56. La verdad
—Señor, el hechizo tabú ha funcionado—dijo uno de los guardias sin apenas aliento, Johan se alzó en su trono gratamente sorprendido.
—¿Cómo que ha funcionado?
—Te lo dije, era cuestión de tiempo—dijo Bellatrix orgullosa. —mandarlos a investigar sigilosamente a cada persona que decía su nombre fue una buena táctica, bloquearon los espejos y tienen un lugar seguro a buen recaudo, pero no siempre podrían tenerlo todo tan atado.
—¿Dónde? —Preguntó Johan
—Ottery st. Catchpole—respondió el guerrero
—Esa es la casa de los traidores Weasley, que hablen de ella no significa nada, anormal, el amigo de Potter sale con ella—dijo Bellatrix desilusionada.
—No señora, nuestros informadores han localizado otra casa, la de los Lovegood.—el esbirro volvió a dirigirse a su rey— Los vieron a través del espejo del propietario, alguien dijo el nombre y apellido de….su esposa. Han visto a Potter, a Weasley, a Granger, a la hija de Lovegood y a Petrova
—¿A Petrova?— cuestionó Johan mascullando una sonrisa triunfal— Si Petrova está con ellos es serio.
—Sí mi señor, todavía no saben el tiempo al que viajó, fueron a otra habitación cuando suponemos que dijeron la época, pero al saber que estaban allí, mandé a uno de nuestros más sigilosos hombres para seguirles; los chicos llevaban un libro de recortes y se les cayó una fotografía; indudablemente es ella.—el guardia acercó la fotografía a su rey, este la tomó entre sus dedos y cruzó las piernas y sonrió como si estuviera escuchando un chisme de lo más jugoso, seguidamente arqueó divertido las cejas y negó con la cabeza.
—¿Está muy feliz no os parece? Lástima que no vaya a durarle mucho esa sonrisa—dijo Johan—Peterson, haced que Colett localice la época de esto, y cuando lo hagáis, quiero que viajéis los mejores y la traigáis a rastras ante mi, la quiero aquí desnuda, magullada, moralmente destruida y a punto de morir, Bellatrix os dirigirá.
—¿Yo? —dijo Bellatrix con una amplia sonrisa.
—Señor, sus designios son nuestras órdenes, pero…la princesa…dirige los ejércitos y es probable que nos dé muerte si…nos acompaña una…hmmm pura bruja.
—Colette no ha encontrado a la reina ¿verdad? —preguntó Johan con malicia—el hechizo tabú fue idea de Bellatrix, así que ella gozará del placer de torturarla tanto como le guste, aunque solo sea una bruja.
—Oh, tienes la esencia de mi señor—se conmovió Bellatrix
—Pero querida, controla, necesito que conserve su cerebro y su vida, la necesitaremos para nuestros planes ¿recuerdas? —Bellatrix asintió seducida, soñar con torturar a la chica Snape casi sin medida era algo que llevaba salivando mucho tiempo. —Decidle a Colett, que ella mantendrá el hechizo del portal cuando encontremos a mi esposa, no quiero que esté desocupada, así que ordenadle que se ponga manos a la obra y averigüe de dónde es la maldita foto.
—Sí, mi señor—dijeron todos. Johan mordió su labio con alegría, le complacía pensar en todo lo que iba a hacer soportar a Lilly, en cómo iba a romper su voluntad y su psique y en lo muchísimo que se iba a divertir a causa de su sufrimiento extremo.
— Te tengo, zorra—celebró Johan
….
—Sirius ¿estás seguro? Ni siquiera estáis juntos de verdad—dijo Peter no muy convencido. — Ni siquiera sabes si después de la fiesta volverá contigo.
—Me lo dijisteis al principio de curso y teníais razón, ella es la única que ha conseguido hacerme sentir lo que siento, y sinceramente, creo que ella es la mujer de mi vida.
—Solo tienes 18 años Sirius, te queda mucha vida por delante. —sugirió Remus poniéndolo a prueba.
—Cuando lo sabes, lo sabes, Remus, incluso aunque ella no esté preparada, yo sé que Lily es la mujer con la que pasaré mi vida hasta que seamos viejos— dijo James poniendo la mano sobre el hombro de su amigo, orgulloso. —¿Cuándo has pensado que ocurra?
—Bueno, al principio pensé en hacerlo cuando Peter transformado en elefante entrara al Gran Comedor para celebrar nuestro aniversario y le cantásemos la canción, pero también pienso en la graduación, pasemos los exámenes o no, es una fiesta fantástica.
—¿Y has ido a Hogsmade para comprarle el….—empezó a preguntar Remus.
—No, saltarían las alarmas de la prensa y todos se enterarían; escribí a mi tio Aphard y…—hizo una pausa y sacó el pequeño paquete de su baúl—le voy a dar el anillo con el que se casó mi tatarabuela Dorea.
—¿Eso es…uno de los diamantes de Cullinan? —preguntó James sabiendo que iba a ser destronado por su "hermano" en cuanto a anillos de compromiso se refería.
—La novena joya de la corona británica—presumió Sirius—una de mis antepasadas fue amante del rey George V y…este es el resultado, los muggles aún se creen que la suya es la auténtica.
—¿Y tu familia no te matará por darle esa reliquia a una chica que ni han aprobado, ni conocen, ni han investigado para saber su estatus sanguíneo? —preguntó Remus.
—Solo si se enteran, mi tío Aphard dice que es un desperdicio que algo así se quede acumulando polvo en una caja fuerte y que está muy orgulloso de que siente la cabeza,
—Cuéntame otra vez cómo decidiste que tenias que hacerlo.
—Aunque os parezca increíble, fue gracias a Snape, me dijo de todo, me enumeró todas las razones por las cuales yo era un malnacido que merecía la peor de las muertes, me dijo que hablaría con su familia para que ella no se me volviera a acercar y un montón de lindezas describiendo la atrocidad que es nuestra relación. Entonces pensé, que podía tener razón y sin embargo, decidía ser mejor por ella, ella me ha hecho disculparme con él y ni siquiera lo ha tenido que pedir.
—Nos dijiste que te lo ordenó Marlene—interrumpió Remus escéptico de si esto era real o una epifanía de su amigo.
—Bueno sí, pero en realidad, al principio no lo iba a hacer y se lo dije para que me ayudara, pero…conforme fue pasando el tiempo, me di cuenta de que quería ser mejor por Marie, ya no que me perdonara o que se conmoviera por mis actos, sino porque quiero…como dijo James, ser mejor hombre para merecerla. Por ello, cuando Snape me echaba todo en cara, le di la razón, pero me fui contento, porque mientras volvía a la sala común me prometí que no iba a perderla y decidí, que voy a casarme con Marie.
—Buena suerte entonces esta noche Canuto, por primera vez te verá con tu familia y no es que con ellos puedas sacar la mejor cara.—Deseó Remus
—Lo sé—dijo Sirius respirando hondo.
—Oye, volviendo a lo del anillo, ¿el día que nosotros queramos pedir matrimonio vosotros nos daréis algún diamante que os sobre, no? Por aquello de las comparaciones, vosotros diamantes, nosotros aros de cereales…—Propuso Peter haciendo estallar en carcajadas a los demás.
….
En la sala de los menesteres, Lilly Snape se había reunido con Lily Evans, Marlene y Alice para hablar de los cotilleos semanales y prepararla para la fiesta de Narcissa. Ya todas sabían que tenía permiso de Dumbledore para marcharse y estaban pletóricas porque el director le había comunicado que solo debería permanecer cinco días más en la casa verde, dando por hecho que volvería a Gryffindor para los últimos meses de curso.
—Marie, estás increíble—dijo Lily terminando de peinar la melena dorada de su amiga.
—¿Cuánto dinero se ha gastado Sirius en esta preciosidad?—preguntó Marlene admirando la perfección hecha vestido. Se trataba de un traje largo de color grisáceo, estaba encorsetado con pedrería de plata envejecida y la falda era de un tul delicado de varias tonalidades de acompañaban unos guantes largos de un perlado oscuro y Marie habia decidido complementarlo con la pulsera que Sirius le regaló.
—Ni idea pero le dije que pensaba preguntarle a Narcissa para saberlo si no me lo decía y….me ha prometido que tras la fiesta me lo confesará, lo que no sé es si me dará el curso para hacer trabajos de tanta gente a parte de lo mío para ganar a mitad de su precio.—suspiró.
—Hay mucho señor de sangre pura viudo que estaría encantado de pasar la noche con una jovencita a cambio de lo que para ellos pudiera ser calderilla, te costaría una noche y ahora estás soltera.—bromeó Marlene.
— Sí, solo tendrás que elegir entre explotación laboral-escolar o prostitución, lo tienes fácil.—ironizó Lily— Marlene, hay veces que me asustas.
—Dime que no es así como consigues las cosas caras que tienes—se preocupó Alice.
—Por supuesto que no—dictaminó ella haciendo una pausa intencionada mientras maquillaba a la joven Snape— yo los enamoro, requiere más esfuerzo en el tiempo y supone más regalos—bromeó sabiendo que iba a enervar a Alice.
—Pienso escribir a tu madre, que lo sepas—dijo Alice, Marlene simplemente cuatro chicas pasaron dos horas contándose chismes, penas e ilusiones hasta que terminaron de preparar a Marie.
—Bueno y…¿qué piensas hacer mañana?—preguntó Lily—La fiesta de Narcissa era el limite…para…Sirius, ya sabes— Marie suspiró.
—¿Sería muy malo que…quisiera… "volver con él"?— preguntó algo temerosa de la respuesta de sus amigas— Es que…desde que rompimos o…fingimos se ha estado portando tan bien que…no sé, no quiero separarme de él. Sentarse en la mesa de Slytherin a diario, seguir haciéndome reír sin intentar nada, cubrirme en ciertas cosas que me preguntan y que sabe que no le cuento, no caer en las provocaciones de Narcissa ni de Severus, incluso decirme que iba a disculparse con Severus y que sabía que saldría mal pero…que había comprendido que siempre tendría problemas conmigo porque hay cosas que hacía que no transijo….y decirme que mantiene la esperanza de recuperarme y ser mejor persona cuando le de la oportunidad a los treinta me…hace querer estar con él. Además fue tan sincero sobre ciertas cosas….
—Oye si lo que quieres es acostarte con él tienes nuestro beneplácito, llevas casi siete semanas sin sexo y todas sabemos que te subes por las paredes—bromeó Marlene seguida por las risitas de las demás.
—Y eso también, echo de menos todo lo que hace y lo bien que lo hace—continuó Marie— pero…en serio…¿creéis que me estoy equivocando?
—Creo que Sirius le ha visto las orejas al lobo y…es posible que haya escarmentado, a pesar de lo idiota que fue….sus sentimientos parecen puros y eso es esencial en cualquier relación—Comentó Marlene a sabiendas del pergamino de cincuenta centímetros que Sirius había escrito expresando sus sentimientos por Marie y que esta tardaría muchos años en descubrir. Marie miró entonces a Lily en espera de su impresión.
—Bueno, yo tengo información privilegiada por James y…sé, que todo lo que cuentas, es genuino, al contrario de lo que podíamos esperar, Sirius no hace lo que hace con el fin de "ablandar tu enfado", de verdad quiere ser mejor hombre para merecerte…y eso es digno de confianza.—dijo Lily, quien se había asegurado muy bien de que Sirius no estuviera otra vez siendo un idiota inmaduro que fuese a dañar a su amiga en un futuro.
—¿Alice?—preguntó Marie.
—La forma que tiene de mirarte es suficiente Marie…te ama y…si además de eso quiere convertirse en alguien con el que tu relación podría triunfar, yo me arriesgaría—sonrió apretando su mano.
—Gracias chicas—las abrazó Marie muy emocionada y aliviada, ella igualmente iba a seguir a su corazón pero le habría sido muy difícil confiar al 100% en todo si sus amigas no estaban seguras de su decisión.
—Bueno, ha llegado el momento mensual de nuestra máquina del tiempo— dijo Alice sacando una caja de madera y pronunciando el hechizo de apertura.—¿qué vais a meter esta vez?
—Yo voy a meter esta nueva página de nuestro diario colectivo, veréis la risa que nos hace leerlo todo cuando nuestras hijas o hijos terminen séptimo.—dijo Lilly conjurando unos pergaminos engordando un pequeño libro de encuadernación frágil.—y también, las flores que me regaló James en nuestra primera cita.
—Siguiendo la tradición, yo pondré dos "papelitos de chicle muggle"—dijo Alice con una sonrisa divertida guiñando un ojo.
—¿Qué `pasa si cuando abramos esto no tienes ni idea de lo que son en realidad esos papeles?—preguntó Marie —¿Qué pasa si se te olvida?
—Estaréis vosotras para recordármelo. Solo son ¿qué? ¿Veinte años? No seré tan vieja. Tendré la edad de alguno de los amantes actuales de Marlene, seguro.—Marlene se quedó patidifusa ante ese corte pero rio segundos después, pues le encantaba cuando su amiga dejaba de ser la chica buena y además era cierto.
—Yo, pondré aquí una carta de mi amante secreto el cual todas os morís por conocer y sí, voy a ser tan zorra de guardarme la información veinte años, a menos que me case con él, obviamente.
—Eso es cruel—dijo Lily.
—Eres peor que un mortífago—apoyó Marie— no contar quien es tu amante a tus amigas debería estar penado por ley.
—Tu maldad no tiene límite y como este recuerdo quedará invalidado si te casas, entonces tienes que poner una prenda de compensación, son las normas, de hecho pondrás dos, por mala pécora que se calla algo así—advirtió Alice.
—Está bien…. Pondré a baddy, mi conejito de peluche que rescatasteis de las zarpas de Angela Benet en primero, fuisteis las únicas que no os reísteis de que durmiera con él, ni de que lo siga haciendo.
—Awww Marlene eso es muy tierno, no lo sabía—se conmovió Marie.
—No te dejes engañar por esa ternura que…no me está haciendo llorar en absoluto—Dijo Alice con la voz quebrada y las lágrimas agolpadas en los ojos.—tercera prenda, vamos.
—Está bien—dijo Marlene poniendo una especie de bolita de acero en la caja.
—¿Qué se supone que es eso?—preguntó Lily escrutando la pelotita.
—Un regalo muy especial de "él" en 20 años os enseñaré lo que hace y no, no es nada guarro ni sexual—advirtió—Marie, te toca.
—Bien, yo voy a poner el primer test chorra de corazón de bruja sobre nuestra pareja ideal que rellenamos juntas, a ver si realmente tiene un 100% de fiabilidad y si es así, al menos nos bañaremos en la piscina del marido mafioso-traficante de Marlene —todas rieron recordando su primera mañana de tests y como esta acabó con la mayor humillación pública de Sirius—y…os quiero pedir que retrasemos mi segunda entrega, pienso poner este colgante de plata envejecida, dentro tiene un copo de nieve conservado en fuego azul, lo tengo desde que tengo memoria y… es muy especial para mi.
—Sin duda me suena a ti, un copo de nieve que se conserva en fuego, delicada, resistente, explosiva a veces, tanto el fuego como el hielo son capaces de mucho bien y mucho mal—analizo Lily.
—Quiero llevarlo esta noche, me pega muy bien con el vestido, pero Alice es la guardiana de este mes, tienes que darme permiso.—pidió Marie.
—Está bien, siendo así consiento una demora, es cierto que es muy especial para ti, nunca te lo quitas, me apuesto lo que sea a que sale en alguna primera plana del anuario ¿no estaba muy fascinado con eso el niño ese al que das clase? Mmmm ¿Lovegood?
—Oh sí, lo estaba, normalmente lo llevo guardado bajo el uniforme pero un dia que estaba nerviosa lo saqué y le fascinó, sin embargo al pobre las fotos de cerca nunca le salen bien, debe ser que el fuego destella la cámara a poca distancia.—explicó la joven Snape.
—Oh no—dijo Lily al ver el reloj, todas se quedaron expectantes— Alice habíamos quedado con James y Frank hace veinte minutos.
—Mierda…no me había dado cuenta—se apuró Alice mirando a Marie.
—Yo la ayudo a todo lo demás, no os preocupéis.—aseguró Marlene.
—Id tranquilas—pidió Marie.
—¡Pásalo bien, y ten cuidado!—dijeron ambas mientras se marchaban.
—Marlene — rompió el silencio Marie—tú….te codeas con gente de…una alcurnia…elevada sin que tu familia sea de esa línea…¿tienes algún consejo? Estoy un poco nerviosa y no quiero preguntarle esto a Narcissa porque creerá que soy una paleta, ni a Sirius porque me protegerá de todo lo que crea que puede suponer una amenaza a mi seguridad.
—Bueno, lo primero sería ser discreta y no hablar demasiado, toda aquella persona que es externa les causa fascinación, y con tu lenguaje corporal y una conversación superficial suelen identificar quien pertenece a su estatus y quien no. Lo bueno de que sepan que no, es que te ignorarán, lo malo es si dudan porque intentarán ponerte a prueba.
—Vale, ser discreta…no sé si eso será posible porque acompaño a un Black renegado que en teoría ha sentado la cabeza conmigo, es probable que les interese mucho.
—Entonces finge beber con elegancia, escucha e intenta responder con otras preguntas, y si te hacen algo, cállate, levanta la cabeza y haz lo que tengas previsto hacer aguantando lo que sea que digan o hagan, aunque sea raro o…inusual.—Marie la miró con extrañeza a través del espejo mientras esta le abrochaba los botones del vestido; se giró y confrontó a su amiga.
—Marlene, ahora me estás preocupando en serio—tomó las manos de su rubia y dulce amiga—escucha yo no soy, juzgona como Lily ni…conozco a tus padres para chivarles lo que sea que hagas como Alice, ¿con quien estás que…te ha hecho enfrentarte a esas situaciones?
—Si te lo contara tendrías que decirlo, no te gustaría.
—¿Pero es que estás saliendo con Voldemort o que? —preguntó Marie un poco harta de tanto misterio.
—¡No digas ese nombre!¡¿sabes la cantidad de gente que ha muerto por eso?!—se escandalizó Marlene.
—Perdona—se disculpó Marie mirándola en silencio, pero con preocupación.
—Dejémoslo en que…es alguien famoso que…no tiene muy buena reputación, decir su nombre sería arriesgar mucho su vida privada y pública.
—Vale y…¿esa mala reputación es merecida?
—A veces…—confesó Marlene—él es…rico tiene unos gustos un poco…peculiares y…no siempre es lo más agradable del mundo conmigo delante de sus amigos o conocidos, pero luego, es tan cariñoso cuando estamos a solas…este verano supo que estaba triste porque mi tio estaba enfermo y me sorprendió llevándome de viaje a Taiwan.
—Vaya, una mezcla un tanto opuesta….—opinó Marie.—¿Y cómo lo conociste?
—Pues…fue el año pasado, tras ser rechazada por Remus por tercera vez, no se lo dije a Alice ni a Lily porque me sentía humillada; el fin de semana donde ellas iban con sus novios a Hogsmade yo me fui a un antro secreto que hay en el callejón Nockturn; algunos amigos de…alto perfil que tengo, me hablaron de ese sitio e irónicamente es bastante selecto, podrías incluso encontrarte al Ministro, digamos que es un lugar al que puede ir la gente de cierto estatus sin las molestias de la prensa.
—Sí, comprendo.
—Yo estaba bebiendo y él….llamémoslo Sr. Darcy vino a decirme que no tenia la edad para ello, lo reconocí instantáneamente y no quise tratar con él pero fue muy amable conmigo y me animé a darle una oportunidad.
—Es gracioso que lo llames así, es una de mis novelas favoritas.
—Y de las mías—sonrió Marlene mientras arreglaba las uñas de su amiga— En fin, estuvimos hablando durante horas y horas y al final…nos acostamos.
—Y conociéndote me supongo que era una bestia en la cama y fue algo maravilloso.
—La verdad es que fue desastroso…me despedí de él en buenos términos y esperé no volver a verlo nunca, pero él me escribió muchas veces, acepté volver a verle y se disculpó, me dijo que una bruja le había maldecido cuando era niño y tenia una afección sexual que no le permitía satisfacer a una mujer ni llegar a satisfacerse por completo. Entonces se me ocurrió decirle que yo era una pocionista maravillosa y podría remediar, al menos durante unas horas su afección.
—¿Pocionista maravillosa?—rio Marie—¿tú? Severus lleva sufriendo semanas por ti porque no consigues hacer ni una poción a derechas, dice que te prefiere de compañera porque aunque te ponen su nota, siempre estás callada sin molestar y obedeces a todo, mientras que yo no paro de discutirle.
—Lo sé, imagino que quise impresionarle, por eso le pedí a Severus que me hiciera esa poción.
—¿Le pediste a Sev una poción sexual para tu amante?—preguntó Marie escandalizada—¿te dijo que sí?
—Le dijo que sí al dinero que mi sr. Darcy me dio para él, pero a día de hoy me sigue llamando degenerada.
—Me pega con Severus, vale, bueno, ¿y la poción funcionó bien?
—Más o menos, digamos que demasiado bien, surtió el efecto que queríamos pero, descubrió ciertos fetiches que…aunque los hago no me gustan mucho.
—No deberías hacer nada que no te guste…—dijo Marie, quien tras una mirada esquiva de Marlene decidió seguir hablando para que no creyera que la juzgaba.—Es decir…debería ser divertido para los dos ¿no?
—Supongo, pero Darcy tiene la extraña capacidad de hacer que quieras agradarle; aunque cuando me presentó a sus amigos, todos sabían que yo había accedido a….
—A…—invitó Marie, Marlene se mordió el labio pero se sintió en confianza para hablar.
—Sus amigos me apodaron "Traga-fortunas" no caza fortunas, sino…eso porque él me dijo una noche que tragase su…ya sabes qué, después del sexo oral, y….me quedé bloqueada porque nunca lo había hecho pero….lo hice y…lo contó.—confesó avergonzada.
—Marlene eso es….horrible no te mereces algo así…no te merece.—se apenó Marie tratando de no mostrar su indignación para que su amiga no se sintiera juzgada; ambas se quedaron en silencio unos segundos.
—Habrás de pensar que soy una puta…y que soy asquerosa…por acceder a eso y sé que es cierto pero…
—Yo también lo he hecho con Sirius—confesó Marie—me salió por instinto y ni siquiera me lo pidió, pero no se lo digas a Lily ni a Alice porque me llevarían a San Mungo.
—Pero Sirius no ha ido por ahí contando eso a sus amigos.
—No volvería a verme el pelo si así fuera, ¿Qué hiciste cuando te llamaron así?
—Tuve que soportar toda una velada de alusión a líquidos blancos, a prostitución y decencia de la mujer, porque montar una escena hubiera hecho que me torturaran más, pero cuando acabó la "fiesta" o lo que fuera eso, le di una patada en sus partes y le dije que no quería volver a verle jamás. Sin embargo….volvió a buscarme, le rechacé infinidad de veces y un día que me vio con Lockhart en Hogsmade, presenció como me llevó a un callejón para que hiciéramos cosas y me dijo que solo había salido conmigo porque yo era la "facilona" del colegio.
—Menudo desgraciado….
—No lo culpo, es verdad que…me he ganado la fama a pulso, me gusta demasiado el sexo y…¿tengo un problema? Seguramente, pero ese día yo estaba muy sensible, lloré y "Darcy" lo vio, le dio una paliza a Guilderoy y…pasamos toda la tarde hablando, me juró que jamás volvería a decir nada, me dijo que me quería y…muchas cosas pero….en sus fantasías cada vez es más particular y…es altanero y despectivo cuando no estamos a solas, pero me manda cartas preciosas y me regala cosas y me lleva de viaje...me marea tanto que…me vuelve loca. Sé que no está bien pero es que….
—Estás enamorada de él ¿verdad?—preguntó Lilly Snape con pena. Marlene asintió, sus ojos se aguaron— creí que estabas enamorada de Remus.
—Esa es la cosa, que también lo estoy, él es tan puro, tan sincero, tan inteligente, tan amable y tan honesto….—secó una lágrima corriendo por su mejilla—pero claramente algo muy raro tengo que tener para que me rechace tantas veces desde hace años…imagino que ahora, el hecho de que me haya tirado a medio Hogwarts le dará asco.
—Eso no es cierto, estoy convencida de que no es así, que no te juzga—Marlene alzó los hombros.
—Sea lo que sea…realmente da igual, al final lo más difícil de todo es amar a dos personas y decidir a quién o a qué renuncias, saber si tomarás la decisión correcta o será un error que lamentarás siempre, o, peor, que vivirás con la carga de haberle herido, pero, lo que me pasa ahora es que….pienso a todas horas en "Darcy" y siento que no puedo vivir sin él, pero cada vez que Remus me mira, siento que el corazón se me va a salir del pecho.
—Siento mucho que hayas pensado que no podías contar con nosotras para expresar todo lo que te está pasando—dijo Marie tomando sus manos con la sensibilidad a flor de piel. Marlene se recompuso.
—Eh, nada de llorar, me ha costado mucho dejarte un maquillaje perfecto—advirtió Marlene levantando un dedo y volteando a Marie para abrocharle el vestido—Ya basta de hablar de mi, estaré bien, volviendo a lo de los consejos, como te digo, discreción, sonrisas fingidas y paciencia, es todo lo que necesitas. Estarás bien, ya verás.—Marlene terminó de acicalar a Marie y la acompañó hasta el despacho de Dumbledore para que usara un traslador que la llevaría a una bonita bodega del condado de Essex; allí la recogería un carruaje, pues Narcissa había prohibido las apariciones y ninguna invitada iba a manchar los bajos de su vestido con la ceniza de ninguna chimenea.
—No sabía que estarías aquí cuando llegase—se sorprendió Marie al ser esperada por Sirius en la puerta del carruaje.
—No me perdonaría no ser el primero que contemplara lo espectacular que estás.
—Te has pasado con el vestido, te dije algo sencillo y tiene engarces de plata y seda egipcia.—dijo ella sonriendo.
—Agradece que no está hecho de pelo de unicornio, es sencillo dentro de mis estándares—respondió Sirius con una sonrisa pícara ofreciéndole su mano para subir al vehículo.
—Tendré que pedir un préstamo en Gringotts por tus estándares.—contestó mientras se sentaba, Sirus se sentó a su lado, observando embelesado su belleza.
—O lo puedes aceptar como un regalo.
—Ya he aceptado regalos muy caros ¿no te parece?—soltó la indirecta, Sirius se fijó en sus muñecas y sonrió.
—Llevas la pulsera que te regalé
—Así es….—ambos se miraron, Sirius acarició un mechón de pelo de ella. El silencio reinó entre los dos, haciendo que sus ojos hablaran por ellos.
—¿Significa eso que…después de la fiesta la seguirás conservando?
—Puede….—se quedaron en silencio—o quizá la venda para pagarte este vestido, quien sabe—completó no queriendo ponérselo tan fácil.
—¿Qué te dijeron tus amigas cuando les enseñaste la pulsera? ¿Pensaron que soy un pretencioso?
—Alice casi se desmaya de lo que brillaba, Lily dijo que te habías excedido mucho, y Marlene me dijo que no entendía como no tenía ya las bragas en el suelo.—Sirius rio.
—Siempre he dicho que la sabiduría de Marlene ha de escucharse—Marie sonrió unos instantes pero su expresión cambió, Sirius la miró con curiosidad.—¿He dicho algo malo?
—No…no, para nada es solo que….—suspiró—estoy muy preocupada por Marlene.
—Marlene sabe cuidarse, solo se hace la dura y la interesante.
—Eso creía yo, pero la verdad es que…temo que se meta en un jardín peligroso del que no pueda salir…
—¿Cómo es eso?—Marie hizo jurar a Sirius guardar silencio bajo amenaza de no volver a hablarle jamás, y comenzó a relatarle a grandes rasgos los secretos de su amiga.
—….y por su culpa sus amigos empezaron a llamarla de una forma repugnante, no respeta la intimidad, creo que es muy peligroso que se haya enamorado de alguien así.
—Pero no lo entiendo, Marlene es de las personas más valientes y luchadoras que conozco ¿Cómo alguien como ella se enamora de otra persona que la humilla, la desprecia y la trata así?
—Supongo que el hecho de que Remus la rechazase tanto pudo influir en su autoestima negativamente y este "famoso imbécil" vio una oportunidad dorada para manipularla a su antojo.—Sirius cerró los ojos y frunció los labios.—No culpo a Remus, es entendible que no quieras dar esperanzas a alguien que no te gusta, sería cruel…pero…
—Remus no la rechaza porque ella no le guste…—dijo fastidiado, él apreciaba mucho a Marlene, aparte de agradecer su inestimable ayuda con Marie, siempre se había llevado muy bien con ella y le apenaba profundamente esa situación.
—Bueno…por todas las parejas que tiene…hay chicos más conservadores a los que eso…
—No—la interrumpió con molestia—Remus lleva enamorado de ella desde tercer curso pero…él no se siente…"digno"
—¡¿Perdona?! ¿Qué tontería es esa? Si a él le gusta Marlene y sabe que a ella también ¿por qué retirarse?
—Remus es complicado Marie…
—Hay algo que no me cuentas—advirtió ella, Sirius tragó saliva y dejó de mirarla.
—No….—mintió
—Claro que sí, arrugas la nariz y retiras la mirada cuando escondes algo, sabes más de lo que me dices.
—No, qué va…
—¡Otra vez! Sirius dime lo que pasa—pidió. Sirius la miró a los ojos, sabía que podía confiar en ella y en circunstancias extremas se lo hubiera dicho, pero no era su secreto.
—Remus tiene…una especie de…. "enfermedad" desde pequeño, es peligrosa y no saben aún si puede ser genética, por eso Remus prefiere no…establecer relaciones de pareja que en un futuro tengan que verse condenadas a soportar su problema o…que sus hijos lo hereden…rechaza a Marlene para protegerla de él.
—Eso, es injusto y es absurdo, está eligiendo por ella y por todas las personas que le puedan querer, él no tendría que tomar esa decisión por nadie, Remus es atento, es inteligente, es muy buen amigo, es sensible, es divertido y responsable, tiene muchas virtudes que seguro que para quien le ame de verdad, superan todos los problemas que su enfermedad pueda dar.
—Yo pienso como tú, pero Remus es un terco, puede que si le digo lo que Marlene está sufriendo….
—Ni se te ocurra, si le hace caso justo después de haberme contado eso sabrá que te lo he dicho; lo que me preocupa no es que sea correspondida con Remus, incluso que esté el monstruo con el que está, me preocupa que no haya confiado en nosotras para decirnos todo esto antes, me preocupa haber estado tan pendiente de mi misma o de ti…que no haya sido capaz de ver que ella estaba metiéndose con gente peligrosa…de verdad creía que ciertos comentarios eran bromas, pero al parecer no…
—Eeeh…—consoló Sirius poniendo un brazo por encima de sus hombros—vamos no te culpes, yo tampoco lo habría imaginado de alguien como Marlene, yo la creía un alma libre y ninfómana como yo que sentaría la cabeza a su momento.
—Prométeme una cosa—pidió Marie apoyándose en su pecho—si alguna vez me pasara algo…
—Eso no va a ocurrir porque yo te protegeré de todos los males, incluso de mi si hace falta.—Marie sonrió y puso su mano en la mejilla de Sirius con ternura
—Vale, pero si ocurriera….prométeme que cuidarás de Marlene, que no dejarás que se adentre en nada turbio u oscuro ni…permitirás que nadie la trate como no se debe.
—Te lo juro…—el carruaje se detuvo, Sirius resopló.
—¿Estás bien?—preguntó Marie
—No, hace dos años que no veo a mi familia y….esto va a ser raro, espero que valores que esto lo hago únicamente por lo mucho que te quiero.—Marie no medió palabra, tomó a Sirius de las solapas de su túnica y le besó dulcemente.
—Yo también te quiero.—Sirius enredó sus dedos en la melena de la joven Snape y le devolvió el beso.
—Te juro por mi vida que no te arrepentirás jamás de ello, Eres la única para mi Marie, y lo serás siempre.—juró deslizando la palma por su mejila y cuando los labios de ambos se encontraban a milímetros, alguien les abrió la puerta de golpe.
—¿Cuánto tiempo pretendéis estar ahí dentro? Narcissa nos cortará en pedacitos si llegamos tarde.—apercibió Regulus. Marie se disculpó, se retocó el labial y ayudada por Regulus y por Sirius, que había salido antes que ella, bajó del carruaje. Marie se impresionó de la mansión señorial que se erigía ante sus ojos; el jardín estaba lleno de setos cuidadosamente cortados, enmarcando el camino por el que debían andar los invitados hasta la puerta. La joven Snape observó también que había una inmensa fuente ovalada en el jardín delantero y se extendía desde el inicio del mismo hasta el porche de entrada. El porche estaba formado por columnas corintias de un blanco perlado, dando más majestuosidad al portón de enrejado a forma de enredadera y cristal.
—Oh Merlín….¡¿esta es vuestra casa?!
—No, papá prefirió el centro de Londres, y aunque la casa tenga siete pisos, no es esto.
—Esta era mi casa—dijo Andrómeda bajando del carruaje cubierta por una capucha para que nadie la viera antes de tomarse la poción.
—Andie—Marie la abrazó fuertemente antes que cualquiera de sus primos, algo que extrañó muchísimo a ambos puesto que apenas se conocían, pero pensaron que era cosa de chicas al ver que Andrómeda respondía en la misma medida.
—Merlín, Regulus qué mayor estás, te has vuelto guapísimo, te pareces al tio Hervert.—apreció Andrómeda siendo besada en la mejilla por su primo menor.
—Tú también estás preciosa Andrómeda, te recuerdo de cuando tenía nueve años y el tiempo no ha pasado por ti.
—Mi tio Hervert fue modelo de túnicas masculinas hasta bien entrados los cincuenta años, la gente decía que cada vez que pisaba una sala era como si gasificara amortentia sobre todo el mundo, era bastante atractivo y bien parecido—le explicó Sirius a Marie mientras su hermano y su prima se ponían al día
—Sirius….—Andrómeda abrió los brazos y Sirius correspondió—tienes que volver a venir a casa algún día, Ted dice que no quiere que se cumpla un año sin probar tu moto voladora.
—Eso está hecho, pero la próxima vez iré con Marie—Andie miró a Marie con dulzura, como si sintiera un amor inmenso por su persona, no entendía por qué, pero le generaba ese efecto. Mariie le dio la poción multijugos a la mediana de los Black y esta contuvo sus arcadas una vez llegó el mejunje a su paladar. Tras unos segundos ya era idéntica a Marie.
—No habría nada que me agradase más—dijo sonriendo—bueno, sí lo habría, que mi hermana no se casase con el pretencioso, imbécil, infiel, embustero, manipulador y torturador de Malfoy, eso sería lo que más feliz me haría.—Marie le proporcionó más frasquitos de poción multijugos para que renovara su aspecto al pasar las horas y Andrómeda las dejó a buen recaudo en su bolso con hechizo de extensión indetectable.— Se merecería que ella cancelase el compromiso por un hombre de verdad.
—Amén—respondió Regulus, encendiendo un cigarrillo y expulsando el humo—¿caminamos?—las chicas asintieron adelantándose y Regulus les dio paso.
—¿Y tú desde cuando fumas?¿Ahora te has vuelto un malote o qué?—preguntó Sirius con sorna.
—Desde que necesito relajarme para no arramblar contra la gente por cosas injustas de la vida como que tú seas un cabrón con tu novia y ella aun así te ame y te perdone y yo, comportándome como se debe con quien quiero, voy a verla casarse con otro.
—No soy un cabrón con Marie, la amo de verdad—se defendió.
—Por eso vino a Slytherin ¿no? Ni te esfuerces, ya me contó lo que hiciste con Pevensy y que cortasteis, todo este numerito lo estamos montando por nuestra prima.
—¿Tú eres tonto? Por si no te has dado cuenta, lo que Narcissa haga o deje de hacer con su vida me da exactamente igual, ella ya tiene decidido su rumbo con ese anormal de Malfoy, si por mi fuera, no se casaría con él; todo esto lo hago por Marie, porque a ella le importa ayudar a Cissy.
—Por eso y porque eso te ha permitido seguir estando cerca de ella y reconquistarla, no hagas como si fuera desinteresado.
—¿Me ha venido bien todo esto? Sí, pero por desgracia no vengo a una "fiesta" con mi novia, vengo a pasarlo mal viendo a mamá y a papá, que me odian, a mis tios para que hablen de la deshonra que soy por pisar su casa, a sus amigos para que cuchicheen y a sentir las miradas clavadas en mi nuca.
—Eres una decepción para toda tu familia, eso ya lo sabes desde hace años —dio una calada y Sirius interrumpió su discurso.
—Veo que para ti también.
—Dependerá de ti, sentí mucha rabia cuando supe lo de Pevensy; en ese momento, te merecías que le hubiese hablado mal a Marie de ti hasta que te odiara y que me fuese a la cama con ella; si el mundo fuera justo, es lo que habrías tenido.—soltó el humo.
—Decirle a tu hermano mayor que te quieres follar a su novia no es lo más inteligente sabiendo cómo es mi gancho de derecha Regulus—amenazó Sirius un tanto molesto.
—Despierta idiota, cualquiera que tenga ojos es lo que quiere ¿te ha pasado desapercibido lo buena que está? ¿o es que crees que tus amigos no lo piensan?—Sirius olió algo raro en su hermano, algo parecido al regaliz.
—Reg, ese cigarro no es normal, ¿Qué estás aspirando?—se preocupó
—Algo que no te importa.—dijo con mala cara escondiéndolo.
—Solo quiero ayudar
—¿Quieres ayudar? Pues no desperdicies las oportunidades que tienes, porque tú puedes vivir la vida que yo no puedo. Tuve un rayo de esperanza cuando supe que te disculpaste con Snape pero no puedo evitar pensar que la fastidiarás de nuevo con tus tonterías.
—¿Y tú como sabes lo de Snape?
—Se pavonea diciendo que te humilló y le pediste perdón llorando.—dio otra calada—no me lo creo, pero Marie no me lo ha dicho y eso implica que lo hiciste porque aceptas que él será parte de su vida aunque no te guste. Pero no sé, si haces todo eso para recuperarla y cuando ya vuelva a ti, volverás a pifiarla con tus celos y tus bobadas.
—No lo haré, te lo prometo.
—Bien, porque si lo haces quedas avisado de que entraré en escena, estoy harto de que mamá me lleve a sus reuniones para que sus amigas piensen si emparejan a sus hijas de nueve años conmigo y si tú te quitas de en medio, tengo muy cerca a Marie y ella podría ser una buena esposa para mi; es lista, guapa, Slytherin, grácil y culta; me quitaría a mamá de encima y se dice que sois bastante fogosos, por lo que seguro que encima me lo pasaría bien. No quiero hacerte daño, pero si eres tan imbécil de comportarte como un inmaduro, entonces sí serás una decepción y…
—Vale, ya basta, no quería decirlo a nadie más que a mis amigos, pero visto que no tendrías problema en acostarte con ella y que si no te demuestro lo que la quiero lo terminarás haciendo, ahí va—Sirius se aseguró de que no le escucharan—Voy a pedirle matrimonio antes de que acabe el curso.
—¿Perdón?—preguntó Regulus impresionado—¿Tú, sentando la cabeza?
—Así es hermanito, sé que lo de Cassandra te destroza, pero, en serio, soy consciente de la suerte inmerecida que tengo y tú no tienes, te doy mi palabra de que haré lo que debo, es más, te doy mi palabra, de que serás el único Black orgulloso de mi.
—Eso espero Sirius, de verdad—dijo con una sombra de sonrisa—Enhorabuena.
—No me la des aún, Marie no ha aceptado todavía.
—Marie te ama con toda su alma, créeme, te dirá que sí.
…..
—Estás espectacular querida—dijo Andie.
—Bueno, es mérito de Sirius, casi me da un infarto cuando tu hermana dijo que tenia que comprarme otro vestido distinto al único que t…conservo, mi padre ha cortado el grifo y no tenia como pagar otro, pero le voy a devolver lo que le haya costado.
—Oh querida, es demasiado dinero, págaselo en carne, se entenderá mejor saldado, tú ya me entiendes—Marie se ruborizó y rió un poco—Pero en realidad no me refería a tu atuendo, eres tú, estás radiante.
—Puede que eso también se deba a él, que haya venido aquí a pesar de no llevarse del todo bien con Cissy y…con lo que le espera dentro….sé que no es fácil y…sé que lo hace por mi.
—Sirius siempre ha sido incondicional con quien quiere de verdad, Cissy y Regulus no lo ven, pero como "renegada" sé lo duro que es saber que les hablarán mal de ti a tus hermanos, que pensarán que no les quieres por irte, o que si no eres parte de la familia es porque no te importan o porque no quieres verlos jamás. No defiendo la actitud de mi primo con mi hermana ni con Reg pero…es su forma de evitarles lo que tanto Cissy como yo tuvimos que pasar al principio. Cissy tenía 10 años cuando me echaron de esta casa y cada vez que intentaba volver, era muy difícil para ella.
—No tengo hermanos pero, si ahora me separaran a la fuerza de uno de mis amigos….no sé cómo podría soportarlo.
—Sí son la mitad de buenos amigos que tú con mi hermana, podrás imaginarlo—dijo Andrómeda con cariño.—Por cierto, todavía no te he agradecido suficiente que estés haciendo todo esto por mi hermana; Ted, Nimphadora y Cissy son lo que más quiero en este mundo, y saber que tiene una amiga que no se le pega por interés y que se preocupa de verdad por lo que siente y lo que quiere….me tranquiliza mucho.
—Cissy siempre fue muy amable conmigo, fue fácil ser su amiga, es una chica muy lista, perceptiva y sensible, ojalá todo el mundo pudiera ver el talento que tiene y supiera apreciarlo como merece.
—Tu madre te educó bien Marie, ver el fondo de las personas no es algo que todo el mundo pueda hacer—Marie sonrió—Oh, espera, se te ha soltado este mechón de cabello ¿me dejas arreglarlo?
—Por supuesto—Marie se giró, Andrómeda tomó uno de los pequeños pasadores que adornaban su pelo y lo fijó con fuerza; en ese momento una imagen vino a la cabeza de ambas, una mujer peinaba una larga melena ondulada de color azabache de una niña y fijaba con fuerza una horquilla para recoger parte del pelo de la pequeña.
[—¿Ya puedo mami?
—Sí, ya puedes señorita impaciente, —la niña corrió a verse en un espejo, era preciosa, tendría unos cinco años, ojos negros, pelo negro, una sonrisa radiante y un vestido verde manzana que la hacía ver adorable.
—¡Me encanta, mami me has puesto muy guapa!—la mujer se acercó al espejo y se miró con ella, era Andrómeda, pero tenía las marcas de expresión más marcadas por la edad. Esta sonrió y le dio un beso en la coronilla a la niña.
—Eres muy guapa Lilly, has salido a tu madre en tantísimas cosas…—dijo en clave recibiendo un abrazo muy tierno de quien seguramente era su hija]
—Ah—Andrómeda dio un respingo y al ver los ojos de Marie supo que no solo ella había visto esas imágenes.—¿Tú también lo has visto verdad?
—Sí, pero no sé qué significa, a veces veo…algunas cosas sin sentido, quizá tengo dotes de adivinación de alguna clase…pero creo que significa que tendrás otra hija—sonrió Marie—quizá ella sí sea buena con el piano.
—Sí….es posible—Andrómeda observó a la joven Snape con mucho detenimiento, juraría que esa niña era ella pero con colores diferentes de pelo y de ojos; la expresión, la sonrisa e incluso el sentimiento que le generaban ella y esa visión, eran muy similares, demasiado para ser una coincidencia. Los chicos llegaron a la puerta y tomaron del brazo a sus acompañantes, entrando en la gran mansión.
—¿Nombres?—preguntó el mago de la puerta con un pergamino y una vuelapluma.
—Marie Mikaelson y…—empezó a decir Regulus, dándose cuenta de que no habían pensado en otro nombre
—Lilly Mikaelson, querido, a ver si voy a ponerme celosa de que te acuerdes del nombre de mi hermana y no del mío—intervino Andrómeda aprovechando el nombre de la niña de su visión.
—Eso, las señoritas Marie y Lilly Mikaelson y…los señores Regulus y Sirius Black—el mago lo miró de forma extraña.
—¿Ha dicho Sirius Black?
—¿Algún problema? —preguntó Sirius preocupándose ya por los obstáculos de su familia.
—No, disculpe, adelante.—el mago se retiró rápidamente como si acabara de recordar algo y les permitió el paso.
—Intenta no reaccionar demasiado—le susurró Sirius a Marie al ver como esta comenzaba a abrir la boca con admiración y a mirar hacia arriba.—Si creen que no estás acostumbrada te comerán.
—Gracias—apreció ella, pues estaba a punto de exclamar lo preciosas que eran la lámpara y la doble escalinata que atraía todas las miradas en el salón.
—¿Champagne, amo Regulus?— Irrumpió Kreacher
—Sí gracias—Regulus tomó dos copas y le tendió una a su prima. Kreacher se quedó mirando a Andrómeda con desagrado, como si pudiera ver quien era a pesar de la poción.— Kreacher deja de mirar a mi acompañante y no le digas a nadie, elfo o persona, lo que crees ver ¿entendido?—dijo Regulus con calma. Kreacher hizo una reverencia acercándose al hermano que odiaba para ofrecer bebida.
–¿Desea el amo Sirius algún brebaje para consumir o veneno para envenenar?
—Sí, trae veneno y bébetelo— respondió él.
—Ni se te ocurra Kreacher, te ordeno que ignores la orden de mi hermano—intervino Regulus, luego se dirigió a Sirius con reproche—¿estás en tus cabales? Sabes que esas cosas no se tienen que decir.
—Es un elfo, porque no me llegue a las rodillas y vaya desnudo, no es un perro adorable.—contestó con desdén.
—¿La señorita desea algo?—preguntó Kreacher a Marie.
—Oh, sí, gracias—contestó la joven tomando una copa, ajena a lo que acababa de pasar por fijarse en los bonitos muebles y decoración. Kreacher se quedó embobado mirándola.
—¿Se puede saber por qué la miras tanto a mi novia?—preguntó Sirius sospechando de que sus padres tuvieran algo preparado contra ambos, Kreacher agachó la cabeza— Habla.
—Su novia le resulta peculiar a Kreacher amo Sirius, es como si no perteneciese aquí, pero al mismo tiempo sí…los elfos podemos percibir muchas cosas.—dijo mirando a Andrómeda—su novia es sin duda una sangre pura de familias emparentadas con los Black—Marie se atragantó.
—No le hagas ni caso, es idiota, cierra la bocha Kreacher— se molestó Sirius—voy a por algo de comer, ¿Te vienes mi amor?
—En un rato…—dijo un poco descolocada, Regulus le indicó a Kreacher que guardara silencio señalando a Andie y poniendo un dedo en sus labios para después retirarse con Sirius, Andrómeda fingió hablar con una invitada sobre su vestido pero sabía que algo extraño ocurría, ella lo había percibido y el elfo también.—Kreacher ¿qué has querido decir?—persiguió al elfo.
— Kreacher vive para servir a la noble familia de los Black, Kreacher solo hará su trabajo.
—Si según tú estoy emparentada ¿eso no implicaría tener que contestarme?
—Todas las familias están emparentadas con los Black señorita, solo obedezco a los miembros que forman parte de la familia.
—¿Eso incluye a los expulsados?—preguntó Marie desconcertando a Kreacher—porque en pura lógica, Sirius ya no pertenece a la familia así que solo tendrías que seguir obedeciendo a Regulus.
—El amo Regulus es amable, el amo Sirius es una vergüenza para mi ama.
—¿A quién preferiría tu ama que obedecieras?—Marie vio como Kreacher primero sonreía pero luego se ponía nervioso.—Solo quiero saber cómo sabes que soy sangre pura y por qué te soy tan particular…nada más.
—Los elfos domésticos somos criaturas capaces de percibir en cualquier momento la sangre de los magos que vemos, que vieron nuestros antepasados o que veremos en el futuro…incluso aquellas de otras realidades y usted es como si se multiplicara en muchos de ellos, solo que no sé cuales—de pronto se escuchó una voz llamar al elfo y este desapareció, dejando aún más confundida a la joven Snape.
—Heey, ¿todo bien?—preguntó Andrómeda cuando se acercó—Kreacher siempre ha sido muy …poco accesible no te asustes, a veces los elfos dicen cosas raras, otros son como bufones y hay algunos que son los sustitutos de tus padres porque prácticamente te han criado. Mi elfina era genial, aunque, si quieres derretirte de amor puedes hablar con ese de ahí, se llama Dobby, es el elfo de los Malfoy, es adorable, pero se nota que Abraxas y Genevieve no le dejaron ni tocar a su pulcro y superior Lucius…créeme que preferiría que mi hermana se casase con ese elfo a que se case con ese monstruo.—dijo terminando su copa.
—Se nota que te cae genial—ironizó Marie, ambas sonrieron cómplices.
—Creo que si tuviera que decir si es peor Quien Tú Sabes o Lucius, diría sin margen de duda que Lucius— De pronto, un tintineo sonó y todos dirigieron su atención a quien provocaba el sonido; el señor Abraxas Malfoy comenzó a hablar de los Malfoy y de la grandeza de su sangre, su apellido, su riqueza, su influencia, su mansión, su historia, su maravilloso hijo y por último, la preciosa Narcissa, extremadamente bella, dócil y bondadosa que le dará un heredero a su linaje.
—¿Se da cuenta de que está dejando a Cissy reducida a un horno para bollos Malfoy?—se indignó Marie en un susurro.
—Claro que se da cuenta, y lo peor es que le parece algo positivo, bienvenida a la élite querida ¿entiendes por qué me fui?
—Si ese ególatra fuera a ser mi suegro yo también huiría—respondió Marie
—Oh, Abraxas es humilde comparado con Lucius.
—Me estoy planteando si he hecho bien animando a Narcissa a celebrar la fiesta cuando quizá tenia que haber intentado que rompiera con él—dijo preocupada.
—Conoces a Cissy, la confrontación es la forma más rápida de que te borre de su vida, le metieron desde pequeña el cuento de la esposa perfecta, tiene su carácter pero sus convicciones le hacen comportarse con él y con la familia como una princesa de cuento, tú y yo somos capaces de que mantenga los pies en la tierra y eso…es más valioso que impedir una boda a la que ella no podría negarse sin destrozar su vida.—la consoló Andrómeda
—Tú lo haces ¿no? Vives feliz sin ellos.
—Por mucho que Sirius lo niegue, es algo que cuesta y duele muchísimo, nuestros padres nunca fueron "malos" con nosotras, lo "bueno" de pertenecer aquí es que tienes un respaldo total, eres un Black, y como Blacks, nos ayudamos y protegemos entre nosotros, pero si decepcionas, lo pierdes absolutamente todo. A mi me compensa el amor de Ted y de mi hija, pero a Cissy….no habría nada que le compensara…
—Gracias por estar aquí—dijo Narcissa llegando poco después de que su hermana terminara su explicación. La futura sra. Malfoy abrazó a ambas "gemelas" con muchísima ilusión.
—Cissy estás preciosa—dijo Marie alabando su vestido largo sin tirantes de color fresa.
—Espera a ver el vestido de novia, está hecho íntegramente con perlas.—dijo ilusionada.
…
—Hola—saludó Hermione teniendo a toda la Orden sentada observándola presidir; habían decidido soltar la gran noticia y que debía ser ella quien explicara todo, pues Harry necesitaría parar a Sirius en algún momento e Irinna controlar el temperamento y corazón de Severus. Frunció los labios pensando en cómo seguir, se sentía como cuando crearon el ED pero aquí estaba siendo escrutada por Sirius, Snape, Draco, su "suegra", la otra Lilly, la otra Pansy, Lupin, e Irinna; la profesora Mcgonagall se encontraba protegiendo el colegio de injerencias externas, los señores Weasley se encontraban en Francia ayudando a Fleur con su nuevo bebé y Ron había preferido no ir a escuchar que su novia era la ex prometida de Sirius, con todo lo perturbador que ello conllevaba.
—¿Granger para qué nos has reunido aquí? Tenemos cosas importantes que hacer, esto no es un trabajo para nota—dijo Severus molesto por tener que esperar sentado sin hacer nada y en silencio bastante rato. Hermione miró a Irinna y esta asintió, trasmitiéndole que siguiera la conversación según lo planeado.—Bueno Harry y yo creemos haber encontrado pistas sobre Lilly…
—¿Y por qué no las decís de una vez?—preguntó Narcissa indignada por creer que Granger se hacia la interesante con este tema tan grave para atraer la atención de su hijo.
—Verá señora Malfoy, no es algo fácil de explicar…—respondió ella sin achantarse.
—Mamá….déjala hablar—pidió la otra Lilly, a quien Narcissa escuchó.
—Hay una chica que podría guardar relación con su desaparición en el tiempo pero necesitaríamos que ustedes la identificasen porque la conocieron.
—¿Quién?—preguntó Lupin, a quien Irinna borró la memoria sobre las preguntas que le hicieron en su día, para así, evitar el riesgo de que las comentara anticipadamente con Severus y Sirius.
—Marie Mikaelson—La sala se quedó en completo silencio, Sirius se levantó arrastrando sonoramente la silla, fue al mueble bar y se sirvió una botella y un vaso de Whisky, decididamente era un nombre maldito para él.
—¿Es el año de Marie?¿Es que a todos os ha dado por nombrarla sin parar? No sé qué tanto interés e importancia pueda tener una puta, una estafadora sin escrupulos que nos tomó a todos por mejor en Azkaban.
—Oh por favor, ¿vas de víctima con todo lo que la hiciste sufrir?—se enfadó Narcissa.
—Discul…—intentó intervenir Hermione sin éxito
—¿Yo? ¿y qué hay de lo que ella me hizo a mi?
—Viendo que en seguida que te rebotabas metías la cara en los pechos de otras, yo diría que cualquier cosa que te hiciera está justificada, Black—dijo Snape.
—Deberíamos centrarnos en…—Hermione volvió a ser interrumpida
—Exacto—apoyó Narcissa.
—Cissy hay que ser hipócrita, ¿no fuiste tú quien la echó de su vida porque Lucius te dijo una mentira fácilmente desmontable y decidiste no ser más su amiga?—Respondió Sirius.
—¡Y fue uno de los peores errores de mi vida, Regulus jamás te habría permitido hablar así de ella!—respondió Cissy.
—¿Te refieres a Regulus, quien conforme ella desapareció se convirtió en mortífago?— culpó Sirius.
—Siempre culpando a los demás de tus miserias, despierta Black, tu hermano se convirtió mucho antes—se hartó Severus
—¡Cállense!—gritó Draco—Hermione está intentando hablar y están discutiendo por bobadas que no ayudan.
—Y lo que Granger dice tampoco Draco, Marie está muerta.—dijo Severus, helando la sangre a todos y provocando involuntariamente que la respiración de Sirius se cortara un segundo.
—¿Cómo que está muerta? Eso no puede ser.—se hundió Harry
—Es una deducción lógica, sus padres se la llevaron en contra de su voluntad porque estaba muy enferma, no la dejaron despedirse de nadie y nunca jamás volvió a escribir, ni volvimos a saber de ella, no hace falta ser un genio—Explicó Severus, Narcissa comenzó a llorar; Sirius rio y el odio se marcó hasta en los ojos de Lupin.
—¿Quién te contó esa paparrucha? Marie era una estafadora contratada por mi madre, con la estrecha colaboración de mi hermano para que yo volviera a la familia y cuando le pedí matrimonio, se llevó con ella el diamante más grande que ha existido en mi familia y se marchó. James la pilló y ella lo confesó todo.
—Sirius, James mintió, Marie te quería, estoy seguro—dijo Remus.
—No manches la memoria de James, Lunático.—advirtió Sirius.
—Black si eso fuese así, me encantaría ser yo quien te lo dijera, porque si ella hubiese querido estafarte y romperte en pedazos créeme que hubiera sido un fiel y leal colaborador; ella sabía lo que yo te odiaba ¿crees que necesitaba complicarse la vida teniendo una relación contigo con altibajos cuando con mi ayuda y la de Cissy podría haber sido idílica? Haz un mínimo esfuerzo y piensa.
—Descríbanla—Elevó la voz Hermione.—Hemos descubierto que la desaparición de Lilly está relacionada con ella de forma muy estrecha pero queremos estar seguros de que es la persona que hemos encontrado.
—La señorrita Granger tiene una posición muy prudente, si ha encontrado a esa tal Marie habrá de estar segurrra de que es quien puede darrrnos inforrrmación—auxilió Irinna ante el escepticismo y cansancio demostrado por su prometido y su amiga.
—Castaña, de ojos verdes o…azules no destacaban en exceso, pelo lacio, corto, nariz pequeña y... no sé qué más—dijo Severus con hastío.
—Sev….Marie era pelirroja, de ojos marrones, tenía el pelo ondulado marcado a la altura del pecho y de hecho creo que su nariz era un poco alargada.—corrigió Narcissa.
—Señores ¿hablamos de la misma persona? Siempre llevaba el pelo en una trenza, era oscuro, casi negro y los ojos eran como…grises, igual que los de tu hijo, Narcissa.—intervino Remus.
—¿Me tomáis el pelo?—preguntó Sirius enfadado y desconcertado— Marie era rubia, no tanto como Cissy ni con ese rubio apagado que tenían otras chicas, su pelo era de un dorado parecido al de Fleur, sus ojos eran de color agua marina claro, se le clarificaban y oscurecían a veces, dependía de su ánimo, era algo precioso de lo que no era ni consciente, tenia una nariz perfecta y unos labios carnosos. Además su figura era espectacular.—dijo Sirius hablando por primera vez en veinte años , bien, de su querida y odiada Marie.
—Te confundes con otra de tus conquistas primo—escupió Narcissa con decepción.
—Le hice un poema a sus ojos Narcissa, me acuerdo de cómo eran perfectamente, además de que la vi desnuda muchas veces y…eso me hubiera hecho saber si era pelirroja o morena sin yo saberlo y certifico, que era rubia—Harry e Irinna se cubrieron disimuladamente la cara sabiendo las consecuencias que esas palabras traerían en pocos minutos.—Creo que me puedo acordar perfectamente de la única relación amorosa que tuve y con la que más veces me acosté.
—¿Tenía una mancha de media luna en el hombro izquierdo?—preguntó la otra Lilly queriendo reírse un poco de Sirius, pues ella ya sabía lo que se venía y quizá acabara herido; sabia que ese no era el Sirius de su mundo pero le regodeaba verle crispado.
—Sí…—intervino Narcissa antes de que su primo respondiera— cuando visitamos a mi hermana en Londres bebimos un poco y….casi nos la tatuamos.
—¿En serio mamá?—dijo Draco extrañado— a mi no me dejas ni cambiarme la raya del peinado.
—Eran otros tiempos.—justificó Narcissa.
—La tenía….¿cómo lo sabes?—se extrañó Sirius.
—Oh, ya verás…—dijo Lilly mirándose las uñas y conteniendo una risa.
—Lillian—apercibió Irinna traspasándola con la mirada—Esto es serrrio, compórrtate.
—Claro…madrastra…—dijo Lilly con inquina.
—¿Granger puedes ir al grano por favor? Marie era amiga mía, Lilly lleva su segundo nombre por ella, jamás le haría daño a mi hija.—se impacientó Severus, pues se estaba imaginando las conclusiones que todas esas sospechas iban a dar y le producía terror que se cumplieran.
—Esa es la cuestión profesor, todos la recuerdan de forma diferente, o con rasgos separados pero si ahora les pidiera que la dibujaran no podrían—todos intentaron contradecir a Hermione pero se dieron cuenta de que no era posible.
—Es todo culpa de una paradoja—intervino Harry—no podéis recordarla porque la magia reescribió vuestros recuerdos y si no hubiéramos contactado con mis padres no hubiéramos sabido que…—Harry no se atrevió a continuar.—ammm ¿Hermione?
—La señora Potter mostró una foto que nos llevó a sospechar dónde estaba atrapada Lilly, en 1977; revisamos el anuario de su promoción pero no encontramos nada….hasta que nos dimos cuenta de que un collar que Ron le regaló, se mostraba en una foto…
—Consultamos al fotógrafo, el señor Lovegood y nos dijo que mi padre y Sirius le habían pagado para que no saliera ni una foto de Marie Mikaelson.—explicó Harry.
—¿Y?—preguntó Sirius molesto por la desaprobación que Remus mostraba.
—Y al verlas nos dimos cuenta de que…la profesora Petrova vio correctamente esa foto y….que Lilly no solo está en 1977 sino que….ella era….ella es…—Hermione respiró—Lilly es Mery Marie o…Marie Mikaelson.
—Eso es ridículo y absurdo.—dijo Sirius dando un sonoro golpe con su vaso de whisky a la mesa— hubiera distinguido a mi ex novia de mi alumna ¿no os parece?
—Y sin embargo Xenophilus en mi fiesta de compromiso la llamó Marie ¿no es cierto?—dijo Harry
—Harry, Hermione, sin duda eso puede parecer un relato convincente pero…si vuestra base es Xenophillius…no es algo muy creíble—suavizó Remus.
—Estoy de acuerdo con ellos—dijo Narcissa. Irinna asintió con decisión a los chicos y ellos sacaron su más fuerte prueba, las fotos del padre de Luna.
—Además de las fotos, Ron encontró este registro de las pruebas de Quidditch firmado por mi padre, anotó 900 puntos y no hay rellenado ningún campo que no sea su nombre y apellido, el formulario está tachado y tú jugaste como titular, Sirius— explicó Harry tendiendo el papel a su padrino—y no hay ningún registro sobre ella ¿Quién juega así y no es titular?
—Eso fue porque Potter le pidió que no jugara y que se inventarían una excusa para no hacer sentir útil a Black, me lo dijo Lily—intervino Severus.
—Otra mentira más, cómo no—susurró Sirius
—De acuerdo…si estoy equivocada, entonces verán a otra persona pero…si no lo estoy…la verán a ella, miren a Lilly y….—Hermione encantó unas fotos—cuando yo les diga…miren sus propias fotos—Severus negó con la cabeza levantándose, necesitaba respirar, pues había unido los puntos en su cabeza desgraciadamente, todo le encajaba.
—Sev, no se pierrrrde nada porrr intentarrrlo—aconsejó Irinna antes de que este se retirara de la mesa del todo, miraron a la otra Lilly y después, cuando Hermione les dio la señal, bajaron la mirada.
—¿Y bien?—preguntó Hermione atemorizada. Todos se llevaron la mano a la cabeza, los adultos sintieron como si el sonido de un cristal rompiéndose resonara en sus cerebros; Hermione tenía razón
—Esto….es…..imposible….—dijo Sirius con los ojos llorosos, siendo el único que articuló palabra, pues Severus y Narcissa estaban en un completo shock—es ella….es Marie….
—Lo siento Sirius—se compadeció Harry. Sirius miró a la otra Lilly con algo de rabia, aunque no entendía por qué mirar a esta hija de Snape no le generaba el mismo sentimiento que mirar la foto. Su cabeza era capaz de distinguirlas.
—¿Por qué nos has hecho perder el tiempo si tú lo sabías?
—Yo lo supe hace unos días Black, además yo no soy ella, mi segundo nombre es Eileen, no Marie.
—¿Quieres decir que si nuestra Lilly se llama Marie es porque esto estaba escrito?¿Que esto tenía que pasar?—preguntó Draco
—Eso parece—respondió Hermione.
—No lo entiendo….es imposible que debiera pasar, que sean la misma—dijo Cissy con los ojos llenos de lágrimas— Cuando vimos a los Potter, Marie estaba casada con Sirius y esperaba gemelos ¿significa esto que nunca podré volver a ver a mi hija? Mi Lilly sí existía en ese universo ¿Cómo podría ser la misma?
—Creemos que esa era una línea temporal que se creó a raíz de la vuestra, y en esa Lilly nunca regresó, muy probablemente, esa Marie, moriría en cuanto la Lilly de vuestro tiempo cumpliera mi edad—explicó la otra Lilly.
—¿Severrrrus estás bien?—preguntó Irinna acariciando el brazo de su prometido, preocupada porque desde que vio la foto de su antigua amiga no había articulado palabra todavía.
—Claro, no sé qué te preocupa, no todos los días un padre se entera de que su hija fue también su amiga y se acostó con la persona que más odiaba yo en el mundo.—dijo Severus con sarcasmo, estaba molesto con su prometida, él había advertido los intercambios de miradas entre sus alumnos y ella.
—Yo creo que a James lo odiabas un poquito más que a mi Snivellus, ya sabes por aquello de que él se acostaba con la Lily original, yo solo con la copia—dijo Sirius buscando pelea, todo esto le hacía bastante daño y no sabía cómo gestionarlo, era una mezcla de tristeza, ira, confusión, amor, despecho, esperanza y vergüenza demasiado complicada de asumir. Severus, quien no se sentía mucho mejor, lanzó un maleficio a Sirius que casi le ahorca, este respondió de la misma manera, haciendo que los presentes se pusieran a cubierto, a excepción de Narcissa, que estaba en shock; Remus e Irinna que intentaban sin éxito intervenir, pero Snape y Black se habían enzarzado en un duelo y no querían que los molestaran. Finalmente y cuando un malicioso sectumsempra fue conjurado por Sirius, Narcissa detuvo el combate segundos antes de que el hechizo impactara en el vientre de Irinna, pues Severus se había librado al esquivarlo in extremis, pero ella se encontraba detrás.
—¡Basta ya! ¡Mirad lo que casi provocáis, par de animales!—Regañó con mucho enfado, Severus se quedó blanco cuando vio el haz de luz detenido a milímetros de Irinna, sintió como el alma se le caía a los pies, sintió la fragilidad rompiendo su seguridad en si mismo, y aunque lo disimuló, todo le dio vueltas al pensar como en un segundo, por el honor de su hija, casi pierde a su hijo. Sirius tenía ganas de llorar, muchísimas, se había desquitado pero no era suficiente y por si fuera poco, casi causa una desgracia horrenda.—Os juro que como no dejéis de hacer el imbécil dejaré que Johan me busque y me entregaré a cambio de que traiga a Lilly de vuelta, me da igual que fuese Marie, me da igual lo que hiciera, me da igual cómo se llevase con cada uno, me da igual como apareció o como se fue, lo importante es encontrarla y después de todo eso, ya resolveremos los dilemas morales, así que no quiero ninguna pelea más ¡¿Os queda claro?!—Ambos adultos asintieron sin atreverse si quiera a abrir la boca, pues la furia de Narcissa no era muy diferente a lo temible que era la de Molly Weasley.
—Hermione, vamos a lo importante antes de que corra la sangre, ya sabemos que está en 1977 ahora la pregunta es, ¿Cómo la encontramos?¿Como la traemos de vuelta?—Intervino Remus para calmar las aguas.
—Existen dos opciones, pero una de ellas es tan complicada que no creo que se pueda hacer—inició la chica— Una vía es, aprender los hechizos del libro negro de Grindewald y hacer un portal temporal para traerla de vuelta….
—Eso es inviable, podríais tardar meses, incluso años—dijo la otra Pansy—Lilly pudo aprender algún hechizo de ese grimorio con la ayuda de Dumbledore pero nunca puramente como se indicaba en el libro y solo a nivel teórico.
—Es cierto, es una locura—confirmó la joven Snape.—solo alguien de mi mismo poder sería capaz de conseguirlo en poco tiempo, intentarlo yo aquí podría cargarse todas las realidades de golpe, e Irinna está embarazada y esa magia tan oscura podría matarlas a ella y a su….hijo…
—No pienso arriesgar ni a mi hija de otra realidad, ni a mi hijo, ni a Irinna, yo lo haré, el poder de mi hija viene de mi línea de sangre, por lo tanto yo he de ser capaz.—dijo Severus.
—Clarrro, parrra que cuando Lillian vuelva, lo primerrro que le digamos sea que has muerrrto, ¿recuerrrdas que te dio un infarrrrto? No vas a probarrr hechizos que no tienes la forrrtaleza de hacerrr, ni el tiempo de conseguirrr—afirmó Irinna.
—Irinna, es mi hija.
—Y yo tu prometida, y este —señaló su vientre— tu hijo, y ni él ni Lillian se van a quedarrr sin padre ¿te queda clarrrro?
—Granger, dinos la maldita segunda opción—ordenó Narcissa.
—El hechizo de invocación con todas las ofrendas de las Lillys de otras realidades, además necesitaríamos su sangre señora Malfoy, la del profesor Snape, la de nuestra Lilly, recuerdos de ella, objetos que le perteneciesen, un fantasma que haga de ancla a este mundo pero…. Es un hechizo que duele de hacer a quien lo convoca y…lo tendría que hacer la persona más unida a ella en esta realidad.—dijo Hermione con evidente desagrado y preocupación.
—¿Y dónde está Weasley? ¿Acaso se ha rajado justo cuando tiene que demostrar que vale para algo?—inquirió Severus notoriamente molesto.
—Ron ya sabe que Lilly es Marie, no queríamos que tuviera que soportar oir que estaba prometida a Sirius o cosas como las que se han dicho—le defendió Harry.
—Weasley no es la persona a la que Lilly estaba más unida, soy yo.—declaró Draco convencido, él era el único que había captado a Hermione.—lo haré.
—A mi se me ocurre algo mejor.—dijo Sirius dando un sorbo a su vaso de whisky—¿la chica Greengrass no tenia conexión con la hermana de Johan? Haced que ella le filtre accidentalmente a la tal Colett que Lilly está como Marie en 1977 en Hogwarts y cuando hagan el hechizo, intervenimos y hacemos una excursión para traerla de vuelta.—la sala se quedó en silencio.
—Eso podría hacerrr que la matarrran si la descubren Sirrrius.—advirtió Irinna contraria a sacrificar a una "testigo protegida"—sin contarrr que de intentarrrlo y darrrse cuenta podría no sobrevivirrr
—No puedo hacerle eso a Guideon—dijo Narcissa imaginándose el dolor de su "amigo/amante" como padre.
—Es su hija o tus hijos, no sé que hay más Slytherin que eso ¿Dónde está la dificultad de elegir Cissy?—dijo Sirius.
—Los Slytherin cuidamos de los nuestros—respondió Draco defendiendo a su madre.
—¿Qué tiene ella de "los vuestros"? — preguntó Hermione— si se trata de que podáis morir Lilly o tú, discúlpame pero prefiero sacrificar a Astoria, pagaría por todo lo que hizo.
—Ya pagó por ello Hermione, tú no la viste—dijo Draco recordando con angustia lo torturada que volvió Astoria tras su último atrevimiento.
—Hermione, esa mujer es el diablo en persona, si ha hecho alguna cosa mínimamente decente o que nos pueda ayudar ha sido en beneficio propio, Colett es un monstruo, no sabes como nos torturaba a Ginny y a mi, nadie se merece eso—expuso Harry.
—Black tiene razón—declaró Severus.
—Sev, tu hija ha sido torrrturrada, manipulada y Meerrrlin sabe cuánto más porrr esa gente, Astorrrria es solo una cria, le harrrían lo mismo que a tu hija o peorrr, y te recuerrrdo que en el pasado ya la utilizarrron y torrrturraron, y nos lleva semanas ayudando, es rastrero e inhumano— se enfrentó Irinna.
—Haré el hechizo de invocación y no hay más que hablar, es mi hermana y es la forma más segura de que no muera ni sufra nadie más, esto solo me dolerá ¿no?—Draco miró a Hermione y luego a Irinna, esta última asintió— soporté a Voldemort, soporté a mi tia, creo que podré un poco más.
—Qué ridículos resultáis los Slytherin cuando intentáis ser los héroes—dijo Sirius tomando del mueble otra botella y retirándose de la reunión, La otra Lilly, previendo el desastre que sería cuando su homóloga volviera, decidió hacerle un favor y hablar con él para que sacara su veneno anticipadamente.
—Sev, tú conocías mejor que ninguno de nosotros a Marie, ¿hay algo que sepas que los demás no sabíamos?—preguntó Narcissa, Severus suspiró dispuesto a confesar lo que nunca dijo.
—Una noche, Black, Pettigrew y Lupin bebieron hasta emborracharse transformados en animales en luna llena….—empezó Severus
—Eso es mentira, jamás haríamos tal irresponsabilidad—se defendió Remus.
—Como iba diciendo, lo hicieron, Black acabó en la enfermería y Pettigrew cuando despertó de su borrachera encontró a Marie en la casa de los gritos, muy herida, con varias marcas de animales, llamó histérico a Potter porque no sabía que hacer, Potter involucró a Lily Evans y ella, al ver que llevaba una pulsera idéntica a la que le vio a mi madre, la que yo regalé a mi hija en navidad, y que sus lesiones eran producto de magia oscura, me involucró a mi, volvió a hablarme solo para eso.—hizo una pausa—Potter borró la memoria de los demás, no quería que Lupin se entregase por si acaso como culpable—Lupin se quedó anonadado a la vez que conmovido— por petición de Lily, la curé, intenté meterme en su mente y lo que vi, fue a un hombre con la cara derretida.
–Es posible que fuera Johan….Lilly le lanzó el fuego maldito de la ceremonia a la cara cuando se cargó la boda—intervino Harry.
—Potter…—prosiguió Severus irritado— la llevó a un hostal de Hogsmade hasta que despertó y entonces supimos que no recordaba absolutamente nada, no sabía ni quién era; poco a poco hubieron cosas que le desataron recuerdos; Lily clonó su ropa y cuando recibió la túnica, dijo que la recordaba verde como la mía; también estaba segura de haber bailado con Potter….pero evidentemente confundía a…James, con su hijo.—dijo Severus como si el nombre de Potter le dejara un mal sabor de boca.—También recordó que Potter se había besado con un chico rubio que también se había besado con ella y que llevaba uniforme de Slytherin, lo cual no sé exactamente qué significó, pero Lily le aconsejó que se alejara del chico rubio.—relató con mala cara.
—¿De todas las cosas por las que podía recordarme me recordó por esa?— se molestó Draco, al tiempo que Hermione soltaba una risita.
—¿Cómo que besaste a Potter?¿Y como que besaste a tu hermana?—se escandalizó Narcissa.
—¿Perdón?—se rió la otra Pansy queriendo saber el chisme.
—Fue una broma mamá, nada más, lo hice para que la dejaran en paz con los rumores y en ese entonces no sabía que era mi hermana, además no fue a mi a quien le gustó, Potter no puede decir lo mismo.
—Usas un spray que es para chicas, ¿qué culpa tengo yo de que sea el mismo que el de mi novia?
—Crrreo que imporrrrta muy poco ahorrra quien besó a quien— dijo Irinna poniendo cordura regresando la atención a Severus.
—En fin, sus recuerdos eran un desastre, pero respecto a los conocimientos sobre magia, era una biblioteca andante, así que, todas las semanas, nos reuníamos tres veces Lily, Potter y yo para enseñarle hechizos de otros cursos y formas de protegerse, porque estábamos seguros de que algo la perseguía; a ella le afectaba mucho no encontrar a su familia, tanto Lily, como Potter, como yo, removimos cielo y tierra buscándola, pero nadie había denunciado su desaparición y de su cara no había ningún registro, incluso Potter le pidió a su padre que usara sus influencias, pero nadie la buscaba.
—¿Por qué nunca me dijisteis nada de eso?—preguntó Narcissa visiblemente afectada—era mi amiga, podía haberos ayudado.
—No nos interesaba que se supiera que la habíamos traído, y tú no eras precisamente discreta Cissy, por eso Potter no la dejó entrar en el equipo—Lupin asintió comprendiéndolo todo— por eso Lily y yo falsificamos las listas de todos los profesores al principio, pero todo empezó a ser más difícil cuando empezó a odiarse y amarse con Black ¿Qué hay más discreto que las humillaciones en el gran comedor? Cuando se trataba de él parecía olvidársele lo de mantener el perfil bajo; Lilly y yo nos enfadamos mucho cuando Potter la dejó jugar al romperse el brazo. Pero sin duda…llamó la atención de Dumbledore tras el incendio de fuego maldito de la torre de Gryffindor.
—¿Hubo un incendio de fuego maldito?— se horrorizó Hermione, extrañándose de que eso no lo leyó jamás en Historia de Hogwarts.
—Sí, y Marie se había quedado dentro, en ese momento no comprendí por qué no figuraba en las listas, era por esto ¿no? Modificasteis todas menos las vuestras —concluyó Lupin, Snape asintió.
—¿Y cómo salió de allí?—preguntó Harry
—Sirius la salvó, nos ignoró a todos, se metió entre el fuego y con un invento un poco experimental que hicimos para crear túneles, la sacó de ahí; obviamente Mcgonagall le descontó 30 puntos por desobedecer y entrar en una torre en llamas, pero hasta los slytherin le aplaudieron cuando la sacó de las llamas.
—Marie dijo "Draco"—murmuró Severus llamando la atención de los presentes
—¿Qué?—preguntó el aludido.
—No se despertaba pero dijo "Draco" muchas veces, como si sufriera, entonces yo le puse la pulsera de mi madre para protegerla y…despertó.
—¿Los que te capturaron no ardieron en llamas mi amor?—preguntó Narcissa entendiendo que existía una conexión, Draco asintió asustado
—En llamas azules—todos se miraron— entonces….desde el pasado ella…me salvó y a su vez, incendió Gryffindor con ella dentro, y si Black no la hubiera salvado, quizá no hubiera podido despertar por salvarme a mi….
—Los gemelos tienen conexiones místicas que aún no están lo suficientemente estudiadas, perrro sí, es posible—intentó tranquilizar a Irinna.
—Y sin embargo yo, no pude hacer que ella despertara, no pude salvarla de Theo, ni de Johan, ni de mi tia, ni de sí misma….—se desesperó— ¿en eso consiste la conexión?¿ella me salva y yo la mato?—se enfadó Draco sintiendo culpabilidad.
—Cariño salvarla de todo eso, era función nuestra, no tuya, nosotros fallamos, no tú—se martirizó Narcissa al ver el tormento que pasaba por la mente de Draco
—No sabemos si hubieras podido despertarla, yo le puse la pulsera de mi madre y despertó, quizá de no haber intervenido lo habrías hecho—intentó remediar Severus, caminando para ordenar los millones de pensamientos que pasaban por su mente.—de hecho, quizá hubiera sido mejor así, Dumbledore al ver mi intervención supo que no era quien decíamos, tuvo una conversación con ella de la que apenas nos habló, pero cuando la cambió a Slytherin me dijo como la cosa más normal del mundo, que sabía de nuestro parentesco. Jamás dijo en qué grado, solo lo había relacionado por el amuleto familiar que yo le puse, pero quizá él lo sabía.
—Seguro que estaba al tanto, Dumbledore no decía una palabra sin haberla meditado con mucha intención.—concluyó Remus.
—¿La cambió a Slytherin?—preguntó Hermione.
—Sí, Black escuchó una conversación que tuvimos y fue a Mcgonagall a decirle que no le cuadraban sus palabras dado que la habian seleccionado de pequeña.—contó Severus—entonces Dumbledore no tuvo más remedio que obligarnos a decir que era un experimento del colegio; tuvo ponerle el sombrero y según él, tenia tanto de una casa como de otra.
—Pero en este tiempo el sombrero la seleccionó en Slytherin directamente, ¿Cómo es posible que no la reconociera?—preguntó Harry.
—Es muy posible que él fuese afectado por la paradoja también, igual que Mcgonagall y otros profesores que la conocieron—explicó la otra Pansy.
—¿Y cómo desapareció Marie de sus vidas?—preguntó Hermione— evidentemente, sabiendo ahora que ella es Lily, sus padres no pudieron llevársela contra su voluntad….
—Fue la noche de la graduación, recuerdo que ella se fue con Lily a tomar algo en Hogsmade, yo iba a ir hasta que se apuntó Potter, una cosa era tener que soportarlo por ayudar a Marie, y otra salir de fiesta con él. Así que decidí quedarme en el colegio pero cuando volvieron, Lily me dijo que sus padres, habían venido escoltados por el ministerio de Noruega, los mortífagos les habían atacado y secuestrado en nuestro país porque eran aurores, y se llevaron a Marie, ella se libró de ellos y acabó en Hogwarts; por lo visto, semanas antes alguien preguntó por ella y uno de los parroquianos la reconoció. No la dejaron despedirse de nadie porque eran ex espías.— relató Severus
—Quizá fuimos nosotros quienes la encontraron y se la llevaron.—dijo Narcissa.—¿Ex espias aurores del ministerio de Noruega? Suena a algo que le diríamos.
—Eso se lo inventó Lillian, estoy segurrra.
—¿Por qué?—preguntó Severus
—¿Porrrr qué si no mentir a Black? ¿Porrr qué no dierrron la misma verrrsión a todo el mundo? Vosotros podríais mantenerrr lo de los problemas de salud perrro mentirrr específicamente a Black….
—Fue para que él no la buscara ¿y por qué James y Lily no hubiesen querido encontrarla y protegerla cuando lo habíais estado haciendo hasta ese momento si eso fuese cierto? ¿Aun estando bajo la protección de Dumbledore? Le habríais dicho la verdad a Sirius de ser cierta esa versión— concluyó Lupin tras la introducción de Irinna.— Además, yo recuerdo que tú te fuiste con James, Lily y Marie, me extrañó pero pensé que habíais llegado a toleraros, creí de hecho que ella os reunía para comunicaros que Sirius le había pedido matrimonio.
—Yo no me fui—discutió Severus
—Sí, lo hiciste, Lestrange se enfadó contigo por dejarle solo.—Snape se extrañó, él no recordaba eso— además unas semanas después volvíais a odiaros y Lily volvió a dejar de hablarte porque descubrió que habías ido a una reunión clandestina de aspirantes a mortífagos.
—Es cierto pero….
—¿Ni siquiera recuerda haber ido?—intuyó la otra Pansy, Severus no fue capaz de dar una respuesta, no, no lo recordaba pero Lily no le habría mentido.
—El ministerrrrio de Norruega no se forrrmó hasta 1983, porrr lo que errra imposible que fuerrran escoltados porrr ese ministerrrio, es demasiado especifico—Irinna se levantó para captar mejor la atención de los presentes—Lillian nos dejó un mensaje a través de ti querrrido —hizo una pausa— el año de creación del ministerrrio de Norrruega fue la pregunta que le suspendí a Lillian y que le impidió irrr al torrrneo de los tres magos en Hogwarts.—sonrió— por eso únicamente te dieron esa versión a ti, modificarían tu memoria y te hicierrron creerrr eso; creo que ocurrió algo que la hizo recordar y os hizo saberrr quien errra en realidad, que supisteis su historia, perro si tú errras consciente de su identidad, o te llevabas bien con Lily es posible que nunca llegases a concebirrrla, eso la borraría de su línea y probablemente nunca llegase de vuelta. Por eso hizo que Lily te dijerrra eso a ti y que después se enemistara contigo, y que Potterr le dijerrra a Black algo que le hiciese odiarrrla y no buscarrrla.
—Marie sabia que estar compinchada con la familia Black sería lo que más le dolería a Sirius; que estuviera enferma, o que se la llevasen como testigo protegido, o incluso haber sabido la verdad de todo, hubiera propiciado que Sirius no dejara de buscarla, él hubiera revuelto el mundo, el tiempo y el espacio por ella.
—Y viniendo de mi padre esa información, jamás la cuestionaría—dijo Harry con tristeza; comprendiendo lo que le tuvo que doler a su padre darle esa imagen a Sirius de la mujer que amaba, él había sentido mucho decirle a Ron la verdad; mentirle y saber engañado y destrozado a su mejor amigo tuvo que ser un sacrificio que sabia que era absolutamente necesario, por su bien y el de todos; y su madre, si había recuperado la amistad con Snape, tuvo que renunciar a ella por el mismo motivo.
—Necesito tomar el aire….—dijo Narcissa marchándose de la Orden muy turbada.
—Irinna, hablemos a solas—pidió Severus retirándose también.
—Muchachos, voy a hablar con Sirius, hay cosas que debe saber y temo que se esté matando con la otra Lilly—explicó Remus.
—Hermione, Pansy, Potter,., yo no voy a quedarme esperando, preparemos el hechizo.—organizó Draco con decisión.
….
La fiesta de Narcissa estaba siendo todo un éxito, ella estaba guapísima y feliz y por el momento, no había habido incidentes de ninguna clase, a pesar de como miraban todos a Sirius y cuchicheaban a su alrededor. Por fortuna, pasaron horas sin el mínimo percance. Marie se excusó para ir al lavabo y retocar su maquillaje, mientras estaba dentro, Sirius fue interceptado por su padre, que lo condujo a una sala donde esperaba su madre. Wallburga lo escrutó de arriba abajo, elevando su mentón con superioridad y acercándose a él como una leona rodeando a su presa.
—Veo que tienes pensado no cortarte el pelo…—dijo a modo de saludo.
—Sabes que nunca me ha gustado corto, aunque eso te diera igual—respondió él.
—Un Black ha de dar una buena imagen.
—Y para eso Regulus os sirve genial, escogisteis bien el hijo con el que quedaros.
—Oh disculpa ¿Cuándo te marchaste saltando por la ventana con tus cosas y reliquias que no te pertenecían nos estabas pidiendo opinión muchacho? Porque es una forma muy curiosa de darnos elección.
—Quizá es porque en eso de tener elección en las cosas no me habéis educado muy bien, desde niño me impusisteis qué me tenia que gustar, con quien tenia que jugar, qué tenia que creer…
—¿Y no es eso lo que hacen todos los padres?—intervino Orion — ¿o acaso a tus hijos les dejarás elegir si les gusta más la pureza de sangre o juntarse con sangre sucias y cuando elijan lo que no quieres los respetarás?—ironizó su padre.
—Me refería más al hecho de amargar a Regulus el resto de su vida y no permitirle estar con la chica que quiere, podríais como minimo intentar rivalizar con los Greengrass por la chica que ama, le está destrozando.
—Esa chica riene un patrmonio digno de un primogénito, y aunque tú ya no estés, creas la sombra sobre su persona, es el segundo de una familia con una decepción en comparación con los Greengrass que tienen un expediente impecable y un primer hijo digno. No podemos postular a Regulus por tu culpa querido, actualmente que Regulus vaya con ella es un problema, sabes las consecuencias. Sin embargo, podrá haber una manera de poder hacer ese ofrecimiento que dices; siempre y cuando, nuestros otros intereses queden cubiertos.— respondió el patriarca de los Black
—¿De qué hablas?¿Otros intereses?—Se extrañó Sirius sintiéndose mal por su hermano.
—Tu chica….—Wallburga le mostró la foto que Xenophillus le hizo en la mesa de Slytjerin a petición de Narcissa— está consiguiendo lo que nosotros jamás pudimos y nos preguntábamos cómo lo hace.
—Os daré la receta, es muy simple, amor, comprensión, humanidad, lealtad…
—¿Lealtad? No es eso lo que hemos oído, al menos de tu parte—dijo su madre quien sonrió al ver la desgradable sorpresa que eran esas palabras para Sirius—¿Cariño de verdad te creías que no tenemos ojos y oídos en todas partes? Sabemos todos los detalles de vuestra relación.
—Lo dudo bastante.
—Sin embargo, no sería una buena mujer Black si no hubiera soportado una infidelidad y salido adelante….
—¿Ves como no lo sabéis todo? No le fui infiel ¿y qué es eso de una buena mujer Black? ¿Qué os ha contado Regulus? —preguntó molesto.
—Regulus es una tumba, lo creas o no, él nunca nos ha contado nada, y Sirius querido, no hagas como tu padre matizando qué constituye infidelidad y qué no, ten respeto por la chica y acepta que lo que hiciste es una infidelidad, Pero nos estamos desviando del tema…Kreacher nos ha dicho que la muchacha es sangre pura y eso junto a lo guapa que es, los modales que le hemos observado, que es Slytherin y que consigue civilizarte convirtiéndote en un Black como Dios manda, nos hacen replantearnos tu expulsión de la familia.
—Para abreviar, queremos que vuelvas a la familia, que te cases con ella y tengas hijos lo antes posible. —intervino su padre— de esa forma repararías el honor que nos quitaste y podrías procurarle a tu hermano la posibilidad de optar a su amor...
….
Marie salió del tocador, vio a Sirius con quien imaginó que eran sus padres entrar en una habitación, iba a acudir con él pero un chico rubio de pelo largo se interpuso en su camino, ni más ni menos que el novio, al cual no podía ignorar.
—Buenas noches—sonrió con una dentadura perfecta— no nos han presentado, soy Lucius Malfoy, tu debes ser…Marie Mikaelson ¿verdad?
—Oh….hola, sí soy Marie, encantada—dijo sonriendo pero algo apurada—tengo que… ir con mi acompañante un mom…
—Seguro que sobrevivirá a tu ausencia unos minutos, verás no he tenido la oportunidad de hablar contigo antes pero, la verdad es que Cissy cuenta maravillas de ti y…siendo que eres una amiga tan fiel, yo….quería pedirte ayuda para una sorpresa que tengo para Narcissa antes de nuestra boda.—Marie perdió la concentración, no sabía que hacer, si acompañar a Sirius o a Lucius; finalmente pensó que quizá Sirius prefería conversar con sus padres en privado, al fin y al cabo tenían problemas que resolver y ella no pintaba nada allí.
—Claro….—contestó con gracilidad como lo haría Narcissa
—Fantástico, por favor, acompáñame—Lucius ofreció su brazo y Marie no tuvo más opción que tomarlo para no llamar la atención. Anduvieron por la mansión Black unos minutos, deteniéndose en los cuadros o joyas expuestas; Lucius era buen anfitrión, de eso no había duda y le explicaba, cual guía de museo, muchas cosas respecto a la historia de todo lo que veía—y por eso, los sagrados 28 celebramos cada año la fiesta de debutantes, hay quien diría que es un poco antiguo, pero a mi me parece que conservar las tradiciones es la base de nuestra civilización, de no haberlo hecho, la sociedad de los magos hubiera perdido su magia de tanto mezclarse con muggles.
—Comprendo…—asintió sonriendo, siguiendo las recomendaciones de Marlene de no destacar en exceso ni meterse en polémicas.
—Cambiando de tema, ¿vendrás a nuestra boda verdad? Cissy te aprecia mucho.
—Bueno no he recibido la invitación todavía pero imagino que sí…¿Cuándo es?—Lucius soltó una risotada condescendiente.
—Todavía falta un año, sus padres quieren que termine el colegio antes de casarse, tampoco entiendo el motivo, ni que fuera a ponerse a trabajar, vivirá entre riquezas y lujos, jamás le faltará nada a mi lado, es todo lo que todas las mujeres queréis ¿verdad querida?—Marie sonrió pensando muy bien en qué responder a esa estupidez tan prototípica y le fue francamente difícil escoger las palabras.
—Ammm, bueno, el amor es lo más importante a mi parecer, Narcissa no estaría tan feliz contigo si no te amara como lo hace, yo también he oído hablar mucho de ti, por eso sé que de no sentir lo que siente por ti, esta fiesta no sería tan bonita.
—Guapa, buena amiga y diplomática, lo tienes todo ¿verdad? Supongo que en tu caso es lo que más valoras porque prevés que a tu Black no le durará demasiado la herencia residual que tiene; acéptame un consejo, mira por tu porvenir, el buen sexo es maravilloso, pero no te colmará las necesidades cuando tu belleza se esfume y no puedas conseguir un marido rico. Yo de ti, intentaría que Black volviera a la familia o, iría a por el hermano pequeño, ten un plan B.—Marie contuvo la sarta de improperios que quería soltar al engreído egoísta de Lucius y entendió que Andrómeda hubiera escapado de ese matrimonio y de esa vida.
—No te preocupes por mi, tengo todo muy bien pensado.
—Bien— Lucius formó una media sonrisa que de alguna forma le resultaba muy familiar— Ten cuidado, nunca sabes cómo te puede sorprender la vida, pajarillo.—hizo una pausa que a Marie le extrañó.
—¿Cuál era esa sorpresa que querías organizarle a Narcissa?
—Oh sí, es una joya que estoy creando junto con su hermana, quiero que tenga algo especial de cada persona que quiere; la he traido para que su madre la vea y participe, ven, por aquí—Lucius abrió la puerta de una habitación y cortésmente la dejó pasar primero.
—¿Y le haríamos una fiesta para dárselo previament…?— Marie no terminó de hablar, sintió un pinchazo en el cuello a sus espaldas y perdió la consciencia durante unos minutos. Al despertar, se vio atada en una silla de pies y manos, sentía quemazón en todas las zonas de su cuerpo, como si sus venas estuvieran hirviendo; Lucius estaba apoyado en una mesa con los brazos y los tobillos cruzados, contemplándola.
—Ah, hola otra vez, querida.
—¿Qué es esto? ¿qué me has hecho? ¿Dónde estoy?
— Sigues en la mansión Black preciosa, solo te he traído aquí para hablar.
—¿Y me tenias que atar y noquear para eso?
—Es que es una conversación difícil—se justificó con sorna— por eso te he inyectado veritaserum, no puedo perder el tiempo en mentiras y rodeos.
—¡¿Que me has inyectado veritaserum?!—repitió histérica—¡El veritaserum no se puede inyectar, eso licua la sangre por eso se administra bebido, podrías matarme!
—No si pasan menos de quince minutos, solo tendrás que responder bien a mis preguntas y te daré la poción que revierte los efectos. Si no…bueno, Narcissa tendrá una fiesta amarga cuando se entere de que su amiga bebió tanto que se cayó de un balcón y murió—Los ojos de Marie denotaron auténtico terror en ese momento, no parecía que la amenaza fuese vana, ni que no estuviera dispuesto a ello.—¿Entonces contestarás a mis preguntas querida?
—Sí….qué remedio—dijo contando mentalmente los segundos de los minutos que le restaban.
—Fantástico, empecemos con lo básico—dijo Lucius encendiendo un cigarrillo naranja—¿Eres la novia de Sirius Black?
—Sí….bueno ex novia…la verdad es que cortamos, pero hemos vuelto y…
—No me interesa, ¿eres verdaderamente amiga de Narcissa?
—Sí, la quiero de verdad, es casi como una hermana para mi.
—¿Eres sangre pura o mestiza?
—Pura….eso ha dicho Kreacher, le puedes preguntar
—¿Y has oído hablar algo sobre mi?, En tal caso ¿qué has oído?
—Que eres un imbécil arrogante y pretencioso, un machista narcisista que solo se quiere a sí mismo, que eres infiel a Narcissa y solo la utilizas como escaparate y para tener descendencia porque es lo único que te importa de ella, también dicen que eres mortífago y que matarías sin ningún tipo de remordimiento y que realizas la maldición imperius para influir en la gente que te interesa porque nadie te soporta siendo tú mismo y lo sabes.
—¿Eso lo ha dicho Cissy?—preguntó sin inmutarse soltando el humo.
—No, Cissy dice que te ama y que eres maravilloso, que eres un hombre de palabra y que siempre piensas en ella porque le mandas cartas de amor, regalos de tus viajes y joyas;—Marie quiso vengarse un poco y también dijo algo que no le gustaría escuchar, algo que era completamente verdad— y también dice que eres decente porque cuando tenéis sexo ella no siente nada y no grita como sí lo hago yo con Sirius.—Marie oyó una risa a su espalda, no estaban solos, había más gente pero no podía verles. Lucius se acercó a Marie y la asió del pelo con fuerza disfrutando de ver cómo le inspiraba miedo—tú has preguntado y no puedo tener filtros por culpa del veritaserum.
—¿Me tienes miedo querida?
—Sí…pero me da más miedo pensar si esto se lo harás a Narcissa cuando estéis casados si algo no te gusta.
—Un sentimiento muy noble, quizá demasiado. Lo cual me lleva a mi siguiente pregunta ¿eres Slytherin?
—Sí…
—¿Y por qué me han dicho que antes estabas en Gryffindor?
—Porque es cierto….
—¿Dónde te puso el sombrero seleccionador?
—El sombrero dijo que era un 50% de cada casa…fui una hallstall
—Un 50% Gryffindor es suficiente para darme asco y no quererte cerca; verás, Narcissa no ha invitado a más amigas a parte de a ti y eso me pareció extraño, me comentó que quería algo íntimo, únicamente la familia y los amigos más cercanos; quiso traer a su hermana Andrómeda y le dije que no, se lo tomó con entereza pero creo que en realidad no le sentó nada bien ¿me equivoco?—Marie respiró fuerte sabiendo que no tenía opción.
—No….volvió llorando a Hogwarts.
—¿Y aceptó mis preferencias sin más?
—No sé que responder a eso…ella solo lloraba porque no quería que la dejaras pero tampoco que su hermana se perdiera uno de los momentos más importantes de su vida.
—¿Y tú qué hiciste cuando te dijo eso?—la habitación quedó en silencio, Marie contuvo sus lágrimas.
—Le dije que yo lo arreglaría.
—Ooooh, que tierna—rio Lucius— no te voy a preguntar cómo fue, me lo estoy imaginando…—Marie oyó unos pasos tras ella—creo que conoces a Rabastan Lestrange ¿no es cierto?
—Sí…—respondió ella hilando los acontecimientos; Rabastan se acercó a ella a milímetros y sin que ella lo esperara, le dio una bofetada que hizo que se le saltaran las lágrimas.
—No llores mon amour, se te va a estropear el maquillaje— dijo Lucius acariciando la mejilla enrojecida de la joven—Rabastan se sorprendió mucho al verte a ti y a otra chica igual que tú; y me lo comunicó, le dije que Cissy me dijo que invitó a sus dos amigas gemelas peeero…resulta que según él, tú no tienes ninguna hermana…¿me equivoco?—Marie intentó contenerse, Lucius miró su reloj—Llevas siete minutos…como no contestes rápido me temo que no podrás hablar nunca más.
—¡No, no te equivocas!—contestó llorando.
—Es una poción multijugos ¿verdad?—Marie intentó patalear pero Lucius volvía a ganar.
—Sí….
—¿Quién está debajo de esa opción, querida?—Marie, sollozando, miró al suelo, mordiéndose el labio para no responder—Nueve minutooos— canturreó Lucius.
—Andrómeda—dijo con las lágrimas inundando sus mejillas.—Por favor no le hagas nada, no le digas nada a Cissy, déjalas en paz, todo fue culpa mía, yo convencí a todos de hacer esto, Narcissa no quería contrariarte pero estaba muy triste y no quería que no tuviera a su hermana en algo tan especial para ella, si vas a castigar a alguien castígame a mi, no a ellas.
—Vale—Lucius alzó los hombros con desdén y le lanzó a Marie un hechizo que aumentó la sensación de quemazón que el veritaserum producía en todas sus extremidades. Seguido de cuantas bofetadas quiso Rabastan. Finalmente, Lucius tomó su cuello con fuerza, dio una calada y soltó el humo sobre ella— Una última cosa, y te recomiendo que no te esfuerces en contenerte, porque ya han pasado trece minutos—hizo una pausa—tú has venido con ese despojo de Sirius, pero Andrómeda ha venido acompañada de Regulus ¿él lo sabía o le habéis engañado?
—Le hemos eng…—La joven Snape sintió mucho dolor en la lengua y en el resto del cuerpo, la poción era infalible—lo sabía….—Marie ya hiperventilaba de agotamiento, Lucius la soltó—por favor, fue todo mi culpa, déjale en paz….yo lo planeé todo, él solo quería que Cissy estuviera feliz…
—Te he concedido no hacer nada con Cissy y Andrómeda pero Regulus es otra historia, él es mi amigo y pagará muy caro el reírse de mi, créeme.
—¡No!, por favor él no pensaba reírse, solo quería ayudar a Narcissa!—Lucius se apartó de ella para que Rabastan le diese una fuerte bofetada que le dejó marcado el pómulo izquierdo.
— Cállate, tanta súplica me pone de mal humor, da gracias de que no expongo a la zorra de mi cuñada y rompo aquí mi compromiso para que a Narcissa la expulsen de la familia.—la miró con desprecio— Ah una cosa más…no sea que te mueras y me quede sin saberlo ¿Qué hay de Severus? Rabastan dice que sois muy amigos ¿Él sabía algo?
—No, él no sabía nada, le dejé a parte porque pensaba que te sería más fiel a ti que a mi—Marie empezó a sentir mucho dolor en el corazón y a toser—La poción….la…poc….—Lucius se arrodilló a su altura, la miraba impasible, sonriendo, disfrutando de su sufrimiento, el reloj de bolsillo del joven Malfoy estaba a unos segundos de marcar el cuarto de hora y cuando ya casi parecía que iba a desfallecer, le hizo tragar la poción; Lucius la desató e inevitablemente, Marie cayó sobre él. Él se apartó y la dejó tendida en el suelo. Él se levantó contemplándola desde arriba y le arrancó el collar que llevaba puesto.
—Me gusta, me lo quedo; en fin, quedas oficialmente desinvitada a nuestra boda, no quiero volver a verte cerca de Cissy, me pienso ocupar personalmente de que te odie y te aseguro, que si le dices algo de esto, pagarás las consecuencias. ¿Te queda claro querida?—Marie asintió todavía sin poder articular palabra.—Bien, vámonos Rabastan, tengo un vals que bailar, Regulus tiene mucho que explicar y esta zorra tardará un rato en poder moverse.—Lucius se marchó dejando a una muy debilitada Marie; pasado un tiempo oyó el piano con la melodía que ella debía tocar, suponiendo que ante su ausencia, Andrómeda habría tomado el relevo.
Por fin, cuando se pudo levantar, volvió sobre sus pasos y se dirigió al cuarto donde vio a Sirius entrar con sus padres, tenia que avisarles para que Regulus no sufriera por su culpa; al abrir la puerta vio a Sirius tirado en el suelo, similar a como hacia unos minutos estaba ella.
—Sirius...—Marie cerró la puerta y corrió como pudo hasta su novio, arrodillándose para levantarle.—¿Sirius estás bien? —este gimió un poco
—Ahora sí—el chico se incorporó con dificultad y apoyó la espalda en el lateral de una de las camas que había en la habitación—esta vez mi padre me ha dado más que nunca….ha mejorado sus hechizos de tortura no ilegal.
—¿Qué tu padre ha hecho qué?—preguntó escandalizada.
—Tranquila, no es nada que no haya pasado ya muchas veces, se cabrearon porque me negué a formar parte de la familia otra vez, discutimos muy fuerte, mi padre se hartó de mi "insolencia" y me lanzó un hechizo que prácticamente me electrocutó, ese es nuevo.
—¿Pero formar parte otra vez no era…algo bueno para ti?¿algo que querías?—preguntó sin entender.
—En apariencia, al principio hasta me ilusioné, me hablaron de ti, de que les encantas y que quieren que me case contigo porque me haces mucho bien, de que todo quedaría perdonado, de que si lo hacía intentarían que Regulus se case con Cassandra…—rio—pero por supuesto, me conozco sus trucos y no era todo tan bonito.
—¿Quieren que te cases conmigo?—preguntó disimulando sus deseos.
—Sí, y créeme si esa fuera su única condición, ahora mismo yo vestiría una túnica de gala y te pediría la mano, pero eso no era todo; en primer lugar, nos prohibirían a cualquiera de nosotros juntarnos con traidores ni "sangres sucias", o sea, Lily o James, o Remus o Peter o Marlene o Alice; tu deberías tener un hijo como máximo un año después de nuestra boda e incluirían una cláusula, dados mis antecedentes, para ser ellos quienes eligieran la educación de ese niño y de todos los que pudiéramos tener, resevándose la potestad de quitárnoslos, si no cumplimos. Querrían llevarlos a Durmstrang, colegio que educa a magos oscuros por excelencia y, les obligarían a aprender artes oscuras por "los intereses de la familia". Eso, por supuesto, si tuviéramos hijos, ya que si no fuera así, o yo muriese antes de concebirlos, harían que me repudiaras o ignorarían tu luto para obligarte a casarte con mi hermano, o, en su defecto, con Rabastan Lestrange.
—Sobre mi cadáver…—negó Marie.
—Esas mismas palabras empleé yo, luego me chantajearon con la felicidad de mi hermano, luego me amenazaron con que conseguirían que me odiaras y le amaras a él y te casaras con él porque eres una perfecta futura señora Black; así que les dije que si te pedía matrimonio sería en solitario y sin ellos detrás y que quizá me pondría yo tu apellido. Entonces me castigaron como solo ellos saben, estaba claro que me iba a ganar una paliza pero no pude resistirme a soltarles eso.
—Oh Sirius—Marie le abrazó— Te quiero— él le devolvió el abrazo y a ella se le saltaron las lágrimas al sentirse segura envuelta en él. Él fue a besarla hasta que reparó en su preocupante aspecto.
—¿Marie qué te ha pasado?¿Has llorado?¿Por qué tienes la cara marcada? ¿Y tu collar? —Marie notó como las lágrimas se agolpaban en sus ojos y como, a pesar de querer evitarlo, iba a decir la verdad, el veritaserum aún seguía haciendo algo de efecto, muy leve, pero lo suficiente para no poder mentir.
—Me han pillado, Malfoy… me engañó para acompañarle a preparar un regalo especial para Narcissa y…entré en una sala…y…. me quedé inconsciente, cuando desperté estaba atada y me habían inyectado vertiaserum, me hicieron preguntas y….obviamente no les gustaron mis respuestas.
—¡¿Qué?!—se enfadó Sirius —Marie ¿Alguien ha osado tocarte?
—Solo Rabastan Lestrange para pegarme, y Lucius me hizo un hechizo horrible que me dolió muchísimo, no era una maldición imperdonable pero fue…indescriptible.
—Los mato, yo los mato—dijo Sirius levantándose con dificultad—así me metan en azkaban pagarán por haberte hecho daño.
—No, Sirius espera…—pidió ella volviendo a sentarle— como Lucius supo que Andrómeda era la otra yo, le pedí que la dejara en paz, que no le hiciera nada, ni a ella ni a Cissy, y le dije que me castigara a mi en su lugar, él aceptó pero después preguntó por Regulus—lloró— intenté mentir, de verdad que sí pero….la poción me obligó, dicen que se lo van a hacer pagar, por favor, avisa a Regulus y protégelo, creo que son mortífagos de verdad, le dije a Malfoy lo que había escuchado de él, le dije todo, incluido que era un mortifago sediento de sangre que hacia maldiciones imperdonables para conseguir sus objetivos, y ni siquiera se inmutó. Por favor no dejes que le hagan nada a Regulus por mi culpa.— Sirius tomó la cara de Marie entre sus manos y la besó largamente hasta que sus lágrimas se calmaron.
—Escúchame, no ha sido culpa tuya, todos los que nos metimos en esto, lo hicimos con pleno conocimiento de los riesgos, quizá quien menos consciente era de lo que podía pasar eras tú, pero tanto Andie, como Regulus, como yo, e incluso Cissy, conocemos como se las gasta ese anormal. No habíamos previsto que Rabastan estuviera aquí, pero deberíamos haberlo pensado, Bellatrix, mi otra prima, está casada con su hermano y al ser familia iba a estar invitado.—juntó su frente con la de ella— voy a avisar a Regulus, tú quédate aquí, cierra por dentro y recupérate, en cuanto pueda te saco de aquí.
—Vale— aceptó Marie. Sirius bajó al salón principal a buscar a su hermano, no estaba allí, fue a la sala del té pero tampoco lo encontró, en los lavabos tampoco había rastro y se asustó cuando no lo vio en la concina ni conversando con sus padres. Sirius finalmente optó por ordenarle a Kreacher que lo encontrara y lo llevase a la antigua habitación de Andrómeda, donde estaba Marie resguardada.—Oh dios mio Regulus— se asustó la joven Snape.
—No te preocupes, he pasado por cosas peores—dijo secándose la sangre de la boca e incorporándose con un brazo, pues el otro lo tenía dislocado.
—Lo siento, todo ha sido culpa mia, me inyectaron veritaserum y tuve que decirles la verdad, no me dejaron opción—se disculpó muy afectada.—Kreacher ¿puedes curarlo? —pidió angustiada.
—Puedo curar al amo Regulus, sin problema. El amo Regulus es amable y un orgullo para la noble casa de los Black—dijo el elfo comenzando a frotar el hombro del chico mientras salía un halo azul de sus ajadas manos.
—¿Qué te inyectaron veritaserum? Eso podría haberte matado—se asustó Regulus dejándose curar—Oh Merlín, a ti te han torturado ¿verdad?
—Solo un poco….y se supone que por ello no les harán nada ni a Andie ni a Cissy; creo que he cometido un error Regulus, Narcissa no puede casarse con ese monstruo ¿y si alguna vez la tortura porque tarda en darle hijos o porque le reclama llegar borracho a casa? Debería haberme callado y no haber montado todo esto.
—¿Crees que Cissy hubiera cancelado su compromiso porque su hermana no viniera? No querida,y de haberlo hecho le hubieran expulsado de la familia; sus padres consintieron que viniera, pero no consintieron que lo hiciera habiendo una prohibición de Lucius, eso hubiera sido imperdonable, de la misma forma que no le perdonarían pasar llorando o con mala cara la fiesta de hoy. La suerte o….desgracia que tiene Narcissa es que le ciega su amor por Lucius, créeme, más que he intentado yo que rompan no lo ha intentado nadie, y Lucius lo sabe, por eso me odia.
—Él ha dicho que eres su amigo.— Regulus rio
—Su amigo impuesto más bien, nuestras familias no aceptan que no estemos unidos, somos la juventud de los 28, así que fingimos que nos soportamos el uno al otro e incluso que nos caemos bien, pero nada más lejos de la realidad. Esto ha sido un castigo por ayudarte, nada más y no ha sido más grave porque les he convencido de que lo hacía porque quería llevarte a la cama.
—¿Perdón?—dijo sorprendida.
—Sí, obviamente no es cierto, pero Rabastan y Lucius no entienden el hacer algo desinteresadamente o por hacer feliz a alguien, y seguramente me hubieran mandado a San Mungo de saber la verdad, Así que les dije que te habías empeñado en esto y que persigo hacerte romper con mi hermano y que te acuestes conmigo. Objetivos egoístas son justificación para "romper la lealtad" pero claro, eso no significa que les guste.—Kreacher terminó de curar a su amo, y bajo la petición de que no dijera nada de lo que habia escuchado, Regulus le ordenó marchar; seguidamente hizo un hechizo sobre Marie para arreglarle el maquillaje y el pelo.— Ahora, nos toca salir de aquí con una sonrisa, no les des el gusto de creer que te han sometido, además si mi hermano se ha enterado de todo, querrá matarlos pero no saldremos de aquí pacíficamente si usamos sus métodos.
—Odio que tengas razón ¿pero quien te ha dicho que mi objetivo es salir de aquí pacíficamente?—intervino Sirius entrando al cuarto con Andrómeda.
—Marie ¿estás bien?—preguntó ella agachándose para examinarla.—Ese bruto te ha hecho una herida en la cara, deja que te la cure. Si me hubierais dicho que seguía en Hogwarts lo hubiéramos hecho distinto, ese debería haber terminado hace tres años.
—No, Regulus tiene razón, no pienso dejar que vean que pueden conmigo, bastante patética he sido suplicando que no os hicieran nada. Además hay algo con lo que no han contado, y es que Rabastan sigue dentro del colegio y yo soy mil veces mejor duelista que él.—se plantó Marie
—Suma eso a que pienso convertir su existencia en un infierno el resto del curso, de hecho si le cuento a Snape lo que ha hecho quizá me ayude.—dijo Sirius
—Creo que no has visto todo lo que Kreacher me ha tenido que curar, no pienso dejar las cosas así, yo también se la pienso devolver—añadió Regulus. Finalmente, todos aparentaron que nada había pasado, se quedaron hasta el final de la fiesta con plena intención de que todo el mundo les viera, se despidieron de Narcissa y Marie tuvo el atrevimiento de sonreir a Lucius cínicamente, cosa que este no esperaba, no obstante, para desgracia de su adversaria, tenía todo pensado para quitarse la amenaza de en medio sin apenas esfuerzo.
….
El autobús noctámbulo los dejó a las puertas del castillo, tal y como estaba previsto, Regulus caminó hacia el colegio, mas Marie detuvo a Sirius antes de avanzar.
—No quiero ir a Slytherin esta noche—declaró tomando su mano.
—Te puedo colar en Gryffindor, James tiene una cosa que te oculta de la vista de la señora gorda.
—Demasiadas preguntas que responder, prefiero hacerlo mañana.—Sirius sonrió y besó su mano entrelazada.
—Ven conmigo, conozco un sitio, te puedo desvelar que su fama la inventé yo junto con los chicos, así que no tienes nada que temer.—Sirius caminó con Marie hasta el sauce boxeador, lo inmovilizó y la condujo por el pasadizo hasta llegar a la casa de los gritos. Sirius limpió y rehabilitó con la varita la cama que habia ahí y le prestó su camisa a la joven Snape para que pudiera dormir más cómoda. Se tumbaron juntos bajo las mantas y se miraron a los ojos.
—Gracias por todo esta noche Sirius, no pensaba que fuera a salir tan mal…
—No te preocupes, ¿Qué es la vida sin un poco de riesgo eh?—Marie sonrió—¿te sigue doliendo el cuerpo por lo que te han hecho?—ella asintió—tenia que haberlos matado. No sé que hubiera pasado si te llegan a matar o a dejarte grave en el hospital, se librarían gracias a sus familias, pero es posible que yo acabara con ellos.
—No lo pienses más, lo que más me molesta de hecho, no es el dolor, es continuar con algo de efecto del veritaserum, no tengo filtros y eso no me gusta.—Sirius esgrimió una sonrisa maligna—Black ni se te ocurra
—¿Me sigues amando?—Marie rio
—Eres lo peor…—pasaron unos segundos—Sí, te sigo amando pero…
—¿Pero?—preguntó preocupado.
—Pero temo que la persona que has sido estas semanas desaparezca, me encanta como has sido, como volvías a ser el de antes, pero me da miedo que un dia dejes de quererme y….aparezca otra Pevensy en escena.—Sirius acarició su mejilla
—Marie, jamás habrá otra para mi que no seas tú, te amo más que a nada en el mundo, tenemos algo único…algo tan fuerte que…si estuviéramos en la más profunda oscuridad, te encontraría aunque tú fueras muda y yo sordo, te amaría en otros universos, con otras vidas, otros momentos y otro aspecto, hasta que la última estrella del cielo pereciera en el olvido.—Marie se acercó lento y lo besó dulcemente.
—¿Me amarás siempre?
—Siempre.—Susurró Sirius antes de caer ambos rendidos por el sueño.
