Highschool CxC
No me pertenece Naruto, Highschool DxD ni ninguno de los personajes y elementos de otras fuentes presentes.
Capítulo 3
-Muy bien, Haruno-san. Es tiempo de que nos muestres de que estas hecha-dijo Rias a la pelirrosa, quien en ese momento estaba alineada frente a su oponente. La pequeña Koneko Toujou.
La noche estaba llegando a su apogeo y el grupo Gremory se había desplazado al pequeño bosque que rodeaba a la academia Kuoh. No era un área especialmente extensa o privada, dado que en sus cercanías estaba el resto del centro educativo y la comunidad, pero gracias a los poderes demoníacos de los presentes era posible ocultar el espectáculo que estaba por darse.
Con eso en mente, las peleadoras se abalanzaron sobre la otra sin contenerse demasiado.
De forma casi inmediata, Koneko se abalanzo sobre Sakura para propinarle un puñetazo. A pesar de su pequeña complexión, la peliblanca era una peleadora física cuya fuerza no debía subestimarse.
Sakura averiguo eso de inmediato cuando decidió recibir el puñetazo propinado por la otra joven. Lo hizo con los brazos cruzados, pero eso no evito que sintiera daño por el gran golpe que la desplazo de su posición original.
No era una maniobra que normalmente haría, pero la pelirrosa quería probar los alcances de sus nuevos poderes. Como Rook, sus atributos de ataque y defensa habían aumentado considerablemente y con ello había aguantado un golpe que seguramente le hubiera roto una vasta cantidad de sus huesos.
Aprovechando el recorte en las distancias, la Haruno entonces procedió a atacar con sus propios puños. Koneko hizo lo propio y no esquivo, en cambio mantuvo su ofensiva y choco con su oponente.
Ambas féminas intercambiaron potentes golpes que rompieron el silencio del bosque. Cada uno era estruendosa detonación en la que ninguno de los espectadores quería verse involucrado.
La lucha se vio pareja conforme las chicas mantuvieron el combate cuerpo a cuerpo por un rato, pero la brecha se rompió rápidamente cuando una de ellas mostró las cartas que tenia ocultas.
Luego de probar cuanto había subido su fuerza base, Sakura procedió a darle el añadido al que estaba acostumbrada. Concentro su Chakra en los puños y procedió a dar un potente golpe contra el suelo.
El suelo convulsiono y grandes trozos de tierra fueron impulsados al aire por la fuerza del impacto que se dio. Los espectadores que veían en las cercanías, tuvieron que retroceder rápidamente debido al gran alcance del ataque.
Koneko dio un brinco hacia atrás para evitar la tormenta de escombros que se levanto, pero estos la alcanzaron antes de que pudiera ponerse a distancia segura. La pequeña se cubrió como pudo del azote de tierra y rocas que la cubrió. No le causaron gran daño, pero si hicieron que perdiera por completo de vista a su oponente.
Una vez que puedo recomponerse y el estruendo ceso, la peliblanca se dispuso a revisar los alrededores para encontrar la ubicación de la Haruno. Una vuelta de 360 grados y una ojeada al cielo no fueron suficientes para que Koneko recuperara el rastro. La noche no era ningún impedimento, pues como Demonio, ella poseía una visión nocturna que anulaba esa traba.
Debido a todo el polvo levantado, la pequeña se la pensó antes de acudir a su sentido del olfato, pero el tiempo apremiaba y no quería encontrar que su oponente simplemente se estaba ocultando a simple vista frente a un árbol con un tapete. Odio cuando Naruto le hizo ese truco.
Koneko afilo su nariz y se dispuso a percibir los elementos en el aire. Aunque tenía poco tiempo de conocer a su oponente, ya había anotado su aroma único.
Para su gran sorpresa, no encontró nada. Eso era imposible. Aun disipándose en el aire, su oponente tenía que dejar su aroma tras de sí. No había forma de desaparecer su rastro tan rápido.
No fue hasta que sintió una mano sobre su hombro que la Toujou tuvo una idea de lo que ocurría.
Un vistazo a su espalda revelo la figura de la pelirrosa que se materializo entre pétalos de cerezo. Al tiempo que la tenía agarrada con su mano izquierda, ella tenía flexionado su brazo derecho en una posición ideal para liberar un fuerte puñetazo, cosa que no tardo en ejecutar.
El derechazo no llevo Chakra tras de sí, pero igual fue un ataque potente debido a las propiedades de la pieza Rook en Sakura.
Koneko salió despedida contra unos árboles y choco contra varios de estos antes de recuperarse y usar parte del impulso restante del último golpe para rebotar y abalanzarse sobre Sakura.
El combate continúo por unos varios minutos más, donde Sakura volvió a desaparecer varias veces más para tomar por sorpresa a la peliblanca. Koneko sin embargo, ya al tanto de que su oponente podía usar ilusiones, afilo su tiempo de reacción y pudo bloquear los ataques en el último momento.
Aunque Sakura era hábil, la agilidad de la Toujou cerraba parte de la brecha entre ellas y mantuvo el combate equilibrado.
-Muy bien. Es suficiente- dijo Rias, una vez que se cumplieron 20 minutos desde el inicio del encuentro. Ya había visto suficiente y sinceramente sus oídos ya soportarían mas choques de golpes.
-Como ordene, Buchou- respondió Koneko taciturnamente. Se notaba cansada y su atuendo estaba dañado, pero no se mostraba especialmente lastimada.
-Que bueno. En verdad necesito un receso-dijo Sakura, quien por otro lado tenía un montón de magulladuras y moretones. A razón de esto, ella empezó a aplicarse un Jutsu curativo para recuperarse.
-Déjame hacer un repaso. Tienes un buen manejo del cuerpo a cuerpo, puedes realizar ilusiones y curarte a ti misma. ¿Qué otras sorpresas tiene contigo Haruno Sakura?-dijo la Gremory con una sonrisa.
-También tengo puedo realizar numerosos Jutsu elementales y no elementales. Todo gracias a un muy entusiasta sensei.
-Me gustaría verlos. Es claro que tienes potencial en el combate de corto y mediano alcance, pero quiero saber si puedes cubrir el largo.
-Lo haría encantada, pero voy a tener que pedirle que sea para otro momento. El combate fue mucho más desgastante de lo que pensé.
-Lo que ocurre es que tu cuerpo todavía no se acostumbra al Poder Demoniaco que ahora posees. Aunque creas que estas usando solo Chakra, de todas formas estas usando parte de esa otra energía de la que no tienes control.
-Y por eso me agote más rápido. Entiendo.
-Para que te de una idea de lo que obtendrás si controlas mejor tu Poder Demoniaco. Mira a Koneko. Ella no recibió mayores heridas porque ya tiene total control sobre su pieza Rook y esta accediendo a toda la defensa que le provee. Tu solo lo estás haciendo de forma parcial.
-Ya veo. Eso significa que me toca entrenar con este poder.
-Es correcto.
-Espero que no sea una molestia pedirle asistencia con ello.
-En lo absoluto. Asistiré en lo que pueda a desarrollo de mis súbditos-respondió la Gremory ofreciendo una sonrisa. –Además en este momento estoy entrenando a Issei y Asia que están en una posición como la tuya, así que realmente no representa ninguna molestia.
-Aun así, no quiero ser una molestia. Si hay algo que pueda hacer en compensación….
-Pues ahora que lo mencionas. Una cosa que había estado esperando desde que vine a Japón era toparme con un experto en el área shinobi. Fue grato toparme con Naruto, pero él no es exactamente el mas versado-expreso la pelirroja viendo al susodicho con una ligera mueca de decepción.
-Buchou, estoy escuchando-dijo el chico con los hombros caídos.
-No me malinterpretes. Sabes lo tuyo, pero no eres adecuado al momento de ofrecer explicaciones. Para empezar, me gustaría saber que truco usaste para despistar a Koneko. Tú solo hiciste un gesto de manos y ella actuó como si no estuvieses allí-dijo Rias viendo a Sakura de nuevo.
-Oh, eso fue un Genjutsu. Forzando el Chakra dentro de un oponente, uno puede hacer que este se vea sumergido en ilusiones.
-Ya veo. Eso quiere decir que Koneko fue la única que aprecio tu técnica…. ¿Es posible que me des una demostración?
-No creo que eso sea posible. Los Genjutsu solo funcionan en personas que tienen un sistema de circulación de Chakra.
-Ya veo. Los Demonios definitivamente no tenemos eso.
-En realidad es que algo que ni siquiera es común entre los humanos. Es bastante reducida la población que tiene esta cualidad. La mayoría está radicada aquí en Japón, pero también hay grupos importantes en China, Korea y otros países orientales.
-¿Quieres decir, otras aldeas ninja?
-Precisamente.
-Interesante. ¿Y cómo determinaste que Koneko era vulnerable?
-Fue una mera suposición. Dado que su nombre y apariencia no me indicaba que fuera extrajera, pensé en que funcionaria. Debo acotar que no fue sencillo, encontré una resistencia que solo tendrían shinobi de rango jounin.
-Eso está bien. Si bien las ilusiones no son algo desconocido para nosotros, pero estas suenan como un incordio a tomar en cuenta.
-En efecto lo son. Deshacerse de Genjutsu como el de Sakura es relativamente sencillo si se sabe cómo hacerlo, pero hay otros tipos que requieren de apoyo externo-comento Naruto.
-Así es-reafirmo la Haruno.
-En ese caso tenemos una nueva tarea por delante. Aprender a defendernos de los Genjutsu-dijo Rias. -Entenderán que con ustedes dos en el grupo, somos propensos a ataques de shinobi.
-Lo sentimos-respondieron los jóvenes involucrados.
-No lo digo para hacerlos mal. No es como si a los Demonios nos faltaran enemigos. No solo tenemos a los Exorcistas de la Iglesia, sino a los que surgen de otros grupos sobrenaturales. En realidad es útil tenerlos cerca y así contar con contramedidas contra un grupo más.
-No es como si eso importara. Estamos completamente indefensos ante el grupo más importante y peligrosos que tiene que tener toda nuestra atención-dijo Sakura para sí misma.
-Pero ya me alargado lo suficiente. A la noche todavía le quedan horas utilizables y como seres nocturnos, es nuestra obligación aprovecharlas.
-De acuerdo.
[….]
Las siguientes horas fueron de charla y explicaciones, específicamente sobre los trabajos que hacían los Demonios en la sociedad moderna. A Sakura le sorprendió todo el asunto, ya que en su mayoría implicaba cumplir peticiones que de maldad no tenían nada, como uno hubiera podido esperar de los seres involucrados. En su caso particular, su habilidad curativa parecía que sería lo que resaltaría de ella para este asunto.
Le agrado saber que no sería la única curandera del grupo. Asia también contaba con poderes curativos y le acompañaría en la proeza de mantener al grupo saludable. Quedaba ver como seria el tipo de conflictos en los que tales habilidades serian usadas, pero confiaba en que sería mejor que aquellos en los que se metía como shinobi. Era lástima que en realidad ese pensamiento no importara, pues ella tenía claro que de una forma u otra estaba inmersa en un asunto mucho peor.
Sakura intento no pensar en ello, pero pudo evitar recordarlo, una vez que regreso a su habitación y encontró a su hermano con una expresión de incomodidad. El mismo se encontraba sentado sobre la cama, con los ojos cerrados y con brazos y piernas cruzados en una posición que lo hacía ver como si estuviera meditando o concentrando en un asunto. Esa era la percepción que tendría una persona común, pero habiendo sido entrenada para leer el lenguaje corporal, Sakura pudo detectar que la situación era otra.
La absoluta tensión que se podía observar en su cuerpo y agite de su cola, hizo ver a la Haruno que Totomaru estaba siendo regañado. No entendía como eso estaba ocurriendo siendo que ellos eran los únicos en la habitación, pero actualmente él tenía toda la apariencia de un niño siendo sermoneado por padre o maestro. Su infantil apariencia no hacía más que empeorar la imagen.
Unos diez minutos de incomodo silencio tuvieron que pasar para que el chico abriera los ojos y diera una explicación a la peculiar escena.
-Disculpa. ¿Interrumpí algo?-pregunto Sakura, buscando ser lo más cuidadosa posible.
-Nada importante. Solo una sentencia de muerte para mi persona-explico el chico con sumo pesar.
-¿Eh?
-Estaba hablando con mi jefe sobre ti y la situación en la que nos hemos involucrado con los Demonios. Sobra decir que no está feliz.
-¿Eso es malo?-pregunto Sakura por mero reflejo, aunque ya sabía la respuesta. Por supuesto que era malo.
-Totalmente. No soy el único que ha estado haciendo cosas de su desagrado y temo que seré yo el que pague los platos por todos ellos. Van a darme trabajo hasta más no poder.
-Oh, eso no suena tan mal.
-Esa no es la peor parte. Lo que sucede es que acabo de enterarme que me habían concertado una sesión de entrenamiento con mi maestra. Naturalmente esta tendrá que ser cancelada y eso no le gustara nada. Ella va a matarme-dijo el chico mostrando absoluto terror en su rostro.
-¿Ella estricta?
-Estricta no es la palabra adecuada para describirle. Simplemente es corta de paciencia y es un hecho que esto la enfurecerá. Estimo que ella me matara unas diez veces antes de si quiera pensar en perdonarme esta.
-Sí es así, ¿no será que puedes dejarme aquí y atender tu compromiso?
-La sesión es de al menos un año. No puedo dejarte sola por tanto tiempo.
-No tienes que preocuparte por mí. Por algo me uní al grupo de Gremory.
-Precisamente por ese tipo de decisiones es que se que no puedo quitarte el ojo de encima.
-Lo hice para ganar más poder. ¿Acaso no notaste cuanto subía mi fuerza?
-Si claro. Felicitaciones. Subiste al rango S-respondió el chico sarcásticamente.
-Guau-dijo Sakura viendo sus manos. -¿Tan fuerte me volví?-la chica no percibió el sarcasmo.
-Estoy usando una escala basada en el alfabeto latino, donde S esta en el vigésimo puesto.
-¿¡Tan al fondo!? Eso no puede ser posible. Estoy segura de que hubiera podido lidiar con los hombres de Danzo por mi cuenta con este poder.
-Tal vez, pero igual sigue estando muy por debajo de la escala. No preocupes tanto. El nivel de un humano común y corriente no es mayor de X.
-¿Y exactamente cuál sería tu nivel?
-Tu corazón no está listo para la respuesta.
-….. Sí, eso es verdad.
-Como sea. El caso es que voy a tener valer mi estancia en este lugar. No es nada a lo que no esté acostumbrado, pero eso significa malas noticias para tus antiguos congéneres.
-Yo realmente no sé qué decir-dijo la pelirrosa con una expresión de preocupación.
-No es necesario que lo hagas. Simplemente continúa con lo que estés haciendo con esos Demonios y muéstrame como realmente son. No quiero tomar un juicio sin conocer la posición de todas las partes. Está claro que hay muchos más actores que los humanos en todo este circo.
-Sí. El mundo es mucho más grande lo que parece e incluso comprendiendo se queda corto junto con lo demás.
-Esa es una gran verdad. Espero que los demás habitantes de este lugar puedan verlo.
-Sí. Yo también lo espero.
-En fin. Creo que es suficiente charla por ahora. Tu podrás haberte convertido en un ser nocturno, pero yo no lo soy. Solo estoy despierto porque necesitaba hacer esa llamada.
-¿Solo eso? ¿No te reuniste con Sitri?
-En efecto.
-¿Y qué tal te fue?
-Fue un reunión productiva tengo que admitirlo, pero no es nada de lo que sea necesario hablar. Ahora en serio, necesito dormir. Todo esto me está dando una fuerte jaqueca.
-…. Ok-respondió la pelirrosa cortando con ello la conversación. Aun cuando la sonrisa que mostro su hermano ante la mención del nombre, le hizo haber querido ahondar en el tema.
[….]
Y en un abrir y cerrar de ojos, más de una semana paso. Una vez que llego un lunes, Sakura fue integrada a una clase en la academia. Para su pesar, fue en el mismo salón donde cursaban Issei y Asia. No era que le desagradada el par, pero le hubiera gustado haber quedado junto a Naruto.
Claro que la Haruno entendía muy bien él porque eso no había ocurrido. Era un hecho que Akeno le había pedido a Rias que no los pusiera en la misma clase. Esa chica no lo decía abiertamente, pero era clarísimo que la estaba viendo como una rival. Razones no le faltaban, pues sin duda ese noviazgo era algo que había tomado a la pelirrosa completamente fuera de base. Sin embargo, eran muchas las cosas que le atribulaban como para pensar en algo así y contar con un amigo era más que suficiente para ella en ese momento.
Afortunadamente sus otros compañeros no mostraban la misma animosidad. Aunque Koneko parecía alguien apática, en realidad era alguien bastante agradable. Como compañeras Rook, ambas rápidamente crearon un vínculo. En el caso de Yuuto, Sakura agradeció encontrar a un caballero que actualmente se comportaba como tal y no era un Casanova que la andaba acosando todo el tiempo. El rubio le devolvía a la Haruno la esperanza sobre los hombres. Eso era especialmente importante porque como todo grupo, el Sequito Gremory tenía una oveja negra y ese puesto era llevado por el chico llamado Issei.
Resultaba que el par con que se había topado al llegar a Kuoh no eran los más degenerados de la escuela. Ese puesto lo tenía el castaño que poseía una fuerte obsesión con los senos y no dudaba mencionarlos en una conversación casual. En particular, no dudaba en alabar los atributos de su ama Gremory.
Como alguien que no había sido agraciada en ese aspecto, Sakura no podía sentirse más que incomoda cada vez que el abría la boca. Al menos no era la única que se sentía así. A diferencia de ella que optaba por decir nada para ser lo más cordiable posible, Koneko no tenía pelos en la lengua para señalarle lo desagradable que era cada vez que tenía oportunidad. El chico sin embargo no se veía afectado en lo absoluto. No era raro, pues usualmente luego de cada insulto, era alabado en otra cosa por Asia en un tono que claramente iba más allá de la amistad.
Tal hecho hizo que la Haruno viera con mayor reojo al Hyoudou, pues no comprendía cómo era que él tenía la atención de una chica tan maravillosa como la Argento y de todas formas estuviera coqueteando abiertamente con Gremory, sin que esta le recriminara ello. No era un asunto que realmente le atañera, pero dado que quería entender las dinámicas del grupo, opto por preguntarle a su compañero el cómo eso era posible. La respuesta la dejó fuera de sí.
[….]
-Un Harem. ¿¡Puedes creerlo!? ¡El sueño de ese sujeto es tener un harem!-comento airadamente Sakura a su hermano, quien no le contesto de inmediato, pues su atención estaba en las múltiples computadoras que le rodeaban.
Una de las cosas que había cambiado en los últimos días fue su alojamiento. El par había pasado a quedarse en un apartamento de un bloque residencial cercano. No era el lugar que Rias había ofrecido a Sakura, sino un sitio que Sona prestó al par con el fin de establecer su fachada para la academia. No era el pináculo de la comodidad, pero ofrecía una mayor privacidad a los Haruno. Totomaru no la desaprovecho y tan pronto tuvo oportunidad se dispuso a crear un espacio de trabajo con unos equipos que también había facilitado la Sitri. Dado que eso permitía que el chico estuviera distraído, a Sakura le tranquilizo esto, pero no dejaba de encontrar sospechosa tal generosidad.
-¡Hey! ¿Me escuchaste?-dijo la pelirrosa, luego de que pasado un momento, el chico ni siquiera alzo la mirada.
-Sí lo hice, pero no se me ocurre una respuesta que pueda satisfacer tu incomodidad al tema.
-No es que me incomode, es que está mal. La ley no permite que…
-La ley de los humanos. Ustedes son Demonios. Hay un nuevo conjunto de leyes que aplica sobre ustedes.
-Oh bueno. Eso es verdad, pero no deja de ser una meta ridícula.
-Es extraño que lo veas así, siendo que si tu amigo no asume el mismo camino, tú quedaras relegada a un lado.
-¿¡Que!? ¿Qué te hace pensar que estoy interesada en Naruto!?-respondió Sakura sonrojándose a millón.
-Porque he visto a mas de una docena de chicas con tu misma actitud hacia un chico. Además, tú no estás protegida por la clausula de justificación de estupideces.
-¿La que?
-Si un hombre hace una estupidez una vez, la razón es auto-explicativa. Si la hace dos veces, es porque seguramente le interesa una mujer. Con las damas no se puede aplicar la misma premisa, así que cualquier tontería de su parte tiene una única y sola razón.
-Tsk. ¿Vas a seguir reincriminándome lo de unirme a Gremory, verdad?
-No realmente. Solo estoy explicando el porqué de mi deducción. A medida que sigo ahondando en la historia humana, mas agradezco que no tenga que relacionarte con ellos.
-Ok. Eso es duro. Los humanos no son tan malos.
-Sí. Hay peores y pocos hacen tantas delicias. Estoy bastante seguro que voy a volverme adicto a estas barras de caramelo y chocolate-dijo el mostrando el respectivo bocadillo
Fue entonces que Sakura tuvo una espantosa revelación. Alrededor de Totomaru se encontraban múltiples cajas de caramelos, galletas, chocolates y otras golosinas. Algunas sin abrir, otras a ya empezadas y muchas otras vacías. Temiendo lo peor, fue a las alacenas y encontró que en el interior de estas solo había más cajas de confituras. El refrigerador no era diferente. Helado era lo único que se encontraba en la heladera y varios pasteles se encontraban en la parte de abajo. Solo un pequeño rincón estaba dedicado a bandejas de bento pre hechas de una tienda de conveniencia, las cuales Sakura presumía que solo le pertenecían a ella.
-Hermanito, ¿Qué se supone que has estado comiendo los últimos días?
-Todo lo que observas y una saludable porción de agua fresca.
-¿¡Estas de broma!? ¿¡Has estado alimentándote de pura comida chatarra!?
-Bueno, no puedo negar que ese es un hecho. Realmente puedo mantenerme únicamente tomando agua, pero como dije, me encantan estos dulces.
-¿¡Estás loco!? ¿¡Acaso no tienes idea del daño que le estás haciendo a tu cuerpo!?
-Créeme. He hecho cosas peores, así que quédate tranquila.
-De ninguna forma puedo estarlo sabiendo que mi hermano va directo a la diabetes.
-No soy propenso a ese tipo de enfermedades, pero eso no importa ¿acaso no estábamos discutiendo de asuntos amorosos? Mantente en ese tema.
-Hmpf. Olvídalo. Ya no quiero hablar sobre ello.
-Perfecto. Yo tampoco. Suficiente tengo con los problemas de la otra gente que conozco. Hazte un favor y mantente alejada de las relaciones de otras personas. Eso hará mas sana tu vida y te evitara arrugas antes de tiempo.
-Sí. Supongo que es lo mejor.