Tenían trece años cuando se dieron cuenta. Un poco antes de que Cartman fuera al centro psiquiátrico había comenzado a ser más inestable, más volátil y aislado.

Era como la dos de la mañana en casa de Cartman. Butters y Kenny estaban ahí, podría decirte que estaban matando el tiempo en la noche de un sábado pero realmente su grupo de amigos había comenzado a turnarse para vigilar a Cartman cada fin de semana. Todo por órdenes de Kyle, quien no dejaba de insistir en que tenían que vigilar que el no fuera un riesgo para otros o el mismo.

Está noche era su turno y Cartman estaba comenzado a ser realmente molesto.

Como una idea fugaz Kenny propuso darle una probada grupal al porro que tenía con el, solo para ver si la marihuana lograba calmarlo.

El plan funcionó de maravilla. Una hora después y un porro menos Cartman estaba completamente dormido en el suelo de su habitación.

—Bueno, eso nos deja solo a nosotros dos. — menciono Kenny mientras contemplaba su obra maestra de por fin dormir a Cartman.

—Aun creo que fue algo innecesario tener que darle marihuana Kenny, no sabíamos cómo iba a reaccionar con ella. ¡Pudo ponerse peor!

—Solo había un camino Butters y era que se relajara. Ahora nos toca a nosotros. ¿Cómo te sientes? ¿Sientes que ya te hizo efecto?

Butters se encogió de hombros. —Solo me siento algo soñoliento.

—Buu amigo es temprano todavía. Hay que hacer algo para despertarte. ¿Quieres experimentar un poco? —dijo levantando las cejas sugestivamente.

Butters que para ese momento no estaba seguro si lo decía en serio o solo era la droga hablando negó con la cabeza. —Paso, debe haber algo que podamos hacer sin volvernos locos en la mañana.

Kenny lo miro aburrido y decepcionado. Así no era como quería pasar su noche del sábado. —Bueno, Cartman nos debe una, así que ¿Por que no hacemos algo divertido con el?

—¿Que quieres decir Kenny?

—Su teléfono está ahí. A puesto a qué está tan dormido que no notará si usamos su huella dactilar para desbloquearlo.

—No la necesitamos, tiene reconocimiento facial.

—¡Aun mejor! Vamos.

Butters estaba preparado a para negarse a eso y regañar a Kenny pero su mente estaba demasiado nublada para hacerle caso a la razón.

Kenny tomo su silencio como una afirmación y se puso de pie acercándose a Cartman. Tomo su teléfono que se encontraba tirado y olvidado en el suelo y lo puso cerca de su cara.

Cuando la primera vez no funcionó hizo algo más arriesgado y levanto los párpados de un dormido Cartman para que por fin su cámara lo reconociera. Funcionó.

—Perfecto, ahora veamos que es lo que busca.

—Kenny de verdad no creo que sea buena idea. Si el se entera nos mata a los dos.

—¿Se supone que la muerte sea una buena amenaza para mí?

—¿Qué? La muerte es una buena amenaza para todos. ¿De qué estás hablando?

—Nada Butters. —Kenny suspiro. —Mira, el no se va a enterar. ¿quieres decirme que de verdad no tienes un poco de curiosidad de saber que hay en el buscador de Eric Cartman? Estamos aquí cuidándolo principalmente porque el tipo está loco. ¿Y me dices que de verdad no quieres saber?

Butters se quedó de pie unos segundos más mordiéndose los labios con ansiedad debatiendo en su cabeza lo incorrecto que era esto. —De acuerdo.

Se sentaron uno junto al otro mientras revisaban aplicación una por una. Cada una de ellas era un botín tras otro.

Su correo de mensajes no era nada fuera del otro mundo. No solía hablar con otras personas más que sus mismos amigos.

Pero con su galería de fotos las cosas empezaron a ponerse extrañas.

Muchas eran fotografías al asar, el fondo de un parque, su gato, o alguna vista buena que había logrado capturar. Lo más raro era su carpeta oculta.

Estaba llena de fotografías de Kyle.

No eran muchas, todas eran robadas de sus redes.

—¿Por qué si odias a alguien tendrías tu teléfono una carpeta con sus fotografías?

Kenny solo se encogió de hombros. —El tipo está obsesionado. —pero no tenía ni idea.

Su carpeta de notas era un caos lleno de ideas que no tenían sentido una con la otra. Era más fácil ignorarla que tratar de darle sentido a lo que decía.

Su buscador de Google era otra historia.

Encontrar pornografía en el teléfono de un chico era normal, lo curioso viene sobre que pornografía busca en particular.

Su sección estaba llena de pelirrojos.

Eric se había revuelto los sesos tratando de recordar dónde había quedado los restos del sapo Clyde. Sabía que lo había tenido antes de ir a la casa de Nicols la primera vez, luego Kyle había tomado sus llaves y hubo al menos una buena distancia de tiempo en que lo perdió de vista.

Kyle le aseguro que había tenido su llavero y la cabeza del sapo Clyde todo el tiempo hasta que llegaron a sus casas pero no pasó desapercibido la forma en que dudó mientras trataba de recordar.

Ya ni siquiera era por el valor sentimental, que era mucho. Le empezaba a preocupar que el idiota de Kyle lo hubiera dejado en casa de Nicols. Lo que más odiaba era que el también fue un idiota al no darse cuenta de que lo había perdido. Los últimos días habían sido un caos y no tuvo cabeza para darse cuenta de su llavero.

Cómo sea, en el mejor de los casos se perdió en algún lugar insignificante, en el peor se quedó en la casa de Nicols en algún momento.

En este momento su único consuelo era que al menos la policía parecía no haberlo encontrado. De lo contrario ya hubieran llegado a irrumpir en su casa por la investigación.

Parecía irreal que después de matar y mutilar el cuerpo de un hombre su mayor preocupación fuera encontrar su llavero. Tuvo el fin de semana para tratar de comprender que sintió al respecto. Busco en lo más profundo de su mente algún rastro de culpa o tristeza pero no había nada.

Solo encontró victoria, justicia y lo que probablemente le asustaba más. Emoción.

Emoción de que nadie hubiera sospechado nada y estaba totalmente invicto en este pelea a oscuras que había tenido con el maldito de Nicols.

Tal vez si no fuera un crimen tan grave lo comentaría con su terapeuta para saber que rayos sentía al respecto o más bien porque no sentía nada.

—¿Puedes avanzar de una vez? —Escucho la voz de Kenny detrás de el. Se había perdido en sus pensamientos y había detenido la fila para la comida. —Me muero de hambre.

—Tu siempre te mueres de hambre. —Comento de mala gana mientras se terminaba de servir.

—Mira quien está hablando.

Kenny había estado inusualmente pegajoso con el todo el día. Como si quisiera preguntarle algo que no terminaba de decir. Por si fuera poco Butters estaba con el y contrario a Kenny estaba muy callado.

—¿Qué hiciste el fin de semana Cartman? —Pregunto Kenny por fin mientras seguían avanzando en la fila. —¿Por fin hiciste algo divertido?

—Te sorprendería saber que yo siempre hago algo divertido Kenny. Y este fin de semana no fue la excepción.

Kenny hizo una pausa en lo que se atrevía a comentar—Escuche que tienes un trabajo en equipo con Kyle.

—Seh, algo así. ¿Qué pasa con eso? Yo escuché que le quitaste la novia a Clyde.

—¡Hey! Eso no fue así yo no le quite nada a nadie. —Espeto Kenny cayendo en la distracción de Cartman. —Eso me recuerda que tengo una conversación incómoda que tener.

—Suerte con eso, vamos Butters.

Cartman paso su hombro encima de Butters antes de darle tiempo de escoger a dónde irse. Necesitaba hablar con el.

Kenny los vio alejarse a una mesa aparte antes de dirigirse con Stan y los chicos.

—Entonces contando la casa de Clyde eso nos deja ahora un total de cuatro casas donde Stan a vomitado. —Comento Kenny uniéndose a la mesa ignorando el tema de conversación anterior.

—Viejo habla más bajo no soporto mi cabeza.

—Son las diez de la mañana Stan. No puede ser que tengas resaca tan temprano. —Kyle giro los ojos y su mirada aterrizo a una mesa a la distancia. Nadie lo noto excepto Kenny.

—No es resaca, es abstinencia. No puedo seguir tomando como lo hice el viernes. Prácticamente entre en coma todo el fin de semana.

—Así que abstinencia mmm… Inician las apuestas ¿cuánto creen que dure el nuevo Stan sobrio?

—Viejo no bromees con eso. —Tolkien comento a penas incluyéndose en la conversación. —La fiesta del viernes dejo a muchas personas buscando la abstinencia.

—Claro que eso es algo que tu sabes ¿verdad Kyle? —Pregunto Kenny buscando la mirada de Kyle quien lo trataba de ignorar siguiendo en su comida. —Después de todo fuiste a la fiesta con Stan ¿no?

Kyle estaba nervioso pero no se dejó intimidar por la obvia insinuación de Kenny. —Si, me atrapaste Kenny. Yo mentí. Cómo ya le expliqué a Stan tuve una emergencia y necesitaba salir de mi casa con una cuartada.

—Lo que no me dijiste fue cual era la emergencia. —Escucho la voz aplastada de Stan quien tenía su cabeza escondida en sus brazos.

Hubiera podido ignorar su obvia pregunta pero cuando levanto la mirada toda la mesa lo estaba viendo directamente a el, buscando una respuesta.

—Yo…salí con alguien.

La sonrisa de Kenny se ensanchó. —Vaya… y quién es si se puede saber.

—Eso no les importa. —Kyle no estaba seguro de porque estaba tan nervioso. Si era por todo lo que implicaba su salida con Cartman y el caso de Nicols o solo por el hecho de que había en efecto salido con Cartman.

—Rebecca no fue a la fiesta tampoco. ¿Saliste con ella? ¿Por eso no nos quieres decir? —Tolkien pregunto.

—Amigo ninguno de nosotros te juzgará si comienzas a salir con ella de nuevo.—Aun con lo mal que se sentía físicamente Stan se las arreglo para decir. — Si es lo que te hace feliz…

—No salí con Rebecca carajo ya dejen de mencionarla. —Kyle interrumpió a Stan más fuerte de lo que hubiera querido.

El hecho de que atribuyeran su salida con alguna cita romántica a escondidas lo ponía nervioso.

—Bien, tranquilo. ¿Entonces saliste con una chica o no? —preguntó Kenny.

La mirada de Kyle busco nuevamente una mesa a la distancia. Una mesa con dos personas solitarias que conversaban ajenos a el caos que era su mente en estos momentos.

Los chicos ya sabían que estaba con Cartman en un proyecto escolar, además no sabían nada de Nicols, entonces ¿por qué le costaba tanto aceptar que estaba con el?

Por una fracción de segundo sus miradas se cruzaron y por un momento Kyle sintió que Cartman sabía lo que estaba pensando. Que sabía lo que iba a decir.

Vio en su cara decepción.

—Si, salí con una chica y es todo lo que voy a decir.

Fue una respuesta simple que pareció satisfacer a sus amigos, pero Kyle no sabía porque Kenny lo miraba con decepción.

Una vez que se sentaron en una mesa aparte y con Butters lejos de Kenny, Cartman estaba listo para terminar con esta ida y vuelta que tenían esos dos.

—¿Que tomaste de almuerzo Eric? —Butters estaba nervioso por estar con Cartman después de lo que le contó Kenny. Se sentía como saber un secreto a medias. —Si quieres te puedo compartir de mi muffin.

—Déjate de tonterías y dime que le pasa a Kenny. Ha estado encima de mi todo el día. —Cartman giro su mirada a la mesa donde estaban Kenny y los demás y por un momento su mirada burlona se cruzo.—Incluso en la distancia sigue molestando.

—Bueno Eric no se que trama Kenny y aunque hubiera algo ¿que te hace pensar que yo lo sé?

—Porque prácticamente parecen novios pegados de su trasero todo el jodido tiempo. Ahora dime que traen entre manos ustedes dos.

—Dios Eric eso no fue algo amable que decir. —Comento nervioso en su asiento, buscando desesperado una forma de desviar su atención de el pero era imposible.

Cartman no bajaba la mirada.

Soltando un largo suspiro Butters confesó. Después de todo Kenny no le hizo prometer no decir nada. —Sabes que Kenny fue a tu casa el viernes ¿no?

—Me dijo que iba a ir y al final regreso a la tuya cuando noto que no había nadie. Yo no estuve en mi casa unas horas.

—Kenny si llego a tu casa y los encontró a ti a Kyle, con las palabras de Kenny "muy juntos". Después fue a la mía a contarme.

—Esa rata pobre y traidora. ¿Por qué no me lo dijo?

—Tal vez quería que tú le dijeras. Supongo que por eso a estado pegado contigo. Pero al final no le has dicho nada.

—Y no le diré. Menos ahora que veo que está buscando una respuesta con Kahl.

Cartman volvió a buscar a Kenny en la mesa y lo que encontró fue a Kyle mirándolo fijamente por varios segundos. Se dio cuenta de lo que estaban hablando con solo verlo. Sabía que lo negaría todo.

No es como que Kyle supiera que le debía una.

Soltó un largo suspiro mientras sentía que se le estrujaba el corazón. Se sentía estúpido, ni siquiera tenía una razón para sentirse así.

—¿Entones es cierto? ¿Ustedes dos estaban "juntos"?

—Pff no lo digas como si nos hubieran atrapado jodiendo. Teníamos una tarea, la terminamos y solo pasamos un rato juntos, es todo. Kenny exagera las cosas.

Pero por una vez Cartman quería que en efecto las cosas fueran como Kenny las había contado.

Más tarde ese mismo día en su habitación Kyle no sabía porque rayos se sintió tan culpable.

Había un hueco en su estómago como si quisiera vomitar, le picaba las manos y no dejaba de sentirse ansioso.

No era la misma ansiedad que había tenido las últimas semanas, está era diferente. Cómo si en lugar de pensar una y otra vez que nada tenía sentido ahora su mente no dejaba de pensar en…

—Cartman…Ese maldito le dijo algo a Kenny.

¿Qué esperaba que hiciera? Obviamente lo iba a negar todo. Tenían una cuartada con todo ese asunto de Nicols. No es como si le debiera un maldito favor y debía decirle al mundo que eran amigos otra vez. ¿Eran amigos otra vez?

Kyle ahogó un grito en la almohada. No sé había sentido tan confundido con su relación con Cartman desde hace años. Cuando regreso del psiquiátrico siendo todo manso y raro. Haciendo esas tonterías como ser amable con el y tomarle fotografías.

Ahora era la misma historia, de repente lo ve colapsando y lo ayuda a llevar a su abusador a la justicia. Tal vez las cosas no salieron como las planearon pero la intención estaba ahí ¿no?

De alguna extraña forma sabía que lo había ayudado con todo eso por una especie de milagrosa empatía hacia el por tener el mismo historial de abuso pero aún así era raro para el.

Aunque no era la primera vez que se ayudaban entre si. De niños hubo un puñado de ocasiones donde dejaron a lado sus diferencias y se ayudaron o incluso salvaron el uno al otro. No era un caso ajeno.

Entonces ¿Por qué ahora se sentía tan raro?

¿Era porque crecieron? ¿Era por el tiempo sin hablarse? ¿O era porque desde el asunto de las fotografías de Cartman ya no sabía cómo estar con el a solas sin sentir un hueco en el estómago?

Para Cartman lo último que esperaba en el día era recibir un mensaje de Kyle.

Después de la escuela se tiró en su habitación dispuesto a seguir su vida de siempre, aburrido, solo y en una constante frustración. Al menos ahora tenía de que hablar con su terapeuta.

Estaba jugando con su teléfono cuando le llegó un mensaje de Kyle.

°Tenemos que hablar.

Cartman borro la sonrisa estúpida que broto de su cara al ver el mensaje. No podía ilusionarse con algo tan insignificante como eso. Kyle bien podría estar enojado por alguna tontería que lo involucraba.

Habla por ti, yo terminé mis negocios ✓✓

°Déja de ser un idiota, hablo enserio. Puedo ir a tu casa?

De nuevo las abejorros en su estómago y el sudor en sus manos. De verdad no podía ser más patético.

Ven si quieres ✓✓

En cuanto mando el mansaje se levanto de la cama y metió toda su porquería debajo de la cama aunque no era realmente mucha.

Pasaron alrededor de veinte minutos cuando Kyle entro por la puerta de su habitación.

—Hey…

—Hey. —contesto Eric tratando de sonar casual mientras miraba su celular apagado simulando escribir mensajes.

—Tu mamá me dejó pasar.

—No me digas.

Kyle se revolvió incómodo, aún no sabía exactamente a qué había venido, solo sabía que tenía que hablar con el. —¿Puedo sentarme?

Cartman lo miro de arriba a bajo. Entonces comprendió que la incomodidad era mutua. Al menos no era el único.

—Pon tu trasero cómodo Kahl.

Kyle se sentó en la silla de su escritorio. Era raro estar aquí después de lo sucedido. Cómo si ahora que no tenían un fin en común sus mentes tenían tiempo de sentir la fragante incomodidad entre ellos.

—Kenny estuvo muy molesto el día de hoy. ¿Tienes una idea de por qué?

Cartman giro los ojos.—Es Kenny, es raro a veces. Solo ignóralo y se le olvidara. —No podía creer que de todo los temas Kyle viniera a su casa a hablar de Kenny.

—Los chicos ya saben que no estuve en la fiesta.

—Duh eso es obvio, nadie te vio allí.

—Les dije que había salido con una chica. —Kyle no sabía porque estaba tan nervioso al respecto. —Es mi cuartada.

Cartman levanto una ceja hacia el. —Felicidades.

—Como sea, si no sabes porque Kenny está tan raro no importa. Solo no se, ha sido extraño estos días. Después de todo este tiempo tu y yo trabajando juntos y precisamente sobre eso. Además todo se salió un poco de control con la muerte del tipo. Cómo que me a afectado.

Eso despertó si interés. —¿Afectó? ¿cómo?

Kyle se froto las manos en el pantalón antes de responder. —No lo se, supongo que un poco paranoico. Veo cosas donde no las hay. ¿Sabes a qué me refiero?

Cartman podía estar seguro que veía cosas en Kyle que probablemente el jamás sentiría así que si, estuvo de acuerdo. —Es solo el trauma Kahl. No fue algo común. Nada en este maldito pueblo lo es. Deberías hablar de eso con tu terapeuta en lugar de conmigo.

Kyle soltó una risa y por un momento el ambiente cambio. —Si, probablemente. Es un buen consejo. Solo que ha ella no le puedo decir que estuve involucrado en el caso de Nicols.

—Touché… tal vez solo decirle la verdad a medias funcione. Es lo que yo siempre hago con la mía.

Kyle lo miro por lo que se sintió por un largo tiempo, de pronto ya no se sentía nervioso.

—Creo que nunca te dije. Felicidades…por buscar ayuda y eso. Se que no es fácil.

Cartman de verdad no esperaba escuchar eso en su vida. —Gr…gracias. No es la gran cosa, y creo que el mérito ni siquiera es mío tomando en cuenta que me internaron contra mi voluntad.

—Aun así, sigues en terapia. Después de todos estos años. Y creo que te ha ayudado. Estoy muy feliz por ti. Yo…—se paso una mano por la nunca nervioso. —Lamento haber sido un idiota cuando regresaste. Estaba realmente paranoico con el "nuevo tu"

—No te culpo. Después de todo el principio fue extraño. Estaba demasiado dopado con medicamentos para ser yo mismo.

—Pero supongo que al principio fue necesario. Ahora eres más tu que en ese entonces. De verdad me da gusto por ti Cartman.

Una emoción recorrió el pecho de Eric. Sabía que no tenía derecho a sentirse así después de haber tenido es recaída y literalmente matar a golpes a un hombre pero no podía evitarlo. Kyle acababa de decir que estaba feliz por el. Y daría cualquier cosa por volver a tener su reconocimiento así otra vez.

Un rastro de su narcisismo salió a flote y le sonrió a Kyle con una sonrisa engreída. Kyle la miro con renovada emoción y un panal de abejas se instalo en su estómago de nuevo, sus manos sudaron y pudo sentir su cara sonrojarse.

"Mierda" Pensó.

Después de todos estos años de negación y distancia. Después de lo mucho que lo había jodido en la niñez y lo completamos loco y desagradable que era el tipo. Con esa sonrisa era un hecho.

Había estado enamorado del maldito Eric Cartman.

Y no había dónde correr está vez.

La epifanía de su vida por poco lo hace entrar en pánico en esa misma habitación pero hace lo posible por calmarse.

—Oye… ¿tienes un poco de agua? —Se revolvió nervioso.

Si Cartman noto su cambio de actitud lo ignoró por completo.—Claro, iré por algo. ¿Quieres quemar un poco antes de irte? Creo que aún me queda algo de hierba.

—Estas en tratamiento psiquiátrico, no deberías de fumar eso.

—Meh, no es la gran cosa. Solo hace que todo se sienta más fuerte. Deberías intentarlo alguna vez.

—Paso.

Kyle miro como Cartman salía de la habitación y una vez que estuvo solo se permitió tener un pequeño derrumbe.

Se froto ambos brazos mientras hacía una pequeña posición fetal en su silla. Respiraba por la nariz y trataba de contar hasta diez como le dijo su terapeuta.

—Esta bien, tranquilo. No es gran cosa…no significa nada. Solo estás agradecido porque te ayudo con esa mierda. No significa que quieras nada de el. Ni mucho menos que vaya a pasar algo. Así que agarra tus pelotas y termina con esto de una vez.

Kyle estaba dispuesto a salir de la habitación y decirle a Cartman alguna mentira sobre que había olvidado alguna tarea, todo con tal de salir de la situación. Cuando de pronto al levantar la cara vio debajo de la cama una caja.

Tal vez en otra circunstancia lo hubiera dejado pasar. Pero un recuerdo de Cartman vino a su mente.

—Si yo fuera un enfermo mental ¿Dónde guardaría mi caja de tesoros?

Los ojos de Cartman se dirigieron a la cama en el centro de la habitación y comenzó a buscar debajo.

—Debajo de la cama, ¿Enserio?

—Oye, te sorprendería lo que guarda la gente ahí.

¿Cartman guardaba su caja de tesoros debajo de su cama? ¿Era ese su tesoro más preciado?

La curiosidad comenzó a picar en su nuca pero antes de que se acerca o hiciera algo al respecto Cartman regreso.

Scott estaba acostado en su habitación mirando fijamente la cara de ese maldito sapo. Sabía que lo había visto en algún lado. Pero era demasiado sutil.

Una parte de el quería simplemente dejarlo de lado pero estaba convencido que tenía algo que ver con el caso Nicols.

De pronto un recuerdo llego a su cabeza.

—Me tienes que estar jodiendo…

Se levantó de la cama a toda velocidad y corrió por su teléfono celular que estaba en su escritorio. Se sentó en su silla y comenzó a buscar una cuenta en particular en Facebook.

Se desplazo entre todas las fotos que el idiota de Eric Cartman se atrevía a subir a sus redes. Tardo un poco pero al fin lo encontró.

Una fotografía donde sale ese mismo idiota con su grupo de amigos en su camioneta.

En foto salían dos chicos rubios que no reconoció y el maldito Eric Cartman sosteniendo en sus manos las llaves de su camioneta, presumiéndolas. Y ahí colgando estaba el llavero.

La maldita cabeza del sapo.

Kyle al final se quedó un rato. Quemaron un poco de hierba y siguieron hablando de temas irrelevantes en los que estaban demasiado drogados como para ponerles atención.

Fue hasta que Kyle en el calor del momento le confesó a Eric lo raro que se había comportado con los medicamentos cuando regreso. Ambos sabían que no había durado mucho pero aún así sus palabras sonaron en su cabeza.

—No eras tú mismo. Fue extraño.

Después de un rato cuando Kyle se fue Cartman no podía sacar esas palabras de su cabeza y el enorme efecto que probablemente tuvieron para alejarlos todos estos años. Eric no quería volver a alejarse de Kyle otra vez. Estaba decidido a hacer algo al respecto.

En un arrebato tomo todos sus medicamentos y los tiro por el drenaje.

Ahora nada haría que se comportará diferente y alejara a Kyle.