Disclaimer: BLEACH y sus personajes son propiedad de Tite Kubo, pero la historia es completamente mía.
Lo hemos logrado, por fin se ha acabado esta etapa de revisión y reedición, ahora regresamos al bonito estado de: EN EMISIÓN, eso solo significa la publicación de nuevos capítulos y sucederá antes de que acabe el año, así que supongo no esta tan mal. En hora buena chicos, disfruten del capítulo.
"Uno de los aspectos más patéticos de la experiencia humana es nuestra ignorancia de las verdaderas consecuencias de nuestros actos"
-Alberto Manguel
CAPITULO XXV - "Duda"
Pov Ichigo
Llegó a la empresa mucho más temprano de lo habitual, tiró su saco a un sofá cercano y se desajusto un poco el traje. Tenía que dejar todo listo y planeado para el día que le esperaba delante, en verdad estaba ansioso y una discreta sonrisa cruzó su rostro al pensar en ello.
De un lado a otro se movía con mucho apremio mientras observaba todo a su alrededor, cada rincón tenía que estar perfecto para la cena de aquella tarde, su traje, su corbata, sus zapatos, los arreglos florales que había mandado a hacer para la ocasión y el espléndido menú con los platillos favoritos de ambos. Todos los menesteres ya habían sido enviados al restaurante, a excepción de una única cosa, en la bolsa derecha de su pantalón palpitaba con vida propia un costoso collar de zafiros labrados, un presente que esperaba fascinara a la pelinegra, esa noche sería únicamente para ellos, sin embargo pretendía reconquistar a su exesposa sabía que no solo debía tener detalles materiales, sino también tenía que acercarse de nuevo al espacio de confianza de la ojivioleta y demostrarle que seguía siendo el mismo, que ante todo quería protegerles tanto a ella como a Kei, esa noche misma se lo dejaría en claro.
Aunque se sentía fatal por el hecho de que Kei no quería verles, esperaba darle un poco de tiempo al niño para que pensara y se tranquilizara antes de hablar con él y aclararle las cosas como debían de ser. Mañana mismo había planeado ir con Rukia a recogerlo de casa de sus padres, aprovechando la presencia de los mismos para intentar hablar con su hijo de la manera más amena.
Miró su reloj con parsimonia, aún era temprano, debía regresar a casa con suficiente tiempo para tomar una ducha, tal vez desayunar con Rukia y terminar de alistar los preparativos del restaurante en el que cenarían. Salió de su oficina no sin antes dar unas cuantas instrucciones a su secretario y asistente, mientras sin mucha prisa sacaba las llaves de su auto. Por fin fuera del lugar subió a su automóvil y condujo con tranquilidad hasta llegar a su morada, que por más que quisiera llamar hogar, sabía que este no existiría hasta que volviera a reunir su lazó con su hijo y con Rukia.
Entró a su despacho y empezó a organizarse, llamó a uno de sus choferes, le explicó la hora exacta a la cual tenía que pasar a recoger a Rukia y llevarla al restaurante donde cenarían. El lugar era un establecimiento de primera calidad a las afueras de la zona centro de la ciudad, lo mejor era tener el transporte preparado por cualquier imprevisto y que su chofer pusiera a punto su auto. Al poco rato sintió a la pelinegra acercarse y de inmediato fue a su encuentro con la intención de encararla, últimamente la había visto nerviosa, melancólica y de mirada triste, que por la situación de Kei no esperaba menos, sin embargo… sentía como si su compañera se estuviera marchitando lentamente, aquello le dolía y no sabía que hacer, esa era otra de las razones por las cuales estaba organizando esa cena, quería saber que atormentaba el corazón de la mujer que tanto amaba y como podía ayudarla.
La chica de inmediato le observó al acercase. – ¿Qué sucede Rukia? ¿Saldrás? Puedo acompañarte si quieres, empieza a sentirse frío.
La miró jugar con su bolso y desviar su mirada. –Tengo algunas cosas pendientes que hacer fuera Ichigo, quiero estor sola un momento ¿no tendrás alguna objeción ello, verdad?
De inmediato sintió la tensión, ella hablaba a la defensiva –Para nada, solo te pido que no te olvides de la cena de esta tarde y por favor ten cuidado.
La chica asintió rápidamente y salió de su campo de visión mientras abandonaba la residencia. Soltó un largo suspiro y se sentó en la silla de su despacho. Quizás debía haber intentado hablar más profundamente con la pelinegra, ya que no se veía nada bien, algo en lo profundo de su corazón le decía que fuera por ella, un misterioso impulso le gritaba que no la dejara ir. Estaba por salir a buscarla cuando el timbrar de su celular le distrajo.
Sin muchas ganas contestó aquel número que conocía de sobras. –¿Qué sucede ahora? ¿Acaso haz olvidado algo Riruka?
La chica del otro lado de línea pareció reírse ante su comentario. –Quizá querido, pero eso dependerá mucho de lo que estemos hablando
Gruñó con fuerza. –No sé de qué hables, pero si tienes algo que decir, dilo de una buena vez, no tengo tiempo para perderlo contigo. Ya todo se acabó, por favor entiéndelo.
La escucho reír nuevamente –Para nada Ichigo, esto acaba de empezar y…. ¿sabes por qué? ¡Por qué lo lograste Ichigo, felicidades! ¡Serás padre! Estoy embarazada. ¡Deberías estar feliz, en pocos meses seremos padres!
El mundo se detuvo por unos instantes al escuchar semejantes palabras de Riruka, eso… eso tenía que ser ¡una jodida broma! – ¡No juegues conmigo Riruka! ¡Si quieres dinero solo pídelo! –Bramó con fuerza, aquello ya le estaba exasperando. –No caeré en tus sucias jugarretas.
La oyó chasquear la lengua. –Piensa lo que quieras, pero por el tiempo no hay duda, si no me crees podemos ir a la corte para demostrarlo. Tengo una prueba de paternidad que infaliblemente demostrara que eres el padre de mi futuro hijo. Ichigo yo no quiero hacerte daño, aun te amo, quiero lo mejor para mi hijo y para nosotros.
– ¡Deja de jugar! ¡Y déjate de mentiras! ¡No puedes hacer dicha prueba sin una muestra del padre y yo no te he dado ninguna! Buen intento Riruka, pero debiste pensarlo mejor para intentar estafar a alguien que se dedica al negocio de la farmacéutica y las pruebas de laboratorio. No te amo Riruka, por favor entiéndelo, lo nuestro no tiene futuro, fue un error de mi parte y en verdad lamento haberte lastimado en el proceso, pero no cambiare de opinión.
La escuchó suspirar –Al contrario amor, eres tú el que debe pensar con claridad todas aquellas veces que te quedabas en mi apartamento y en que no solo dejabas tu ropa, sino también tus artículos de "belleza" y si aún no recuerdas a lo que me refiero, hablo de los cepillos y peines que dejabas con rastros de tu cabello.
Un clic mental lo sacudió. –Por favor… dime que es una broma… – Casi suplicó con voz cansada, él en verdad había dejado aquellas pertenencias, así que por lo que Riruka decía, aquello podría ser completamente cierto, por lo que tomó una decisión – ¿Dónde estás?
La chica le respondió cortadamente –Estoy en el departamento.
Se levantó tomando las llaves de su auto con fuerza. –Iremos a que te realicen de nuevo esas pruebas de paternidad, quiero asegurarme.
–¿No hablaras enserio Ichigo? ¡Ninguna clínica te aceptara a estar horas sin previa cita!
Apretó los dientes con fuerza, sentía la tensión en todo su cuerpo –Prepárate. Pasare por ti en 30 minutos. Colgó el teléfono sin esperar a que la chica le contestara.
Pov Riruka
¡Maldita sea! Lanzó con fuerza su celular a su cama. El bastardo de Ichigo vendría a arruinarle la diversión ahora que por fin habían planeado revelarle lo del "embarazo", tendría que moverse rápidamente para modificar las pruebas de ADN y asegurarse de que Ichigo creyera que el niño que cargaba en su vientre era de él, cosa que era prácticamente imposible dado que el pelinaranja no dudaba en usar protección cuando tenían sus encuentros, por lo que solo Ginjou podía ser padre de aquel niño y hablando del susodicho.
El hombre pelinegro entró en su habitación y le sonrió despreocupadamente. – ¿Qué sucede bella dama? ¿Acaso el gato te comió la lengua? Te vez abrumada amore mio, deberías estar contenta de que por fin tienes a Kurosaki comiendo de la palma de tu mano.
Hizo un gesto molesta. – Déjate de tonterías Ginjou, Ichigo quiere hacerme una prueba personalmente para asegurarse de que es su hijo, queríamos que él viniera a verme hoy, pero no con este desliz de hacerme una "prueba" personalmente, eso no estaba en el plan. Debo contactar a mi padre y asegurarse de que me ayude a alterar los resultados de la clínica a la que me lleve Ichigo.
El hombre movió la mano despreocupadamente. – No sé de qué te preocupas, pronto tendremos el dinero de ese imbécil y un heredero "Kurosaki", tu padre jamás dejaría tirado un asunto tan importante.
Bufó molesta –Tú dices todo eso porque no estas llevando en tu cuerpo semejante carga inútil.
El chico brincó –¡Vamos mujer no le llames así! Es nuestro hijo después de todo, deberías amarlo.
Tomó las llaves de la motocicleta de Ginjou y se las lanzó a la cara bruscamente –Por qué no simplemente dejas de perder el tiempo, tú también tienes algo que hacer el día de hoy ¿acaso lo olvidas? Una mujer indefensa de corazón roto te aguarda y claro tampoco olvidemos al pequeño bastardo que está esperando su turno para que le visites. Ya que la última vez no te encargaste de que se le cerrara la garganta como debía de ser.
El hombre tomó las llaves en el acto y se puso serio. –Riruka, sabes que no fue mi culpa que el niño sobreviviera al shock anafiláctico*, Gin me dijo que podría librarse de algo así. Ahora si de verdad te molesta, esta vez usare mis métodos y me asegurare que no tenga oportunidad alguna de despertar, ese será tu regalo bella mujer.
El pelinegro le sonrió para acercársele rápidamente y besarle. –Entonces ya vete de una vez.
El hombre le soltó y se despidió con un gesto de mano mientras lo veía desaparecer por la puerta de la habitación –Lo que desee mi bella dama.
Pov Ichigo
Condujo sin prestar mucha atención a su entorno, estaba seguro que debía de haberse saltado varias luces rojas, en ese punto tenía suerte de no haber arrollado a nadie. Se detuvo frente al departamento de Riruka y la observo a lo lejos, a la par que apretaba fuertemente el volante del vehículo. Ella ya estaba esperándole afuera y sin perder el tiempo se acercó a su auto, desde lejos podía ver claramente el evidente "síntoma" de su embarazo, el vientre de la chica se observaba claramente abultado.
La mujer abrió la puerta del copiloto y entró sin mayor problema. –Ichigo sé que no podías esperar a verme después de la noticia de que espero a nuestro hijo, que no es para menos, pero pudiste esperar un poco más para que me arreglara, no tenías que poner una excusa tan ridícula como realizar otra prueba de paternidad.
Riruka se inclinó con la intención de besarlo, sin embargo el rápidamente se retiró de su alcance. –No es ninguna excusa Riruka. –Su voz sonaba fría –No creeré que ese niño es mío hasta que realicemos una prueba de paternidad en una clínica de mi entera confianza, sabes que siempre que estaba contigo usabamos protección y fueron contados los casos que no fue así.
La pelirosa le sonrió tranquilamente –Pero Ichigo tu sabes que los métodos anticonceptivos pueden tener el 99% de eficacia, usarlos no excluye la posibilidad de que me dejaras embarazada y tú lo sabes.
Observó a la chica de reojo mientras encendía de nuevo el motor del auto. –Quizá… pero por ahora iremos a un lugar donde sin duda nos quitaran aquella incógnita y déjame decirte Riruka, que si en dado caso me estas mintiendo espero que estés preparada para lidiar con las consecuencias.
Se mantuvo en silencio todo el trayecto desde el departamento de Riruka hasta la clínica particular a la cual se dirigían, fácilmente pudo haber acudido con su padre o algunas de las clínicas que tenía concertadas en su nómina para la distribución de manufactura en medicamentos, pero en un asunto tan serio y tan urgente creía más adecuado acercarse a la única persona que consideraba una experta en el tema y que a pesar de que su relación no era la mejor, podría contar con su apoyo o al menos… al menos eso esperaba.
Se aparcó cerca de la clínica e insto con apremio a que la chica saliera de su auto. Antes envió un mensaje a Rukia, ya era tarde y no quería preocuparla, esperaba no tardar mucho tiempo hablando y que llegara apenas con un ligero retraso a su cita –Es aquí. Vamos Riruka, esto será rápido.
La chica dudosa le siguió hasta la entrada del establecimiento. Él estaba ignorando a las personas que le miraban y saludaban respetuosamente, simplemente continuo su trayecto por el lugar hasta llegar a una oficina en particular, con letras doradas un letrero relucía el nombre "Encargado de servicio".
No se molestó en tocar la puerta, entró a la oficina dejando a la chica atrás. –Hola Ishida, tanto tiempo sin vernos.
El nombrado desvió la mirada de unos papeles y le enfrentó. –¿Qué haces aquí Kurosaki? Sabes que no eres bienvenido.
Desvió su mirada y la fijó de nuevo en el hombre de bata que tenía enfrente. –Ishida necesito hablar contigo.
El pelinegro se levantó y en un instante cambio su semblante a uno más amigable. –Ya veo… la última vez que estuviste aquí fue por Kuchiki y su control prenatal, quise ayudar porque consideraba a ambos mis amigos, sin embargo tú mismo pediste que no interfiriera. ¿Lo recuerdas? Cuando te vi despreciándola enfrente de los enfermeros del piso de obstetricia*, te lo dije en aquel entonces "no toleraría ningún tipo de maltrato contra ella, incluso si este fuera solo mental", estabas desquebrajando como papel a Rukia y yo no lo permitiría, ¿recuerdas la pelea? Fue justo en esta misma oficina, me rompiste la nariz y dos costillas, luego saliste por aquella puerta como si nada. Después de eso no volviste…
Tragó grueso y las manos le temblaban. –Ishida yo…
El muchacho se acomodó las gafas y lo interrumpió. –Mis palabras fueron claras "Si vuelves a venir a verme será con Kuchiki, vendrás a que termine de golpearte por tu estupidez, suplicaras clemencia por ser un imbécil." Y a pesar de todos estos años no volviste a aparecer, ni tu ni ella. Supongo que ahora las cosas han cambiado ¿verdad?
Ishida se levantó y lo rodeó para intentar ver a la persona que estaba detrás de él. –Realmente Ishida… yo…
Apretó los puños con fuerza. –Que va Ichigo soy yo el que debe de disculparse con Kuchiki, pude haber hecho más por ella que simplemente hacerme a un lado ¿no es cierto? Ahora quítate y déjame saludarla.
Lo apartó de un empuje y observó como Ishida se petrificaba. Su semblante había vuelto a cambiar a uno encolerizado en cuanto miró a Riruka. Empezó hablando en susurro, su tono fue haciéndose cada vez más enfadado y fuerte – Largo... largo de mi clínica Kurosaki… ¡NO QUIERO VERTE DE NUEVO EN MI VIDA! ¡LARGATE!
La chica se asustó ante la reacción de Ishida y casi cae de espaldas si no es porque él la sostuvo rápidamente. No le agradaba aquello pero después de todo la pelirosa estaba embarazada. –¡Espera Ishida no sé cómo explicarlo! Pero necesito que le apliques una prueba rápida de paternidad.
Pov Ishida
Quería echar a ese bastardo de su clínica, no podía creer como su amigo había terminado convirtiéndose en un monstruo después de todo lo que había hecho pasar a Kuchiki, ahora él traía una mujer embarazada a su oficina con la primicia que quería que se le realizara un aprueba de paternidad. ¿Y después? ¿Querría que fuera el padrino de su nueva pareja? Que descarado bastado. –Ichigo nunca pensé verte caer tan bajo, pero de mí no pidas nada, no puedo ni considerarte un examigo. Lárgate antes de que llame a seguridad, no vales ni mi tiempo.
El pelinarajo le hizo señas a la chica y le pidió salir de su oficina para después cerrar la puerta detrás de él. –Ishida por favor, te lo pido escúchame yo sé que mis acciones no han sido las mejores pero dame la oportunidad de explicarme tan solo un poco.
Tomó el teléfono de su oficina y empezó a marcar. –Tienes 5 minutos antes de que mis oficiales de se seguridad lleguen.
Ichigo no perdió un segundo y empezó a relatarle su "historia", escuchó con atención cada detalle y el mismo fue encadenando los hechos sin bastante esfuerzo. Su conclusión: Kurosaki era un bastardo de primera, pero era un bastardo "arrepentido" con la cola entre las patas y se quería reivindicar por el bien de las personas que amaba.
Suspiró cansado y a los pocos segundos la puerta de su oficina se abrió mostrando a los dos corpulentos guardias de seguridad y a la chica pelirosa que aún se encontraba afuera de la oficina. –Señor nos llamaba.
Ichigo se puso a defensiva. Sin embargo rápidamente hizo un gesto de mano y los insto a irse. –No será necesario, lamento las molestias pueden volver a sus puestos.
Los hombres se marcharon y solo entonces se permitió ver de nuevo a la cara al Kurosaki. –Escucha Kurosaki, te ayudare pero quiero que quede claro que lo hago por Kei y por Kuchiki, no merecen que les causes más dolor y tal vez en el fondo si te soy sincero, también tu tampoco lo mereces. Siento lo de tu hermano, todo el engaño en el que tu familia se ha visto inmiscuida, pero quizá debas entender que no es tan fácil perdonar lo que has hecho, no es imposible, pero no es fácil… Para mi quizá lo que acaba de pasar hoy, también sea una señal para decirme que es un buen momento para que visite a Rukia, debo disculparme con ella por dejarle sola tantos años, tampoco me porte de la mejor manera.
Ichigo le miró cansadamente. –Gracias Ishida, te prometo que algún día te pagare todo lo que has hecho por mi familia.
Negó con la cabeza rápidamente. –Haremos una prueba de paternidad prenatal no invasiva* –Por fin miro a la chica con una mezcla de sentimientos. –¿Estás de acuerdo verdad… mmm…?
La pelirosa estiró su brazo. –Soy Riruka y claro, puede tomar toda la sangre que quiera. ¿En cuánto tiempo estarán los resultados? ¿3-4 días?
Se acomodó de nueva cuenta los lentes. –Normalmente una prueba comercial tarda ese tiempo en ser procesada, pero yo mismo realizare el procedimiento así que no me demorare más de 5 horas, hoy mismo conocerán los resultados.
Pudo leer en los rostros de los presentes que ninguno de los dos esperaba semejante resultado de su parte. –Ahora vamos a un consultorio, así que síganme por favor.
Pov Riruka
Se quedó estupefacta al escuchar al hombre frente a ella, si este tipo hacía la prueba sin interrupción alguna, sería imposible para ella poder interferir en los resultados de la misma. No sabía exactamente que hacer… sin embargo al menos por ahora no tendría otra opción más que cooperar, su padre ya podría encontrar otras opciones para acceder a la fortuna Kurosaki.
Pov Ichigo
Contando el tiempo en que se tarda en realizar una prueba de paternidad convencional y una prueba de tipo prenatal, nunca se imaginó que Ishida fácilmente disminuyera el tiempo tan drásticamente, él conocía de esas pruebas y había comercializado con algunas, sin embargo estaba un poco desactualizado de las metodologías más recientes y ahora mismo se arrepentía por nunca haberles prestado más atención. Siguieron al chico de gafas hasta un consultorio donde extrajo algodón y un poco de alcohol de una de las gavetas del lugar, este sin duda alguna los pincho con jeringas y obtuvo un abundante tubo EDTA* de 5 ml de sangre, tanto de Riruka como de él.
Lo miró anotar unas cosas en ambos tubos y ponerlos en la bolsa de su bata mientras los agitaba con suavidad. –Ambos pueden esperar aquí si gustan, en cuanto termine traeré la analítica de los resultados.
Ishida salió del consultorio dejándolo perdido en sus pensamientos. No supo por cuánto tiempo se quedó en aquel limbo hasta que recordó que tenía que llamar a Rukia para avisarle que probablemente no podría llegar, busco rápidamente su celular en el bolsillo de su pantalón pero se encontró con la desagradable sorpresa de que su dispositivo estaba completamente agotado, sin batería alguna. Maldijo internamente y gruñó con fuerza mientras lo apretaba, ya era muy tarde. Ese día se suponía sería muy especial para ambos y sin embargo ahora se encontraba inmerso en esa maraña de problema. Debía avisarle de alguna manera a Rukia, tenía que mandar a alguien a recogerla, sin embargo en ese momento no sabía qué hacer, el número de la chica solo lo tenía guardado en su teléfono móvil y el de sus choferes igual.
Buscó con la mirada a Riruka y la encontró ojeando una revista en una esquina del consultorio, anteriormente la había visto salir a hablar por teléfono y ahora la chica parecía poco preocupada. ¿Qué pasaría si ella en verdad estaba embarazada de él? Sacudió la cabeza intentando alejar esos pensamientos. No se suponía que se atormentara con algo que aún no se había confirmado.
Aquellas horas se le hicieron eternas, entre estar preocupado por Rukia, el hecho de que ella probablemente pensara que de nuevo le había abandonado y en el otro lado, estaba la prueba de paternidad. Se sentía asqueado.
De un momento a otro Ishida entro a la sala con varias hojas y un sobre, mostraba un rostro serio y los analizó a ambos con intriga. –La prueba está lista y como prometí todo lo realice personalmente, hice todo por triplicado. Este sobre contiene la hoja principal de resultados.
Ishida le estiró el sobre y de inmediato se lo arrebató. –Gracias Ishida.
El nombrado negó con la cabeza. –Los dejo solos para que las lean en calma, en cuento terminen por favor váyanse y no vuelvan jamás.
Miró como su amigo salía de la sala y con rapidez rompió el sobre y saco el papel dentro. Se saltó todas las normalidades y comparaciones sobre la genética misma, llegando a la parte que más le interesaba y la leyó con cuidado.
Interpretación: RN: 12543
Índice de Paternidad Combinado: 1,636,652 Probabilidad de Paternidad: 99.9999%
El presunto padre no es excluido como el padre biológico del producto examinado. Basándose en los resultados obtenidos de los loci* de ADN listados, la probabilidad de paternidad es de 99.9999%.Esta probabilidad de paternidad fue calculada en comparación con un individuo al azar de la población general, no analizado y no relacionado (asume una probabilidad previa igual a 0.50).
RESULTADO: POSITIVO.
La hoja cayó de sus manos… miró a Riruka rápidamente y le encontró pasmada, extrañamente parecía igual de sorprendida que él. Ya no cabía duda, Ishida había realizado personalmente los análisis y no había dejado que nadie más interviniera, definitivamente él era el padre del niño que ahora Riruka llevaba en el vientre.
Recogió el papel, le entregó a Riruka la hoja con los resultados y de inmediato se dirigió a la puerta del consultorio. Su voz sonaba tétrica y baja. –Escucha Riruka, en este momento tengo algo que hacer. Mañana o a más tardar en unos días me pondré en contacto contigo para que hablemos. Guardare el número del celular desde el que me llamaste, supongo que ahora es el nuevo número que usas.
Intento salir del lugar sin embargo la chica lo detuvo jalándole suavemente de un brazo. –Espera Ichigo no puedes irte así, ya sabes que el niño es tuyo entonces debemos…
Se deshizo del agarre de la chica y se mantuvo serio. –Me hare cargo de mi hijo, sin embargo ahora tengo otra cosa que hacer, ya te dije que hablaremos después.
De inmediato salió corriendo de la clínica en dirección a su automóvil, condujo con velocidad hasta llegar al restaurante donde tenía la cita con Rukia, solo para encontrarse que aquello ya estaba desierto. Podía mirar entre los cristales que daban al exterior del establecimiento como los meseros se movían de un lado a otro limpiando el lugar y fregando los pisos. Sin importarle mucho salió del automóvil y entro al lugar, un hombre de imponente barba le recibió.
El hombre lo saludo, pero el apenas y lo notó. Su mirada buscaba por todas partes del lugar una única cosa. –Señor Kurosaki es un placer tenerlo aquí después de tanto tiempo, nos sentimos muy tristes cuando no llego por la tarde a la hora estipulada para su reserva, creíamos que dejaba de pensar que nuestro restaurante estaba a la altura de la situación y que cancelaria su cita.
Observó al hombre al no encontrar a quién buscaba. Su voz sonaba suplicante. –Vera yo no he podido llegar, pero mi esposa…
El hombre le miró interrogante y después le sonrió. –¡Ya veo!, ¿la señora Kurosaki no es cierto? Muchos la nombraban por aquí hace algunos años, pero nadie estaba tan seguro de quien era, sabe que se dicen muchas cosas malas al respecto, pero obviamente yo no creería en ellas, más bien pienso que usted fue un hombre muy sabio en ocultar parcialmente su existencia. Con semejante mujer de compañera es fácil que otros hombre quisieran quitársela, es exquisitamente bella y…
Su esposa… en ese instante lo pensó, Rukia realmente ya no era su esposa. Lo interrumpió rápidamente. –¿Tiene mucho tiempo que se ha ido de aquí?
El hombre ofendido por la interrupción apenas se precipitó a contestarle. –Disculpe señor Kurosaki, pero independientemente de quien se trate, aun si hablamos de usted, sabe que la gente tiene horarios y este restaurante se ajusta a ellos, ella salió de aquí hace no más de 30 minutos después de que cerramos. Probablemente ya esté en casa, es mejor que vaya a buscarla, la noche se está haciendo fría.
Le dio la espalda al hombre y volvió a su automóvil, arranco y empezó su frenética búsqueda, miró por las inmediaciones y se bajó en algunas partes a buscar cerca de los parques, de los establecimientos de comida, de las paradas de autobús, sin embargo sus esfuerzos eran en vano no la veía por ninguna parte y se estaba preocupado. ¿Si le había pasado algo? ¿Si alguien la había lastimado? ¿Qué haría ahora?.
NOTAS
Shock anafiláctico: Es una grave reacción de hipersensibilidad (alérgica o no alérgica), generalizada o sistémica, que puede poner en riesgo la vida, en la cual se produce una disminución de la presión arterial con riesgo para la vida.
Obstetricia: Especialidad cursada por un graduado o licenciado en Medicina en su período de posgrado, enfocada en el embarazo, parto y puerperio, principalmente en situaciones de riesgo que requieran una intervención quirúrgica.
Prueba de paternidad prenatal no invasiva: La prueba de paternidad prenatal no invasiva es la mejor solución para evitar dañar el feto o sufrir un aborto no deseado. Este tipo de pruebas no entrañan ningún riesgo para el feto ni para la madre, ya que no se requiere de una muestra directa del feto ni una intervención sobre el útero de la mujer.
Tubo EDTA: El Tubo de EDTA es un tubo que contiene ácido etilendiaminotetraacético, ampliamente utilizado en la hematología clínica, así como en diversos tipos de analizadores sanguíneos. Se hace uso de EDTA K2 / EDTA K3 como anticoagulante. Ofrece una protección completa para células de la sangre, especialmente para la protección de las plaquetas, de modo que puede efectivamente detener la colección de plaquetas en la sangre.
Loci: Un locus (en latín, lugar; el plural es loci, pronunciado loki) es una posición fija en un cromosoma, que determina la posición de un gen o de un marcador (marcador genético).
Noctelocusta 650: El fandom no morirá mientras yo siga con vida :'v bueno... hago lo que puedo xD Ya estoy mucho mejor, un poco drogada con las pastillas, pero mucho mejor, muchas gracias por tus buenos deseos :33 El GrimmRuki es vida, es amor Xd aunque lo de "nueva vida" para Rukia, te diré que depende como lo interpretes, quizá no estás tan lejos de la definición final. Gracias, muchas gracias por el apoyo y las buenas vibras, saludos y nos leemos pronto. Por cierto... ¡FELIZ NAVIDAD! :33
KassfromVenus: Todos necesitamos un Grimm en nuestra vidas xD solo diré que Rukia al final de la historia... Muchas gracias por el apoyo, nos leemos pronto con nuevos capítulos y MUY FELIZ NAVIDAD :33
Erciel: Gracias por seguir por aquí, es un gusto saber que aún hay lectores Xd en este capítulo no hubo rikolino, pero quizás más adelante... antes que lo olvide, FELIZ NAVIDAD y nos leemos muy pronto. Saludos c:
No sé si pueda actualizar antes del 24 así que por si las dudas ¡FELIZ NAVIDAD A TODOS! que disfruten con su familia y amigos estas fechas llenas de amor, buenos deseos y comida engordadora, les mando un gran abrazo de oso y nos leemos pronto en el nuevo capítulo. Vinsmoke fuera.
