Harry Potter No me pertenece.
Esta historia se encuentra participando en el #Omegacember de la Fanpage Es de fanfics de Facebook.
Recomendación de la temática: Interacción no sexual en base al aroma del otro; ¿alguna vez pasó alguien con perfume y volteaste entre la multitud para buscarlo? ¿U olido algún aroma que te trae un recuerdo?
_Día 3_
Aroma
El número de teléfono parece burlarse desde su celular, han pasado apenas una semana y se siente inquieto, el encontrarse con Draco Malfoy en medio de una librería cuando estaba buscando un libro de cocina; no tenía idea de porque tenía la necesidad de cocinar dulces, pero tampoco quería pensar en eso. Encontrarlo luego de los eventos de su primer encuentro, era bastante molesto, porque sin duda algo dentro de él parecía necesitado del molesto alfa. Su yo adolescente debe revolcarse en su nueva realidad, pero Harry lo culpa por haberse vinculado en algún momento sin su consentimiento.
Un vínculo unilateral.
¿Vinculo unilateral?
En medio de la librería Draco había usado un comando con él, Harry quien se jactaba de no verse tan afectado por la voz alfa, había sentido sus piernas rendirse y además toda la tensión disiparse solamente por sus palabras.
Lo odiaba tanto.
Pero no podía negar que su omega interno parecía deleitado con tener un alfa así a su alrededor. No es que hubieran charlado, Harry se negaba a enviarle un mensaje para pedirle algo, como si tuviera la necesidad solo por ser un omega.
Era un adulto responsable, lo ha sido así por años, no necesita nada de un estúpido alfa.
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—Esto comienza a ser patético—habla Hermione viéndolo caminar como si estuviera encerrado en una jaula, tenía la chaqueta de Draco y la bufanda envuelta sobre sus hombros casi cubriendo todo su rostro.
Aunque con apenas aroma, por suerte la chaqueta parecía tener un aroma más penetrante de manzana que lo estaba tranquilizando.
—Es como una droga, simplemente lo necesito, lo odio…nunca antes ocupe algo así—maldice Harry ignorando a Ron que esta dormitando en el sofá luego de un turno nocturno.
Este es un beta, ajeno a sus problemas, lo ama como un hermano, pero detesta que no pueda entenderlo. Hermione que había logrado una buena relación con Ron, a pesar que ella era un omega, es un ejemplo de que no se necesita un alfa para ser feliz.
Harry había sido feliz sin un alfa toda su vida.
¿Por qué ahora era diferente?
Tal vez porque lo había probado un poco, había sentido el poder del comando de Draco, había estado envuelto en su aroma con su chaqueta y aunque había sido el peor adolescente del mundo, los últimos dos encuentros este parecía ser una buena persona.
Aunque su charla había sido limitada.
Eso significaba algo.
¿Verdad?
Estaba tan jodido, su pierna no deja de moverse inquieta para molestia de Hermione.
—Es normal que un omega con un posible vinculo necesite a su alfa, te sugiero que lo contactes lo antes posible, probablemente este interesado si te dio su número—Hermione parecía luchar contra sus palabras, porque realmente no tenía la mejor relación con Draco de todos, así que entiende sus dudas.
No lo quiere, pero si eso ayuda a Harry, parece dispuesta a tolerar el inconveniente.
Harry ve su teléfono como si fuera su peor enemigo y aunque esta tentado a enviarle algo, no tiene la menor idea de que podría enviarle. No tiene sentido pedirle que le de ropas perfumadas, aunque por la chaquete y bufanda en su posesión, no parece ser un problema. La idea de llamarlo para que le de una orden de comando para tranquilizarlo pica en su cerebro, pero eso iría en contra de su dignidad y se ha estado conteniendo a duras penas.
Muerde su cupcake con trozos de manzana, no es la mejor combinación, pero la manzana lo tranquiliza. Es como si el aroma de manzana fuera todo lo que puede oler últimamente y lo que suele cocinar en el momento que tiene tiempo.
Patético.
Odia su género secundario.
Pudo haber sido cualquier alfa, pero tenía que ser Malfoy de todos ellos.
—Soy mejor que esto—
—Has estado inquieto por días y tu aroma apesta Harry—
—Gracias Hermione—
—Estoy cansado de esto—tanto Hermione como Harry voltean a ver a Ron, que se ha levantado aburrido mientras toma un cupcake mordiéndolo, también toma el teléfono de Harry.
Es ágil con sus dedos y en menos de unos instantes, parece comerse el cupcake al tiempo que coloca el teléfono en la mesa. Hermione se asoma para ver que ha pasado, Harry supone que debería bloquear mejor el teléfono si sus amigos pueden ingresar tan fácilmente. Los ojos de Harry se abren y jadea incrédulo, al ver que Ron ha enviado un mensaje a Draco sobre citarlo mañana en un parque cerca de su casa en la mañana.
Su amigo se encoge de hombros.
Hermione tiene que detenerlo de asesinarlo.
Esta listo para asesinarlo y luego suicidarse, cuando el mensaje de Draco contesta demasiado rápido o tal vez demasiado para poder borrar la evidencia o suicidarse primero; este solamente dice que esta de acuerdo y Harry piensa que podría morir de vergüenza.
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Harry se niega hablar con Ron si algo sale mal, sentado en medio del parque moviendo el pie inquieto, no sabe qué hará o que le pedirá a Draco; Hermione había comentado que solamente salir y charlar podría ser un buen indicio para ver si esto va algún lado o si definitivamente es una mala idea. Lo peor es que una parte de él quiere que esto salga bien, lo cual no tiene sentido porque sabe que las posibilidades de eso son ridículamente bajas, si no fuera así no se habrían llevado mal la mayor parte de su adolescencia y niñez. Odia que fuera culpa de su lado omega que esto se este brindando, porque esta seguro que cuando charle con Draco, se dará cuenta que sigue siendo un gilipollas y se decepcionara por algo de lo cual nunca tuvo que tener esperanza.
Deja la chaqueta y bufanda de Draco en su nido, se niega a regresarlos, pero si todo sale mal, con suerte se quiera desprender de ellos fácilmente.
Su pie se mueve más inquieto.
Extrañaba esos momentos donde su vida era normal y no estaba rodeada de problemas con un alfa que no había visto en años de su vida.
Buenos tiempos.
El aroma llega antes que su presencia, el bosque con manzanas aparece en su radar y levanta la mirada notando que Draco Malfoy se encuentra a su lado luciendo levemente impresionado; este voltea a ver su reloj y Harry se siente humillado al pensar que ha venido mucho antes de la hora que Ron había puesto el encuentro. Había estado tan inquieto en su departamento, que había salido ante el primer momento porque necesitaba simplemente salir y termino en este parque no porque quisiera llegar temprano.
Solo era un lugar para descansar.
—Falta media hora para el encuentro—señala Draco y Harry no se dejará humillar, incluso si su aroma es casi irresistible sin supresores.
Lo había olido antes de su celo, pensó que eso fue lo que aumento su potencia, pero ahora descubre que simplemente huele demasiado bien.
Lo odia.
Le encanta.
—Tú también llegaste temprano—contrataca, porque viejas costumbres no se pierden fácilmente y es más fácil atacar a otros cuando te sientes intimidado.
Algo mezquino, pero Harry esta haciendo mucho para estar ahí sentado, oliendo el aroma más delicioso que ha olido en toda su vida.
Draco parece verlo un tiempo, antes de suspirar y tomar asiento a su lado, no lo suficientemente cerca como Harry se encuentra queriendo, pero al menos lo suficiente para que el aroma comience a rodearlo calmadamente. No sabe si este ha notado su olor nervioso o si simplemente es su presencia que comienza a funcionar como un tranquilizador para Harry, esta demasiado relajado para pensar sobre el tema.
Ha pasado días inquieto, ahora simplemente el aroma de manzana lo tranquiliza.
Su vida es sin duda una comedia de mal gusto.
—Tenía curiosidad de porque me citarías aquí—
Fue culpa de Ron quiere contestar, pero no lo hace, porque simplemente se vería más patético de lo que probablemente ya se siente.
—Yo también me pregunto eso—
Draco voltea a verlo, pero Harry sigue viendo al suelo, dejando el aroma a manzana caer sobre él y deseando de alguna forma poder tocar la muñeca de Draco. Esta seguro que si la glándula en su muñeca tocara la de Draco, para perfumarlo, podría oler todo el día como manzana y pasaría tranquilo sin sentirse inquieto. Entiende porque Ron y Hermione insisten en que se acerque a Draco, un omega necesita un alfa si se encuentra vinculado, incluso si fue por accidente o solo de su lado.
Al menos que se vincule con otro alfa, lo cual no suele ocurrir fácilmente; a diferencia de un alfa que puede vincularse con muchos omegas sin problema.
Paso años sin sentirse guiado por sus instintos, pero algo paso con Malfoy y ahora lo necesita.
Esto es el principio dijo Hermione, solo lo necesitaría poco para tranquilizarse, pero si no hace algo, es probable que sus instintos comiencen a avanzar de mala manera hasta que sea un problema grave.
¿Le va explicar esto a Malfoy?
De ninguna manera, ni siquiera piensa decirlo a sus padres, es suficientemente humillante que sus dos mejores amigos sepan su problema.
Aroma.
Por ahora solo necesita el aroma de Malfoy para tranquilizarse, con suerte puede formar una especie de "amistad" que permita reuniones casuales si este no resulta ser un gilipollas. Hasta ahora no ha dicho algo verdaderamente culpable, lo cual es un gran avance de su versión adolescente, así que Harry quiere ser un poco optimista.
—Hay un café cerca—dice Harry inquieto, recibiendo una mirada curiosa de Malfoy y por un momento espera el golpe.
La decepción, que este lo rechace, que diga algo típico de Malfoy y que todo esto acabe.
No quiere.
Quiere que pase.
—Bien—es todo lo que dice Malfoy, esperando que camine primero para que lo guie, lo cual no suelen hacer los alfas que suelen esperar que siempre los sigan.
Joder.
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El ambiente es incómodo, Harry se encuentra moviendo sus dedos varias veces sobre la mesa sin saber que decir, Draco se encuentra tranquilamente disfrutando de un chocolate caliente y un pie de manzana, es como si el olor quisiera burlarse en su cara. Una parte de Harry casi se siente ofendido y no sabe porque, ve el pie de manzana como si fuera su peor enemigo, porque sabe que podría hacerlo mejor y que Draco no debería comer algo cuando su omega puede darle el alimento necesario.
Es ridículo.
Ahora se llama "su omega" en su mente y le dice "su alfa" a pesar que han compartido pocas palabras desde que llegaron a este café.
Hermione lo llamo biología y compatibilidad alta, pero Harry piensa que es estúpido.
Toma de su café sin azúcar, no pidió tarta de melaza, lo pensó, pero simplemente no quiere.
No hoy.
—¿No disfrutas de la comida del lugar? —pregunta Draco curioso, como si no entendiera porque le ha invitado a un lugar que le desagrada.
No lo es, es su cafetería favorita y conoce al cajero Anthony que siempre le da el trozo de torta de melaza de mayor tamaño, aunque el día de hoy se encuentra Terry otro de los cajeros al lado de Michael. Es curioso como Michael es un omega y Terry es un alfa, porque en ellos todo parece ser fácil y Michael tiene una linda marca de reclamo de Terry que hace que nadie lo vea mal.
Harry nunca sintió celos como hoy al respecto.
Su cuello esta vacío.
Maldición.
—No tengo mucha hambre hoy—admite a regañadientes, porque se siente bastante mal de repente por cosas que están fuera de su control.
Draco lo sigue viendo de esa extraña forma, como si de alguna forma estuviera preocupado por él, o simplemente no siendo un idiota.
Lo ve solo a él.
A Harry.
No debería acicalarse mucho al respecto, pero algo en ese pensamiento lo tranquiliza.
—Podría utilizar un comando si quisieras, no sé si te dará hambre, pero se puede intentar—parece un ofrecimiento inofensivo, pero Harry se siente estremecer ante el deseo de volver a tener un comando sobre su voz.
De volver a escucharlo decirle que haga algo.
No debería ser así.
Siempre odio que un alfa usara su voz para controlar a otros, pero algo dentro de Harry solo quiere rendirse ante la idea de escuchar esa voz, era como una droga adictiva.
No.
No lo necesita.
Lo quiere, pero no lo necesita.
Solo su aroma, por hoy eso era suficiente.
—No gracias—casi duele decir eso, porque realmente no quiere decir eso, pero Draco simplemente asiente antes de masticar otro poco de su pie de manzana; había pedido dos.
Era muy goloso, piensa Harry distraídamente.
La manzana con canela inunda su nariz, no sabe si es de Draco, si es del postre sobre la mesa, pero al menos eso parece relajarlo lo suficiente para no estar tan tenso cada momento.
—Entonces me pregunto el motivo de la reunión, no puedo negar que me siento intrigado, pero no sé si quieras hablar al respecto ya que has evitado el tema—habla este luego de comer su primera porción de postre y dejando la otra cuidadosamente de lado.
Si.
Harry sabe que llegarían a este momento, aunque había querido que fuera mucho más tarde y por eso solamente puede suspirar.
—Tu aroma—inicia Harry dudando sobre continuar o no, la mirada de Draco parece abierta a posibilidades, así que se arriesga al ridículo—no es desagradable—finaliza como si no estuviera seguro de que más decir o queriendo contenerse de no decir nada más.
Lejos de ser desagradable, era el mejor aroma que Harry había olido en su vida. Su padre solía oler como a fogata y su madre tenía el aroma tenue de cítricos de un beta, pero este aroma de Draco era la cosa más adictiva y asombrosa que había olido en toda su vida. Agradece no haber sido un omega cuando Draco se marchó, porque está seguro que si lo hubiera olido cuando era un cachorro inexperto, se habría lanzado sobre este y todo habría sido una locura.
Pequeños milagros, piensa divertido.
—¿A que huelo? —la pregunta de Draco lo toma desprevenido, parece no lucir molesto porque hubiera ignorado su anterior pregunta o tal vez obtuvo una respuesta.
No sabe.
—Bosque, como un bosque en medio de la pradera y manzanas—también huele a seguridad, a tranquilidad, a estabilidad y feroz protección que no sabe como describir sin verse ridículo.
Draco parpadea, antes de mirar hacía abajo a su postre de manzanas.
Si.
Huele similar, pero mejor.
—Madre dice que siempre comía manzanas cuando era niño, supongo que teníamos cierta afinidad—
—Mis padres decían eso sobre la torta de melaza, yo…bueno…algunos dicen que huelo así—
Harry se siente vergonzoso de admitir eso, no sabe porque, siempre había parecido divertido a la idea de oler a su postre favorito.
Ahora por algún motivo.
No se.
Se siente presuntuoso comentarlo.
No es que importe, Draco siempre había sido un niño mimado que presumía de cosas, no estaría mal hacerlo de vez en cuando.
Era difícil pensar que este Draco frente a él, era el mismo Malfoy que había conocido de niño. Claro que había gestos o expresiones que eran fácil de identificar con su versión adolescente, lo cual fue molesto de reconocer ya que eso significaba que su versión adolescente había estado más al pendiente de Malfoy de lo que le gustaría admitir.
—Es un aroma a tarta de melaza efectivamente, pero es como si oliera también a hoguera leve con brasas, es curioso…nunca había olido un omega así—comenta más para sí mismo que para él, lo cual no sabe que podría significar.
¿Eso es bueno o malo?
—¿Por qué estoy aquí Potter? —es otra vez la pregunta cargada de demasiado trasfondo que Harry especialmente no quiere entrar en detalles, pero la mirada de Draco es firme y no se ira sin esa respuesta.
Bueno.
Ahora piensa un poco en lo más inofensivo que pueda decir que sea verdad y haga ver si esto tiene un futuro.
O si esto es un final.
—Quería charlar—técnicamente verdad, técnicamente mentira.
Draco ahora parece confundido.
—¿Charlar? —
—Quería saber si sigues siendo igual de idiota que en la adolescencia, tenía curiosidad—
—Bueno, todos somos un poco idiotas a esa edad—
—Tú eras el triple de idiota que un estudiante normal—
—Si mal no recuerdo fuiste tu quien puso ese polvo pica pica de procedencia dudosa antes de mi competencia de baloncesto—
—En mi defensa fue idea de George y Fred—y aunque intenta evitarlo, ríe un poco ante el recuerdo de sus travesuras de la infancia, Draco no parece feliz ante el recuerdo realmente y eso lo hace reír un poco más—no me arrepiento de eso, aunque en mi defensa, habías sido particularmente malo con Hermione—añade con un poco de leve amargura ante el recuerdo.
Draco asiente tomando parte de su bebida que sigue sin acabarse.
—Si, fui un idiota con Granger, ella no merecía ser tratada así de mi parte o de nadie más—admite Draco para su sorpresa.
Harry levanta la mirada, este parece tranquilo y su aroma, aunque un poco amargo por la incomodidad, no parece como si odiara lo que dice.
Como si realmente pensara lo que dice.
Un alfa diciendo que fue malo con un omega.
—Weasley por otro lado era un idiota, ambos fuimos idiotas con el otro y no pienso disculparme al respecto, pero sí sé que dije cosas de Granger que no merecía y realmente era una chica brillante para su edad—comenta casi distraídamente viendo a otro lado, Harry lo mira aun fijamente, antes de bajar la mirada a su taza vacía sin saber que pensar.
—Dudo que Ron se disculpara, aunque Hermione realmente le alegraría escuchar tus palabras—o eso espera, Hermione siempre se ha sentido inferior a otros por ser omega, muy similar a Harry, pero esta lo combate siempre dentro de su trabajo de forma bastante ardiente.
Harry es más tranquilo en esa área, sin darle tanta importancia como su mejor amiga.
Draco asiente.
—Me hubiera disculpado con ella antes de saber que no le molestaría escucharlo, simplemente pensé que lo mejor sería no acércame a ella como compensación a lo que dije en el pasado—
—Hermione es mejor persona de lo que crees—
—Como dije, simplemente no pensé que alguno de ustedes me quisiera cerca y una parte de mi estaba mejor de esa forma—
Si.
Harry se siente amargo de sus palabras, pero puede comprenderlas y entenderlas, antes de verlo había pensado lo mismo. Claro que el aroma había sido un detonante para charlar con este, una pequeña ola de circunstancias que comenzaba a crecer cada segundo y solamente se encontraba en medio de ella sin entender que pasaba.
Su aroma era adictivo, era tranquilizante, se siente calmado a su alrededor.
Pero sus palabras.
Han golpeado incluso un poco más de lo que esperaba, porque no se suponía que Malfoy estuviera dispuesto a arrepentirse, no se supone que un Alfa actúe así.
—Por eso mi sorpresa de tu mensaje, supongo que solamente querías atormentarme por el pasado, lo cual no culpo—parece amargo al hablar, lo cual hace que dentro de Harry se sienta infeliz.
Porque eso no era ni de cerca lo que había esperado del día de hoy, no había tenido ninguna expectativa.
Y si este fue sincero, tal vez Harry podía ser un poco sincero al respecto también.
Un dar y recibir.
—No esperaba nada, no al menos algo positivo, supongo que solo quería volver a olerte—y si, suena peor ahora que lo dice en voz alta.
Por la mirada de Draco, parece que este tampoco había esperado esa respuesta. Pero Harry solo cierra los ojos dejándose llevar un momento por el aroma de manzana, bastante tranquilizante, como si estuviera en medio de la cocina haciendo de alguna forma algún postre. Se pregunto que podría hacer con este aroma, si pudiera relajarlo cuando estuviera trabajando en su estudio donde estaría creando algún cuadro de óleo, si los colores podrían de alguna forma darle justicia a la sensación que este aroma creaba.
Usualmente era lo visual su inspiración.
Pero dentro de este aroma, sintiéndolo a su alrededor, sintió la necesidad de estar en medio de su estudio para crear algo, un cuadro, con colores verdes, grises y brillantes.
Un bosque, quería pintar un bosque.
Abre los ojos, Draco lo sigue viendo, pero su mirada parece un poco más profunda y contemplativa, así que le sonríe un poco tentativamente sin saber que más decir.
No dice nada, pero empuja su porción de postre hacía él, como una pequeña ofrenda supone, que le hace sonreír mientras, aunque no quería nada que comer, es la manzana la tentación que le hace dar un pequeño mordisco.
Delicioso.
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No hablan mucho más, cuando Harry camina en dirección a su departamento seguido de Draco, solo han charlado vagamente sobre sus vidas sin ningún parámetro a seguir especial. Draco comento vagamente sobre vivir en el extranjero, sobre lugares que visito, sobre lo aburrido que era estudiar administración para mantener la compañía de su padre y que si hubiera podido elegir habría sido ser químico. Harry pensó que era triste no poder seguir su sueño, pero este comento que más que su sueño, su familia siempre iría primero y su deber era cuidar a su madre desde que su padre esta en la cárcel; no dijo que estaba a favor de su padre, parecía más bien resentido por el trabajo que quedo de las acciones de su padre.
No hablo mucho del tema.
Harry no se sintió en posición de exigir más información.
Así que hablo de ser profesor, sobre sus estudiantes, sobre su pequeño estudio, sobre algunos cuadros que solía crear y vender en la extraña casa de arte de Luna junto su padre; Draco pareció curioso al respecto a lo cual Harry avergonzado le mostro algunas imágenes de su celular. Eso obligo al chico a estar cerca de él, a que su aroma estuviera presente en todos lados y Harry se sintió un poco cómodo al respecto.
Era, agradable.
Extraño.
No había esperado eso en la mañana.
Claro que a veces era un idiota, comentarios, expresiones, sonrisas, eran las del idiota que recordaba; pero no solo era eso. Su mirada era un poco más madura, su caminar no era lleno de arrogancia e incluso le dio campo a unos cachorros que corrieron cerca de ellos sin parecer afectado. Camino al paso de Harry, le presto atención a sus palabras y contuvo una charla casual sin inconvenientes o sin menospreciarlo como otros alfas.
Si esto fuera una cita, se encuentra pensando que seria mejor de las que ha tenido por mucho en el pasado.
Pero no es una cita, solo era una charla y no sabe que hacer cuando esto termine, porque se encuentra no queriendo que termine.
Cuando el celular de Draco suena a una cuadra de su casa, este hace una mueca molesta y explica que debe contestarlo, es su madre. Hay una charla rápida y parece frustrarlo cuando acepta que tiene que volver a su empresa, lo que le hace recordar a Harry, que Draco en realidad tiene un trabajo que no permite que los sábados salga durante varias horas sin destrozar su agenda.
Aun así, vino a su llamado.
Su omega se pavonea y debe callarlo para no hacer nada vergonzoso.
—Lo siento Potter, un problema con un accionista y nadie sabe dónde mierda esta Blaise, pero cuando lo encuentre probablemente lo asesine lentamente—sarcasmo, o eso espera.
Lejos de irse de golpe, este camina un poco más rápido para llegar a su departamento, lo que hace sonreír un poco torpe a Harry como si no pudiera llegar por su cuenta; odiaría que alguien más lo trate así, pero hipócritamente se encuentra interiormente satisfecho con el detalle de Draco a su persona. Es molesto pensar que se ira, porque apenas si han pasado pocas horas juntos y aunque eso inicialmente le aterraba, ahora se siente con necesidad de saber más.
De charlar un poco más.
De escuchar el final de la historia sobre Pansy (una chica que no le agrada totalmente) y lo que paso en sus antiguas vacaciones en Italia con un conductor de Uber y tres pasteles, Draco parece no saber como la historia tomo ese rumbo y su ingenuidad hizo que todo en él brillara.
Su aroma era delicioso.
Harry incluso puede aceptar, para si mismo, que una parte de él se siente casi tentada a invitarlo a pasar a su departamento y que pase cualquier cosa.
Es estúpido, usualmente no tiene citas y se acuesta con ellas la misma noche, pero esto no era una cita, pero tampoco era una salida a un bar para levantar a alguien.
Esto era diferente y no sabe que diferente era.
—Todo está bien, tal vez…podríamos salir en algún otro momento si no estas ocupado—se haya diciendo antes que pueda controlarlo, congelando a Draco en el proceso de despedida.
Parece incrédulo.
Harry se sonroja abochornado.
—Si, eso, estaría bien—admite este dubitativamente, antes de levantar una mano.
Harry siente un poco en shock la caricia contra su mejilla, es una pequeña caricia, sus nudillos apenas si tocan parte de su rostro con tal suavidad que se siente algo sorprendido. Harry había tenido la misma suavidad cuando había visto por primera vez al hijo de Remus y Sirius, sintiendo que podría quebrarlo si tocaba algo demasiado fuerte y aunque Teddy era resistente, claramente había tenido tanto miedo esa primera vez que estuvo a su cuidado.
Draco parece al igual que Harry dudoso sobre tocar, su aroma sigue siendo cálido, pero parece que hay duda en sus ojos.
Lo entiende.
Porque Harry siente la misma duda.
—¿Puedo tener tu bufanda? —la pregunta sale sorpresivamente de la boca de Draco, lo cual tiene sentido, porque ese día Draco no tiene bufanda a diferencia de Harry que había tomado la bufanda roja con amarillo que solía tener en su guardarropa desde que tiene memoria.
Esta vieja, fue un regalo de su madre, pero sigue estando en un buen estado y como la lava tan ocasionalmente, probablemente tiene su aroma bastante condensado.
Y es ridículo.
Darle la bufanda, tener la bufanda de este en su nido.
Totalmente ridículo.
Ve al chico con duda en su mirada, sin saber que juego esta jugando, pero tal vez al igual que Harry, Draco simplemente se siente confundido sobre que debería hacer o que deberían hacer ambos. Así que antes de pensarlo mucho, se quita la bufanda y la rodea en el cuello de Draco, siente el frio del clima en que se encuentran, pero lo ignora para ver a Draco.
Su rostro parece algo sonrojado, levemente, pero su mirada parece un poco dilatada cuando inhala el aroma.
Como cuando Harry lo hizo con la bufanda de este.
¿Draco podría sentir tan bien el aroma de Harry como él con este?
Su cuerpo se estremece ante la idea.
—No pienso devolver esta bufanda—habla Draco antes de dar un paso hacía atrás, lo cual hace sonreír un poco a Harry al verlo protector con esta en su cuello.
—Me parece bien—lamenta un momento el regalo de su madre, pero sabe que es un buen uso—porque yo tampoco pienso devolver el tuyo—añade divertido y el rostro de Draco parece entretenido, antes de asentir.
Da unos pasos lejos, antes de voltear a verlo y Harry solamente se queda ahí, abrazándose sintiéndose un poco idiota porque no hay un beso.
Lo cual tiene sentido.
No es una cita, no importa que mucho quisiera que eso cambiara ahora, no debería desear más de lo que tiene.
—¿Estas libre el próximo viernes en la noche? —cuestiona Draco como si tuviera un arrebato de valentía y algo dentro de Harry se derrite.
No estaba libre, había quedado de salir con sus amigos a ver unas películas e ir de compras.
—Si, estoy libre—así que supone que deberá disculparse con ellos, porque cuando Draco sonríe asintiendo antes de marcharse, Harry se queda ahí.
Extrañando el aroma del chico y tal vez, solo tal vez, su compañía más de lo que debería.
Camina hacía su departamento, entrando y corriendo para buscar la chaqueta junto a la bufanda de Draco en medio de su nido, siguen oliendo a manzana y espera que lo huela unos días más; tal vez no tenga que regresarlos y tal vez, solo tal vez, Draco podría perfumarlos un poco más este viernes si se lo pida.
Joder.
Harry Potter esta jodido.
Pero se siente un poco optimista.
El aroma de manzana lo arrulla para dormir un poco en la tarde, pronto hablaría con Hermione, pero por ahora, solamente necesita este aroma para estar tranquilo.
Fin
Espero les gustara.
Al final me decidí por la idea de que iría variando entre cada capitulo desde el punto de vista de Harry y de Draco, para ir viendo como la relación de ambos va creciendo poco a poco. Es una idea interesante, no había planeado hacer una historia de esta temática, pero admito que veo el encanto ahora que estoy en medio de la acción.
