Severus los apareció en su casa.

Hermione estaba acalambrada por el frío y le fallaron las piernas. Severus la sostuvo.

Volvió a ser Hermione nuevamente. Se fue el efecto del multijugos.

Se quedaron viendo por unos segundos.- ¿Puede caminar?

Hermione asintió.- lo que pasó...

.- No se preocupe, sé que fue para que no nos descubrieran.

Hermione se mordió el labio.- Nunca hubiera creido que besaría algún día a mi Profesor de Pociones.

Severus hizo una mueca.- aún no lo soy.

.- Pero lo será. Sería una verdadera lástima que usted no fuera profesor. Yo no sería lo que hoy se de pociones si no fuera...

Severus acortó la distancia y la besó.

Hermione devolvió ese beso con fervor.

Luego se separaron.- perdóneme, no sé que estaba...

Hermione asintió.- Debo irme. Gracias por el diario.

Entró a la red flu y dijo su destino.

Una vez se fue, Severus soltó el aire y trató de tranquilizarse.

Fue muy impulsivo, pero la convivencia con ella y su sinceridad, no lo había sentido desde Lily.

RL/HG

Remus caminaba frente a la chimenea de Grimmauld desde hacia ya una hira que esperaba la llegada de Hermione completamente desquisiado.

Cuando la chimenea se encendió y ella apareció Remus la atrajo en un abrazo.

Huele a ese mago oscuro.

.- Estas bien.

Hermione asintió.- ¿Cómo esta Teddy?

.- Se durmió hace rato. Jugo con Harry y luego Lily los bañó.

.- Debo también ir a dormir.

Remus tomó su mano.- debo volver a la manada.

Hermione frunció el ceño.- ¿porqué?

.- Me lo ha pedido Dumbledore.

.- No. No Remus, no tiene que volver ahí.

.- Debo ir, como dijiste, hay cosas que debemos hacer...

.- Si, pero esto es algo inútil, ¿que quiere Dumbledore? ¿Que te maten?

.- Hermione...

.- Nooo, Remus, debemos unirnos para reunir todas las almas de ese loco. No hay nada de lo que te vayas a enterar con la Manada que yo no sepa.

.- Dumbledore quiere que le me entere de los planes de Greyback.

.- Remus, no lo hagas, por favor. No lo hagas, Greyback...

.- ¿Que es lo que sabes?

Hermione lo abrazó.- Greyback y los demás te atacarán. Cuando los Potter murieron tu...estabas en San Mungo.

Remus la observó.

.- Greyback nunca se tragó que tu... Te pudieras voltear a la oscuridad. Quédate Remus.

Él acarició sus mejillas y se acercó a ella.- ¿Te preocupas por mi?

Hermione sintió algo en el estómago, su voz era gruesa y sus ojos se habían oscurecido un poco.

.- Claro que me preocupo.

.- ¿Porqué?, ¿porque soy conocido o porque me quieres?

.- Remus, yo te aprecio.

.- Eso no es lo que pregunté.

.- Yo...te quiero, por supuesto.

Remus la atrajo de la cintura y le plantó un beso apasionado y lleno de promesas desesperadas.

.- Remus...

.- Ven.- tomó su mano y ambos entraron a la chimenea con rumbo a la casa de Remus.

Cuando aparecieron ahí Remus la cargó y ambos entraron en una habitación.

Él la giró y volvió a reclamar sus labios.

.- Remus, no...esto no podemos...

.- Podemos.

Hermione se separó.- ¿no entiendes? Si pasa esto...Teddy no existirá.

.- Hermione, Moony y yo te queremos, no sé como el yo del futuro se negó a estar contigo. Naciste para mi.

Ella lo miró extrañada.

.- Somos uno, tu y yo.