchacho sostuvo su mano y la apretó ligeramente –Rukia… te vez bien enana.

Pov Ichigo

¿Enana? Desde hace años que no llamaba por su viejo apodo a la Kuchiki, algo que hacía con mucho cariño. La imagen que su esposa deslumbraba lo tenía completamente hechizado, ¿Cómo había podido dudar de esa gran mujer que tenía enfrente? ¿Cómo había buscado el placer y el cariño banal en otras mujeres?

La chica mantuvo su mano entre su agarre y junto con Kei se dirigieron al auto. El recorrido a la casa de sus padres fue en completa tranquilidad y al llegar al lugar Kei no pudo evitar correr con sus abuelos, intento entre dudas volver a tomar la mano de Rukia y a pesar de sus temores se sintió tranquilo cuando la chica lo tomo correspondiéndole en el gesto. Ni siquiera cuando había empezado a salir con la pelinegra había sentido tanto miedo de sus acciones. Entraron a la casa y se reunieron con su familia, entre la bienvenida que le dieron sus hermanas y su madre no pudo evitar que una sonrisa se le escapara antes de que se distrajera deteniendo con una patada a su padre, el cual se había lanzado intentando abrazar tanto a Rukia como a Kei.

Su padre cayó al piso estrepitosamente. Mientras él mantenía un pie sobre su espalda para evitar que se levantara. –¡Hijo estúpido como te atreves a lastimar al hombre que te dio la vida!

Apretó con mayor fuerza su pisada sobre su padre. –¡Te respetare cuando te atrevas a comportarte como uno! ¡Que son esas tonterías de arrojarte contra Rukia y Kei!

Escuchó al hombre quejarse antes de que este se levantara rápidamente y lo tacleara contra el piso. –Vamos hijo si tú también querías cariño solo debiste pedirlo y con gusto papi te daba un abrazo.

Intento alejarse de las manos del hombre, cada vez se ponía peor. –¡Aléjate viejo enfermo, no me toques!

Todo sucedió entre risas de su madre, de sus hermanas, su hijo y de Rukia, hace tanto que no la escuchaba reír que por un momento no le importaba mantenerse en esa posición con tal de seguir escuchándola, sin embargo así de rápido como inicio todo, también terminó cuando sorpresivamente Karin lanzo una patada tirando al loco de su padre lejos de su alcance. Por primera vez en su vida no agradecía que Karin hubiera controlado al viejo.

La cena fue bastante tranquila mientras platicaban acerca de cómo el negocio avanzaba, sus hermanas sacaban a relucir sus intereses, Karin hablaba acerca de los resultados de su último partido mientras que Yuzu por su parte hablaba del chico con el que estaba saliendo actualmente en la universidad, entre la plática llego el momento por el cual temía y su madre pregunto a Rukia el motivo de su ausencia y aunque pasaron muchos escenarios por su mente, nunca se imaginó que la pelinegra le siguiera el juego acerca de las "vacaciones" que se supone había tomado. Aquello le sorprendió y se mantuvo atento escuchando como la chica hablaba de un asueto ficticio. Su padre entre tanto ajetreo lo tomó por el hombro y le pidió que le siguiera mientras chicas hablaban.

Lo llevó al jardín, mientras el viejo se sonto en el pasto húmedo sacando un cigarrillo y fumándolo no sin antes ofrecerle uno.

Recibió el tabaco entre sus manos y lo prendió con su propio encendedor. Últimamente fumar se la había hecho un hábito –Hijo… yo sé muy bien que la pequeña Rukia no se fue de vacaciones, quiero la verdad acerca de lo que está pasando, no quiero ver a mi nieto triste ni a mi tercera hija tampoco.

Se tensó al escuchar a su progenitor, su voz era firme, rara vez se ponía serio, pero cuando lo hacía, no podía evitar sentir un poco de temor por el hombre que le había criado, normalmente tan bufón, verlo en esa faceta de hombre prudente le ponía nervioso –Ella está bien, solo hemos tenido unos cuantos problemas de pareja, lo normal.

Su padre arrugo su ceño y lo miró fijamente. –No soy estúpido Ichigo y no nací ayer, crees que no sé por qué no traías a Rukia a casa. Estoy consciente de muchas de tus acciones y como tu padre no sabes cuan arrepentido me siento por no haberte reprendido antes. –El viejo sorbió una calada de su cigarrillo antes de continuar –Tu comportamiento no es aceptable y no lo puedo seguir tolerando. A mí también me dolió la muerte de Kaien, pero no solo eso, a tu madre y a tus hermanas les afecto de igual manera. Las dichas pruebas que culpaban a Rukia eran demasiadas, pero aún más grande era toda la vida que vivimos junto con ella, nos repetíamos que sus palabras eran sinceras y claras, ella no mentía, jamás en todo el tiempo de conocerla mostró siquiera una actitud agresiva. Ella definitivamente no había acecinado a tu hermano y eso nos bastaba, su palabra era suficiente. Pero tu hijo… lo pude ver en tus ojos en aquella ocasión, el odio abundaba en lo profundo de tu alma.

Cerró los ojos mientras apretaba sus puños. No podía negar aquellas palabras, pero se encargaría de arreglar todo lo que había hecho, sin embargo no quería meter a sus padres en su problema – No sé de qué hablas viejo, ella y yo solo habíamos tenido unos cuantos conflictos de pareja, no quieras hacer un drama por ello.

Isshin tiró su cigarrillo y lo aplastó con fuerza con su zapato. No lo miraba, pero se levantó abruptamente y continuo dándole la espalda, mientras le hablaba con fuerza. –Te parece un drama llevar a una mujer que no es tu esposa a tu casa mientras que la misma está ausente, o más aún que dicha mujer cuide a tu hijo, o que salga contigo a comer, beber o comprar, si, tal vez todo sea un drama de mi parte, incluso el hecho de que seas capaz de llevar a dicha mujer a tu cama, porque créeme que estoy casi seguro que eso hiciste con ella y con muchas más, esos rumores de que Rukia era tratada como florero o como un tapete en las fiestas a las que asistías eran más que ciertos, mientras que tu picabas de flor en flor, todo ello junto con el dolor que mi nieto debió sentir cuando los rumores acerca de que su padre había acecinado a su esposa llegaron a sus oídos, ¿te imaginas eso como un drama? No para nada.

Tragó grueso y miró la espalda de su padre. –Papá yo…

Vio cómo Isshin levantaba una mano para callarlo aun sin voltear a verlo –Basta Ichigo, tus acciones ya han lastimado bastante, debes escucharme como tu padre más que nunca. Me culpo a mí mismo y tu madre también se culpa a ella, a pesar de saber lo que hacías, ninguno de los dos se atrevió a hacer algo por Rukia, por Kei o por ti. No creíamos apropiado meternos entre ustedes y sus "inconvenientes", pensamos que recapacitarías tarde o temprano de los errores que estabas haciendo, por lo que decidimos esperar y ver que sucedía mientras lo "ignorábamos", pero estábamos completamente equivocados. Muy en el fondo no podíamos negar que si nos sentíamos resentidos con Rukia, porque permitimos hacernos de la vista gorda, pero ahora, después de su ausencia es inevitable no ver lo injustos que todos fuimos con ella dejándola sola completamente, orillándola a huir… una mujer que huye mientras que el verdadero asesino de tu hermano vive tranquilo. Nosotros atormentamos a una inocente a la cual vi crecer desde pequeña, y sabes que… ya podría considerarme un monstruo.

Claro que su padre no era un monstruo, el único monstruo ahí era él. –No he hecho las cosas como se debían, lo entiendo, pero no puedo perderla viejo… yo la amo y no puedo dejarla ir. Ella… ella quiere el divorcio y yo no sé si pueda…

Por fin su padre volteo y lo miró. –En cierta manera puedo comprenderte Ichigo, pero por otro lado también comprendo a Rukia. –Lo vio sacar un nuevo cigarrillo y llevárselo a la boca, para después prenderlo y darle una larga calada –No sé qué vayas a hacer hijo, pero creo que lo mejor es que la dejes ir.

Quedo impresionado ante las palabras de su padre, apenas notó cuando este puso una de su manos en su hombro –Yo en verdad quiero hacer las cosas bien papá, pero no sé si…

Isshin le sonrió tristemente. –Si en verdad quieres hacer las cosas bien, permítele respirar. Sé que quieres que ella siga contigo, deja que tome sus decisiones con libertad, darle el divorcio será la mejor manera de demostrarle que no la presionas y que apreciaras la decisión que decida. Ya la conquistaste una vez Ichigo, no dudes que si tu amor es real sin duda volverás a hacerlo. Cicatriza con confianza y cariño las heridas que has causado.

Las palabras del viejo eran bastante claras y él sabía que tenía la razón. –Supongo que tendré que hacerlo…

Su padre asintió con la cabeza. –Bien dicho hijo mío y por cierto antes que lo olvide. –Apenas fue consiente de la rápido que Isshin lo había tomado por la solapa del cuello antes de asestarle un buen golpe en el rostro tirándolo abruptamente. Con solo un golpe lo había hecho caer estrepitosamente al suelo. –No creas que me olvidado de lo que has hecho, un buen padre debe reprender a su hijos por sus errores, pero dado que ya eres bastante mayor, supongo que esto es lo que puedo hacer, aunque créeme muchacho que no permitiré de nuevo una conducta como la que has tenido. Espero que haya quedado claro.

Se llevó una mano al rostro justo en donde había recibido el golpe, iba reclamar hasta que siento como el viejo lo levantaba sin mayor esfuerzo. –¿Qué haces?

–Vamos Ichigo deja de llorar, lo mejor es que regresemos con tu madre y los demás.


Pov Rukia

Toda la cena había estado bastante alegre, le recordaban en gran manera las cenas que solían tener frecuentemente tanto la familia de Ichigo como con la de ella. Kei jugaba con Karin y su balón, para después dejarse mimar por la madre de Ichigo y por Yuzu, mientras que Ichigo y su padre se la pasaban peleando, entre todo el ajetreo la familia se tomaba el tiempo para incluirla y platicar con ella. Fueron años largos y anhelantes en los que deseo tener una convivencia así de nuevo, pero por tanto tiempo aquello se habían visto tan lejano.

Hisana la visitaba cada semana, aunque era poco el tiempo que tenían juntas y a solas, siempre intentaba hacerle ver que estaría al pendiente de ella, en sus últimas conversaciones el tema a relucir era el divorcio con Ichigo y la compra de un pequeño departamento que su madre le había conseguido para el hospedaje, aunque ella se negó al principio terminó por aceptarlo por las insistencia de Hisana. "Por cualquier eventualidad" esas habían sido las palabras exactas de su madre. En el otro lado de la moneda se encontraba su padre, él… él simplemente aun no mostraba interés por su persona y empezaba a creer que jamás volvería a hacerlo. Tal vez había sido demasiado las acusaciones que le habían hecho. Dejo de perderse en sus pensamientos cuando Kei le pidió unirse al juego junto con sus tías.

Aquella noche había sido bastante cansada, después de la cena el pequeño había caído dormido cual tronco e Ichigo lo llevaba en los brazos para ponerle el cinturón de seguridad en el auto, aunque la familia del pelinaranja quería que se quedaran tuvieron que negarse, Ichigo alegó que por la mañana tendría trabajo y Kei escuela, mientras que ella no se sentía bien durmiendo en el lugar.

Al llegar a su hogar solo pensó en descansar en su cama, sus piernas empezaban a flaquearle y le dolían un poco, necesitaba cerrar los ojos y reposar un poco, pero después de dejar a Kei arropado en su cama y antes de llegar a su habitación sintió como falseaba con un pie, pensaba que caería al suelo, pero para su sorpresa Ichigo le sostuvo con cuidado desde uno de su brazos y termino atrayéndola hacia su pecho.

Su abrazo se intensifico –¿Ey Rukia estas bien?, te ves…

Se soltó de su agarre y se incorporó rápidamente. –Solo estoy algo cansada, no es nada por lo cual debas preocuparte. Lo mejor será que vayamos a dormir

El muchacho pareció tensarse ante sus palabras. –Ya veo… pero antes, de eso yo… pensé lo del divorcio y creo que tienes todo el derecho, si estás de acuerdo mañana firmaremos los papeles a primera hora, tendremos que hablar con Kei acerca de esto, no se ve nada fácil pero… pero solo te pido una cosa…

Jamás se esperó aquellas palabras de Ichigo esa noche, tampoco se esperó que le incomodara escucharlas de esa manera, ¿eso era normal? Tardo en contestarle, antes de que las palabras regresaran a su boca. ¿Qué es lo que Ichigo quería? –¿Qué cosa?

El pelinaranja la veía fijamente. –Te pido que continúes viviendo aquí, a Kei le sentara mal el que te vayas y no creo que tengas a estas alturas un lugar al cual ir, por favor quédate.

Respiró lento antes de contestar. –Ichigo sabemos tanto tu como yo que el dinero no es problema, puedo vender algunas cosas e irme, pero claro que ese no es el punto. –el silencio reino varios segundos –Acepto tu trato pero a cambio también tendrás que aceptar que solo será temporalmente, voy a volver a trabajar y después de un tiempo me iré. Solo hasta que Kei esté mejor.


Pov Grimmjow

Manejar a cualquier animal salvaje implicaba tener un temple fuerte y una paciencia aun mayor, pero para alguien que se había dedicado toda su vida a dicho trabajo resultaba realmente relajador y divertido. Nibelungo crecía y se desarrollaba a un ritmo rápido y realmente se sentía feliz de ver que el pequeño se estaba aclimatando con rapidez a la reserva en China, estaba seguro que en poco tiempo sería capaz de liberarlo por completo en el lugar. Había momentos en los que se preguntaba que pensaba aquel gran felino, cuando simplemente se recostaba a su lado cual gato y no se movía durante largas horas. Incluso llegaba a pensar que parecía estar triste.

Era realmente difícil tener que estar tan lejos de New York, hablaba con Saito por teléfono todos los días, sin embargo sabía que eso no sería suficiente para el infante, ni para él tampoco, aún mantenía su promesa de buscar a su madre. Rukia tenía mucho que explicar, no negaría que también extrañaba a la pulga y todo lo que implicaba su presencia, ¿Quién pensaría que estaría así por una mujer y por un niño? Negó rápidamente intentando aclarar sus pensamientos.

Por esas razones a pesar de todas sus responsabilidades se encontraba parado frente a esa gran casa, mientras en una de sus manos sostenía su maleta y en la otra un papel con la dirección que había conseguido. Sin lugar a dudas ese lugar era el correcto. Torció la boca en un gesto y apretó el escrito en su mano. La noche presente era fría, tenía que buscar un lugar donde dormir. Le dio la espalda a la imponente mansión y empezó a caminar sin rumbo fijo. Las noches de Japón realmente eran nostálgicas.


Pov ¿?

Termino de desempacar la prueba casera y después de ir al baño y repetirla dos veces se dio cuenta de lo que significaba el resultado de la misma. Era bastante simple, estaba embarazada.


celiia.04: Gracias por no olvidar la historia :'v me esforzare mucho para ya no fallarles tanto xD

gitana99K: La vida no es fácil, cuando más sufres tristemente es cuando más aprecias las cosas, Saito ha pasado por mucho y al final pareciese que siempre es para mal, pero ahora con Grimmjow esperemos que eso termine. Qué más da, seguiré por aquí hasta terminar la historia. Esperadme por favor :33

Entonces sigo por aquí, cada vez más cerca de navidad la emoción inunda la piel. Espero disfrutaran el cap, saben que el esfuerzo es constante y que se hace con mucho amor para ustedes :33 Bueno no olviden dejar su review, para animar a este despojo de escritor xD en fin, muchas emociones positivas y nos leemos pronto. Vinsmoke fuera.