Well, well… Aquí estoy nuevamente para un OS de cumpleaños exprés, esta vez teniendo de protagonista a Ren Hazuki, la hermosa presidenta del consejo estudiantil de la generación de Superstar, que casualmente es la única de mis favoritas de generación de la que no había escrito nada todavía que la tuviese de protagonista. Escribí para Nico, escribí para Dia, y escribí para Kasumi. Definitivamente faltaba Ren. Este OS originalmente iba a hacerlo en diciembre, queriendo hacer algo diferente con este ship que verán a continuación, pero por Ren se los traigo ahora y un poquito a las prisas, pero con el cariño por delante, eso sí. Love Live no me pertenece.
Felicitaciones un poco galaxy para la presidenta
Ren estaba en su habitación, durmiendo plácidamente después de un día arduo de trabajo que se había recompensado con una deliciosa cena y un buen baño, y claro está, una noche de sueño como pocas que recordase. Se sentía bastante bien como estaba, y pese a que más tarde tocaba ir a clases y hacer frente a otro arduo día de trabajo, todavía deseaba aprovechar la oportunidad que su cama le ofrecía.
Pero de pronto siente que algo le pica la mejilla. Trata de que eso no la moleste, pero lo que sea que la picase no la dejaba en paz, por lo que termina abriendo los ojos para ver de quién se trataba, un poco fastidiada por ver su plácido sueño interrumpido. Sumire estaba allí, con su uniforme escolar y con una sonrisa angelical que Ren por un momento desearía ver muchas veces más cada vez que despierte. El fastidio había sido repentinamente sustituido por la alegría de ver aquellos hermosos y brillantes ojos verdes.
─ ¿Cómo está mi presi galaxy? ─ dice la rubia en un tono que Ren no sabía si era cariñoso o ligeramente burlón, en buena parte porque todavía no despertaba del todo ─ Feliz cumpleaños, Ren. Aquí tienes tu primer regalo.
Si la figura de Sumire a su lado no había logrado despertar del todo a Ren, definitivamente sí lo hizo el contacto que hubo entre los labios de ambas. Era definitivamente otra cosa con la que a Ren le gustaría definitivamente despertar todos los días. Sumire corta el beso que ella misma había dado y se levanta de la cama, todo manteniendo su sonrisa.
─ Parece que estás más espabilada esta vez.
─ S-sí… ─ Ren se lleva un par de dedos a los labios, y una sonrisa se dibuja en estos ─ Muchas gracias por tomarte la molestia de venir, Sumire-san…
─ No pasa nada. Alguna vez tendría que venir a casa de mi novia para que vayamos juntas a la escuela.
Ren amplía todavía más su sonrisa. Era una bendición contar con Sumire de esa manera. Justo se empieza a levantar de la cama cuando aparece Saya con el cambio de ropa en sus manos.
─ ¿Ya ha despertado, Ren-sama? ─ Saya abre los ojos con sorpresa al ver a Sumire en la habitación ─ ¿Y usted no estaba en el salón?
─ Lo que pasa es que no quería esperar mucho por Ren ─ dice Sumire con tono casual ─. Y por cierto, ¿acaso usted suele vestir a Ren?
─ No realmente ─ Saya se sonroja avergonzada ─. Simplemente le traigo la ropa limpia que necesita, y después de eso me retiro para que Ren-sama se pueda vestir tranquilamente.
─ Ah, ya veo ─ Sumire se encarga de recibir la ropa de Ren ─. Es usted muy atenta, Saya-san, y menos mal que no se encarga de vestir y desvestir a Ren, pues me pondría un poco celosa.
─ ¡Sumire-san! ─ Ren se avergüenza, a lo que Sumire y Saya ríen un poco ─ Mou, eso no es gracioso.
─ Lo siento, lo siento. Vamos, que tienes que cambiarte para que podamos ir juntas a clases ─ Sumire le pasa la ropa a Ren ─. Mi siguiente regalo de cumpleaños para la honorable presidenta del consejo estudiantil será mi compañía, y hay unos cuantos lugares que tengo en mente para que tengamos una cita en la que sin duda te divertirás.
─ ¿C-cita?
─ Eso suena perfecto, Sumire-sama ─ dice Saya muy contenta ─. Una tarde completamente diferente y llena de diversión al lado de su pareja es sin duda el mejor regalo que Ren-sama podría tener.
Sumire y Saya se sonríen mutuamente a modo de complicidad, mientras que Ren suspira esperando a que su sirvienta y su novia saliesen para proceder a cambiarse. Pero antes de hacer eso Sumire abraza a Ren y la besa con mucho cariño.
─ Mou, y con todo y eso no puedo dejar de quererte, Sumire-san ─ Ren corresponde el abrazo de Sumire ─. Realmente quiero dar lo mejor de mí para ser una novia igual de buena y atenta como tú. Verte así me inspira a serlo.
─ Sabes que lo hago solamente por ti, Ren ─ Sumire estrecha más su abrazo, y aunque Saya las estaba mirando, de pronto empieza a sonreír de forma malvada ─. "Jujuju. Perfecto. Así Ren jamás sospechará que las demás le están preparando una fiesta en el salón del club".
─ Creo que debemos retirarnos, Sumire-sama ─ Saya con mucho pesar corta el momento ─. Permitamos que Ren-sama se cambie.
─ Muy bien ─ Sumire le da un último beso a Ren y se va con Saya ─. Te espero abajo.
─ D-de acuerdo ─ Ren estaba sonrojada, pero era notorio que le gustaba el trato que le había dado la rubia ─. Realmente soy afortunada de tener a Sumire-san a mi lado. Me pregunto si las demás se acordarán de mi cumpleaños ─ dice para sí misma mientras se quitaba el pijama.
Así empezaba el cumpleaños de aquella presidenta algo tímida pero de buen corazón, siendo despertada por la belleza galaxy. Había sido un muy buen comienzo al parecer de la pelinegra.
Fin
¿Alguien notó la referencia a Death Note? ¿Nadie? Bueno, ya habiendo pasado mi delirio, espero que les haya gustado este OS, más allá de que me he desacostumbrado mucho de escribir fics con menos de dos mil palabras. La próxima vez (cuando la haya) vuelvo las cosas a la normalidad y hago un SumirexKeke y RenxSaya (es lo que hay, aunque tampoco es que Ren salga perdiendo realmente).
Hasta otra
