Discleimer: BLEACH y sus personajes son propiedad de Tite Kubo, pero la historia es completamente mía.
Dejemos que el compás suene y entre la música de los dioses luchemos por no derramar más sangre inocente, luchemos por no dejarnos vencer ante la adversidad.
"No es la carne y la sangre, sino el corazón, lo que nos hace padres e hijos."
- Friedrich Schiller
CAPITULO XXIX - "Padre"
Pov Grimmjow
Apenas se había alejado unas cuantas calles de aquella mansión cuando sintió una incomodidad abrumarlo, mentiría si aseverara que se sentía seguro dejando a Rukia con el maldito de Kurosaki, sin embargo sabía que parte del camino que ella debía recorrer tenía que hacerlo "sola", nadie más podría llegar al corazón del pequeño que sus padres y él no podía interponerse.
Suspiró frustrado mientras e detenía un segundo a contemplar la urbe. Carros, ruido, personas caminando de un lado a otro mientras la ciudad terminaba de despertar, de cierta manera Tokio era parecido a New York, sin embargo aquel sitio no se sentí como su "hogar" distaba mucho de serlo. Continuo su caminata hasta que se decidió por tomar un taxi que le regresara al departamento, joder tenía que arreglar el acondicionamiento de Nibelungo, estando él tan lejos de la pantera también le preocupaba su situación, probablemente ella se encontraba ansiosa con sus nuevos cuidadores y si él no lograba integrarse con ellos, probablemente perderían la única oportunidad que tenían de liberarla. Al llegar a su destino pagó con unas cuantas monedas y bajó del vehículo, ahora también recordaba que sus escasos fondos se estaban agotando. Arrugó el rostro preocupado, ¿Cuánto tiempo soportaría si el dinero estaba por terminarse?
Sin ánimo llego al edificio y al cruzar la puerta sintió un par de brazos rodearlo por la cintura mientras le apretaban. Confundido bajó su mirada para observar al pequeño infante que se aferraba a él. Sus manos temblaron pero no se movió. ¿Acaso tan rápido se había vuelto loco? ¿Ya está alucinando cosas? Lo más lógico era dudar de su cordura hasta que lo vio, en el fondo de la entrada el viejo Barragán le sonreía.
Percibió como aquellos bracitos le apretaban un poco más fuerte y regreso su atención al niño. — Papá... ¿no estas feliz de vernos? — Cristalinas lagrimas empezaron a brotar de Saito y el no pudo resistirlo más.
Se dejó caer de rodillas mientras rodeaba a su hijo en un abrazo eterno. Llevo la cabeza del pequeño a su pecho y le permitió llorar todo lo que necesitaba, apretó los dientes al escuchar su dolor. — Saito, campeón no llores, estoy aquí.
El infante se apartó un poco de su abrazo y se afirmó a su agarre — Tenía miedo, miedo de que tú y mamá no volvieran. Quise ser valiente, lo juro, pero... pero, ¿Qué tal si olvidaban de mí?
Negó con la cabeza — Eres nuestro hijo, no podríamos olvidarte Saito, por favor no piensas en esas tonterías.
De apoco soltó al muchacho cuando este empezó a ceder sus lágrimas. Miró a Barragán y muchas preguntas asaltaron su mente. — Anciano, deja que meta sus cosas al apartamento. Creo que tengo un poco de arroz para preparar.
El viejo asintió mientras tomaba su maleta y entraban juntos, rápidamente se acomodaron en la pequeña mesa — Veo Grimmjow que has estado ocupado.
Al escuchar las palabras de aquel hombre detuvo sus acciones. — He estado buscando
— Lo sé, no habría pensado otra cosa, sin embargo...
Posó una mano en el hombro del viejo y detuvo sus palabras. — Porque no mejor me dejas prepararle algo de comer a Saito y a ti también. Después podemos hablar más tranquilos, el viaje debió ser largo y quiero que se recuperen un poco.
Saito sonrió al escucharlo e hizo aquella pregunta que temía escuchar — ¿Cuándo vuelve mamá, papá? Me gustaría que ella me cocinara
Detuvo su respiración mientras maldecía por dentro — Yo... veraz ella aún tiene...
Barragán le sonrió — Anda Saito, acabas de reunirte con tu padre, deberías apreciarlo un poco más o lo harás sentir triste, no te preocupes que estoy seguro que veraz a tu madre cuando sea el momento. Confía en mí.
El niño desconcertado bajó la mirada y asintió en silencio. Le dolía verle así. — Prometo que pronto te llevare con ella, solo dame un poco más de tiempo.
— Por cierto Grimmjow no es que no aprecie el gesto, pero... ¿desde cuándo aprendiste a cocinar?
Su rostro se oscureció mientras un leve sonrojo aparecía en su semblante. — ¡Cállate! ¡Ese no es asunto tuyo!, porque no mejor te sientas y esperas a que el jodido arroz esté listo.
— Si la madre de Saito te escuchara hablar...
Nervioso apretó los dientes intentando no soltar ninguna otra blasfemia, su cuerpo se sentía tensado. — ¡Deja de jugar conmigo anciano!
Pov Barragán
En su vida había visto a Grimmjow tan feliz, ahora contemplaba al muchacho que en sus recuerdos volvía a ser ese niño amable que estaba fascinado con sus muñecos de leones y tigres, que sonreía y se sonrojaba cuando era incomodado. Dejando ver en el fondo a aquel ser de noble corazón y delicados sentimientos. Veía entre visiones al jovencito que en la plenitud de su infancia lamentable fue enterrado en una coraza desde que sus padres fueran asesinados y que ahora resurgía, gritando con vigor su presencia en este mundo. Indirectamente, verlo contento le trajo mucha paz, porque aun recordaba el dolor de sostenerlo cuando bajaban los féretros aquel fatídico día lleno de bruma, si bien el siempre visitaba las tumbas de sus viejos amigos, Grimmjow no volvió a pisar el cementerio donde descansaban sus padres. Siempre se preguntó; ¿Había sido un buen padre con Grimmjow? ¿Acaso si quiera se había acercado a serlo?
Se sintió más que satisfecho al ver a padre e hijo conviviendo mientras cocinaban, las sonrisas de Grimmjow eran naturales y cada vez más espontaneas con Saito. Ese mocoso y la chiquilla japonesa de verdad le habían ayudado a cambiar. Dejó aquellos pensamientos rezagados y después de comer todos juntos recostaran a Saito en el sillón, el jet lag cobraba factura en el pequeño. Por lo que lo dejaron dormir. Mientras ambos regresaban al pequeño comedor.
Se sentó con tranquilidad — Mocoso, he de decir que me alegro que hayas encontrado a tu compañera, pero no sé si sea muy aventurado de mi parte preguntar si ¿ella volverá contigo?
Grimmjow arrugó el ceño mientras se sentaba — Es complicado
Asintió lentamente — Entonces si es posible... ¿por qué no me cuentas un poco?
Miró a Grimmjow dudar antes de contarle lo que había pasado desde su llegada a aquel lugar. — Como veraz ella no puede volver con nosotros así de fácil.
Se llevó un mano a la barbilla pensativo — Ya veo... ahora entiendo cuando dices que es complicado.
Vio al chico suspirar largamente — Voy a luchar por ella, vamos a luchar juntos.
— Entiendo. Aunque con la poca autoridad que me queda de haber sido yo el que te criara, es mi deber aconsejarte y llevarte los pies a la tierra, hijo estúpido.
Pov Grimmjow
Un tic nació en su ojo al escuchar que le llenaban "estúpido" — ¡¿Quieres pelear viejo decrepito?!
— Si, pero no ahora. Grimmjow han llamado desde China al zoológico de Central Park, hablan del estado de Nibelungo y del poco papel que has tomado en proceso de reintroducción, si bien mis amigos y yo hemos intentado cubrirte es indispensable que alguien se presente con Nibelungo, recuerda que la manutención de la pantera no se paga sola y los fondos del programa no pueden costearse más tiempo.
Él lo sabía, pero no se le ocurría nada, de otra manera tendría que partir a China lo antes posible. — Lo sé, pero tampoco puedo irme.
— Aquí es donde entro yo, veraz los muchachos del zoológico aunque no lo parezca te aprecian bastante y hemos logrado juntar dinero para mantener a Nibelungo unas cuantas semanas más, además dos de mis chicos ya han ido a apoyarlo a la reserva.
Se sorprendió al escuchar que los trabajadores del zoológico habían hecho aquello por él — Vaya... nunca creí que ellos...
Barragán sonrió he hizo un gesto de mano para que se acercara a escucharlo — Ellos me dijeron que te diera un mensaje: "Dile a ese imbécil que nos debe una, que cuide a la belleza de mujer que le acompañaba y al mocoso también"
Relajó su semblante y sonrió forzado — Son una panda de monos idiotas
El anciano rio con ganas — Y también huelen como unos, pero que va, ellos valoran la ayuda que les dabas en el zoológico, quizá para ti no sea mucho, pero ellos te querían y te apreciaban, porque sabemos que en el fondo no solo cuidadas de los animales, sino también cuidabas de ellos.
Desvió su mirada contrariado — No digas estupideces. Mejor explícame ¿cómo es que llagaron aquí?
El viejo se mantuvo sería mientras buscaba en uno de sus bolcillos saco dos pasaportes y le entrego uno — Si es eso lo que quieres saber, solo te pido que no te enfades. Era la única manera de hacer que Saito pudiera viajar conmigo.
Desconcertado abrió el documento de identificación y miró los datos de Saito. Instantáneamente apretó aquello de manera tensa. — ¿Por qué? ¡¿Por qué esta registrado como Saito Cifer?!
El hombre frente a él lo miró con parsimonia — Para que Saito pudiera obtener una identidad tuvimos que registrarlo ante un juez en New York, los Cifer amablemente se ofrecieron y adoptaron a Saito en su familia, ahora legalmente es su hijo, con esta autoridad pudieron expedirme un permiso para que el niño viajara conmigo. Además, después de convivir con él este tiempo, Ulquiorra y Orihime incluso dejaron entre ver la posibilidad de hacerse cargo completamente del pequeño, le han tomado mucho cariño y creen no será problema que...
Gruñó con fuerza y alzó la voz, furioso golpeo la mesa con uno de sus puños — ¡No! ¡No permitiré que le alejen de mí! Si ese desgraciado de Ulquiorra cree que está jugando con nosotros le daré la paliza de su vida, ¡no necesitaba de su estúpida ayuda o caridad!
Barragán no se inmuto ante sus palabras — ¡Contrólate idiota! O tus gritos despertaran a Saito, no dejes que la cólera se te suba a la cabeza y piensa un poco, era la única manera, además ellos no quieren quitarte al mocoso, solo te dejan ver una posibilidad.
Respiró agitado mientras apretaba su puño — ¿Cómo puedo darle mi apellido a Saito? No quiero que sea un Cifer.
— Eso no importa por ahora, lo podrás hacer después, es lo de menos, con el permiso y nuestros pasaportes fue fácil venir aquí.
Se relajó un poco bajando sus hombros — ¿De dónde sacaste el dinero? ¿Acaso ellos también costearon el viaje de ambos?
El anciano negó con la cabeza y buscó de entre su maleta una bolsa de papel —Hombre he trabajado toda mi vida y no he tenido muchos gastos, vivo en el zoológico porque me gusta estar ahí, así que digamos que mi fondo de débito es bastante grande y ahora que lo traes al tema, un viejo lobo como yo, no lo necesita, por eso quiero que tengas esto.
Tomó la bolsa con duda y observo una cuantiosa cantidad de dólares. Sorprendió dejo la saco en la mesa. — Debes estar bromeando... anciano no puedo aceptarlo. Este dinero es tuyo, no puedes desperdiciarlo en estas cosas. Ni lo pienses yo me hare cargo de todo y te paga...
— ¡Claro que puedes aceptarlo y lo vas a hacer! Grimmjow, quiero que tengas la plata, en este momento la necesitas y es mi deber ayudarte, te guste o no, te críe, vele por tu educación y cuide de tu trasero, también soy tu padre.
Pov Isshin
Ichigo había desaparecido tan rápido que no tuvo tiempo de preguntar por nada. Tenía que hablar seriamente con él acerca de lo sucedido. — Sé que mi hijo es un completo idiota, pero quizá esta vez lo mejor sea que esperemos un poco Rukia. La situación es delicada.
La mujercita volteó a verlo y en su mirada solo encontró preocupación — Lo siento señor Isshin, ¿podría llevarme con mi hijo?
Asintió con lentitud y tristeza — Lamento mucho lo que ha pasado y no solo me refiero a lo de Kei, Masaki y yo hemos hablado de lo mal que nos hemos portado contigo, de lo injustos que fuimos, de corazón nosotros... lo sentimos.
La chica negó con la cabeza — Entiendo el dolor que pasaron por lo de Kaien, no tienen por qué disculparse, solo quiero estar con mi hijo por favor.
No la contradijo, ¿Cómo pudo haberle dado la espalda? La llevo a la habitación donde su esposa y nieto convivían. — Kei estaba muy alterado por lo de su divorcio, pero creo que ahora está un poco más tranquilo, Masaki y yo lo hemos cuidado personalmente, aun no le hemos dicho nada de lo que sucedió afuera de la mansión y creemos que lo mejor será no mencionarlo.
Pov Rukia
Un fuerte dolor se apodero de su estómago y llevo una mano intentando aminorarlo, ese no era un buen momento para que su sistema decayera, debía aguantar un poco, solo un poco más. Respiro pausadamente mientras caminaba detrás de Isshin, por ahora primero debía hablar con Kei.
Entró con seguridad y visualizo a su pequeño, este de inmediato al verla se ocultó a las espaldas de su abuela. —Kei, ¿podemos hablar? Te extrañe mucho y no me gusta que estés enfadado.
El niño se aferró a la ropa de su abuela antes de que esta le alentara a acercarse. — Vamos Kei, tu madre te extraña y quiere hablar contigo. Iré por un poco de agua para todos.
El pequeño desvió su mirada. — Hijo sé que es difícil lo que estás pasando, pero hay cosas que los adultos pueden y no pueden hacer. Tu padre y yo, ya no podemos estar juntos, pero eso no significa que te dejemos de querer.
Vio las lágrimas en los ojos del pequeño — ¿Dónde está papá?
Limpió con cuidado su rostro mientras le respondía. — Ha tenido un problema, pero no tardara en volver, Kei quiero que sepas que te amamos mucho y eso no va a cambiar.
— ¿Es por qué me porte tan mal? ¿Por eso ya no se quieren? ¿Por eso se van a separar?
Abrió los ojos sorprendida y negó rápidamente — Claro que no, tú no tienes la culpa de nada.
Kei la abrazó y se aferró a ella. — Yo sé que papá se ha portado muy mal contigo, te ha lastimado mucha mamá, ¿es por qué él se volvió un hombre malo?
Correspondió el abrazo y se mantuvo en silencio unos cuantos segundos. Sentía la garganta seca — No Kei, tu padre es un buen hombre, es responsable, fuerte y perseverante, él te ama mucho, te protege y cuida, ha velado por tu bienestar, tu educación y salud, para él eres su mundo entero desde el primer día que te vio. Él no es un hombre malvado, es tu padre y te adora con todo su corazón, no debes dudarlo.
Pov Urahara
Miraba por la ventana de su habitación las afueras del hospital, aunque los médicos le insistían en que debía descansar, él no podía estar quieto. El periódico tenía en su portada el asesinato de la capitana de la policía de Tokio y en contra portada el degollamiento de un mercenario. Se llevó una mano al rostro con pesar y dejo él periódico en la cama. Esperaba que Ichigo hubiera recibido su mensaje lo antes posible, necesitaba salir lo antes posible de aquel sanatorio. Se masajeó con cuidado su brazo, sintiendo como el efecto de los analgésicos desaparecían aunque ese era su menor dolor, su alma se sentía marchita, seca y ardiente como una colilla de cigarro usada. Se percibía de nuevo solo, sin sus padres, sin Yoruichi la vida le demostraba que había llegado solo al mundo y probablemente se iría de la misma manera. Cerró los ojos intentando que sus pensamientos se aclararan, ya tendría tiempo de llorar después, primero debía buscar al culpable de todo aquello. Regreso a su cama y se sentó esperando, quizá fueron 40 minutos cuando un Ichigo de apariencia desalineada entro a su cuarto.
Se observaron mutuamente por largo rato — ¿Qué está pasando Urahara? ¿Qué te ha pasado?
Endureció su mirada y se dirigió al Kurosaki — Quien los está cazando ha endurecido sus tácticas, si al principio parecía ser sutil, ahora ha cambiado su modo de actuar. Debemos prepararnos para ataques cada vez más directos, no vacilara en agredirnos.
— Escuche que la capitana de policía falleció, no creí que la situación fuera tan grave pero ahora que veo por tus heridas es notorio que me equivoque.
Bajó su mirada — La capitana Shihōin me ayudo a detener aquel atentado, un hombre intento disparar contra alguien de tu familia, por el antecedente de la intoxicación de Kei, estoy casi seguro que él era el blanco, aunque no dudo que después fueran por tus padres.
Ichigo se quedó petrificado antes su palabras — ¡No dejare que toquen a mi familia!
Negó con lentitud — Hace algunos días un investigador me contacto, dijo que Kuchiki Byakuya le había contratado para un caso que implicaba a tu esposa, pero él se había quedado corto en la investigación, no conseguía avanzar así que pregunto en el bajo mundo y consiguió mi contacto, quería que le ayudara, sin embargo lo vi como algo peligroso, creí que era un novato cualquiera, pero se trataba de un ex militar de renombre, su nombre Shinji Hirako. Quizá no habría sido mala idea escucharlo.
El pelinaranja desconcertado le contesto — ¿Qué tiene que ver él con esto? Creí que estábamos hablando de mi familia.
Tomó el periódico y se lo extendió — Lo que sea que estaba buscando lo ha matado. Ha sido degollado y ayer por la noche encontraron el cadáver, lo que que Byakuya estuvo buscando sin lugar a dudas también pone en peligro a estos delincuentes. Quieren la cabeza de los Kurosaki y Kuchiki, parece ser que el cuello de Kei es su primordial objetivo. Este investigador fue demasiado osado y le costó la vida, por la misma estupidez Yoruichi perdió la suya, no podemos perder más tiempo. Necesitamos actuar ya.
El Kurosaki asintió — ¿Qué debemos hacer?
— En principio sácame de aquí, no tengo el tiempo para lamerme las heridas como un perro. Después necesito que me acompañes a la estación de policía, debemos recuperar todos los archivos que Yoruichi generó y por ultimo hay que visitar al padre de Miyako, debemos conocer a Aizen Sousuke.
Pov Riruka
Aquella noche llego a su departamento desconcertada, por lo que no pudo pegar un ojo en toda la velada, en verdad agradecía que Ginjo no estuviera en el lugar, porque sus pensamientos estaban invadidos, de alguna manera ella estaba embarazada de Ichigo y cierta frustración le invadió. Se supone que era parte de su plan que así pasara, pero... ¿por qué se sentía tan perdida? Había aceptado el engaño del embarazo, pero jamás se imaginó que en verdad sucediera de aquella manera, en su mente ella tendría un mocoso, pero no de Ichigo, sino de Ginjo.
Después de beber un café por la mañana, llamó a su padre para contarle de lo ocurrido. Él parecía bastante divertido y le aseguro que le depositaria pronto para la manutención del mes. Colgó cansada y se preguntó en su mente, muy en el fondo, si ¿todo aquello valía la pena...?
Vick Greystark: Pues Ichigo es Ichigo, en verdad es cómico no? celos después de todo lo que hizo, vaya que gente así en verdad existe. Rukia tiene un corazón muy noble TwT
Inverse L. Reena: Todos quieren un Grimm uwu uff que la evolución del personaje me costó un riñón xD
Yocel: Y llegó para quedarse :BB
Yuki05: Yep, de esas tareas online que no dejan respirar y pues ya vez ahora yo también te quitare tiempo xD Rukia merece mucha felicidad, pero creo yo que al final merece mucha más "paz" y tenlo por seguro que en el cierre de la historia se la daré, de eso no hay dudas uwu Yoruichi por otro lado... ha sido una hoja que fue arrastrada al viento, esto marca la verdadera agresividad, nada podrá detener lo puesto a andar. Los niños suelen tener problemas con los divorcios, sin embargo Kei ha estado tanto tiempo alejado de Rukia que en cierto punto y sabe que le trato mal, que eso aún le duele, así que no fue tan difícil que la escuchara. Pronto se viene el reencuentro. Que he actualizado en un plazo aceptable xD
Eclair: Perdón TwT pero debía morir, lo del drama... uff no digo nada xD Este Grimmjow es más de lo que parece, porque pese a lo contrario de su desfavorable situación termino por convertirse en un diamante en bruto, una joya para quien supiera verlo y Rukia lo ha visto, lo que le ha ayudado a avanzar. El reencontró se viene, yo también me pregunto ¿cómo será? Uwu Muchas gracias por el ánimo y el apoyo, emociones positivas y cuídate mucho. Saludos.
El final está más que claro en mi mente, solo me pregunto ¿cuantos capítulos más me tocara escribir antes de llegar a él? En fin, no olviden dejar un review con su hermosa opinión, saben que se les aprecia un montón y son el combustible para que me ponga a escribir en lugar de ver YouTube uwu Les mando muchos saludos, mis mejores deseos y nos leemos pronto. Vinsmoke fuera.
