Hola gente. Adivinen quien no está muerto. Mejor no voy a entrar en detalles y les dejo esta nueva historia. Pudiera continuar con algo de lo que esta espera, pero opte por ir algo fresco, que no evidenciara tanto todo el tiempo que tengo sin escribir. Sin más que decir, aquí lo dejo.
Highschool CxC
No me pertenece Naruto, Highschool DxD ni ninguno de los personajes y elementos de otras fuentes presentes.
Capítulo 1
[…]
En la sala de un hogar cualquiera, una pequeña de cabellos color chicle y ojos jades veía con llorosamente a dos adultos que estaban alistando sus cosas para salir.
-¿En serio tienen que irse?-pregunto la niña. Ya había hecho la pregunta varias veces, pero eso no impidió que le volvieran contestar.
-Temo que si mi retoño. Nos encomendaron una misión-le contesto el hombre, quien por lejos era el más extravagante presente. Con un peinado en forma estrella de color borbón.
-¿Por qué? ¿No se supone que eres el jefe?
-Si lo soy y por eso mismo tengo asumir esta responsabilidad. Es un encargo muy importante y solo yo puedo lidiar con él.
-…. ¿Y tú también tienes que ir?
-Por supuesto. Soy su compañera y tengo que ir a apoyarlo-respondió la mujer presente. Una mujer cabello rubio con peinado y expresión afilados.
-…En ese caso yo también quiero ir. ¿También soy parte de su equipo?
-Jeje. Sí que lo eres hija mía-dijo la mujer al tiempo que acariciaba la cabeza de la pequeña. –Sin embargo temo que todavía eres muy joven para unírtenos.
-Eso no es cierto. Hay otros como yo que ya están haciendo misiones.
-Cierto, pero yo estoy actualmente persiguiendo que eso se acabe. No es adecuado que alguien de tu edad se exponga a semejante peligro-respondió el hombre. –Cuando mucho, debería empezar su entrenamiento.
-¿Entonces porque no he empezado con el mío?
-Oh bueno-dijo el adulto al tiempo que rascaba su mejilla, entendiendo su error.
-¡Serás idiota!-le respondió su mujer dándole un coscorrón. –Lo siento, retoño. Hemos estado demasiado ocupados. Cuando volvamos cambiaremos eso, ¿de acuerdo?
-¿Promesa?
-Absolutamente-dijo el hombre con el puño en el pecho. –Es más, vamos a hacerlo oficial-dijo para entonces dirigirse un momento a una de las habitaciones del apartamento.
-¿Qué esta…?
-Solo espera un momento-dijo la mujer con una sonrisa.
-Aquí esta-dijo el padre regresando con una pequeña caja en sus manos. La abrió y de ella saco un delicado collar con una flor de cerezo. –Este es un pequeño accesorio que mande hacer para los miembros de nuestro. Somos solo nosotros tres, pero eso no significa que no podamos tener algo especial.
-Wow. Es hermoso-dijo la niña apreciando el accesorio rosa.
-Y ahora lo será aún más….-dijo el hombre agachándose para ponérselo a la pequeña.
-Así es. Tu padre a veces puede ser un poco idiota, pero no puedo criticar su gusto-comento la mujer mostrando su propio collar.
-¡Genial! ¡Sí que parecemos un equipo!-dijo la pequeña saltando de alegría por el obsequio. Se mostró bastante emocionado, pero se detuvo luego de unos momentos, al notar que la caja donde venía su collar no estaba vacía. Una cadena sobresalía. -¿Eh? ¿Hay un cuarto?
-¡Oh!-expreso el hombre poniéndose nervioso de repente. La mujer en cambio, giro la mirada visiblemente incomodada. –Bueno…. Si hay un cuarto, pero…..-dijo mientras veía a los lados, como si buscara la respuesta a su alrededor.
-Fue una adquisición adelantada…. Comimos prisa y pedimos para alguien que no está aquí-agrego la mujer con un tono apagado.
-¿Eh?-expreso la niña, extrañada por la actitud de sus padres.
-Esto es algo que podemos discutir luego. Entre tanto, ¿por qué no te lo quedas? Si hay alguien que debe tener este otro collar, esa eres tu-dijo el hombre entregando la caja a la niña. –Llegara el momento en que puedas dárselo a alguien especial.
-¿Alguien especial? ¿Cómo quién?
-Tú lo sabrás cuando llegue el momento. Por ejemplo esta ese chico energético que siempre anda de naranja. ¿Él te gusta, no?
-¡Es solo un amigo!-reclamo la niña sonrojada.
-Pues entonces asegúrate de mantenerlo cerca, retoño. No hay nada más importante en este mundo que mantener cerca a aquellos que confías.
-….
-Ahora si nos disculpas, tenemos que irnos. De lo contrario perderemos nuestro vuelo.
-Espera. ¿Me van a dejar sola?-dijo la niña viendo como sus padres tomaban sus maletas.
-Solo será un momento. Tu madrina llegara cualquier momento. Ella te cuidara en nuestra ausencia.
-¿Y si tarda mucho?
-No te preocupes, retoño-dijo la mujer agachándose frente a su hija. –Aunque nosotros no estemos, tú siempre vas a tener a alguien cuidándote. El té protege desde el lugar donde está.
-¿Quién es esa persona?
-Definitivamente hablaremos de es cuando regresemos. Es algo que debes saber. Ahora se un chica y portante bien.
-Sí. Eso hare.
-Por eso eres la mejor hija.
-Cuídate, retoño. Regresaremos antes de que te des cuenta-dijo el padre, ya en el umbral de la puerta.
-Sí. Nos aseguraremos de completar la misión lo más rápido posible.
-Que les vaya bien. Los estaré esperando.
[….]
-Sakura.
-….
-Sakura.
-…..
-Tierra a Sakura.
-… ¿Eh?-expreso la joven, que llevaba un nombre bastante apropiado, al despertar de su letargo. -¿Qué sucede?
-La ciudad a donde vamos se llama Kuoh, ¿no?
-Sí.
-Entonces, creo que ya llegamos. La voz en los parlantes dice que estamos por llegar a esa estación.
-¿En serio? ¿Cuánto tiempo he estado dormida?
-Unas horas. Aunque no las suficientes para sacarte ese cansancio que tienes encima.
-Si…..No era necesario señalar eso-la pelirrosa tenía unas terribles ojeras en su rostro. Se notaba el cansancio en su semblante y este no se debía solamente al hecho de que había dormido sentada en una mala posición.
-¿Segura que no quieres que busquemos un sitio donde descansar?
-Estoy bien. Quiero llegar a mi destino cuanto antes.
-Urgh. Bien. Pero al menos consigamos algo para desayunar. Debes estar hambrienta.
-No. Vayamos primero a…..-un gruñido de su esto
*Grrrrr
Lastimosamente para la joven, un gruñido de su estómago índico que en efecto su cuerpo pedía comida.
-Anoche solo comiste los chocolates que traía conmigo. Sea lo que sea que planees, no saldrá bien si te desmayas en el proceso.
-Pero no ya tengo dinero. Perdí el bolso con mis cosas en el bosque y use lo que me quedaba para los boletos de tren.
-Tranquila. Yo me encargo de ello.
-…De acuerdo.
Había puntos altos y bajos en la vida, Sakura en este caso estaba segura de que se encontraba en el sótano de la suya. Era simplemente patético que ella, que era una adulta bajo ciertos estatutos, estuviera actualmente dependiendo de alguien que podía pasar por un estudiante de primaria. Había entrenado y entrenado mucho para ser la mejor y ahora parecía todo eso no tenía ningún sentido.
Bajo del tren porque no le quedaba de otra. Si terminaba en otra estación, definitivamente no sabría qué hacer con existencia. Aunque había ganado cierta libertad debía a unos afortunados eventos, no sabía cuándo se le acabaría la suerte.
Luego de conseguir algo de comida en una tienda cercana a la estación, se dieron a la tarea de pedir indicaciones para llegar a su destino. Si bien Kuoh no era una ciudad particularmente grande, no tenían la menor idea de la geografía del lugar. No fue hasta luego de horas dando vueltas de un lado a otro que el par logro llegar a donde iban.
-¿Una escuela? ¿Este es el lugar seguro al que querías venir?
-Sí. Aquí está la persona que estoy buscando. En la academia Kuoh-respondió Sakura mientras apreciaba a detalle el edificio frente ella. Era algo completamente distinto a lo que ella estaba acostumbrada. Era elegante y soberbio. Junto con los estudiantes, que vestían un uniforme bastante refinado frente al estándar japonés, hacían que ella dudara si este era el sitio correcto. -En verdad no entiendo como él fue a dar a un sitio así.
-No sé cómo es ese sujeto para entender tu comentario. ¿Por qué no me iluminas para saberlo y así saber a quién debemos encontrar?
-Espera. No podemos simplemente entrar y buscarlo. Solo dejan pasar a estudiantes y miembros del personal.
-¿Y no nos podemos colar? Somos ninja, ¿recuerdas?
-No quiero causar ningún revuelo. Esperemos a la hora de salida y allí lo buscaremos.
-¿Y eso cuando es?
-Cerca del atardecer.
-¡Faltan horas para eso! ¿No dijiste que tenías prisa en llegar aquí?
-Así es, pero lo pensé mejor y hay cosas que debemos dejar en claro antes de reunirnos con otras personas.
-Sé que tengo que mantener la boca cerrada. Tengo presente que mi naturaleza es un tema bastante sensible.
-Bien, pero igual quiero que afinemos algunos otros detalles. No quiero ningún error.
[….]
Con la puesta de sol y una campanada, quedo claro que las clases en la academia Kuoh habían llegado a su fin. Al poco tiempo una marea de estudiantes salió del edificio principal y la labor de búsqueda de Sakura y su acompañante inicio. Ellos aguardaban en la reja perimetral, desde donde observaban a todos los que pasaban.
-Rayos. ¿Dónde está?-dijo la pelirrosa viendo a todos los varones presentes y no encontrando al indicado.
-Esto será difícil, Sakura. Dijiste que buscáramos al sujeto con cabello pincho y cara de idiota que resaltara en la multitud, pero…... Estoy viendo demasiados candidatos.
-¡Y rubio! Te dije que su cabello rubio que era su rasgos más característicos-reclamo la chica.
-Pues solo he visto a una chica con ese rasgo. No veo a nadie más que sea rubio.
-Bueno…..es posible que el este disfrazado, pero… no creo que este siendo tan extremo…..En verdad no creo que lo haga-dijo la chica no muy segura de su afirmación.
-¿Preguntamos por él?
-Eso sería lo adecuado.
[…..]
-¡Bastardo traidor!
-¡Rata rastrera!
-¡Vete al infierno!
-¡Muérete de una vez, hijo de puta!
Esos y un montón de otros insultos y groserías eran proferidos por un estudiante calvo y otro con lentes a un chico de cabello castaño que estaba junto con ellos. El intercambio también incluía golpes y patadas hacia el mencionado, que contra toda lógica, no se defendía de ellas, sino que simplemente la resistía mientras mantenía una sonrisa burlesca. No era una escena a la que alguien normal se acercaría, pero de todas formas….
-¿Por qué siquiera nos molestamos en preguntarle a esos sujetos? Es un hecho que nos dirán la misma respuesta.
-Es muy probable, pero tal vez ellos si nos digan algo útil, dado que están concentrados en ese otro sujeto-respondió Sakura. La verdad es que ella se sentía incomoda acercándose al trio en cuestión, pero se le estaba agotando la paciencia y quería saber ocurría con la persona que buscada. Cada vez que preguntaba por ella, ocurría el mismo evento. –Disculpen…-dijo la pelirrosa gentilmente para ver si llamaban la atención de los presentes.
De forma casi automática, el calvo y el de lentes cesaron su ataque y se dirigieron a la joven, que sintió la necesidad de ponerse a la defensiva.
-Oh dichoso yo por ser requerido por una preciosidad como tú. ¿En qué puedo ayudarle este servidor?-dijo el chico de lentes a muy escasos centímetros de la pelirrosa.
-No le haga caso. Yo soy quien puede asistirle. Solicíteme lo que quiera y yo lo hare-dijo el calvo, con una sonrisa nada agradable.
-Bueno…. Estoy buscando a alguien que creo que estudia aquí. Su nombre es Uzumaki Naruto.
-¡Noooo! ¡No ese sujeto!-gritaron al unísono ambos sujetos ante la mención de ese nombre que parecía estar maldito o algo por el estilo. Sakura había estado preguntando a otros estudiantes por el mencionado y todos reaccionaban mal. Las chicas se mordían los labios y se alejaban con aires de derrota, los chicos en cambio reaccionaban con furia y enojo. La pelirrosa en serio se estaba preguntando qué había hecho ese idiota.
-¿Qué sucede? ¿Qué pasaba con Naruto?-pregunto la chica.
-¡Que es el enemigo de los mortales como nosotros! No se conforma con ser el novio de una de la Himejima-sama y muy amigo de Koneko-chan, sino que ahora nos viene a presumir una hermosa amiga de la infancia-dijo el calvo señalando a la ojiverde. -¿Eso eres no?
-…..Podríamos decir que sí, pero…-respondió Sakura de forma cuasi-automática, ya que su atención había quedado en la información brindada.
-¡Urgh! ¡Se veía venir! ¡No me digas que escapaste de tu hogar con la intención de seguirlo! ¡No llevas ningún uniforme así que es una gran posibilidad-teorizo el chico con lentes
-¿¡Que pasa con estos sujetos!? ¿¡Son adivinos o que!? –pensó la pelirrosa mostrándose nerviosa. –No. Eso no es lo que….
-¡No importa! ¡Esto es demasiado!-dijo el chico con las manos en cabeza, mostrándose desesperado. – ¡La vida está siendo demasiado cruel con nosotros!
-¡Sí! ¡No está contenta con darle chicas hermosas al idiota de Hyoudou sino que le da a Uzumaki otros escenarios de ensueño! ¡Esto no es justo!
-¡Necesito rechazar esta horrible realidad. Vámonos a ya a mi casa a ver eroge donde tipos como nosotros somos los ganadores.
-Robaste mi pensamiento, amigo.
Con eso dicho, el par dejo la escena dejando a los presentes con expresiones de desconcierto y desagrado.
-….
-….
-Lo siento, pero tengo que decirlo. En lo que a mi concierne, la humanidad ha perdido un montón de puntos este día.
-Temo que tengo que concordar contigo-dijo Sakura sintiendo que no quería reunirse con ese par otra vez en su vida.
-No hagan caso a esos idiotas-tras estar el fondo todo ese momento, el otro estudiante presente mostro signos de ser otra cosa aparte de un saco de boxeo. –Es cierto que Naruto es objeto de odio de muchos, incluido yo, pero no como si fuera mala persona-dijo el castaño, bajando la voz cuando la primera parte de su opinión.
-Ok. Entonces asumiré que tú le conoces.
-Sí. Somos compañeros de hecho.
-En ese caso sería posible que nos reunieras. Vine de muy lejos y necesito hablar con él.
-No tengo ningún problema, pero….-dijo el chico mostrándose intranquilo. –No sé quién eres y no sé si deba.
-Oh. Disculpa mis modales. Mi nombre es Haruno Sakura. Dale ese nombre y él sabrá quién le está buscando.
-¿Haruno?-Tal pregunto fue hecha por una joven de largo cabello negro, cuya expresión fría estaba acompañada por unas gafas, que entro en escena.
-Shinra-san-dijo el castaño reconociendo a la recién llegada. Ella era vicepresidenta del concejo escolar y en vista de que no llevaba ninguna maleta o bolso consigo, parecía que había venido por asuntos oficiales. -¿Qué hace aquí?
-Me informaron que había un extraño preguntando por uno de los estudiantes, así que vine a constatarlo. Sin embargo, me parece que el asunto es más trascendental-dijo la pelinegra viendo fijamente a Sakura. –Ahora confírmame si escuche bien. Te apellidas Haruno.
-Si-respondió Sakura entendiendo que su identidad ya estaba expuesta.
-Dudo que sea una casualidad que alguien que se identifique con tal apellido este buscando a Uzumaki. Así que respóndeme, ¿vienes del lugar que creo que vienes?
-Sí, pero tengo que aclarar que no vengo con ninguna intención hostil. Solo estoy buscando a mi amigo. Soy…. o mejor dicho fui su compañera de equipo.
-Eso lo veremos. Hyodou podría ir por tu señora.
-¿Bushou? ¿Eso quiere que tu…..?
-Sí. Ahora por favor ve. Este es un tema que también le concierne a ella-dijo la chica de lentes, que estaba en una posición bastante ofensiva.
-Cielos, Naruto. ¿Dónde demonios te metiste?-pensó la pelirrosa lamentando su idea de buscarlo.
[…...]
Tras ser retenidos un rato por la vicepresidenta, la Haruno y su acompañante fueron llevados a un edificio que se encontraba en la parte del campus de la academia. Este era más pequeño y se veía un poco más descuidado que el principal, pero en líneas generales mantenía el mismo estilo. Fueron escoltados por un joven rubio, con aires de chico guapo, y una pequeña chica peliblanca, que tenía una expresión muy seria para su tamaño. No parecían ser ninguna amenaza, pero Sakura opto por seguir las indicaciones de los presentes, a razón de que sentía que había algo raro con ellos y no podía subestimarlos.
Su destino final fue una sala en el primer piso, donde los esperaba una joven pelirroja que estaba sentada tras un escritorio. Junto a ella se encontraba el joven castaño de hacer un rato, una chica rubia que tenía todas las pintas de ser extranjera y una chica de cabello negro que….. Parecía que no era una buena idea buscar una pelea con ella. Aunque tenía una expresión sonriente, emanaba un aura asesina que era asfixiante.
-Saludos, Haruno-san. Déjame darte la bienvenida a la Academia Kuoh. Ahora sin mayor preámbulo, ¿puedo preguntarte que asuntos tienes aquí?-dijo la pelirroja con un tono que indicaba que ella era la jefa en el lugar.
-Me parece que intenciones ya fueron entendidas-dijo Sakura eligiendo mostrar algo de carácter. –Vine buscando a Uzumaki Naruto.
-En nombre de Konoha, supongo.
-No. Vine bajo cuenta propia.
-¿Qué pruebas tienes de eso?
-No unas que ustedes puedan entender. Para empezar, no sé si quiera con quien estoy tratando.
-¿Dices que no sabes que somos?-pregunto la pelirroja con perplejidad.
-Solo puedo asumir que son parte alguna organización extranjera o algo así. Solo vine a este bajo el conocimiento de que aquí se encontraba mi amigo. No sé nada más-dijo Sakura de forma sincera. Había al menos tres personas en la sala que no parecían japoneses, así que su suposición podía ser una realidad.
-Hmmmm. Bien en ese caso, me parece que lo mejor es que el sujeto de este dilema haga presencia-dijo la pelirroja antes de poner su mano en la oreja, donde se manifestó un pequeño círculo rojizo.
-¿Eh?-expreso Sakura intrigada por ese fenómeno.
-Naruto-kun, ¿puedes venir a la sala del club un momento? Te necesito para un asunto-dijo la pelirroja antes de hacer desaparecer el círculo. –En unos momentos, se aclarara la situación.
La sala entonces se sumió en un silencio sepulcral. Nadie decía nada, pero estaba la presión que ejercía la pelinegra presente, que en ningún momento corto su animosidad.
Luego de unos minutos, la puerta principal se abrió y por allí entro el chico del conflicto. Un joven rubio de ojos azules, tez algo bronceada, marcas faciales similares a bigotes y cara de idiota. Esta última no era literal, pero dado que él no se enteraba de la situación, entro mostrando ninguna preocupación.
-¿Qué ocurre, Buchou? ¿Hay alguna misión para nosotros? ¿Un Demonio Vagabundo? Si es así yo puedo encargarme yo solo-dijo el chico entrando a la chica toda prisa, sin percibir en primera instancia el clima presente.
-Naruto, te llame porque una persona vino preguntando por ti.
-Y ese quien será…-dijo el rubio volviendo su atención sobre los presentes en la habitación. No tardó mucho en reparar en el punto rosa.
-Es esta chica llamada…
-¡Sakura-chan!-dijo el chico saltando de una sobre la mencionada, para darle un abrazo.
-Hola, Naruto. Es bueno verte de nuevo-dijo la pelirrosa que paso a estar en el aire, habiendo sido levantada por el joven.
-¿Qué haces aquí? ¿Cómo me encontraste?
-¿Recuerdas la foto que me enviaste diciendo que habías encontrado un lugar donde quedarte? Bueno, tras buscar mucho en internet, encontré otras personas usando un uniforme como el tuyo y con eso pude determinar en qué academia te encontrabas. No fue fácil. El uniforme femenino es único. El masculino no tanto.
-No esperaba menos de ti, Sakura-chan. Tú eras la lista del equipo.
-Cof, cof-expreso la pelirroja llamando la atención del par de Konoha. –Disculpen que interrumpa su reunión, pero….-dijo señalando con temor la tormenta que tenía a su lado. No era una exageración, la pelinegra presente estaba empezando a echar chispas.
Con ese descubrimiento Naruto se apresuró en soltar a su compañera y alejarse unos pasos ella. Sakura no se quejó. Había llegado a la conclusión que esa chica era Himejima, la persona que mencionado que era novia de Naruto. Le carcomía saber cómo había sucedido, pero opto por hacer lo sensato mantener las demostraciones de afecto al mínimo con ella presente. Tenía la presunción que ella era tan posesiva como otra chica que conocía, sino es que peor.
-Ahora respondiendo a tu otra pregunta y la que está intrigando al resto de los presentes. Vine porque te estaba buscando. Necesito que me ayudes a ocultarme.
-¿¡Ocultarte!?-dijo el chico sobresaltado por la declaración. -¿Por qué? ¿Alguien te persigue?
-Sí. Temo que esa es la situación.
-¿Pero porque yo? ¿Acaso los de la aldea no pueden protegerte?
-…
-A menos que….
-….
-Sakura, no me digas que….
-Sí. Actualmente es de ellos que estoy huyendo.
-Eso es ridículo-dijo el chico casi estupefacto. -Tú eres la joya de la aldea. No hay forma que ellos te estén buscando como una criminal.
-La cuestión realmente no hay llegado a ese punto, pero temo que pronto será el caso. Te lo explicaría a detalle, pero no sé si es adecuado decirlo en este lugar-dijo Sakura viendo a los presentes.
-Oh no te preocupes. Ellos son de confianza.
-Aun así. Es información delicada que no debería ser dicha a civiles.
-Estamos bastante al tanto de lado oculto del mundo humano si es lo que te preocupa-comento la pelirroja. –No estamos involucrados en los asuntos shinobi, pero formamos parte del conjunto japonés en una posición completamente neutral. Sea lo que sea que vayas a decir, no es algo que nos vayamos a plantear usar.
-Realmente no sé si pueda confiar en su palabra, pero no creo que de todas formas vayan a permitir que tenga una conversación privada con Naruto así que ni modo-dijo la Haruno con un suspiro. –Esto es lo que paso….
[….]
-Fue con esa misión que decidí que debía investigar a Raíz a como dé lugar. No era una labor sencilla, dado que era básicamente buscar un secreto dentro un secreto, pero me plantee en encontrar la verdad sobre lo que le paso a mis padres-dijo Sakura mientras continuaba con la séptima parte de su relato. Ya todo el mundo se había acomodado en las adyacencias de la habitación y el ánimo general era más relajado.
-¿Lograste hacerlo?-pregunto Naruto, quien guardo silencio la mayoría del rato.
-En lo absoluto. Raíz es una organización más compleja de lo que creí. Aunque di con una parte de la información que tienen guardada, no logre dar con lo que realmente buscaba. Antes de que lo hiciera, me vi acorralada por sus efectivos… Apenas si logre evadirlos. Tienen gente muy fuerte con ellos.
-Wow. Eso ha sido…. Interesante, supongo. Tengo claro que los humanos tienen muchos conflictos internos, pero no creí que hubiera tantas tramas y conspiraciones en una sola organización-comento la pelirroja.
-Esa es la terrible realidad. Danzo no ha logrado hacerse con el puesto de Hokage, pero sí que se ha encargado de atar hilos a todo asunto importante de esta nación y otros lugares que le rodean. No le importa usar a otros como sus herramientas y elimina a todo aquel que le molesta-dijo la Haruno con especial tristeza.
-Vaya, Sakura. No sabía que estabas enfrentando todo eso tu sola-dijo Naruto con una expresión de pesar y molestia, que se evidenciaba en como apretaba sus puños. -¿Por qué no le pediste ayuda a los otros? ¡El Teme pudo asistirte!
-No quería poner en peligro a otros. Aunque pude haberle dicho a Tsunade, temí que Danzo lo descubriera mediante sus Anbu e hiciera algo que perjudicara a todos aún más.
-…..Entiendo-dijo el chico comprendiendo el sentimiento. Tampoco le hubiera gustado poner el peligro a otros.
-Voy a necesitar una aclaratoria. Dices que estas en peligro porque ese Danzo te persigue, pero básicamente tú no has hecho nada contra Konoha. ¿Por qué entonces tienes que huir de ella?-pregunto la pelirroja.
-Danzo no descansara hasta lidiar conmigo y no se limitara a mandar asesinos a por mí. También se encargara de hacer que otras aldeas ninja me persigan, haciéndoles saber que conozco información secreta de ellos. Hay cosas que también comprometen a Konoha, por lo que ellos me entregaran si eso previene un conflicto.
-Hombre. Eso apesta-comento el castaño presente. Había intentado mantener silencio, pero comento algo que era el sentimiento general de todos los presentes.
-Tenía claro que estaba metiéndome en un gran meollo, pero no creí que me superaría de forma tan abrumadora… Tenía un plan de escape para el peor escenario, pero mi último encuentro con los de Raíz hizo que perdiera los medios que tenía para llevarlo a cabo. Vine contigo porque no sabía a quién más acudir.
-Hiciste bien, Sakura-chan. Cuando deje la aldea te dije que aunque me fuera podías contar conmigo para cualquier cosa-dijo el rubio el enseñando el pulgar alzado.
-Gracias, Naruto.
-No es que quiera ser aguafiestas, pero me parece que este es un asunto un poco más complicado de lo que creía- intervino la pelirroja. –Si bien no quiero impedir que Naruto te asista, temo su intervención lo involucre en el asunto y con ello, a todos nosotros. Es un gran riesgo.
-Sí. Tenía presente que podrían rechazarme por esa razón. No se preocupen, si soy una molestia, solo me retirare-dijo Sakura con un suspiro de derrota.
-Espera, Sakura. Eso no es lo que Buchou quería decir.
-Así es. Antes que nada, debo presentarme apropiadamente-dijo la pelirroja poniéndose de pie. –Mi nombre Rias Gremory. Heredera del clan Gremory. Una de las encargadas de la academia Kuoh y la maestra de Naruto.
-…. ¿Maestra de Naruto? ¿Él es su discípulo?-pregunto la Haruno desconcertada por la premisa.
-No. Es más bien una relación maestro-sirviente…. No es tipo de relación en particular antes de que lo pienses.
-No estoy siguiéndole.
-Esto te pondrá al corriente-dijo la Gremory antes de que su espalda saliera un par de alas de murciélago. –Yo soy una Demonio-dijo al tiempo que el resto de los presentes revelaba sus propias alas. Incluido Naruto. – Tal y como los demás que acompañan.
-¿¡D-demonios!?-dijo Sakura sobresaltada.
-¿Es la primera vez que vez uno?
-S-sí. Tengo algunos conocimientos sobre los Yokai, pero no conozco mucho de lo referente al lado occidental. Los shinobis nos centramos en los asuntos humanos.
-En ese caso toca la explicación larga….
[…]
-Como consecuencia de ese conflicto, los Demonios reclutan humanos y otras criaturas en un grupo que denominamos Sequito. Todos los presentes son Siervos míos que se han unido a mí por una u otras circunstancias-siguió explicando la Gremory, al tiempo que sacaba de su escritorio una caja alargada. –Lo hacemos mediante esto. Las Evil Piece. Con este artefacto es posiblemente reencarnar a un ser en un Demonio.
-Wow-expreso la Haruno, tras haber oído toda la historia sobre las tres facciones y la guerra en la que se habían involucrado. No era como si los shinobi no estuvieran involucrados en conflictos importantes, pero lo que le habían dicho estaba en otro nivel.
-Con eso dicho, aquí pongo mi propuesta. Convierte en mi sirviente y consigue la protección de la casa Gremory. En cualquier escenario, acogerte significa dejar nuestra neutralidad ante los actores involucrados, pero es más fácil negociar una salida si formas parte de una casa demoniaca.
-Esa… Esa es un propuesta fuerte-dijo la Haruno procesando toda la información. –Aunque supongo que solo con algo como eso Naruto podría considerar establecerse tan tranquilamente en una ciudad. Antes de que me mandara esa foto, pensé que haría algo como ocultarse en las montañas o abandonar el país.
-En realidad quería quedarme en Kioto, pero diversas razones lo hacían imposible. Afortunadamente me encontré con Buchou y ella me ofreció una oportunidad que no pude rechazar-explico el rubio.
-Bueno, no es como si estuviéramos en una situación que brinda muchas opciones.
-Eso es cierto, pero te garantizo que esta es la mejor. A pesar de lo que dicen de los Demonios, Buchou es muy amable y considerara con nosotros. Vas a encontrar que ella es más leal que cualquiera de los que están en la aldea.
-Si tú los dices, te creeré-dijo Sakura mostrando que ya tenía su decisión. –Gremory-san, yo…
-Tiempo fuera.
Quien intervino no fue ninguno de los estudiantes de Kuoh presentes, quienes mantenían silencio en respeto a las decisiones y consideraciones de maestra. El que hablo fue el acompañante que traía la Haruno, quien había hecho lo mejor de sí para pasar desapercibido.
-Hey, Sakura. ¿Sera que podemos conversar este tema un momento en privado?-dijo el sujeto para sacar a la chica fuera de la sala sin esperar siquiera su respuesta.
Los demás presentes quedaron intrigados por la escena, aunque la entendían en parte debido a lo importante que era la decisión de unirse a una Sequito. Rias opto por hacer lo propio y pregunto al que podría darle un poco más de información.
-Oye, Naruto. ¿Quién es ese que acompaña a tu amiga?
-Ni idea.
-¿Eh?
[…..]
-Muy bien, Sakura. Tengo que admitirlo, tu decisión de venir a este lugar ha sido de primera. Este asunto de los Demonios promete muchísimo. Sin embargo, creo que llegamos a una situación que no me gusta mucho.
-¿Qué no te gusta? ¿Qué me ofrezcan una maravillosa forma de sacarme el blanco que tengo sobre mi cabeza-dijo Sakura, no contenta de haber sido llevada a la fuerza al pasillo, a un punto un tanto alejado de la habitación donde se encontraba.
-Precisamente.
-Sé que el asunto de convertirme en Demonio suena turbio, pero no debe ser tan malo si Naruto acepto hacerlo.
-Al diablo con lo de la humanidad. Me interesa más el tema de que entraras en un contrato de servidumbre.
-Me parece lógico. Dudo que alguien ofrezca algo como eso gratis.
-Yo puedo ofrecértelo. Eso te lo deje claro.
-Lo sé, pero…..
-¿Aun dudas de mí?
-Mis temores son otros.
-Hmpf.
-Mira, estoy en un gran embrollo por tomar decisiones apresuradas y sé que esta tiene pinta de ser una similar, pero quiero verlo como una oportunidad para darle un sentido a mi vida.
-Realmente no veo como la esclavitud puede ayudar a alguien con eso…
-Si tanto te preocupa eso, tú puedes encontrar una solución luego, ¿no?
-Por supuesto.
-Entonces no veo de que hay que preocuparse. Si esto no sale bien, me abstendré a hacer lo que tu veas pertinente.
-…..
-Lo prometo.
-Te tomare la palabra.
-Bien. En ese caso volvamos a dentro. Ha sido completamente inadecuado que saliéramos de esta forma.
-Hay peores formas de interrumpir una negociación.
[….]
-Mis disculpas por la interrupción-expreso Sakura al regresar a la sala de la reunión, agachando su cabeza ante la Gremory como señal de auténtico arrepentimiento.
-No hay problema, Haruno-san. Aunque eso me lleva a hacerle una pregunta que inadecuadamente no hice antes-dijo la pelirroja viendo al costado de Sakura. -¿Quién es tu acompañante?
-Sí, Sakura-chan. ¿Quién es el?-dijo Naruto, quien pasó a tener un semblante agresivo.
-Oh, ¿el? Bueno…-dijo la ojiverde poniéndose nerviosa. –Él es mi hermano.
-¿¡Qué!?-expreso el rubio con total sobresalto.
La sorpresa en realidad era nula para cualquier prestara un mínimo de atención. El chico que acompañaba a Sakura era alguien que compartía muchas de sus características. Tez clara, cabello de color rosa chicle y ojos verdes. Cada aspecto se veía mejor en el chico que en la chica, pero eso podía atribuirse al hecho de que se notaba que ella había pasado por mucho últimamente y no se arreglado como lo haría normalmente. Su edad era definitivamente no era mucha, pues era el más bajo entre los presentes. Incluso más que la pelilanca.
-Hola. Soy Totomaru Haruno. Un gusto-dijo el chico con una expresión apática que parecía indicar poca sinceridad en su saludo.
-¡Espera un segundo! ¿¡Desde cuando tú tienes un hermano, Sakura-chan!?
-Es una larga historia-dijo la chica con un largo suspiro.
-Yo la resumo-dijo el Haruno tomando la palabra. –Soy resultado de una relación extramarital que tuvo su padre, Kizashi Haruno, con una mujer cuyo nombre no quiero mencionar otra vez en mi vida debido a que ella me abandono luego de cuidarme en solitario por unos años. Ella al menos tuvo la decencia de decirme la identidad de mi progenitor, así que con eso me di a la tarea a ver si podía encontrarlo. Desgraciadamente, los de Raíz me encontraron primero y dándose cuenta de mi linaje, me enlistaron a la fuerza en su programa de entrenamiento. Ya me había preparado para lo peor, pero por un golpe de suerte, me topé con Sakura cuando ella se coló en la base. No tardamos en entender que estábamos emparentados, así que nos ayudamos mutuamente para salir de aquel lugar y llegar a este sitio-explico el chico de forma rápida y concisa, sin poner mayor emoción en ninguna de las partes del relato.
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-…..
-Ok. Esa sí que es una historia, pero la encuentro un poco difícil de creer-dijo Rias, quien fue la primera supero el impacto del relato. -¿Qué clase de madre abandona a su hijo de esa forma?
-Ella dijo que esa era la costumbre entre los de sus tipo-dijo el chico para levantar levemente la chamarra que llevaba, lo cual permitió que un apéndice en su espalda quedara al descubierto. Una cola negra que terminaba en un diamante casi plano. –Ella es una Súcubo.
-¿¡Súcubo!?-dijo la Gremory sorprendida. -¿Todavía hay Súcubos vivas?
-Reamente no sé qué tantas habrán. Mi progenitora es la única que conozco.
-Urgh. Era la respuesta que temía.
-Espera, buchou. ¿Acaso sucede algo malo con las Súcubo?-pregunto el castaño presente. –No me diga que les ocurre lo mismo que a los Demonios.
-No el caso de ellas es peor. Ellas están básicamente extintas.
-¿¡Que!?
-A diferencia de la creencia popular, las Súcubos no son Demonios como nosotros. En realidad eran Hadas que mutaron debido al Poder Demoniaco presente en lugares como el Inframundo. Como consecuencia, su aspecto era muy similar al de los Demonios de antaño, por lo que eran confundidas y agrupadas con ellos.
-Oh.
-Desafortunadamente, como otras especies, estas se vieron envueltas en la guerra y sus números se vieron reducidos al mínimo. Su bajo poder y tasa de reproducción hicieron que desaparecieran por completo del plano general.
-¿Entonces mi sueño de conocer a una Súcubo no va a poder darse?
-Es bastante probable que no.
-¡Noooo!-expreso el chico con auténtica pena, para la incomodidad de todos los presentes.
-Baka senpai-comento la pequeña chica de cabello blanco. Los demás asintieron.
-Aunque tal vez no todo este perdido para esa especie si hay individuos como tú-comento Rias viendo de nuevo a Totomaru.
-Quien sabe. Una falla como yo no puede decir mucho. Carezco de la habilidad intrínseca esta especie, es decir, absorber energía de otros seres, así como de alas y otras características. Básicamente por eso es que mi madre me abandono. Ni siquiera soy digno de llamarme mestizo.
-Dices eso tan tranquilamente-dijo la Gremory que ahora estaba algo conmovida.
-Oh discúlpenme si no me pongo muy emotivo con esto. Lo primero que hacen los Raíz con sus soldados en forzarlos a deshacerse de sus emociones. No es agradable, pero supongo que es útil para cuando recuerdo mi situación-dijo el chico dando los golpes finales de su historia.
Naruto que guardaba recelo hasta ese momento, entendió que todo lo dicho debía ser verdad. En algunas ocasiones se había topado con Anbu que no se comportaban como humanos sino más bien como robots. Su expresión cambio de una de duda a una de compresión, con lo cual su maestra tomo su decisión final en el asunto.
-¡No digas más! ¡Si necesitas protección como tu hermana, aquí se te brindara! ¡No te preocupes!-dijo la pelirroja ahora en lágrimas. La chica rubia también estaba igual.
-Gracias. Agradezco mucho ello.
-Me gustaría ofrecerte un puesto en mi Sequito, pero…..temo que no tengo plazas disponibles. Solo puedo darle el puesto a uno de ustedes.
-No se preocupe. De todas formas, no creo que fuera a apórtale mucho. Encárguese de mi hermana y yo le apoyare en lo que pueda-dijo el chico con una pequeña sonrisa.
-Así se hará.
Mientras la escena se daba, Sakura quedo sin palabras. No esperaba que la situación fuera a desarrollarse sin conflictos. Viendo las actitudes de su futura maestra, tenía que creer la palabra de Naruto de que ella si era una buena persona. Eso estaba bien. Le urgía conseguir personas de fiar, pues estaba en una situación donde no sabía en quien creer.
-Mamá. Papá. Espero que estuvieran en lo correcto-pensó mientras rememoraba la última conversación que tuvieron.
Y con esto termino este capítulo. Espero que haya sido entretenido. Sé que Highschool DxD es bastante usado y muchas veces las historias tienden a ser repetitivas, así que espero que aquí pueda ofrecerles algo fresco aquí. Hay elemento sorpresa y una sorpresa dentro de este.
La batuta de personaje principal entre Sakura, Naruto y Totomaru, donde la atención sobre el segundo llegara en un momento más avanzado de la historia. No esperen a un Naruto Baddass de una sola sentada. Planeo algo grande con él, pero no va a tener un inicio privilegiado o un trasfondo que lo hará invencible de la noche a la mañana. Para los fines prácticos el ahora esta solo unos pasos por encima de Issei y la curva de poder este lo va a dejar en mala posición por un rato. Lo digo de una para aclarar que no tengo preferencia por el Hyoudou, pero quiero hacer algo que haga que el discurso que le dio a Neji no fuera un acto hipocresía.
Advertencia: Como algunos de los otros fic que existe en la página, esta historia hará referencia y reproche a situaciones y temas del acontecer actual, pero en vez de abordar una o dos cosas, tomara un enfoque global, porque ya saben, el mundo se está yendo a la m***** y tengo algunas opiniones que descargar. Lo menciono para disculparme de antemano por cualquier cosa desatinada que llegue a escribir. Lo presente no es necesariamente mi opinión particular sobre ese tema. Simplemente es lo que pienso que pasaría con los personajes y el escenario en ejercicio. Tomando en cuenta que todo ocurrirá en un mundo donde las cosas DxD y Naruto están, mucho no está en sintonía con la realidad.
